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“Institución que forma en Valores” A lo largo de los años, nuestro colegio se ha caracterizado tanto interna como externamente por su excelencia en la formación de valores, formando personas integras, serviciales y buenos ciudadanos. Los lasallistas nos caracterizamos no solo por el hecho de ser lasallistas, sino por lo que esto lleva consigo, el espíritu lasallista fundamentado en los valores de nuestra estrella y en la doctrina de nuestro santo fundador son los que hacen que podamos ser reconocidos, por lo que hacemos y más importante por lo que somos. Lo que más nos caracteriza es la unión, el servicio y la fe que cada uno posee frente a las adversidades de la vida, poniendo a prueba todos esos valores fundamentales que gracias al colegio y a la familia vamos fortaleciendo día a día, dándole gran importancia a hacer vida esos valores, a brindar cariño y servicio hacia los demás, porque el vivir para servir es una de los aspectos más hermosos que distingue al lasallista, el lasallista se diferencia por su espíritu, su liderazgo y por el amor y respeto que inspira al otro. Es un elemento fundamental en la vida Lasallista, el ambiente de fraternidad que

“Abre tus brazos al cambio, pero no dejes ir tus valores.”

Dalai Lama.

se vive dentro de la institución, donde en los momentos más difíciles, cuando un problema nos toma por sorpresa, se convierte en la oportunidad para unirnos más como comunidad y familia, es cuando el valor del servicio para apoyar al otro se hace realidad, respetándonos y queriéndonos como hermanos. Igualmente, se vuelve latente el valor de la fe con una profunda creencia en que todo va a salir bien si trabajamos juntos de la mano de Dios para lograrlo y a estos sentimientos se unen la justicia para hacer las cosas de la manera correcta y el compromiso de cada uno para salir adelante, engrandeciendo y haciendo palpable la vivencia de los valores lasallistas entre los miembros de esta gran familia; todo lo anterior con el objetivo de alcanzar una gran meta: luchar por salir adelante a pesar de las dificultades que se nos presenten, fortalecidos por los valores y principios que el colegio nos enseña para saber tomar las decisiones correctas.

En homenaje al docente Adrián de Jesús Ríos Restrepo. Un educador en valores, una gran persona, un gran amigo, un lasallista de corazón, un gran compañero y una persona que inspiraba siempre felicidad y respeto, valores que quedarán en el corazón de cada uno.

Gracias al educador que nos formó en valores para nuestra vida. Muchas gracias Adrián.

Por: CAMILO TORRES ARROYAVE Respresentante de los Estudiantes

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04 Por: LINA MARCELA GRISALES LARA Jefe de área de Ciencias Naturales y Educación ambiental

Educación ambiental y formación en valores La educación en valores desempeña su rol principal al ser ésta un mecanismo que posibilita el cambio, un proceso que trasciende las aulas y que se convierte en una herramienta que facilita a los sujetos la convivencia para la transformación de la sociedad, no solo desde las relaciones interpersonales sino también desde su relación con el ambiente que lo rodea. Es en este sentido que la educación ambiental y la educación en valores deben ser consideradas como un conjunto de procesos que le permiten al individuo comprender las relaciones de interdependencia con su entorno, a partir del conocimiento reflexivo y crítico de su realidad

biofísica, social, política, económica y cultural, para que, a partir de la apropiación de la realidad concreta, se puedan generar en él y en su comunidad actitudes de valoración y respeto por el ambiente, de manera que se encuentre una identidad colectiva y el mejoramiento de nuestra calidad de vida. Ahora bien, esa educación ambiental y en valores deben transversalizar todas las áreas del conocimiento y deben ser asumidas con un enfoque integrado e interdisciplinar, de ahí que, dada la importancia que tienen, se hacen significativas en la formación de los sujetos porque abren una perspectiva importante a través del manejo de las disímiles variables de la


dinámica de la vida y logran colocar al individuo como un ser natural y a la vez como un ser social y es por ello que deben estar inmersas no solo a nivel educativo sino a nivel de la sociedad. Pensar en la educación en valores y el ambiente, nos hace concebir que una no deba estar sin la interacción con la otra, ya que por medio de ellas lograremos obtener un medio eficaz para conseguir reformas sociales. La idea de no desligar el ambiente de la educación en valores se convierte entonces en una estructura esencial cuyos efectos pueden ser convenientes para los cambios y las posibles soluciones a diversos problemas, como por ejemplo los ambientales. Es importante entonces que la educación en valores fomente el deseo de trabajar con y para la comunidad y que las acciones sean enfocadas para que los sujetos construyan nuevos conocimientos, destrezas

y valores en torno al ambiente y se favorezca la capacidad de construir un pensamiento frente a éste, desarrollándose la capacidad de trabajar de manera interdisciplinaria no solo desde el colegio, sino también desde el hogar. Apreciar nuestro ambiente y la educación en valores como soportes para llevar a cabo los procesos de cambio social nos ayudarán a pensar acertadamente mientras ejercemos como seres humanos la práctica de entender, de comunicarnos, de transformar, crear y soñar con un cambio y de reconocernos como objetos capaz de hacerlo, de manera que resistamos a los obstáculos que se hallan en medio de nuestra esperanza de cambiar y construir un mundo libre en el que vivamos mejor.

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Por: GABRIEL JAIME ARIAS SEPÚLVEDA Jefe de área de Ciencias Sociales

Valores para la vida

El reto de educar en valores, se ha convertido dentro de los últimos tiempos como uno de los factores más complejos a escala mundial. La educación en valores es sin duda alguna, uno de los mayores escenarios de cambio, que, desde una mirada positivista, se esfuerza por alcanzar objetivos de formación y consecución de ciudadanos capaces de transformar las realidades existentes. Los cambios del milenio que se han dado en diferentes esferas, especialmente en el ámbito económico, político, social y cultural representan un amplio conjunto de situaciones que hoy en día han determinado retos y necesidades al momento de educar. Desde esta perspectiva, es preciso indicar la preponderancia que juega la educación en valores de acuerdo con los fines y objetivos que debe tener; la formación adecuada que le permita al hombre vivir en sociedad, la búsqueda del conocimiento cada vez más objetivo y fundamentado, que le admita no solo conocer el problema, sino resolverlo y la necesidad de garantizar

toda expresión de humanidad, es decir, la amplia idea de una educación sin barreras ni limites, en donde el ejercicio pleno de los derechos humanos, sea un tema de practica real y no de simple expresión teórica. Partiendo de estas premisas, el colegio la Salle Envigado y el área de ciencias sociales, perciben que la educación, no debe convertirse en un estamento aislado de toda presentación de la realidad. Es en ella, en donde tiene lugar el orden y desarrollo del cambio, la formación en valores y la necesidad de aceptar al otro. De ahí que surge la necesidad de replantear los nuevos escenarios en donde la educación deberá ejercer su mayor rol. En este sentido, es necesario expresar que los desafíos de la educación deberán ajustarse a los grandes problemas que afectan la condición humana, y donde estas configuraciones respondan a extensas necesidades de transformar todo tipo de barreras humanas, como lo es la indiferencia, el egoísmo y la falta de respeto por el otro. Por lo tanto, el papel que debe y deberá ejercer la educación del colegio la Salle Envigado, tendrá que fundamentarse no solo


en preceptos, pensamientos u ideales, sino que habrá de constituirse como una de las mejores herramientas de socialización y de humanización, capaz formar sujetos en todo tipo de valores. Cabe resaltar que, si bien la educación ha de convertirse en un ejemplo a seguir de acuerdo con los parámetros de construcción de cambio, convendrá pasar por un profundo abanico de estructuras y desafíos que se relacionan en su diario quehacer. “Los desafíos más importantes es cómo formar a niños y jóvenes para anteponerse al futuro, porque el final del siglo XX y el comienzo de este nuevo siglo están asociados a tantos cambios, que estamos viendo y viviendo una nueva forma de construcción social y nuevas demandas a la condición humana” (Amar, 2000, pág. 76). En este orden de ideas,

el papel de la educación como escenario de transformación y desarrollo social asume un protagonismo pertinente y preciso de acuerdo con la necesidad de funcionar en aras del progreso y beneficio, tanto de generaciones existentes, como de las futuras. Para terminar, es preciso aclarar que, para efectos de trasformación social se necesita de una fuerte dosis de formación en valores. Por consiguiente, el trabajo de la educación se constituye como una tarea ardua, ya que esto implica el tomar posición frente a discusiones más desarrolladas que sin duda alguna complementan lo escrito. Entre estas podemos encontrar los retos de educar en función social y en valores, es decir, educar en beneficio de todos para la sana convivencia, la tolerancia, la participación y apropiación de una democracia justa y equitativa que contribuya al cambio y si es posible a un mundo mejor.

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Vivencias Lasallistas

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Un concurso que va más allá de ser un ganador Desde hace siete años, en nuestra institución se realiza el concurso de cálculo mental, donde todos los estudiantes tienen una participación activa desde que se desarrolla la primera fase en el aula de clase. Los educandos demuestran sus capacidades y habilidades mentales a la hora de resolver un ejercicio matemático, en un tiempo determinado. En esta primera etapa del concurso, no sólo se evidencian las capacidades de los estudiantes, sino que a su vez, se observa compañerismo y respeto por los estudiantes que continúan en dicho concurso, se siente el apoyo y la alegría de los alumnos que a pesar de que no pasan a la segunda fase, se sienten orgullosos de sus compañeros, motivándolos a ganar y a demostrar todo aquello que saben. En esta propuesta de área, no sólo participan aquellos estudiantes con agilidad mental, sino aquellos que tienen la capacidad de armar un rompecabezas muy famoso llamado Cubo de Rubik, el cual fue inventado por el escultor y profesor de arquitectura húngaro Erno Rubik en 1974, pero sólo hasta 1980 tuvo disponibilidad mundial. Han pasado ya más de 30 años y este es considerado el juguete más vendido del mundo, pero no todas las personas tienen la habilidad de armarlo, ya que este cuenta con un algoritmo matemático que lo hace único y especial ante quienes lo arman en un muy poco tiempo. Nuestros estudiantes tienen un récord que va desde los 35 segundos hasta los 2 minutos, ellos se apasionan por armarlo y cada vez lo quieren armar en menos tiempo. El concurso del armado del cubo de Rubik en nuestra institución, ha generado una sana competencia entre los alumnos, quienes se reúnen, los más cercanos, para ayudarse entre sí, para mirar quien lo arma más

rápido, para motivarse entre ellos mismos, pero de una manera adecuada; no quieren ser el mejor, ellos quieren participar, representar a su grupo y que sus maestros y demás compañeros los admiren, porque no es una tarea fácil armar este tipo de rompecabezas. Como área, se busca que el proyecto de cálculo mental y armado del cubo de Rubik, sea visto para los estudiantes como una manera de afianzar sus conocimientos, habilidades y capacidades ya sean mentales o motrices. Aunque sean sólo unos pocos los que llegan a la última fase del concurso, esta propuesta ayuda a motivar a todos los estudiantes para que participen y para que se animen a competir en los demás concursos que se lleven a cabo. Es importante expresar, que no sólo vemos matemáticas o rompecabezas en este recorrido, sino que también se evidencia una sana competencia entre los estudiantes y una serie de valores como el respeto, la tolerancia, la responsabilidad y el compromiso, que favorecen el desarrollo del evento, puesto que si los estudiantes no son comprometidos con el área y con la institución, no pueden desempeñar su mejor papel en la tercera fase, quizá la más importante porque aquí tienen la oportunidad de demostrar todas sus habilidades cognitivas frente a otros compañeros y frente al consejo directivo de la institución. Es una responsabilidad que los participantes sienten, de representar de la mejor manera a su grupo, pero ellos saben que tienen el apoyo de compañeros y maestros, quienes se sienten orgullosos, quienes los ayudan y los guían en este camino matemático, que así se evidencie durante un mes, los valores y el apoyo se viven en todo momento. Los estudiantes que llegan hasta aquí saben que ya ganaron con el solo hecho de representar a sus compañeros, para ellos ganar no es lo más importante, sino participar, experimentar una sana competencia y demostrar todo lo que ellos saben de matemáticas. Claro que los ganadores sienten una mayor alegría, pero saben que compitieron con grandes compañeros, donde cada uno tiene sus capacidades y por eso todos están allí, con ansias esperando más que un resultado final, una admiración y respeto por parte de quienes los observan.

Por: YENIFER MONTOYA GÓMEZ Jefe de área de Matemáticas

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12 Por: GLORIA ELENA LEDESMA HENAO Jefe de área de Lengua Castellana

El Lenguaje y la Educación en Valores “EDUCAR EN VALORES PARA LA VIDA” Es el lema que nos viene acompañando desde hace muchos años en nuestra institución “La Salle Envigado” y es por ello que el área de lengua castellana hace énfasis en cada uno de los valores que lo enmarcan y lo reconocen en la propia definición de Lenguaje como la facultad humana de intercambiar ideas y sentimientos a través de una lengua, por medio del habla. La Salle tiene bien claro que sin voluntad y sin inteligencia no hay valores. Llamamos, por tanto, valores a algo estimable, apreciable. Los valores son cualidades positivas de las cosas o de las personas. Según sean los valores que uno tiene así serán los proyectos de vida que haga. Los valores y la educación van íntimamente unidos. De ambos depende el ser y la calidad de vida que tengamos. Lo lamentable sería querer educar sin tener una escala de valores como referencia, sin tener una idea clara de la meta a la que deseamos conducir al estudiante o sin conocer el entorno y los “signos de los tiempos” que, con visión de futuro, nos está interpelando. Nuestra institución se fundamenta en

una filosofía humanista en la el hombre en todas sus dim humana, espiritual, cultural, s que se logra que el proceso de través de una buena convivenc Los valores cobran su importa hacemos vida su significado m día a día. Es por ello que en nu valores como:

LA FE: donde los estudiante de Dios en sus vidas; tienen co del evangelio y vivencian los cotidianidad. EL COMPROMISO: compar dones, habilidades y talentos, necesitados. EL SERVICIO: La entrega g espíritu de colaboración sin re LA JUSTICIA: Se asume la m proyección, con capacidad con los demás, con su entorn proyecto de vida. LA FRATERNIDAD: La rela son sus hermanos por natural Recordemos:


a cual se tiene en cuenta mensiones: Comunicativa, social, deportiva…con la e formación sea integral a cia. ancia en la medida en que mediante las acciones del uestro colegio practicamos

es interiorizan el mensaje onocimiento de la palabra s valores cristianos en su

“Todo es posible en la medida que TÚ creas que es posible”. Educar en valores significa entonces que por medio de nuestro idioma aprovechamos para motivar en la solidaridad, para participar con entusiasmo en cada actividad que nos permita crecer como personas. A la vez que se exhorta a usar un lenguaje siempre respetuoso con cada uno, pues somos conscientes que las diferencias y la violencia se inician con un insulto, con una palabra mal dicha... Es por ello que el adecuado manejo de cada palabra en la comunicación, en el diálogo, en todos los aspectos de la conversación hacen posible un lenguaje humanista y digno que corresponda a la formación en valores y donde hasta el silencio mismo permite valorar los distintos momentos vividos en cada instante de nuestra existencia, que tanto requiere la sociedad del siglo XXI.

rten con los demás sus , especialmente a los más

generosa a los demás en etribución alguna. misión como persona con de servicio, solidaridad no y consecuente con su

ación con los demás, que leza.

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14 Por: JORGE ARMANDO OLMOS BERRĂ?O Coordinador Sislenguas

Project: strengthening our values

La Salle Envigado promotes a learning approach that involves the dimension of being as a paramount element within the educational process. The strengthening of the human values present in our symbols and philosophy, and any other values that may be needed to help students become better human beings, is the target of our efforts. The learning process of a foreign language is not necessarily isolated from this approach. That is why here at Sislenguas in La Salle Envigado; teachers plan and carry out a learning proposal that encourages the development of the being in our learners, without leaving aside the cognitive dimension. Commitment, service, and fraternity are some of the values we attempt to involve in our English classes. The fact that we are currently working on short term class projects with our students, encourages collaborative team work, develops assertiveness when proposing ideas, promotes tolerance and respect for different points of views, increases responsibility, and makes students aware of the fact that they are part of a community where they are expected to contribute. All these elements together, make possible that students at La Salle Envigado learn in a significant way whilst doing, producing, and most importantly, having fun.


Por: JUAN BERNARDO VARGAS SIERRA Pbro.

Demos el primer pasó Ahora que nos preparamos para la visita del Santo Padre, el Papa Francisco, a nuestra Patria y en especial a Medellín; preguntémonos: ¿Cuál es ese primer pasó que estamos dando como Lasallistas? En nuestra vida de hogar, demos el primer pasó, mediante un diálogo fraterno y solidario, donde todos los miembros de la familia tengan el derecho a opinar y entablar una conversación amable y cortes, respetando las opiniones de los otros para que así la familia se constituya en una verdadera comunidad de amor y constructora de paz. En el Colegio: como alumno, docente, empleado o directivo, demos el primer paso respetándonos y ayudándonos para lograr hacer de nuestro colegio una institución educativa donde los valores de la estrella Lasallista se vivencien y se proyecten en bien de toda la vida social, cultural, deportiva y comunitaria; convirtiéndonos en hombres y mujeres comprometidos con la construcción de un mundo más justo, equitativo, con valores y en paz donde respetemos el medio ambiente, la pacha mama, la madre tierra que Dios nos dio para que la cuidáramos y nos sirviéramos de ella para nuestro bienestar y el de los demás. En nuestra vida religiosa, de Fe: demos el primer paso comprometiéndonos a respetar la profesión de fe del otro, entablando un diálogo ecuménico, lleno de amor y respeto por la diferencia, la cual en vez de desunirnos nos enriquezca y una como hijos de un mismo Dios. Demos el primer pasó a la paz, aceptándonos a notros mismos tal como somos, con debilidades y fortalezas, potencializando nuestras capacidades, aceptando a los demás, reconciliándonos con ellos mediante el perdón y acogida de cada uno mediante el servicio y la generosidad siendo capaces de morir en nosotros mismos al egoísmo, la envidia, el rencor y la sed de venganza; y así, convertirnos en hombres y mujeres reconciliados y reconciliadores que encuentren el rostro de Dios, misericordioso en los hermanos, en especial el más necesitado de ternura, comprensión, acogida, amor y perdón. Y dando este primer paso estaremos comprometidos con la transformación de nuestra patria Colombia que espera tanto de nosotros.

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