Las autoras y los autores de la vereda cruzan la calle by La Vereda

Los libros de La Vereda Las autoras y los autores de La Vereda cruzan la calle Contenidos: Participantes y docentes del jardín, de la juegoteca, de la biblioteca y del taller Arte y literatura para mujeres. Diseño: Pablo F. Pérez. Coordinación de la edición: Daniela Azulay Ilustraciones de interior del libro: Producciones de los participantes de los distintos espacios educativos Ilustraciones de tapa y contratapa: Creación colectiva, taller de escritores 2016 Escultura del caracol: Creación colectiva Jardín, Juegoteca y Biblioteca para la quema del muñeco 2016 Fotografías: Acervo de La Vereda Primera edición: julio 2016 ISBN en trámite

La Vereda Asociación Civil Coordinación General Jardín Maternal: Verónica García. Juegoteca: Viviana De Andreis Biblioteca y Publicaciones: Daniela Azulay Trabajo Social: Lucrecia Blanes. Docentes de Juegoteca: Andrea Segovia, Natalia Sol Bialogurski, Malena Ojea y Carolina Petrarca. Docentes de la Biblioteca: Daniela Goldín, Ivana Sosnik, Mara Rodríguez, Verónica Villa, Ailen Barbagallo, Julieta Kompel, Florencia Corpa, Marina Elorza y Leticia Lucía Castellaro. Docentes Jardín: Claudia Calzada, Alejandra Díaz, Karen Cappiella, Sol Agostini, Natalia Sol Bialogurski, Franco Videla. Docentes del Taller de Arte y Literatura: Leticia Castellaro, Marina Celis, Marina Elorza, Cecilia González Bellande, Lucrecia Blanes y Daniela Azulay. Docentes del Taller Historias en La Vereda: Rosario Dondo, Ivana Sosnik, Lucrecia Blanes y Daniela Azulay. Portería: Olga Caro Capacitaciones: Juego Corporal: Viviana De Andreis y Verónica García. Promoción de la lectura y la escritura: Daniela Azulay.

"Cuando esa no-palabra -la entrelĂnea- muerde el cebo, algo se ha escrito. Cuando se ha pescado la entrelĂnea, se puede con alivio tirar la palabra". Clarice Lispector, Agua viva.

Astrid Córdova Alcántara, 4 años 4

Prólogo

Leer en la vereda Por Istvansch

Yo cuando era chico jugaba en la vereda. Eso era allá en San Jorge, mi pueblo en Santa Fe, generalmente a la hora de la siesta, cuando no pasaba ningún auto (claro que a otras horas pasaba, a lo sumo, uno… o sea que jugar podía jugarse siempre en la vereda). La escondidas, la rayuela, el carnaval en verano, andar en bicicleta, coleccionar números de casas (sí, había un juego que era ir de casa en casa copiando en un cuadernito los números de las casas: Sarmiento 883, Sarmiento 899 –doblar por la esquina y seguir-, San Juan 1712, San Juan 1734… se trataba de copiar 5

todo tal y como aparecía en el cartelito de al lado del timbre, a veces las casa tenían nombre: Rivdavia 673 “Mi tesoro”). Juegos de a uno, de a dos o de a más, llevados a cabo con el amiguito que viene de visita o con los amigos vecinos de la cuadra. También era un juego sentarse a leer en el escalón de la puerta de entrada, con una buena pila de historietas y libros de cuentos, que despertaban las ganas de jugar a algo que estaba ahí, en la lectura, que se jugaba en el momento, claro, hasta que daban ganas de volver a la pila de historietas y libros, a sentarse de nuevo en el escalón y volver a zambullirse en una historia. Cuando fui más grande empecé a publicar mis propios libros, a escribirlos y dibujarlos, y a seguir el camino por el que me llevaban, que incluye editoriales, congresos, presentaciones, ferias, en donde uno se hace nuevos amigos que equivalen a aquellos del escalón y la vereda de mi casa. Son muchos y buenos amigos, como aquellos, todos entusiasmados en la lectura que, ahora, encima incluye mis propias publicaciones. Y el placer sigue siendo compartir la vida juntos, como si estuviéramos en la vereda. Uno de esos días descubrí un lugar que se llamaba 6

justo así, La Vereda. Me invitaron a compartir con chicos y docentes una actividad que habían hecho en torno a algo que yo había escrito y dibujado. Y de repente me encontré en casa. Porque descubrí que todas esas caras que me miraban eran amigas, que esa amistad había nacido en los libros, que no hacía falta siquiera conocerse para estar cerca, que habíamos logrado eso aún antes de conocernos personalmente. La magia de la lectura es así. Pero también era la magia de ese lugar, que llamándose La Vereda era como estar en la vereda, jugando a las escondidas, a la rayuela, a escribir de todo (pero de todo-de todo, desde direcciones hasta las propias historias) en un cuadernito mágico. Y llevarse puesta una pila de libros para leer sentaditos todos juntos, los altos y los bajitos, porque sabiendo que en la vereda todos somos iguales y todos podemos aprender de todos, sabemos que en “La vereda” vamos a encontrar eso: gente linda de todas las edades –pero siempre con la infancia a flor de piel–, buscando espacio para crecer en la lectura y el juego. ¡Y yo también, porque me invitaron!, a estar ahí, sea con mis libros o yendo de visita; y a estar acá, en este libro que sale de saber jugar con la palabra, la imagen y la lectura, juntos grandes y chicos, en la 7

calma de una vereda en la que la vida pasa mansa y feliz, dando la oportunidad de ser uno mismo, y compartirlo con los demás. Aprovechá, lector, y venite, sentate a nuestro lado, la pila de historias es infinita y empieza a la cuenta de 1, 2, 3 ¡ya!, ¡leamos en La Vereda!

Gael Torres González, 4 años 8

“La tinta verde crea jardines, selvas, prados, follajes donde cantan las letras, palabras que son árboles, frases que son verdes constelaciones.” Ocatvio Paz

El barrio de los

artistas lectores "Así

volaron Elli y su Bestia y aproximadamente once princesas, sino más, sobre su alfombra mágica por la ventana. ¿Adónde volamos?, preguntó Elli, y su Bestia le contestó que en un viaje alrededor del mundo eso no importa, lo principal es viajar." La Bestia de Elli, de Martin Karau

Yanina Castillo, 8 años

Antes de comenzar la travesía Conversación sobre lugares a los que puede viajar el Pato Peter Pan -Perú me dijeron que es muy lindo. -Se puede ir a China. -Si pero no va a entender nada. -Bueno, su amigo le puede traducir. 12

-Dudo que su amigo Coco sepa hablar chino. -Puede ir a cualquier lado, menos a Buenos Aires porque el patito ya lo conoce. -Alrededor del mundo. -Chicara es un pueblito en Perú donde no pasan muchos carros. -Puede ir a Chile o a las islas Malvinas. -¿Por qué no te vas a Estados Unidos Pato? Para comprar muchos juguetes, dicen que están los mejores juguetes del mundo. -¡Japón! -O el Mar Mediterráneo. -A Bolivia donde nació Simón Bolivar. -En Perú hay río, playa y mar. En Chicara hablan español pero un poquito distinto. Las montañas se ven muchísimo y hace muchísimo sol. Y hay un río. -O te podés ir a Italia donde nació la pizza. -O donde vive la familia de mi papá, en un pueblito que se llama Esperanza. -¡A Brasil! -No, Brasil no porque no se entiende nada el idioma! -¿Hay que entender los idiomas de todos los lugares a los que uno quiere viajar? -Sí, porque por ejemplo si vas a un restaurante y querés pedir albóndigas y no sabes cómo decirlo ¡te pueden traer cualquier cosa! -Yo quiero ir a Perú porque hay helado de sandía. 13

Luna Genes, 3 años

-¡No! ¡Hay helado de todo menos de sandía! ¡Hasta hay helado marciano! -¡¿Helado marciano?! -Sí, es como una bolsita congelada…

Obra colectiva de Camila Surichaqui, Santiago González, Yanina Castillo, Luna Genes, Catherine Genes Grupo de 3 a 8 años 14

Las aventuras de Peter Un día Peter, el pato, se aburría de tener un mono en su casa, entonces decidió viajar a la selva. En la selva también había monos y también se aburría. Hasta que encontró un amigo llamado León y otro amigo que se llamaba Caimán. El león estaba engañando a Peter porque se lo quería comer. Peter se fue corriendo al avión pero el avión ya se había ido a China. Entonces el pato se fue volando con un globo aerostático hasta China. Ahí se encontró a los dragones que le dieron un caramelo ácido para dragones. Los dragones se empezaron a reír pero Peter lloraba porque le picaba la panza. A los dragones esos caramelos les gustan porque son tan picantes que hacen que te salga fuego por la boca. Peter empezó a tirar fuego. Una señora panda le dio un jugo que tenía un polvillo mágico que te hacía volar muy alto, tan alto que llegó a Marruecos. Ahí se encontró con un perro, tenía pelo rubio y era muy bonito. Salieron a pasear por todo el mundo hasta llegar a Bolivia. Bailaron saya y makus y comieron alfajores con galletitas. Obra colectiva de Ludmila García, Dalma y Yanina Castillo Grupo de 3 a 8 años 15

Conversaciones 2

¿Por dónde podemos seguir viaje?, pregunta el pato Peter Pan frente al Atlas… Entonces los chicos comienzan a señalar… ¡A Perú, a Perú! ¡Al agua, me voy a ir a ver a los delfines, con una ballena! Vietnam, Laos, cerquita de donde estuvimos. ¿Qué historias se contarán allí?, ¿qué se comerá? El país más cerca de Estados Unidos es México, en una frontera. El país más cerca de Argentina es Chile y Perú. América del norte, ¡en la orillita! Vamos con los peces y las montañas… Volvemos a China a ver dragones. Alaska, ¡vamos a tener frío! Rusia, ¡también hace mucho frío! Inglaterra, Escocia… ¿Qué país será este que esta todo pintado de rosa? El mundo rosa, un mundo sólo de chicas… Qué bonito lugar, la selva de Brasil, el Amazonas. Ya fuimos ahí, había muchos animales salvajes y un montón de plantas. La Antártida, hay pingüinos y osos polares, hace mucho frío.

Catherine Genes, 4 años

Sudáfrica, hay mucho sol, muchos animales. ¿Podemos ir?, ¡Si! ¿Y si un animal nos mata?, ya estamos preparados. Marruecos, el desierto ¿existe el desierto? Hay camellos. Está cerca de la vuelta. Nueva Zelanda, hacen muchos deportes extremos

Obra colectiva Taller de Artistas Lectores Grupo de 3 a 8 años 17

Un mundo extraordinariamente genial

Hace mucho tiempo existía un país llamado Francia, era gris. Allí había una nena que estaba aburrida y no tenía con quien jugar. Quería jugar con la mamá pero la mamá no tenía tiempo para ella. El papá tenía que hacer cosas con la compu y no tenía tiempo. La hermana estaba tomando un té y hablando por teléfono y no le prestaba atención. María Lila Gisela estaba triste en su cuarto hasta que vio un crayón mágico y le dieron ganas de dibujar. Dibujó una puerta mágica, así podía entrar en otra dimensión. Entró a un mundo extraordinariamente genial con muchas luces azules. Después decidió dibujar un bote para explorar el río. Y llegó a una ciudad mágica muy grande: “El pueblo amigable”, donde todos eran amigos y la saludaban. La nena descubrió que podía recorrer la ciudad en bote, de repente apareció una catarata. Se le ocurrió dibujar un círculo grande que se convirtió en globo aerostático. Mientras viajaba vio a un señor que también viajaba en globo y estaba por dispararles a tres chicos. Luego llegó un bote de salvación y la niña aterrizó en él para investigar. Vio desde allí que había dos guardias que vigilaban al pájaro rosa. La niña salió corriendo con el pájaro rosa perseguida por los guardias. Ella quería

Catherine Genes, 4 años

que el pájaro sea libre. Los guardias la atraparon y la pusieron en una jaula. Entonces apareció el pájaro con el lápiz mágico y se lo dio… Obra colectiva de Ariana, Emilse Luna, Mayra Salirrosas, Agustina Pino Grupo de 3 a 8 años 19

Historias de la Isla Roja La isla de la flor roja Nos gusta la gelatina y la manzana y todas cosas rojas. Nos pintamos la cara de rojo y siempre usamos pañuelos rojos. Nosotros festejamos el día de la isla con globos que se van al cielo y cuando los llamamos regresan. Caperucita nació en la isla y hay que tener mucho cuidado con el lobo que se pintó de rojo y se camufla. Obra colectiva Taller de Artistas Escritores Grupo de 3 a 8 años

Preguntas y respuestas en la Isla Roja ¿De qué color es su ropa? Roja ¿Tienen animales? Sí. Ratones, el jabalí rojo, el caballo rojo. ¿De qué color son sus zapatos? Rojos. ¿Cuál es el baile de su país? Gira el fideo rojo, la salsa roja, corazón rojo. Nuestros apellidos son siempre rojo. Obra colectiva Taller de Artistas Lectores Grupo de 3 a 8 años 20

Ariana de los Angeles Aguilar, 8 aĂąos

¡Que aburrido! Que tu mamá te acueste en la cama. ¡Que aburrido! Comer vegetales. ¡Que aburrido! Cambiarle el pañal a tu hermanito. ¡Que aburrido! Aguantar que tu hermano llore. ¡Que aburrido! Ver la tele. ¡Que aburrido! Lavar toda la ropa. ¡Que aburrido! Obra colectiva de Emilse Luna, Mayra Salirrosas y Ariana, Grupo de 3 a 8 años

Meterse en el mar, lavarse los pies y al salir ensuciarse con arena, otra vez. ÂĄQue aburrido! Mijael, 7 aĂąos

Rimas El techo es estrecho. La casa es como una masa. La osa es perezosa. La ballena estĂĄ llena. El mosquito es chiquito. El auto le pertenece a un gato. Emilse Luna

Agustina Pino, 8 años

Brasil Historia de exploradores Había una vez una exploradora que era payasa y se llamaba Jazzy. Le estaba por sacar una foto a un ocelote y empezó a cantar “estamos en la selva ¡oh, oh, oh!” Había muchos animales y árboles. En la noche alumbraba con una linterna y estaba viendo si había animales. Vio a su animal preferido, el ocelote. Con sus binoculares veía rinocerontes y leones. Un león la rasguño y se la comió. 24

Catherine Genes, 4 años

Con un cuchillo hizo “ua” y salió de adentro y se puso a bailar el baile del mosquito. Tenía mucho hambre y se cocinó arroz con pollo. Empezó a sonar la brújula y les señaló donde ir, el lugar era: Perú de la selva, ¡ohh es lejísimos! Allí buscaba animales y vio un tigre. Después se fue a explorar otra vez pero a otro país. Se fue a China a explorar otros animales. Se parecen a los animales de la selva pero los ojos son chinos y hacen “cha” con las manos pegadas adelante. Los monos, los elefantes hablan en idioma animal chino. Obra colectiva Taller de Artistas Lectores Grupo de 3 a 8 años 25

Qué cosas llevar a una expedición a la selva Lupa Linterna Sombrero de explorador para cubrirse del sol Cámara de fotos para tomar fotos de animales Binoculares para ver dónde están los animales Bolsa de dormir Cuchillo para matar animales y pelar manzanas Carpa Mapa Brújula, nos dice dónde tenemos que ir Bruja para hechizar a los animales Cantimplora, botella para agua Piloto Zapatos de explorador Botas para la lluvia Mochila Una libreta Una lapicera Un libro para leer Obra colectiva Taller de Artistas Lectores Grupo de 3 a 8 años 26

Agustina Pino, 8 aĂąos

28 Yanina Castillo, 8 aĂąos

Ariana de los Angeles Aguilar Vargas, 8 años

Un ritual en la selva para pedir… Flores, amor, árbol, paz, eso, elefante, cocodrilo, dormir, comer una rica calabaza, silencio, almohadas, una cama de hojas, carpas… Y la palabra inventada: chucha-chucherifachuchachito Obra colectiva Taller de Artistas Lectores Grupo de 3 a 8 años 29

CHINA Dragones Dragón: Guitarra Tambora Vive en una cueva. Vuela sin alas. Come personas. Lee libros de personas muertas. Arranca los pelos de las personas para ponerlos en su guitarra. Ludmila García, 8 años

Ludmila García, 8 años

Dalma francisca Viana, 8 años

Me llamo Dragón Vivo en la tierra de los dragones, en un castillo. Tengo los poderes de Peter Pan. Vuelo y me dicen Bacalao. Tengo una fuerza que vence a todos. Como comida de dragones y partes del cuerpo humano. No tengo secretos. Thiago García, 5 años 31

Mayra Salirrosas, 7 años

Rosa dragón Vive en la casa dragón rosa. Sus poderes son juego rosa. Le gusta comer huevo. Lee libros rosa dragón. Su secreto es que es un huevo. El rosa dragón es un secreto. Magdalena Fuentes, 4 años 32

Recetas de comidas chinas Un platillo especial I (Japón, Afayusch, Salchichi, Sareyuyu) Ingredientes: Tenedor, chalchicha, palitos, pollo frito, cuchillos, moños, estrellas, salchichas, barbas de dragón, tallarines voladores y saltadores. Un platillo especial II (Plato chino) Ingredientes: Goma de pegar, papeles blancos, violeta y naranja, vegetales, pinturas, fideos, fideítos, carne, milanesa, arroz, azul, empanadas, rojo, violeta oscuro, arena y amarillo. Obra colectiva Taller de Artistas Lectores Grupo de 3 a 8 años 33

Luna Genes, 3 años

MARRUECOS ¡Vuelo por arriba del mar en mi alfombra mágica! Yo me voy a la China. Yo a Argentina. Yo a la selva. Y yo a Japón. Obra colectiva Taller de Artistas Lectores Grupo de 3 a 8 años 34

Deseos para la lámpara mágica Deseo ser un Kirbi con una varita y que su mascota sea una estrella con corona Dalma francisca Viana, 8 años

Deseo vivir en una casa grande y ser millonaria y tener un perro y una bicicleta y ser popular y que todos gusten de mí Ludmila García, 8 años

Deseo un tren Gael Torres González, 4 años

Desea una esfera de dragón y un muñeco de Goku Aron Julio Fuentes, 6 años 35

Desea un caballo que sea como un unicornio. Yamila Fernández Yanapa, 3 años

Desea un corazón Magdalena Fuentes, 4 años

Aron Julio Fuentes, 7 años 36

Hechiceros A Aladino se le cumplió su deseo, pudo ir a la escuela de hechicería. Se encontró con Harry Potter, se hicieron amigos y cada uno tenía su libro de hechizos. Hay muchos hechizos: -Hechizo para convertir un sapo en una manzana verde: ¡Convertirus sapitus en manzanus verdus! -Hechizo para que lluevan sapos: ¡Cayerum sapinhos del cielus! -Hechizo para que caigan salchichas del cielo: ¡Salchichus cayerum del cielus! -Hechizo para convertir un ratón en músico. -Hechizo para convertir el sol en la luna. -Hechizo para que un pedo se transforme en una flor. -Hechizo para que un avión se transforme en un óvalo. -Hechizo para arreglar el libro de hechicería que se rompió: ¡arreglus librus ya! Un día, estaban practicando hacer hechizos y empezaron a caer salchichas y sapos del cielo. A las salchichas se las comieron, a los sapos los llevaron al lago. También convirtieron sapos en manzanas. Se comieron las manzanas pero tenían gusto a sapo y las escupieron, ¡estaban muy feas! Aladino y Harry Potter se hicieron tan amigos haciendo hechizos que fueron a comer un helado de frutilla y dulce de leche. 37

Mientras comían se convirtieron en sapos. Había sido la hechicera malvada. Para volver a convertirse en personas tenían que comer una manzana roja. Para conseguirla tenían que llegar a un bosque quedaba muy lejos, tenían que atravesar montañas, lagos y ríos para llegar. Después de cinco años consiguieron la manzana. Cuando la comieron se convirtieron en personas y tuvieron treinta años. Obra colectiva de Yanina Castillo, Catherine Genes, Luna Genes, Ariana, Emilse Luna. Grupo de 3 a 8 años

Bahiano Bordonaro, 4 años

Magdalena Fuentes, 5 aĂąos

La casa embrujada Había una vez una noche que había personas durmiendo en su cuarto y vinieron fantasmas. La puerta estaba abierta y entraron a matar a todos. Agarraron un cuchillo y encontraron primero a a tía. El fantasma a mató y se murió (cuando una mujer se muere se le desordena el pelo). Sus hijos sobrevivieron y se escaparon en el auto de papá. Los fantasmas se quedaron a vivir ahí y taparon as ventanas. La casa se llamó: La casa embrujada Dragón convertido que usó un poder para convertirse en dragón. Tiene ojos púrpuras porque es un dragón que viene de otro planeta llamado Endelmán. Este es el dragón Endelmán. Joaquín Costa, 7 años

historias con animales Michi Había una vez un gatito que abrió la puerta de su casa y se fue a comprar pescado. Luego vino alguien que se llamaba Santi y se robó un libro de gatitos que comían pescado, la tele del gatito y en esa tele estaban dando un dibujito de un gatito que tomaba leche. Al regresar de comprar, el gatito vio que se robaron sus cosas, rápidamente busco a Santi y cuándo lo encontró llamó a la policía quien arresto a Santi y lo llevó a prisión. Joaquín Costa, 7 años

Había una vez una caca de color marrón, y tenía olor a pis. Y se murió porque se comió un popo. Un popo es un popo. Se murió y se tomó un vino. Se está muriendo en Tucumán. Una vez un monstruo estaba escondido en el agua y después colorín colorado y caca. Bahiano Bordonaro, 4 años 41

Mayra Salirrosas, 8 aĂąos

Historia de la gata Susan La gata Susan es una gata callejera. Le gusta comer pescado y lo saca de la basura. Es una gata que le gusta mucho salir de noche y disfruta de la luna llena porque brilla y es muy linda. Le gusta ir de paseo y una vez se encontrĂł un novio, se enamoraron y fueron juntos a pasear al abasto. Mayra Salirrosas, 7 aĂąos

Alessandro Peña Linares, 7 años

Nico tratando de escapar Había una vez un pajarito que se llamaba Nico y se cayó en el bosque. Tratando de encontrar a su familia se encontró un lobo y el lobo quería comer a Nico y de camino se encontró con un oso. Entonces ahora lo perseguían un lobo y uno oso y un conejo. Porque Nico se había encontrado un conejo que estaba comiendo una zanahoria y Nico tenía hambre y quería quitarle la comida y entonces también lo persiguió. Hasta que Nico voló y se encontró con su familia. Alessandro Peña Linares, 7 años 43

El barrio del

taller de escritores "Un día, me dio por transformar cosas pequeñas; transformaba un dolor en coma; convertía un alivio en signo de exclamación; transformaba una esperanza en interrogación. Me gustó. Me sentí medio hechicera." Lygia Bojunga Nunes

La suerte está echada: historias en dados

1. Elefante, jirafa, los mundos, un poco de árboles, unos alienígenas yendo con sus ovnis. Yo estaba escribiendo, dibujando, todos los días a esos ovnis. Fui a investigar con mi amigo Franco. Vi a los alienígenas de cera y les pregunté: -¿Quieren ser mis amigos? Y ellos dijeron: -Está prohibido hacernos amigos de un humano. Pensaron en traicionar la ley alienígena pero pasarían largo tiempo en la cárcel… Igual traicionaron la ley alienígena y jamás volvieron a su mundo. Vivieron en una casa abandonada, los humanos y los alienígenas y todos fueron felices por siempre. Martín Nicolás Araujo, 11 años 46

Ariel Uñates, 12 años

2. Un día vi una oveja debajo de un arcoíris. Tuve una idea, me puse a contar todas las ovejas que había hasta que se hizo de noche. Fui al pueblo y leí un cartel donde había un concurso de belleza de ovejas. El premio era una pirámide de oro. Fui corriendo a casa a buscar la oveja que había encontrado. Abrí el candado de la jaula donde estaba escondida. Pensó en cómo embellecer a la oveja pero no se me ocurrió nada. 47

Esperó a la noche ya que había leído un libro de brujos donde podías pedirle un deseo a cambio de venderle el alma a un demonio (ILUMINATTI). Pidió una varita mágica. Dos días después llegó el concurso el cual había ganado por hacer trampa. Ganó la pirámide, se compró un castillo y fue a vivir ahí. Al lado del castillo había una señora horripilante. Tenía garras que ocultaba con guantes, una nariz grande y puntiaguda y llevaba peluca rosa con una capa morada. Un día caminaba en la noche y encontró a la señora haciendo brujerías y la empezó a espiar. Ella se dio cuenta y se acercó. Se empezó a convertir en la bruja que era y después en el demonio al que le vendió el alma. De repente empezó a hablar con palabras raras y lo convirtió en oveja. Lo último que escuchó fue: “no debes hacer pactos con demonios”. Tina Porras Caro, Paula Gerbarlo, Alejandro Castillo y Valentina Porras Caro Grupo de 9 a 13 años 48

3. Una historia sin sentido Salí de mi casa triste. Me comí una manzana. Después me fui al teatro y era una obra sobre extraterrestres. Levanté mi mano y conté hasta diez. Entonces, de repente me puse feliz y en la obra vimos un pez. Entonces en la "vida real" pasó una estrella fugaz, y deseé que me llegara un caramelo. Luego supe que el acto no tenía sentido. Dije: "¡Oh, no! ¡Gasté 100 US$ en una obra que no tiene sentido!" Al final, los marcianos desearon que el gran dios de Marte tirara una estrella fugaz, y la obra llegó a su fin. Cuando salí del teatro me cayó un caramelo en el ojo. (Creación colectiva a partir del juego “Story cubes”)

Coplas de primavera Los doctores eran siempre unos malditos traidores comiendo ricas chuletas como diversos castores. Con muchos mapas de Salta llaman a los editores y con mucha chiripiorca les piden muchos favores. Ariel Uñates, 11 años

Me cantaste una canción era tan de primavera que me gustó y me acordé de cómo eras de fiestera. Ayer pasé por tu casa me tiraste una flor de tantas que me tiraste voy a armar tu corazón.

Cuando voy a comprar algo me acuerdo del membrillo y por dentro tiene un hermoso brillo. La cara del señor Melo es una hermosa cabeza que hace que la pierdan muchas de las bellezas.

Valentina Porras Caro, Tina Porras Caro, Debora Montes Giraldo Grupo de 9 a 13 años

Valeria Chero, 10 años

Ayer vi un arcoíris Con un hermoso esplendor tanto me gustó que grité y me acordé del amor.

En muchas cosas estoy pensando, tengo que hacer una más y la voy coloreando. Estaba caminando por el sendero de la escuela hasta que me crucé con una pelirroja hoja. Valentino Linares, 10 años

Angel

Cuartetos

El pueblo está tranquilo y la ciudad está muy vieja y sopla el sombrero que viaja por el mundo entero explora todo lo que es verdad. Ilia Li Zapata, 11 años y Kevin Genes, 10 años

Ilia Li Zpata, 11 años

Ayer yo estaba sentada en la esquina aquí siempre se anda en bicicleta necesito una vieja marioneta finalmente comíamos mandarina. Priscila García, 12 años

56 Valentino Linares, 10 aĂąos

Tú estás vestida, él está vestido tú tienes pero él no tiene sombrero tú estás pero él no está entero no te arrepientes, él está arrepentido. Ariel Uñates, 12 años

Mis amigos pisan en sucio suelo odio los feos, putos sombreros yo como el chocolate mis amigos viven en mi pueblo. Tina Porras Caro, 13 años

Haikus Yo me fui a la montaña, el monstruo de la noche apareció y me comió. Da mucho miedo, el monstruo de la noche en la montaña. Voy hasta el fin del mundo hay una torre llena de agua. Kevin Genes, 10 años

Alejandro Castillo, 10 aĂąos

Al vagabundo volviendo volviendo Ya es primavera sobre los pollos dormidos. Valentina Porras Caro, 10 aĂąos

Un escudo de Capitán América de fuerte hierro. Roberto Correa Mejia, 10 años

Caen hojas amarillas o qué apura a esas ocas en los árboles. Yo nado en la playa y de a poquito me ahogo. Caen hojas rojas en otoño, camino con mi familia. Alejandro Castillo, 10 años

Ariel Uñates, 11 años

Objetos

1. Cucharón Es de metal tiene un mango de madera sirve para servir y tomar sopita sirve para servir fideos chinos. Los chefs usan los cucharones para probar la sopa si está rica o fea.

2. Hola, soy el señor guante sirvo para limpiar y que las manos adentro mío no se mojen.

3. El broche Sirvo para colgar ropa, acolchados, sábanas remeras etcétera. Me gusta estar colgado con mis otros amigos. Ariel Uñates, 11 años

Martín Nicolás Araujo, 11 años

Colchón, colchón, colchón eres tan suave que tus plumas son alas de los dioses que dejaron caer sus plumas y tu algodón son nubes donde duerme Jesús. Tu tela está hecha de la lana de la oveja y de la cabra bebé que fueron muy bien cuidadas.

Anteojos son muy negros, sirven para ver mejor cuando necesitas ver algo desde China hasta Argentina. Son como lentes de rayos X sĂłlo que sin poder.

Pecera Tuve 29 peces a casi todos los llamĂŠ como a mis amigos. Como si yo fuera un pez y todos mis amigos los otros 25 peces mĂĄs mis tres profes. En total 28 peces.

Paraguas

1. En el paraguas hay una cuchara comiendo una manzana. Las bananas y las naranjas sobrevivieron a la prensa. La manzana la comieron tanto que se volviรณ blanca un gusano estaba escondido en una estatua y empezรณ el agua corriรณ a esconderse en la manzana la banana, manzana y naranja.

2. Portátil paraguas que cubre la cabeza hecho de metal y tela sirve para cubrirme para que no me caiga el agua de la lluvia Sirve como cuchara gigante como olla para la sopa, o comida pon pon pon pon pon pon pon pon pon

Martín Nicolás Araujo, 11 años

¿Es verdad que una jaula arreste a una cuchara y la cuchara no escuchara? “Tttttiiiiiiccccc”, responde la cuchara cuando recién escucha.

La jaula 1. Pajaritos, loros, la jaula se utiliza como hogar para las aves.

2. ¿Prisión? La jaula se aburre porque está abierta y no puede arrestarla a la cuchara. Tina Porras Caro, 13 años

Valentina Porras Caro, 10 aĂąos 69

Las galletitas biscuit a mí me saben a vinagre y me huelen a Poxipol y a Unipox y me explota el olor en la cara como un creeper. Las milanesas saben a pollo y a carne. La sopa es riquísima y sabe a vegetales. Volvemos con las biscuits: tienen color madera. Nunca, y en serio nunca, y en serio nunca de los nuncas las pruebes con chocolatada. ¿Te cuento por qué? Porque yo un día estaba en el balcón de mi casa y las estaba probando juntas y cuando probé la biscuit mojada me supo tan horroroso que la tiré junto con la taza de la chocolatada. La taza era de vidrio y le cayó a una persona en la cabeza y la biscuit raramente se le cayó en la mano y se la comió. 70

El gato Gato, gato, gatito Sos muy chiquito Con tus ojos celestitos. Entrás en la palma de un bebe recién nacido No hay ropa para tu talle Te cubres con tu pelaje negro Tu collar Y dentro del collar Tu placa Estás extraviado’ Pero siempre tenés amo. Siempre estás en la casa de alguien O tus parientes Tus abuelos, tus tatarabuelos, tus padres Que te han abandonado En un mercado En una cajita Y nunca pudiste gozar de tu libertad. Piensas gatito Que tus padres eran malos Pero no, tus padres también, Estaban abandonados En la caja En la que todos te han dicho que has nacido. Valentino Linares, 10 años 71

El elefante Elefante grande Elefante chiquito Elefante mediano Elefante feto y microorganismo Elefante gemelo Elefante primo Elefante abuelo ¡Hay tantas clases de elefantes! ¡Esperen, me olvidé de uno! El chiquito de colores, Que succiona el mensaje una vez que lo lees. Seguro no te das cuenta Porque siempre lo ves Pero el libro no lo encontrarás Otra vez. Valentino Linares, 10 años

Tina Porras Caro, 13 aĂąos

I Es de madera Y tiene velas. Con este barco se puede ir por el mundo. Y en este barco estĂĄn los piratas.

II Es de hierro. Esta campana pertenece a las escuelas y a otros lugares.

III Las campanas suenan y avisan cuando es hora de ir al comedor y tambiĂŠn para el recreo y si pasa algo. Valentina Porras Caro 10 aĂąos

Illia Li Zapata, 11 aĂąos 75

Poemas con sentido

I Eran muy frágiles, tenían semillitas, parecía cacao.

II Sentí dos sensaciones Una olía a alcohol la otra lo supe de inmediato, era ajo. Antes del ajo pensé en limón agrio. Después sentí que era pan podrido. 76

Priscila García, 12 años

III Parecía que me callaban, una sensación agria en la boca pochoclos en la olla Plo, ploc, ploc. Campanillas como en la iglesia una boda en la mesa francesa.

IV Una estrella de mar en un coral se siente cansada de un día de mar. 77

V Pasar un día de mar es difícil ¿saben? El mar es enorme hay muchas casas muchos peces Él se siente sólo No tiene “hijos” ni “esposa”. Es difícil encontrar una esposa estrella porque para el autor ya se extinguieron. Es difícil saber cuándo un animal marino se extingue. Ahora no es tan difícil, todo lo pasan en las noticias.

Valeria Chero, 10 años

VI Esta experiencia me hizo demasiado bien tenía un día demasiado amargo en la escuela y la dulzura de la gomita era como el azúcar en el café Como así decirlo un sabor naranja mi debilidad. Valentino Linares, 10 años

I Cuando lo toqué sentí algo suave y me parecía que era algodón o lana. Supe que era algodón y sentí que estaba en las nubes. Sentí escalofrío en el cuello y en la oreja Y escuchaba maracas y campanillas… como la campana que suena en la escuela para el recreo. Maracas, como en el cumpleaños de Valeria.

II Una escafandra agarrando a un pulpo Y el pulpo quiere huir.

III Es muy rico, quiero más, es chocolate y una gomita.

IV Gomita Me recuerda a cuando fui al Abasto, estábamos sacando dulce y nos tocó un paquetito de gomitas y nos peleamos.

Martín Nicolás Araujo, 11 años

V Chocolate Me recuerda a mi máma, Siempre que le digo que me compre un chocolate me compra al día siguiente. Tina Porras Caro, 13 años

I Cuando toqué la cosa esa con bolitas sentí algo pegajoso que quería entrar a mi cuerpo parecía como que hacía un huequito y entraba era como arroz, la mitad seco.

II Sentí que el ajo era tan ajo que me bajó a los ojos me hizo llorar

III Arde la nariz y mis venas de la nariz ya no están se fumigaron mis venas de la nariz como hormigas.

IV Es un tubo con tela, porque acá no hay mucho papel de Perú es legendario pfpfpf es el sonido que hace y el de las maracas era así: grpgrpgrp y después, una campana me recordó cuando toqué en el acto de 2°B Martín Nicolás Araujo, 11 años 82

I Sentí que era telgopor era pegajoso y eran bolitas, parecía como que estuviera en el cielo.

II Sentí que el primero era ajo y El segundo algodón, alcohol.

III El ajo, sentí que estaba comiendo ajo. El segundo, sentí que estaba herida.

IV Una abeja cerca de mi oreja buscaba miel y una bolsa con bolitas. El otro parecía unas maracas, sentía que estaba bailando. Illia Li Zapata, 11 años 83

Los relojes son sueños Reloj vacío y lleno a la misma vez El reloj es como un saco lleno de horas y las horas son un saco lleno de minutos Reloj manual, tú sirves para saber la hora y los celulares también reloj, el dios de la hora instrumento sagrado del Sol dorado. Reloj, eres como un Sol y como una luna. Las horas pasan como un segundo tú me despiertas de un susto en vez de siete y quince te agrego seis minutos y me despierto siete y veintiuno. Tina Porras Caro, Valentina Porras Caro, Valentino Linares, Ariel Uñates, Martín Nicolás Araujo Grupo de 9 a 13 años

Martín Nicolás Araujo, 11 años

Yanina Castillo, 9 aĂąos 86

Soneto de la quema del muñeco Estamos con el camión de bomberos, la llama del más allá viene acá los muñecos vamos a quemar ya muchos deseos y sueños quememos. Fuimos al barrio de Carlos Gardel estuvimos cantando y jugando con los tambores un rato bailando mientras se iba quemando el papel. Nosotros sacamos fotos lindas jugamos mucho, la verdad, muy bien a otros les hacían entrevistas. Tomamos chocolatada muy rica en el piso había unas rayuelas el humo hacía llorar y gritar. Ariel Uñates, Valeria Chero, Ángel, Priscila García Grupo de 9 a 13 años

Sueños

Soñé que me amabas Soñé que me querías Y me caí de la cama Por soñar tonterías Inventé una máquina La maquina del amor Yo la inventé para los dos Así que no rompas Mi corazón. Priscila García, 12 años

Anoche soñé que estaba Parado en una neufar L Y estaba todo pixiliado Y vi un facking ojo Y me desperté 3…2…1 Valentino Linares, 10 años

Soñé con un malvavisco y cuando Me desperté de mi cama era mi almohada. Soñé que me agarraba pero en realidad eran Arañas que me sostenían hasta el baño Valeria Chero, 10 años

Soñé con un libro que volaba Pero no que cayera. Soñé con la revolución industrial Pero no soñé con la revolución baldal (revolución de baldes). Soñé con una llave que sonaba Pero no soñé con una mesa que rechinaba. Ariel Uñates, 11 años

Soñé con armas del futuro Pero nadie me vence Porque soy muy turro GO-GO Ángel

Yanina Castillo, 9 años

Preguntas ¿A qué altura está los peces o el mar? ¿A qué altura está el cielo? ¿Por qué usas anteojos? ¿Por qué tienes dos ojos? Agustina Pino Chauca, 9 años 90

¿Por qué a Martín le gusta Saturno? No lo sé. ¿Por qué se queda el subte en el medio del camino? ¿Por qué al tren no le gusta caminar? ¿Qué es estar aburrido? ¿Qué le ponen al shampoo? ¿Por qué existe el jabón? ¿Para qué los parlantitos? ¿Para qué está el abecedario? ¿Es verdad que existe el águila? ¿Vino Daniel? Roberto Correa Mejia, 10 años

¿Es verdad que en el hormiguero los sueños son obligatorios? Libro de Las Preguntas - Pablo Neruda

¿Y es la casa muy grande? ¿De dónde vienen las hormigas? ¿Y cómo nombran a una hormiga Reina? ¿Qué le agregan a la Boligoma para que pegue? ¿Cómo es sentirse solo en el mundo? ¿De dónde nace el fuego? ¿Por qué será que nuestra sombra nos odia? ¿Qué es una galaxia en una Vía Láctea? ¿Qué guardas bajo tu joroba? dijo un camello a una tortuga. Y la tortuga preguntó: ¿qué conversas con las naranjas?* El camello a la tortuga: ¿Cómo es que duermes? ¿Cómo sobrevives? ¿Qué comes si no hay plantas en el desierto? ¿Cómo es que se refleja solo la luz en los vidrios, y no lo demás? ¿Cómo es que se crean los marcadores? Valentino Linares, 10 años

*Pablo Neruda

¿Las nubes hablarán con la luna? ¿Para qué sirve el pan? ¿Los anteojos hablan con los ojos? Mar: ¿te gustan los peces? Yanina Castillo, 9 años 93

¿Cuántas preguntas tiene un gato? Libro de Las Preguntas- Pablo Neruda

¿Los gatos tendrán siete preguntas? ¿Bañarse? ¿Salir de la calle? ¿Un auto lo atropelle? ¿Ir al parque? ¿Ir al baño todos los días? ¿Salir con sus dueños a pasear? ¿Hacerme siete preguntas? ¿Cuántas abejas tiene el día? Libro de Las Preguntas- Pablo Neruda

¿Cuánta lana tiene una oveja? ¿Cuántos compañeros tiene una oveja? ¿Tiene novia una oveja? ¿Se baña una oveja? Alejandro Castillo, 10 años

Agustina Pino Chauca, 9 años

¿De qué color es Saturno? ¿Cuál es el planeta más lejano a Saturno? ¿Saturno es el planeta más pequeño, el más grande o el mediano? ¿Dónde está el planeta más cerca de Saturno? ¿Y cuánto pesa diez toneladas? P.D: ¿Y un kilo? ¿Cuánto pesa una tonelada? ¿Cuántos gramos tiene una tonelada? ¿Y cuantos kilos tiene una tonelada? Martin Nicolás Araujo, 11 años

“Yo no compro coco porque como poco coco. Como poco coco compro, poco coco como”

ADIVINANZAS 1. Rojo por fuera, piedritas por dentro, si quieres que te lo diga, se llama como el tercer día.

Alejandro Castillo, Valentino Linares, Yanina Castillo, Agustina Pino Chauca. Grupo de 9 a 13 años

Alejandro Castillo, 1 aĂąos 97

2. Es redonda, no se puede agarrar y mรกs grande que un queso. 3. Tiene unas garras, y una melena, y con ellas se pelea. 4. Es bella, hermosa, en el palacio la quieren. 5. Es redonda verde y marrรณn. Camina lentamente y tiene un amigo loro y una cola chiquitita. 98

Martín Nicolás Araujo, 11 año

6. Puede ser rojo y también verde. Le gusta a la gente en la salsa siempre. 7. Es un libro que hace ruidos tiene una cama, un monstruo y una ventana. Yanina Castillo, 9 años 99

8. Hay de distintos tamaños, de bolsillo, de bolso, de armario, y en todos está el abecedario. 9. Para hacerlo se gastan árboles, y hay para distintas edades. Valentino Linares, 10 años

10. Es chiquito, no es cucaracha, tiene ocho patas, ¿Qué es? 11. Es redondo, no es pizza, tampoco es luna. 12. Es lenta, no es la babosa, ni tampoco el caracol. Agustina Pino Chauca, 9 años 100

Ariana de los Angeles Aguilar Vargas, 11 aĂąos

13. Tiene su propia comida, y tambiĂŠn tiene cebolla, tomate y queso. 14. Se mete en la boca, y se come en el desayuno, Es el... Alejandro Castillo, 10 aĂąos 101

15. Tiene escamas verdes, mĂralo y te pierdes, tiene dientes y cola, ojos muy grandes y toma cocacola. Tiene un amigo loro, que siempre hace mucho alboroto. Alejandro Castillo, 10 aĂąos

16. Tiene cuello largo tiene patas largas tiene unos cuernos y manchas raras. Yanina Castillo y Alejandro Castillo Grupo de 9 a 13 aĂąos

102

¿Adivinaste?

103 1. Marte 2. La luna 3. El león 4. Princesa 5. Tortuga 6. El ají 7. El libro Ruidos bajo la cama 8. Diccionario 9. Libro 10. Adiviná 11. Queso 12.Tortuga 13. La pizza 14.Huevo 15. El cocodrilo - inspirado en el títere cocodrilo 16. La jirafa

Las tres cosas raras y Nadie* Hace muchos, muchos, muchos, muchos, muchos años, en 1715, cuando Sherlock Holmes tenía 15 años, se encontró con alguien que se llamaba Nadie. Lo encontró en la Torre de Pisa. Desayunaron algo que se mete en la boca y se come en el desayuno ¿qué es? Cuando acabaron de desayunar, se encontraron con alguien así:

Tiene unas garras y una melena y con ellas se pelea ¿qué es? Después, salió algo que es redondo no se puede agarrar y es más grande que un queso ¿qué es? 104

Al día siguiente, compraron un diccionario para saber qué o quién era “nadie”, pero no lo encontraron. Entonces se compraron un libro para saber quién era Nadie, y era un libro equivocado. Del libro salió un cocodrilo viviente que dedicaba poesías a la luna. Después todos encontraron un libro que sí decía qué era Nadie: Nadie era Joaquín. Sherlock Holmes se comió un chocolate. El cocodrilo se tomó un café equivocado (café con leche). El león cazó una cebra que pasaba por la ciudad y era turista. Joaquín festejó que ya no era Nadie, con su familia, porque su apellido era “Donde”.

Valentino Linares, Yanina Castillo, Agustina Pino Chauca Grupo de 9 a 13 años 105

Predicciones Sos una buena persona con un futuro hermoso. Es hermoso tenerte a mi lado. Sos muy hermosa, podés conquistar a cualquiera. Ariana de los Angeles Aguilar Vargas, 11 años

Vas a soñar con eso y no quieres soñar con eso. Xiomara Palian Saman, 9 años

Es hermoso el mar y el sol y el cielo, pero el corazón es muy lindo. Alejandro Castillo, 10 años

No culpar a otra persona por algo que hiciste, porque llegará algo malo. Martin Nicolás Araujo, 11 años

No te rindas ante tus objetivos. Siempre hay un propósito para vivir. Debora Montes Giraldo, 12 años

Tu carrera seguirá. Nuevas amigas encontraras. Agustina Pino Chauca, 9 años

106

Vas a conocer al amor de tu vida en Paris. Antonella Gonzales, 9 años

Ser rico es ser pobre. Yanina Castillo, 9 años

La vida siempre va a continuar. Kevin Genes, 10 años?

04 94 89 79 64 54 49 Valentino Linares, 10 años

Saldrás con la persona que te gusta Tina Porras Caro, 13 años

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Axel Capurro Robles 108

El barrio

Historias en la vereda Taller de lectura y escritura para jóvenes y adultos

“…La poesía es conocimiento, salvación, poder, abandono. Operación capaz de cambiar al mundo, la actividad poética es revolucionaria por naturaleza; ejercicio espiritual, es un método de liberación interior. La poesía revela este mundo; crea otro…” Octavio Paz

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“Pies, ¿para qué los quiero si tengo alas pa’ volar?” “Pinto autorretratos porque estoy mucho tiempo sola. Me pinto a mí misma, porque soy a quien mejor conozco”.

“Yo solía pensar que era la persona más extraña en el mundo, pero luego pensé, hay mucha gente así en el mundo, tiene que haber alguien como yo, que se sienta bizarra y dañada de la misma forma en que yo me siento. Me la imagino, e imagino que ella también debe estar por ahí pensando en mí. Bueno, yo espero que si tú estás por ahí y lees esto sepas que, sí, es verdad, yo estoy aquí, soy tan extraña como tú”.

Frida Kahlo

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Autorretratos

¿Mis lecturas? Piden urgente unos libros. ¿Mi nariz? Mi nariz pide a gritos unos pañuelos. ¿Mi teléfono? Elemento de trabajo. ¿Mi silencio? ¿Mis deseos de hoy? Ser feliz y ser amada. ¿Tristeza? Mis tristezas son mi familia que no los veo. Mirtha Gonzalez 111

¿Mi pelo? Largo y fino como tallarines antes de comerlos. ¿Mi pensamiento? Mi decisión o tal vez un impulso, mi perdición. ¿Mi vida? Mi razón de ser, mis locuras y alegrías, mis tristezas y perezas. ¿Mis cosas favoritas? Cantar y bailar, verte sonriendo y tu lealtad. ¿Mi cumpleaños? El mejor día que más puedo pedir, tengo regalos, saludos y si te necesito me ayudarás. ¿Mi alegría? Mis placeres, mis sonrisas, mis quehaceres, mis locuras, mi desesperación, tú estás conmigo eres mi salvación. Micaela Ayala

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¿Mi locura? Algo con lo que no podría ser yo. ¿Mis dedos? Gorditos y cortitos XD ¿Mi cabeza? Un mundo dentro de otro. ¿Mi amor? Algo muy complicado de explicar y expresar. ¿Mi forma de ser? Eso depende de con quién esté. ¿Mis sentimientos? Algo oculto en mi ser. ¿Mis miedos? Algo a lo que no me acostumbré. ¿Mi personalidad? Muy complicada de entender. Joana Quispe 113

¿Mis dedos? Salchichas con vida. ¿Mi cabeza? Un mundo desconocido. ¿Mi amor? En otra dimensión. ¿Mi forma de ser? Tranquila. ¿Mis sentimientos? Abandonados. ¿Mis miedos? Muchos. ¿Mi personalidad? Bastante difícil o no sé. ¿Mi locura? ¿Adónde se fue? Leila Bringas

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¿Mi personalidad? Es complicada, nunca se sabe cuándo va a cambiar. ¿Mi locura? Poca. ¿Mis dedos? Largos y anchos, piden a gritos tocar las cuerdas de una guitarra. ¿Mi cabeza? Pelos colorados, débiles, son los que hay en mi cabeza. ¿Mi amor? Doy amor a todos los que me ofrecen una mano. ¿Mi forma de ser? Tengo una forma de ser cambiante. ¿Mis sentimientos? Felicidad y tristeza es lo que me compone. ¿Mis miedos? Tengo miedo a la soledad, me aterra. Dana Dennen 115

Casi todo era verde Mi mamá prende un sahumerio todos los días y a mí me encanta su aroma. Mi hermano hace girar el trompo de líneas verdes y a mí me marean sus giros. A mi me encanta mirar por mi caleidoscopio mientras huelo el sahumerio. A mi perro le gusta jugar con huesos y destruirlos. Lástima que se corta la luz y tengo que prender una vela para ver por el caleidoscopio. Por suerte en mi casa siempre hay un ovillo de lana para entretenerme cuando la luz se corta y el caleidoscopio se ensombrece. Entonces aprovecho y tejo. Mi hermano va a comprar fósforos para que ni madre encienda el horno para hacer una torta, porque el último fósforo lo usamos para prender la vela. La abuela dijo que guardáramos los fósforos de reserva en la caja de mimbre tejida por ella, para tener a mano la próxima vez que se corte la luz. El aroma del sahumerio z mezcló con el olor de la torta. Como siempre, mi papá entró con un cajón de manzanas verdes y lo dejó en la cocina. Mi hermano gritó que había llegado carta de la tía Alberta. 116

Todos nos reunimos alrededor de la vela a leer la carta. La tía cuenta que en su país ya llegó el otoño y que extraña comer torta con nosotros. Mientras yo seguí tejiendo con el hilo verde un sweater para mi tía, con un dibujo de una vaquita de San Antonio sobre una hoja verde oscuro. Mientras comemos la torta sorprendentemente volvió la luz y nos dimos cuenta que la vaquita que había tejido tenía forma de tortuga. Y así siguió pasando la tarde. Nunca fui buena cerrando historias... Axel Capurro Robles, Micaela Ayala, Johana Quispe

Una vez vi en un mapa antiguo algo que me llamó mucho la atención. Al pasar las semanas lo vi de nuevo en un cartel… Era tan transparente que no lo podía ver. La fotografía que me deslumbró mostraba a un señor caminante que llevaba un portafolio de cuero que quería esconder detrás de un árbol. Al dejar el portafolio un canario lo descubrió…

Continuará… Creación colectiva 117

I. Es por la mañana, recién sale esa luz que mi amiga le llama “sol”. Estoy aburrido, dormí toda la noche, así que voy a despertarla. Se enojó y me está retando porque dice que a las cinco de la mañana no puedo despertarla y menos saltar en su cama. No sé qué es “cinco”, pero bueno. Me echó de la pieza, cerró la puerta y no sé qué hacer. Mejor voy a saltar al sillón, que nadie duerme ahí. Sé que no me deja, pero como está durmiendo, no se entera... se despertó de nuevo y sigue gritando. Ya pasó no sé cuánto desde que salté en su cama. Se enoja si salto y la despierto, si me hice pis en el sillón, si se me engancharon los dientes en los almohadones, fue sin querer. Leila Bringas

118

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Mirta Gonzalez

Me gustaría ser un gato y tener unos ojos hermosos. Poder treparme de un lado para el otro y si me caigo poder levantarme rápido, de un salto y cantar como si nada Edith

Nunca me gustó ser un perro, me hubiera gustado más ser una tortuga marina, amo nadar y me gusta la idea de tener un caparazón. No tengo recuerdos de mi madre ya que desde muy pequeño fui adoptado por la milicia y me críe como un perro de batalla. Soy muy agresivo con los enemigos pero con mi amo soy muy cariñoso y leal. Es por eso que por él, me sacrifiqué y me convertí en un “Cyboz” con un nuevo nombre “B.P.I.T. W”. Axel Capurro Robles Si yo fuera una criatura me gustaría ser un pavo real, para abrir y cerrar mis plumas de color verde y turquesa. Me llamaría Uma y tendría los ojos de color miel y brillarían. Sería la criatura más bonita del jardín. Con mis plumas largas y suaves como una almohada. Micaela Ayala 120

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Sandra Aguirre

Preguntas ¿Son extensos los besos en el mundo? ¿Qué sienten los monarcas en la noche? ¿Qué palpita uno cuando está frente a la muerte? ¿Será que el mar es tan extenso como pensamos? La música triste, ¿florece durante la noche? Argelia Del Valle Cruz, Johana Quispe, Dana Dennen, Axel Capurro Robles

Cosas que uno hace Mirar el suelo cuando camina. Mirar las novelas Salir de noche y espiar vidas ajenas en las ventanas iluminadas. Quedarse dormido, olvidarse de un compromiso. Dormir mucho. Revisar una y otra vez antes de salir si todo está bien en la casa. Pinchar la tapa de una tarta antes de rellenarla. No me gusta que me hagan esperar mucho tiempo. 122

Saludar a la gente que uno conoce. Jugar juegos online con amigos. Utilizar las cosas de mi pareja. Ojotas, y alguna remera o short sin falta. Imaginar vidas ajenas en el colectivo. Mirar dormir a mis hijos, y a los chicos en general. Me gusta salir a pasear con mis hijos. Salir a la calle y arrepentirse de la ropa que uno tiene puesta. Me gusta llorar cuando estoy triste. Ver pelĂculas al anochecer. Mirar el cielo desde un balcĂłn. Bailar me gusta. Caminar por la calle pensando en cualquier cosa. Ver videos graciosos en youtube. Practicar tejido. Llenar de palabras cuando es mejor el silencio. Escribir un mail y tardar horas en hacerlo. Dejar afuera la jarra de agua. Tener a upa a un bebĂŠ hermoso. Cocinar pizzas. Comer fideos con manteca y queso. Aconsejar a los amigos. Me gusta caminar sin zapatos, descalza. Jugar a la computadora. 123

Prepararlo a mi hijo para ir al jardín. Hacer listas interminables de “hay que...” mientras Maty maneja. Leer policiales tirado en el sillón. No me gusta lavar los platos. Discutir con la gente o las personas. Me gusta coleccionar cartas. Frotarme los pies en la cama para dormir. Enojarse, pelearse, gritar, arrepentirse, pedir perdón. Me gusta cocinar y tener todos los condimentos. Cantar todos los días a las 20hs. Cortarme las uñas desparejamente. Oler las flores, especialmente jazmines y fresias. Me gusta cuidar bebés. Cantar con auriculares y desafinar mucho. Estudiar para una prueba. No me gusta viajar. No me gusta levantarme temprano y nunca llego puntual a un trabajo. Juego con mi hijo. Leer libros. Hacer ejercicios en educación física. Hablar todos los días sin falta por teléfono 124

con mi tía. Cortar gajos de flores o plantas por la calle (herencia de mi abuela). Despertarme muchas veces durante la noche y, cuando eso no sucede, sentir que dormí cinco minutos. No me gusta levantarme temprano. Contar un secreto que uno había prometido guardar. Me gusta comer mucho. Regar las plantas para sentir el olor de la tierra mojada. Me gusta comer. Ir al colegio muy temprano. Ser puntual al ir a algún lugar. Guardar rollos de papel higiénico y hueveras arriba de la heladera, para algo van a servir. Rebotar contra las paredes. Me gusta ir a bailar con mis amigas. Dar puertazos. Me gusta ver películas de terror. Caminar con música y sentirse muy contento. Creación colectiva

125

Nosotras agradecidas Gracias a los otros, gracias a la manzana por el pastel, al azĂşcar (me encanta lo dulce, dice Johana). Gracias las nuevas oportunidades, al chocolate, a la pizza y al queso. Gracias a los cocineros, a los amigos y a las amigas, gracias a los escritores y a las ideas. Gracias al corderoy y a la lana, a la plaza, al tobogĂĄn y a la hamaca. Gracias a las experiencias vividas, gracias a los maestros y a la mĂşsica. Gracias al color violeta, 126

a las burbujas, a la niñez. Gracias a la cama, a la almohada, gracias a las bufandas y a las piletas. Gracias al vino tinto, gracias a los árboles, gracias a las mascotas. Gracias a la naturaleza, a los aros y los anillos, gracias a las fiestas. Gracias a la paciencia, a los niños, gracias a las conversaciones y a la palabra. Nosotras, agradecidas. Creación colectiva.

Que a tu selección la eliminen en octavos de final. Que erres todos los tiros libres y los penales. Creación colectiva 127

Insultos Que, cuando tengas hambre, no haya nada en tu heladera. Que, cuando estés enojada, no encuentres ni un kiosco abierto. Que te quiebres la pierna cuando quieras ir a bailar. Que el libro que estás leyendo termine mal. Que al libro que estás leyendo le falte la última página. Que metas el pie en un hormiguero de hormigas rojas. Que, cuando quieras almorzar, alguien te quiera matar. Que, cuando quieras almorzar, te quedes sin plata. Que, cuando estés en un lugar lejano, te quedes sin plata para volver. Que el peluquero entienda mal y te haga un corte horrible. Que tu hijo te martille con palabras (dijo Mirtha porque Julio la estaba volviendo loca). Que a tu hijo le regalen una guitarra. Que, cuando quieras dormir, haya un bebé llorando. Que, cuando quieras dormir, los vecinos corran por los pasillos. Que sean las seis de la mañana y un niño ande gritando, llorando. Que, cuando te sientas mal, tu profesora empiece a hablar y te ponga exámenes. Creación colectiva 128

Fatima 129

Una historia me recordará siempre que todos los días sean felices el cielo azul, el sol brillante siempre estarán porque su algo se es que todo cambia, el color azul del mar me trae recuerdos de aquellas vacaciones en familia que pude disfrutar Micaela Ayala La luna ya salió Y me marca una hora exácta Como se que ya se escondió No se qué hora marca. Leila Bringas Los edificios son de muchos colores, pero no usé violeta en marcadores. Los edificios hay de muchos colores, Pero no usé violeta Con ninguno en marcadores. Leila Bringas

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¿Por qué quiero llenarte solamente de mí? Sera que de solo saber de que estamos muy enfermos , solo me quiero dedicar a escribir, no con palabras, sino con los papeles pegados en la hoja formando una imagen que solamente tu y yo entendemos ya que te quiero así inocente, toda ajena, palpitante. Rojo este amor con que odio, esta enfermedad que me unde en esta ciudad que brilla en barios colores. Joana Quispe

Cuando miro al cielo nocturno veo todas las estrellas brillando con su propia luz, hago de cuenta que cada persona es una estrella y comparo la luz que desprenden con los deseos que cada ser humano tiene y vive por eso, y eso también representa la importancia de su vida. Pensando de esta manera, yo quisiera brillar de una forma diferente, de un color verde y mucho mas brillante que las demás Vidas, sin embargo me desespero porque aun no cumpli ninguna meta, ¿soy un soñador fracasado? ¿Será que en verdad yo deje de brillar? ¿Debo aceptarlo y dejar de soñar? NO! Yo no soy así. Axel Capurro Robles

131

Poemas dadaístas Obsesión economista. Vivir, aprender, sencillamente Reconoce volver con velocidad de nuestras relación Mundo tiempo Recuperar sana la vida una quista. Deshacernos por francés el consiste en partir la tanto en la hora a tiempo de es Jesica Alfonso

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“Medalla” mancha el aro dice héroes el Crismanich la grulla patadas público la crack asegura cara pelearía desconocida el. Londres se maravilla gran deportivo Martínez que taekwondista Sabastián del nunca tiene fama una para con su se subió no las que y con en a año le de con al podio. Sandra Aguirre

133

Agua latina Un AmĂŠrica de las TecnĂłpolis es negocio cuando hocico el canillas abiertas de. Micaela Ayala

Caligrama

Micaela Ayala 134

¿Qué es?... El miedo Algo que quiero que pase rápido. El cuco Algo muy muy negro La cornisa Algo que no hay que dejar que crezca porque te atrapa. Un motor para contar historias Un camisón blanco y largo que te regalan en un hospital Miedo a la enfermedad, a la muerte, al dolor… Miedo a olvidar.. A perder, a olvidar, olvidar es una forma de perder A la soledad

La luz Mi hijo Algo que ilumina El subte cuando llega El sol de la mañana que se cuela entre las rendijas de la persiana La alegría del alma de las personas que te llena, que te contagia Una idea, muchas ideas Un amigo Algo que entra por la ventana

135

El viernes Un día de la semana Alivio La aproximación del fin de semana El último día trabajo y de clases La promesa de una cena con amigos El estreno del fin de semana Un día de película Poder dormir tarde El día de hacer compras

Un abrazo Una muestra de cariño Un alivio Un refugio Un suspiro Aron diciendo: te quiero mucho mami Una necesidad Una bienvenida A veces una sorpresa Es un apretar fuerte Que te extraño Lo que necesito a veces para poder dormir Un reencuentro

136

La justicia La verdad La verdad para quién? Algo que no existe en forma pura Es un deseo

Una buena nota Una alegría Haber estudiado y conseguir un premio Es saber decir o escribir lo que el otro quiere escuchar o leer Un resultado que no siempre tiene que ver con la trama

Poesía Una canción sin músicaa Poesía eres tu Un mundo para explorar Algo con lo que te podes identificar Muchas veces algo inentendible Algo que no hace falta entender Sentimientos escritos que no hacen falta entender Un sentimiento que se expresa, palabras bonitas… Creación colectiva

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Construcción colectiva en subgrupos. Técnica de cubismo con recortes en cartulina y detalles con marcador negro grueso.

Creación colectiva grupo juegoteca de 9 a 13 años

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El barrio de

La juegoteca “Buscar al pájaro para encontrar a la rosa, buscar el amor para hallar el exilio, buscar la nada para descubrir un hombre, ir hacia atrás para ir hacia delante.” Roberto Juarroz

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Producción en 2D. Figuras con lápices de colores experimentando diferentes texturas, y fondo con lápices acuarelables.

Valentino Linares, 10 años

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"Monstruo con boca de lobo y sus cuernos largos, ocho patas como un pulpo como el corazรณn de un caracol y cuatro brazos como un insecto. Antenas como la de los extraterrestres, colmillos como el cuento de un vampiro y dos ojos brillantes amarillos con bigotes puntiagudos. Es fuerte y su cola larga no tiene fin. Es grande y sus orejas enormes" Michael Yanapa Fernรกndez 141

Boceto de creación de monstruo inspirado en Tim Burton en papel madera y marcador grueso negro

Priscila García,12 años 142

Boceto de creación de monstruo inspirado en Tim Burton en papel madera y marcador grueso negro.

Martín Nicolás Araujo, 11 años

143

jugar Recordar esa imagen resulta más que gratificante: bellas escenas de los niños y niñas, buscando, nombrando, jugando a elegir países donde viajar, soñando despiertos y despertando curiosidad por saber un poco más.

Juegoteca (Grupo de 3 a 8 años)

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"Cuando era chico creía que jugar era una cosa muy importante. Jugar con el cuerpo entero. A la pelota, a las bolitas, con el trompo, remontando barriletes, a la rayuela, saltando al rango, trepando a los árboles, dando la vuelta al mundo en bicicleta [...] Cincuenta años después sigo creyendo lo mismo." Gustavo Roldán

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Ludmila Giordani, 4 aĂąos

El barrio del

Jardin “El único verdadero viaje de descubrimiento consiste no en buscar nuevos paisajes, sino en mirar con nuevos ojos.” Marcel Proust

149

Astrid Córdova

3 Sofía Arias,

años

Alcántara, 4 añ os

Con ustedes, los títeres

¿Quién es? bruja ¿Que le gusta hacer? le enseña al gato a hacer brujerías. Come jugo con tomate.

150

Nombre: Jirafa ¿Qué le gusta hacer? comer manzanas y zanahoria y masa. Juega con el más grande del jardín.

o, 4 años Dante Randaz

Jo n at h an

Spi noz a

año

¿Quién és? El payaso plin plin ¿Qué le gusta hacer? pararse los pelos.

151

Axel G enes, 2 año s

hi an

rd on

ar o,

añ o

¿Quién es? El príncipe bahiano. ¿Qué le gusta hacer? Le gustan las princesas. Le gusta bailar con las princesas. 152

Dante Caivano, 3 años

Ludmila Giordani , 4 años

Nombre: Ludmila. ¿Quién es:? una princesa ¿Qué le gusta hacer? Bailar con el príncipe. Bañarse y saltar.

¿Quién es? Payaso ¿Qué le gusta hacer? Le gusta comer comida, masa no. Y le gusta usar sombrero. 153

Bianca López, 2 años

kk Tra

154

in arc M co as r r Ca

os añ 4 ,

¿Quién es? Dinosaurio ¿Qué le gusta hacer? No tira fuego… No vio que come.

"Es que para nombrarte necesito mil cuentos y las palabras magas de infinitos recuerdos" Ernesto Camilli

155

Una ventaja que baja y encuentra La lectura en el jardín maternal La biblioteca a través de su ventana, esa que está ahí arriba, que da al patio nos ve llegar al jardín, correr, saltar, salir y entrar a las salas para jugar, para almorzar, tomar la leche, hacer alguna siesta... Pero los jueves baja por la escalera de colores, acompañada por Ailen. La sala del maternal la recibe para compartir posibles mundos. Donde las casas tienen techos y paredes de libros, o los libros son caminos que nos llevan a la selva, al campo, circo, al mar en un barco de papel. Libros enormes para agarrar entre muchos, esconderse y espiar y algunos muchos chiquitos con los cuales armamos torres de colores. A veces son almohadas, patines, sombreros, bebés, autos, motos. 156

157

En esta modalidad de la vereda donde los espacios se arman y desarman, se monta el espacio literario y la biblioteca se implica a través de la disponibilidad corporal de Ailen y los niños se disponen a recibirla a través de su voz. Una voz distinta, a la de todos los días, con otra sonoridad, que susurra bajito y dulcemente. Se siente más cercana en cada encuentro, como así también empiezan a oírse nuevas voces, aquellos que antes sólo ojeaban, empiezan a poner palabras a lo que ven. Y entonces no sólo escuchan sino ahora son escuchados. Y esos cuerpos también cuentan y juegan porque jugar con la voz es jugar con el cuerpo. 158

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Romina Genes 160

El barrio del taller

arte y literatura de las mujeres de la vereda “Despojémonos de todo aquello seguro que se proyecta al exterior con trazos lentos y definitivos. Todos empleados en la tarea de ser, vivir, sentir sin otros lazos. [...] Despojémonos de todo cuanto nos conformó a imagen y semejanza nuestra y gustemos sabiamente para el recuerdo el minuto absurdo y libre.” Susana Thénon

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Historias del colectivo I. Cuando era joven volvíamos con mis amigos de un cumpleaños y en los asientos del fondo del colectivo, no recuerdo por qué, pero empezamos a cantar y grabamos en el radiograbador para no olvidarlo y recordar ese momento cuando seamos viejos escuchando el cassette. II. Se le mancharon los zapatos en el colectivo y ella siempre lustra sus zapatos con un cepillo. Era tan grande la soledad que sentía mientras viajaba a Barracas, en un viaje sin fin en un colectivo destartalado que agarre mi bolsa multicolor repleta de hilos y me puse a tejer una red de recuerdos y paisajes. III. A mí me encanta saludar al colectivero con un “buenos días”, aunque no me responda. Y me agarra tanta tristeza que me pongo mis anteojos para que no me vean los ojos llorosos. Las personas hoy en día parecen artistas ya que están encerradas en un mundo creado en una burbuja. VI. Cuando voy en el colectivo y miro los balcones, me causa cierta tristeza ver las sogas con broches colgando sin nada que sostener. Creación colectiva, 2014

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haikus en vuelo sangrรณ el durazno la corteza del รกrbol fruta deliciosa las calles oscuras dan temor de amor calles y corazones reja desierta una cuesta incierta sin respuesta hermosa noche estrellada en el ocaso de cenizas sรณlo queda polvo cdel otro lado de la vida el corazรณn despierta 164

dulces y confites la fiesta empieza y los peluches vuelan hermosa noche de estrellas fugaces y oscuras tinieblas el castillo a lo lejos dragones furiosos la princesa espera amor eterno sin soles, ni ocasos soledad transparente los dĂas y las horas me tienen loca y descontrolada el tren es largo como los colores rojo, blanco

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pájaros al viento plumas volando gatos observando ojos de león cabellera de león temple de acero el sol brilla siempre que sale en la noche los días pasaron rápido volando profundo en la noche el hielo derrite el alma ardiente diente de león feroz comelón rey de jungla

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noche nublada ¿hermosa? luna y mar ¿desiertos? movimiento infinito en círculos viciosos para todos muy graciosos vuelan las hojas salto de pájaro nidos de aves pétalos de rosas rojas y rosas brillan en la noche la niña en la cuna llora sin descanso a pleno llanto ¿la felicidad llegará? en el otoño soleado de días interminables

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agua en el estanque el invierno frío del año nuevo líneas de vida los años y los días que no se olvidan luz y sombras sobre el mantel de la mañana manchas y lunares recipientes rebalsados de alegrías y sorpresas en cajas y cajones por montones la noche oscurece las estrellas brillan y mi corazón se estruja pero de emoción y alegría aviones girando rueda de colores con maderas de primavera

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bajando del río pendiente empedrada la cascada cae diminuto el baile músicas y danzas cuerpos bailando día de primavera plagado de abejas y ruedas de bicicletas canciones para todos bailamos sin descansar dijo el pato

Creación colectiva

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“Cuando iniciamos un viaje soñamos el destino y, solo a veces, nos damos cuenta de la belleza del camino. De las empinadas laderas, de los bosques tupidos, de las sierras encrespadas, de las pasarelas resbaladizas, de los ripios vertiginosos, de las vueltas del mundo y los enredados laberintos. Puede que en un segundo cambie la suerte y el destino que anhelamos no sea otra cosa, que reiniciar el camino.” María Laura Caruso

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pro pues ta rio

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Kiara Costa, 5 aĂąos

Taller de artistas lectores (3 a 8 años) Cada lunes, nuestros encuentros comienzan con una mesa de libros. Para este momento, preparamos dos selecciones de libros para disfrutar en paralelo: una, acorde al Proyecto que estemos trabajando, y otra con algunos “clásicos” de la Biblioteca (Corre ratón corre, Grrr, Art y Max, La mosca, por ejemplo). Proyecto Viajes. Durante el año 2015 nos aventurarnos en un gran viaje por el mundo. Visitamos la selva, China, Marruecos y finalmente Bolivia. Con un ligero pero intenso paso por Alemania, de la mano de la ilustradora Julia Friese. Fuimos recorriendo mesas de libros que nos trasladaban a estos lugares y nos acompañó el pato Peter Pan; un títere que nos iba contando sobre sus aventuras y andanzas a través de mapas, fotos, relatos, poesías y adivinanzas. Inspirados en esos viajes los chicos inventaron historias y personajes, escribiendo e ilustrando con variados materiales y soportes. Algunas de las propuestas: Un mundo extraordinariamente genial. Hay lecturas que inspiran para escribir. Así nos pasó con Imagina de Aaron Becker, un libro de pura imagen. Fue tal la fascinación que causó su lectura que nos dimos un espacio para ponerle palabras, para que cada uno fuera diciendo que imaginaba al observar esas ilustraciones, y así con las representaciones de cada uno se fue construyendo, colectivamente, esta historia nacida de otra historia… Historia de exploradores. Una pregunta disparadora: ¿qué cosas 172

llevarías para irte de expedición a la selva?. Ideas que van y vienen y una lista que va tomando cuerpo. Esta lista, junto con una variedad de lecturas y de conversaciones sobre viajes, fue el insumo para escribir la historia de los exploradores. Dragones. Miramos videos de la danza del dragón chino, bailamos nuestra propia danza, hicimos un gran muñeco dragón para La quema del muñeco. Cada uno dibujó su dragón y, guiados por algunas preguntas, caracterizaron sus personajes (¿cómo se llama?, ¿dónde vive?, ¿tiene algún poder?...) Hechiceros. Y las historias también pueden surgir del juego. Acercarse al estante de las enciclopedias, tomar varias de ellas, buscar un rincón escondido, abrir el libro y murmurar hechizos. Un juego que aparecía una y otra vez entre las chicas del grupo. Y entonces la propuesta fue convertir el juego en historia. Así nació “Hechiceros”. Proyecto Mundo Animal. A lo largo del año 2016 nuestras mesas de libros se colmaron de todo tipo de textos sobre animales: cuentos, libros ilustrados, enciclopedias, imágenes, dibujos... observamos videos, caminamos como tortugas, nos estiramos como gatos y fuimos conociendo e imaginando las vidas de muchos de ellos. Animales que conocimos. Al comienzo los gatos fueron nuestros invitados privilegiados. Luego, continuamos leyendo y conociendo a los ratones, los reptiles (cocodrilos, iguanas, lagartijas, tortugas) y de la mano de “Manuelita” nos sumergimos al mundo marino. Caballitos de mar, ballenas, focas, peces, más tortugas, medusas... y de tanto nadar decidimos comenzar a volar, con pájaros de todos colores y... ¡hasta aprendimos sobre aves que no vuelan! 173

Títeres y música. El pato Peter Pan continuó generando un momento de charla grupal. Los libros de la mesa, los animales del proyecto y las anécdotas de la semana fueron los temas principales. A este momento se le sumó la música. A veces, entonamos canciones de los animales del día, otras veces canciones que ya se hicieron clásicas del taller como Sambalele o El Aguacero, y también bailamos! Plástica. Las palabras y las imágenes se entremezclan y se va armando un vaivén entre las lecturas, las historias inventadas y los dibujos de los artistas lectores. Muchas veces la inspiración viene de la mano de un video o corto que proyectamos antes del momento de ilustrar. Antes de comenzar presentamos brevemente los materiales que disponemos para trabajar (marcadores, crayones, pasteles, papelitos, sellos, porcelana fría, telas, témperas...) y la consigna del día: intervenir colectivamente un caparazón de tortuga hecho de cartón, ilustrar gatos en hojas negras, en hojas blancas, imitar la piel de los reptiles con mostacillas o piedritas, hacer nuestras propias alas en celofán y papeles de muuuchos colores... Escritura. Muchas veces la escritura surge en el momento de plástica. Esos personajes, que van tomando forma con tizas, marcadores o crayones, vienen cargados de historias que compartir. A veces alcanza con un título, otras, es necesario contar toda su historia. Hay días que comenzamos con algunas preguntas como... ¿Cómo se llama? ¿Cuál es su comida favorita? ¿Qué le gusta hacer? ¿Cuál es su historia?, otras veces las historias ya están ahí, listas para nacer, solo hace falta tener lápiz y papel a mano. Cuaderno de escritores. Cada uno de los chicos más grandes del taller cuenta con un cuaderno en la biblioteca. Es un espacio donde pueden escribir y dibujar las cosas que se les ocurran. A veces, piensan historias de 174

terror o escriben inspirados en imágenes que elegimos para compartirles, en alguna historia leída en el día o en dibujitos de televisión. Palitos de helados apalabrados. En la biblioteca contamos con una cajita llena de palitos de helados de distintos colores cada uno con una palabra escrita. Algunas de esas palabras nos ayudan en los momentos en los que no sabemos cómo seguirá la historia, pero la verdad es que hay muchas formas de jugar con ellas. A veces elegimos en función al color del palito, “quiero una palabra verde”, otras veces hace falta leer muchas palabras para encontrar la que estábamos buscando. Algunas de esas palabras son: sol, amor, mar, miedo, lluvia, hormigas...

Taller de escritores (9 a13 años) En el taller tomaron lugar diferentes propuestas que atravesaron distintos géneros literarios y disciplinas artísticas… Nos sumergimos de lleno en la lectura y escritura de poesías. Atravesamos distintas formas poéticas como haikus, cuartetos, sonetos, coplas. También experimentamos la escritura de verso libre con distintas temáticas como los sentidos, los sueños, los hechizos, los objetos. Estos últimos tuvieron un lugar central en las creaciones poéticas del año, escribimos inspirados en objetos reales, en ilustraciones de objetos, incluyendo definiciones de diccionario, incluso hicimos caligramas, entre muchas otras cosas... Nueve dados, dos historias, o tal vez tres… Story Cubes es un juego de dados para inventar historias. Se toman entre manos los 9 dados, se arrojan y… 9 dibujos inspiradores aparecen invitándonos a crear… 175

En esos primeros días en que recomenzamos después de las vacaciones, días de reencuentro con el espacio, con los amigos, con las docentes, los juegos son grandes disparadores para ponerse en acción. Eso mismo fue lo que inspiró la creación de “Una historia sin sentido” y “La suerte está echada I y II”. En dos pequeños grupos, cada chico a su turno iba eligiendo una imagen y sumando una parte de la historia. Primero así, de manera ordenada, por turnos, frente a la hoja en blanco que se fue llenando. Y al calor de la creación las ideas bullían, desacuerdos, acuerdos, entusiasmo y las palabras que se fueron entramando y la inauguración del taller de escritores. Haikus. Volver sobre las creaciones de otros años también es un recurso interesante para iniciar el año. Cerramos 2014 creando Haikus y por eso nos parecía interesante la idea de releerlos y volver sobre esta forma poética con la que los chicos se habían sentido muy cómodos. Leímos los creados por ellos y también inauguramos un modo de lectura que nos acompañaría durante todo el año: “ el ping pong poético”: cada uno, a su turno, iba tomando el libro “… Haikus” e iba leyendo un Haiku elegido al azar entre las páginas del libro…esta lectura, con distintas voces, ritmos, tonos, nos fue metiendo en clima y llevándonos hacia el momento de escritura. Analizamos juntos la estructura de este tipo de poemas y así nos pusimos a probar y a escribir los propios.

Poesía ilustrada. Entrar en poesía a través de la imagen. Primero escuchar, mirar, saborear cada palabra escuchada, después, con el tamiz de la propia mirada ilustrar y volcar nuevamente en imagen. Poetas latinoamericanos es un programa del canal Encuentro y de allí seleccionamos la poesía audiovisual que atravesó esta propuesta: http:// www.encuentro.gov.ar/sitios/encuentro/programas/ver?rec_id=50611 176

Sueños. “Rima que arrima” es uno de los libros del Taller azul de Salta. Los libros publicados por otros espacios, talleres siempre andan rondando por nuestra biblioteca. Como inspiradores para las docentes y como material de lectura con los chicos. En este caso, de la lectura de la sección Sueños de Rima que arrima, surgió la idea de escribir los propios sueños. Lo que la música da… La música es poesía, escuchar música para entrar en poesía, para hacerse de distintos ritmos. La propuesta: entrar al espacio, elegir un lugar, acomodarse entre almohadones, cerrar los ojos, escuchar un ritmo, dibujar lo que el ritmo inspire, y otro ritmo más y otro más, suave, lento, movido, dejarse llevar por la música… Poemas con sentidos. Oler y escribir un poema. Escuchar y escribir un poema. Probar y escribir un poema. Tocar y escribir un poema… una fórmula con sentido/s. Convidar con una variedad de sensaciones para dar paso a la escritura: ajo, perfume, ilustraciones, un palo de lluvia, caramelos, algodón, virulana, chocolate, campanas… Cuatro cuartetos, un soneto . Y seguimos explorando formas poéticas. Le tocó el turno a los sonetos. Entonces leímos, escuchamos y miramos (Lope de Vega, Un soneto me manda a hacer Violante: https://www.youtube.com/ watch?v=cgyrO9Eb0ao). Analizamos la estructura de estos versos con detenimiento comenzamos a probar, buscando rimas, contando sílabas. Escritura contenida en una forma que suelta la pluma…Así surgieron los primeros cuartetos. Y después… después nos animamos al soneto. Teníamos una fuente de inspiración: La quema del muñeco. En medio de esa fiesta, en la calle y entre los muñecos capturamos algunas escenas con la cámara y les pusimos un título. Inspirados en esas escenas y en todo lo vivenciado aquél día surgió “El soneto de la quema del muñeco”. 177

Coplas de primavera. Nos adentramos en la lectura de coplas, una mesa de libros, lecturas en voz alta, improvisamos poniendo ritmo coplero. Miramos algunos fragmentos del documental “Esta cajita que toco tiene boca y sabe hablar” https://www.youtube.com/watch?v=qyqlZEp-yXg. Y después, puestos a escribir, nos hicimos de rimas con el “buscapalabras”: http://buscapalabras.com.ar/rimas.php. Así, con la mochila cargada y en un día de primavera, nacieron las coplas de primavera. Objetos maravillosos. ¿Qué pasa si nos detenemos a observar los objetos que nos rodean? ¿Y si nos proponemos buscar nuevas maneras de nombrarlos?. Seguramente aflora la poesía, versos que libremente se van acomodando y eso que parecía algo tan cotidiano o tan distante se vuelve distinto, tal vez más propio. Un libro inspirador. El lenguaje de las cosas de María José Ferrada. Lo leímos mucho, fue parte de nuestros ping pones poéticos. Después de leer, nos quedamos con las ilustraciones, una para cada uno, con la idea de volver a escribir sobre ese mismo objeto que la autora había abordado. También estuvo Quiere a ese perro de Sharon Creech, leído por entregas, y tantos otros. La obra de teatro de Hugo Midón, Objetos maravillosos nos atravesó en el armado de esta serie con objetos, algo de su espíritu flotaba en el espacio en cada propuesta de escritura. Cerrar los ojos y tomar de la caja un objeto: un pequeño elefante, un broche, un gato, anteojos…observarlo detenidamente, describirlo con la palabra… Y si se trataba de objetos no podían faltar los caligramas, esas poesías que toman la forma de los objetos que nombran, palabras que se van acomodando y arman dibujos… Las definiciones de diccionario fueron otro insumo para la escritura. Así surgió Reloj vacío y lleno a la misma vez, la definición de diccionario de este objeto fue el puntapié inicial y después entrar en poesía… Además, en este caso, 178

volvimos al lenguaje musical y de la mano de Luciano Perrone musicalizamos el poema. Preguntas. El taller comenzó con una mesa de libros cuyo criterio de selección fue libros que estuviesen relacionados con preguntas, dudas o misterios. Luego pasamos a una mesa llena de preguntas las cuales estaban impresas y recortadas. Las mismas fueron elegidas del libro de Las Preguntas de Pablo Neruda y de las canciones ¿A dónde van? y el Escaramujo de Silvio Rodríguez. Leímos las preguntas servidas. Luego elegimos y compartimos las preguntas preferidas. Después cada uno escribió sus propias preguntas inspiradas o no en las preguntas seleccionadas. Finalmente, nos sentamos en ronda y escuchamos y cantamos la canción el escaramujo. Cada uno tenía la canción impresa para poder cantarla. ¡Repetimos esto varias veces porque les gustó mucho! Adivinanzas. Cuando los chicos entraron al salón, sobre la mesa los esperaba una selección de adivinanzas. Durante un rato, jugamos a resolverlas, y también a decir otras que ellos conocían. Después, propusimos la escritura de una adivinanza entre todos. Volvimos a las que estaban sobre la mesa y notamos algunas características de esos textos: algunas rimaban mientras que otras no, todas se referían a características del elemento a adivinar pero sin ser “demasiado obvias”… Buscamos primero cuál sería la respuesta: el planeta Marte. Entonces empezamos a pensar características de ese elemento, y, al mismo tiempo, cómo organizarlas en un texto que rimara. Por último, propusimos que cada uno escribiera su propia adivinanza siguiendo el mismo procedimiento. Historias con adivinanzas. En el taller siguiente a haber escrito adivinanzas, las releímos y jugamos a resolverlas al inicio del encuentro. 179

Después, hicimos una lectura colectiva del libro “El tesoro perdido”, escrito e ilustrado por los chicos del taller “El placer de leer” en Una biblioteca en La Vereda, en el año 2009. Como había varios ejemplares, todos teníamos uno en la mano y, en ronda, a cada uno le tocaba leer una página. En ese cuento hay algunos acertijos y adivinanzas que el autor tiene que resolver para poder lograr su objetivo (encontrar el tesoro). El paso siguiente fue volver sobre nuestras propias adivinanzas y hacer una lista de los elementos (objetos, animales, etc.) que aparecían en ellas, que pudieran formar parte de una historia. También pensamos qué personajes podrían aparecer en ella. A partir de estos insumos, cada uno fue aportando al texto colectivo, que uno de los chicos escribía en un afiche colgado en la pared. En el momento en que aparecía uno de los elementos de la lista, por ejemplo la Luna, incluíamos la adivinanza cuya respuesta es la Luna, pensando en que el lector tenga que resolverla para poder seguir leyendo el cuento. Predicciones de la fortuna. Cuando entraron, los chicos recibieron una encuesta que consistía en una sola pregunta: “¿Qué le pondrías a tu galletita ideal?” Después de la mesa de libros, compartimos las “galletas ideales” de todos (hubo bastantes coincidencias en cuanto al dulce de leche y a los chips de chocolate, aunque cada una tenía su estilo, y sus ingredientes especiales). A continuación leímos el cuento “Galletas chinas”, de Antonio Skarmeta, charlamos sobre las galletas que aparecen allí y sobre lo que sucede a partir de ellas en la historia. Entonces cada uno comió una galleta de la fortuna (que habíamos conseguido en el barrio chino) e hicimos una ronda de lectura de los mensajes que nos habían tocado a todos. Por último, llegó la consigna de escritura: escribir una o más predicciones que podría/n aparecer dentro de una galleta de la fortuna. 180

Taller Historias en La Vereda Este es un taller para jóvenes y adultos donde leemos, escribimos, ilustramos, conversamos. Y donde los momentos de lectura y de producción escrita e ilustrada están atravesados por conversaciones acerca de lo que esos momentos nos producen. Reflexionamos juntos acerca de qué es leer, para qué, por qué leemos, escribimos, dibujamos. Pensamos también sobre el leer para otros, con otros… Estas son algunas de las propuestas de las que surgieron las producciones publicadas en este libro: Autorretratos. Lo primero fue Frida Kahlo. Nos empapamos de su obra, de sus cuadros, de sus dichos, leímos su diario, hicimos collages con fragmentos de sus obras, leímos sobre su historia, su biografía, nos detuvimos en sus autorretratos. Y entonces hicimos los propios, dibujados y escritos. Para estos últimos una serie de preguntas fueron las disparadoras para mostrar una parte de la interioridad de cada uno… Casi todo era verde. Esta historia, escrita colectivamente, surgió de una propuesta que llamamos “Cofre de objetos”. Cada uno a su turno va tomando un objeto de dentro del cofre, con los ojos cerrados, y con cada objeto se suma un fragmento a la historia. Ideas que surgen de cada uno y de todos, a medida que se avanza la historia se va sintiendo más propia y aparecen las voces entrelazadas, las ideas que fluyen, la necesidad de intervenir en lo que el otro propone y así se va construyendo, entre todos, con esos objetos que van saliendo del cofre y las palabras que toman cuerpo. Una vez vi un mapa. Como muchas otras, esta historia surgió de una 181

lectura: Avión que va, avión que viene de Laura Devetach e Itsvanch. Después de leer las poesías de este libro, aviones de colores que contenían distintas palabras fueron volando hacia cada participante del taller y con cada palabra un fragmento de esta historia inconclusa que con ese “continuará” del final invita al lector a imaginar posibles finales… Perros, gatos y criaturas. La lectura y la escritura se entrelazan. Leer muchos libros sobre gatos, muchos libros sobre perros, muchos libros sobre criaturas extrañas. Ese fue el puente que nos llevó a escribir “como si fuéramos un gato, un perro, una criatura”. Leer y escribir para conocer más sobre los otros seres y sobre uno mismo.

Juegoteca Grupo de 9 a 11 años Exploración y mezcla de corrientes artísticas La propuesta es parte de un proyecto en donde se comenzó por apreciar las pinturas de diferentes artistas, entre ellos Picasso, Dalí, Kandinsky, los cuales son representantes de diferentes movimientos: cubismo, surrealismo, entre otros. La figura, el fondo y el color son algunos de los ejes que se trabajaron. La idea fue conceptualizar los movimientos artísticos, y acompañar las producciones con ciertas técnicas plásticas, juegos, imágenes, fotos, poniendo el cuerpo en escena y como parte de la producción plástica. El eje del proyecto fue el cuerpo, como este es pintado y concebido por los diferentes artistas enmarcados en un movimiento determinado. Desde allí la mirada de los niños plasmadas en sus propias producciones. Este proceso se cerró con la estética y temática de Tim Burton como inspiración, donde se pone en juego las distintas maneras de concebir lo bello en la obra 182

artística.

Jardín Sala de 3 y 4 años Con ustedes, los títeres. Taller de construcción de títeres por la sala de 3 y 4 años La propuesta fue crear personajes. Pensar quién es, cómo se llama, qué le gusta hacer, y luego ponerlo en acción: descubrir como camina, corre, habla, baila e interactúa con otros títeres.

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Un poco de historia “De pibes la llamamos vedera y a ella le gustó que la quisiéramos, en su lomo sufrido dibujamos tantas rayuelas.” Julio Cortázar, Veredas de Buenos Aires

¿Qué es La Vereda? La Vereda es una Asociación Civil especializada en Juego, Literatura, Arte y Educación que funciona desde 1999, en el barrio de Balvanera de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires. En el año 2000 fue centro operativo de la Asociación Civil Huellas , de la que surgieron las personas que fundaron La Vereda. En la institución tienen lugar un Centro Cultural, un Jardín Maternal, la Juegoteca, la Biblioteca, un área de Trabajo Social y un área de Formación en Juego Corporal y Promoción de la Lectura. Nuestra misión se fundamenta en “que los niños, niñas, jóvenes y adultos que concurran a La Vereda, a través de la participación en espacios educativos, de arte, literatura y juego corporal, puedan constituirse como sujetos autónomos y fortalecer y/o construir vínculos familiares, grupales y comunitarios saludables”. El nombre de La Vereda, como todo, tiene una historia. Cuando Viviana De Andreis y Verónica García pensaron este espacio, se inspiraron en Daniel 184

Calmels, quien propone en su libro Espacio habitado que la vereda es el espacio intermedio, de juego, entre lo conocido de la casa y el afuera, la calle. Nuestros objetivos: -Propiciar y promover la difusión e implementación de prácticas que se inscriban en la Convención Internacional de los Derechos del Niño, sus implicancias y sus significaciones. -Ir generando espacios y recursos relacionales y comunicacionales con miras a que niños, niñas, jóvenes y adultos individualicen, construyan y/o fortalezcan sus posibilidades y potencialidades subjetivas en la convivencia familiar y comunitaria. -Facilitar que las personas vayan afirmando su identidad y a la vez enriqueciendo sus habilidades creativas para relacionarse con la realidad. -Viabilizar el acceso al disfrute y a la producción de bienes culturales para todas las personas que concurren a La Vereda. Las personas que concurren a La Vereda residen, en su mayoría, en el barrio de Balvanera (comúnmente conocido como Once) y, en algunos casos, provienen de diferentes partes de la Ciudad de Buenos Aires y del Gran Buenos Aires pero transitan parte de su día en el barrio de Balvanera. La mayor parte de la población es originaria del norte de nuestro país o de países latinoamericanos: Paraguay, Perú, Bolivia y República Dominicana, entre otros. -Tomando en cuenta la inserción de La Vereda en el barrio, es interesante detenernos en la descripción realizada por JulietaSwiecy AilenBarbagallo a partir del material de la institución en su trabajo de Investigación “Emergencia Habitacional: Estrategias desde la Asociación Civil La Vereda” La Asociación Civil La Vereda está ubicada en el barrio de Once-Balvanera. Según la división geográfica de Buenos Aires, el “Once” no está reconocido 185

como uno de los barrios de la ciudad, este se encontraría incluido en gran parte en el barrio de Balvanera y pertenece a la Comuna nº 3. De acuerdo a datos estadísticos, el barrio presenta la más alta densidad poblacional de la ciudad con 34.657 habitantes por km2, superando en más del doble el promedio general, que es de 15.233 habitantes por km2. (Dirección General de Estadística y Censo, 2011) El denominado barrio se caracteriza por concentrar una importante cantidad de hoteles, pensiones y casas tomadas y pocos espacios de recreación y esparcimiento. En términos de Denis Merklen, existen algunas características que comparten las personas que se encuentran en situación de vulnerabilidad social, y que son, a nuestro entender, aquellas que se acercan por diferentes motivos a La Vereda. Por un lado, esta población sufre un estado de inestabilidad cotidiana e incertidumbre. La primera se pone de manifiesto especialmente con el trabajo (precariedad laboral) y las instituciones públicas (dificultad para acceder a algún beneficio o política social). La segunda, la incertidumbre, se observa en oposición a la capacidad de planificación, que permitiría construir una perspectiva de vida más allá del día a día (Merklen, 2010). Asimismo, las familias que concurren a La Vereda comparten el hecho de ser en su gran mayoría migrantes de países latinoamericanos o migrantes internos. El motivo de esta migración se debe principalmente a la búsqueda de mejores condiciones de vida. Desde La Vereda, también se hace eje en lo cultural como forma de intervención en lo social. George Yúdice analiza cómo ha ido variando el papel de la cultura y plantea que “El papel de la cultura se ha expandido de una manera sin precedentes al ámbito político y económico, al tiempo que las nociones convencionales de cultura han sido considerablemente vaciadas. En lugar de 186

centrarse en el contenido de la cultura tal vez sea más conveniente abordar el tema de la cultura en nuestra época, caracterizada por la rápida globalización, considerándola como un recurso” (Yúdice, 2002, 2) Hegemónicamente, la cultura en nuestra sociedad globalizada se utiliza como un recurso para embellecer el espacio, para valorizarlo con el fin de atraer capitales inversores, turismo, es decir, la finalidad está puesta en la ganancia. En el barrio de Abasto -contiguo a Once y desde donde provienen muchos de los que forman parte de La Vereda, esto se puede ver con el reciclado del Mercado del Abasto (actualmente transformado en un mega shopping) en manos de capitales privados, la organización del espacio en relación al tango como bien cultural identitario del ser argentino, la construcción de diversos teatros y centros culturales privados que forman un circuito cultural como atractivo turístico. Ese movimiento, favorecido por políticas públicas, supuso la atracción de megaemprendimientos inmobiliarios, lo que implicó el parcial desplazamiento de los habitantes de casas tomadas de la zona por personas y grupos de mejores condiciones socioeconómicas, a la vez que contribuyó a la invisibilización de las situaciones de precariedad habitacional presentes históricamente en el barrio .(Barbagallo y Swiec, 2013). Derechos Humanos Desde La Vereda procuramos ir construyendo algunas respuestas que demanda un colectivo poblacional de niños, niñas, jóvenes y adultos cuyos derechos son sistemáticamente vulnerados con miras a la identificación y fortalecimiento de configuraciones subjetivas y vinculares (familiares, sociales e institucionales) a través de las cuales puedan ir disponiendo y apropiándose de recursos y herramientas para sus proyectos vitales, con miras a hacer efectivos sus derechos. Para tal fin, buscamos propiciar y promover la difusión e implementación 187

de prácticas que se inscriban en el marco de los Derechos Humanos, sus implicancias y sus significaciones. La Vereda participa de la planificación e implementación de líneas de trabajo que propician a la vez que procuran ir respondiendo a los emergentes que los Derechos Humanos van demandando . Nuestro primer hito de fundamentación está dado por instrumentos legales que, a la vez, significan afluentes para la planificación de proyectos sociales . En este sentido, nuestra mirada está orientada al disfrute, goce y ejercicio de la diversidad como expresiones de las facetas estáticas (normas escritas) y dinámicas (juego de acciones e interacciones) de los Derechos Humanos en tanto proyectos, potencialidades, deseos, facultades, necesidades, inquietudes, atributos y capacidades de los sujetos. En este marco se trata de una tridimensionalidad de los Derechos Humanos. Por un lado, la prevención de daños, lesiones, sufrimientos y padecimientos de las personas. La idea es anticipatoria con miras a evitar situaciones de discriminación: diferencias estigmatizantes, formas de intolerancia, desconocimiento o no reconocimiento del otro, sus saberes, su historia, su cultura. La persona es un yo y/o un otro en el intercambio, en el respeto, en la comprensión y no un enemigo. Prevenir aquí significa anticiparnos con el fin de impedir o superar el agravamiento de las negatividades y negaciones del yo y del otro en términos de negación de Derechos y Responsabilidades propios y ajenos. Por otro lado, el ejercicio, el disfrute, el reclamo, la exigibilidad de los derechos por parte de las personas que son sus titulares. Cuando hablamos de Derechos Humanos, hablamos del derecho a la vida, a la identidad, al cuidado 188

del propio cuerpo como constitutivo de la personalidad, a opinar, a ser escuchado, a la educación, al juego, al esparcimiento, a la participación, a las expresiones culturales y artísticas, a la información, a la convivencia familiar y comunitaria, entre otros derechos. La nomenclatura de derechos y responsabilidades es abierta e inconclusa. Su dinámica de acciones e interacciones supone la dignidad humana y la libertad como valores imbricados en el sistema de Derechos Humanos. La tercera dimensión está dada por los procesos de recuperación y de reparación, dadas las consecuencias -a menudo irreparables- de los avasallamientos y las negaciones de sus derechos a las personas que son blanco de tales acciones, conductas, comportamientos, actitudes o decisiones. Docentes y referentes La tarea es llevada a cabo por un equipo de trabajo transdisciplinario : docentes, profesores de arte, música, trabajadores sociales, psicomotricistas, recreólogos, especialistas en técnicas artesanales y promotores de lectura. Entendemos por equipo transdisciplinario aquel conformado por “un grupo de profesionales especializados en diferentes áreas que trabajan de forma conjunta interactuando, compartiendo información, conocimientos o habilidades trascendiendo su propio espacio disciplinar. Esta interrelación de especialistas supone una apropiación de saberes como un aprendizaje continuo de los integrantes del equipo gracias al que se logra subir a un nivel en el que las disciplinas se complementan. Cada disciplina se desliza del lugar central para ser ocupada por el tema o problema que reclama el abordaje específico. Nuestra línea de trabajo prioriza que las personas a cargo de los espacios estén formadas para integrar las particularidades de cada persona participante, 189

promoviendo la autonomía y el trabajo con los diferentes grupos a través de lo que denominamos “vínculo estimulante” que es una cualidad de nuestra práctica que consiste en generar relaciones de cercanía y distancia óptimas, interviniendo para crear modos de relación flexibles entre los coordinadores y los participantes, habilitando las preguntas que permitan pensar y construir diversas posibilidades de acción, que permitan generar y estimular un espacio de comunicación y creatividad. Acordamos en nuestros modos de hacer con Jordi Panella en relación con las formas de acercarnos a las personas, a la escucha, a la mirada y a la flexibilidad en la relación con los otros. • APRENDER A ESCUCHAR: aquello más importante para poder escuchar al otro, es empezar a aprender a estar en silencio. Es silenciar nuestras ideas, nuestros recuerdos, nuestras emociones, nuestros consejos, nuestros prejuicios, nuestras convicciones. Escuchar es salir del rol que la vida nos ha dado, el de psicopedagogo, trabajador social, médico, psicólogo, educador social, etc. para intentar recibir al otro en total plenitud, en todas sus dimensiones. Escuchar es desligarse, por lo menos momentáneamente, de todo deseo de cambiar, de consolar, de tomar de la mano la vida del otro. • APRENDER A MIRAR: el otro no es simplemente un "caso" del cual me ocupo. Acompañar es traer una mirada nueva sobre la persona y su historia, es creer totalmente en las potencialidades de la persona, ayudarla a tomar conciencia y a desarrollarse; sea cual sea su estado actual. Es justamente esta mirada que, por efecto de espejo, va a permitir al otro cambiar la imagen que tiene de él mismo. Este planteamiento del acompañamiento como un aprendizaje de una nueva mirada sobre el otro, se centra en la idea de aprender a desaprender, aprender a no saber mirar al otro tal y como lo hemos visto (con todas sus características negativas como rasgos de identidad) tal y como la sociedad ha querido mostrarlo. 190

• DEJARSE TRANSFORMAR POR EL OTRO: dejarse transformar es abrirse a una relación recíproca. Encerrar al otro en el rol de "ayudado" y cerrarnos a nosotros mismos en el rol de "ayudantes" y por lo tanto privar al otro de su capacidad de ser, de ofrecerse para ser útil, es hacerle sentir culpable de ser objeto de demanda de compasión o de intervención socioeducativa. Acompañar es hacer acto de presencia física al lado del otro, cuerpo a cuerpo, espacio vital con espacio vital, para producir un proceso de transformación bidireccional. Contrariamente, dejarse tocar, interpelar, transformar por el otro, es reconocer sus propios límites. Trabajamos en forma de pareja pedagógica (y en tríos y cuartetos también), ya que esa dinámica permite abordar las particularidades y complejidades de cada participante y desdoblar las intervenciones según las necesidades del grupo enriqueciendo la tarea con la pluralidad de miradas. La mayor parte del equipo de La Vereda realiza una formación en Derechos Humanos, que nos brinda diversas herramientas para evaluar las prácticas sociales que se realizan en la institución. Todos los docentes y el equipo profesional de La Vereda tienen una formación en Juego Corporal y Formas de Intervención o en Promoción de la Lectura y la Escritura.

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Agradecimientos A Istvansch por sus palabras para el prólogo de este libro, por visitarnos, por jugar con nosotr@s en La Vereda. A Luciano Perrone por la música. A tod@s los voluntarios que colaboran semana a semana con nosotros. A Mirta Felisa Bokser porque las palabras que fuimos construyendo juntas nos acompañan en la construcción de nuestro proyecto cotidiana. A los autores y autoras que nos inspiran con su arte. A la Red Rioba por tantos años de trabajo en conjunto, con sus alegrías y pesares; y por salir juntos a la calle. A las personas e instituciones que nos ayudan a sostener La Vereda. A Mecenazgo (GCBA) por la concreción de este proyecto. A Pablo F. Pérez por el diseño y la paciencia. A nuestros amores. A nuestros hijos e hijas A nuestros gatos y perros. Y por sobre todas las cosas, a nuestras compañeras y compañeros de La Vereda, con quienes estamos construyendo nuevos modos de hacer juntos. Y otra vez… este libro es para todas y todos los que habitaron y habitan La Vereda.

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Indice PrĂłlogo. Leer en La Vereda . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 5 El barrio de los Artistas Lectores . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 11 El barrio del Taller de Escritores . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 45 El barrio Historias en La Vereda . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 109 El barrio de la Juegoteca. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 139 El barrio del JardĂn . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 149 El barrio del Taller de Arte y Literatura . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 161 Propuestario . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 171 Un poco de historia . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 184 Agradecimientos. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 192

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Caminar x Corrientes avanzando entre la multitud, llegar a Sarmiento, mirar las tortas coloridas de venta callejera y una vez más pensar en probarlas, seguir camino, mirar la entrada de la escuela a ver si sale algún chico conocido... Y entonces encontrarse con la casa de colores y siempre, invariablemente, mirar el balcón, casi como empezando a subir hacia ese lugar que nos recibe y que nos permite otros tiempos, otra disponibilidad para mirar a los demás y a nosotros mismos, jugar, leer, pintar, bailar, meternos en otros mundos, o en este, pero de otro modo. Así nos pasa a los que hicimos este libro. Caminando por la vereda, llegamos un día a La Vereda, y en La Vereda sucede que uno se queda prendado, y después usa los viajes en colectivo, en tren, en auto, la ducha, el desayuno… para inventar el tiempo que no existe para hacer cosas como este libro que tenés en tus manos y que se terminó de imprimir, con mucho esfuerzo y mucho amor, en 2016.

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