cUniversidad Autónoma del Estado de México
Ciudad Sustentable Memoria para el desarrollo interdisciplinario
Lenin Valdés Tarango No.0320521
Ciudad Sustentable Memoria para el desarrollo interdisciplinario Antecedentes I Fundación de la Urbe Todos sabemos o suponemos saber lo que se hacia en otros tiempos, porque en nuestra profesión es básico no olvidar los errores, ni desconocer los grandes aciertos de las culturas anteriores a las culturas modernas. Claro que esta expresión hace referencia a la humanidad en general como si estas llamadas “culturas modernas” representaran algo más que una explosión demográfica. Hacer referencia a este pasado parece trillado, pero tanto en la teoría como en la practica se ha demostrado que los conceptos más básicos de la historia han sido omitidos en más de una ocasión; lo cual se refleja tanto en la arquitectura como en el urbanismo moderno. II Pero así ha trabajado la historia en muchas vertientes que, marcan el paso de la humanidad sobre la tierra; de lo cual la única conclusión que se puede tener es: que la mencionada humanidad ha sido un factor de desequilibrio y depredación. Por lo tanto es muy contradictorio, que en la evolución social, sean los mismos seres humanos quienes buscan la paz como anhelo, y la igualdad como objetivo. Tenemos aun la falsa creencia de que somos el eje de la creación, y por lo tanto nos imponemos la misión de querer construir un futuro, pero siempre con bases confusas, y que no logran amalgamarse con las necesidades de la naturaleza misma. En otros tiempos más que ahora, estaba implícita la naturaleza, la humanidad, más que por conciencia, veía en la naturaleza a su única fuente de vida, y su entorno era considerado el único medio para la supervivencia de la especie. Sin embargo, el avance de sus conocimientos y la creación de necesidades vanas como la riqueza y la posesión de bienes le fueron exigiendo mayores obras de impacto, las cuales tenían un patrón vinculado al poder y la religión. Este dato es muy importante, pues es la raíz de los graves problemas que aun sufrimos en la economía, y en la política; problemas que marcan las diferencias entre las grandes urbes y las localidades marginadas en la pobreza. III Hemos visto grandes civilizaciones al paso de la historia, civilizaciones que fueron logrando cotos de poder y clases privilegiadas. Esto se vio reflejado en grandes ciudades, principalmente las europeas, las cuales enajenaban sus grandes obras como medio de control. Lo vimos en la historia de Grecia, en donde Pericles tuvo la visión clara de proponer un futuro más prometedor, pero sólo para su pueblo; contra los otros sólo se visualizaban invasiones y amenazas de guerra. Fue así como la mayoría de pueblos se fue alejando más y más de sus orígenes, y crearon sistemas que les proveyeran de agua, con lo que crearon centros urbanos que servían como punto de acercamiento y abastecimiento para los viajes largos. Este tipo de asentamientos urbanos son comunes en toda Europa, y continúan siendo poblados dedicados al auto consumo
y al comercio de sus excedentes en zonas cercanas. Pero también existen centros urbanos que sólo nos recuerdan la época de los grandes imperios, los cuales lograron su grandeza a través de las conquistas y de las cuotas impuestas a los pueblos conquistados, en verdad no hay nada admirable en ello, pues en nada difiere con las sociedades actuales; sólo la ciencia y el conocimiento de los científicos de la época valen la pena ser enaltecidos. 2
Memoria de Nuestro Entorno
I Es pésimo comprender que somos fruto del choque de civilizaciones en desigualdad de condiciones, y que aun en nuestros días tengamos que voltear hacia Europa con la finalidad de imitar sus formas y funciones arquitectónicas. Funciones y formas que ahora invaden nuestras ciudades y que nos identifican con algún lugar en ninguna parte. Aun no somos capaces de aceptar que los pueblos indios de América eran superiores a los Europeos, y que su cultura les brindaba beneficios que hoy son lejanos por las condiciones económicas mundiales. El mejor ejemplo que podamos tener para la planeación urbana moderna esta aquí, y por ello se lanza el gran reto a futuro para las Carreras Profesionales de Arquitectura y Urbanismo, porque la solución sólo será real en la medida en que volvamos a planear nuestras ciudades del mismo modo en que se hizo antes. México-Tenochtitlán fue una ciudad impresionante, así lo narra Bernal Díaz del Castillo. Gracias a sus relatos hoy podemos imaginar, al menos, que tal cantidad de hombres trabajando en una misma obra sólo habría sido vista en la edificación del Templo de Salomón. Aquel ejemplo mítico contaba con Acueductos, drenajes, vías de comunicación, centros urbanos, centros comerciales, centros educativos, centros de salud, centros de cultivo para el auto-consumo con sistemas sustentables pasivos. México-Tenochtitlán nada tenia que envidiar a los planes propuestos en la carta de Atenas, aquella mítica ciudad era el sueño de cualquier Urbanista; era simplemente un orgullo y ejemplo de verdadera convivencia con el medio natural en beneficio de la humanidad y nada contrario a la voluntad de la naturaleza. II No existe un dato seguro del lugar de Aztlán pero fue notable que los fundadores de Tenochtitlán tenían un gran conocimiento del tipo de terreno lacustre, y que aprendieron a calcular los tiempos de lluvia, pues estos les eran favorables para la comunicación con otros pueblos que se habían establecido a las orillas del lago de Texcoco. Al sur de la ciudad, el pueblo de Xochimilco logro mantener su tradición en la construcción de chinampas, que les permitían la pesca de Carpa, charal, acocil, etc.. En este lugar aun existen casas lacustres, y trajineras de cultivo, en donde aun se siembran el maíz y las flores típicas de la Zona. Este lugar, estuvo olvidado durante la colonia y el periodo Independiente del siglo XX. Su rescate aun esta en proceso, a lo cual haré referencia oportuna. Lo que si es importante destacar en este momento es que, no se debe olvidar que la conquista de nuestro pueblo no sólo mutilo al Indígena Mexicano de su orgullo y ciencia; sino que le sometió a condiciones ajenas a su idiosincrasia. Se le impuso la carga de vivir para satisfacer a los nuevos amos en medidas mucho más extremas que en la época del Dominio Azteca, ya que ahora tendrían que edificar templos para los españoles, y explotar los metales preciosos para
engrandecer las arcas de un Reinado que ni siquiera supo posicionarse a la altura de Europa. Los indígenas, nunca lograron comprender el valor que le daban los europeos al Oro, nunca supieron para que desecaron su lago, ni para que fundar nuevas ciudades en sitios alejados de las fuentes naturales de agua en condiciones de esclavitud en donde no existía el reconocimiento de su humanidad por cuestiones de raza. Pese a que los aztecas también ejercían influencias y dominio Imperial, las condiciones de vida eran muy diferentes en la época prehispánica, la posesión de tierras era comunitaria, y el trueque les permitía comerciar libremente con otras tribus. El cacao y otros recursos tenían un valor simbólico religioso, y que sólo interesaba a los círculos del poder en turno; pero no eran un punto de referencia para el pueblo en general, su cosmovisión no les imponía ambiciones superiores a lo que su vida cotidiana les exigía. Nosotros hoy podemos definir a la pobreza desde el punto de ruptura de las variables de la economía mundial, pues esta se ve reflejada en la diferencia de tener o no tener un auto, una casa propia, un empleo bien remunerado, educación, salud, etc. Pero para ellos, en esa época, era inimaginable que alguien no tuviera un techo o el sustento Diario, pues para ellos era una bendición Divina. El valor que los Europeos le habían impuesto al oro seria nefasto para nuestros indígenas, pues se vieron obligados a trabajar en la minería, y a fundar Ciudades en localidades inhóspitas con limitantes de comunicación y distribución de recursos como Taxco en Guerrero o las zonas de extracción de cobre en el norte de nuestro país, y que hoy ha dejado la consecuencia de la falta de planes urbanos aplicables a sus comunidades. III Los cambios de la modernidad se remiten a la revolución industrial y por lo tanto a la explotación de recursos naturales en proporciones desmedidas. En México, el caso del petróleo ha traído consecuencias desastrosas para nuestra naturaleza, ya que como país en vías de desarrollo nos hemos visto en la necesidad de ceder recursos naturales a países poderosos, los cuales no sólo nos exigen explotar tales fuentes de energía, sino que nos imponen condiciones para su comercio. ¿Pero que impacto tiene esto en la arquitectura? El impacto esta en todas partes, y muy notablemente en la industria de la construcción, ya que cada vez más se va monopolizando el uso del suelo, y las grandes constructoras aprovechan grandes terrenos que dividen de manera irracional, sin tomar en cuenta los graves problemas a futuro, como lo será la falta de agua potable. Nuestro pueblo que cree vivir en una democracia aun no advierte que la falta de soberanía algún día no nos permitirá negociar en igualdad de condiciones contra las naciones que de manera silenciosa se apoderan de nuestros recursos y reducen nuestras fuentes de empleo. IV La gran mayoría de las zonas habitacionales que hoy tenemos en el centro de la republica son consecuencia del centralismo capitalista, al mismo tiempo que atendieron a intereses creados por los industriales hacia la mitad del siglo XX. Ciudades como Toluca, que vieron crecer su mancha urbana hacia 1986 como consecuencia de la salida de damnificados del terremoto de 1985 en la ciudad de México, son muestra clara de la falta de proyección urbana, con la venia de autoridades corruptas. La zona industrial de Toluca recibió a peligrosas empresas de Fundición y textiles que envenenaron la cuenca del Rió Lerma, lugar que antes proveía de
sustento a la zona y que se extendía con buen cause hasta el lago de Chapala, el cual también esta siendo desecado por la sobre explotación del agua por parte de los municipios Conurbanos de la Ciudad de Guadalajara. La cuenca del Río Lerma fue invadida por clases pobres, que buscaron empleo en la zona, muchos de ellos comprando casas de interés social, otros empleando la autoconstrucción. En ambos casos la negligencia no les permitió advertir que las condiciones naturales no cambian, y que se repiten a través de ciclos. En este año 2006 las lluvias desbordaron al Río Lerma y ocasionaron la perdida de sus patrimonios. Esto deja claro que la planeación urbana y la arquitectura sustentable simplemente no existen en nuestro país o que son limitadas al uso de tecnologías innovadoras para aquellos que pueden pagar por un servicio de investigación y desarrollo de los impactos a corto y mediano plazo. 3 Rescatando a la Ciudad Aristóteles escribió en su libro Metafísica: “En efecto, los hombres de Experiencia saben muy bien que tal cosa existe, pero no saben porque existe; los hombres de Arte, por el contrario conocen el porque y la causa” Tomando esta pequeña premisa haré ahora una alusión crítica de la actualidad, ya que la arquitectura teórica nos exige ser contemporáneos. Hagamos ahora la reflexión de los graves problemas sociales, y de cómo nos han imposibilitado para actuar en los momentos más críticos de un pasado reciente. Recordemos que no siempre se tuvo la idea propositiva expandida en la Bauhaus a iniciativa de Walter Gropius; quien pugnaba por la fusión de ideas en la arquitectura, para lograr resultados más realistas y justificados en el estudio de la ciencia en torno al arte, y a las múltiples disciplinas desarrolladas por el hombre. Hoy el avance de la tecnología nos acerca al futuro a pasos agigantados. La informática, por ejemplo, cambia ahora día con día y los sistemas quedan obsoletos de un año a otro; pero al no tener un alcance directo con esas tecnologías, creemos haber descubierto una panacea con nuestros limitados conocimientos en la arquitectura Bioclimatica y la sustentabilidad de nuestras construcciones. Seamos realistas y analicemos con ojo critico esta moda, veamos claramente a través de la historia y analicemos realmente los avances del ultimo siglo, y nos daremos cuenta que hemos etiquetado de manera equivocada ese concepto de sustentabilidad, ya que lo hemos encasillado con el uso de Artilugios en el proyecto arquitectónico. Concluyamos con honestidad esta dura critica, la sustentabilidad de una casa o de un edificio no se limitan al uso de tecnologías modernas, sino a la aplicación de los múltiples recursos del entorno físico natural y artificial, así como a la capacidad de integrar a la sociedad a través de los espacios arquitectónicos, pues por ello somos impulsores de un arte y no de una técnica, esto dicho por voces propias de arquitectos que nos han mostrado caminos más afortunados. Arquitectos como Teodoro González de León quienes nos insisten mucho en la concepción de la arquitectura como espacio de encuentro y a la inclusión de espacios llamados Patios Urbanos. Pero muy en particular a la ultima aportación propositiva de Mario Schjetnan quien ha participado en el proyecto de rescate de Xochimilco y del Bosque de Chapultepec en donde se incluyeron estudios detallados de Biólogos, sociólogos, y de gente preocupada por el futuro de este Pulmón de la Ciudad de México. Tal proyecto sólo nos demuestra que nunca será
necesario de un gran genio sino de muchos genios capaces de dar mejores resultados, y con experiencia integra de cada tema. Por ello la Memoria para el desarrollo interdisciplinario, es decir, toda la historia de cómo se ha fallado hasta hoy creyendo que el arquitecto esta obligado a proyectar volúmenes y sólo eso... nos haría falta mucho tiempo para analizar las múltiples disciplinas profesionales que nos apoyaran en el proyecto CONCLUSIÓN Finalmente un llamado a los Gobiernos de los Estado para dar certidumbre a esta noble profesión. Ya que es necesario exigir el cumplimiento de las disposiciones legales de la ley general de profesiones para garantizar el ejercicio de las diferentes disciplinas sin la manipulación de mentes ajenas al conocimiento real de los problemas en el llamado desarrollo sustentable de la Sociedad. Lo anterior radicará en la idea más básica que tenemos los seres humanos, también, en el anhelo de aligerar las cargas que nos consumen día a día, ser independientes, autosuficientes; o bien, capaces de hacer de nuestra vida un camino más amplio y con la posibilidad de dar una renovación a lo que hemos creado. Para la arquitectura, la idea de lo sustentable aun no se ha logrado definir, y tiende a caer en situaciones de riesgo, es decir: a ser ignorada por completo. De hecho, la arquitectura como tal esta siendo mecanizada, y en el peor de los casos omitida. Es verdad que no se descubrirá un hilo negro, o que se pueda girar en círculo perfecto para lograr nuevas soluciones a los proyectos; esto lo vemos aun en las aulas a cada día con esa indiferencia por lo esencial, como lo es nuestra propia historia. Hemos dado prioridad a ese más de utopía por lo monumental, por algo que difícilmente un país como el nuestro podrá ofrecer al corto plazo. En cambio se requiere del empleo constante de gente productiva, cuyos conocimientos profesionales aporten soluciones viables y no improvisaciones de mentes ajenas a la proyección Social. Por ello no espero un acuerdo, sino una reflexión sincera acerca del camino de la arquitectura, y de los objetivos que esta pueda tener en la nueva sociedad globalizada, en donde el servicio a la sociedad no es ya siquiera un objetivo de las grandes masas. Pero donde seguramente no faltarán los humanistas que volverán a ejercer la voluntad de crear eso mismo que aun nos une: Pues a decir de los grandes arquitectos: la ciudad se construye casa por casa. Qué la mente no sea un bloque monolítico, sino un camino disperso hacia la concordia con las profesiones que nunca han dejado de aportar grandes avances a la arquitectura. Bibliografía: Mochón, Francisco, Beker, Víctor. "Economía, Principios y Aplicaciones" Mc.Graw Hill 1998 Romero, Aldo Andrés. Ensayo "El Manifiesto Comunista y la Globalización" 1998 Monzón Estrada, A., El calpulli en la organización social de los tenochca, Instituto Nacional Indigenista no. 15, México, 1983. González Aragón,J., La urbanización indígena de la Ciudad de México, El caso del Plano en papel maguey, Ed. Universidad Autónoma Metropolitana Xochimilco, México, 1993. García Canclini Nestor. "Consumidores y Ciudadanos. Conflictos multiculturales de la globalización". México. 1995. Aristóteles, “metafísica”. Impresión española Brosmac. 2001