CECILIA HÉRNANDEZ

Cecilia Hernández García

Cree que el tatuaje es un arte muy profundo, ya que a través de él se puede ayudar a las personas a expresarse tal cual son, un tatuaje siempre va a representar algo al portador, aunque las demás personas lo entiendan o no, siempre va a representar un gusto, una vivencia, un recuerdo y hasta un pensamiento, siempre va a ser algo muy íntimo, así sea una simple línea, hasta una pieza elaborada, un tatuaje siempre llevará la esencia personal y para Cecilia como tatuadora es un honor poder plasmar ese sentimiento o esa idea.

TATTOO Artistas Mexicanos

Por Julia GG Celia Nació en la CDMX el 12 de marzo de 1992. Desde muy pequeña convivió mucho con familiares por parte de su padre que les gustaba el dibujo, y conforme iba creciendo, se dio cuenta que a ella también le gustaba dibujar, con respecto al tatuaje, realmente se inspiró en tatuadores como Mónica Marino, Kelly Dotty, Víctor Chill entre otros. Siempre le han llamado la atención los tatuajes con color.

Nunca fue a una escuela de arte o dibujo, sólo lo hacía por pasatiempo, replicando dibujos que veía y le gustaba como salían de su imaginación, pero nunca se los quedaba, siempre los regalaba a alguien que le gustara su dibujo. Recuerda con nostalgia que su mamá juraba que su hija sería arquitecta, ya que desde siempre le gustaba el dibujo, hacer maquetas, casitas con hojas de papel, y figuras de plastilina como perros o gatos, eran miniaturas y muy detallados para su edad, curiosamente nunca lo fue. Cuando se hizo su primer tatuaje a los 18 años le empezó a llamar mucho la atención, dejar una marca en otra persona de por vida es algo profundo, porque no sólo se le está plasmando un dibujo en la piel, sino que se le deja toda una sensación y experiencia con uno mismo, conforme iba creciendo empezó a investigar sobre el tatuaje y tatuadores de otros estados y países que hacían del tatuaje mucho más que sólo dibujos sencillos, hacían verdadero arte.

No estaba del todo segura de adentrarse en ese mundo del tatto, ya que cuando se hizo su primer tatuaje su padre no lo tomo nada bien y supo que no era de su agrado. En ese entonces sus padres se habían separado y ella vivía solamente con su padre, él le había pagado un curso de estilismo y lo cursó mientras hacía sus exámenes para la universidad, por desgracia no logró quedarse, por esa razón sus primeros trabajos fueron en salones de belleza y spas. A los 21 años tuvo la oportunidad de desarrollarse como manicurista y luego Nail Artist, le gustaba mucho lo que hacía, hacía diseños a mano con pinceles muy finos, sus lienzos eran las uñas. Le gustaba lo que hacía, pero ella seguía con la idea de algún momento poder tatuar, ya que los diseños que hacía en las uñas eran hermosos, pero se los retiraban entre las 3 o 4 semanas para cambiarlo por otro diseño, eso la entristecía, porque se esforzaba demasiado para que fuera algo desechable, ese trabajo ya no la satisfacía como antes, deseaba dejar alguna huella permanente, no pasar desapercibida, y el tatuaje era justo lo que podría lograr hacer eso, por eso tomó la gran decisión de ser una tatuadora. Ha sido un proceso largo, lento y difícil, es todo un reto tanto personal como profesional, pero al mismo tiempo satisfactorio.

Durante un tiempo su madre se fue a vivir con ella, no estaba muy de acuerdo con lo que Cecilia deseaba hacer con su vida, ya que hoy en día muchas personas siguen creyendo en el tabú de que el tatuaje es del género masculino y es para los delincuentes y mal vivientes, pero para Ceci eso no la detuvo y continuó, cuando empezó a tomar un curso para aprender lo básico en el tatuaje.

Se independizo de casa a los 21 años, más tarde cuando ya se sentía completamente preparada para introducirse en el mundo del tatuaje tenía 25 años, estaba más centrada y totalmente convencida de lo que quería hacer, su madre ya vivía con ella y a pesar de que no estaba convencida de lo que Cecilia iba a hacer, no dejo de apoyarla moralmente. Poco a poco se fue haciendo de sus propias cosas para comenzar a tatuar, sabía que era inexperta aún, tenía miedo, pero también muchas ilusiones. Utiliza el seudónimo de Cecis Mitra; Cecis es una modificación que le hicieron cuando estudiaba el bachillerato, Mitra es considerado el Dios del Sol y también significa Luna, una ideología que le gusto bastante, ya que cree en la dualidad del ser, le gusta mucho todo lo místico, no puede haber luz sin oscuridad, día sin noche, ni bien sin mal. Desde que comenzó a trabajar, le ha gustado mucho conectar con las personas, se siente

satisfecha con los logros que tiene hasta ahora, tiene dos oficios, uno como manicurista experta en diseños a mano Alzada y como tatuadora, en ambos siempre ha tratado de hacer lo mejor que puede y de superarse cada día más.

Cree que el tatuaje es un arte muy profundo, ya que a través de él se puede ayudar a las personas a expresarse tal cual son, un tatuaje siempre va a representar algo al portador, aunque las demás personas lo entiendan o no, siempre va a representar un gusto, una vivencia, un recuerdo y hasta un pensamiento, siempre va a ser algo muy íntimo, así sea una simple línea, hasta una pieza elaborada, un tatuaje siempre llevará la esencia personal y para Cecilia como tatuadora es un honor poder plasmar ese sentimiento o esa idea. En lo personal le ha costado mucho trabajo el tema del tatuaje en un ámbito técnico porque es muy completo, el abrir la piel es muy delicado, no se considera la mejor, pero si va acumulando experiencia que de alguna manera puede servirle a alguien que va iniciando y tiene las mismas dudas que ella tuvo anteriormente. Si tiene la oportunidad de ayudar a alguien que va empezando lo hace, porque ella recibió ayuda en sus inicios, tuvo ayuda de compañeros tatuadores más experimentados que tuvo el honor de conocer. Sueña con que algún día llegue a ser excelente como artista, crecer aún más y poder inspirar a personas que quieran iniciar en el mundo del tatuaje, hoy en día es muy común que artistas del diseño gráfico y la ilustración sean tatuadores, va muy de la mano, y sabe de ante mano que muchas personas por cuestiones de la vida no han podido tener la oportunidad de estudiar en una escuela de arte, sin embargo, lo pueden lograr, salir adelante si realmente lo quieren hacer. Sus aspiraciones personales y profesionales son crecer y dar lo mejor de ella misma porque solo de esa manera de disfruta el proceso. El dinero y los bienes materiales son necesarios, pero pasan a segundo plano porque hace lo que le gusta, lo hace bien y con el corazón, todo lo demás viene por añadidura. En la actualidad radica en la CDMX.

“CON LOS OJOS CERRADOS Y LOS SUEÑOS DESPIERTOS”

Es una frase que tiene muy latente en su vida siempre, para ella significa que está viviendo al día, improvisando, dando lo mejor y no sé cómo se acomode mi vida, pero nunca pierdo de vista mis sueños ni mis metas.

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