Contenido Prefacio
3
Primer faro: La confiabilidad de la Palabra de Dios
5
Segundo faro: El poder de la oraciรณn
33
Tercer faro: El testimonio de otros creyentes
51
Cuarto faro: Observaciรณn de las circunstancias
69
Conclusiรณn
89
Prefacio Hace algunos años, leí en un hermoso devocional sobre un lugar semejante al canal de Panamá, pero de dimensiones mucho más pequeñas. Ese canal era una magnífica ruta para las embarcaciones que lo aprovechaban para evitar una enorme vuelta, ahorrando tiempo, dinero, combustible y demás. Era un paso extraordinario, excepto por un pequeño problema. Aunque al parecer el canal era suficientemente ancho para casi cualquier barco, debajo del agua había peligro. Existían formaciones rocosas que a menudo lastimaban los cascos de los navíos, y en ocasiones causaban su hundimiento. Pero con cierta pericia y más suerte que otra cosa, seguía valiendo la pena pasar allí para ahorrar en todos los aspectos. Los lugareños llegaron a una simple solución. Construyeron tres faros como señal
4
LA VOLUNTAD DE DIOS
para los capitanes. Al alinear sus embarcaciones a los tres faros, uno detrás del otro, podían estar seguros de evitar las fatídicas piedras submarinas. Esta ilustración me ha ayudado en mi caminar con Dios, y sobre todo en asuntos relacionados con la búsqueda de Su voluntad. Esos tres faros, y yo agregaría un cuarto, son elementos valiosos que se convierten en pautas o principios para conocer lo que el Señor quiere de nuestra vida. Los cuatro faros son la Palabra de Dios (la Biblia), la oración, el testimonio de creyentes maduros y las circunstancias. Mi intención sincera es ayudar a los lectores de esta obra, con algunos principios relacionados a conocer las intenciones divinas para nuestra vida. A menudo, conocer la voluntad de Dios no resulta ser tan sencillo como parece.
Primer faro:
La confiabilidad de la Palabra de Dios
«Desde tu niñez conoces las Sagradas Escrituras, que pueden darte la sabiduría necesaria para la salvación mediante la fe en Cristo Jesús. Toda la Escritura es inspirada por Dios y útil para enseñar, para reprender, para corregir y para instruir en la justicia, a fin de que el siervo de Dios esté enteramente capacitado para toda buena obra».
2 Timoteo 3:15‑17
Existen algunos elementos que hacen de la Biblia un libro simple y sencillamente único. Es legítimo hacernos la siguiente pregunta: ¿cómo podríamos estar seguros de que estamos llegando a conocer al único Dios verdadero? O, ¿cómo podríamos confiar que los mandamientos que obedecemos y que la Biblia enseña son un auténtico reflejo de la naturaleza y el carácter de Dios? Si queremos disfrutar de los beneficios de conocer a Dios, tenemos que estar bien seguros de que contamos con una Biblia que representa con exactitud lo que Él inspiró a los escritores para hablar en Su nombre. El anhelo del Señor es que lo conozcamos tal como Él es.
10
LA VOLUNTAD DE DIOS
Dios siente tanta pasión por relacionarse con nosotros, que de manera personal y milagrosa dio la inspiración a Su Palabra, supervisó su transmisión y reforzó su confiabilidad, a fin de que todo aquel que tenga los ojos abiertos y el corazón receptivo pueda creer con seguridad y convicción.
El milagro de su preservación. Jesús afirmó: «El cielo y la tierra pasarán, pero mis palabras jamás pasarán» (Mat. 24:35). Dios habló a través de cuarenta seres humanos totalmente diferentes: pastores de ovejas, soldados, profetas, poetas, monarcas, eruditos, políticos, músicos, amos, siervos, cobradores de impuestos y fabricantes de tiendas. A todos los usó soberanamente para hablar a nuestro corazón. Voltaire dijo que cien años después de su muerte, el cristianismo y la Biblia terminarían. Tan solo cincuenta años más tarde, la sociedad bíblica de Génova usó su misma prensa y su
LA CONFIABILIDAD DE LA PALABRA DE DIOS
11
misma casa para editar Biblias. Las naciones pueden haberla rechazado, los tiranos haberla tratado de erradicar, los herejes haber procurado distorsionarla, pero las evidencias de que la Biblia es digna de confianza son poderosamente suficientes. En el año 303 d.C., el emperador Domiciano decretó un edicto para que se destruyera a los cristianos y su libro sagrado, pero 25 años después, el emperador Constantino pidió a Eusebio que editara 50 Biblias a expensas del gobierno. Este libro es como un yunque en el cual han pegado muchos martillos. Pretender parar la circulación de la Biblia será lo mismo que poner tus hombros contra la quemante rueda del sol y tratar de detenerlo. La Biblia fue tomada y transmitida en una época anterior al correo electrónico o a la imprenta. Algunos sugieren que la Biblia está llena de errores y contradicciones. Fue escrita a mano porque no había otra forma de hacerlo. ¿Cómo podemos estar seguros de que no introdujeron alguna clase de error que distorsionara su mensaje y propósito?
12
LA VOLUNTAD DE DIOS
Dios intervino meticulosamente, asegurándose de que Su Palabra llegara hasta nosotros con toda precisión. Él eligió, llamó y cultivó una nación de hombres y mujeres que tomaron muy en serio el libro de la Ley. Ordenó e inculcó en el pueblo judío una gran reverencia por Su Palabra. El Shemá es un claro ejemplo de este principio. Entre los siglos V y III a.C., surgió una clase de eruditos llamados soferim, palabra hebrea que significa escribas. Estos estudiosos se dedicaban a preservar con cuidado los antiguos manuscritos y a producir nuevas copias cuando era necesario. Más tarde, los soferim fueron eclipsados por los escribas talmúdicos quienes vigilaban, interpretaban y comentaban los textos de la Escritura entre los años 110 y 500 d.C. De allí vinieron los escribas masoréticos del año 500 al 900 d.C. El celo de los masoretas sobrepasó a los más dedicados de sus predecesores. Establecieron las siguientes catorce detalladas y estrictas disciplinas en la copia de un manuscrito:
LA CONFIABILIDAD DE LA PALABRA DE DIOS
13
1. El escriba iniciaba su día lavándose ceremonialmente todo el cuerpo. 2. Luego se ponía todo el ropaje judío antes de sentarse en su escritorio. 3. Al escribir, si llegaba al nombre hebreo de Dios, no podía comenzar a escribir el nombre con una pluma recién mojada en tinta por temor a manchar la página. 4. Una vez que comenzaba a escribir el nombre de Dios, no podía interrumpirlo ni distraerse. Aun si un rey entraba en la habitación, el escriba debería ignorarlo hasta terminar de escribir el santo nombre del único Dios verdadero. 5. El rollo debía escribirse en la piel de un animal limpio. 6. Cada piel debía tener un número específico de columnas iguales a través de todo el libro. 7. El largo de cada columna tenía que ser por lo menos de cuarenta líneas y no mayor de sesenta líneas. 8. El ancho de la columna tenía que consistir de exactamente treinta letras.
14
LA VOLUNTAD DE DIOS
9. El espacio de un hilo debía aparecer entre cada consonante. 10. Entre cada sección debía haber un ancho de nueve consonantes. 11. El quinto libro de Moisés (Deuteronomio) tenía que concluir exactamente con una línea entera. 12. Nada, ni la palabra más breve, podía ser copiada de memoria; tenía que ser copiada letra por letra. 13. El escriba debía contar la cantidad de veces que aparecía cada letra del alfabeto en cada libro y compararla con el original. 14. Si se descubría que el manuscrito contenía un solo error, era descartado. Podemos estar confiados en que Dios cuidó cada detalle de Su Palabra para asegurarnos una asombrosa exactitud de su máxima revelación.
LA CONFIABILIDAD DE LA PALABRA DE DIOS
15
Dato impresionante Antes del año 1947, el manuscrito hebreo completo más antiguo databa del año 900 de nuestra era. Pero con el descubrimiento de 223 manuscritos en unas cuevas cerca del Mar Muerto, contamos ahora con manuscritos del Antiguo Testamento fechados alrededor del año 125 a.C., conocidos como los rollos del Mar Muerto. Lo más fascinante es que después de 2000 años se compararon los textos del Mar Muerto con las versiones actuales de la Biblia. Coincidieron en un 96 % del texto, y el otro 4 % se debe a variantes de ortografía. Nada tiene que ver con el claro significado del texto mismo.
El milagro de su unidad A pesar de haber tantos escritores, de diferentes contextos, preparaciones distintas, viviendo no solo en países diferentes, sino en continentes
16
LA VOLUNTAD DE DIOS
diferentes, África, Asia y Europa, tres idiomas distintos, en tiempos de guerra y en tiempos de paz, escrita durante 1500 años, la Biblia guarda una unidad extraordinaria, desde el principio hasta el fin. Muchos de los escritores ni siquiera se conocieron.
El milagro de su poder Una de las cosas más significativas de la Biblia es su poder sobrenatural de cambiar vidas. «Porque la Palabra de Dios es viva y eficaz, y más cortante que toda espada de dos filos; y penetra hasta partir el alma y el espíritu, las coyunturas y los tuétanos, y discierne los pensamientos y las intenciones del corazón» (Heb. 4:12). El mismo apóstol Pablo escribió a Timoteo: «Desde tu niñez conoces las Sagradas Escrituras, que pueden darte la sabiduría necesaria para la salvación mediante la fe en Cristo Jesús» (2 Tim. 3:15). Los cambios generados por el poder dinámico de la Biblia
LA CONFIABILIDAD DE LA PALABRA DE DIOS
son una de las más evidentes razones para afirmar que la Biblia es 100 % confiable.
El milagro de su circulación a) En el año 1804 se habían publicado en el mundo 409 000 000 ejemplares de la Biblia. b) Para el año 1932 ya contaban 1 330 213 815. c) Se ha escrito en 2200 idiomas. No hay otro libro como este.
Un detalle más Es uno de los libros más costosos. La Vulgata Latina de Gutenberg se vendió en más de un millón de dólares. Los rusos vendieron el Código Sinaítico, una de las copias más antiguas de la Biblia, en 510 mil dólares.
17