En la actualidad disponemos de multitud de posibilidades para enseñar, exhibir o compartir nuestras fotografías digitales, y cada una requiere un tamaño y formato de archivo distinto. Vamos a repasar algunas de las más comunes. A) Soportes digitales: Internet, programas de presentaciones y proyectores digitales Por lo general los soportes digitales son de baja resolución, rondando los 72 ppp, y de pequeño tamaño -que suele variar entre 600 píxeles para una foto en Internet a 1.280 píxeles en los proyectores de gama alta-, 8 bits y espacio de color sRGB, aceptando principalmente archivos JPG, por lo que en primer lugar debemos pasar de 16 a 8 bits y reducir el tamaño de nuestra imagen para después convertir a sRGB y exportar como JPG. Imaginemos el caso de la web de fotografía www.fotonatura.org. Esta web especifica que las imágenes deben tener unas dimensiones concretas: “¿Cómo debo preparar 78
una imagen para publicarla en las galerías de Fotonatura.org? Las imágenes publicadas en esta web pueden tener un tamaño máximo de 800 píxeles de lado mayor y un peso máximo de 150 Kbs.” También sabemos que se trata de una web -algo muy obvio en este caso-, por lo que las imágenes deberán ser sRGB y 72 ppp. Ya podemos comenzar a preparar el archivo. Para esto, primero cambiaremos la profundidad de 16 a 8 bits. La foto de la Eos 1Ds Mark II pasará de 96Mb a 48Mb. A continuación procederemos a reducir el tamaño del archivo, asegurándonos de que mantenemos las proporciones y que interpolamos la imagen usando el modo bicúbico nítido -esta nueva opción incluye un algoritmo de foco que mantiene el detalle mientras reduce el número de píxeles-. Nuestra imagen pasará de los 48Mb del archivo con un tamaño de 28x42cm a una resolución de 300, a los 1.22Mb del archivo de 532x800 píxeles a 72 ppp y 8 bits.
Una buena gestión de nuestras imágenes equilibrando los tonos y el color o seleccionando la resolución adecuada, nos ayudará a la hora de generar láminas fotográficas ya sea para su venta al público o para compartir con familiares y amigos
En casa todo dependerá del modelo de impresora. Cada modelo tendrá unas dimensiones máximas de papel, un perfil de color y una resolución nativa diferente. En primer lugar ajustaremos el tamaño y resolución del archivo a las de la impresora. Supongamos que usamos una impresora de chorro de tinta de gama alta con una resolución máxima de 1.440 ppp. En este caso seleccionaremos una resolución múltiplo de ésta para la resolución del archivo, o sea 1.440, 720 ó 360 ppp, según nos permita el tamaño de la imagen. Si la impresora tiene una resolución nativa de 1.200 ppp usaremos 1.200, 600 ó 300 ppp. Ajustaremos la resolución y el tamaño del archivo al mismo tiempo usando un método de interpolación bicúbico suave si necesitamos ampliar y bicúbico nítido si lo reducimos. Para imprimir en casa desde Photoshop podemos dejar el archivo en AdobeRGB y 16 bits, ya que en el panel de impresión podremos ajustar los perfiles de la impresora y seleccionar el tipo de papel. También podemos mantener las capas de ajuste, ya que Photoshop imprimirá la imagen que vemos en pantalla. Si vamos a enviar la foto a un
laboratorio seguiremos los mismos pasos, ajustando el tamaño del documento y la resolución según el tamaño de foto que deseemos y las especificaciones de resolución que nos indique el propio laboratorio. Aquí también deberemos estar atentos al modo de color, ya que muchos laboratorios imprimen usando sRGB. El laboratorio también nos deberá indicar el formato y la profundidad de color, pero por lo general suelen solicitar archivos sin capas de ajuste, guardados como JPG -calidad máxima-, a 8 bits, con una resolución de entre 240 y 360 ppp a tamaño deseado y perfil sRGB. C) Publicaciones En este apartado incluiremos revistas, libros, calendarios, postales, etc. Cualquier aplicación que requiera una impresión offset o rotativa. En este caso debemos seguir de forma rígida las instrucciones de la editorial, que por lo general suelen seguir estándares de pre-impresión. Nos indicarán un tamaño y, salvo que especifiquen lo contrario, deberá ser a 300 ppp, AdobeRGB, 8 bits sin compresión ni capas o canales. Para enviar las fotos a la editorial tendremos dos opciones claras, por e-mail o por correo copiadas en un CD u otro soporte informático.
En el caso de envíos por e-mail lo más lógico sería usar un formato JPG -de calidad máxima- para evitar colapsar el buzón de entrada, pero en caso de enviar un CD o similar, debemos usar el formato TIFF ya que este tipo de archivo, al contrario que los JPGs, no tiene pérdida de información. En algunos casos nos solicitarán archivos CMYK. Éste es el modo de color que se utiliza para generar las planchas de imprenta y para convertir de RGB a CMYK se debe usar una tabla de conversión específica para cada máquina y papel. En la práctica esto ocurre en muy pocas ocasiones y se suele recurrir a las tablas proporcionadas por Photoshop. En España por lo general se usará el perfil Euroscale Coated v2 para papeles estucados y Euroscale Uncoated v2 para los papeles sin estucar. Tabla de tamaños aproximados de archivos de cámaras digitales sin interpolación y tamaños aproximados de visualización (redondeados): sensor 6Mpx 8.2Mpx 10Mpx 12,6Mpx 16.5Mpx
número píxeles 3.000x2.000 3.500x2.350 3.850x2.600 4.350x2.900 5.000x3.350
FORMACIÓN IRIS 2007
FORMACIÓN IRIS 2007
Adobe Digital Negative Converter genera archivos según el estándar DNG para maximizar su compatibilidad con aplicaciones futuras
Hay que tener en cuenta que a falta de una indicación completa del tamaño, el número de píxeles indicará el lado mayor de la imagen, por tanto las dimensiones, en este ejemplo, para un archivo horizontal serían de 800x532 píxeles y las de uno vertical serían de 532x800 píxeles. En el caso de los pases de diapositivas o presentaciones digitales, el número de píxeles del lado mayor sería por lo general de 1.024 y no debería haber una limitación del peso del archivo, por lo demás los pasos a seguir serían los mismos. El siguiente paso sería convertir a sRGB, ya que así el color se visualizará de forma correcta en la web. Para ello seleccionaremos sRGB como perfil de destino usando la “intención” relativa colorimétrica. Nuestro archivo está listo para ser exportado a JPG. Photoshop nos permite exportar de varias formas: guardando como, exportando o específicamente guardando para la web. Esta última opción es muy útil para estos soportes digitales de baja resolución, ya que genera archivos pequeños y optimizados, pudiendo incluso seleccionar el tamaño de archivo a generar. Seleccionamos la opción ARCHIVO>GUARDAR PARA WEB y el formato JPG, a continuación desplegamos el menú de opciones -haciendo clic en la flecha pequeña- y seleccionamos OPTIMIZAR TAMAÑO DE ARCHIVO especificando el tamaño de salida en kb. B) Láminas fotográficas Actualmente hay dos formas de imprimir láminas de nuestras fotografías digitales: en casa usando una impresora o entregándolas a un laboratorio para que ellos realicen el trabajo.
cm. a 300 ppp 25.5x17 29.5x19.5 32.5x22 36.5x24.5 42.5x28.5
Texto y fotos: Enrique Aguirre Aves
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