MEMORIA DEL MINISTERIO DE GUERRA Y MARINA, 1903

MEMORIAS DEL MINISTERIO DE GUERRA Y MARINA Gobierno de Eloy Alfaro 08/08/1903 Armada del Ecuador Luis Pacheco Manya

MEMORIAS DEL MINISTERIO DE GUERRA Y MARINA 1903 Hay muertos gloriosos allรก, en nuestros viejos y callados cementerios; aprendamos la lecciรณn que en sublime silencio nos dan, y, de fijo, sabremos cuรกn dulce y honroso ha sido siempre el morir luchando por la Patria, por la Patria, por su nombre y por su gloria.

A mi Madre, Bertha Fabiola, A mi Padre Luis Gustavo Ejemplos de dignidad

Luis Pacheco Manya

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MEMORIAS DEL MINISTERIO DE GUERRA Y MARINA 1903 INTRODUCCIÓN La historia patria es apasionante, hombres insignes que a través de su lucha por ideales de libertad, ofrendaron su vida, dejando un legado de honor a las futuras generaciones.

Es nuestro deber, mantener encendida la tea cívica, que su luz siga iluminando a nuestras sociedades, que sea el faro que enrumbe nuestros destinos como Nación, que sigamos su ejemplo de honestidad en el manejo de la cosa pública.

Los Valores Morales son inmutables: la honestidad, la honradez, la lealtad, la gratitud, la humildad, la prudencia, el respeto, la responsabilidad, etc. Son parte de nuestra identidad como personas, y nos orientan para actuar en el hogar, en el trabajo, o en cualquier otro ámbito de nuestras vidas. Son una guía para conducirnos de una manera virtuosa, frente a deseos, impulsos, vicios, maldad o vileza, bien sea que estemos solos o en grupo.

Tras una década amarga para el País en general; y, para Fuerzas Armadas específicamente, cuando políticos con traumas y resentimientos sociales alcanzaron el poder, enfilaron su artillería en contra de la gloriosa Institución, arremetieron contra las bases mismas de su organización, de su jerarquía, el honor, la disciplina y la moral del Personal de Tropa y mandos medios.

Socavaron el bien ganado prestigio Institucional, introdujeron la politiquería en los cuarteles y Unidades Militares, la lucha de clases, la predica de los antivalores, fue el “pan de cada día”, llevando a sus miembros a la confrontación, dispersión y desorientación.

Las Fuerzas Armadas fueron ultrajadas, vapuleadas y vilipendiadas. Se desconoció la estructura y canales de mando. Los Mandos Militares fueron desbordados, desarticulados, imposibilitados de actuar y reaccionar. La moral de la tropa afectada, sus miembros divididos, dispersos, desorientados, engañados, confundidos e insensibles; y, lo peor, enfrentados a todo nivel.

Tuvieron tiempo para todo, destruyeron (a vista y paciencia del Alto mando de las Fuerzas Armadas) el monumento a los Héroes del Cenepa, símbolo de gloria de nuestra Generación Victoriosa, para construir un lujoso edificio para la Unión de Naciones Suramericanas (UNASUR), se encargaron de envilecer los altares patrios al designar nuevos “héroes”, unos, de un incidente policial, suscitado el 30 de septiembre de 2010, degradaron lo heroico, al punto de designar héroes, entre otros, al conductor del vehículo que trasladó al ex dictador del interior del Hospital de la Policía Nacional hacia el Palacio Presidencial, así como también un grupo de oportunistas que pescaron a “río revuelto”.

Entregaron sendas condecoraciones a personajes con prontuario delincuencial, designaron a cargos públicos a conocidos ex subversivos, que buscaron venganza, persiguiendo a oficiales militares que tuvieron la desdicha de hacer frente y vencer a los delincuentes, disfrazados de “luchadores sociales”, a los cuales, les indemnizaron con grandes cantidades de dinero, en definitiva, satanizaron a la profesión militar. “…Y es que hablar de lo heroico en naciones cuyo devenir ha estado marcado por sangre a raudales, es hablar de esfuerzos sobrehumanos que van más allá del cumplimiento del deber para llegar hasta el martirio. Se trata, entonces, de un valor moral supremo que a nadie se le ocurre degradarlo confiriendo la aureola heroica a los “hijos de vecina”. Es un

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MEMORIAS DEL MINISTERIO DE GUERRA Y MARINA 1903 rango de entrega altruista que desprecia la conservación de la vida y deja sin funciones al instinto de conservación, y siempre por una causa que no pertenece al interés del héroe, sino al interés de los demás.

Los pueblos que tienen una historia que exhibir, porque la tienen de verdad y no como invento de literatos y cuentistas, destinan como morada postrera de sus héroes a los “panteones” (del griego, morada de los dioses) donde en efecto yacen sus deidades, pues no en vano se llaman también altares de la patria. El Panteón Griego, el Templo de los Héroes Romanos, la Abadía de Westminster en Londres, o el Templete de los Héroes en la Escuela Militar del Ecuador, albergan los restos o las reliquias de estos inmarcesibles esforzados que son una suerte de santos laicos y seglares, tanto como santos propiamente dichos son los virtuosos supremos de cualquier religión.

Al héroe lo califica la posteridad y no la coetaneidad, es decir, el futuro mas no el presente. El héroe por lo general es póstumo y no contemporáneo, por esa misma razón las leyes prohíben, por ridículos, los monumentos a los que todavía están con vida. Y, asimismo, resulta una cursilería aldeana bautizar a las calles, avenidas o plazas públicas con nombres de politicastros sin mérito que todavía visten y calzan.

Todo este argumentario cobra actualidad y vigencia por la pintoresca “Ley de Reconocimiento de Héroes y Heroínas Nacionales” aprobada por la Asamblea Legislativa, y por la operación de su Consejo administrativo encargado de verificar a los postulantes, que en este momento son más de cinco mil que se han inscrito y presentado sus papeles para ser héroes. Igual, ni más ni menos, que cuando mengano, zutano y perencejo aplican y mandan carpeta para una “chamba” en la burocracia del Estado, con salario y remuneración incluidos”.- Marcelo Dotti Almeida.

Luego del fatídico desgobierno de Alianza País, la situación de las Fuerzas Armadas fue calamitosa y deplorable. Se descuidó el fortalecimiento en la capacidad operativa de la Fuerza Terrestre, Naval y Aérea, la moral del personal en su más bajo nivel, la confrontación interna fue evidente, la indisciplina de las tropas, según mi criterio personal, es la peor herencia de estos pseudo comunistas. Los diez años de desgobierno de Alianza País tiene su mayor logro, pasar a la historia como el gobierno más corrupto de la historia ecuatoriana.

A raíz de la entrega de armas de los grupos subversivos (Alfaro Vive Carajo y Sol Rojo) en el gobierno del doctor Rodrigo Borja Cevallos, las Fuerzas Armadas se “durmieron en los laureles”, el Sistema de Inteligencia Militar orientó sus actividades al Frente Externo, olvidándose de los grupos levantados en armas (amenazas internas); mientras tanto, aquellos, reunidos en el Foro de Sao Paulo, los grupos izquierdistas, empezaron a reorganizarse, a estudiar y analizar detenidamente todas las debilidades del personal militar de cada una de las naciones blanco de estos comunistoides. El Régimen cubano de los hermanos Castro, abanderado de los comunistas, logró “reclutar” al ex Teniente Coronel Hugo Chávez Frías, a la sazón, Presidente de Venezuela, para intercambiar asesoramiento político revolucionario, (incluido personal militar de Inteligencia, con fachada de médicos), todo esto, a cambio de petróleo y exportar la revolución a Latinoamérica.

Lastimosamente, la mayoría de las sociedades sudamericanas, no terminan de aprender y siguen sumidas en las “Vías de Desarrollo” y sus pueblos, una vez más, optan por la tendencia de izquierda, aparecen nuevos “mesías”, populistas, demagogos, auto

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MEMORIAS DEL MINISTERIO DE GUERRA Y MARINA 1903 proclamados: Salvadores de la patria, refundadores de nuevas repúblicas, que finalmente terminaron como “vendedores de humo”. Los Kirchner en Argentina, Evo Morales en Bolivia, Inacio Lula Da Silva y Dilma Rouseff en Brasil, Rafael Correa en Ecuador, a este grupo se suma también Daniel Ortega de Nicaragua, en Centro América. Terminaron demostrando su incapacidad e ineptitud para gobernar en beneficio de los más necesitados, mientras todos ellos y sus familiares con grandes sumas de dinero producto de la corrupción rampante por parte de la firma internacional Odebrecht, que entregó millonarias coimas a cambio de jugosos contratos.

Somos nosotros, la generación de los sesenta y setenta, quienes debemos seguir predicando y practicando, aquellos valores éticos y morales que recibimos de herencia de manos de nuestros padres, fortalecidos en nuestros sistemas educativos e instituciones civiles y militares. Es nuestro deber, insisto, traer a la memoria a nuestros héroes verdaderos, aquellos que ofrendaron su vida por la Libertad, por sus ideales de bienestar de nuestros pueblos, que trabajaron con honradez, con honestidad, que desempeñaron cargos públicos con extrema pulcritud, que jamás se enriquecieron de manera fraudulenta, será el mejor legado para esta y las nuevas descendencias.

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MEMORIAS DEL MINISTERIO DE GUERRA Y MARINA 1903 SOBRE EL PERSONAJE: Flavio Evaristo Alfaro Santana Nació en Montecristi el 22 de junio de 1865, se crió con su madre; inició su vida militar en 1883 a los 17 años, figurando en la campaña contra la dictadura del General Ignacio de Vintimilla.

En 1866, militó con su tío Eloy en contra del Presidente José María Plácido Caamaño; en noviembre de este año, con como Capitán Graduado, estaba encargado, con dos hombres más, al extremo del castillo de proa del barco revolucionario, de una ametralladora Gattling.

En 1884, don Eloy le envió, junto con el coronel Fidel Andrade, desde Bahía de Charapotó, junto con la ametralladora, 300 rifles y 40.000 proyectiles; participó a seguida en el combate de Portoviejo contra el Gobernador José Antonio García, que triunfó y el 6 de diciembre en la acción de Jaramijó a bordo del “Alajuela”, tomando parte con sus 71 compañeros en el abordaje del “Huacho”, donde dirigió en el entre puente una compañía volante para disparar por las claraboyas y como reserva para subir a cubierta y apoyar al abordaje; triunfaron los liberales, aunque al tratar de tomarse el barco "9 de julio" del gobierno, el General Reinaldo Flores derrotó a los revolucionarios y Alfaro debió huir en un aferrado a un barril, pues no sabía nadar, luego de incendiar su barco; en esta acción, Flavio, con el Capitán Caravedo, logró casi extinguir el fuego del “Alajuela” en la popa.

Dejó de tomar parte en la política 11 años, hasta que luego de la revolución del 1895, se incorporó al ejército liberal en Guayaquil y estuvo en el combate de Gatazo.

En 1897, estuvo de Jefe Militar de la plaza de Riobamba, allí tomó parte en los graves sucesos de Mayo, disponiendo el confinamiento del Obispo Arsenio Andrade y tomando presos a 16 jesuitas y luego en los sacrilegios del San Felipe, acto en el cual Flavio ordenó a Leopoldo Larrea recogiera las hostias esparcidas por el suelo y se las comiera.

Don Eloy pidió su ascenso a General.

El 9 de mayo de 1898, su tío, don Eloy, lo nombró Comandante de Armas de la provincia de Pichincha. Ese año dirigió en el Congreso las barras de garroteros para apoyar las mociones liberales, eran soldados disfrazados de paisanos, por lo cual el Congreso el 29 de Agosto mandó un acuerdo en donde se protestaba por la actitud de Flavio y se pidió su destitución; don Eloy aceptó en parte los pedidos del Congreso, pero al final nada pasó.

Hay que anotar que entre 1896- 1899 participó en varios combates contra las guerrillas conservadoras; Chambo, Guapante, (17 de agosto 1896), Patate (el 19 a las órdenes de Plaza y contra Costales y García Alcázar), Riobamba, Guangoloma y Chimborazo. En el de Guangoloma (en Cotopaxi, 31 de diciembre 1898), dirigió el ataque y luego del triunfo

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MEMORIAS DEL MINISTERIO DE GUERRA Y MARINA 1903 hizo asesinar a tres prisioneros colombianos. En el de Chimborazo o Sanancajas (23 de enero de 1899) dirigió la Columna Alfaro contra las fuerzas de Sarasti, a las que derrotó.

A fines de 1899, junto con José de Lapierre, formó parte de la comisión que recibió a don Manuel de Jesús Andrade, delegado de los liberales colombianos que vino a pedir ayuda para el triunfo de su causa en su país.

A fines del primer período de gobierno de don Eloy, fue Comisario de Guerra y se le acusó de haber dispuesto dinero de la Caja de Guerra.

En 1901, el General Leonidas Plaza Gutiérrez, lo nombró Ministro de Guerra, y Flavio escogió a Plaza padrino de uno de sus hijos.

En 1903, durante el primer mandato del gobierno Liberal, ostentó el cargo de Ministro de Guerra y Marina. Prohibió la pena de azotes en el Ejército En Junio de 1904, al buscarse candidato oficial para el nuevo período, Flavio fue miembro del “Comité de los Cinco”, que buscaba el futuro Presidente; esto disgustó a Plaza y el sábado 20 de Julio lo destituyó del ministerio; 11 días después Flavio publicó un manifiesto explicando el incidente.

El 1 de Enero de 1906, al producirse el Golpe del Estado del General Eloy Alfaro, su sobrino fue apresado en Quito; el 16 salió en libertad y proclamó la jefatura suprema de su tío. El mismo año fue nombrado diputado por Esmeraldas.

Participó en los trágicos sucesos del 25 de Abril de 1907 contra los universitarios que pedían libertad electoral e hirió allí a Víctor Espíndola Guerra cuando se daba a la fuga.

El 30 de junio de 1907, su tío lo nombró Ministro de Guerra, cargo en el que estuvo hasta 1908. Fue también Jefe de Zona del Guayas, Intendente y Gobernador del Guayas y Presidente del Comité Militar.

En 1911 sonó su nombre para Presidente de la República, tratando de obstaculizar por cualquier medio el triunfo del General Emilio Terán. El historiador Manuel de J. Andrade acusa a Flavio de haber instigado por terceras personas al Coronel Quirola, el asesinato de Terán, en Julio de 1911.

El mismo mes y aliado al Comisario Tamariz, hizo una persecución a garrote contra los simpatizantes de Emilio Estrada impidiendo sus reuniones y amenazando con allanar el domicilio del candidato. A la caída de don Eloy, el 11 de agosto se refugió en una quinta del Ministro Eastman, de Chile; 4 días después sus mismos soldados del Esmeraldas, lo sacaron y Víctor Emilio Estrada lo condujo a Guayaquil, de donde se embarcó para Panamá.

El 22 de Diciembre de 1911, el Coronel Carlos Otoya, viendo como seguro el arribo de Plaza al poder (Estrada había fallecido), por medio del Comandante José Saavedra sedujo a la Policía de Esmeraldas, y proclamó la Jefatura Suprema de Flavio a quien le telegrafiaron pidiendo su inmediato retorno.

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MEMORIAS DEL MINISTERIO DE GUERRA Y MARINA 1903 El 23 de Diciembre, se embarcó y llegó a Esmeraldas el 29 a las 13:00 horas, contando con el apoyo de su tío. Proclamado en Guayaquil Jefe Supremo, el General Pedro Montero quiso aliarse con Flavio.

El 30 de Diciembre, le envió el crucero “Cotopaxi” con buen número de soldados negros.

El 2 de enero de 1912, Flavio se embarcó con 200 hombres desarmados, arribando a Guayaquil el día 5.

Flavio quiso apresar a Montero, pero éste se le adelantó enviando sus 200 hombres a que luchasen en Huigra.

El 7 de Enero, Montero le convenció que aceptara el nombramiento de General de Jefe del Ejército y Director de la Guerra y el 11 salió a campaña con 300 hombres.

Triunfantes las fuerzas del Gobierno en Huigra y Naranjito (en las que Flavio no actuó), don Eloy envió ante Flavio a Ulpiano Páez insinuándole el retiro de las tropas, que éste no aceptó. Dormido sobre los laureles y creído de su triunfo, su secretario Lemus escribe que tenía 30 ayudantes personales, que dormía hasta las nueve de la mañana y que se cometieron numerosos errores de táctica.

El 18 de Enero de 1912, se dio la batalla de Yaguachi dirigida por Flavio contra las de Julio Andrade, su antiguo compañero; Alfaro actuó valientemente, pero tuvo que abandonar la población a través del puente, sin cesar de hacer fuego. Herido de bala en el muslo derecho y muerto su caballo, tomó una canoa rumbo a Guayaquil. En esta ciudad, Montero lo canceló de su cargo de Director de la Guerra, nombrando en su lugar el 19 a don Eloy. Esto trajo consigo el rompimiento entre Flavio y Montero, pues habían acordado no dar ninguna participación al tío.

Flavio ordenó que el batallón “Vargas Torres” al mando de los comandantes .Bustamante y Cortés recibieran a bala a los seguidores del General Plaza, pero volvieron a perder la acción. El 25 se le capturó en Guayaquil y pidió no estar junto a su tío ni a Montero. El día anterior, su casa, ubicada en el tradicional barrio de San Roque en Quito, había sido atacada por los familiares de los heridos en los combates y su efigie quemada en la plaza de la Independencia.

En estos días Plaza mantuvo contactos positivos con Flavio y su esposa. Llegados a Quito los prisioneros, desde Chiriacu, Flavio viajó en el tercer asiento del automóvil, siendo herido en la avenida 24 de Mayo de una pedrada en la frente. Al producirse el asalto al Penal, como su celda era la única que tenía candado, fue la última en abrirse.

El 29 de Enero de 1912, a medio día, una vez practicada la autopsia dice "...con las vísceras despedazadas, con solo la cara (sin cerebro), y todo el cuerpo carbonizado, con excepción de los pies". Su viuda acusó al general Leónidas Plaza de ser el autor de la muerte de su esposo, ante los Congresos de 1912 -13,1916 y 1919.

Fuente: Fernando Jurado, "Los Alfaro en Ecuador y España: 1510 -1982", en SAG, Publicación # 1, Quito, 1983. Foto: Archivo MDC

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MEMORIAS DEL MINISTERIO DE GUERRA Y MARINA 1903 MEMORIA DEL MINISTERIO DE GUERRA Y MARINA

Flavio Alfaro Señores Legisladores: En momentos tan solemnes como éstos, nada más grato y honroso para mí que justificar, una vez más, no sólo con palabras sino con hechos este axioma de ciencias políticas: En la República democrática y efectiva, las armas de la Nación con todo el esplendor y prepotencia de ellas, se inclinan ante la majestad del Poder Legislativo.

En cumplimiento de un deber constitucional, vengo á rendir cuenta de todos los actos pertinentes al ramo de Guerra y á pediros también ciertas reformas, sin las cuales es imposible comunicar impulso al progreso encarnado en gran parte en la mejor organización pública de las fuerzas sociales, esto es, en la del Ejército Nacional.

Ante todo demos gracias por el señorío de la paz en toda la República, en la primera mitad de la Administración constitucional del Sr. General D. Leónidas Plaza G., paz que, mal que pese á los enemigos del Gobierno más liberal que ha reunido la República, continuará inalterable hasta el último día de la Administración, de la cual tengo á mucha honra formar parte esencial.

Mucho han hecho y hacen los enemigos sistemáticos por trastornar el orden público á poder, habrían ya dado en tierra con el actual Gobierno, para levantar sobre sus ruinas el trono de la irresponsabilidad absoluta y del Terror teocrático. Pero todos los conatos del egoísmo insaciable y la ambición desenfrenada se han estrellado y se estrellarán contra la lealtad de un ejército cuya disciplina aumenta cada día; ejército que se mueve y. marcha á donde le mandan sus superiores, no ya como antes, por el horror que le inspiraba el patíbulo y el azote; sino por convicción; porque está penetrado de que así el Gobierno como todas las clases sociales,—salvo las excepciones que nunca faltan,—están vivamente" empeñadas en conservar la hermosa paz de que disfrutamos; gracias á la cordura y liberalidad del Jefe Estado y á los hábitos dé trabajo del pueblo, hábitos que le

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MEMORIAS DEL MINISTERIO DE GUERRA Y MARINA 1903 ponen en el caso de ver y oír con desdén, ó con la risa en los labios, los movimientos estratégicos y las pláticas cotidianas de los enemigos del orden.

Costumbre ha sido entre nosotros aseverar ante todos los Congresos que jamás el Ecuador ha tenido un Ejército más bizarro, más valiente, más bien pagado, disciplinado y correcto que el actual. Me apropiara estas palabras porque corresponden á la verdad del hecho; pero, por lo mismo que tengo á honra ser parte de este Ejército, dejo á la imparcialidad la crítica sobre la fuerza armada de la República.

Comandancias Generales Continúan funcionando activamente las tres que fueron restablecidas por Decreto Legislativo anterior; y el celo é interés con que las dirigen sus respectivos Comandantes Generales, son en alto grado recomendables, pues que contribuyen poderosamente á que las labores del Ministerio de mi dependencia no sean estériles y produzcan los resultados que, sin tan eficaz cooperación, vendrían á ser de dilatado provecho. Por los informes correspondientes que cada uno de dichos funcionarios ha llevado á este Despacho, en cumplimiento de las disposiciones dadas al efecto, os impondréis de su estado relativamente satisfactorio.

Comandancias de Armas.

Solo subsisten dos en la provincia del Carchi y Chimborazo, creada esta última por Decreto Ejecutivo del 22 de Abril del presente año (1903), á consecuencia de que en esta vasta provincia venían sucediéndose con frecuencia desórdenes sociales de carácter grave. Fué, pues, forzoso el establecimiento de una Comandancia de Armas en dicha provincia para que, de acuerdo con el Sr. Gobernador de ella, pusiera especial cuidado en cortar ese cáncer, ese estado de inseguridad y alarma. La pacificación de la provincia manifiesta lo oportuno y acertado de la medida adoptada por el Gobierno.

Prestan buenos servicios las oficinas militares nombradas; y el Ejecutivo no considera oportuno prescindir de ellas, como lo hizo suprimiendo las de Imbabura y El Oro, por Decretos de 22 de Abril y 23 de Mayo último (1903), respectivamente.

Ejército Quisiera presentaros el cuadro más completo de nuestra milicia, de modo que llegaseis á conocer desde lo más pequeño y oculto hasta lo más grande y ostensible de ella.

Empero, si á pesar de mis esfuerzos este Informe no corresponde á mis anhelos ni á vuestros deseos, os pido vuestra ilustrada indulgencia para con las oficinas de mi dependencia y para el infrascrito.

Aguerrido, disciplinado, moral, rápido en su movimiento, leal,—muy leal á la causa dé la libertad incontrastable en el cumplimiento de sus deberes, es hoy nuestro Ejército.

Sabe que él es el guardián de la paz interna y de la integridad del territorio nacional; que en él tiene confianza plena el Gobierno y la sociedad, interesados en la conservación del orden y la tranquilidad pública, y está pronto á combatir y vencer al enemigo donde quiera que se presente. Vanos son y serán, por tanto, los conatos y tentativas de revuelta de los enemigos de las instituciones liberales.

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MEMORIAS DEL MINISTERIO DE GUERRA Y MARINA 1903 Por Decreto Ejecutivo de 6 de Noviembre de 1902, fué elevado á la categoría de Cuerpo de Línea, bajo la denominación de Batallón "Azuay" No. 90, el que hasta entonces se conocía con el nombre de Batallón "Anda é Infante"; pues sus importantes servicios á la Patria, desde el año 95 (1895), le hicieron acreedor á esta distinción.

El lugar de su acantonamiento es la plaza de Cuenca, donde se instruye convenientemente bajo la dirección de buenos oficiales salidos de la Escuela de Clases, y cuida del orden en el importante Distrito del Azuay.

A fin de mejorar el servicio público y dar mayor incremento á la institución militar, el Decreto Ejecutivo de 9 de Febrero del presente año, creó anexo al Colegio Militar un Escuadrón de Caballería, denominado "Escuadrón Escolta'', con la dotación respectiva, en armonía con la Ley Orgánica Militar, formando la Plana Mayor un Jefe de la clase de Sargento Mayor y el número necesario de Oficiales, Ayudantes del expresado Establecimiento.

Como no hubiese en el país elementos apropiados y suficientes, y fuera necesario formar el citado Escuadrón, de modo que sirviese de modelo para organizar debidamente el arma de Caballería, encomendó el Gobierno á nuestro Encargado de Negocios en Chile la adquisición de caballos adiestrados, con armamento, municiones, vestuario y equipo correspondientes. Mediante sus gestiones el pedido se obtuvo sin dificultad alguna; y los expresados elementos fueron despachados y llegaron á la Capital, sin más novedad que la pérdida de un bagaje muerto en el tránsito de Guayaquil al lugar de su destino.

Necesidades del servicio han hecho que algunas guarniciones de diversas plazas fuesen cambiadas. Tal sucedió con los Batallones de Línea № 40 "Quito" y № 50 "Alajuela", pasando el primero á acantonarse en Riobamba y el segundo en Ambato, lugar del cual partió últimamente á Guayaquil. El Batallón №. 20 "Guayas", después de haber permanecido en la frontera Sur, mientras existía el Cordón Sanitario, mandado á establecer por Decreto Ejecutivo de 11 de Mayo anterior (1902), para evitar la invasión de la peste bubónica, de la cual se presentaron algunos casos en la vecina República del Perú, recibió orden de trasladarse á Ambato, plaza en la que actualmente se halla acantonado: á ese respecto debo deciros, que como la formación del Cordón en referencia demandaba el concurso de tropa competente, fué preciso aumentar el pie de fuerza del № 20 en la provincia de El Oro y del №. 8 "Vargas Torres", en la de Loja, con individuos dé las Guardias Nacionales respectivas, quienes con patriotismo y abnegación recomendables se prestaron solícitos y entusiastas al primer llamamiento que les hizo el Gobierno, retirándose al cabo á sus trabajos particulares, por disposición del Ministerio del Ramo, tan pronto como se hubo declarado disuelto el citado Cordón. La presteza é interés con que los soldados de la Reserva acudieron á incorporarse en el Ejército activo, apenas se presentó un peligro, revelan en alto grado el patriotismo ferviente de que están animados, y el Gobierno tiene seguridad de que sus servicios serán valiosos y significativos en cualesquiera emergencia.

Con anterioridad fueron llamados al servicio activo dos piquetes de la Guardia Nacional para que guarneciesen las provincias de Los Ríos y El Oro, pero en la actualidad sólo existe uno en la última provincia nombrad pues el de aquella hubo necesidad de eliminarlo, enviando en su lugar un destacamento de Línea de la Guarnición de Guayaquil, porque así lo requería el mejor servicio. Dejo constancia de todos estos hechos, á riesgo de cansar vuestra atención, únicamente en mérito de la claridad y detalle

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MEMORIAS DEL MINISTERIO DE GUERRA Y MARINA 1903 que debe prevalecer en mi Informe, para que os deis exacta cuenta de la prolija manera como he procedido en orden á la Administración de los Ramos correspondientes á este negociado.

Instrucción Militar.

En todas las naciones del Globo los Gobernantes han dedicado, y dedican aún, especial y preferente empeño á la enseñanza científica y. organización de sus respectivas fuerzas militares, á fin de que éstas adquieran la mayor suma de perfectibilidad tanto en las lecciones teóricas cuanto en la instrucción práctica: sólo así aquéllas se hacen fuertes y por ende respetables. En nuestro país, su primer Magistrado no ha desatendido en manera alguna tan importante obra, consagrándose por el contrario, con decidido afán, á que el Ejército adquiera conocimientos capaces de ponerlo en situación de competir ventajosamente con otro cualquiera extraño. El Ministerio de mi cargo ha secundado con esmero las levantadas miras del Jefe del Estado; y me es satisfactorio anunciaros que, debido á su acción eficaz y buena voluntad, así como á las aptitudes de las Autoridades subalternas, la República cuenta con excelentes tropas, las cuales abundan en espíritu militar y gallardía, llevando con honra y orgullo el uniforme de la clase á que pertenecen.

Una emulación laudable contribuye poderosamente al adelanto; en breve nuestro Ejército llegará por su entusiasmo al máximum del perfeccionamiento: la buena índole del soldado ecuatoriano y predisposición innata á las fatigas y contrastes de la vida militar, facilitan en gran manera la realización de cualquier esfuerzo que tienda á mejorarlo. No he omitido medio para obtener más tarde tan magnífico resultado; y confío en que, con perseverancia y firmeza, se logrará vencer cual cualquier obstáculo que surgiere. Cuanto á la moralidad que debe prevalecer en los Institutos Militares, para que las buenas costumbres se establezcan de una manera formal, he dictado cuantas disposiciones he estimado convenientes, procurando á todo trance que no quede sin sanción la menor falta ora en el orden público, ora en el orden privado. De ahí la serie de Consejos de Guerra y Consejos de Disciplina que se han instruido en su mayor parte, á iniciativa de este Ministerio, sin dejar de hacer constar desde luego que el Sr. General Comandante General del Distrito de Guayaquil, ha procedido en estos asuntos á impulso propio, con muy recomendare celo. En suma, se ha emprendido una campaña vigorosa contra todos los vicios de que ha solido adolecer, por desgracia, la clase militar, desterrándolos casi por completo. Ahora el soldado no es el azote de la sociedad; es su garantía. No se le mira ya con horror y recelo, con miedo y repugnancia; sino que se le ve bajo un aspecto simpático y obtiene las consideraciones y aprecio aún de las más elevadas clases sociales. Está, pues, establecida en su verdadera acepción la carrera militar y es timbre de orgullo ceñir espada y cargar fusil.

Para la instrucción de la tropa destinada al servicio de Caballería fue preciso contratar, por el órgano del Ministerio de Relaciones Exteriores y en la República de Chile, un Alférez y dos Sargentos de la susodicha arma con el sueldo mensual de doscientos sucres el primero y noventa sucres cada uno de los segundos. Estos últimos se hallan cumpliendo lo preceptuado en los respectivos contratos que corren insertos en el "Registro Oficial", de 3 de Febrero del año en curso, № 413; al primero se le ha cancelado su contrato por estimarlo así conveniente. Las dificultades consiguientes á la implantación de un nuevo Instituto Militar con sus elementos completos, impidieron que se inaugurase á raíz de la llegada de los materiales.

Fué menester primero poner en buenas condiciones la quinta de "San José", situada en el Ejido Norte de la ciudad, la misma que el Sr. D. Gualberto Pérez, á quien pertenece, la

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MEMORIAS DEL MINISTERIO DE GUERRA Y MARINA 1903 cedió en arrendamiento al Gobierno por la suma de ciento cincuenta sucres mensuales, para que sirviese de cuartel al ya mencionado Escuadrón. El Gobierno que no cuenta con local adecuado, vióse en la necesidad de arrendar al efecto lía expresada quinta, cele brando el Ministerio de mi dependencia con el propietario un contrato legal, por escritura pública, que se halla impreso en el No. 474 de el "Registro Oficial", correspondiente al 20 de Abril de este año (1903), por el cual se estipula, entre otras cosas, que la duración del arrendamiento será de tres años forzosos para ambas partes. A propósito de esto y vista la conveniencia de que aquella quinta pase á ser propiedad del Estado, á fin de que no se grave erogando sumas ingentes en su arreglo y conservación, os indico, si es posible, votéis la cantidad necesaria á su adquisición, facultando al Despacho de mi cargo para los efectos consiguientes.

Necesidades del Ejército Aumentan día á día en razón de los precios elevados que incesantemente adquieren los artículos de uso indispensable; y los haberes que la magnanimidad del Estado ha concedido á sus defensores leales, apenas si bastan á, satisfacerlas. Sin embargo, existe un espíritu de conformidad que pone de relieve la buena índole de la tropa; y á vuestra sabiduría y justicia corresponde, Señores Representantes, premiar esa virtud en la forma que estiméis conveniente. Por medio de enérgicas disposiciones, según podéis ver en la Sección de Circulares de este Despacho, se ha logrado extirpar la inveterada y odiosa costumbre de hacer descuentos á los soldados, con el ostensible fin de proveerles de ropa y otros útiles para su uso particular. El Estado les costea vestuario, morriones, botas, etc., etc.; de modo que se tuvo no sólo por innecesaria sino excesivamente perjudicial aquella costumbre, pues daba margen á que se tentase la codicia y se cometiesen actos indecorosos y ruines. A los almacenes de la Nación, aunque modestamente, no han carecido nunca de artículos para uso del Ejército; y á medida de los pedidos elevados por los respectivos. Jefes, cada Cuerpo ha obtenido la provisión correspondiente. En Guayaquil compró el Gobierno una cantidad considerable de piezas de "Tela de África", las cuales en su mayor parte han sido distribuidas proporcionalmente entre los Cuerpos de la República, lo mismo que cerca de doscientas docenas de frazadas extranjeras de algodón, adquiridas también en la susodicha plaza. El Despacho de mi dependencia celebró varios contratos con distintos empresarios de reconocida honorabilidad, para que trabajasen uniformes de casimir, morriones y botas, contratos que se llevaron á debido efecto y se hallan publicados, en el orden correspondiente, en varios números de "El Registro Oficial".

De tiempos atrás se hacía sentir la necesidad de que, por lo menos, uno de los cuerpos de Artillería, estuviese montado y equipado convenientemente, de modo que su movilización fuese rápida y no presentase dificultad alguna en un momento dado. A virtud de estas consideraciones, se dispuso, con anuencia del Jefe del Estado, la compra de bestias mulares, las cuales, adiestradas ya, prestan inmensos servicios á la Brigada de Artillería "Bolívar'', que cuenta además con los correspondientes materiales y se halla en buen pie para cualquier evento.

Reparaciones de Cuarteles, Parques e Institutos Militares En la Ley de Presupuestos que actualmente rige, votasteis la cantidad de cuarenta y tres mil sucres, dividida en varias partidas, adscritas á distintos Ministerios, para refacciones de los edificios Militares que sostiene el Estado. Los Departamentos

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MEMORIAS DEL MINISTERIO DE GUERRA Y MARINA 1903 respectivos os darán cuenta detallada de la inversión de dicha cantidad. Por mi parte, me limito á relatar las sumas que se han gastado en las referidas obras, mediante la intervención de mi Despacho, no sin manifestaros que en ellas está incluida la de ocho mil sucres que consta en el art. 331 dé la indicada ley.

Son, pues, en la forma siguiente: Cuartel de la Brigada de Artillería "Sucre" $, 9.395,80 Cuartel de la Brigada de Artillería "Bolívar" .

569,00 Reparaciones en el tren de la Artillería "Esmeraldas" 152,15 Cuartel del Batallón № 1 o "Vencedores" 1.146,50 Cuartel del Batallón № 2 o, que en la actualidad está ocupado por el № 5° ''Alhajuela" ……………………

2.550,60 Castillo de las Cruces .

1.221,70 Cuartel del Batallón № 3 o "Pichincha", en la compra de materiales para el aparato gimnástico . ..

2.450,00 Cuartel del Batallón № 61, acantonado en Portoviejo…………..

3.000,00 Parque Militar de Quito ......

918,95 Parque Militar de Guayaquil…

669,60 Parque Militar de Cuenca 210,00 Parque Militar del Batallón № 61, acantonado en Portoviejo..

131,90 Hospital Militar de Guayaquil 2.513,90 Colocación de un Teléfono en el Cuartel de Cuenca ………………..

6,50 Compra de mobiliario para la Comandancia de Armas de El Oro………….

48,00 Útiles para el Cuartel de Máchala………………………………………………

6,40 Reparaciones de una casa para cuartel en la Concepción (Esmeraldas) ..

14,50 Suman

$ 22.580,00

Como podéis ver, se ha empleado menos de la mitad de la cantidad votada; porque las Cajas de los cuerpos han erogado también sumas considerables para no gravar más al Erario Nacional. De allí el que, en la Capital, los locales donde se alojan la Brigada de Artillería "Bolívar", Batallón № 3 o de Línea "Pichincha" y ''Guardia de Honor" № 6 o de Línea, han alcanzado notables mejoras, merced á la actividad é interés desplegados por sus Jefes. Los soldados gozan de relativas comodidades para vivir como se debe, y. en las correspondientes cuadras se nota esmerado aseo. Todavía falta mucho que hacer; pero abrigo la confianza de que todas las obras se llevarán a cabo. Sea estala ocasión de pediros que en la nueva Ley de Presupuestos que vais á dictar, señaláis al Ministerio de mi cargo las cantidades que deban emplearse en las obras militares; pues me parece más propio adscribirlas al ramo de Guerra, á fin de que haya mayor facilidad, menos confusión cuando se trate de disponer de ellas. En Tulcán, sólo con fondos de la Caja del Batallón № 7 o de Línea "Carchi", se está levantando un cuartel magnífico, y lo propio sucede en Portoviejo, en donde la diligencia del Señor Gobernador de la provincia de Manabí y el entusiasmo del primer Jefe del Cuerpo se han hecho ostensibles de manera satisfactoria.

En Riobamba también se han hecho reparaciones con fondos votados anteriormente, en la casa que ocupa el Batallón № 4 o de Línea, "Quito", por lo cual se paga arriendo, en virtud de que pertenece á otra institución ajena á la milicia.

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MEMORIAS DEL MINISTERIO DE GUERRA Y MARINA 1903 Los Parques Militares que en las Capitales de los Distritos funcionan en los Cuarteles, á falta de locales propios, han sido reparados en algún tanto y provistos de útiles, según os impondréis por los respectivos informes.

Las refacciones en el Colegio Militar, así como la adquisición de algunos útiles para su servicio, incluidas monturas para aumentar la dotación de las compradas en Chile, han demandado un gasto de cinco mil trescientos sucres y cincuenta y un centavos, en el cual está comprendido demás la instalación de cincuenta focos incandescentes de luz eléctrica, alumbrado que se consideró de inaplazable necesidad, consultando la economía á la vez que la utilidad.

En la Escuela de Clases se ha invertido así mismo la suma de dos mil cuatrocientos noventa sucres once centavos; y en el cuartel del ''Escuadrón Escolta", la de dos mil veintiún sucres diez centavos, comprendiéndose las pensiones que, á contar del quince de Marzo, se han pagado por arriendos hasta el treinta de Junio. Estas sumas no constan en las primeramente mencionadas; y también os pido que en la próxima Ley, apliquéis al ramo de Guerra las que para los expresados Institutos tengáis á bien determinar. Además de los bagajes venidos de Chile para el personal del Escuadrón antedicho, se compraron caballos nacionales.

Para conservar dominio y posesión en el terreno que en Guayaquil ocupaba el antiguo Castillo de las Cruces, cuya propiedad han pretendido atribuirse los particulares, este Ministerio facultó á la primera autoridad civil del Guayas, á efecto de que mandase construir una cerca, para resguardo de la ramada, depósito del carbón de piedra perteneciente al Estado. El susodicho terreno puede ser ventajosamente utilizado por el Gobierno, para la construcción de un edificio cómodo, destinado á la creación de la Escuela Naval, tan importante, tan útil, que no dudo será objeto de vuestras atenciones preferentes.

Marina.

Puesto que tenemos una Costa vasta y rica y un grupo de islas interesantes, fuente de riqueza inmensa, aún no explotada, debéis crear arbitrios para la adquisición de dos buques de guerra por lo menos. Estos buques podrían servir al comercio de Cabotaje, evitar el contrabando en la Costa y facilitar la corriente de colonización del Archipiélago de Galápagos ó Colón. Por otra parte, es ya forzoso abrir nuevas carreras profesionales á la juventud estudiosa y resuelta á ensanchar la esfera de la actividad del pueblo ecuatoriano. Tenemos soldados, pero no Marinos. Por razones de política previsora y económica, fuerza es crear la Marina Nacional, mediante la correspondiente instrucción en el arte, dada por instructores idóneos contratados por el Gobierno. Si para ello fuere necesario algún sacrificio, ¿por qué vacilar en consumarlo, puesta la mira en la necesidad de tener una Armada aunque sea pequeña, y en el porvenir? Por esto juzgo que, de conformidad con el Decreto Legislativo sancionado en 24 de Octubre de 1900, restableciendo la Escuela Naval en Guayaquil, debéis votar la suma necesaria de dinero para convertir en hecho la espectativa de la Escuela mencionada.

El Crucero "Cotopaxi", única nave, si se quiere, que tiene el Gobierno, no llena todas las necesidades que se presentan, sufre continuos desperfectos, los cuales aunque se reparan al instante, no por eso dejan de entorpecer el servicio marítimo. Gracias á la solicitud y recomendable cooperación del Sr. Gobernador del Guayas, son menores los daños que resultan de aquellos desperfectos, pues sin pérdida de tiempo suele dictar

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MEMORIAS DEL MINISTERIO DE GUERRA Y MARINA 1903 medidas convenientes, las que puntualmente observadas ponen al buque en estado de servicio.

Consideraciones económicas motivaron la reducción del personal de nuestro crucero, la cual fué dictada por Acuerdo Presidencial de 5 de Mayo del año en curso (1903); mas las necesidades del servicio hicieron que últimamente se aumentase la dotación con nueve empleados subalternos.

El vapor correo "Jaramijó" y el pontón "Comandante José Marcos", cuyos destinos son, respectivamente, conducir la valija de Guayaquil á Babahoyo y viceversa, y servir de depósito del carbón de piedra que adquiere la Nación, han sido objeto de algunas reparaciones poco costosas. La tripulación del segundo ha quedado notablemente disminuida, pues no era necesario conservar la que al principio tuviera.

Desde mediados del año próximo pasado hasta la fecha en que se auto rizó al señor Gobernador del Guayas para que mandase reparar nuestros barcos, se han gastado cerca de cuatro mil sucres.

Parques Sin embargo de que los nuestros se hallan suficientemente provistos de elementos bélicos el Gobierno no ha descuidado la adquisición de mayor número; y al efecto hizo pedidos al Exterior, que pronto llegarán. Para mantener un deber sagrado, tener la paz interna y asegurar la defensa Nacional no se omiten medios.

El Gobierno se afana porque el país permanezca tranquilo y su confianza repose en las providencias que se dicten.

A la casa “Fontaine-Besson" de París, se pidieron cornetas y tambores, cuyo costo ascendió á diez mil quinientos sesenta y dos francos.

Hospitales Militares Decreto Ejecutivo de 11 de Diciembre de 1902, se expidió un Reglamento de Sanidad Militar para la costa, el cual puntualmente observado, ha impedido algún tanto que los individuos del Ejército poblasen los Hospitales como sucedía antes.

Desde luego, esto no quiere decir que pase por alto la necesidad que tienen dichos Establecimientos de ser atendidos con preferencia por el actual Congreso, En obsequio de justicia Señores Legisladores, dictad disposiciones oportunas, que coloquen á los Hospitales Militares en situación ventajosa, para que sirvan en verdad de refugio á los soldados enfermos. Hales provisto el Gobierno de lo más indispensable; pero eso no basta, porque son edificios que no reúnen condiciones higiénicas, capaces de llenar el fin á que están destinados. Los informes al respecto de las autoridades subalternas os darán á conocer al detalle cuanto acabo de expresaros.

Guardias Nacionales Todo ecuatoriano, sin excepción, puesto que todo privilegio injusto es inconstitucional; todo ecuatoriano debe ser soldado dentro de ciertos límites de edad. La reforma sobre el

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MEMORIAS DEL MINISTERIO DE GUERRA Y MARINA 1903 personal de la Fuerza Armada debe consistir, en mi opinión, en esto: Abolición de la Guardias Nacionales; Ley de Conscripción, ley á cuya virtud ningún ecuatoriano eluda el cumplimiento de no sólo político sino social: prepararse á defenderla Patria.

El cuartel, ya lo he dicho, debe ser la continuación de la Escuela primera, Escuela segunda para la juventud armada. En el cuartel se educará: teórica y prácticamente, comprenderá lo que son deber, disciplina moral y militar, familia y patria. En el cuartel adquirirá hábitos de orden y moralidad, de aseo é higiene en general.

En el cuartel debe llegar á comprender que la libertad individual, la santidad del hogar con todos sus goces, no están asegurados si la Patria no está constituida sólidamente, de modo que nadie pueda atentar impunemente contra, la independencia, soberanía é integridad de ella.

Por la Patria, tomad en consideración el proyecto al respecto, presentado do el año próximo pasado y reproducido en esta Memoria.

Será necesario que demuestre los inconvenientes é injusticias que acarrea la Ley de Guardias Nacionales?. El día domingo debe ser consagrado únicamente al descanso. Los ejercicios doctrinales de las susodichas Guardias viene á hacer odioso el día de solaz y recreo. Qué provecho sacan el Estado, el Ejército de esos ejercicios? Ninguno; por el contrario el fastidio de los milicianas engendra al fin el aborrecimiento á la noble carrera de las armas.

Las exenciones no sirven sino para volver más odioso el servicio militar; en tanto que un pobre artesano no puede libertarse de ese yugo, porque no tiene con qué pagar el precio de la boleta de exención; el peón ó concierto se libra de ser guardia nacional y soldado, porque el patrón lo redime para esclavizarlo: lo exime del servicio militar, pero lo sepulta por vida en la hacienda ó el obraje. En caso de un conflicto internacional ¿serviría para soldado ese concierto cuya patria es el fundo de su amo?

Capitanías de Puertos.

La última Legislatura, por Decreto de 22 de Agosto (2002), creó la de Salinas con su correspondiente dotación. Se encuentra funcionando, provista de los elementos necesarios, y presta buenos servicios al Estado. Las necesidades consiguientes motivaron la compra de una chalupa con sus accesorios.

Faros y Boyas.

De conformidad con el Decreto que expedisteis el año pasado (2002), en orden á reparaciones de que habían menester tan importantes construcciones, diéronse las disposiciones convenientes á efecto de que el Sr. Gobernador Guayas las mandase llevar á cabo; y, por Acuerdos Presidenciales de Mayo 19 y 20 del presente año (2003), se votaron varias cantidades para dichas obras. Las reparaciones del Faro de Santa Elena importan setecientos noventa y dos sucres cincuenta centavos; y se han mandado practicar las más indispensables. Según aviso oficial, recibido últimamente, el dicho Faro ha obtenido las reparaciones del caso y se encuentra funcionando á satisfacción. Los Faros de Punta Española, Data, Santa Clara, Punta Mandinga é Isla de la Plata son atendidos, para la correspondiente reparación, con la suma de dos mil seiscientos tres

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MEMORIAS DEL MINISTERIO DE GUERRA Y MARINA 1903 sucres cincuenta y siete centavos, votada proporcionalmente en el decurso del año actual.

El Faro de Puerto Bolívar no ha necesitado reparaciones. Para la construcción de un edificio que sirva al de Esmeraldas, está pendiente una propuesta del Sr. Francisco Velasco, la cual, aunque aprobada por la Junta de Hacienda de esa Provincia, no ha sido sancionada aún por el Ejecutivo, á causa de que el contratista pide fondos adelantados sin garantía alguna, siendo así que á ello se opone el Decreto Legislativo de 4 de Octubre de 1900.

El Faro de Punta Arenas necesita cambiarse á otro lugar distinto del que en la actualidad se encuentra; y para ello se ha ordenado al Gobernador del Guayas mande formular el respectivo presupuesto.

Por Acuerdo No. 1.265, de 4 de Setiembre de 1902, se facultó al mismo funcionario para que, por medio de una casa comercial de Guayaquil, pidiese á Europa los artículos necesarios al buen servicio de los Faros y Fanales de la República, de conformidad con la nómina presentada por el Capitán del Puerto de Guayaquil. Dichos artículos han llegado ya; su costo asciende á tres mil seiscientos noventa y ocho sucres noventa y cuatro centavos, y en la hora presente se efectúan las reparaciones necesarias.

Institutos de Enseñanza Militar.

El Curso Extraordinario de Aspirantes á Oficiales que, en armonía con el respectivo Decreto Ejecutivo, terminó en Noviembre del año próximo pasado (2002), después de rendido satisfactorio examen, dio al Ejército un selecto y numeroso contingente de Oficiales, quienes, distribuidos proporcionalmente entre, los Cuerpos de Línea, enseñan, con ventaja el arte de Guerra, de acuerdo con las modernas innovaciones adoptadas generalmente. Oportuno es deciros, como las Tácticas y Reglamentos que aun se hallan vigentes, no reúnen de ninguna manera las condiciones necesarias para la instrucción, atendidos los últimos progresos de la ciencia militar, los nuevos inventos de armamento y la índole de nuestros soldados, el Departamento que dirijo ha juzgado conveniente reformarlos; y en este sentido se hacen trabajos y estudios que en breve darán por resultado la promulgación de textos adecuados a la enseñanza iniciada. Así mismo, está en preparación un Reglamento de Uniformes, ya que el dictado el año 88 (1888), necesita modificarse.

El buen éxito obtenido en el Curso antes mencionado y el deseo de propender al adelanto de la clase militar, presentándole vasto campo á su legítimo anhelo, originó la creación del Curso de Aplicación para Oficiales, dictando al efecto el Poder Ejecutivo, en fecha 13 de Noviembre de 1902, el correspondiente Decreto.

Estimular, abrir amplios senderos á las aspiraciones de una clase que es la honra y esperanza de la Patria; alzar el velo de la ignorancia descubriendo á sus ojos magníficos é ilimitados horizontes, alumbrados por los resplandores de la ciencia, son obligaciones gratísimas que los gobiernos inspirados en ideas libérrimas, ideas de civilización, cumplen con decidido empeño. Es un timbre de justo orgullo para el actual Gobernante el hecho de haber puesto en práctica toda clase de medios, á fin de que la milicia se levante, se dignifique, se ennoblezca.

Los jóvenes soldados del porvenir, aquellos que por su contracción al estudio y obtuvieren los premios designados en el Decreto en cuestión, en día no lejano, al

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MEMORIAS DEL MINISTERIO DE GUERRA Y MARINA 1903 ofrecerse á la Patria el concurso de sus luces y conocimientos, ya sea en azarosas campañas defendiendo la integridad nacional, ya sea iniciando en la ciencia de la Guerra á contingentes noveles, darán testimonio evidente de la elevación de espíritu que ha informado los actos del Régimen Liberal.

La Escuela de Clases, funciona anexa al Colegio Militar, tanto porque su local está ocupado por los Oficiales alumnos del Curso de Aplicación, cuanto porque su personal no es muy numeroso, y la enseñanza se facilita más en compañía de los Cadetes de aquel Establecimiento. Os di cuenta ya de los trabajos y refacciones ejecutados en ambos institutos. Hállanse éstos bajo la dirección de caracterizados Jefes Nacionales, á quienes secundan con eficacia é interés los competentes militares del Ejército de Chile, que el Gobierno contrató para la instrucción del nuestro.

Letras de Montepío.

La carrera militar, si brillante y simpática, no es lucrativa. Tan escasa la renta, que con ella jamás puede enriquecerse el soldado, ni siquiera salir á las comodidades de la vida. A pesar de lo exiguo de esa renta, la Ley, en previsión dé la orfandad de la familia, descuenta de aquella un tanto por ciento para que quede en depósito en Tesorería, para restituirlo á los herederos legítimos del defensor de la Patria, después de los días de éste.

El Montepío Militar es, pues, uno de los derechos más sagrados de la familia del que consagró la vida á la conservación de la paz y la soberanía nacional. Por esto el Supremo Gobierno cumple religiosamente la obligación de restituir ese depósito sagrado á los deudos del militar difunto, que tienen letras de Montepío.

El Gobierno las ha conferido á las personas agraciadas, de conformidad con los decretos que al respecto se han expedido y en la actualidad gozan de pensión del Erario.

Constan sus nombres en el correspondiente anexo, así como los de aquellas que han obtenido tales cédulas en el año corriente, de acuerdo con las prescripciones de la Ley de la materia. Para concederlas, un espíritu de justicia, extraño á las opiniones partidaristas, ha inspirado al Ejecutivo, siendo atendidas cuantas solicitudes se elevaron por intermedio del Departamento del ramo. El mérito de los servicios militares lo reconoce la Administración Liberal, como quiera que ellos revelan sacrificios inmensos en aras de la Patria y una existencia fatigosa de luchas y abnegación por darle gloria y bienestar. Los errores desaparecen; los actos que han merecido reprobación se olvidan, y sólo quedan á la vista seres desvalidos á quienes orfandad é indigencia aniquilan!

Inválidos Los cuadros respectivos os ponen de manifiesto el personal de los inválidos y la renta que disfruta cada uno de ellos.

No sólo por conmiseración, sino en obsequio de la justicia es de necesidad urgente darles un cuartel á los del depósito de Quito; ojalá se pudiera hacer lo mismo en Guayaquil y Cuenca, para lo cual debéis señalar en la Ley de Gastos la cantidad necesaria para la compra de casas adecuadas.

A la consideración del Congreso presentó este Ministerio un Proyecto de Ley sobre Inválidos, Proyecto que no llegó á discutirse.

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MEMORIAS DEL MINISTERIO DE GUERRA Y MARINA 1903 Las necesidades de estos militares, dignos de consideración, y las contradicciones de la Ley vigente sobre la materia, reclaman imperiosamente vuestra atención sobre este Proyecto.

Proyectos de Ley Orgánica Militar, Código Penal Militar, Ley de Reclutas y Reemplazos.

Someto nuevamente á vuestras concienzudas é ilustradas deliberaciones los Proyectos de Ley que encabezan este aparte. Acaso su extensión y las múltiples atenciones que os ocuparon en las secciones anteriores, fueron causa de que sólo uno de ellos alcanzase una discusión. Se impone como necesidad de vital importancia para el Ejército la sanción de esas Leyes; y por cuanto os considero animados de los mejores sentimientos hacia los defensores armados de la Nación, me permito insistir ante vosotros, pidiendo, una vez más, les deis la aprobación debida.

Sea cual fuere la fuente ó el modelo de nuestro Código Militar, ello es que en todas sus partes lleva imprimida la marca de la imperfección, y en lo penal la de infamia del soldado.

Soy de opinión que; de acuerdo con las enseñanzas de la ciencia, se debe codificar toda la Legislación Militar, formando un Tratado de ella, dividido en varias secciones ó Códigos: Código de Organización y Régimen Militares, Código Penal Militar y Código Adjetivo ó de procederes en asunto militar. En el primer departamento del Tratado deberían refundirse, depuradas de vicios añejos y vivificadas por las ciencias políticas y económicas, todas las Leyes sobre Letras de Invalidez, de Retiro, de Montepío, etc., etc.

Urgente es la necesidad de la reforma de la Legislación Militar: y repito, debéis apresuraros á crear, por decirlo así, Códigos Militares en armonía con los principios de la ciencia, y puesta la mira en nuestro estado económico y político, y en la evolución por la cual va pasando nuestra comunidad social.

Las circunstancias excepcionales en que nos encontramos; lo vastísimo é inculto del territorio nacional; la necesidad de dar nuevo rumbo á las clases trabajadoras del Ecuador; la de colonizar nuestra Región Oriental y el Archipiélago de Colón; la de asegurar la soberanía é independencia de la República por medio de las armas y el trabajo enlazados armoniosamente, nos ponen en el caso, no de adoptar tal ó cual Legislación Militar, propia de países que rebozan en población y que no tienen una pulgada de tierra de propiedad nacional; sino en el de darnos Códigos Militares calcados, como digo, sobre les principios de la ciencia social y económica y muy para el efecto de fecundizar y afianzar, con el trabajo y el crédito ecuatorianos, nuestros inmensos territorios del dominio de la Nación.

Si por ventura asuntos importantes de otro orden empiecen que os dediquéis á sancionarlos, cúmpleme proponeros concedáis al Ejecutivo las facultades que paso á enumerar: 1ra. Reformar, en el término de un año, las Ordenanzas Militares y las Leyes que les son anexas, así como introducir los cambios y modificaciones que estime convenientes en la organización, procedimientos y diversos servicios del Ejército;

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MEMORIAS DEL MINISTERIO DE GUERRA Y MARINA 1903 2da. Hacer las reformas necesarias en los diversos servicios de los ramos de Guerra, aplicando el importe de los gastos que exijan esas reformas á las varias partidas de las secciones correspondientes del Presupuesto de Egresos, debiendo dar cuenta al Congreso de 1904 del uso que hubiere hecho de las facultades que se le confieran.

Ley de Letras de Retiro.

Es indispensable fijar definitivamente la situación de los que consagran la vida al servicio dé la Patria; sacrificando su porvenir y el de la familia en bien de la comunidad.

Suprimidas éstas del modo más inconsulto é injustísimo, en vano se ha venido reclamando ante los Congresos anteriores 'la restitución ó restablecimiento de estas pensiones militares, fundadas en largos años de servicios prestados por el abnegado militar á la Patria.

Consagrar lo más florido y vigoroso de la existencia humana al servicio militar, para verse en la vejez ó en caso de enfermedad larga y penosa, relegado al olvido, entregado á las garras de la miseria, es cuadro desgarrador, vergüenza para la Nación. ¡Qué estímulo puede tener la juventud que se consagra al servicio de las armas, si sabe que el día menos esperado la injusticia le deniega lo que otorgan equidad y decoro nacional! Por estas y otras razones que no se os ocultan, espero que restableceréis el imperio de la justicia, reconociendo la vigencia de las letras de Retiro desde la fecha de un nuevo reconocimiento de estas Cédulas, indispensables en la milicia.

Pena de azotes En conformidad de lo que ya expresé, tal castigo,—mengua y baldón de la dignidad humana,—en mala hora inventada por la crueldad, el odio y el desprecio hacia los hombres, consignado se halla en el Código Militar vigente. Las terminantes prohibiciones de la Constitución, no lograron desterrar del todo de los Cuarteles esa pena oprobiosa, vil, degradante; y mientras los demás ciudadanos se hallaban en pleno goce de las garantías individuales que aquella otorga, el soldado infeliz, víctima de las brutalidades unas veces, de la venganza otras, era azotado bárbaramente, gemía desesperado en contorsiones horribles, se anegaba en su propia sangre infamemente vertida, y quedaba condenado á llevar una marca indeleble de afrenta é ignominia. Tal situación no podía tolerarse; y tan luego como llegó á conocimiento de este Ministerio la continuación de esa infamia aterrante, que volvía al soldado de peor condición que los demás hombres, se dictaron severas y enérgicas disposiciones prohibiendo en absoluto castigos crueles y en especial la pena de azotes. La Circular expedida al efecto se halla inserta entre los documentos anexos, y durante tres días consecutivos fué pública para conocimiento del Ejército, por medio de la respectiva Orden General.

Con satisfacción os digo: el buen éxito coronó el propósito, pero no basta eso, hay que extirpar por completo de nuestras leyes esa pena infamatoria, arrojando al fuego si es preciso las páginas donde está escrita. En los Anales de la Historia consta que por mano del verdugo fueron quemados los Reglamentos de la Inquisición, donde; para eterna vergüenza de sus fundadores, estaban consignadas las horrorosas penas con que el catolicismo castigaba á todo ser humana que se apartaba de sus creencias. Lo propio debe hacerse con las páginas á que me refiero.

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MEMORIAS DEL MINISTERIO DE GUERRA Y MARINA 1903 Causas Militares.

A fin de mantener latente en el Ejército el espíritu de disciplina, moralidad y subordinación, fué necesario, indispensable insinuar á las Autoridades Militares subalternas la conveniencia de que se instruyesen algunos procesos contra los militares sindicados de faltas en el servicio, y aún de crímenes y delitos. La sanción debida se ha aplicado á quienes resultaron culpables; y, según la magnitud de la infracción de ley, unos cumplen su condena en la Penitenciaría, otros en las cárceles y algunos en los cuarteles.

Norma de mi conducta: respetar y hacer que se respete la Constitución, de modo que todas sus prescripciones sean fielmente observadas He sido inflexible en cuanto á no permitir que uno sólo de los derechos en ella escritos sea conculcado, así como en procurar que todas las obligaciones sean cumplidas. Ningún individuo del Ejército, acusado de faltas, ha escapado á la acción de la justicia militar ó de la justicia civil, por leyes que hubiesen sido las cometidas. En la Sección correspondiente va anexo un cuadro demostrativo de todas las causas militares que se han seguido hasta la fecha.

Cadetes Ecuatorianos en Chile.

El Gobierno de aquella República concedió al nuestro cinco becas en la Escuela Militar de Santiago. Habiendo sido declaradas vacantes, en virtud de que dos jóvenes ecuatorianos que las ocupaban, pasaron á prestar sus servicios en el Ejército Chileno, por merecida promoción en premio de sus distinguidos conocimientos y aptitudes, y con el objeto de que completasen la instrucción práctica en los cuerpos de Línea, el Jefe del Estado acordó fueran á llenarlas otros tantos Cadetes, quienes habían comenzado su aprendizaje en el Colegio Militar de esta Capital. Consta en la presente Memoria la relación nominal de dichos Cadetes: antes de partir á la indicada Nación, celebraron el contrato respectivo con el Gobierno por medio de este Ministerio. En el Presupuesto no hay partida alguna determinada para el sostenimiento de aquéllos en Chile, razón por la cual, os pido, votéis la suma de tres mil sucres, adscribiéndola al Ministerio de Guerra.

Como el Gobierno se propone solicitar, además, dos becas en un Establecimiento de veterinaria, á fin de enviar dos oficiales de Caballería que se consagren especialmente al estudio práctico de las enfermedades, curación, etc., etc., de la raza caballar, convendría votaseis de la misma manera la suma de mil quinientos sucres.

Conclusión.

A serme posible, una página este Informe: concisión y precisión, prendas de documentos públicos. Mas el que tiene de dar cuenta de todos sus actos en el desempeño de un Negociado público, no puede ni debe sacrificar claridad y explicaciones en aras del laconismo.

Os he manifestado también las necesidades del Ejército, la de crear la Marina Nacional, etc.; como también os he propuesto las reformas que reclama nuestra Legislación Militar, vaciada en moldes ya rotos por la civilización moderna.

Respetuoso con todas las clases sociales el Ejército; y sin embargo, cierta fracción de la prensa, de algún tiempo á esta parte, viene hiriéndole sin motivo. En el desenvolvimiento de la vida social y en la organización de los Poderes Políticos hay un punto luminoso, fuera del alcance de toda jurisdicción: este punto es la libertad de la prensa, de que tanto viene abusándose, si va del Poder Ejecutivo. Los Gobiernos que

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MEMORIAS DEL MINISTERIO DE GUERRA Y MARINA 1903 tienen á honra volver efectiva, la República democrática no temen la crítica, tampoco la censura acre, ni aún la injuria y la calumnia. Para la primera, respeto; para la segunda, desdén; para la difamación en cualquier forma, desprecio: tal ha sido y es la norma del Gobierno y por tanto del Ejército: rinde el culto más completo á la susodicha libertad. Más todavía: ha dado las espaldas á la licencia, y perdonado los extravíos de la prensa.

Parece que hubiese habido vasto plan de conspiración para volcar al Gobierno, por medio de las publicaciones más contumeliosas contra el Presidente de la República y su Administración; la cordura empero, el buen juicio y la resolución irrevocable del Gobierno, fuerte por la lealtad del Ejército, castigan con la indiferencia provocaciones y amenazas de la oposición insustancial.

Feliz este Ministerio, si á virtud de sus insinuaciones patrióticas, contribuyera á la regeneración de la República, social y políticamente hablando, por obra de la educación é instrucción del Ejército, de todos los ecuatorianos, puesto que todos, dentro de ciertos límites, debemos ser soldados.

De vosotros depende esta regeneración: dad leyes científicas, ó facultad al Ejecutivo para que reforme las Ordenanzas Militares, y mereceréis bien de la Patria.

Señores Legisladores Flavio E. ALFARO, Quito, Agosto 8 de 1903.

Nota.- Se conserva la ortografía original de la época

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