ENERO-FEBRERO
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Contenido3
HAY QUE CREERLE A DIOS
Dios tiene una influencia permanente en nuestra vida.
ZACARÍAS CAPÍTULO 5 La mujer dentro de la Epha.
PREGUNTAS Y RESPUESTAS EL ABOGADO DE LA VERDAD No. 35 Vol.2 ENE - FEB 2017 Publicado bimestralmente por la IGLESIA DE DIOS Apostólica del 7mo. Día, A.R., en la República Mexicana, con sede mundial en Salem, W. Va. U.S.A., desde Enero de 1989. Registro Constitutivo Secretaría de Gobernación SGAR/428/93 R.F.C. IDA931029GK2 e-mail: informes@iglesiadediosapostolica.org
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El Abogado de la Verdad
¿Por qué no debemos enojarnos con quienes nos hacen mal?
HERENCIA
¿Los hijos pagarán por los padres?
UNÁNIMES ENTRE NOSOTROS La iglesia debe estar unida.
NUESTRA REDENCIÓN El Plan perfecto de Dios.
LA IGLESIA ALREDEDOR DEL MUNDO Tabasco, México.
LA ENFERMEDAD DE LA DESOBEDIENCIA
¿Has contraído esta enfermedad?
PREGUNTAS Y RESPUESTAS
¿Cuál es la diferencia entre ser manso y ser orgulloso?
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“LOS cielos cuentan la gloria de Dios, y la expansión denuncia la obra de sus manos. El un día emite palabra al otro día, y la una noche á la otra noche declara sabiduría. No hay dicho, ni palabras, ni es oída su voz. Por toda la tierra salió su hilo, y al cabo del mundo sus palabras. En ellos puso tabernáculo para el sol. Y él, como un novio que sale de su tálamo, alégrase cual gigante para correr el camino. Del un cabo de los cielos es su salida, y su giro hasta la extremidad de ellos: y no hay quien se esconda de su calor. La ley de Jehová es perfecta, que vuelve el alma: El testimonio de Jehová, fiel, que hace sabio al pequeño”. Salmo 19:1-7
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Por: Luis Alberto Mora
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uchas veces decimos que creemos en Dios, pero ¿en verdad lo hacemos? En la actualidad ya hemos olvidado que Dios tiene una influencia permanente en todo lo que pasa en nuestra vida. Por ejemplo: las enfermedades ¿de dónde vienen? En Juan 5:14 aprendemos que el pecado es la razón de que las enfermedades vengan sobre los hombres. La palabra de Dios nos enseña que si obedecemos ninguna enfermedad nos dañará. (Éxodo 15:26; Deuteronomio 7:15). Pero ¡no lo creemos! Antes buscamos excusas o justificaciones ante lo que nos sucede. Sabemos que lo que Dios habla no cambia (Malaquías 3:6-7), si nos apartamos de sus mandamientos o estatutos, vendrán consecuencias terribles; pero si nos arrepentimos, vemos que también Él tiene misericordia.
tentar justificarnos, pero meditemos ¿habrá alguien como Job en este tiempo? Tal vez sí o no, sólo Dios lo sabe. Se dice de él que era perfecto, recto, temeroso de Dios y apartado de todo mal. Dios había bendecido mucho a este hombre ( Job 1:10). Podemos ver cómo Satán no puede tocar a un hijo de Dios, porque Dios lo protege en todo aspecto. Sin embargo, Dios permitió que Job fuera probado para demostrar lo fiel que era ante Él. Si alguna vez en nuestra vida padecemos alguna enfermedad, no busquemos justificarnos usando ejemplos como los que acabamos de ver, no digamos “todo es para que se manifieste la gloria de Dios” o “todos somos como Job”. Mejor reconozcamos nuestra imperfección y quitemos el pecado que hay en nosotros, así en verdad se manifestará la gloria y misericordia de Dios.
Cuando queremos justificarnos ante las posibles enfermedades que vienen sobre nosotros, referimos lo que Jesús hizo con el hombre que nació ciego, pero olvidamos que Jesús lo sanó para que se manifestaran las obras de Dios, ya que este hombre había nacido así. ( Juan 9:3).
Existen otros motivos por los que viene las enfermedades, pero en cualquier circunstancia debemos meditar en la palabra de Dios, mostrando fe y agradeciendo todo lo que nos pueda pasar. Como cuando estamos en pruebas, debemos confiar para fortalecernos espiritualmente.
La mayoría de las veces, cuando vienen a nosotros enfermedades, es porque hemos cometido alguna falta delante de Dios; por eso cuando Jesús sanaba, decía: “vete y no peque más”. Es decir, que si pecaban otra vez, regresaría la enfermedad con mayor fuerza.
Procuremos siempre que las enfermedades que podamos sufrir no sean a causa de nuestra desobediencia; más bien que si nuestra fe es probada, resultemos fortalecidos en nuestro espíritu y fe. Así que pidamos a Dios sabiduría para no caer en el error, su palabra siempre se cumple y esta no cambia.
También tomamos el ejemplo de Job para in-
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Capítulo 5
La Mujer Dentro de la Epha P o r : M o i s é s To r r e s
ZACARIAS 5:5-11 “Y salió aquel ángel que hablaba conmigo, y díjome: Alza ahora tus ojos, y mira qué es esto que sale. Y dije: ¿Qué es? Y él dijo: Este es un epha que sale. Además dijo: Este es el ojo de ellos en toda la tierra. Y he aquí, traían un talento de plomo, y una mujer estaba asentada en medio de aquel epha. Y él dijo: Esta es la Maldad; y echóla dentro del epha, y echó la masa de plomo en su boca. Alcé luego mis ojos, y miré, y he aquí dos mujeres que salían, y traían viento en sus alas, y tenían alas como de cigüeña, y alzaron el epha entre la tierra y los cielos. Y dije al ángel que hablaba conmigo: ¿A dónde llevan el epha? Y él me respondió: Para que le sea edificada casa en tierra de Shinar: y será asentado y puesto allá sobre su asiento. El “Epha” o cesto, es una medida antigua, era la medida más grande en capacidad para granos. En la actualidad esta medida equivaldría a una medida de 37 litros. la palabra Epha, del hebreo, quiere decir canasta o cesto. El epha era la medida internacional utilizada para el comercio internacional entre ciudades y naciones, así como hoy se usan los furgones de los trenes, las cajas de los transportes de carga, o los contenedores en los barcos, que son usados como medida internacional de comercio. Siendo pues el epha la mediad internacional más grande para medir granos entre los hebreos, el Señor la usó para indicarle al pueblo, que así de grande era la maldad acumulada en Israel en esos días. Cuando el Señor le dice: “Este es el ojo de ellos” les daba a entender que su único interés estaba puesto en ese epha, en ese cesto lleno de granos que representaba una ganancia comercial o material, mas de Dios na4
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die quería saber. En otras versiones, la frase: “este es el ojo de ellos en toda la tierra” es traducida como: esta es la iniquidad de ellos en toda la tierra. Esta vez vemos que en lugar de granos, el Señor echó en el Epha a una mujer cuyo nombre era MALDAD, y selló ese cesto con una tapa de plomo (un material aislante). El Señor la echó en el cesto como quien “pone la basura en su lugar, para después deshacerse de ella”. El sello o tapa con que tapó el cesto significa que una maldad de tal magnitud tenía que ser recogida y erradicada completamente del pueblo; para que la gente justa pudiera vivir sobre la tierra. ¿A dónde mandó el Señor que fuera depositado ese cesto lleno de maldad? Lo mandó a la tierra de Shinar donde le sería edificada casa, y allí sería puesto sobre su asiento u origen de donde había venido tal maldad. Probablemente el simbolismo de las alas de cigüeña fue usado porque en esos días este tipo de aves cruzaban a lo largo del Jordán yendo hacia el norte, hacia la región de Babilonia. Shinar fue el nombre antiguo donde se localizaban las ciudades de Babel, Erech, Accad, y Calneh. La mujer llamada MALDAD fue llevada o regresada a su lugar de origen que es Babilonia, y allí le sería edificada casa donde esperaría su castigo o destrucción. A esta maldad no le correspondía vivir en tierra de Israel, así que fue recogida y llevada como basura a su lugar de origen de donde había venido. Esta visión simboliza que la tierra de Israel tenía que quedar limpia de maldad para que pudiese ser reconstruido el templo o habitación de Dios, y la ciudad de Jerusalén y sus muros. De esta manera la gente moraría en un ambiente de paz, seguridad y
justicia. Esto fue en los días de Josué y de Zorobabel, de Esdras y Nehemías. De igual manera, en este tiempo, el mundo tiene que ser limpiado de la maldad y basura de Babilonia, para que pueda ser establecido el reino de Cristo de mil años, y para que su templo, o tabernáculo de Dios, venga a morar con el hombre. (Revelación 21:3). La religión mercenaria simbolizada aquí por la mujer echada en el epha es practicada al cien por ciento en nuestros días. La manipulación de los sistemas monetarios globales, el capitalismo, el impulso del movimiento del dinero, la globalización basada en derechos adquiridos de sistemas desiguales de comercio a nivel mundial, con aranceles e impuestos convenencieros, etc. TODO, ABSOLUTAMENTE, está planeado con base en la mentira y el hurto anunciados en la visión del “rollo que volaba”. La industria y las finanzas se han convertido en el dios de este mundo que está lleno de corporaciones que ejercen contabilidades engañosas y ventajosas, que se enriquecen con las deudas de los países más pobres. El mundo está hoy metido en la práctica de esta religión mercenaria, y el Señor Jesucristo dijo abiertamente: “NO PUEDES SERVIR A DOS SEÑORES, no puedes servir a Dios y a Mammón, el dios mercenario. Las grandes industrias, los emporios, y grandes comercios; los grandes consorcios y corporaciones, se
han enriquecido a base de una competencia desleal; pues establecen reglamentos que van obligando a las gentes a COMPRAR Y VENDER bajo las condiciones de una hegemonía establecida y ventajosa (Revelación 13:15-17). Este es el estado deplorable y sucio de esta religión deplorable, mercenaria, y antigua que ha hecho su reaparición en nuestros días con todo su poder y en todo el mundo. El término competencia está desapareciendo poco a poco del ejercicio llamado “comprar y vender”, porque la geopolítica mundial actual está estableciendo una hegemonía en el sistema financiero mundial y de comercio, que está abriendo el camino para el establecimiento de UN GOBIERNO MUNDIAL. Esta religión mercenaria llena de maldad sigue siendo representada por una mujer, la cual también tendrá que ser recogida del mundo como basura, puesta en un cesto, y regresada a su lugar de origen. Revelación 17:5, nos dice el nombre de esta mujer: “Misterio, Babilonia la Grande, la madre de las fornicaciones y de las abominaciones de la tierra”. Esta mujer llamada por Zacarías MALDAD, y por Juan, BABILONIA LA GRANDE, ya ha sido juzgada por el Señor, y sólo espera su destrucción, cuando sea quemada como basura. “Y otro ángel le siguió, diciendo: Ha caído, ha caído Babilonia, aquella grande ciudad, porque ella ha dado á beber á todas las naciones del vino del furor de su fornicación”. (Leer Revelación capítulo 18).
Preguntas y
Respuestas
PREGUNTA: ¿Por qué no debemos enojarnos con quienes nos hacen mal? RESPUESTA: Para un hombre o una mujer carnal, nada se puede sentir tan bien como enojarse con alguien que les ha hecho algún mal. Sin embargo, nada destruye el corazón y agobia la vida tan intensamente como el resentimiento y la amargura. Puede
ser natural molestarse con alguien, pero cuando los malos sentimientos se prolongan después de que la situación ha pasado, la misma persona sólo se está arruinando su propia vida y tal vez guiándola hacia una muerte prematura. Estudios médicos, indican claramente que mantener el enojo es la raíz de muchos padecimientos físicos y ni que decir de la ceguera espiritual. Enero - Febrero 2017
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Por: Timoteo Mendoza
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n los tiempos pasados, el Señor instruyó a su pueblo, a cerca de guardarse de la idolatría y la adoración de imágenes: “No te inclinarás á ellas, ni las honrarás; porque yo soy Jehová tu Dios, fuerte, celoso, que visito la maldad de los padres sobre los hijos, sobre los terceros y sobre los cuartos, á los que me aborrecen”. (Éxodo 20:5). Pero ¿cómo se debía entender esto? ¿Son acaso, los méritos de los padres, las buenas conductas; o los deméritos y las malas conductas de los padres, lo que determina el futuro de los hijos? Acaso significa que si algunos de nuestros antepasados, padres o abuelos, fueron personas de buen nombre, de buen testimonio, fieles y justas; ¿sus méritos y virtudes nos benefician, a lo largo de nuestra vida? En caso contrario, si nuestros antepasados fueron injustos, de mal testimonio, de mala conducta. ¿Su pecado nos marca, nos limita, nos predispone a caer en el mismo? ¿Nos convierte en deudores de sus faltas? Los hijos, tenemos como máximas figuras de ejemplo a nuestros padres, aprendemos de ellos y tratamos de emular sus virtudes y sus defectos. Un dicho dice: “Hijo de tigre…¡pintito! “. Nuestra personalidad se forja en los primeros 6
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años de vida, en función a lo que aprendemos de ellos, de sus conductas y ejemplos, además de los rasgos en el carácter y otros aspectos genéticos que heredamos de ellos. Así pues, si nacemos en el seno de una familia fiel, llena de valores y buenas conductas, ese ambiente nos envolverá y nos desarrollaremos bajo esos mismos valores; mientras más justos hayan sido nuestros antepasados, más obligación tenemos sus descendientes de mantenernos, por lo menos a su nivel. Igualmente, si nos toca nacer en el seno de una familia disfuncional y carente de valores morales, creceremos en ese ámbito. Bajo ese ambiente, nuestra conducta tendrá la tendencia a ser desordenada y sin una guía correcta. Es evidenciable que el pecado de los padres afecta de una forma directa a los hijos; sin embargo, Dios nos ha dotado de libre albedrío para decidir qué camino transitar; para distinguir entre lo que esta bien y lo que esta mal; para experimentar en cabeza ajena, identificar los errores y evitar a toda costa cometerlos. Los hijos están en la posición de observar y distinguir el mal proceder de los padres, así tienen el poder de decidir transitar ese camino o no. De tal manera Josué instó al pueblo: “Y si mal os parece servir á Jehová, escogeos hoy á quién sirváis; si á los
“El alma que pecare, esta morirá: el hijo no llevará por el pecado del padre, ni el padre llevará por el pecado del hijo”. Ezequiel 18:20. dioses á quienes sirvieron vuestros padres, cuando estuvieron de esotra parte del río, ó á los dioses de los Amorrheos en cuya tierra habitáis: que yo y mi casa serviremos á Jehová”. ( Josué 24:15). Aunque no siempre los hijos identificaron el pecado de los padres; una oración de lamento del pueblo de Israel, a través del profeta Jeremías dice: “Nuestros padres pecaron, y son muertos; Y nosotros llevamos sus castigos... Cayó la corona de nuestra cabeza: A y ahora de nosotros! porque pecamos”. (Lamentaciones 5:7,16). Los hijos de Israel lamentan haber nacido bajo el ambiente de pecado de sus padres y haber obrado de igual manera que ellos. Fueron arrastrados por el influjo de iniquidad y terminaron emulando el mismo error. Si bien, el Señor le había dicho a su pueblo: “Los padres no morirán por los hijos, ni los hijos por los padres; cada uno morirá por su pecado”. (Deuteronomio 24:16). A pesar de ello, por mucho tiempo se hizo de fama un refrán que se uso por todas las tierras de Israel a este respecto: “¿Qué pensáis vosotros, vosotros que usáis este refrán sobre la tierra de Israel, diciendo: LOS PADRES COMIERON EL AGRAZ, Y LOS DIENTES DE LOS HIJOS TIENEN LA DENTERA?” (Ezequiel 18). Es a saber: Nuestros padres comieron las “uvas agrias” y nuestros hijos heredaron” la sensación desagradable de lo ácido en las encías y dientes”. Este refrán estaba de moda en tierra de Israel para asumir que los hijos heredaban las maldades cometidas por sus padres, que el pecado de los padres tenia efecto en sus hijos. “vivo yo, dice el Señor Jehová, que nunca más tendréis que usar este refrán en Israel”. (v3). El profeta Jeremías también dijo: “En aquellos días no dirán más: Los padres comieron las uvas agraces, y los dientes de los hijos tienen la dentera. Sino que cada cual morirá por su maldad; los dientes de todo hombre que comiere las uvas agraces, tendrán la dentera”. ( Jeremías 31:29-30).
El profeta Ezequiel explica a detalle este asunto: “Y el hombre que fuere justo, e hiciere juicio y justicia; (Que no comiere sobre los monte, ni alzare sus ojos a los ídolos de la casa de Israel, ni violare a la mujer de su prójimo, ni llegare a la mujer menstruosa, ni oprimiere a ninguno; al deudor tornare su prenda, no cometiere robo, diere su pan al hambriento, y cubriere al desnudo con vestido, no diere a logro, ni recibiere aumento; de la maldad retrajere su mano, e hiciere juicio de verdad entre hombre y hombre, En mis ordenanzas caminare, y guardare mis derechos para hacer verdad, este es justo) : Este vivirá dice el señor Jehová”. “Pero si engendrare hijo ladrón, derramador de sangre, o que haga alguna de estas, y que no haga las otras. Es decir que no camine en la justicia de su padre: ¿vivirá este? No vivirá”. (v. 10,11,13) Este hijo no siguió el buen ejemplo de su padre, saliendo del ambiente de justicia que había en el seno de su familia. “Pero si este (a su vez) engendrare hijo, el cual viere todos los pecados que su padre hizo, y viéndolos no hiciere según ellos: Este no morirá por la maldad de su padre; de cierto vivirá”. (v. 14,17). Este hijo hizo uso de su albedrío y analizó el mal actuar de su padre, aprendió en cabeza ajena y decidió actuar cambiando el influjo que el pecado conlleva, decidió romper los patrones, lo cual le redituó la vida. “Y si dijeres: ¿Por qué el hijo no llevará por el pecado de su padre? Porque el hijo hizo juicio y justicia, guardó todas mis ordenanzas y las hizo, de cierto vivirá”. De esta manera miramos que las cuentas no se heredan, cada cual se forja su propio camino, cada quien escribe su propia hoja y archiva su propio record, de tal manera que llegado el momento responda por sus acciones ante el justo juez: “El alma que pecare, esta morirá: el hijo no llevará por el pecado del padre, ni el padre llevará por el pecado del hijo: la justicia del justo será sobre él, y la impiedad del impío será sobre él”. Enero - Febrero 2017
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P o r : J o s u é To r r e s
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a palabra “unánimes” viene del latín que significa: “un ánimo único, de un mismo parecer, de un mismo sentimiento o voluntad, de un estado de animó unificado”. También se aplica a la idea de un sentimiento o voluntad que es compartida por un grupo de personas. En el Salmo 133, el rey David describe la verdadera unidad espiritual que debe de haber en la iglesia de Dios, la cual trae bendición y vida eterna. “Mirad cuán bueno y cuán grande es habitar los hermanos igualmente en uno”. Cuando dice: “los hermanos igualmente en uno”, se refiere a que toda la iglesia debe permanecer unida, en un mismo propósito, en un mismo parecer, en una misma intención, en armonía, como uno solo. “Muchos miembros, un solo cuerpo en Cristo, mas todos miembros los unos de los otros”. (Romanos 12:5). Igualmente en uno, como el Padre y el Hijo son uno. (ver Juan 10:30 y 17: 22). Como Cristo y la iglesia son uno: “Porque todos vosotros sois uno en Cristo Jesús”. (Gálatas 3:28 segunda parte). El apóstol Pablo asemeja a la iglesia como un edificio que debe estar bien compaginado desde sus cimientos para ser un templo santo en el Señor: “Edificados sobre el fundamento de apóstoles y profetas, siendo la principal piedra del ángulo Jesucristo mismo”. (Efesios 2: 20). 8
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ASÍ ESTABA EDIFICADA LA PRIMERA IGLESIA HECHOS 2:41-47. La iglesia perseveraba en la doctrina de los apóstoles, y en la comunión, y en el partimiento del pan, y en las oraciones, y todos los que creían estaban juntos, y tenían todas las cosas comunes, y perseveraban unánimes cada día en el templo, y comían juntos con alegría y sencillez de corazón, alabando a Dios, teniendo gracia con todo el pueblo. “Y la multitud de los que habían creído era de un corazón y un alma, y ninguno decía ser suyo algo de lo que poseía, mas todas las cosas les eran comunes”. (Hechos 4: 32). “Y por las manos de los apóstoles eran hechos muchos milagros y prodigios en el pueblo; y estaban todos unánimes en el pórtico de Salomón”. (Hechos 5:12). Unánimes escuchaban la predicación del evangelio. (Hechos 8:6). Los apóstoles se congregaban en uno para tomar acuerdos. (Hechos 15:25). Y de esta misma manera debe estar la iglesia de Dios en este tiempo, en una misma mente, en un mismo espíritu, en un mismo sentir; para edificación del cuerpo de Cristo. NINGUNO SE DEBE SENTIR MÁS QUE OTRO Debemos tener el mismo sentir que hubo en el señor Jesucristo, el cual siendo en forma de Dios no tubo por usurpación ser igual Dios. El gobierno de la iglesia fue ordenado por el mis-
mo Señor Jesucristo para la perfección de los santos, para la obra del ministerio, para la edificación del cuerpo de Cristo. Para orar unánimes por las necesidades de la iglesia. (Hechos 1: 14).
apacentara su iglesia. ( Juan 21:15-17). Y el apóstol Pedro, años después cuando ya era muy anciano, le pidió a los ancianos de la iglesia lo mismo, que apacentaran la grey de Dios. (I Pedro 5: 1-4).
El Señor Jesucristo nos enseña que un reino (iglesia) dividido no permanece. No debe haber entre nosotros disensiones o desacuerdos, sino que debemos estar unánimes en un mismo espíritu. (Filipenses 1:27).
Recordemos hermanos ancianos que las ovejas del pueblo de Israel fueron esparcidas “porque sus pastores se infatuaron, y no buscaron a Jehová: por tanto no prosperaron, y todo su ganado se esparció”. ( Jeremías 10:21). Ellos recibirán un castigo. (Ezequiel 34:1-4).
“Cumplid mi gozo; que sintáis lo mismo, teniendo el mismo amor, unánimes, sintiendo una misma cosa”. (Filipenses 2:2; ver 3:16). En la iglesia de Corinto había divisiones, llegó el apóstol Pablo y los exhortó diciendo: “Os ruego, pues hermanos, por el nombre de nuestro Señor Jesucristo, que habléis todos, una misma cosa, y que no haya entre vosotros disensiones, antes seáis perfectamente unidos en una misma mente y en un mismo parecer”. (I Corintios 1:10). Él también aconsejó: “Que estemos unánimes entre nosotros, no altivos, más acomodándonos a los humildes, que no seamos sabios en nuestra opinión”. (Romanos 12:16). El Señor Jesucristo le preguntó tres veces al apóstol Pedro si lo amaba; y tres veces le pidió que
Yo soy el buen pastor dice el Señor Jesucristo: “Y el buen pastor su vida da por las ovejas”. ( Juan 10:11). Como ancianos de la iglesia debemos seguir este ejemplo, viviendo una vida de servicio para nuestros hermanos, y sólo estando unidos en un mismo espíritu, podremos cumplir nuestro ministerio que nos ha sido encomendado por el Señor. “Así que, hermanos míos amados, estad firmes y constantes, creciendo en la obra del Señor siempre, sabiendo que vuestro trabajo en el señor no es en vano”. (I Corintios 15:58). El Señor Jesucristo es el príncipe de los pastores, y cuando el apareciere; vosotros recibiréis la corona incorruptible de gloria.
El Pasado 29 de Enero en Jaral del Progreso, Guanajuato; se llevó a cabo una reunión entre miembros del ministerio de distintas partes del país; así mismo se contó con la visita de nuestro hermano Ricky Herrera, quien llevó unas palabras dirigidas a todos los presentes. Fue una reunión en donde se trataron diferentes asuntos relacionados a la obra ministerio. Sigamos orando para que nuestros hermanos sean llenos de la sabiduría de Dios y sean dirigidos por Su Santo Espíritu. Enero - Febrero 2017
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Por: Miguel Pérez
Redimir
Rescatar, liberar, comprar, pagar un precio para liberar algo o a alguien.
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a salvación del hombre, su redención, es parte importante de un plan divino, trazado meticulosamente por Dios, aun desde antes de la fundación del mundo. Ésta obra redentora fue puesta en operación en el principio de los tiempos en el Edén, fue ratificada por el hijo de Dios con su primera venida a la tierra y será concluida en su totalidad en su segunda venida. Antes de que el hombre cayera, su rescate ya se había planeado. El hijo de Dios, voluntariamente y por amor, se ofreció venir a rescatarlo de las garras de Satanás y de la muerte. “Entonces dijo: Heme aquí para que haga oh Dios tu voluntad”. (Hebreos 10:9). El apóstol Pedro dice que el Hijo de Dios fue ordenado desde antes de la fundación del mundo, pero manifestado en los postrimeros tiempos por amor de todos nosotros; ver I Pedro 1:18-22. “De consiguiente vino la reconciliación por uno, así como el pecado entró en el mundo por un hombre, y por el pecado la muerte, y la muerte así, pasó a todos los hombres, pues que todos pecaron”. (Romanos 5:12). Cuando Adán cayó, caímos todos, pues todos estábamos en él, pues él es el padre de todos los vivientes. Ésta es la razón por la cual todos, sin excepción, necesitamos de un salvador para nuestras vidas. “Por cuanto todos pecaron, y están destituidos de la gloria de Dios”. 10
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(Romanos 3:23). Dios, en su infinita misericordia, permitió que Su Amado Hijo, nuestro Señor Jesucristo, viniera a rescatar al hombre que se había perdido y que estaba condenado a morir para siempre por desobedecer su palabra: “Mas del árbol de la ciencia del bien y del mal no comerás de él; porque el día que de él comieres, morirás” (Génesis 2:17). A partir de entonces, vemos al hijo de Dios entrar en contacto con el hombre para efecto de su propio rescate y libertad. Desde entonces, la obra redentora de nuestro Señor Jesucristo empezó a manifestarse en la vida de los hombres oprimidos por el diablo. Adán y Eva fueron los primeros pecadores en recibir este favor de Dios. El apóstol Juan nos dice que el hijo de Dios “fue muerto desde el principio del mundo”. (Revelación 3:28). Rescatar a nuestros padres del pecado y de la muerte, significaba morir por ellos, sacrificarse por ellos; ese era el precio de su rescate, el cual debía ser pagado: “Porque la paga del pecado es muerte”. (Romanos 6:23). Simbólicamente el hijo de Dios muere por ellos derramando la sangre inocente de un animal para expiar su pecado y librarlos de la terrible condenación de muerte eterna. Al hacer esto por el hombre, nuestro Señor aceptó que Él sería el cordero de Dios que quitaría los pecados del mundo. “Y sin derra-
“AHORA pues, ninguna condenación hay para los que están en Cristo Jesús, los que no andan conforme á la carne, mas conforme al espíritu”. Romanos 8:1. mamiento de sangre no se hace remisión”.(Hebreos 9:22). Una vez redimidas sus faltas, el Señor los viste apropiadamente: “Y Jehová Dios hizo al hombre y a su mujer túnicas de pieles, y vistiólos” (Génesis 3:21). Gracias a la oportuna intervención del hijo de Dios a nuestro favor, se abre para el hombre, desde Adán hasta nuestros días, la oportunidad de vivir para siempre. Por esa razón el culto antiguo consistió en parte en sacrificios de animales, que tenían que ser presentados como ofrenda de expiación provisional por el pecado y para anunciar la venida en forma humana del hijo de Dios a la tierra, para redimir por siempre el pecado de la humanidad desde Adam hasta nuestros días. “Lo cual era figura de aquel tiempo presente, en el cual se ofrecían presentes y sacrificios que no podían hacer perfecto, cuanto a la conciencia al que servía con ellos”. (Hebreos 9:9). La primera venida de nuestro Señor a la tierra, significa la ratificación de su deseo inicial de salvar al hombre, de darle libertad del pecado y de la muerte, de redimirlo: “Mas venido el cumplimiento del tiempo, Dios envió a su hijo al mundo, hecho de mujer, hecho súbdito a la ley, para que redimiese a los que estaban debajo de la ley”. (Gálatas 4:4-5, Hebreos 2:14-17). “Mas estando ya presente Cristo, pontífice de los bienes que habían de venir, por el más amplio y más perfecto tabernáculo, no hecho de manos, es a saber no de ésta creación; y no por la sangre de machos cabríos y de becerros, mas por su propia sangre, entró una sola vez en el santuario habiendo obtenido eterna redención”. (Hebreos 9:11-12). “Ahora pues ninguna condenación (muerte segunda, destrucción total) hay para los que están en Cristo Jesús, los que no andan conforme a la carne, mas conforme al espíritu”. (Romanos 8:1). Jesús pagó, por la libertad de todos los hombres desde Adán hasta nuestros días, el precio más alto jamás realizado. “Sabiendo que habéis
sido rescatados de vuestra vana conversación, la cual recibisteis de vuestros padres, no con cosas corruptibles como oro o plata. Sino con la sangre preciosa de Cristo, como de un cordero sin mancha y sin contaminación: Ya ordenado de antes de la fundación del mundo, pero manifestado en los postrimeros tiempos por amor a vosotros”. (I Pedro 1:18-22). El precio de nuestro rescate ya está pagado, solo necesitamos aceptarlo. Aceptar a Jesús como nuestro salvador personal, creer a su palabra, arrepentirnos de nuestros pecados, bautizarnos en su nombre y aguardar en obediencia su segunda venida, para que se cumpla en nuestra vidas la última etapa de nuestra redención ( Juan 3:16-18, Lucas 19:10, Hechos 4:12, I Corintios 6:20, I Juan 2:28). El capítulo 21 de Lucas nos habla de grandes acontecimientos que estarán señalando hacia la segunda venida de nuestro Señor y el verso 28 nos dice: “Y cuando éstas cosas comenzaren a hacerse, mirad, y levantad vuestras cabezas, porque vuestra redención está cerca”. Todos los que sean redimidos por el Señor con su sangre que derramó en el calvario y que hayan guardado su palabra de vida, en su segunda venida serán participantes de la última fase de su redención. El apóstol Pablo explica esto de la siguiente manera: “porque el continuo anhelar de las criaturas espera la manifestación de los hijos de Dios, porque las criaturas sujetas fueron a vanidad, no de grado, mas por causa del que las sujetó con esperanza. Que también las mismas criaturas serán libradas de la servidumbre de corrupción en la libertad gloriosa de los hijos de Dios. Porque sabemos que todas las criaturas gimen a una, y a una están de parto hasta ahora. Y no sólo ellas, mas también nosotros mismos, que tenemos las primicias del espíritu, nosotros también gemimos dentro de nosotros mismos, esperando la adopción,
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es a saber, la redención (transformación) de nuestro cuerpo”. (Romanos 8:19 -23). Adán y Eva fueron despojados por el Señor, de esa cubierta que se hicieron de hojas de higuera, para ser vestidos dignamente con la piel del mismo cordero que sirvió para expiación de su pecado. De manera similar los hijos de Dios serán despojados de ésta vestidura de carne, mortal, corruptible que recibimos por causa del pecado de nuestros padres y seremos revestidos de esa naturaleza divina, de incorrupción e inmortalidad (redimidos) por el mismo Señor en su venida. Sólo de ésta manera tendremos acceso al reino glorioso del Señor. “Esto empero digo que la carne y la sangre no pueden heredar el reino de Dios; ni la corrupción hereda la incorrupción. He aquí os digo un misterio: Todos ciertamente no dormiremos, mas todos seremos transformados. En un momento, en un abrir de ojo, a la final trompeta: porque será tocada la trompeta, y los muertos serán levantados sin corrupción, y nosotros seremos transformados. Porque es menester que esto corruptible sea vestido de incorrupción y esto mortal sea vestido de inmortalidad. Y cuando esto corruptible fuere vestido de incorrupción y esto mortal fuere vestido de inmortalidad, entonces se efectuará la palabra escrita: Sorbida es la muerte
Grupo de la iglesia de Dios en Villahermosa, Tabasco, durante la visita de nuestros hermanos Ricky Herrera, Pascacio Tavizon, Moisés Torres y Rafael Mendoza. La iglesia en este lugar, no sólo se ha mantenido fiel y constante, también ha crecido, pues nuestros hermanos han trabajado con fe y Dios ha prosperado en ellos sus bendiciones. Recordemos que hace poco se concluyó la construcción de un nuevo templo en este lugar. Sigamos orando para que la fe y ánimo de nuestros hermanos no decaiga.
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con victoria”. (I Corintios 15:50-54). “Destruirá a la muerte para siempre; y enjugará el Señor toda lágrima de todos los rostros: Y quitará la afrenta de su pueblo de toda la tierra: Porque Jehová lo ha dicho”. (Isaías 25:8) Esta es la bendita esperanza de todo hijo de Dios: “Que el cuerpo de nuestra bajeza (débil, enfermo, corruptible, mortal), sea transformado (redimido) para ser semejante al cuerpo de su gloria, con la operación con la cual puede sujetar así todas las cosas”. (Colosenses 3:21). “Por tanto no desmayamos: antes aunque este nuestro hombre exterior se va desgastando, el interior empero se renueva de día en día. Porque lo que al presente es momentáneo y leve de nuestra tribulación, nos obra un sobre manera alto y eterno peso de gloria; no mirando nosotros a las cosas que se ven, sino a las que no se ven: porque las que se ven son temporales, mas las que no se ven son eternas”. (II Corintios 4:16-18). Amados hermanos, es tiempo de erguirnos y de levantar nuestra cabezas. La venida del Señor está a las puertas, el tiempo de nuestra redención está cerca. “Por tanto no durmamos como los demás, antes velemos y seamos sobrios”. (I Tesalonicenses 5:6).
LA IGLESIA
alrededor del MUNDO Tabasco, México El pasado 3, 4 y 5 de Febrero en el estado de Tabasco, México; se realizó una visita a la iglesia en esta región por parte de los hermanos Ricky Herrera, Pascacio Tavizon, Moisés Torres y Rafael Mendoza. Esta visita fue de mucho provecho, ya que se realizaron diferentes actividades en las diversas iglesias que conforman esta región, la cual ha crecido por la gracia de Dios y por el trabajo que han desempeñado los hermanos del ministerio encargados de esta región. Así mismo se ratificó el trabajo de algunos miembros del ministerio y se realizaron diversos nombramientos. Dios ha provisto de miembros valiosos para el trabajo y cuidado de su iglesia. Hermanos, sigamos orando para que nuestros hermanos no decaigan en su ánimo y continúen trabajando con amor en esta labor tan noble. “¿Quién pues es el siervo fiel y prudente, al cual puso su señor sobre su familia para que les dé alimento á tiempo? Bienaventurado aquel siervo, al cual, cuando su señor viniere, le hallare haciendo así. De cierto os digo, que sobre todos sus bienes le pondrá”. (Mateo 24:45-47).
IGLESIAS DE HABLA HISPANA EN EEUU. Servicios el día Sábado: TIM BUECHNER, MARIO CANTU: 3023 Monterey, St. San Antonio, Tx. 78207.
TOMAS OLIVARES, MANUEL GONZÁLEZ: 8234 Orange Ave. Pico Rivera, CA. 90660. Tels (951) 487 9642 y (323) 349 0573
PABLO HERRERA, RICKY HERRERA: 10518 C F Hawn Freeway, Dallas, Tx. 75217. Tels. (972) 557 1707. Enero - Febrero 2017
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Algo muy importante que considerar...
To m a d o d e : “ T h e A d v o c a t e o f Tr u t h ”
C
uando se padece alguna enfermedad física o se corre el riesgo de padecerla, se dedica mucho esfuerzo para lograr curarla o prevenirla. La mayoría de los doctores concuerdan que la prevención de las enfermedades es lo mejor que se puede hacer y que la curación de estas debe quedar en segundo término, en el sentido que es un recurso si la prevención falla. Muchos hombres y mujeres durante muchos años, han dedicado su vida en lograr prevenir y curar distintas enfermedades y así reducir al mínimo el sufrimiento humano causado por estos padecimientos. A pesar de estos grandes esfuerzos para encontrar una solución a las enfermedades que existen actualmente, hay una enfermedad en particular que ha venido creciendo de forma alarmante en grado y alcance, la cual no está recibiendo la atención que se requiere y amerita la situación. Esta es la enfermedad de la desobediencia. Alguien podría asegurar que el fuego no quema, pero si se pone la mano en el fuego, de un momento a otro toda teoría y afirmación sobre esto se desvanecería.; Entonces se afirmaría como un hecho real que el fuego quema lo que toca. Un misil puede ser proyectado en el aire, asumiendo desde su plataforma de lanzamiento que ello causará ciertas cosas, pero, ¿en realidad se sabe si lo hará? Se debe entender que hay muchas leyes naturales que son inalterables y que 14
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ayudan al hombre a evitar las cosas que causan daño o algún desorden, así también se muestra que la humanidad no tiene el control de estas leyes naturales. Un ejemplo sería la consecuencia de la desobediencia, existe una ley que Dios ha establecido si ésta se desobedece no habrá nada que el hombre pueda hacer para evitar la consecuencia de esto. En cualquier lugar del mundo hay evidencia de estas leyes, como la que gobierna el movimiento de las estrellas, el venir y el ir de las estaciones, la germinación de las semillas y la producción de frutos a su tiempo. El desarrollo de la naturaleza es el resultado de una ley divina que es efectiva y que hace que este mundo sea perfecto en su composición y diversidad. Las leyes de los hombres, deberían estar en conformidad con estás ley de Dios; la cual denuncia obediencia en toda la naturaleza, justamente como lo hace también la ley de Dios, llamada la Ley de Libertad, la Ley real o la Ley perfecta; por medio de la cual el caos fue evitado en el principio, la armonía y la belleza fueron establecidas y desde entonces se han mantenido. Sólo leamos los Salmos 19 y el 119 qué LEY tan maravillosa nos ha dado Dios. Así como la obediencia es necesaria para establecer el orden necesario del universo, también lo es para regular todos los asuntos del hombre. Sin ley, no existe la posibilidad de disfrutar de la vida plenamente. Entendamos que la ley está establecida para obedecer
cada uno de sus estatutos. Donde hay desobediencia, hay conflicto, confusión, infelicidad, desintegración de la estructura social y una decadencia final. La enfermedad de la desobediencia inicia regularmente desde los hogares, de allí se extiende a la comunidad, al estado, a la nación y a todo el mundo. Los padres, quienes fallan en la guarda de la ley, establecen ejemplos para sus hijos y estos pronto mostrarán desobediencia a las leyes de la familia y después a las leyes naturales. De esta manera la enfermedad de la desobediencia se extiende muy lejos y a todo lo ancho de la tierra, causando ruina abominable en carácter y extensión.
Preguntas y
La desobediencia es la enfermedad que está haciendo de este mundo la sede de la caldera del crimen y de la iniquidad, pues los hombrea ya no respetan las leyes sociales ni morales de ningún país. Esto nos dice que la corrección debe comenzar por los hogares, en los salones de clase, en la sociedad, en los negocios y también en la iglesia. La obediencia siendo establecida de esa manera, hará que la desobediencia, dondequiera que haya, sea menos; y el resultado será que habrá menos pecado en este mundo. ¿Has contraído esta enfermedad? Cristo puede sanarte y hacerte completo. Búscalo a Él para tu salvación, para que tengas salvación y prosperidad.
Respuestas
PREGUNTA: ¿Podría por favor comentar la diferencia entre ser manso y ser orgulloso? RESPUESTA: Manso significa amable. Moisés es un buen ejemplo. Él era un hombre amable, de carácter templado, paciente, humilde y sufrido. ¿Qué lo hizo así? Dios habló con él cara a cara y Moisés observó la figura del Señor. Habitó en la presencia de Dios. Dios estuvo frente a él. Nadie más estuvo tan cerca de Dios como su siervo Moisés y, a ningún profeta, el Señor se reveló a sí mismo como lo hizo con él. Eso hizo a Moisés, el mediador del Antiguo Testamento, como Cristo. El orgullo es lo contrario de la mansedumbre. Más lejos de Dios está el hombre pecador, mientras más orgulloso se vuelve. Hemos observado esto en el pasado. ¡Piense en Mussolini y en Hitler y su cuadrilla Nazi! ¡También podemos pensar en las naciones débiles de estos días que se dicen ser fuertes! Entre más cerca de Dios esté un hombre, más manso es. El Señor Jesús, quien pudo testificar: “Yo y el Padre una cosa somos”, era más manso que Moisés. De hecho, él era tan manso que no tienen lugar todas las posibles
comparaciones con otras personas. Cristo debe ser formado en nosotros. Entre más parecido tengamos a nuestro Padre celestial en Cristo Jesús, seremos renovados conforme a la imagen de aquél que “…cuando le maldecían, no retornaba maldición”. “Antes del quebrantamiento es la soberbia: Y antes de la caída la altivez de espíritu”. Miriam y Aarón, quienes estuvieron celosos de Moisés y se le opusieron, lo experimentaron. Moisés el manso, fue reconocido por el Señor. Dios bendice a los mansos. Ellos encontrarán descanso para sus almas y heredarán la tierra. Los soberbios menosprecian a los mansos. Ellos ridiculizaron al humilde Nazareno, sangrando y muriendo en el Calvario. Pero en él hay salvación. En su muerte, él triunfó sobre sus enemigos y Dios le ha dado un nombre que es sobre todo nombre. Sólo serán verdaderamente grandes quienes sean conforme a la imagen de Cristo y se vuelvan mansos como Moisés, el hombre de Dios.
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Hizo esto cada israelita, día diez del primer mes, por cada casa y familia, cordero sin tacha escoger.
Pues sin efusión de sangre, remisión no puede haber, muere Cristo así ante el Padre, por nosotros muere Él.
Y el día catorce sin falta, dicho cordero a inmolar, cada entrada, cada puerta, con su sangre iban a untar.
Jesús, de Dios el Cordero, sin pecado vivió Él, perdón pleno y verdadero, su sacrificio dio al fiel.
Salvándose de esta forma, de la muerte y su poder, obteniendo la victoria, y de Egipto libres ser.
Nos reconcilió con Dios, por nosotros Él muriendo, también se hizo mediador, de los hombres y el Eterno.
Conmemoración perpetua, esta Pascua siempre hacer, señalando nuestra Pascua, que de Cristo iba de ser.
Quien le es fiel y quien le sigue, su carne ha de probar, bebiendo también su sangre, vida eterna así alcanzar. Por: Roberto Celaya
Ver; Éxodo 12:3-5; Éxodo 12:6-11; Éxodo 12:12-13; Éxodo 12:14; 1 Corintios 5:7; Hebreos 9:22; Juan 1:29, 35-36; 1 Pedro 2:21-24; Mateo 26:27-28; Efesios 2:14-18; Hebreos 9:11-15; Juan 6:53-58.