Culturas pre incas

Page 1


A.

INTRODUCCIÓN: Nazca es una cultura arqueológica del Antiguo Perú que se desarrolló básicamente en los valles del actual departamento de Ica, alrededor del siglo I y entró en decadencia en el siglo VII. Su centro estaba ubicado en Cahuachi, en el margen izquierdo del Río Grande, en la actual provincia de Nazca. Lo más impresionante de esta civilización son los trazos efectuados en las Pampas de Nazca, conocidos como las Líneas de Nazca, que representan figuras gigantescas de animales, seres humanos y diseños geométricos, hechos a una escala extraordinariamente grande y con mucha precisión. Se ignora su fin, aunque se ha teorizado que fuera un gigantesco calendario, resultado de observaciones astronómicas. Según los últimos hallazgos y estudios presentados en mayo de 2015 por parte de la Universidad Japonesa de Yamagata, se postula que las líneas servían como epicentros de la actividad ritualista tanto de los Nazca como de otra culturas circundantes. Se ha desvelado que las líneas fueron hechas por más de una cultura y en momentos históricos distintos. De esta manera cumplían una función integradora para todas las culturas que yacían entre la costa y sierra Iqueña. Se concluye también que servían para adornar el camino del peregrino hacia la ciudad de Cahuachi, centro sociopolítico de la cultura Nazca, ya que las líneas están hechas para verse desde cierta altura.

B.

UBICACIÓN: Su territorio llegó a abarcar desde Chincha por el norte, hasta Arequipa por el sur y por el este hasta Ayacucho. Hasta el siglo VI d. C., aumentaron sus contactos con la zona andina, llegando inclusive hasta las zonas altas de Ayacucho. Este contacto tuvo especial importancia en la formación de la cultura Huari.


C.

ORIGEN: Se desarrolló en la costa Sur del Perú, en la actual Región Ica, que comprende los valles de Chincha, Pisco, Ica, Río Grande y sus tributarios (Nazca, Palpa, El Ingenio), hasta el valle de Acarí, que ya está en la Región Arequipa; estos valles atraviesan una zona costera desértica.

D.

E.

HISTORIA: 

Nazca temprano: Las primeras comunidades nazcas se desenvolvían en la cuenca del río Grande, con cerámica propia, sin influencias foráneas.

Nazca medio: Es la época de la formación de la cultura, bajo la influencia de la cultura Paracas-Necrópolis. Empiezan las representaciones iconográficas de sus dioses en sus ceramios y textiles.

Nazca tardío: Es una época de cambios, cuando Cahuachi es abandonada, trasladándose su población a otro lugar. Destaca el centro de La Estaquería. Se cree que los nazcas establecieron por entonces relaciones con los huarpas, un pueblo de la sierra, cerca de la actual Ayacucho.

Nazca Final: Es la decadencia, que se inicia hacia el 700 d. C.

AGRICULTURA: Se presentó para los nazca como un reto difícil de superar por las características geográficas de la región donde se desarrollaron, pues el clima es bastante seco, las tierras agrícolas son pocas y existe poca agua para el regadío debido al poco caudal que llevan los ríos de esa región del Perú especialmente los de la cuenca del río Grande. Al respecto, el sabio Antonio Raimondi observó que: En el subsuelo de Nazca existe agua subterránea, pero, hallándose ésta a la profundidad de 4 o 5 metros, no puede servir para riego de los terrenos. El río, comúnmente sólo tiene agua corriente durante 40 días en el año, de manera que, por más de 10 meses Nazca carecería de agua si no fuera por los trabajos emprendidos por los antiguos indios. La manera cómo resolvieron los nazcas este problema es uno de los logros más admirables de su cultura. Aplicando una notable tecnología hidráulica, construyeron acueductos, canales y pozos que permitieron abastecer permanentemente de agua los terrenos de cultivo, logrando así desarrollar una agricultura sólida. Los principales cultivos fueron: maíz, frijol, calabaza, zapallo, yuca, maní, ají, guayaba, lúcuma, pacae y algodón.

F.

ORGANIZACIÒN SOCIAL: A la cabeza de la pirámide social de los nazca estaban las autoridades centralizadas, constituidas por los señores y los sacerdotes. Estos tenían la capacidad de organizar el trabajo comunitario y dirigir las complejas actividades ceremoniales. Esta élite vivía en


edificios piramidales, en sectores especiales cuyas habitaciones estaban hechas con adobe y muros cubiertos con una capa de yeso o cal para tapar las grietas. Al servicio de estas autoridades se encontraba una gran cantidad de artesanos especializados, tales como ceramistas y textileros, astrólogos, músicos y soldados, los cuales habitan en pequeñas ciudades y centros ceremoniales, entre los que destaca el complejo de Cahuachi. Los guerreros en particular formaban una clase social muy respetada y temida. En la base de la sociedad se encontraban los agricultores y pescadores, los cuales vivían dispersos en diversos puntos del territorio. Los agricultores tenían casi la totalidad de los valles, ya que así podrían desarrollar la agricultura, con más espacio y terreno fértil. G.

CERÁMICA: La cerámica nazca es considerada como la mejor lograda del antiguo Perú, por su alta calidad y variedad. Una técnica peculiar usada fue que antes de la cocción del ceramio se pintaba o decoraba toda su superficie. Esta decoración destaca por su policromía y su complejidad. Usaban hasta once gradaciones de color en una sola pieza, y manejaban unos 190 matices diferentes. La forma más típica de las vasijas es el cántaro globular con dos picos o vertederos y con asa-puente, esquema básico que adopta una infinidad de variantes, sea en el cuerpo, que adopta diferentes formas, sea en los caños, cuya extensión es muy variable. También fabricaron ollas esféricas, tazas y vasos. En estas piezas se presentan elementos de la vida cotidiana, tales como flores, frutos, aves, animales e insectos, como también personajes mitológicos o que combinan atributos humanos y animales.

H.

TEXTILERÍA: Los nazca fueron herederos de cultura topará (llamada antes Paracas-Necrópolis) en lo que se refiere a la elaboración de finísimos mantos o telas, aunque no lograron la misma calidad y suntuosidad en los acabados. De todos modos destaca por la variedad de técnicas empleadas y la complejidad de los diseños. Para elaborar los tejidos, utilizaron algodón y lana de camélidos. Dominaron las técnicas de embrocado, tapicería, gasa, telas pintadas, tejido tridimensional y bordados. Estos últimos son particularmente notables. Sobre la tela llana de algodón bordaban con la lana de camélidos teñida con variados colores. Los ceramistas nazca trasladaron estos diseños a la superficie de sus vasijas.


I.

ORFEBRERÍA: Utilizaban el oro y la plata para hacer máscaras, orejeras, narigueras y otros objetos rituales, adornados por medio del repujado, ya que eran láminas. Estos objetos eran para usos ceremoniales y/o religiosos.

J.

ARQUITECTURA: Los nazcas utilizaron como principal técnica el uso del adobe. Destaca el complejo arqueológico de Cahuachi, a orillas del Río Grande, con más de 150 hectáreas de superficie. Tiene un templo de corte piramidal, de terrazas superpuestas, y un palacio de los jefes guerreros, en medio de seis barrios o complejos arquitectónicos bien definidos. Se puede detectar dos técnicas de construcción: una con adobes de forma cónica y otra con paredes de quincha. Son, sin embargo, pocas las construcciones masivas y sólidas de adobe; la mayoría de las estructuras fue levantada sobre suelos elevados y montículos, encima y alrededor de los cuales se erigieron estructuras artificiales. Más que un centro urbano, Cahuachi debió ser más principalmente un centro ceremonial, el más importante de los nazca, según todos los indicios. El carácter sagrado de este sitio lo evidencia el hecho de que, antes de su construcción, fue un sitio de huacas, es decir, de lugares sagrados según la cosmovisión andina. Lo que hicieron los arquitectos nazcas fue elaborar y exagerar el aspecto truncado de esos cerros. Cahuachi floreció de principios del siglo I hasta el 750, aproximadamente.14 En su última fase, hay indicios de que muchas de sus estructuras fueron destruidas, mientras que otras fueron sepultadas con gruesas capas de arcilla. Se convirtió principalmente en un gran cementerio, lo que coincide con un periodo de enfrentamientos bélicos dentro de la sociedad nazca.

K.

CABEZAS-TROFEOS: Tuvieron su origen en las culturas Chavín y Paracas, aunque bajo los nazca alcanzaron una gran difusión. Tan así, que hasta se hallan representadas profusamente en la temprana cerámica nazca. Para elaborar estas cabezas, se sacaba el cerebro por la base del cráneo; luego la boca era cosida o cerrada con espinas, y se hacía un pequeño hueco en la frente, por donde pasaba una cuerda para que pudiesen ser colgadas a la cintura o al cuello.


Sobre su finalidad, está muy difundida la creencia de que se trataban de trofeos de guerra: el guerrero vencedor tenía derecho de cortar la cabeza al enemigo vencido y convertirla en un trofeo que llevaba siempre consigo. Sería también como un ritual de prevención de cualquier daño que pudiera hacer el espíritu del guerrero muerto. L.

CREENCIAS: La civilización nazca realizaba rituales a las divinidades del mar, el cielo, la tierra, el fuego, el agua, el viento y al Dios creador. Gran parte de sus construcciones y elaboraciones, se hacían para los dioses, con el fin de que no hubiera sequías, y que los canales no se secaran. Su religión también tenía que ver mucho con el misterio de las Líneas de Nazca, que son consideradas por algunos como un círculo agrícola y calendario astronómico, pero otros dicen que éstas eran lugar de numerosos rituales dedicados a sus dioses.


A.

INTRODUCCIÓN: La cultura Moche es una cultura arqueológica del Antiguo Perú que se desarrolló entre los siglos II y VII en el valle del río Moche (actual provincia de Trujillo, en el departamento de La Libertad). Esta cultura se extendió hacia los valles de la costa norte del actual Perú. Las sociedades moches hicieron grandes obras de ingeniería hidráulica: canales de riego y represas, lo que les permitió ampliar su frontera agrícola a gran escala. Fueron grandes navegantes: construyeron caballitos de totora, los que hacían más pequeños para la pesca y más grandes para sus viajes hasta las costas ecuatoriales, desde donde traían la concha Spondyllus, sagrada para los moches, y en general, para el resto de las culturas costeñas del Antiguo Perú.

B.

UBICACIÓN: Esta cultura deriva su nombre del valle homónimo de Moche, actualmente también llamado Valle de Santa Catalina, sede de las más conocidas e imponentes construcciones moches, las huacas del Sol y de la Luna. Los mochicas se expandieron por el sur hasta el valle de Nepeña (Áncash) y por el norte hasta el valle de Piura (Piura).

C.

DESCUBRIMIENTO: La civilización mochica fue identificada por Max Uhle en 1909 quien la clasificó como proto-chimú (es decir, antecesora de la cultura chimú). Uno de sus principales investigadores fue el alemán Enrique Brüning, ingeniero de profesión que llegó a trabajar en las azucareras de Lambayeque y La Libertad. En 1899, con el patrocinio de la madre del editor de periódicos William Randolph Hearst, Brüning excavó 31 yacimientos funerarios en las inmediaciones de la Huaca del Sol y de la Huaca de la Luna.


Esta cultura también fue estudiada por los arqueólogos peruanos Julio C. Tello y Rafael Larco Hoyle (1901-1966).2 En particular destaca la labor de Larco Hoyle, quien identificó de manera científica los diversos períodos de esta cultura, a base de los estilos y la técnica de su cerámica. D.

HISTORIA: La historia moche se desenvuelve en el llamado Intermedio Temprano, periodo de la civilización andina caracterizado por el desarrollo de culturas regionales, tras la decadencia del Formativo Andino. Contemporáneos con la cultura moche fueron la cultura nazca, la cultura recuay, la cultura lima, la cultura cajamarca y la cultura tiahuanaco.

E.

El período del Comienzo, que abarcaría entre 150 y 300 d.C.

El periodo de la Expansión, aproximadamente de 300 a 600 d.C.

El periodo del Ocaso, es un periodo de decadencia que empieza entre el 650 y 700 d.C.

AGRICULTURA: Los mochicas tuvieron una especial preocupación por el desarrollo agrícola. En este sentido, cultivaron maíz, maíz morado, camote, yuca, papa, calabaza; frutas, tales como tuna, lúcuma, chirimoya, tumbo, maní y papaya. Cultivaron además el algodón en sus colores naturales (blanco, marrón, rojizo y morado), para uso industrial. También cultivaron totora. Como precisaban llevar agua para cultivar tierras secas, construyeron canales (Wachaques) que se muestran como notables obras de ingeniería hidráulica, como el de Ascope y el de La Cumbre. Entre los animales que consumieron están la llama, el cuy, el pato, el venado, la pava de ala blanca y los cañanes (lagartijas).

F.

ORGANIZACIÒN SOCIAL: Al parecer, no existió un poder único y centralizado, sino que cada valle debió contar con su rey o señor, que se aliaba con sus vecinos para realizar obras de bien común, para efectuar ceremonias rituales o para emprender conquistas militares.


Los señores se vestían con prendas lujosas, con adornos de oro, plata y cobre, que simbolizaban sus atributos sagrados, y al morir eran enterrados con igual fastuosidad, como se puede ver en la tumba del Señor de Sipán. G.

CERÁMICA: Los mochicas plasmaron en sus cerámicas el entorno de su mundo cultural y religioso, bajo la forma de imágenes escultóricas o bien decorando a pincel la superficie de la vasija. Su cerámica constituye por ello el mejor documento y testimonio de su cultura. Características de la cerámica mochica: escultórica, realista, documental y pictográfica. Su realismo es característica resaltante en sus huaco retratos, su famosa plástica asombra por la expresividad y perfección de verdaderos retratos de arcilla. Los cánones clásicos de perfección y realismo se reconocen aún en seres mitológicos, animales humanizados, hombres con atributos zoomorfos o partes combinadas de varios animales. Sin embargo, también realizaron cerámica con gran contenido simbólico de pensamiento e ideas donde las imágenes se vuelven más abstractas y conceptuales; ambas tradiciones, tanto la simbólica como la realista se encuentran sumamente vinculadas. Incluso hay piezas cerámicas donde conviven estas dos tendencias sin el más mínimo problema. Analizando la iconografía de la cerámica, los investigadores actuales también pueden conocer interesante información sobre la vida de los moches: ceremonias funerarias, ceremonias rituales, paisajes, viviendas, guerras, enfermedades, etc., proporcionando así un vínculo entre los vivos y los muertos. La cerámica mochica generalmente se propicia en masa, mediante el uso de moldes, sobre ellas el especialista aplicaba técnicas como: modelado, grabado, pintura. El asa estribo era confeccionado aparte. Por último, la pieza era llevada al horno; es bícroma resaltando el rojo y el crema.

H.

PINTURAS MURALES: En muchos edificios moches se han encontrado pinturas murales, de inspiración religiosa, ya que representan a seres divinos o escenas relacionadas con ellos. Son de destacar dos lugares donde se han encontrado bellos murales: la Huaca de la Luna y la Huaca Cao Viejo (o El Brujo). Las pinturas murales de la Huaca de la Luna son de 5 colores (blanco, negro, rojo, azul y


amarillo), los cuales fueron obtenidos de minerales. Su mural más famoso es el que representa a un personaje antropomorfo conocido como el “demonio de las cejas prominentes”, que se ha identificado con la divinidad moche llamada Ai apaec o el dios degollador. I.

ORFEBRERÍA: Los mochicas fueron los mejores metalurgistas de su época. Utilizaron el oro, la plata, el cobre y sus aleaciones. La aleación más característica fue la tumbaga (mezcla de oro y cobre). Doraron el cobre mucho antes que en Europa y conocieron una variedad de técnicas, como el laminado, martillado, alambrado, soldadura, etc. Fabricaron herramientas, armas, atuendos, emblemas, ornamentos y toda su variada y rica parafernalia ritual. Es de destacar su pericia para construir figurinas de poco más de 2 cm con partes móviles, unidas con pequeñísimas grapas.

J.

ARQUITECTURA: Como base para sus construcciones emplearon el adobe, puesto que era la materia prima que tenían a la mano. Construyeron grandes palacios, urbes y templos, los cuales los recubrían de murales en alto y bajo relieve, pintados de colores extraídos de la naturaleza a los cuales les agregaban colágeno extraído de la cocción de las patas de las aves, que actuaba como una especie de látex; decoraban con representaciones de sus dioses, mitos, leyendas y toda su cosmovisión. En las construcciones importantes como las huacas, se solía hacer cada cierto tiempo una reedificación, en la cual en vez de remodelar una pared, la tapaban construyendo otra adelante; esto se puede apreciar en todas las huacas. En su arquitectura monumental destacan las Huacas del Sol y de la Luna, en Moche. La Huaca del Sol es un inmenso edificio que mide más de 40 m de altura y tiene 5 terrazas superpuestas: los expertos calculan que se necesitaron más de 140 millones de adobes para su construcción. A 500 m de esta huaca se alza la Huaca de la Luna, de 21 m de altura y de tres terrazas; esta destaca por sus bellas pinturas murales, una de las cuales representa el rostro fiero de un dios, posiblemente Ai apaec. Se cree que la Huaca del Sol fue un centro administrativo, mientras que la Huaca de la Luna era un centro religioso.

K.

RELIGIÓN: Por sus dioses castigadore, el principal Ai Apaec. Adoraron además al sol y a la luna. También rindieron culto a dioses antropozoomorfizados, con rasgos de cangrejo, zorro, búho, pez gato, pato pico de cuchara (extinto), serpiente, águila, puma, jaguar, lagartija,


perro, sapo, venado, araña, pulpo, mono, cóndor, iguana. Se puede apreciar el parecido en los colmillos y los rasgos felinos que se observan en algunas de sus representaciones. Los sacrificios humanos eran practicados por los mochicas con fines rituales.

L.

SEÑOR DE SIPÁN: Es la única tumba de un gobernador precolombino hallada intacta en el Perú. Data del siglo III. Actualmente los restos de este personaje se encuentran en el Museo Tumbas Reales de Sipán, en Lambayeque. Se trata de un hombre de 1,67 m, y de entre 35 a 40 años de edad. Se lo halló al lado de los restos de 8 personas (tres mujeres, dos varones, un niño y dos guardianes) y animales (dos llamas y un perro). El cuerpo del personaje estaba cubierto de numerosos ornamentos, armas y emblemas de oro, plata y cobre dorado. Se hallaron también 209 ceramios, muchos de los cuales contenían ofrendas. Meses después se hallaron dos tumbas más: la de un sacerdote contemporáneo al Señor de Sipán, y la de un personaje que por las armas, atuendos, ornamentos y emblemas, debió tener el mismo cargo del señor de Sipán, y al que se bautizó como el “Viejo Señor de Sipán” (antepasado del Señor de Sipán en tres generaciones).


A.

INTRODUCCIÓN: Chimú es una cultura preincaica que se desarrolló en la costa norte tras el decaimiento del Imperio huari entre los años 1000 y 1200.

B.

UBICACIÓN: Ocuparon los territorios que antes habitaron los mochicas y el Lambayeque, llegando a expandir sus dominios, en su etapa de mayor desarrollo, por toda una extensa franja costera del norte del Perú de unos 800 km de longitud, desde Tumbes hasta el valle de Huarmey.

C.

ORIGEN: Los chimúes aparecen hacia el año 900. El fundador del reino chimú fue Tacaynamo, un personaje legendario que habría llegado con su séquito sobre grandes balsas de madera y adoptó el nombre de “Gran Chimú”. Se cree que el llamado “reino del Chimú” tuvo diez gobernantes, pero solo se conocen los nombres de cuatro de ellos: el ya mencionado Tacaynamo, Guacricur, Naucempinco y Minchancaman. Este último fue un gran conquistador, llegando al sur hasta las cercanías del triple valle de Chillón-Rímac-Lurín; sin embargo, acabó siendo arrollado por el expansionismo incaico. Los gobernantes eran tratados como dioses y vivían en un elegante palacio de Chan Chan. Había clases sociales regidas por un estado imperial que había conquistado al reino Sicán de Lambayeque. Justamente las leyendas de Naylamp en Sicán y Tacaynamo en Chimú transmitían fantásticamente las guerras iniciales por esas tierras. El pueblo pagaba tributo a los gobernantes (en productos o en trabajo).


D.

HISTORIA: La cultura chimú se desarrolló en el mismo territorio donde siglos antes existió la cultura Mochica. Al igual que los mochicas, la cultura chimú se desarrolló en el valle de Moche (al norte de Lima), al noreste de Huarmey acabando en Trujillo central, en el departamento de La Libertad. Limitaba por el sur con Pativilca o Carabayllo (Lima) y por el norte con Olmos (Piura) y Tumbes. La capital era la ciudadela de Chan Chan, con una extensión de 22 kilómetros cuadrados, ubicada próxima al mar, cerca de la actual ciudad de Trujillo, a 550 km al norte de Lima.

E.

AGRICULTURA: Los chimúes cultivaban maíz, frijol, zapallo, calabaza, maní, lúcuma, palta, ciruelo del fraile, pacae, caigua, guanábana, algodón. Para ampliar el área cultivable usaron una extensa red de canales, muchos de los cuales fueron herencia de las culturas moche y Lambayeque. Se tratan de auténticas obras de ingeniería hidráulica, en el que forzosamente debieron aplicar conocimientos de matemáticas y topografía. Los canales, hechos de piedra, seguían la pendiente natural de los cerros y las márgenes de los ríos. Uno de los más impresionantes es el llamado La Cumbre, de 84 km de largo, que llevaba el agua del río Chicama al valle de Moche. Actualmente está en uso solo 17 km, ya que el resto fue paulatinamente abandonado tras la conquista española, pues precisaba de una limpieza continua que dejó de hacerse.

F.

ORGANIZACIÒN POLÍTICA: Desde el punto de vista político, el Reino Chimú puede ser definido como un estado aristocrático clasista. Contaba con una burocracia de administradores que tenía bajo su control todo el sistema productivo sostenido por los artesanos y los campesinos. El Estado se hizo fuertemente centralizado y se orientó hacia la expansión imperial.

G.

ORGANIZACIÓN SOCIAL: A la cabeza de la pirámide social estaba el gran señor llamado cie quich, que vivía en una corte fastuosa. Luego venían los alaec, o grandes curacas o caciques, miembros de la nobleza, a quienes podemos comparar con los señores feudales. Al final se encontraban los vasallos, que eran la gran mayoría, es decir el pueblo, dedicados a la pesca, a la agricultura, a tareas artesanales y al comercio; y como último grupo, los sirvientes (esclavos).


H.

PESCA Y CAZA: Para la pesca utilizaron canoas o caballitos de totora, que todavía usan los actuales pobladores de Huanchaco. Con estos caballitos de totora se adentraban al mar para la pesca de una gran variedad de peces, para lo cual utilizaban redes sujetadas entre dos embarcaciones o anzuelos. Recolectaban también moluscos marinos, como el choro, la almeja y el caracol. Los productos marinos conformaban la mayor parte de su alimentación de origen animal. Complementaban su dieta con animales domésticos, como la llama, el pato, el cuy y el perro, incluso con aves marinas que sabían guardar en corrales. Y con productos de caza, como el lobo marino y el venado, animal este que está representado con profusión en su arte cerámico. Asimismo, consumían caracoles terrestres y los cañanes o lagartijas del desierto.

I.

CERÁMICA: Las principales características de las vasijas chimúes son una pequeña escultura en la unión del gollete con el arco, su fabricación moldeada para la cerámica ceremonial y modelada para uso diario, su coloración generalmente negro metálico con algunas variantes, su brillo característico se obtenía humeando la vasija que previamente había sido pulida. También se elaboraron cerámicos de colores claros en pequeñas cantidades. En la cerámica se han plasmado muchas representaciones realistas como animales, frutos y personajes, así como, escenas místicas y eróticas.

J.

TEXTILERÍA: El hilado consiste en la práctica manual y elemental de unir un conjunto de hilos pequeños para poder lograr un hilo largo y continuo, en esta labor inicial de la textilería se utilizaron diversos instrumentos como el huso. Algunas veces los textiles fueron adornados con plumas y placas de oro y plata; los colorantes se obtuvieron de ciertas plantas que contenían tanino, del molle y del nogal; de minerales como la arcilla ferruginosa y el mordiente de aluminio y de animales como la cochinilla.


Las prendas se confeccionaron de la lana de cuatro animales; el guanaco, la llama, la alpaca, y la vicuña y de la planta de algodón nativo que crece en forma natural en siete colores diferentes. K.

ORFEBRERÍA: En metalurgia y orfebrería fueron discípulos de la cultura lambayeque. Durante mucho tiempo fueron considerados joyas del arte chimú lo que en realidad pertenecía a los lambayeque, como el célebre cuchillo de Íllimo. Es muy posible que los chimúes, al conquistar Lambayeque, trasladaran a los joyeros u orfebres de esta cultura a su capital Chan Chan, para que les iniciaran en dicho arte; posteriormente, los incas harían algo similar, trasladando al Cuzco a los artesanos chimúes para que sirvieran al Imperio. Los espléndidos objetos de orfebrería de oro y plata que tanto asombraron a los conquistadores españoles eran en realidad obra de los orfebres chimúes, que ocupaban un barrio en la capital incaica. Los chimúes conocieron y desarrollaron importantes técnicas de orfebrería: la fundición, el vaciado a la cera perdida, el martillado, el plateado, el dorado, la soldadura. De los talleres chimúes salían una gran variedad de objetos metalúrgicos, destinados para fines ceremoniales, suntuarios y utilitarios. Destacan las máscaras, vasos, pectorales, collares y objetos en miniatura.

L.

ARQUITECTURA: Los restos de su arquitectura ha permitido definir que los gobernantes vivieron en los palacios y recintos monumentales, mientras el pueblo residió en viviendas de quincha con habitaciones pequeñas y fuera de la arquitectura monumental. La decoración de las paredes es sobre la base de frisos modelados en relieve, y en algunos casos, pintada. Los diseños son de figuras zoomorfas, como peces y aves, así como de figuras geométricas, todo policromado.

M. CHAN

CHAN:

Chan Chan fue la capital del reino chimú y la residencia del Gran Chimú o soberano, que tenía la categoría de emperador. Abarcaba una superficie de 25 km2, lo que lo convierte en una de las ciudades más grandes del mundo en los siglos XV y XVI. Su plano estaba diseñado como los anillos concéntricos de un árbol, salvo en la parte occidental donde hubo una tendencia al arreglo rectilíneo. N.

RELIGIÓN: El culto principal estuvo dedicado a la luna porque consideraban que era más poderosa que el sol puesto que alumbraba de noche, por su influencia sobre el crecimiento de las plantas


y su utilización como marcador del tiempo. Se le atribuía el alboroto del mar y las tempestades. Era la visitante del otro mundo y castigadora de los ladrones. Su principal templo se llamaba Si-An (Casa de la Luna) donde se realizaban ritos la primera noche de luna nueva. Sin embargo en cada poblado además se le rendía culto a otras divinidades.  Luna (Shi)  Mar (Ni)  Sol (Jiang)  Tierra (Ghis) O.

SACRIFICIOS HUMANOS: En la Huaca de la Luna las tumbas 6 y 7 pertenecían a adolescentes de 13 ó 14 años de edad. La tumba 9 pertenece a un niño. Ello evidenciaría que los chimúes sacrificaban niños a sus dioses. Le ofrecían a la luna el sacrificio de niños menores de cinco años. Sus cuerpos eran envueltos en mantas de algodón de colores, los enterraban en las explanadas de los templos, acompañados con frutas y derramaban chicha sobre la tierra.


A.

INTRODUCCIÓN: La cultura Tiahuanaco es una cultura arqueológica que se desarrolló en los actuales países de Bolivia, Perú y Chile entre los años 200 a. C. y 1100 d. C. Su área de influencia, visible en objetos con una peculiar iconografía, comprende la cuenca del Lago Titicaca como región nuclear, desde donde se distribuye hacia los valles y costa del océano Pacífico por el oeste, la región del Chapare por el este y el altiplano boliviano meridional y el oasis de San Pedro de Atacama por el sur. Su capital y principal centro religioso fue la ciudad de Tiwanaku, ubicada en las riberas del río homónimo, pocos kilómetros al sur del lago Titicaca, en el actual departamento boliviano de La Paz. Su arquitectura y escultura presentan una iconografía muy estandarizada que sugiere el desarrollo de depurados sistemas de pensamiento, difundidos a través de objetos más ligeros como cerámica y textiles. Precisamente estas dos formas de expresión material son las que encuentran mayor perfección técnica, siempre sujeta a cambios cronológicos y sobre todo a variación espacial. Usaron ampliamente la tecnología del bronce, destacando su uso en la arquitectura ceremonial de piedra en forma de grampas de sujeción.

B.

UBICACIÓN: La cultura Tiahuanaco, de origen Uru Puquina,1se desarrolló a orillas del lago Titicaca. Según el arqueólogo Carlos Ponce Sanginés surgió alrededor del año 1580 a. C. y se prolongó hasta el año 1187 d. C. El centro principal de esta cultura estuvo ubicado a una altitud de 3842 msnm. Por su carácter expansivo, Tiahuanaco abarcó parte de los territorios actuales de Perú y Bolivia, pero principalmente se desarrolló en el altiplano boliviano.

C.

POLÍTICA: La política tiahuanacota fue de tipo teocrático, es decir que no utilizó la fuerza militar en sus conquistas territoriales.


D.

RELIGIÓN: Es denominado "Dios Wiracocha o del Baculo" fue el dios principal y los tiahuanacotas, este representa a un dios celestial y según algunas hipótesis, esta deidad podría ser el mismo Tunupa de los posteriores reinos aimaras, o el Wiracocha de los tardíos incas. Históricamente la deidad de los báculos es adorada en la meseta del collao desde tiempos anteriores a los tiahuanacotas y aparece tardíamente en los wari.5 Iconográficamente, la representación mejor lograda y conservada del Dios de las Varas se encuentra en la Portada del sol, en donde la deidad aparece en posición central rodeada de seres alados.

E.

SACRIFICIOS: En excavaciones realizadas en el sitio arqueológico de Akapana se han encontrado materiales como ofrendas, alfarería, fragmentos de cobre, huesos de camélidos y entierros humanos. Estos objetos fueron encontrados en el primer y segundo nivel de la pirámide de Akapana y la cerámica adjunta corresponde a la fase III de los tiahuanacotas. En la base del primer nivel de Akapana se hallaron hombres y niños desmembrados a los cuales les faltaba el cráneo; estos restos humanos estaban acompañados de camélidos desarticulados además de cerámica. En el segundo nivel se encontró un torso humano completamente desarticulado. En total se encontraron 10 entierros humanos, de los cuales 9 eran varones. Estos sacrificios corresponden, aparentemente, a ofrendas dedicadas a la construcción de la pirámide.

F.

AGRICULTURA: Logrado el dominio del altiplano, cultivaron plantas de excepcional valor alimenticio como la papa y la quinua como plantas de altura, en tanto que en otros valles más bajos que colonizaron posteriormente sembraron maíz, yuca, oca y frutales en general. El dominio altiplánico consolidó también un sistema de ganadería, ya que si bien la meseta es dura para el sembrío, en cambio ofrece inmensos territorios cubiertos de pastos naturales propios para los camélidos andinos. De este modo supieron aprovechar la agricultura y ganadería cuando deshidrataban a la papa y la secaban al sol, en la misma forma que también lo hacían con la carne, obteniendo el chuño y el charqui que pudieron ser conservados por mucho tiempo y que les sirvieron para estos períodos cíclicos de sequía y de escasez.

G.

CAZAS: Practicaron actividades de caza sea con las especies de camélidos (auquénidos) que no habían logrado domesticar y que pastaban por la meseta, o también con otras especies de


animales que habitaban en los diferentes pisos ecológicos de las otras regiones en los que los pobladores de la Cultura Tiahuanaco se habían asentado. Así en el lado selvático buscarían capturar al felino o al jaguar, en tanto que siervos y venados serían cazados en los valles y lomas de la costa. H.

ARQUITECTURA: Las primitivas muestras arquitectónicas fueron los dólmenes o construcciones de piedra rectangulares, que habilitaron con fines de vivienda. Posteriormente edificaron las chulpas o construcciones que tuvieron fines funerarios, hechos de piedra y de barro, inicialmente eran de forma cuadrangular, después adoptaron la forma cilíndrica teniendo como base la piedra labrada y pulida, tal como se observa en las famosas chulpas de Sillustani, en Puno. Después de éstos, los restos arquitectónicos más importantes son: las terrazas de Pumapunku, de forma semicircular, la fortaleza de Akapana y el palacio de Kalasasaya.

I.

LA PORTADA DEL SOL: La Portada del Sol, es una piedra gigantesca, de una sola pieza, de más de cuatro metros de ancho, por tres de alto y ochenta centímetros de espesor. En la parte Inferior tiene una abertura de un metro de ancho por dos de alto, que es la portada propiamente dicha. En la parte superior y central de la piedra se encuentra esculpida, en alto relieve, la figura del dios Wiracocha, en forma estilizada, rodeado de dioses menores o geniecillos que en tres hileras de ocho cada una y como arrodillados miran hacia la imagen de Wiracocha o dios antropomorfo (figura humana), que sostiene dos báculos, uno en cada mano y cuya cabeza está circundada de rayos. Para algunos estudiosos esto es la representación de un calendario astronómico. En la parte posterior de la portada se encuentran grabados algunos signos escalonados cuya interpretación sigue siendo un misterio para los investigadores ya que para unos representan el infinito, para otros, el recorrido del nacimiento a la muerte, en una palabra, es la graficación de la vida humana.

J.

CERÁMICA: Es sobre todo una cerámica incisa, los vasos son de regular tamaño, de paredes gruesas, pintados de rojo, anaranjado, marrón y blanco. Los motivos o adornos representan al cóndor, felino y la serpiente, utilizando, además, el signo escalonado como figura geométrica. Las formas predominantes son el kero y el pebetero.


K.

ORFEBRERÍA: Pueblo más agrícola y ganadero que industrial o guerrero, el hombre de la Cultura Tiahuanaco mostró pocas actividades en el campo de la metalurgia, trabajando el oro y la plata con los que confeccionaron algunos objetos como orejeras, brazaletes y otros objetos ornamentales pero de ejecución un tanto rústica, ya que la orfebrería no fue el carácter principal de esta cultura sino más bien la lítica o el trabajo sobre la piedra.

L.

ESCULTURAS: Está representada por sus monolitos de gran tamaño y de carácter monumental, tal como la podemos apreciar en los monolitos de El Fraile y el de Bennet. El primero está esculpido en arenisca y la figura es de 2.80 m. de alto por 60 centímetros de espesor; el de Bennet, a su vez, también, está esculpido en arenisca, tiene 7.30 rm de alto en total, ocupando sólo la figura 5.30 m. por 70 centímetros, pesa 17 toneladas y representa a un ser antropomorfo que sostiene un vaso en una mano y en la otra aprisiona una extraña figurilla.

M. DECADENCIA:

La decadencia política y religiosa de Tiahuanaco ocurrió entre el 950, 1000 y 1100 d. C.4 La evidencia en el valle de Azapa (Chile) da cuenta de que los sitios de la élite tiahuanacota fueron destruidos sangrientamente, se observaron tumbas arrasadas y cuerpos que fueron profanados y despedazados. En Moquegua, también se observaron sitios tiahuanacotas destruidos violentamente, aunque en el caso de Moquegua también existe la hipótesis de una destrucción por la invasión del estado huari. En el caso del altiplano, la pérdida del poder se da de manera menos violenta, esto evidenciado por la continuidad de los estilos alfareros tiahuanacotas alrededor del Titicaca, así como la continuidad de las tradiciones funerarias y cotidianas; lo que hace pensar que el estado Tiahuanaco primero perdió su poder en la periferia (casos de Azapa y Moquegua) y luego en el altiplano. Según Pärssinen la pérdida del poder hizo vulnerables a las colonias a los ataques de etnias locales. En el siglo XI, la capital de Tiahuanaco fue abandonada y empezaron a aparecer varios asentamientos menores en toda la meseta del Collao. El incremento de poblaciones pequeñas se incrementa en función al abandono de la ciudad de Tiahuanaco, en un proceso que termina con el abandono total de la ciudad y la pérdida absoluta del poder periférico.


A.

INTRODUCCIÓN: La cultura chavín o cultura de Chavín es una cultura arqueológica del Antiguo Perú que se desarrolló durante el Horizonte Temprano. Tuvo su centro de desarrollo en la ciudad de Chavín de Huántar, que está ubicada a 2 km de la confluencia de los ríos Huacheksa y Mosna, en la cuenca alta del río Marañón. Tradicionalmente, el desarrollo histórico de Chavín se considera como un «horizonte cultural» debido a sus influencias artísticas y religiosas presentes en otras culturas contemporáneas a ella. Fue el arqueólogo Julio César Tello quien la descubrió y consideró como la «cultura matriz» o «madre de las civilizaciones andinas». Tello planteó que la cultura chavín fue de origen amazónico debido a las múltiples representaciones de la iconografía selvática en sus manifestaciones artísticas, especialmente en la cerámica.

B.

UBICACIÓN: El centro ceremonial de la cultura chavín, Chavín de Huántar, se encuentra ubicado en el Callejón de Conchucos en el lado oriental de la Cordillera Blanca, en la confluencia de los ríos Mosna y Huachecsa, afluentes del río Marañón; en el actual distrito de Chavín de Huántar,6 en la provincia de Huari (región Áncash). Tiene como coordenadas 9° 35′ 33.99″ S, 77° 10′ 42.43″ O y una altitud de 3150 msnm.

C.

ORGANIZACIÓN SOCIOPOLÍTICA: De acuerdo a algunas teorías, en el estado teocrático chavín los más hábiles por sus conocimientos astronómicos, ambientales del tiempo y del clima se destacaron en su


comunidad y terminaron convirtiéndose en sacerdotes y jefes. Se distinguen dos clases bien diferenciadas: 

Los sacerdotes: La casta sacerdotal, la clase dominante, poseía conocimientos de la astronomía, del tiempo y del clima lo que les proporcionaba gran influencia y poder, también eran grandes técnicos agrícolas, ingenieros y especialistas en las artes. 

D.

El pueblo: La clase dominada, conformaba la masa popular, es decir, los agricultores y ganaderos, al servicio de la casta sacerdotal.

AGRICULTURA: Desarrollaron la agricultura cultivando diversos productos entre los que figuran el maíz y la papa, camote, mashua, oca, olluco, pepino, tomate. Entre las técnicas agrícolas destaca el uso de los canales; también se inició la construcción de los primeros andenes y el uso de la chaquitaclla (arado de pie), que acrecentó la productividad agrícola.

E.

GANADERÍA: Desarrollaron la ganadería a base de los camélidos sudamericanos (llamas y alpacas), así como la crianza de cuyes.

F.

ORFEBRERÍA: Modelaban mediante el martillado y el repujado, confeccionando diademas, brazaletes, aretes, orejeras, cuentas de collar y pequeños adornos. Algunas muestras de estos trabajos fueron halladas en Chongoyape y Kuntur Wasi. La alta ley del oro hace suponer que procedían de los lavaderos de los ríos amazónicos.

G.

TEXTILERÍA: Utilizando como materia prima el algodón y la lana, se hacían tapices y tejidos. Estos podían ser simples bordados y con adornos a base de orlas y flecos. Otro tejido encontrado en Ica es la tela pintada donde se observan los personajes religiosos de la cultura chavín que, según algunos arqueólogos, sería un catecismo destinado a difundir el culto religioso de aquella cultura.


H.

CERÁMICA: La cerámica fue extraordinaria. Es generalmente monocroma, en algunas ocasiones es decorado con colores rojo y negro-plata. Con añadido de una serie de puntos. Entre los seres más representados figuran: seres zoomorfos (felinos, monos, lagartos, serpientes y aves), fitomorfos (tubérculos) y antropomorfos. Los colores más usados fueron: gris, marrón y negro.

I.

ESCULTURA: Sus características generales es que fueron hechas de piedra (arte lítico) con énfasis religioso. Las esculturas más relevantes son los monolitos, las estelas y las cabezas clavas.

J.

EL LANZÓN MONOLÍTICO: El lanzón monolítico ―que representa al Dios Sonriente (según John Rowe) o a un dios con el rostro fiero― es una escultura de 5 m de altura que está clavada en medio de un espacio reducido de forma cuadrangular, dentro de un crucero que está debajo de la tierra, en la parte céntrica del Templo Antiguo del complejo arqueológico de Chavín de Huántar. Fue bautizado como el «lanzón» por su forma de punta de proyectil gigantesca, aunque esta denominación es errónea, pues en realidad se trata de un huanca (wanka en quechua) o „piedra sagrada‟, de primordial importancia en el culto religioso. La razón de su peculiar forma es todavía materia de discusión; posiblemente fue tallado para simular la forma de un colmillo. En su superficie está labrada la imagen de un dios con rasgos antropomorfos y zoomorfos (entre estos últimos destacan los cabellos y cejas en forma de serpientes, la boca con dos grandes colmillos y las manos con garras felinas). El ser antropomorfo representado lleva la mano derecha alzada y la izquierda apoyada en el muslo. Posiblemente era la principal divinidad del Templo Viejo de Chavín de Huántar y al parecer es similar al dios representado en la estela Raimondi (su principal diferencia con esta es que no lleva báculos).

K.

ARQUITECTURA: La arquitectura se difundió por todo el territorio, caracterizándose por las estructuras en forma de U, plataformas, pirámides truncadas, plazas hundidas o rectangulares y pozos circulares.9 Sus construcciones fueron


mayormente líticas (hechas de piedra) aunque en algunos lugares, especialmente en la costa, también utilizaron el barro y adobe. El principal ejemplo de la arquitectura chavín es el santuario de Chavín de Huántar cuya construcción se puede dividir en dos fases: la primera fase corresponde a la construcción del Templo Viejo (1200-500 a. C.), y la segunda, que corresponde a la construcción del Templo Nuevo (500-200 a. C.). El diseño del templo no habría resistido al valle accidentado recorrido por el río torrentoso de Mosna, sin embargo los chavines crearon un sistema de drenaje con dos propósitos: uno que permitía el paso de las aguas por debajo del templo y otro con la intención de producir ruidos rugientes como de un inmenso felino. Esto haría que el templo de Chavín de Huántar pareciera estar rugiendo como un jaguar. El templo está construido con granito, piedra caliza blanca, piedra caliza negra y barro. L.

RELIGIÓN: El pueblo chavín fue al parecer politeísta y adoró a dioses terroríficos. Según Julio C. Tello, la religión chavín habría tenido influencia amazónica, ya que sus esculturas muestran seres sobrenaturales, con rasgos felínicos como del jaguar o puma, caimanes, serpientes y diversas aves andinas como el cóndor y el halcón, o amazónicas como el águila harpía y la anaconda. El culto chavín se estimuló debido al progreso técnico alcanzado en la producción agrícola, en el desarrollo textil, en la pesquería (uso de grandes redes de pesca), en la orfebrería y la metalurgia del cobre. Estos avances técnicos impulsaron el desarrollo económico y condujeron a la construcción de muchos centros ceremoniales. El sitio sagrado de Chavín de Huántar fue indudablemente un punto central para los rituales religiosos. La vestimenta y la música tenían parte importante en las ceremonias. La religión chavín tuvo como cabeza principal a una casta sacerdotal; es probable que existiese la figura de un «gran sacerdote», como en la jerarquía religiosa incaica.


    

NOMBRE: María Sánchez Arroyo CURSO: Diseño Gráfico PROFESOR: Arturo Chian Segovia AÑO Y SECCIÓN: 5to A sec. COLEGIO: S.R.L


Turn static files into dynamic content formats.

Create a flipbook
Issuu converts static files into: digital portfolios, online yearbooks, online catalogs, digital photo albums and more. Sign up and create your flipbook.