Editado: Pérez Maria Torres Maria Jose
Índice Índice..................................................................................................................................................1 Editorial..............................................................................................................................................2
Cuidados Prenatales ..........................................................................................................................3 Cuáles son los Cuidados Prenatales................................................................................................4 Preparación de la Pareja para el Nacimiento.....................................................................................6 Educación Prenatal...........................................................................................................................19 Nutrición de la Madre......................................................................................................................23 NECESIDAD DE UNA BUENA ALIMENTACIÓN ..............................................................................24 DIETA ADECUADA.........................................................................................................................24 ALIMENTACIÓN DIARIA................................................................................................................24 ALIMENTACIÓN COMPLEMENTARIA............................................................................................25 ALIMENTOS Y CANTIDADES DIARIAS RECOMENDABLES ..............................................................25 ¿ QUE SE DEBE EVITAR?................................................................................................................26 Aumento de Peso en Oficios............................................................................................................26 Exámenes e Ingesta o Consumo de Alimentos.................................................................................26 Reflexión..........................................................................................................................................30
Editorial El trabajo del personal de la salud en la atención primaria está dirigido a garantizar una optima atención del individuo, familia y comunidad y en consecuencia
lograr cambio en el estilo de vida, en su entorno ecológico biológico y social y para ello se hace necesario agrupar y coordinar los esfuerzos de los diferentes profesionales para lograr que la población se incorpore a las transformaciones del medio social que le rodea, y de esta forma, se modifiquen ellos mismo, y asuman valores y conducta de vida mucho más sanas que harán posible los cambios futuros que se esperan en el país dentro del campo de la salud. Las tasas de mortalidad materna y peri natal son indicadores que reflejan todos las condiciones de vida de la mujer; la morbilidad subyacente y la calidad de de vida de una sociedad. La atención prenatal ha sufrido modificaciones de acuerdo con los conocimientos actuales y del desarrollo de nuestro sistema de salud; los cuidados obstétricos prenatales pueden ofrecerse en los 3 niveles de atención por eso es fundamental el perfeccionamiento de la educación en el trabajo como proceso docente educativo en el ciclo clínico de las diferentes carreras.
Cuidados Prenatales El cuidado prenatal es más que solamente los cuidados de la salud durante el embarazo.
Es posible que su proveedor de atención médica hable con usted acerca de muchos temas, tales como la nutrición y actividad física, qué esperar durante el proceso del parto y habilidades básicas para el cuidado del recién nacido. El médico o la partera le darán una agenda con el programa de sus consultas prenatales. Seguramente verá a su proveedor de atención médica con mayor frecuencia a medida que se acerque su fecha del parto. Un esquema típico incluye visitas a su médico o la partera: •
Aproximadamente una vez al mes durante los primeros seis meses del embarazo.
•
Cada dos semanas durante el séptimo y el octavo mes del embarazo
•
Semanalmente durante el noveno mes del embarazo. Si tiene más de 35 años o su embarazo es de alto riesgo porque tiene
ciertos problemas de salud, como diabetes o hipertensión, el médico o la partera probablemente querrán verla con más frecuencia.
Cuáles son los Cuidados Prenatales Un plan de cuidados prenatales típico para una mujer con un embarazo normal de bajo riesgo es: •
Semanas 4 a 28:1 visita al mes (cada 4 semanas)
•
Semanas 28 a 36:2 visitas al mes (cada 2 semanas)
•
Semanas 36 hasta el parto: 1 visita a la semana
Es posible que las mujeres con condiciones médicas crónicas o un embarazo de "alto riesgo" tengan que consultar a su médico con más frecuencia. Asegúrese de asistir a todas las citas de cuidados prenatales programadas, aunque se sienta bien.
Durante su primera visita de cuidados prenatales, su médico le hará muchas preguntas y algunas pruebas. Las visitas restantes serán por lo general mucho más cortas. En la primera visita, su médico: •
Le preguntará sobre su salud, la salud de su pareja y la salud de sus familiares cercanos. No se preocupe si no tiene todas las repuestas
•
Identificará problemas médicos.
•
Le hablará sobre cualquier medicamento que esté tomando.
•
Le hará un examen físico y pélvico (interno).
•
La pesará.
•
Le medirá la presión arterial.
•
Le pedirá una muestra de orina.
•
Le hará algunos análisis de sangre para verificar que no tenga anemia y comprobar si ha tenido ciertas infecciones. Le preguntará si desea realizarse una prueba de VIH, el virus que causa el SIDA.
•
Le hará un frotis de Papanicolaou para verificar que no tenga cáncer cervical y otras pruebas para detectar ciertas infecciones vaginales.
•
Le dirá la fecha estimada del parto, es decir, día en que nacerá su bebé. La mayoría de los bebés nacen dentro de las dos semanas (antes o después) de la fecha estimada.
•
Se asegurará de que usted esté tomando una vitamina prenatal que contenga ácido fólico.
Durante las visitas de cuidados prenatales posteriores su médico: • • •
La pesará. Le medirá la presión arterial. Le pedirá una muestra de orina para controlar el nivel de proteína y azúcar.
• • • • • •
Le medirá la barriga para controlar el crecimiento del bebé (en la etapa media y final del embarazo). Le revisará las manos, los pies y la cara para ver si están hinchados. Escuchará los latidos del corazón del bebé (después de la semana número 12 del embarazo). Le palpará el abdomen para evaluar la posición del bebé (más adelante en el embarazo). Le realizará todas las pruebas necesarias, como análisis de sangre o ultrasonidos. Le preguntará si tiene alguna duda o inquietud. Le conviene escribir sus preguntas y llevar la lista a la consulta para no olvidarse. Nadie sabe exactamente por qué las mujeres que reciben cuidados
prenatales desde el comienzo y en forma regular tienen embarazos más saludables y bebés más sanos. Lo que sí sabemos es que funciona. Por eso, no deje de ir a sus visitas prenatales. Hágalo por usted y por su bebé.
Preparación de la Pareja para el Nacimiento El nacimiento de un hijo es un momento delicado que necesita la dirección de profesionales. El bienestar de la futura mamá y del bebé depende de ello. En respuesta a las medidas del
plan
perinatal
2005-2007,
la
preparación para el nacimiento y la maternidad/paternidad fue instaurada por la Haute autorité de santé(Alta Autoridad de Sanidad), a petición de la Dirección general de la salud y de las
comadronas. Este plan prevé especialmente un control y un seguimiento lo más precoz posible. La preparación para el nacimiento y la maternidad/paternidad concierne a todas las mujeres que están embarazadas, pero también a todas las parejas. He aquí las recomendaciones de la HAS para dicha preparación. Históricamente las mujeres han preparado el nacimiento de un hijo organizando la casa, la ropita del bebé y los enseres que debían llevar al hospital. Se preparaban para la llegada del bebé pero no para la experiencia del parto. Los padres desconocían los procesos que se sucedían en ese momento, la mujer se resignaba a padecer dolor y el hombre se situaba en la sala de espera aguardando con nerviosismo que el médico les informara sobre el resultado del misterioso evento. Actualmente, a excepción de pocos casos, el padre y la madre viven juntos la experiencia del embarazo y el parto. Los progenitores se alejan de la ignorancia, recurren a la lectura de libros y revistas, plantean al médico sus dudas y acuden juntos a las clases de preparación para el parto. Hoy los padres se educan y preparan para la experiencia de recibir al bebé. ¿Cómo debo prepararme para el parto? Durante los meses previos al parto, has estado hablando con distintas personas acerca de este momento: tu ginecólogo, la instructora del curso de preparación para el parto (psicoprofilaxis), el neonatólogo, entre otros, para llegar en las mejores condiciones anímicas y físicas al parto y estar preparada para vivir con plenitud y felicidad el nacimiento de tu hijo ya sea que nazca por vía natural o cesárea.
La tarea del ginecólogo o gineco obstetra durante el trabajo de parto es fundamental. Ideológicamente, debes compartir con tu médico su convencimiento de las bondades físicas y psicológicas del parto natural y debes saber que vas a disponer de sus conocimientos, paciencia y tiempo - que puede ser prolongadopara llegar a buen término. A la hora de prepararse para el momento del nacimiento de tu bebé, es necesario distinguir dos mundos bien diferentes, pero que son complementarios: 1. Por un lado se encuentra el mundo de la Afectividad en el que podríamos incluir la auténtica comunicación de los padres con el niño antes de nacer. o
Durante el embarazo no sólo hay cambios físicos. Las cuestiones emocionales cobran cada vez mayor importancia. Dentro del cuerpo de la madre está creciendo un ser vivo, que es parte de ella y al que considera como algo que ya es suyo. No ha nacido, pero ya es su hijo. La preparación al parto proporciona los elementos para alimentar esa relación.
o
El bebé siente y reacciona a los estímulos externos, oye a la madre y todo ese cúmulo de sensaciones generan multitud de incógnitas en la embarazada que con una buena preparación va solucionando poco a poco. La adecuada canalización de los sentimientos maternales es una cuestión tan importante para el buen fin del embarazo como la dieta o como la supresión de situaciones de riesgo y aunque parezca algo natural, es algo que puede proporcionar mucha tranquilidad a la futura madre.
o
La evolución de la preparación al parto ha ido incluyendo paulatinamente importantes componentes afectivos y psicológicos asociados a la maternidad y constituye ya una herramienta bastante
completa que proporciona a la futura madre las capacidades físicas y mentales para afrontar la llegada de su hijo. 2. Y por el otro está el mundo de la Efectividad, dentro del cual podríamos incluir todo lo relativo a la tecnología y rigor científico. ¿Debo estar informada de todo lo que significa un parto? Si, la información es una ventaja esencial de la preparación al parto. La información proporciona los conocimientos esenciales para comprender los procesos que se suceden en estas últimas semanas. Una mujer que conoce paso a paso los cambios que va sufriendo su cuerpo, está preparada para afrontar cualquier circunstancia médica que se presente durante el parto. El conocimiento permite a la futura madre vivir con intensidad este momento, pues ya no se trata de una cuestión en la que ella es mera espectadora pasiva, que no entiende nada de lo que está pasando y se convierte en protagonista esencial del proceso. ¿Qué debe saber una pareja, en especial la embarazada, para esperar el parto? Una pareja debe tener información clara sobre: •
El embarazo en general.
•
Cómo saber cuándo está en trabajo de parto
•
Explicación sobre el proceso normal de parto con todas sus fases, así como las diferentes posiciones para dar a luz y las posibilidades que existen de que sea parto natural o por cesárea
•
Información sobre los sedantes para los dolores de parto.
•
Aprendizaje de las técnicas de respiración.
•
Ejercicios de relajación.
•
Información sobre el papel que cumple la pareja o acompañante en el momento del parto
•
Preparación para la lactancia.
•
Tips para los cuidados del bebé.
¿Cuándo debo empezar a preparme? Una pareja puede prepararse para el parto con información recibida a través del médico o de lecturas y cursos de psicoprofilaxis obstétrica. Para que tus últimas semanas sean de tranquilidad, en el caso de que el bebé tenga mucha prisa por venir al mundo, es mejor si empiezas a leer y a hacer tus preguntas a más tardar en la semana 30 del embarazo. Una buena preparación proporciona, por una parte, información detallada de lo que ocurre en ese momento, de lo que el equipo médico va a hacer y de cómo la madre puede ayudar al buen fin del proceso. Por otra parte, aporta los conocimientos para que la colaboración de la madre sea verdaderamente efectiva. La embarazada, en especial, debe adquirir una actitud positiva que le permita colaborar con los profesionales, logrando que su parto sea vivido como una experiencia feliz. Una madre que no sabe cómo y cuándo empujar, que no sabe relajarse en las fases precisas, que no sabe controlar las contracciones y los dolores del momento, que se descontrola, que es incapaz de soportar el trance, se convierte en un elemento negativo en el momento clave del nacimiento del niño y puede constituir un factor de riesgo o de fuerte inconveniente para el parto.
Por el contrario, una madre informada y entrenada en todas estas cuestiones es una colaboradora eficaz del equipo médico y parte esencial del nacimiento sin problemas para su hijo. Esto se logra conociendo y comprendiendo todas las posibles alternativas de su parto para que, llegado el mismo, nada la sorprenda ni la asuste. Debes compartir tus miedos con otras mamás que tengan tus temores y expectativas. El aprendizaje de técnicas de respiración y de relajación para controlar las fases del momento de la expulsión te va a permitir manejar y atenuar las sensaciones dolorosas del parto, evitando un sufrimiento físico y psíquico innecesario, viviendo este acontecimiento como feliz y gratificante. ¿Cómo me puedo preparar para la labor de parto? El esfuerzo que significa la labor de parto se ha comparado con la carrera de un maratón. Tu estado físico y las medidas que tomes para conservar tu nivel de energía jugarán un papel muy importante en cómo transcurrirá ese momento. Si es tu primer embarazo, puedes pensar que vas a tardar más tiempo que cuando ya es el segundo o tercero. •
Procura descansar lo más posible, no es el momento de fatigarte haciendo cosas.
•
Si tienes problemas para dormir, date un baño tibio antes de acostarte y toma un pequeño refrigerio para elevar el nivel de azúcar de tu sangre.
•
Aliméntate bien. Necesitarás todos esos nutrientes extras para el trabajo que te espera.
¿Y el padre....qué papel juega?
Afortunadamente, el embarazo se vive cada vez más como una cuestión integral de la pareja y no como algo que compete exclusivamente a la madre Desde un principio se debe fomentar la implicación del padre en el embarazo. El padre ya no es ese señor que acompaña a su pareja embarazada al ginecólogo, no se entera de nada y confía en que su mujer tome buena nota de todo lo que dice el médico. Es pieza clave del proceso de gestación y responsable en buena medida del equilibrio emocional de su pareja. Sabe también lo que pasa en el cuerpo de su pareja y debe aprender a reorganizar su vida cotidiana para participar activamente en la gestación; junto con su pareja han aprendido a relacionarse con su hijo y a responder ante todos los acontecimientos que se avecinan. El embarazo es cosa de dos y esa es una de sus principales virtudes.
¿Cuál es mi papel como padre en la sala de labor? 1. La puedes ayudar a cambiar de posición o acompañarla a caminar cuando todavía puede hacerlo. 2. Anímala y trata de mantenerla en calma. 3. Puedes agregar hielo picado al agua que toma para disminuir la sensación de náusea. 4. Es conveniente que la madre sepa que tiene toda tu atención. 5. Espera con emoción el gran momento.
6. Recuérdale constantemente que tiene que relajarse, que debe respirar lentamente y concentrarse en esto. 7. Sigue apoyándola aunque se enoje, no te vayas, ella quiere que estés ahí. Recuerda que a veces la mujer maneja el dolor a gritos. 8. Ayúdala a centrar su atención en algo diferente a las contracciones. ¿Apoya o estorba que la pareja asista al parto? Aunque muchos piensen que un hombre en el quirófano es un intruso, para la mayoría de los expertos, la presencia del padre en el parto de su bebé, ayuda a la mujer a tolerar el dolor y fortalece los lazos familiares. Pero a pesar de las buenas intenciones del padre por acompañar a su mujer y darle la bienvenida al mundo a su hijo, es inevitable que se sienta nervioso y algunos, hasta aterrorizados de presenciar el parto. ¿Cuál es su papel dentro de la sala de partos? Generalmente, el hombre se pone una bata y mascarilla esterilizadas, se lava manos y brazos y se sienta en la cabecera, a un lado de la madre, acompañándola y ayudándola a concentrarse en la respiración, mientras el equipo médico la asiste, hasta que les entregan el hijo a ambos. Algunos doctores piden colaboración al padre, para que tome un papel más activo, por ejemplo, cortando el cordón umbilical del niño. Este tipo de intervenciones siempre son acordadas de antemano y sólo se hacen si el padre lo desea. No se trata de que él atienda el parto, es más, a la madre se le coloca una sábana por delante y así, el papá no necesita ver directamente todo el proceso si no se siente preparado para hacerlo.
¿Qué vivencia tiene el padre? El nacimiento es el primer contacto directo que él tiene con su hijo. Aunque participe activamente en el embarazo de su mujer y asista a todos los controles prenatales y ecografías, él no siente al niño moverse en el vientre, no experimenta los cambios físicos y anímicos que tiene la mujer durante el embarazo, ni sufre las contracciones. Por eso, el nacimiento de la criatura es su primera vivencia real de paternidad. Al ser testigo del nacimiento de su bebé y tener un contacto temprano con él, el padre fortalece su lazo afectivo con el pequeño y se siente aún más comprometido en su cuidado, crianza y protección. ¿Esta experiencia es igual si el parto es por cesárea? Si, lo mismo ocurre en una cesárea. Aunque para los padres es muy impactante ver la incisión y más aún cuando los médicos sacan al bebé del vientre materno, prima el deseo de conocer al hijo y estar al lado de la madre en ese momento tan importante. Puesto que se trata de una cirugía, es poco probable que el padre pueda intervenir. A pesar de todo, y cualquiera sea el tipo de parto, algunos padres sienten esta experiencia como ajena, misteriosa y en algunos casos violenta. Por eso prefieren quedarse fuera. Lo importante es que no sea a la fuerza y su entrada sea solo si él lo desea. Es importante desarrollar un plan de acción para el momento del parto: Hacer por adelantado un plan de acción para el momento de la labor de parto y el parto mismo, les permitirá pensar en todas las alternativas con una
mente clara y racional. Tómate tiempo para discutir con tu pareja y, si es posible, con el médico, las distintas alternativas. Conforme se acerca la fecha es importante que decidan: •
quiénes irán,
•
a dónde,
•
detalles sobre la comunicación/el transporte y la ruta a seguir.
•
como te comunicarás con tu médico
•
quién te acompañará dentro de la sala de parto
•
los artículos necesarios que tienes que llevar
Y solucionar por adelantado todo aquello que pueda presentarse de improviso y causarte estrés: •
quién se quedará con los niños (si no es tu primer bebé)
•
quién tomará las decisiones en caso de no estar disponible la persona designada,
•
posibles donantes de sangre,
•
asuntos financieros, etc.
•
guarda una tarjeta en tu bolsa de mano en la que hayas escrito el nombre de tu pareja y los teléfonos a donde lo pueden llamar, el nombre y dirección del hospital donde te vas a atender y el nombre del médico que te va a atender. Esto es como seguridad por si la labor de parto se inicia fuera de casa.
La consulta prenatal con el pediatra
Es muy importante buscar un pediatra ya durante el embarazo para poder contar con su ayuda en cuanto lleguen a su casa. El pediatra tendrá que ser accesible e infundir confianza en la mamá, estimulando su autoestima y logrando que ella logre realizar lo que le parezca mejor, aunque se equivoque Es muy importante preguntarle al médico acerca de sus horarios de atención y de disponibilidad, es decir, cómo ubicarlo ante una urgencia, sobre todo de noche o los fines de semana. Además, es muy útil combinar en este momento cual será la estrategia a seguir en casos de urgencia. Generalmente el pediatra conoce los centros de atención de guardia de la ciudad donde ejerce, y tiene sus preferencias al respecto. Por otra parte, se puede conversar acerca del parto y el post-parto, algunos profesionales están presentes en el momento del parto y otros realizan el seguimiento de sus pacientes visitándolos en el sanatorio, y esto también se acuerda en esta entrevista. Además, todas las dudas que tengan los padres se pueden resolver tranquilamente, y sin el bebé en brazos. Por ejemplo, cómo se cuida el cordón umbilical, cómo debe dormir el bebé, qué piensa el pediatra del uso del chupón, qué aconseja respecto de la lactancia, etc. Al pediatra también le sirve... Para el médico, la entrevista prenatal es una oportunidad única de conocer y asistir a la pre-historia del bebé. Ya que no apremia el tiempo para pesar, mediar y revisar, el pediatra se toma todo este tiempo para iniciar el vínculo con la familia, detectar los temas que angustian a los padres y charlar sobre esto, así como también explicarles los cuidados básicos del bebé.
A su vez, conocer detalladamente los antecedentes del embarazo, y los hábitos y costumbres de esa familia, producen un pensamiento clínico menos técnico, y mucho más ajustado a la necesidad de cada familia. Esto favorece enormemente la tarea del profesional, y enriquece la relación. Permitirnos compartir con Uds. esos momentos excepcionales que viven ahora que esperan a su hijo, y dejarse llevar por nuestras orientaciones, basadas en experiencia, investigación y conocimiento, es para nosotros UN PRIVILEGIO Y UNA GRAN RESPONSABILIDAD. Gracias…
Por eso, a través de este curso prenatal queremos darte la oportunidad de: •
Tener una vivencia consciente de lo que significa estar “embarazados”
•
Aprender a disfrutarlo en armonía, conociendo tus fortalezas y tus debilidades.
•
Estrechar los nexos afectivos con la pareja y con el bebé que está por nacer.
•
Adoptar mecanismos naturales para manejar el dolor y tener un parto más feliz.
•
Conocer las diferentes alternativas que ofrece la obstetricia moderna.
•
Inducirlos en el campo de la puericultura, es decir, los primeros cuidados del recién nacido.
La educación prenatal es una educación que no es nueva porque muchas culturas la han tenido en cuenta pero que necesita ser renovada y actualizada con
los datos que hoy nos aportan los descubrimientos científicos gracias a las nuevas tecnologías. Se trata ante todo de educar en el sentido de avivar el desarrollo y las capacidades potenciales, en este caso del bebé en su vida intrauterina. No se trata, sin embargo, de estimular artificialmente al bebé, ya que estudios sobre este asunto han demostrado que no sólo no es efectivo sino que además es contraproducente para el desarrollo sano del bebé. La educación del bebé en su vida intrauterina es distinta a la educación posnatal. La impregnación es, en la etapa prenatal, el proceso educativo más importante
de
experimentación).
los procesos Por
educativos
impregnación,
las
(impregnación, células
reciben
imitación
y
información
que graban y se va dando en todo el organismo una interacción permanente. Según las recientes investigaciones en la gestación se forman las primeras bases de la salud del bebé, su afectividad, sus capacidades intelectuales y su creatividad, así como la forma de relacionarse con el entorno. La educación prenatal abarca las diferentes facetas del ser humano. Por un lado, las necesidades fisiológicas del bebé y de la futura madre han de ser contempladas en la
educación prenatal para que permita una salud y un
desarrollo equilibrado. La madre ha de mantener durante la gestación del bebé una alimentación equilibrada y saludable, una respiración profunda y relajada, una dosificación justa de actividad y de reposo, y ha de evitar el alcohol, el tabaco y las drogas. A la vez, y a medida que el bebé va desarrollándose la madre ha de mantener un contacto intenso con el bebé favoreciendo el desarrollo de la actividad sensorial del bebé. Esto supone que la mamá a través de su voz, tacto y pensamientos interactúe con el bebé, ya que éste a medida que va desarrollando sus órganos va recibiendo más información, y cuanta más información afectiva mejor se desarrollará. Para ello, es muy importante que la mamá cante, toque su
vientre masajeando al bebé y tenga pensamientos positivos. A través de la madre, el padre interviene también. Por otro lado, las necesidades psicoafectivas también han de ser tenidas en cuenta en la educación prenatal. El amor se transmite totalmente, y los estudios científicos han demostrado que el desarrollo del bebé se ve influenciado positivamente por los sentimientos amorosos y cálidos de la madre, mientras que la indiferencia, la frialdad e incluso el rechazo son factores que deterioran el desarrollo del bebé tanto psíquicamente como físicamente. Otros aspectos importantes que influyen mucho en el bebé son los pensamientos y las imágenes mentales que la madre mantiene ya que son un lenguaje subconsciente que transmiten mensajes, y son recogidos por el bebé sean positivas o negativas. Por ello conviene mucho que la madre cuide mucho su actividad mental durante
este
periodo
gestacional.
El
estrés
que
la
madre
vive,
es
contraproducente tanto para ella como para el bebé ya que le repercute mucho dándose cada vez más una correlación entre bebés prematuros y el estrés en la mujer embarazada.
Educación Prenatal A partir de la década de los 80, gracias a numerosas observaciones científicas llevadas a cabo en distintos campos, como la Medicina, la Psicología, la Biología, la Genética, o la Física moderna, se ha dado un nuevo paso en la comprensión de la vida, al estudiar la vida en el útero.
Del viejo paradigma que consideraba al bebé antes de nacer como un ser incapaz, que no se enteraba de nada, que era algo así como tonto, ciego y sordo, se ha pasado con todos estos nuevos estudios a un nuevo paradigma, que nos va demostrando las capacidades tan maravillosas del bebé en el vientre materno. Así, se sabe que a partir
del
gestación están
tercer sus
formados,
mes
de
sentidos
ya
y
el
feto
percibe las informaciones a través de todos sus sentidos; es capaz de reaccionar ante esas informaciones, y las memoriza. Se sabe también que los bebés en el útero son seres sociables y comunicativos, que sienten el amor o el rechazo de su madre, que sienten placer y dolor, que el estrés de sus madres les repercute - no sólo emocionalmente, sino que incluso interfiere en la formación de sus órganos -, que tienen cierto grado de conciencia... A pesar de que estamos tan sólo en los albores de estos descubrimientos, ya nos van demostrando que durante el periodo prenatal el ser humano construye las primeras bases de su salud, de su afectividad, de sus capacidades de relación (de su capacidad de amar), de sus facultades cognitivas (inteligencia), e incluso de su creatividad. Todo lo que admitimos respecto a la primera infancia aún es más cierto para antes del nacimiento.
Cuando reunimos todos estos estudios emerge la realidad de una Educación Prenatal fundamental. Es importante distinguir la Educación de la Instrucción. La instrucción es la transmisión de conocimientos y de habilidades, y utiliza métodos de aprendizaje. Pero al bebé en el útero no hay que enseñarle nada, intentarlo sería arbitrario y peligroso; sería una intrusión en el proceso de formación y ejerceríamos violencia sobre él/ella. En cambio el objetivo de la Educación es desarrollar las potencialidades del ser humano y su adaptación al mundo. Y la Educación se opera a través de tres procesos esenciales: La Impregnación, la Imitación /Identificación y la Experimentación. En el periodo prenatal la impregnación es máxima, es celular. El niño/a en el útero se impregna de todo lo que vive su madre. Si los padres están informados de que su hijo se educa al mismo tiempo que se forma, tienen la posibilidad de evitar que reciba ciertas violencias y pueden darle las mejores condiciones para su desarrollo más óptimo, según su propia dinámica y su proceso natural. El bebé en el útero vive y convive intensamente con su madre 24 horas al día durante 9 meses. Él no tiene la posibilidad de hacer una selección entre lo que le beneficia y lo que le resulta nocivo. Es la futura madre la que debe hacer esa elección, con la complicidad del padre, de los profesionales que la acompañan, de los educadores y de todas las instituciones. •
A nivel físico el bebé construye su cuerpo con los materiales aportados por la sangre de su madre.
•
A nivel afectivo comparte las emociones de su madre, éstas le llegan por vía hormonal y energética.
•
A nivel mental, los pensamientos e imágenes mentales de su madre le influyen; una vía de conducción es el agua, según los trabajos del investigador Masaru Emoto. Esto explicaría el impacto de la vida interior de la madre sobre el psiquismo y el organismo de ese futuro ser. Todo ello invita a los futuros padres y sobre todo a la futura madre,
primera y principal educadora de su hijo/a, a transmitirle lo mejor de sí misma y a utilizar el poder de su imaginación creadora para sembrar en él/ella la alegría, la tolerancia, la paz, el amor, el entusiasmo, el respeto... es decir, sensibilizarlo a los más bellos valores del ser humano. Y esos valores penetrarán tan profundamente en el subconsciente de su hijo que le influirá a lo largo de su vida. Si los Gobiernos e Instituciones en vez de dedicar tanto presupuesto a la creación de hospitales, prisiones y a la reducción de la violencia, se remontasen a las verdaderas causas, al origen de la vida, y se ocupasen de las futuras madres proporcionándoles las condiciones necesarias para vivir un embarazo armonioso, sano y positivo, los resultados a nivel físico y psíquico serían incomparablemente mejores y los costos infinitamente menores. La Educación Prenatal natural es una prevención fundamental contra la violencia y otras disfunciones, por ello el tema del IV Congreso Mundial de Educación Prenatal celebrado en Venezuela (2001), fue "Hacia un mundo sin violencia". Y principalmente la Educación Prenatal favorece la construcción de una Cultura de Paz desde el mismo inicio de la vida. Y nos involucra a todos, educadores, profesionales, instituciones y representantes a nivel de gobiernos.
Y podemos esperar que seres gestados, nacidos y educados en el amor y el respeto sean capaces de construir un mundo más humano, más justo, pacífico y fraternal en donde cada uno pueda encontrar su lugar y estar al servicio de todos.
Nutrición de la Madre Durante
el
embarazo,
el
organismo de la mujer experimenta cambios
que
le
afecta
física
o
psíquicamente, por lo tanto su esfuerzo biológico es mayor. La formación de un nuevo ser determina una serie de exigencias en la madre, una es la alimentación, la cual debe reunir las sustancias nutritivas que requieren, tanto la madre como el niño por nacer. La actividad diaria de la mujer (sin estar embarazada) tiene un gasto aproximadamente de 2.000 calorías. Durante los primeros meses de embarazo, la cantidad de calorías deben mantenerse entre 2.000 y 2.200 aproximadamente por día. Conforme a la gestación progresa los requerimientos del niño aumentan y el consumo de calorías por parte de la madre puede llegar a 2.600 al final del embarazo. Generalmente la actividad de la madre disminuye, no es necesario aumentar la ingesta calórica. La cantidad de calorías y la calidad de la misma y con el aumento de peso de la madre. El sobrepeso conlleva adversos problemas como son: dolores de pie,
piernas, espalda, el corazón tiene que realizar mayor esfuerzo, pierde agilidad y es más propensa a caídas, los kilos de exceso no significan un bebé más grande y saludable, significa más problemas durante el parto y kilos demás en la madre después del parto.
NECESIDAD DE UNA BUENA ALIMENTACIÓN •
Es necesaria para la formación de los tejidos en el feto
•
Se necesitan vitaminas, minerales y proteínas para proporcionar energía que requiere la madre y para el desarrollo normal del bebé
•
Los riñones e intestinos y el corazón de la madre necesitan alimentos que los ayuden a trabajar en forma eficiente
DIETA ADECUADA Una dieta adecuada requiere alimentos de los tres grupos alimenticios que brinden calorías en cantidades adecuadas, no en exceso, proteínas las cuales son esenciales
al
igual
que
(esencialmente el calcio)
ALIMENTACIÓN DIARIA •
Carne
•
Huevos
•
Leche
•
Queso
carbohidratos,
lípidos,
vitaminas
y
minerales
ALIMENTACIÓN COMPLEMENTARIA •
Ensaladas
•
Vegetales
•
Cereales y granos
•
Pan
•
Grasas
•
Frutas
•
Postres
•
Papas y pastas
•
Líquidos
ALIMENTOS Y CANTIDADES DIARIAS RECOMENDABLES •
Leche y derivados (2 raciones)
•
Carnes y huevos (2 veces a la semana)
•
Hortalizas (2 raciones)
•
Frutas (5 raciones)
•
Granos (1raciones)
•
Verduras y plátanos (1 ó 2 raciones)
•
Grasas (5 cucharaditas)
•
Azúcares (6 cucharaditas)
¿ QUE SE DEBE EVITAR? •
Comidas con demasiadas calorías
•
Controlar el consumo de sal
La mujer embarazada frecuentemente presenta acidez, estreñimiento, vomito y náuseas
Aumento de Peso en Oficios Durante el embarazo deben engordar, mientras queda la época de la obsesión por el peso cuando se recomendaba a las embarazadas que tuvieran cuidado con esto. El aumento más rápido se produce normalmente entre las 24 y 32 semanas, pero si ya se siente algo pesada, es el momento de contenerse un poco o de pasear o nadar más con el fin de eliminar las calorías sobrantes. Sin embargo, no es momento adecuado para ponerse a dieta. Coma alimentos equilibrados, nutritivos y frescos (fresas, frutas, secos, zumos naturales). Trate
de
tomar
alimentos
variados,
frescos,
preferiblemente
procesamiento industrial.
Exámenes e Ingesta o Consumo de Alimentos Antes del desarrollo de la medicina madres
moderna, y
sus
muchas
bebes
no
sobrevivían al embarazo y al proceso
de
nacimiento.
Actualmente, el buen cuidado prenatal
puede
mejorar
sin
significativamente la calidad del embarazo y el pronóstico tanto
para él bebe
como para la madre. El buen cuidado prenatal incluye: •
Buena nutrición y hábitos saludables antes y durante el embarazo
•
.Exámenes prenatales frecuentes
Ecografías de rutina para detectar problemas con él bebe pruebas de detección de rutinas para: o
Anomalía con la presión arterial
o
Problemas del tipo sanguíneo ( Rh y ABO)
o
Diabetes
o
Trastornos genéticos, si un antecedente familiar o la edad de la madre ofrecen un alto riesgo
o
Inmunidad a la rubiola
o
Infecciones de trasmisión sexual
o
Proteínas en orina
Las mujeres que planean seguir con un embarazo hasta el término necesitan escoger un médico que les brinde servicios de cuidados prenatal, durante el parto y después de este. Las opciones de médicos en la mayoría de las comunidades son entre otras: o
Médicos especializados en obstetricia y ginecología
o
Enfermeras obstétricas certificadas
o
Médicos de familia
o
Enfermeras profesionales o auxiliares médicos que trabajan con un médico general.
o
Perinatólogos, médicos que se especializan en embarazos de muy alto riesgo
o
Los médicos de familia, o médicos generales, son expertos en el manejo de las mujeres a lo largo de sus embarazos y partos normales.
Las metas del cuidado del cuidado prenatal son: o
Vigilar tanto a la mujer embarazada como al feto a lo largo de todo el embarazo.
o
Buscar cambios que puedan llevar embarazo de alto riesgo.
o
Abordar dolencias comunes que se puedan originar durante el embarazo (como nauseas del embarazo, dolores de espalda, dolor pierna, micción frecuente, estreñimiento y ardor en el estómago) y cómo manejarlo preferiblemente sin medicamentos.
o
Brindar apoyo a la mujer embarazada y a su familia
Las mujeres que están pensando en quedar embarazada o que estén en embarazo deben consumir una dieta balanceada y tomar un suplemento de vitaminas y minerales que incluya al menos 0.4 miligramos (400 microgramos) de ácido fólico. El ácido fólico se necesita para disminuir el riesgo de desarrollo de ciertas anomalías congénitas, como la espina bífida. Algunas veces se prescriben dosis más altas si una mujer tiene un riesgo a lo normal de padecer estas afecciones. A las mujeres embarazadas se les aconseja consultar el uso de cualquier medicamento con el médico y evitar todos los medicamentos, a menos que sean necesarios y recomendados por un médico experto en cuidado prenatal. Así mismo, las mujeres en embarazo deben evitar cualquier consumo de alcohol y drogas, al igual que limitar la ingesta de cafeína y no fumar. Igualmente, deben evitar el uso de preparaciones herbales y medicamentos comunes de venta libre que puedan inferir con el desarrollo normal del feto. Las visitas prenatales se programan particularmente: o
Cada 4 semanas durante las primeras 28 semanas de gestación
o
Cada 2 a 3 semanas desde la semana 28 a la semana 36 de gestación
o
Semanalmente desde la semana 36 hasta el parto
El aumento de peso, la presión arterial, la altura uterina y los tonos cardiacos fetales (en la medida de lo necesario) generalmente se miden y registran en cada visita y se realizan pruebas rutinarias de detección en orina. Cuando llamar al médico: Llame al médico si sospecha que está en embarazo, está actualmente en embarazo y no está recibiendo cuidado prenatal o si es incapaz de manejar dolencias comunes sin el uso de medicamentos. Llame al médico si sospecha que está embarazada y está tomando medicamentos para diabetes, enfermedad de la tiroides, convulsiones o presión arterial alta. Comente al médico si actualmente está embarazada y ha estado expuesta a una infección de sexual, a químicos, a radiación o contaminantes inusuales Consulte al médico si está actualmente embarazada y presenta fiebre, escalofrió o micción dolorosa. Llame al médico inmediatamente Es urgente que llame al médico si actualmente está embarazo y tiene alguna calidad de sangrado vaginal, dolor abdominal intenso, trauma físico o emocional severo o ruptura de fuente (ruptura de membranas). Igualmente llame si usted está en la última mitad de su embarazo y nota que su bebe se está moviendo menos o no se está moviendo en absoluto.
Reflexión El hoy
en
embarazo día
es
un
problema
de
salud
pública,
no
sólo
asociado
a
los
trastornos
orgánicos
propios de la juventud materna, sino porque están
implicados
factores
socio-
culturales y económicos que comprometen el binomio madre e hijo. Como la adolescencia es una etapa en la cual ocurren un conjunto de cambios fisiológicos, sociales y emocionales; dependiendo de la edad de la adolescente y del tiempo que ha transcurrido entre su desarrollo y el embarazo puede haber más o menos complicaciones; si la adolescente tiene menos de 15 años se ha observado mayor riesgo de aborto, parto pre término o parto por cesárea por inmadurez fisiológica. La embarazada tiene el mismo riesgo que una paciente adulta, excepto si está mal alimentada, o si se encuentra en situación de abandono por parte de su
pareja o familia, por otro lado es posible que la adolescente no esté preparada para asumir emocionalmente el compromiso de un bebé o necesite mayor apoyo. En vista de esto es necesario crear programas para fomentar la información y los servicios requeridos a los jóvenes para concientizarlos y lograr una sexualidad responsable. Asimismo, es necesario crear centros de apoye para las adolescentes embarazadas, tanto desde el punto de vista médico como emocional.