UNO Y DOS MartĂn Cossarini
UNO Y DOS
Fotografías tomadas en el Barrio General de División Manuel Nicolás Savio, conocido popularmente como Lugano I y II, entre noviembre de 2016 y diciembre de 2017. Fotos * Martín Cossarini.
Barrio General de División Manuel Nicolás Savio es el nombre del complejo habitacional ubicado en el barrio de Villa Lugano, al sur de la Ciudad de Buenos Aires, Argentina. Inicialmente fue llamado Conjunto Urbano Lugano I y II y conserva ese nombre popularmente. El proyecto empleó un equipo de 33 arquitectos, 30 ingenieros, 5 sociólogos, 5 agrimensores, 5 economistas y 76 técnicospara diseñar y desarrollar el Conjunto Habitacional Lugano I y II, que comenzó a construirse hacia 1970. Al concluirse, se totalizaron 118 edificios en tira, del tipo conocido como monoblocks, de 14 pisos cada uno, con 4 departamentos por piso. En la actualidad viven aproximadamente 50.000 habitantes en lo que hace tiempo se convirtió en uno de los barrios populares más emblemáticos de la ciudad. Bajo el capitalismo la construcción de viviendas se orienta según el perfil delineado por el mercado inmobiliario: más viviendas lujosas y suntuosas
en los barrios con mayor densidad y demanda. Palermo, Caballito, Puerto Madero, Villa Urquiza y Belgrano concentraron el 42,6% de la superficie construida en el período 2001-2011, mientras los barrios del sur de la ciudad en cambio obtuvieron solo el 9,7%. Gentrificación se llama al proceso que implica el desplazamiento de la población original de un área por presión del mercado: se mejora la infraestructura en el mejor de los casos, o se “inventa” un nuevo barrio (distritos de arte, de diseño, de gastronomía, etc.) o se desarrolla comercialmente una zona más o menos espontáneamente. Este combo hace aumentar el valor de la propiedad y los alquileres, lo que produce la expulsión de quienes ya no pueden pagar esos nuevos costos hacia áreas marginales. Las grandes empresas constructoras beneficiadas con estas operaciones siguen siendo las mismas de siempre: Caputo, Camps, Eurnekian, Elsztain. Siempre amigos de los gobiernos de turno.
Emaco es una de estas grandes empresas que el año pasado fue beneficiada con la licitación para la construcción de la “Villa Olímpica”. Es una de las obras más grandes que ganó hasta ahora Emaco, en una Unión Transitoria de Empresas con Constructora Lanusse SA, por 148 millones 823 mil pesos. Por ese monto, construirá parte de la Villa Olímpica en Lugano, que albergará a los atletas en los Juegos Olímpicos de la Juventud que se harán en Buenos Aires en 2018. Una nueva excusa para el “progerso” que no es otra cosa que la expansión de los millonarios negocios de unos pocos en detrimento de las condiciones de vida de las mayorías populares.
Trabajo realizado en el marco de la materia Fotoperiodismo II a cargo de la docente Emiliana Miguelez, ARGRA Escuela. Impreso en enero de 2017 * Ciudad de Buenos Aires