Salid de Ella, Pueblo Mío - Jesús

Martín Hiram - “Salid de ella…

Índice 1) Introducción ........................................................................................................................... 2 2) La profecía que desafió a la historia ................................................................................ 4 3) El reinado de las bestias ...................................................................................................... 8 El surgimiento del ‘cuerno pequeño’ ............................................................................. 12 Estados Unidos en la profecía ........................................................................................ 19 La ‘santa alianza’ ............................................................................................................... 20 El gran conflicto final ........................................................................................................ 21 El Papa y la Globalización .............................................................................................. 23 4) Salid de Ella, Pueblo Mío ..................................................................................................24 5) La segunda venida de Jesús .............................................................................................. 38 El origen y el final del mal ............................................................................................... 40 Señales anunciadoras ........................................................................................................ 41 El bien triunfa sobre el mal............................................................................................. 42 Como ladrón en la noche ................................................................................................ 44 6) Llamado a ser de Jesús ...................................................................................................... 45 7) Apéndice ................................................................................................................................ 48 Libros recomendados por el escritor .......................................................................... 48 Datos de contacto ............................................................................................................ 48

Martín Hiram - “Salid de ella…

1- Introducción

S

alid de ella Pueblo Mío. En esta obra queremos poner la atención y el énfasis en estas palabras. Es un mensaje claro, un mandato expreso y categórico, seguido de una solemne advertencia: “para que no seáis partícipes de sus pecados y ni recibáis

parte de sus plagas” (Apocalipsis 18:4). ¿Quién da la orden? El mismísimo Jesucristo.  ¿A quién se lo dice? A su pueblo, los que lo reconocen como líder, los verdaderos cristianos.  ¿A quién se refiere con „ella‟? En su contexto está hablando simbólicamente de „Babilonia‟; descubriremos su significado. 

En el Apocalipsis, Jesucristo nos presenta una iglesia falsa, a la que llama „Babilonia‟, porque su culto proviene de este pueblo pagano e idólatra. Sin embargo, paradójicamente, la mayor parte de sus hijos se encuentran inocentemente dentro de ella. Como Babilonia ha actuado en el nombre de Cristo, ha engañado a todo el mundo y perseguido a los verdaderos cristianos, los castigos divinos están a punto de caer sobre ella. Es en ese contexto, que se escucha una potente voz del cielo, la Voz de Jesús, dando su más amoroso ultimátum: “Salid de ella Pueblo Mío, para que no seáis participes de sus pecados y no recibáis parte de sus plagas…”

Muchas veces oímos hablar a la gente sobre el Apocalipsis, o de los eventos descriptos en este libro, como alarmantes, catastróficos, aterradores, eventos que rogamos que no sucedan, que sean un mito, una historia de terror que nunca ocurrirá. Pero si vamos a la fuente, lo veremos desde una mejor perspectiva. El escritor es uno de los doce apóstoles de Jesús, Juan, su discípulo amado. Él comienza con estas palabras: “Este es el libro de la revelación que Dios confió a Jesucristo para que mostrase a sus siervos las cosas que pronto han de acontecer.

Jesucristo envió su ángel a su siervo Juan, para dársela a conocer, y Juan ha testificado de la palabra de Dios, del testimonio de Jesucristo y de todas las cosas que vio y oyó. Bendito el que lee esta profecía y benditos los que la escuchan y la guardan, porque la hora de su cumplimiento ya está cerca.”

El Apocalipsis es la REVELACIÓN DE JESUCRISTO. El mismo que anduvo sanando y consolando a los hombres, derrochando amor y alegría por todas partes; el que tomó nuestras culpas y murió para que tengamos vida es quien reclama la autoría del libro, y jura por Dios que sus palabras se cumplirán. SAN JUAN, el „discípulo amado‟ de Jesús; llamado el „apóstol del amor‟, porque ese fue siempre el tema principal de su discurso, fue el escriba. Condenado al destierro a la solitaria y agreste isla de Patmos, por fidelidad a su Maestro y con casi cien años, sin una casa tibia, ni computadora, ni siquiera un cuaderno y una lapicera… con la más ruda tecnología escribió las palabras más solemnes, que a través de dos mil años han hecho temblar el mundo.

„Revelación de Jesucristo de „las cosas que van a suceder pronto‟. Revelar es descorrer el velo, sacar a luz un misterio. El Apocalipsis es una descripción del futuro próximo. No para que suceda, sino porque va a suceder. No para que muramos, sino para que vivamos. La milenaria

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Capítulo 1: Introducción

lucha entre el bien y el mal llegará a su fin y tocará a nuestra generación protagonizar la culminación de la historia. Si el Apocalipsis no existiera, el mal ganaría la victoria y la humanidad se autodestruiría. A través de 6.000 años ha reinado el egoísmo, la injusticia, la miseria, la crueldad, el sufrimiento, el dolor y la muerte. El Apocalipsis dice BASTA. Aquí encontramos el mayor anhelo por el que vivir, la mayor meta que podamos alcanzar: la esperanza de una vida nueva, sin sufrimiento, sin dolor, en donde la muerte no existirá más!

Dice Apocalipsis capítulo 21:“Vi un cielo nuevo y una nueva tierra, porque la primera tierra y el primer cielo desaparecieron, y el mar ya no existía. Y vi yo, Juan, la ciudad santa, la nueva Jerusalén, que descendía del cielo, de la presencia de Dios, con la bella apariencia de una novia ataviada para su esposo. Y oí una voz potente que gritaba desde el trono: ¡Mira, el templo de Dios está entre los hombres! Dios va a morar con ellos, y ellos serán su pueblo, y Él estará con ellos como su Dios. Enjugará las lágrimas que les broten de los ojos, y la muerte no será más, y no habrá ya tristeza ni clamor ni sufrimiento, porque todo eso habrá pasado y dejado de existir. El que estaba sentado en el trono dijo: Mira, yo hago nuevas todas las cosas. Luego añadió: Escribe lo que voy a dictarte, pues mis palabras son ciertas y dignas de toda confianza. ¡Ya está hecho! ¡Yo soy el alfa y la omega, el principio y el fin! ¡A quien tenga sed le daré a beber totalmente gratis del manantial del agua de la vida! El vencedor heredará estas cosas: yo seré su Dios, y él será mi hijo. Pero los cobardes y los incrédulos, los depravados, los asesinos y los inmorales, los brujos, los idólatras y todos los mentirosos serán arrojados al lago que arde con fuego y azufre, que es la segunda muerte.”

Oh!! Seguramente te estarán surgiendo un montón de preguntas... Algunas de ellas quizás sean: ¿Qué es esto de una vida nueva? o ¿Cómo es esto que la muerte no va a existir más, que no habrá más sufrimiento, no más dolor? ¿Cuándo será esto?... Sí, la Biblia dice que este mundo de dolor tiene sus días contados. No existirá para siempre. Dios mismo intervendrá y le pondrá fin.

Dios acabará con todo rastro de dolor, de pecado y de muerte. La historia no termina en la destrucción de la humanidad por un Dios furioso. El „FIN DEL MUNDO‟ es el principio de una nueva creación. ¿Un mundo perfecto? ¡Sí! ¡Un mundo perfecto y maravilloso!

Jesús dijo: “No se turbe vuestro corazón; creen en Dios, crean también en mí. En la casa de mi Padre muchas moradas hay; si así no fuera, yo se los hubiera dicho; voy, pues, a preparar lugar para ustedes. Y si me fuere y les preparare lugar, vendré otra vez, y los tomaré a mí mismo, para que donde yo estoy, ustedes también estén” “Bienaventurados los que lavan sus ropas, para tener derecho al árbol de la vida, y para entrar por las puertas en la ciudad” “Vivo yo, dice Jehová el Señor, que no quiero la muerte del impío, sino que se vuelva el impío de su camino, y que viva. Vuélvanse, vuélvanse de vuestros malos caminos; ¿por qué morirán?” “Yo reprendo y castigo a todos los que amo; sé, pues, celoso, y arrepiéntete. He aquí, yo estoy a la puerta y llamo; si alguno oye mi voz y abre la puerta, entraré a él, y cenaré con él, y él conmigo. Al que venciere, le daré que se siente conmigo en

mi trono, así como yo he vencido, y me he sentado con mi Padre en su trono. El

oído, oiga lo que el Espíritu dice a las iglesias” Ezequiel 33:11; Apoc. 3: 19-22).

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que tiene

(S. Juan 14: 1-3; Apoc. 22:14;

2- La profecía que desafió a la historia

E

n el capítulo 24 del libro de Mateo, los discípulos le preguntan a Jesús “qué señales habría de su segunda venida y del fin del mundo”, y Jesús les contesta. Lo primero que les advierte es que deberíamos tener mucho cuidado de ser engañados, porque vendrían muchos en su nombre y engañarían a muchos. Luego les describe la realidad que estamos viviendo en nuestros días y les dice que la última señal antes de su venida será la predicación de su evangelio a todo el mundo. Luego de que toda persona tenga la oportunidad de elegir, vendrá el fin.

Aún más llamativo que Jesús diga, con más de 2000 años de anticipación, las cosas que estamos viviendo en nuestros días, es que luego les dice a sus discípulos que la pregunta que ellos les estaban haciendo ya la había revelado a su profeta Daniel, libro que se encuentra en el Antiguo Testamento, escrito aproximadamente 600 años a.C. ¡Qué extraordinario! ¡600 años antes de que Cristo viniera Dios reveló lo que sucedería hasta el fin del mundo!!!

En este capítulo analizaremos una de las profecías del libro de Daniel. Se encuentra en el capítulo 2.

Nos servirá para ubicarnos en el momento de la historia de nuestro mundo que estamos viviendo.

Cuenta que en el segundo año de su reinado, Nabucodonosor, rey de Babilonia (605 a.C.), se acostó pensando en lo que sucedería después de él.

Había conquistado el mundo de entonces, su imperio no tenía rival, pero era impotente ante el paso del tiempo. Intuía que, más allá de él, un Soberano reinaba. Y Dios, conociendo sus pensamientos, le mostró el porvenir. Mediante la imagen de un hombre le reveló el destino de la humanidad, hasta el fin de los tiempos. Luego, la sabiduría divina quiso que Nabucodonosor olvidara el sueño, pero que su impresión permaneciera inquietante en su espíritu.

Mateo 24 Jesús salió del templo y, mientras caminaba, se le acercaron sus discípulos y le mostraron los edificios del templo.

2 Pero él les dijo: ¿Ven todo esto? Les aseguro que no quedará piedra sobre piedra, pues todo será derribado.

3 Más tarde estaba Jesús sentado en el monte de los Olivos, cuando llegaron los discípulos y le preguntaron en privado: ¿Cuándo sucederá eso, y cuál será la 1

señal de tu venida y del fin del mundo?

Tengan cuidado de que nadie los engañe, les advirtió Jesús.

5 Vendrán muchos que, usando mi nombre, dirán: 'Yo soy el Cristo', y engañarán a muchos.

6 Ustedes oirán de guerras y de rumores de guerras, pero procuren no alarmarse.

Es necesario que eso suceda, pero no será todavía el fin.

7 Se levantará nación contra nación, y reino contra reino. Habrá hambres y terremotos por todas partes.

8 Todo esto será apenas el comienzo de los dolores.

9 "Entonces los entregarán a ustedes para que los persigan y los maten, y los odiarán todas las naciones por causa de mi nombre.

10 En aquel tiempo muchos se apartarán de la fe; unos a otros se traicionarán y se odiarán; 11 y surgirá un gran número de falsos profetas que engañarán a muchos.

12 Habrá tanta maldad que el amor de muchos se enfriará, 13 pero el que se mantenga firme hasta el fin será salvo.

14 Y este evangelio del reino se predicará en todo el mundo como testimonio a todas las naciones, y entonces vendrá el fin.

15 "Así que cuando vean en el lugar santo 'la terrible abominación', de la que habló el profeta Daniel (el que lee, que lo entienda), 16 los que estén en Judea huyan a las montañas.

17 El que esté en la azotea no baje a llevarse nada de su casa.

18 Y el que esté en el campo no regrese para buscar su capa.

19 ¡Qué terrible será en aquellos días para las que estén embarazadas o amamantando!

20 Oren para que su huida no suceda en invierno ni en sábado.

21 Porque habrá gran tribulación, como no la ha habido desde el principio del mundo hasta ahora, ni la habrá jamás...

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Capítulo 2: La profecía que desafió a la historia.

Este rey quiso entonces que sus magos y sabios, que aseguraban conocer los misterios y decían tener el poder de adivinar, le hicieran conocer el sueño y su interpretación. Luego de demostrar la incapacidad de estos, Dios reveló el mismo sueño a Daniel profeta, un joven hebreo que se hallaba cautivo en Babilonia. Nabucodonosor, ante el relato y la interpretación de Daniel, reconoció el sueño, y lo puso como su segundo en el reino. Aquí el relato del sueño:

“Tú, oh rey, veías y he aquí una gran imagen. Esta imagen que era muy grande, y cuya gloria era muy sublime, estaba en pie delante de ti, y su aspecto era terrible. La cabeza de esta imagen era de oro fino; su pecho y sus brazos, de plata; su vientre y sus muslos, de bronce; sus piernas, de hierro; sus pies, en parte de hierro y en parte de barro cocido. Estabas mirando, hasta que una piedra fue cortada, no con mano, e hirió a la imagen en sus pies de hierro y de barro cocido, y los desmenuzó. Entonces fueron desmenuzados también el hierro, el barro cocido, el bronce, la plata y el oro, y fueron como tamo de las eras del verano y se los llevó el viento sin que de ellos quedara rastro alguno. Mas la piedra que hirió a la imagen fue hecha un gran monte que llenó toda la tierra. Este es el sueño; también la interpretación de él diremos en presencia del rey.

Tú, oh rey, eres rey de reyes; porque el Dios del cielo te ha dado reino, poder, fuerza y majestad. Y dondequiera que habitan hijos de hombres, bestias del campo y aves del cielo, él los ha entregado en tu mano, y te ha dado el dominio sobre todo; tú eres aquella cabeza de oro. Y después de ti se levantará otro reino inferior al tuyo; y luego un tercer reino de bronce el cual dominará sobre toda la tierra. Y el cuarto reino será fuerte como el hierro, y como el hierro desmenuza y rompe todas las cosas, desmenuzará y quebrantará todo. Y lo que viste de los pies y de los dedos, en parte de barro cocido de alfarero y en parte de hierro, será un reino dividido; Y por ser los dedos de los pies en parte de hierro y en parte de barro cocido, el reino será en parte fuerte, y en parte frágil. Así como viste el hierro mezclado con el barro, se mezclarán por medio de alianzas humanas; pero no se unirán el uno con el otro, como el hierro no se mezcla con el barro. Y en los días de estos reyes el Dios del cielo levantará un reino que no será jamás destruido, ni será el reino dejado a otro pueblo; desmenuzará y consumirá a todos estos reinos, pero él permanecerá para siempre.

El gran Dios ha mostrado al rey lo que ha de acontecer en lo por venir; y el sueño es verdadero y fiel su interpretación."

La Historia se rinde ante la Profecía: La cabeza de oro de la imagen denotaba a los babilonios (606-538 a.C.); los hombros y los brazos de plata representaban al imperio de los persas y los medos (538-331 a.C.); el vientre y los muslos de metal significaban los griegos (331-168 a.C.), que ejercieron la soberanía desde los tiempos de Alejandro Magno; las piernas de hierro expresaban a los romanos (168 a.C.-476 d.C.). Los diez dedos de los pies representan los pueblos bárbaros de origen germánico, que durante un siglo (375-476 d.C.) vinieron desde el este y el norte, invadieron Roma y dividieron el imperio.

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Capítulo 2: La profecía que desafió a la historia.

Del crisol romano germánico emergerían con el tiempo y las circunstancias las diferentes naciones actuales de Europa.

Así quedó conformado el reino de hierro y de barro cocido: 1. Los anglosajones formaron Inglaterra y Gales.

2. Los francos se radicaron en parte de la actual Francia.

3. Los burgundios dieron lugar a Suiza y parte de Francia.

4. Los visigodos se radicaron en la mayor parte de España.

5. Los suevos ocuparon Portugal y parte de España.

6. Los vándalos, el sur de España y el norte de África.

7. Los lombardos ocuparon parte de Italia.

8. Los alamanes se establecieron en Austria y Alemania.

9. Los ostrogodos formaron parte de Austria y Yugoeslavia.

10. Los hérulos luego de vencer a Roma fueron destruidos por los ostrogodos.

Las diferentes casas o dinastías que gobernaban los diferentes reinos europeos tenían como política establecer uniones entre sí a través del casamiento de sus hijos. Esperaban así unificar reinos poderosos que pudieran absorber los restantes o conquistarlos para formar al fin un nuevo imperio mundial sobre las ruinas del antiguo Imperio Romano. Así, la unificación española resultó del casamiento de Isabel de Castilla y Fernando de Aragón, los llamados reyes católicos.

Estos tuvieron varias hijas. María, se casó con Manuel I de Portugal. Catalina lo hizo con Enrique VIII de Inglaterra y Juana, „la Loca‟, se casó con Felipe „el Hermoso‟, hijo del emperador Maximiliano I, de Alemania. Una hija de este matrimonio, Leonor contrajo matrimonio con Francisco I, de Francia y Carlos, su hermano, que a su vez estaba casado con Isabel, una prima suya, llegó a ser Carlos I de España y Carlos V de Alemania. Heredó un imperio formado por las actuales Alemania, Bélgica, Holanda, Austria, Suiza, parte de Francia, parte de Italia, parte del norte de África, España y la mitad de América, por esto afirmaba que sobre sus tierras no se ponía el sol.

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Capítulo 2: La profecía que desafió a la historia.

Éste es sólo un ejemplo ilustrativo, pues la costumbre de emparentar las casas reales no fue una moda del siglo XVI, sino que alcanzó hasta el siglo pasado. A la reina Victoria I de Inglaterra, que reinó hasta 1901, se la llamó „la abuela de Europa‟, por tener a sus nueve hijos e hijas en los tronos de Alemania, Inglaterra, Dinamarca, Rusia, Prusia, Suecia, España, etc. Lo mismo ocurrió con el rey Cristian I de Dinamarca, consuegro de la reina Victoria, que también fue llamado „el abuelo de Europa‟.

El casamiento entre parientes trajo aparejada una enfermedad hereditaria, llamada Hemofilia, por problemas de consanguinidad, además de otras taras físicas en algunos casos. Estas „alianzas humanas‟, por otra parte, en vez de unificar los pueblos representados dieron lugar a duras contiendas entre parientes que se disputaban los derechos de sucesión a los reinos y que llevaron a una guerra detrás de la otra: “se mezclarán por medio de alianzas humanas; pero no se unirán el uno con el otro, como el hierro no se mezcla con el barro”.

A lo largo de la historia han tratado inútilmente de restaurar y perpetuar el antiguo imperio. Hoy se están llevando a cabo „alianzas humanas‟. Las naciones se están uniendo en bloques y súperbloques a fin de establecer un nuevo orden mundial. Fines económicos, militares, políticos y religiosos motivan la globalización. Sin embargo, aunque se mezclarán, no se unirán. Y, „En los días de estos reyes‟, cuando al parecer hayan logrado su objetivo, Dios mismo intervendrá definitivamente.

La piedra que hiere en los pies de imagen representa la Segunda Venida de Jesús al mundo. “Jesús es la piedra”, dice Hechos 4:11. “Cuando el Hijo del Hombre (Jesús) venga en su gloria, y todos los santos ángeles con él, entonces se sentará en el trono de su gloria, y serán reunidas delante de él todas las naciones...” “El séptimo ángel tocó la trompeta, y hubo grandes voces en el cielo, que decían: Los reinos del mundo han venido a ser de nuestro Señor y de su Cristo; y el reinará por los siglos de los siglos.” (Mateo 25:31-32; Apocalipsis 11:15).

Después de 2.600 años de exacto cumplimiento y viviendo en „la punta de los dedos de los pies‟ de la imagen, no nos queda más que aguardar el acontecimiento final, más solemne y terrible de toda la historia: la segunda venida de Jesús al mundo, no ya como un simple ser humano, sino como „Rey de Reyes‟ y „Señor de Señores‟. ¿Estás preparado/a?

“El que da testimonio de estas cosas dice: Ciertamente vengo en breve.

Amén; sí, ven, Señor Jesús.” (Apocalipsis 22:20).

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3- El reinado de las Bestias

A

ntes de introducirnos de lleno en la siguiente profecía, es necesario hacer algunas consideraciones respecto a cómo se debe estudiar la biblia, especialmente las profecías.

Al respecto, San Pedro dice: “De ese modo se nos confirmó el mensaje profético, al que vosotros haréis bien en prestar la mayor atención, porque las profecías son como lámparas que están encendidas en medio de la oscuridad, hasta que amanezca el día y la estrella de la mañana resplandezca en vuestros corazones. A este propósito es importante reconocer que ninguna profecía de las Escrituras debe interpretarse a capricho de nadie en particular, del mismo modo que nunca las profecías fueron fruto de una iniciativa humana, sino que fue el Espíritu Santo el que impulsó a los profetas a comunicar sus mensajes” (2 Pedro 1:19-21).

Debemos tener, como dice San Pedro, cuidado respecto al significado que le damos a las profecías. Dado que están escritas en forma simbólica, sólo hay dos formas para saber si una interpretación es correcta o no: la primera es su cumplimiento, si se cumple lo interpretado, la explicación es correcta, la segunda es cuando la misma Biblia se descifra a sí misma: lo que no entendemos en un lugar nos lo explica en otro, por ejemplo: Apocalipsis 17, versículo 1 dice: “Uno de los siete ángeles que habían vertido las siete copas, vino adonde yo estaba y me dijo: Ven conmigo, para que, según la sentencia dictada, veas lo que ha de sucederle a esa gran prostituta que se sienta sobre muchas aguas”, mientras que en el versículo 17 nos aclara que son las „muchas aguas‟: “Las aguas que has visto, de los mares, lagos y ríos sobre los que la mujer se sienta, representan pueblos y multitud de gentes de toda raza y nacionalidad”.

En este sentido, nos será muy útil la siguiente tabla, en donde podemos conocer el significado de algunos de los símbolos con que nos encontraremos en el estudio de las profecías de Daniel:

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Capítulo 3: El reinado de las bestias.

En el capítulo 7 del libro de Daniel encontramos una profecía paralela a la que vimos en nuestro capítulo anterior, pero más específica, sobre todo en lo que se refiere a las escenas finales de este mundo:

“En el primer año de Belsasar rey de Babilonia tuvo Daniel un sueño, y visiones en su cabeza mientras estaba en su lecho; luego escribió el sueño, y relató lo principal del asunto. Daniel dijo: Miraba yo en mi visión de noche, y he aquí que los cuatro vientos del cielo combatían en la gran mar. Y cuatro bestias grandes diferentes la una de la otra subían del mar.” (Daniel 7:1-3).

Decodificaremos con la Biblia. ¿Qué es el mar? Veamos: ¡Ay! multitud de muchos pueblos que harán ruido como estruendo del mar, y murmullo de naciones que harán alboroto como bramido de muchas aguas...

Las aguas que has visto... son pueblos, muchedumbres, naciones y lenguas.” (Isaías 17:12; Apoc. 17:15).

Aún en la lengua general, hoy, cuando se habla de multitudes frecuentemente se usa la expresión „marea humana‟. ¿Qué son las bestias? Las bestias son gobiernos absolutistas o totalitarios en los que el poder religioso está unido al poder político y donde los derechos individuales y de conciencia no se reconocen. “Estas cuatro grandes bestias son cuatro reyes (reinos, imperios) que se levantarán en la tierra” (Daniel 7:17 y 24). ¿Qué son los vientos? Los cuatro vientos del cielo que combatían en la gran mar representan los terribles dramas de conquista y revolución por los cuales los reinos alcanzaron el poder. (Ver Jeremías 49:37; 51:1-2, 11).

Luego continúa la profecía describiendo cada una de las bestias. Las analizaremos individualmente: Martín Hiram - “Salid de ella…

Daniel 7 El primer año de Belsasar, rey de Babilonia, una noche Daniel tuvo un sueño y visiones que puso por escrito. Este es el relato.

2 Daniel tomó la palabra y dijo: "Tuve visiones durante la noche: cuatro vientos del cielo sacudían el mar, 3 y cuatro animales enormes salían del mar; los cuatro eran diferentes.

4 El primero se parecía a un león con alas de águila; mientras lo estaba mirando, le arrancaron sus alas, fue levantado de la tierra y se paró sobre sus patas como un hombre; le fue dado un corazón de hombre.

5 El segundo se parecía a un oso, estaba echado de lado y tenía entre sus dientes tres costillas. Entonces se le dijo: "Levántate y come mucha carne".

6 Miré y vi a otro animal parecido a un leopardo, con cuatro alas en el lomo; tenía cuatro cabezas, y le fue dado el poder.

7 Mientras contemplaba mis visiones nocturnas, percibí a un cuarto animal terrible, espantoso, con increíble poder; tenía grandes dientes de hierro, comía, trituraba, y lo sobrante lo aplastaba con sus patas. Era distinto a todos los animales que lo habían precedido, tenía diez cuernos.

8 Estaba mirando los cuernos cuando surgió de entre ellos un cuerno pequeño, y fueron arrancados tres cuernos para dejarle lugar. Entonces vi en ese cuerno ojos parecidos a los ojos humanos y una boca que pronunciaba palabras insolentes.

9 Seguía mirando, pusieron unos tronos y un anciano se sentó; su ropa era blanca como la nieve, los cabellos de su cabeza eran como la lana blanca, su trono era de llamas de fuego con ruedas de fuego ardiente.

10 Un río de fuego brotaba y corría de delante de él; miles y millares le servían, millones y millones permanecían de pie en su presencia. Se constituyó el tribunal y abrieron los libros.

11 Las palabras insolentes que habían sido pronunciadas por el cuerno habían sembrado un gran desorden. Mientras estaba mirando, mataron al animal, su cadáver fue destruido y arrojado al fuego ardiente.

12 Se les quitó el poder a los otros animales, pero se les prolongó la vida por el momento hasta la fecha fijada.

13 Mientras seguía contemplando esas visiones nocturnas, vi algo como un hijo de hombre que venía sobre las nubes del cielo; se dirigió hacia el anciano y lo llevaron a su presencia.

14 Se le dio el poder, la gloria y la realeza, y todos los pueblos, naciones y lenguas lo sirvieron. Su poder es el poder eterno que nunca pasará; su reino no será destruido.

15 Yo Daniel seguía allí. Mi espíritu estaba perturbado por todo eso, pues esas visiones me habían aterrorizado…

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Capítulo 3: El reinado de las bestias.

1ª Bestia: EL LEÓN ALADO - BABILONIA. “El primero se parecía a un león con alas de águila; mientras lo estaba mirando, le arrancaron sus alas, fue levantado de la tierra y se paró sobre sus patas como un hombre; le fue dado un corazón de hombre” (Daniel 7:4).

En la imagen del sueño de Nabucodonosor el reino de Babilonia estaba representado por el rey de los metales en la cabeza de oro.

Aquí tenemos simbolizada a Babilonia por el rey de los animales, el león. Las alas significan rapidez en las conquistas, en sólo veinticuatro años Nabopolasar y Nabucodonosor conquistaron el mundo de entonces. Aún en la historia, Babilonia es representada por un león alado.

2ª Bestia: EL OSO INCLINADO - MEDO-PERSIA.

“Y he aquí otra segunda bestia, semejante a un oso, la cual se alzaba de un costado más que del otro, y tenía en su boca tres costillas entre sus dientes; y le fue dicho así; Levántate, devora mucha carne.” (Daniel 7:5).

El pecho y los brazos de plata de la imagen encuentran su paralelo en el oso que representa a MedoPersia (Daniel 8:20). El hombro más levantado se equipara con el brazo más fuerte: los persas. Las tres costillas entre sus dientes representan a las tres naciones que tuvo que sojuzgar para dominar el mundo: Lidia, Egipto y Babilonia.

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Daniel 7 Me acerqué entonces a uno de los que estaban de pie y le pedí que me dijera qué era realmente todo lo que había visto. Me habló y dio el significado de todas esas cosas.

17 Esos cuatro animales enormes son cuatro reyes que aparecerán en la tierra, 18 después de lo cual los santos del Altísimo recibirán la realeza y la poseerán por los siglos de los siglos.

19 Quería además saber la verdad respecto al cuarto animal, tan diferente a los demás y tan horrible con sus dientes de hierro y sus garras de bronce, que devoraba, trituraba y luego pisoteaba todo lo que quedaba.

20 Quería saber qué eran esos diez cuernos que tenía en su cabeza, y el otro cuerno que había brotado y ante el cual habían caído tres de los primeros. Quería saber qué era ese cuerno con ojos y una boca que pronunciaba palabras insolentes y que parecía ser más importante que los demás.

21 Seguía mirando ese cuerno, que combatía a los santos y que los vencía, 22 hasta que llegó el anciano, quien dictó sentencia en favor de los santos del Altísimo, y en ese momento los santos tomaron posesión del reino.

23 Entonces aquel a quien había preguntado me dijo: "El cuarto animal es un cuarto reino que habrá en la tierra y que será distinto a todos los demás; devorará a toda la tierra, la aplastará y la pisoteará.

24 Esos diez cuernos son diez reyes que se levantarán en ese reino, luego surgirá otro después de ellos, diferente a los anteriores, y que derrotará a tres reyes.

25 Insultará al Altísimo, perseguirá a los santos del Altísimo, tratará de cambiar el calendario y la Ley; los santos quedarán sometidos a su poder por un tiempo, dos tiempos y la mitad de un tiempo.

26 Pero se constituirá el Tribunal, se le quitará el poder, y será destruido y exterminado para siempre.

27 Entonces la realeza, la autoridad y la grandeza de todos los reinos que están bajo los cielos serán dadas al pueblo de los santos del Altísimo; su reinado es un reinado eterno y todos los poderes le servirán y le obedecerán".

28 Aquí se acaba el relato. Esas visiones me habían aterrorizado a mí, Daniel, y mi rostro había mudado de color, pero conservaba todo eso en mi corazón.

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Capítulo 3: El reinado de las bestias.

3º Bestia: EL LEOPARDO ALADO - GRECIA. “Después de esto miré, y he aquí otra, semejante a un leopardo, con cuatro alas de ave en sus espaldas; tenía también esta bestia cuatro cabezas; y le fue dado dominio.” (Daniel 7:6).

El vientre y los muslos de bronce se corresponden con el leopardo alado: Grecia. Las cuatro alas, como en la primera bestia, simbolizan la rapidez con que Alejandro conquistó el mundo. Al ser cuatro las alas el tiempo fue la mitad de lo que necesitó Babilonia: doce años. Y las cuatro cabezas representan la división del imperio griego luego de la muerte de Alejandro en sus cuatro generales: Casandro, Lisímaco, Seleuco y Tolomeo (Daniel 8:21-22; 11:2-4).

4ª Bestia: LA BESTIA ESPANTOSA Y TERRIBLE - ROMA. “Después de esto miraba yo en las visiones de la noche, y he aquí la cuarta bestia, espantosa y terrible y en gran manera fuerte, la cual tenía unos dientes grandes de hierro; devoraba y desmenuzaba, y las sobras hollaba con sus pies, y era muy diferente de todas las bestias que vi antes de ella, y tenía diez cuernos. Mientras yo contemplaba los cuernos, he aquí que otro cuerno pequeño salía entre ellos, y delante de él fueron arrancados tres cuernos de los primeros; y he aquí que este cuerno tenía ojos como de hombre, y una boca que hablaba grandes cosas...” “Dijo así: La cuarta bestia será un cuarto reino en la tierra, el cual será diferente de todos los otros reinos, y a toda la tierra devorará, trillará y despedazará. Y los diez cuernos significan que de aquel reino se levantarán diez reyes; y tras ellos se levantará otro, el cual será diferente de los primeros y a tres reyes derribará. Y hablará palabras contra el Altísimo, y a los santos del Altísimo quebrantará, y pensará en cambiar los tiempos y la ley; y serán entregados en su mano hasta tiempo, dos tiempos y medio tiempo. Pero se sentará el Juez, y le quitarán su dominio para que sea destruido y arruinado hasta el fin, y que el reino y el dominio y la majestad de los reinos debajo de todo el cielo, sea dado al pueblo de los santos del Altísimo, cuyo reino es reino eterno...” (Daniel 7:7-28).

La bestia espantosa y terrible y en gran manera fuerte representa a Roma. Ningún animal propio de la naturaleza podía servir de símbolo apropiado para su crueldad. Sus dientes de hierro devorando y desmenuzando encuentran su paralelo en las piernas de hierro de la imagen del capítulo dos.

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Capítulo 3: El reinado de las bestias.

El surgimiento del „Cuerno Pequeño‟ Es notable como se focaliza la atención del profeta en uno de los cuernos de la bestia, uno que en un principio no se encontraba dentro de los diez originales, sino que surge de entre ellos, para lo cual tienen que ser arrancados tres de los anteriores. Este cuerno „pequeño‟ llega a parecer más grande que sus compañeros. Los diez cuernos se corresponden con los diez dedos de los pies y por lo tanto con los diez pueblos bárbaros que invadieron Roma y dividieron el imperio: “Y los diez cuernos significan que de aquel reino se levantarán diez reyes; y tras ellos se levantará otro, el cual será diferente de los primeros y a tres reyes derribará”.

Caracterís ticas del ‘Cuerno Pequeño’ 1) Derriba a tres reinos: Para identificar quien es el „cuerno pequeño‟ debemos ubicar un poder que salga de Roma y que haya sido necesario derribar a tres pueblos para su surgimiento.

La historia relata la gran controversia que tuvo el papado con los hérulos, vándalos y ostrogodos, pueblos que sustentaban la doctrina de Arrio y que impedían la supremacía del papa en la ciudad de Roma. Así fue que el papa buscó el apoyo de los emperadores de oriente con sede en Constantinopla para destruirlos. Al asumir Justiniano como emperador de Oriente, procurando el apoyo del partido católico, promulgó en el 533 d.C. un decreto por el cual constituía al obispo de Roma, cabeza de todas las Iglesias Cristianas, adicionándole el título de Reformador de Herejes. Este decreto entró en vigor en el 538 d.C., después que Belisario, general de Justiniano, aplastó a los vándalos en África (potencial peligro para Roma, que ya había sufrido ataques de vandalismo) y arrojó de Roma a los ostrogodos, que habían vencido a los hérulos. Después del 538 d.C., la supremacía papal fue indiscutida. Los tres cuernos habían sido arrancados y el cuerno pequeño empezaba a aparecer más grande que sus compañeros.

2) Tiene un tiempo limitado: Otra de las características de este „Cuerno Pequeño‟ es que gobernaría al mundo en forma irrestricta por un determinado período de tiempo: “y serán entregados en su mano hasta tiempo, dos tiempos y medio tiempo” (Daniel 7:25). En arameo, el vocablo que se usa para „tiempo‟ representa un año. De manera que, dicho período abarcaría tres años y medio. El Apocalipsis confirma este dato porque dice que “se le dio autoridad para actuar cuarenta y dos meses.” (Apoc. 13:5). Durante este lapso, los hijos de Dios, como ya vimos, serían perseguidos. La verdadera Iglesia de Cristo, representada por una mujer pura (Efesios 5:22-32), debería huir, por causa de la persecución: “Y se le dieron a la mujer dos alas de grande águila, para que volase de delante de la serpiente al desierto, a su lugar, donde es sustentada por un tiempo, dos tiempos, y la mitad de un tiempo... Y la mujer huyó al desierto, donde tiene lugar preparado por Dios, para que allí la sustenten por mil doscientos sesenta días” (Apoc. 12:14, 6 - El mes hebreo tenía treinta días).

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Sin embargo, los mil doscientos sesenta días no son literales, pues en el lenguaje profético un día representa un año: “Conforme al número de los días... un año por cada día... día por año, día por año te lo he dado.” (Números 14:34; Ezequiel 4:6). Así es que, nuestro período considerado abarca mil doscientos sesenta años.

Si para surgir el Cuerno Pequeño tuvo que derribar a tres reinos –como ya vimos-, el año en que fue derribado el último marca el inicio del período que gobernaría. Dado que esto ocurrió en el año 538 d.C., el poder del mismo se extendería hasta el año 1798. Así fue, luego de ejercer su soberanía indiscutida durante toda la Edad Media, el Papado cayó bajo las armas de la Revolución Francesa. Precisamente, en 1798, el papado recibió una „herida mortal‟: el General Berthier, al mando de Napoleón, tomó prisionero al papa Pío VI y éste murió en cautiverio al año siguiente.

El apóstol San Juan, que vivió a fin del primer siglo, casi siete siglos más tarde que Daniel, vio en visión a una bestia semejante y describió su „herida mortal‟: “Me paré sobre la arena del mar, y vi subir del mar una bestia que tenía siete cabezas y diez cuernos; y en sus cuernos diez diademas, y sobre sus cabezas un nombre blasfemo. Y la bestia que vi era semejante a un leopardo, y sus pies como de oso, y su boca como boca de león... Vi una de sus cabezas como herida de muerte...” (Apoc. 13:1-3). Se cumplió la sentencia: “Si alguno lleva en cautiverio, en cautiverio irá” (Apoc. 13:10). A partir de entonces se quebró la hegemonía papal y más tarde, en 1870, los ejércitos de Víctor Manuel, liderados por el General Garibaldi, le confiscaron los Estados Pontificios (que ocupaban el centro de la península), en pro de la unificación de Italia. Sin embargo, la profecía nos adelanta que la herida sanará y la bestia recuperará su antiguo poder absoluto sobre el mundo entero: “pero su herida mortal fue sanada; y se maravilló toda la tierra en pos de la bestia.”

3) Se opone a Dios, haciéndose pasar por Dios: “tenía ojos y boca que decía grandes arrogancias” “Tenía sobre sus cabezas un nombre blasfemo... Hablaba grandes cosas y blasfemias contra Dios” (Daniel 7:20 y Apocalipsis 13:6). Una persona comete una blasfemia cuando siendo hombre se hace a si mismo dios (San Juan 10:33). El anticristo es un poder engañoso cuya oposición a Dios está encubierta detrás de una aparente religiosidad. Nadie puede oponerse más a Dios que quien usurpa su lugar y sus atributos. El prefijo griego „anti‟ significa tanto „en contra de‟, como „en lugar de‟. Por eso, la palabra „anticristo‟ quiere decir igualmente en contra de Cristo, como en lugar de Cristo. El „cuerno pequeño‟ o anticristo “se opone y se levanta contra todo lo que se llama Dios”.

Hay en la tierra una persona que siendo hombre se hace a si mismo Dios, tratando de ocupar el lugar y la función de las tres personas de la Divinidad:  El papa blasfema contra Dios Padre al hacerse llamar Sumo Padre, el Padre de los Padres. Jesús dijo: “No llaméis padre vuestro (espiritual) a nadie en la tierra; porque uno es vuestro Padre, el que está en los cielos” (Mateo 23:9).  El papa blasfema contra Dios Hijo al hacerse llamar „Sumo Pontífice‟, lo que equivale a decir, Sumo Puente, Sumo Intercesor, Sumo Sacerdote, título que corresponde a Jesús: “...teniendo un gran Sumo Sacerdote que traspasó los cielos, Jesús, el Hijo de Dios” (Hebreos 4:14).

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 El papa blasfema contra Dios Espíritu Santo, dado que Jesús dijo: “el Espíritu Santo, a quien el Padre enviará en mi nombre (Representante), él os enseñará todas las cosas” (Juan 14:26). El Papa usurpa su lugar al hacerse llamar el „Vicario de Jesucristo‟, el „Representante del Hijo de Dios‟, reclamando para sí el Magisterio de la Iglesia.

Los papas aceptan gustosamente que los hombres se postren delante suyo, cosa que ni Pedro (según ellos, el primer papa), ni Gabriel, el ángel más exaltado, han permitido: “Cuando Pedro entró, salió Cornelio a recibirle, y postrándose a sus pies, adoró. Más Pedro le levantó, diciendo: Levántate, pues yo mismo también soy hombre” (Hechos 10:25-26). “Yo me postré a sus pies para adorarle. Y él ángel me dijo: Mira, no lo hagas; yo soy consiervo tuyo, y de tus hermanos que retienen el testimonio de Jesús. Adora a Dios” (Apocalipsis 19:9-10).

LAS INDULGENCIAS: „Perdonar es divino‟ “¿quién puede perdonar pecados sino sólo Dios?” (Lucas 5:21-24). Es deber del cristiano perdonar las ofensas de sus hermanos y aún las de sus enemigos. Es deber de la Iglesia llamar al arrepentimiento y proclamar el perdón de los pecados a todos y cada uno de los penitentes. Pero la facultad de dar el perdón final es únicamente de Dios. El Anticristo no solamente se arrogaba esta facultad, sino que le ponía un precio. La venta de indulgencias por el pecado es un hecho histórico del que no se necesita hablar mucho. Algunos turistas afirman que aún hoy en las cercanías del Vaticano se venden indulgencias papales a distintos precios según la falta cometida: cuarenta dólares, sesenta... San Pedro les diría a los que participan en esta compraventa: “Tu dinero perezca contigo, porque has pensado que el don de Dios se obtiene con dinero” (Hechos 8:20).

4) Fundamentalismo intolerante - “A los santos del Altísimo quebrantará”: El „Cuerno Pequeño‟ sería un poder perseguidor: “a los santos del Altísimo quebrantará... Y veía yo que este cuerno hacía guerra contra los santos y los vencía...” (Daniel 7: 25 y 21). „La Roma pagana persiguió implacablemente a la iglesia cristiana. Se calcula que tres millones de cristianos perecieron durante los primeros siglos de la era cristiana. Sin embargo se dice que los cristianos primitivos oraban para que subsistiese la Roma imperial, porque sabían que cuando cesara esta forma de gobierno, se levantaría otro poder perseguidor peor aún, que literalmente haría quebrantar a „los santos del Altísimo‟, según lo declara esta profecía... „¿Puede alguno dudar de que esto fue verdad con referencia al papado? La Inquisición, „las persecuciones de los valdenses‟, los estragos del duque de Alba; las hogueras de Smithfield; las torturas de Goa; en verdad toda las historia del papado puede invocarse para probar que esa declaración se aplica a dicha potencia. Si hubo algo que procuró quebrantar a los „a los santos del Altísimo‟, que los habría raído de la tierra para que la religión evangélica se extinguiese, fueron las persecuciones del poder papal. En el año 1208, el papa Inocencio III proclamó una cruzada contra los valdenses y albigenses, en ella perecieron 1.000.000 de personas. Desde que se fundó la orden de los jesuitas, en 1540, hasta 1580, se dio muerte a 900.000 personas. Como 150.000 hizo perecer la Inquisición en 30 años. En los Países Bajos, 50.000 personas fueron ahorcadas, decapitadas, quemadas y enterradas vivas, por el delito de herejía, en el plazo de 38 años, desde el edicto de Carlos V contra los protestantes hasta la paz de Catteau Cambresis en 1559. En el espacio de cinco años y medio, durante la administración del Duque de Alba, 18.000 Martín Hiram - “Salid de ella…

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Capítulo 3: El reinado de las bestias.

fueron entregados al verdugo. En verdad el menor conocimiento de la historia del papado convencerá a cualquiera de que es verdad lo dicho aquí... se aplica estrictamente a esa potencia, y describe con exactitud su historia.‟ (Alberto Barnes, „Notes on Daniel‟, pág. 328).

Estas atrocidades no fueron perpetradas en breves paroxismos de un reinado de terror, ni por la mano de sectarios obscuros, sino infligidas por una iglesia triunfante, con toda circunstancia de solemnidad y deliberación‟ (G. E. H. Lecky. „History of the Rise and Influence of the Spirit of Rationalism en Europe‟, tomo 2, págs. 35, 37).

Como un ejemplo de tantos vamos a considerar una carta dirigida al rey de Polonia por el papa Martín V (1417-1431): “Sabed que el interés de la Santa Sede, y los de vuestra corona, os imponen el deber de exterminar a los husitas. Recordad que estos impíos se atreven a proclamar principios de igualdad; sostienen que todos los cristianos son hermanos, y que Dios no ha dado a hombres privilegiados el derecho de gobernar las naciones; sostienen que Cristo vino a la tierra para abolir la esclavitud; llaman a la gente a ser libre, es decir a aniquilar a los reyes y sacerdotes. Por lo tanto, mientras aún hay tiempo, dirigid vuestras fuerzas contra Bohemia; matad, haced desiertos por doquiera, porque nada podría ser más agradable a Dios, ni más útil a la causa de los reyes, que el exterminio de los husitas.” „. (L. M. de Cormenin, „The Public and Private History of the Popes of Rome‟, tomo 2, págs. 116-117).

5) El peor sacrilegio: “tratará de cambiar el calendario y la Ley”: Los diez mandamientos fueron dados a Adán en forma oral. Él convivió con nueve generaciones sucesivas por casi mil años y todos tuvieron oportunidad de escucharlos de sus labios. Con el acortamiento de la edad de los hombres y el acrecentamiento de la maldad, la Sabiduría divina vio la necesidad de petrificar sus requerimientos. Dios dio a Moisés en el 2500 desde Adán, en el monte Sinaí, los Diez Mandamientos grabados “en dos tablas de piedra escritas con el dedo de Dios” (Éxodo 31:18).

Cuando Jesucristo vino a nuestro mundo, afirmó categóricamente: “No penséis que he venido para abrogar la ley o los profetas; no he venido a abrogar, sino a cumplir. Porque de cierto les digo que hasta que pasen el cielo y la tierra, ni una jota, ni una tilde pasará de la ley, hasta que todo se haya cumplido. De manera que cualquiera que quebrante uno de estos mandamientos muy pequeños, y de esta manera enseñe a los hombres, muy pequeño será llamado en el reino de los cielos; más cualquiera que los haga y los enseñe, éste será llamado grande en el reino de los cielos” (Mateo 5:17-20).

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Santiago, el hermanastro de Jesús dijo, como es muy lógico, que los DIEZ MANDAMIENTOS serán la norma del Juicio Final: “cualquiera que guardare toda la ley, pero ofendiere en un punto, se hace culpable de todos. Porque el que dijo: No cometerás adulterio, también ha dicho: No matarás. Ahora bien, si no cometes adulterio, pero matas, ya te has hecho transgresor de la ley. Así hablad, y así haced, como los que habéis de ser juzgados por la ley de la libertad” (Santiago 2:10-12).

El „Cuerno Pequeño‟, también llamado el „Anticristo‟ “trataría de cambiar el calendario y la Ley” (Daniel 7:25). Esta pretensión la ha tenido una sola persona en el mundo: “El papa es de tan grande autoridad y poder que puede modificar, explicar o interpretar aun las leyes divinas” (Lucio de Ferraris, „Prompta Bibliotheca‟, art.

Papa, II, tomo 6, páginas 26-29).

Esta es la más grande de todas las blasfemias: enseñar Diez Mandamientos falsos como si fueran los auténticos. Después del asesinato del Hijo de Dios, no ha habido en toda la historia de la humanidad una usurpación de poder semejante: Tener la osadía de desafiar a Dios, mientras se pretende representarlo. Analizaremos los cambios:  Elimina el Segundo Mandamiento – Introduciendo la idolatría: La Iglesia Romana fomenta el culto de las imágenes.

Por ello en el catecismo se ha eliminado el segundo de los Diez Mandamientos y dividido el décimo para conservar el número. El Segundo Mandamiento ordena:

“No te harás escultura ni imagen alguna ni de lo que hay arriba en los cielos, ni de lo que hay abajo en la tierra, ni de lo Martín Hiram - “Salid de ella…

Los 10 mandamientos En la Biblia – Éxodo 20 1) No tendrás otros dioses delante de mí.

2) No te harás ninguna escultura y ninguna imagen de lo que hay arriba, en el cielo, o abajo, en la tierra, o debajo de la tierra, en las aguas. No te postrarás ante ellas, ni les rendirás culto, porque yo soy el Señor, tu Dios, un Dios celoso, que castigo la maldad de los padres en los hijos, hasta la tercera y cuarta generación, si ellos me aborrecen; y tengo misericordia a lo largo de mil generaciones, si me aman y cumplen mis mandamientos.

3) No pronunciarás en vano el nombre del Señor, tu Dios, porque él no dejará sin castigo al que lo pronuncie en vano.

4) Acuérdate del día sábado para santificarlo.

Durante seis días trabajarás y harás todas tus tareas; pero el séptimo es día de descanso en honor del Señor, tu Dios. En él no harán ningún trabajo, ni tú, ni tu hijo, ni tu hija, ni tu esclavo, ni tu esclava, ni tus animales, ni el extranjero que reside en tus ciudades. Porque en seis días el Señor hizo el cielo, la tierra, el mar y todo lo que hay en ellos, pero el séptimo día descansó. Por eso el Señor bendijo el día sábado y lo declaró santo.

5) Honra a tu padre y a tu madre, para que tengas una larga vida en la tierra que el Señor, tu Dios, te da.

6) No matarás.

7) No cometerás adulterio.

8) No robarás.

9) No darás falso testimonio contra tu prójimo.

10) No codiciarás la casa de tu prójimo; no codiciarás la mujer de tu prójimo, ni su esclavo, ni su esclava, ni su buey, ni su asno, ni ninguna otra cosa que le pertenezca.

Los 10 mandamientos del catecismo 1) 2) 3) 4) 5) 6) 7) 8) 9) 10)

Amar a Dios sobre todas las cosas.

No tomar su santo nombre en vano Santificar las fiestas.

Honrar padre y madre.

No matar.

No cometer actos impuros. (No fornicar).

No hurtar.

No levantar falso testimonio ni mentir.

No desear la mujer del prójimo.

No codiciar los bienes ajenos.

Observar que:  El segundo mandamiento ha sido omitido. El décimo ha sido dividido a fin de conservar el número.  El cuarto mandamiento que ordena descansar el sábado ha sido substituido por ‘Santificar las fiestas’; Una explicación de pie de página de la Biblia católica de Nieto, edición 1966, dice respecto de este mandamiento: ‘La Iglesia lo ha sustituido por el domingo en recuerdo de la resurrección del Señor.’

Otras fuentes católicas reconocen: ‘Observamos el domingo en lugar del sábado porque la Iglesia Católica, en el Concilio de Laodicea (336 d.C.) transfirió la solemnidad del sábado al domingo’.- Rev. Pedro Gaiermann, C.S.S.R. The Convert’s Catechism of Catholic Doctrine, página 50, 2° edición, 1910.

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que hay en las aguas debajo de la tierra, no te postrarás ante ellas ni les darás culto, porque yo Yahvéh, tu Dios, soy un Dios celoso...” (Éxodo 20).

Las representaciones rebajan y falsifican nuestro concepto del Dios Eterno: “El día en que el Señor habló con ustedes de en medio del fuego, en el monte Horeb (Sinaí), no vieron ninguna figura.

Tengan, pues, mucho cuidado de no caer en la perversión de hacer figuras que tengan forma de hombre o de mujer...” (Deuteronomio 4:15-23). La Palabra de Dios enseña que el culto a las imágenes es una abominación: “¿Haré... una abominación? ¿Me postraré delante de un tronco de árbol (hecho estatua)? (Isaías 44:19).

La idolatría no es un culto errado, producto de la ignorancia; es un culto perverso. El que adora o se inclina ante una imagen rinde culto a Satanás: “Amados míos, huid de la idolatría... no quiero que vosotros os hagáis partícipes con los demonios” (1°_Corintios 10:14, 20).

La idolatría no es un culto obsoleto. Fue practicado siempre en forma muy atractiva y popular.

Por eso la Iglesia de Roma lo incorporó a sus ritos. El Apocalipsis revela que será practicado hasta el fin del mundo: “Por estas tres plagas fue muerta la tercera parte de los hombres... Y los otros hombres que no fueron muertos con estas plagas, ni aún así se arrepintieron... ni dejaron de adorar a los demonios, y a las imágenes de oro, de plata, de bronce, de piedra, y de madera, las cuales no pueden ver, ni oír, ni andar...” (Apocalipsis 9:18, 20).

Cuando los pueblos paganos fueron „cristianizados‟ masivamente reclamaron objetos de culto que sustituyeran sus ídolos anteriores. Entonces se introdujeron imágenes de la virgen María y de los santos en lugar de sus dioses mitológicos greco-romanos. Así fue invalidado el mandamiento.  Cambia el cuarto Mandamiento: El Mandamiento que involucra específicamente la Autoridad de Dios es el cuarto del Decálogo. Este contiene el Sello de Dios, es decir su nombre y cargo: Yahvéh Dios, el Creador. Dios instituyó el Sábado en el Edén, observándolo con su propio ejemplo, bendiciéndolo y santificándolo: “Así fueron concluidos los cielos y la tierra con todo su aparato, y el día séptimo cesó Dios de toda la tarea que había hecho. Y bendijo Dios al día séptimo y lo santificó, porque en él cesó Dios de toda la tarea creadora que había realizado” (Génesis 2:1-3). Santificar significa señalar, apartar para uso sagrado. La santificación del Sábado fue ordenada a Adán, y a través de él a toda la Humanidad. Desde entonces fue transmitido en forma oral y observado durante más de dos mil años. Cuando el pueblo de Israel sufrió la esclavitud en Egipto esta práctica se deterioró al punto que los hebreos llegaron a olvidarla. Por ello, en el Sinaí, cuando recibieron la ley escrita, al formular el reposo semanal, Dios les dijo: “Recuerda el día del Sábado para santificarlo. Seis días trabajarás y harás todos tus trabajos, pero el día séptimo es día de descanso para Yahvéh, tu Dios.

No harás ningún trabajo, ni tú, ni tu hijo, ni tu hija, ni tu siervo, ni tu sierva, ni tu ganado, ni Martín Hiram - “Salid de ella…

Capítulo 3: El reinado de las bestias.

el forastero que habita en tu ciudad. Pues en seis días hizo Yahvéh el cielo y la tierra, el mar y todo cuanto contienen, y el séptimo descansó. Por eso bendijo Yahvéh el día Sábado y lo hizo sagrado.” (Éxodo 20:8-11).

Dios hizo de la observancia del Sábado una señal de lealtad entre Él y sus hijos. Cuando las personas apartan este día para santificarlo y se abstienen de realizar tareas seculares, reconocen a Dios como el Creador de los cielos y la tierra: “No dejéis de guardar mis sábados; porque el Sábado es una señal entre yo y vosotros, de generación en generación, para que sepáis que Yo, Yahvéh, soy el que os santifico... Será... una señal perpetua; pues en seis días hizo Yahvéh los cielos y la tierra, y el séptimo descansó...” (Éxodo 31:13, 17) Jesucristo y los apóstoles también guardaron el Sábado. Jesús lo observó en el más estricto Espíritu de la Ley, despojándolo de las cargas y tropiezos con que la falsa religión de los fariseos lo había pervertido: “según su costumbre, entró en la sinagoga el día de sábado, y se levantó para hacer la lectura... les dijo: ... es lícito hacer bien en sábado.” (Lucas 4:16; Mateo 12:12). Los discípulos lo siguieron respetando aún después de su muerte: “Era día de la Preparación, y estaba para comenzar el Sábado. Y las mujeres... vieron el sepulcro, y cómo fue puesto su cuerpo. Y vueltas, prepararon especias aromáticas y ungüentos; y descansaron el sábado, conforme al mandamiento” (Lucas 23:50-56). “Pablo, según su costumbre, se dirigió a ellos, y durante tres sábados discutió con ellos basándose en las Escrituras... Cada Sábado en la sinagoga discutía, y se esforzaba por convencer a judíos y a griegos...” (Hechos 17:2; 18:4).

El Anticristo cambió la bandera, la señal de lealtad. El emperador Constantino (321 d.C.), tratando de unir a paganos y cristianos, para unificar su imperio, ordenó descansar „en el venerable día del Sol‟ (domingo en inglés es Sunday: día del sol), que era día de adoración pagano, y el Concilio de Laodicea (336 d.C.), prohibió interrumpir el trabajo en sábado a fin de reservar este honor para el domingo. Una explicación de pie de página de la Biblia católica de Nieto dice respecto de este mandamiento: „La Iglesia lo ha sustituido por el domingo en recuerdo de la resurrección del Señor.‟ Fuentes católicas afirman: „Nosotros observamos el domingo en vez del Sábado porque la Iglesia Católica transfirió la solemnidad del Sábado para el Domingo.‟ (Peter Geiermann, CSSR, „A Doctrinal Catechism‟, Edición 1957, pág. 50).

“Si los protestantes siguieran la Biblia, ellos rendirían culto a Dios en el día del Sábado. Al guardar el Domingo, ellos están siguiendo una ley de la Iglesia Católica” (Albert Smith, Canciller de la Archidiócesis de Baltimore, respondiendo por el Cardenal, en una carta fechada el 10/02/1920).

Sin embargo, y contra todas las intenciones malignas del enemigo de Dios por apartar a los cristianos del día de reposo, Dios promete acercarse a nosotros en su día: “Si retrajeres del sábado tu pie, de

hacer tu voluntad en mi día santo, y al sábado llamares delicias, santo, glorioso día del SEÑOR, y lo venerares no haciendo tus caminos, ni buscando tu voluntad, ni hablando tus propias palabras, entonces te deleitarás en el SEÑOR… porque la boca del SEÑOR ha hablado” (Isaías 58: 13-14).

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Capítulo 3: El reinado de las bestias.

Estados Unidos en la profecía El Apocalipsis, escrito por el apóstol San Juan, así como Daniel, son libros inspirados por Dios, para que podamos conocer cuál es su voluntad y las cosas que pronto han de acontecer.

Es notable como estos dos libros, Daniel y Apocalipsis, se complementan, siendo que éste último fue escrito 700 años después que Daniel (aproximadamente en el año 100 d.C.). Esto es posible porque hay un solo escritor detrás del escritor, el Eterno y Omnisapiente Dios.

En el capítulo 13 de Apocalipsis encontramos una descripción de una „Bestia espantosa y terrible‟ similar a la proporcionada por Daniel capítulo 7.

Luego de describir al mismo poder que hemos estado estudiando (versículos 1-10), y aclarar que es el Diablo el que le da el poder, nos describe una segunda bestia: “Después vi otra bestia que subía de la tierra, y tenía dos cuernos semejantes a los de un cordero, pero hablaba como dragón…” (Apocalipsis 13:11).

Las bestias representan imperios o naciones que gobiernan el mundo. En contraposición con la primera bestia, que subía del mar (entre pueblos, muchedumbres, naciones y lenguas) la segunda sube de la tierra. No tiene que vencer a otros imperios para alcanzar la hegemonía universal. No está en Europa, sino en el „Nuevo Mundo‟.

Representa a los Estados Unidos de América.

Esta nación no estaba simbolizada por bestias salvajes sino que tenía „dos cuernos semejantes a los de un cordero‟. El secreto de su poder y prosperidad estaría basado en los grandes principios de libertad civil y libertad religiosa. Sin embargo, tenía sólo la apariencia de un cordero, porque „hablaba como dragón (Diablo)‟.

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Apocalipsis 13 Me paré sobre la arena del mar, y vi subir del mar una bestia que tenía siete cabezas y diez cuernos; y en sus cuernos diez diademas; y sobre sus cabezas, un nombre blasfemo.

2 Y la bestia que vi era semejante a un leopardo, y sus pies como de oso, y su boca como boca de león. Y el dragón le dio su poder y su trono, y grande autoridad.

3 Vi una de sus cabezas como herida de muerte, pero su herida mortal fue sanada; y se maravilló toda la tierra en pos de la bestia, 4 y adoraron al dragón que había dado autoridad a la bestia, y adoraron a la bestia, diciendo: ¿Quién como la bestia, y quién podrá luchar contra ella?

5 También se le dio boca que hablaba grandes cosas y blasfemias; y se le dio autoridad para actuar cuarenta y dos meses.

6 Y abrió su boca en blasfemias contra Dios, para blasfemar de su nombre, de su tabernáculo, y de los que moran en el cielo.

7 Y se le permitió hacer guerra contra los santos, y vencerlos. También se le dio autoridad sobre toda tribu, pueblo, lengua y nación.

8 Y la adoraron todos los moradores de la tierra cuyos nombres no estaban escritos en el libro de la vida del Cordero que fue inmolado desde el principio del mundo.

9 Si alguno tiene oído, oiga.

10 Si alguno lleva en cautividad, va en cautividad; si alguno mata a espada, a espada debe ser muerto. Aquí está la paciencia y la fe de los santos.

11 Después vi otra bestia que subía de la tierra; y tenía dos cuernos semejantes a los de un cordero, pero hablaba como dragón.

12 Y ejerce toda la autoridad de la primera bestia en presencia de ella, y hace que la tierra y los moradores de ella adoren a la primera bestia, cuya herida mortal fue sanada.

13 También hace grandes señales, de tal manera que aun hace descender fuego del cielo a la tierra delante de los hombres.

14 Y engaña a los moradores de la tierra con las señales que se le ha permitido hacer en presencia de la bestia, mandando a los moradores de la tierra que le hagan imagen a la bestia que tiene la herida de espada, y vivió.

15 Y se le permitió infundir aliento a la imagen de la bestia, para que la imagen hablase e hiciese matar a todo el que no la adorase.

16 Y hacía que a todos, pequeños y grandes, ricos y pobres, libres y esclavos, se les pusiese una marca en la mano derecha, o en la frente; 17 y que ninguno pudiese comprar ni vender, sino el que tuviese la marca o el nombre de la bestia, o el número de su nombre.

18 Aquí hay sabiduría. El que tiene entendimiento, cuente el número de la bestia, pues es número de hombre. Y su número es seiscientos sesenta y seis.

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Capítulo 3: El reinado de las bestias.

La „Santa Alianza‟ “Y ejerce toda la autoridad de la primera bestia en presencia de ella, y hace que la tierra y los moradores de ella adoren a la primera bestia, cuya herida mortal fue sanada” (Apocalipsis 13:12).

El poder político-militar de Estados Unidos será respaldado y respaldará al poder político-religioso del Papado. Esta alianza ya mostró su efectividad en la caída del comunismo. Las pretensiones de supremacía mundial del papa estaban estorbadas por el comunismo ateo. Por otro lado, Estados Unidos no podía disfrutar de tranquilidad mientras la Unión Soviética existiera. Sólo su predominio absoluto le aseguraría su supervivencia.

La revista Time mostró a Roma y Estados Unidos cooperando mutuamente. Con una fotografía del papa y Reagan en la cubierta, traía este titular: „LA SANTA ALIANZA‟, y explicaba cómo Reagan y el papa conspiraron para auxiliar al Movimiento Solidaridad de Polonia y apresurar la caída del comunismo. En esencia el artículo decía que desde 1982 hasta la caída del comunismo polaco, los Estados Unidos y el Vaticano, bajo el liderazgo del papa Juan Pablo II y el presidente Ronald Reagan, cooperaron en una operación clandestina para libertar a Polonia del comunismo y aflojar las ligaduras soviéticas sobre Europa Oriental. „Esta fue una de las grandes alianzas secretas de todos los tiempos‟ dijo Richard Allen, primer consejero de seguridad nacional de Reagan, y quien formó parte del equipo de trabajo con el papa‟ (Revista Time, 24/02/92).

„El papa, no Gorbachov, inició los cambios en Europa‟, decía un título en The Jerusalem Post.

La revista Time informaba que „el papa polaco, Juan Pablo II, hizo más que todos los hombres para depositar al comunismo en la tumba‟. Incluso Gorbachov admitió: „Todo lo que ha ocurrido en Europa Oriental en estos últimos años no habría sido posible sin la presencia de este papa.‟ En la profecía de Daniel capítulo 8, no se describe al Anticristo como un guerrero. Sería un rey astuto, intrigante, hábil en engaños ya que „engañaría al mundo entero‟: “Cuando... las maldades hayan llegado al colmo, un rey insolente y astuto ocupará el poder. Llegará a ser poderoso pero no con su propio poder, (“El gran dragón, la serpiente antigua, que se llama diablo y Satanás, el cual engaña al mundo entero... le dio su poder y su trono y grande autoridad” - Apocalipsis 12:9; 13:2) destruirá de manera increíble y triunfará en todo lo que haga, destruirá a los poderosos... por su astucia sus engaños triunfarán... y con paz destruirá a muchos... Hará frente al Príncipe de los Príncipes (Jesús) pero será destruido por Él” (Daniel 8:23-25).

La Palabra de Dios no podría haber sido más clara y contundente. Con más de dos mil años de anticipación nos advierte y nos da todo lo que necesitamos para desenmascarar los engaños del enemigo e identificar los agentes por medio de los cuales actúa.

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Capítulo 3: El reinado de las bestias.

El gran conflicto final El drama final de la historia humana se consumará cuando el Anticristo desafíe la autoridad de Cristo y atente contra la Ley de Dios: los Diez Mandamientos. Para esto debemos tener en claro que es el „Sello de Dios‟ y que es la „Marca de la Bestia‟:  El sello de Dios es un carácter semejante al de Cristo, manifestado mediante la obediencia y la observancia del día Sábado. “No dejen de guardar mis sábados; porque el Sábado es una señal entre yo y vosotros, de generación en generación... Será una señal perpetua; pues en seis días hizo Yahvéh los cielos y la tierra, y el séptimo descansó” (Éxodo 31:13, 17).  La Marca de la autoridad de la Bestia es el Domingo: Fuentes católicas afirman: “El domingo es una institución católica y sus demandas a observarlo pueden ser defendidas únicamente en principios católicos... Desde el principio hasta el fin de las Escrituras no hay un solo pasaje que autorice el cambio del día de la adoración pública semanal del último día de la semana al primero.” (Catholic Press, Sydney, Australia, agosto de 1900). “Los protestantes... aceptan el domingo en vez del sábado como el día para su adoración pública después que la Iglesia Católica hizo el cambio... al observar el domingo, ellos están aceptando la autoridad del Papa” (Our Sunday Visitor, 5 de febrero, 1950, periódico católico). “El papa es de tan grande autoridad y poder que puede modificar, explicar o interpretar aun las leyes divinas” (Traducido de Lucio de Ferraris, „Prompta Bibliotheca‟, art. Papa, II, tomo 6, páginas 26-29).

La segunda bestia (o sea los EE.UU.) “ejerce toda la autoridad de la primera bestia en presencia de ella, y hace que la tierra y los moradores de ella adoren a la primera bestia, cuya herida mortal fue sanada... mandando a los moradores de la tierra que le hagan una imagen a la bestia que tiene la herida de espada y vivió.” La imagen de la bestia (un ídem a la primera bestia) se habrá formado en Estados Unidos, cuando el poder religioso domine al poder político. Entonces, en completa contradicción con sus principios constitucionales, los Estados Unidos legislarán en materia prohibida, en materia religiosa; en oposición directa a los Diez Mandamientos divinos: “Se le

permitió infundir aliento a la imagen de la bestia, para que la imagen hablase e hiciese matar a todo el que no la adorase. Y hacía que a todos, pequeños y grandes, ricos y pobres, libres y esclavos, se les pusiese una marca en la mano derecha, o en la frente; y que ninguno pudiese comprar ni vender, sino el que tuviese la marca o el nombre de la bestia, o el número de su nombre (Apocalipsis 13: 15-17).

Analizamos por partes… “Se le permitió infundir aliento a la imagen de la bestia, para que la imagen hablase...” El „hablar‟ de una bestia, representa el hablar de esa nación. Una nación se expresa a través de sus hechos legislativos y judiciales. El Congreso de los Estados Unidos producirá una Ley Dominical y poco después todas las naciones del globo dictarán leyes análogas. Habrá llegado el tiempo en que se manifestará la obra de Satanás: “hablaba como dragón”, y en el que Dios actuará poderosamente para vindicar su Ley: “Tiempo es de actuar, oh Dios, porque han invalidado tu ley” (Salmos 119:126).

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Capítulo 3: El reinado de las bestias.

El ex presidente de los Estados Unidos, George Walker Bush, nos dio un anticipo. El mismo día de su asunción firmó un decreto de carácter religioso: “Inmediatamente después de jurar... llamó la atención un decreto que firmó que proclamó al domingo día de oración y de acción de gracias, una disposición a la medida de la derecha religiosa del país.” (Clarín, 21 de enero de 2001, Ana Barón, Corresponsal en Washington). En nuestro días la imposición del domingo forma parte del debate laboral y comercial. Actualmente distintas formas de leyes dominicales imperan en muchos estados de la vieja Europa y de Norteamérica. Existe un plan mundial y un movimiento que avanza día a día para hacerlas cada vez más abarcantes y estrictas.

“E hiciese matar a todo el que no la adorase”. Aquí vemos en acción al poder judicial. Es sabido que en Estados Unidos la jurisprudencia es la principal fuente del Derecho. No hay más que sentar un precedente. En 1961 la Suprema Corte de los Estados Unidos declaró en un fallo por demás sorprendente que las leyes dominicales (Blue Laws) tienen carácter civil y no religioso, por lo tanto no son anticonstitucionales. La pena de muerte está en vigor en esta nación. Sólo falta que se aplique a los „enemigos del Nuevo Orden Mundial‟, los que no adoran a la bestia ni reciben el signo de su autoridad. En principio serán sanciones económicas, muy viables por la tecnología y la informática actual.

“Y hacía que a todos, pequeños y grandes, ricos y pobres, libres y esclavos, se les pusiese una marca en la mano derecha o en la frente; y que ninguno pudiese comprar ni vender, sino el que tuviese la marca o el nombre de la bestia, o el número de su nombre”. Ya hemos visto que la „Marca de la Bestia‟ es la observancia del día Domingo. Esta observancia será intelectual (marca en la frente) y en lo laboral (marca en la mano derecha). Incluso se está estudiando la posibilidad que reciban una marca física, algunos están hablando del uso de microchips en seres humanos. A través de un sistema financiero mundial electrónico, se imposibilitará comprar o vender a aquellos que no tengan esta marca. Habrá un grupo reducido de personas que no reconocerán la autoridad de la bestia, sino que se mantendrán firmes del lado de Dios.

Estos recibirán el sello de Dios. Serán los que guarden los mandamientos tal como Dios se los dio a Moisés en el monte Sinaí. La Biblia nos dice que este grupo de personas será perseguido: se le prohibirá comprar o vender, se los culpará de todos los desastres naturales que sucedan, se los tildará de obstinados, tercos, fundamentalistas, terroristas y enemigos de la paz y del orden.

Finalmente se decretará la extinción total de los disidentes, de los observadores del sábado. Se convendrá en una noche para dar el golpe final. Entonces Dios intervendrá para librar a su pueblo.

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Capítulo 3: El reinado de las bestias.

El Papa y la Globalización.

La globalización no es sólo el derrumbamiento de las barreras aduaneras internacionales.

El ecumenismo religioso, los múltiples pedidos de perdón por los crímenes de la iglesia, la santificación de la política, todo, absolutamente todo, planificado y ejecutado, es parte de la estrategia de Satanás.

En noviembre de 2001 el Vaticano reunió un „Parlamento mundial‟, integrado por representantes políticos de todo el mundo, liderados por el Papa. También lidera la economía internacional como podemos inferir de las acciones de los protagonistas. Michel Camdessus fue por catorce años director del Fondo Monetario Internacional (1986-2000). Tanto el presidente de Francia, Jacques Chirac, como el candidato socialista Lionel Jospin, le rogaron que aceptara el ministerio de Economía para aumentar su prestigio antes de las elecciones. Pero Camdessus tenía un papel más importante que desempeñar en el Gabinete Vaticano. Dejó la presidencia del F.M.I. sólo para ocupar un puesto más elevado: ser el asesor Nº 1 del papa Juan Pablo II, y su nexo con las Naciones Unidas como asesor de su secretario general Kofi Annan.

Malachi Martin1, devoto católico jesuita contemporáneo, escribió en su libro „Las llaves de esta sangre‟: “Roma había mantenido una mano tan fuerte como era posible en cada comunidad local alrededor del ancho mundo... hasta que las principales potencias seculares del mundo impusieron al papado doscientos años de inactividad... La primera señal distintiva de la carrera de Juan Pablo II como pontífice, fue que decidiera arrojar la camisa de fuerza de la inactividad papal en los principales asuntos mundiales... intentaba asumir y ejercitar efectivamente, una vez más, el papel internacional que había sido céntrico en la tradición de Roma... Este papa - dice Martin- está empeñado en una lucha para saber quien “poseerá y ejercerá el doble poder de la autoridad y el control sobre cada uno de nosotros como individuos y sobre todos nosotros juntos como una comunidad; sobre la totalidad de los seis mil millones de personas que los demógrafos estiman que habitaran la tierra a comienzos del tercer milenio... porque Juan Pablo, como pretendiente a Vicario de Cristo, reclama para sí el derecho de ser la corte de último recurso sobre la sociedad de estados como sociedad.”

Dios respeta a tal punto la libertad del hombre, que así como el Génesis de la humanidad estuvo señalado por la decisión voluntaria de los padres de nuestra raza de obedecer o no a Dios, el Apocalipsis del mundo rematará con una cuestión de elección a „mano alzada‟, que afectará a todo individuo. Cuando la discusión en cuanto al día de reposo –Sábado Vs. Domingo– haya sido llevada al tapete, la decisión de cada uno quedará sellada: unos recibirán, la „Marca de la Bestia‟ que les permitirá acceder a toda ventaja habida y por haber en este mundo; y otros recibirán el „Sello de Dios‟ a costa de persecución y muerte. Todos los poderes de la tierra se alzarán para aplastar a los que prefieren obedecer a Dios antes que a los hombres. Pero estos últimos no estarán solos, porque en definitiva la rebelión será contra el mismo Dios: “Pelearán

contra el Cordero, y el Cordero los vencerá, porque Él es Señor de señores y Rey de reyes; y los que están con él son llamados y elegidos y fieles” “Cuando el Hijo del Hombre venga en su gloria, y todos los santos ángeles con él, entonces se sentará en el trono de su gloria, y serán reunidas delante de él todas las naciones...” “Se sentará el Juez, y le quitarán su dominio (a Satanás y su representante) para que sea destruido y arruinado hasta el fin, y que el reino y el dominio y la majestad de los reinos debajo de todo el cielo sea dado al pueblo de los santos del Altísimo, cuyo reino es reino eterno...”

(Apocalipsis 17:14; Mateo 25:31-32; Daniel 7:26-27).

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Malachi Martin, ‘Las llaves de esta sangre’: Páginas 11, 18, 19, 22, 23 y 375.

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4- Salid de Ella, Pueblo Mío

L

a Biblia representa a la iglesia de Dios mediante el símbolo de una mujer pura. Cristo es el „Esposo‟ y la Iglesia de Dios es la esposa, mujer “virgen y pura para Cristo” (2ª_Corintios 11:2; Efesios 5: 25-27; 31-32).

Sin embargo, Apocalipsis capítulo 17 nos presenta a una mujer prostituta, que simboliza, por contraste, una iglesia apóstata.

Apostatar significa negar la fe, abandonar los principios de una religión, en este caso, los Diez Mandamientos: Vino un ángel “…y habló conmigo diciéndome: Ven acá, y te mostraré la sentencia contra la gran ramera…” y comienza a describirla. Analizaremos cada una de sus características para poder identificarla claramente: Apocalipsis 17 Vino entonces uno de los siete ángeles que tenían las siete copas, y habló conmigo diciéndome: Ven acá, y te mostraré la sentencia contra la gran ramera, la que está sentada sobre muchas aguas; 2 con la cual han fornicado los reyes de la tierra, y los moradores de la tierra se han embriagado con el vino de su fornicación.

3 Y me llevó en el Espíritu al desierto; y vi a una mujer sentada sobre una bestia escarlata llena de nombres de blasfemia, que tenía siete cabezas y diez cuernos.

4 Y la mujer estaba vestida de púrpura y escarlata, y adornada de oro de piedras preciosas y de perlas, y tenía en la mano un cáliz de oro lleno de abominaciones y de la inmundicia de su fornicación; 5 y en su frente un nombre escrito, un misterio: BABILONIA LA GRANDE, LA MADRE DE LAS RAMERAS Y DE LAS ABOMINACIONES DE LA TIERRA. 6 Vi a la mujer ebria de la sangre de los santos, y de la sangre de los mártires de Jesús; y cuando la vi, quedé asombrado con gran asombro.

7 Y el ángel me dijo: ¿Por qué te asombras? Yo te diré el misterio de la mujer, y de la bestia que la trae, la cual tiene las siete cabezas y los diez cuernos.

8 La bestia que has visto, era, y no es; y está para subir del abismo e ir a perdición; y los moradores de la tierra, aquellos cuyos nombres no están escritos desde la fundación del mundo en el libro de la vida, se asombrarán viendo la bestia que era y no es, y será.

9 Esto, para la mente que tenga sabiduría: Las siete cabezas son siete montes, sobre los cuales se sienta la mujer, 10 y son siete reyes. Cinco de ellos han caído; uno es, y el otro aún no ha venido; y cuando venga, es necesario que dure breve tiempo.

11 La bestia que era, y no es, es también el octavo; y es de entre los siete, y va a la perdición.

12 Y los diez cuernos que has visto, son diez reyes, que aún no han recibido reino; pero por una hora recibirán autoridad como reyes juntamente con la bestia.

13 Estos tienen un mismo propósito, y entregarán su poder y su autoridad a la bestia.

14 Pelearán contra el Cordero, y el Cordero los vencerá, porque él es Señor de señores y Rey de reyes; y los que están con él son llamados y elegidos y fieles.

15 Me dijo también: Las aguas que has visto donde la ramera se sienta, son pueblos, muchedumbres, naciones y lenguas.

16 Y los diez cuernos que viste en la bestia, éstos aborrecerán a la ramera, y la dejarán desolada y desnuda; y devorarán sus carnes, y la quemarán con fuego; 17 porque Dios ha puesto en sus corazones el ejecutar lo que él quiso: ponerse de acuerdo, y dar su reino a la bestia, hasta que se cumplan las palabras de Dios.

18 Y la mujer que has visto es la gran ciudad que reina sobre los reyes de la tierra.

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Capítulo 4: Salid de Ella, Pueblo Mío.

1.

“Está sentada sobre muchas aguas” (versículo 1)

La misma Biblia se ocupa de aclarar que son las „muchas aguas‟. En Apocalipsis, capítulo 17, versículo 15 dice: “Las aguas que has visto donde la ramera se sienta, son pueblos, muchedumbres, naciones y lenguas”.

Por consiguiente, tendríamos que pensar en una iglesia, „prostituida‟, que ha dejado los caminos de Dios y que está asentada sobre „pueblos, muchedumbres, naciones y lenguas‟. Debemos tener cuidado al analizar, porque la biblia dice que el diablo “engaña al mundo entero”, y Jesús nos alertó diciendo: “miren que nadie los engañe” (Apocalipsis 12:9; Mateo 24:4).

2.

“Con la cual han fornicado los reyes de la tierra…”

(versículo 2)

Cristo dijo: “Mi reino no es de este mundo.” (Juan 18:36).

Cuando una iglesia se empeña en alcanzar el poder secular, económico o político, y su razón de ser se encuentra en este mundo, para Dios ha negado la fe y se ha prostituido.

Cuando busca el favor de los reyes y gobernantes de la tierra aliándose con ellos, la Biblia dice que está 'fornicando'. Hoy se habla de 'relaciones carnales' para referirse a la unión íntima entre distintos poderes.

“Y los moradores de la tierra se han embriagado con el vino de su fornicación”. Aquí se nos dice que, a consecuencia de sus enseñanzas („el vino de su fornicación‟), los habitantes de la tierra están „embriagados‟ sin poder tomar conciencia de la realidad de las cosas.

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Capítulo 4: Salid de Ella, Pueblo Mío.

3.

Estaba “sentada sobre una bestia escarlata llena de nombres de blasfemia, que tenía siete cabezas y diez cuernos” (versículo 3)

El mismo Apocalipsis (versículos 9, 12 y13) nos dice que “las siete cabezas son siete montes, sobre los cuales se sienta la mujer… Y los diez cuernos, son diez reyes, que aún no han recibido reino; pero por una hora recibirán autoridad como reyes juntamente con la bestia” los cuales “tienen un mismo propósito, y entregarán su poder y su autoridad a la bestia”.

La ciudad de Roma es la única ciudad en el mundo famosa por estar asentada sobre siete colinas.

Ellas se llaman: Palatina, Aventina, Celina, Esquilina, Vimina, Quirina, y Capitolina.

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Capítulo 4: Salid de Ella, Pueblo Mío.

4.

“Y la mujer estaba vestida de púrpura y escarlata, y adornada de oro de piedras preciosas y de perlas, y tenía en la mano un cáliz de oro lleno de abominaciones y de la inmundicia de su fornicación” (versículo 4)

El poder sin límites ni fronteras que gobierna el mundo entero es descripto en la Biblia como “la bestia”. Esta bestia está jineteada por una prostituta (iglesia apóstata), simbolizando así dominio del poder religioso sobre el poder político.

La Palabra de Dios nos describe exactamente cómo está vestida y adornada esta iglesia apóstata: “estaba vestida de lino finísimo (blanco), de púrpura y de escarlata, y estaba adornada de oro, de piedras preciosas y de perlas… y tenía en la mano un cáliz de oro…” (Apocalipsis 18:16; 17:4). No hay forma de equivocarse…

Quienes fueron alguna vez al Vaticano se quedan admirados por el lujo, el oro y la riqueza que ven. En contraste con esto, Jesús dijo: "Los zorros tienen sus cuevas y las aves del cielo sus nidos; pero el Hijo del hombre (Jesús) no tiene dónde reclinar la cabeza" (Mateo 8:20).

Hay veces en que las imágenes hablan mejor que las palabras…

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Capítulo 4: Salid de Ella, Pueblo Mío.

“Mi reino no es de este mundo”

Cristo no aceptó ser el compañero de fórmula de Satanás cuando éste le propuso darle el mundo a cambio de su sumisión: “Todo esto te daré si postrado me adorares” (Mateo 4:9). El Reino de Cristo no podía, ni puede, ni podrá adecuarse a los principios y métodos de un mundo de pecado, de un mundo en rebelión. “¿Qué compañerismo tiene la justicia con la injusticia? ¿Y qué comunión la luz con las tinieblas? ¿O qué concordia Cristo con Belial?” (2Cor. 6:14-15).

Jesucristo afirmó: “Mi reino no es de este mundo; si mi reino fuera de este mundo, mis seguidores pelearían para que yo no fuera entregado a los judíos; pero mi reino no es de aquí...”

(Juan 18:36), y oró por sus discípulos diciendo: “No ruego que los quites del mundo, sino que los guardes del mal. No son del mundo, como tampoco yo soy del mundo.” (Juan 17:14-16) “Este mundo es mi reino”

El obispo de Roma, que pretende ser el vicario de Jesucristo, en total contradicción con Él, aceptó la propuesta que Cristo había rechazado: “Todo esto te daré si postrado me adorares”, y recibió los reinos del mundo de manos de Satanás. “El gran dragón, la serpiente antigua que se llama diablo y Satanás, el cual engaña al mundo entero... le dio su poder y su trono, y grande autoridad” (Apocalipsis 12:9; 13:2). El poder real no es el poder real, valga la paradoja.

El poder emana en la realidad, no del rey, sino del que lo entrona y destrona. Así, el Papado, a través de siglos de dominación, ha depuesto reyes y coronado emperadores; y ha usado el poder secular para perseguir y matar millones de personas que no reconocieron su supremacía. Como dueño del mundo, promovió las cruzadas y, por medio de bulas, repartió las tierras de América, „descubiertas o por descubrir‟ a gusto suyo.

5.

Vi a la mujer ebria de la sangre de los santos, y de la sangre de los mártires de Jesús” (versículo 6)

De la relación nefasta, entre el poder político y el religioso no pudo nacer otra cosa que opresión y persecuciones: “Vi a la mujer ebria de la sangre de los santos, y de la sangre de los mártires de Jesús; y cuando la vi, quedé asombrado con gran asombro.” (Apoc. 17:6; 14:8).

Una era de tinieblas espirituales2:

En el siglo XIII se estableció la más terrible de las maquinaciones del papado: la Inquisición. El príncipe de las tinieblas obró de acuerdo con los jefes de la jerarquía papal... "Babilonia la grande" fue "embriagada de la sangre de los santos"… El papado había llegado a ejercer su despotismo sobre el mundo. Reyes y emperadores acataban los decretos del pontífice romano.

El destino de los hombres parecía depender de su albedrío. Por centenares de años las doctrinas de Roma habían sido extensa e implícitamente recibidas, sus ritos cumplidos con reverencia y observadas sus fiestas por la generalidad. Su clero era colmado de honores y sostenido con liberalidad. Nunca desde entonces ha alcanzado Roma tan grande dignidad, magnificencia, ni poder.

2

Elena G. de White. Conflicto de los Siglos: Capítulo 3 - Una era de tinieblas espirituales (página 65)

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Capítulo 4: Salid de Ella, Pueblo Mío.

Mas "el apogeo del papado fue la medianoche del mundo." Las Sagradas Escrituras eran casi desconocidas no sólo de las gentes sino de los mismos sacerdotes. A semejanza de los antiguos fariseos, los caudillos papales aborrecían la luz que habría revelado sus pecados. Rechazada la ley de Dios, modelo de justicia, ejercieron poderío sin límites y practicaron desenfrenadamente los vicios. Prevalecieron el fraude, la avaricia y el libertinaje. Los hombres no retrocedieron ante ningún crimen que pudiese darles riquezas o posición. Los palacios de los papas y de los prelados eran teatro de los más viles excesos.

Algunos de los pontífices reinantes se hicieron reos de crímenes tan horrorosos que los gobernantes civiles tuvieron que procurar deponer a dichos dignatarios de la iglesia como monstruos demasiado viles para ser tolerados. Durante siglos Europa no progresó en las ciencias, ni en las artes, ni en la civilización. La cristiandad quedó moral e intelectualmente paralizada.

6.

Era, no es, pero volverá a ser

“La bestia que has visto, era, y no es; y está para subir del abismo e ir a perdición; y los moradores de la tierra… se asombrarán viendo la bestia que era y no es, y será” (Ap. 17:8).

La bestia „era‟ durante el absolutismo político–religioso que imperó tanto en Roma Antigua como en la Edad Media. Cuando el Imperio Romano de Occidente cayó en manos de los reinos bárbaros (476 d.C.), se produjo un vacío de poder que fue llenado muy hábil y oportunamente por la Iglesia apóstata, luego de subyugar a los bárbaros arrianos que le eran adversos (538 d.C.) Desde entonces el Papado ejerció su soberanía indiscutida.

Durante la Revolución Francesa fue herida mortalmente. “Vi una de sus cabezas como herida de muerte...” (Ap. 13:1-3). Precisamente, en 1798, (fecha en que concluían los 1260 años de supremacía anticipados por la profecía bíblica), el papado recibió una „herida mortal‟: el General Berthier, al mando de Napoleón, tomó prisionero al papa Pío VI y éste murió en cautiverio al año siguiente. A partir de entonces se quebró la hegemonía papal y más tarde, en 1870, los ejércitos de Víctor Manuel, liderados por el General Garibaldi, le confiscaron los Estados Pontificios (que ocupaban el centro de la península), en pro de la unificación de Italia.

Luego, la vigencia de gobiernos constitucionales y republicanos, respetuosos de las libertades individuales y con limitaciones al poder del Estado, ha mantenido su herida abierta.

El ángel muestra la visión a Juan en el momento de la historia de la humanidad en que la bestia „no es‟. Aunque es un factor muy importante de poder, la religión no puede controlar abiertamente a las naciones. En la visión, la atención de Juan encuentra su „presente‟ precisamente en nuestro presente. Lo anterior, es historia; lo posterior, es futuro. Aunque el proceso de curación progresa día a día, la bestia, todavía está en cama. Pero la profecía anticipa que la bestia „será‟. Su herida sanará y al fin recobrará el liderazgo mundial: “su herida mortal fue sanada, y se maravilló toda la tierra en pos de la bestia, y adoraron al dragón que había dado autoridad a la bestia... todos los moradores de la tierra cuyos nombres no estaban escritos en el libro de la vida” (Apocalipsis 13:3-4).

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Capítulo 4: Salid de Ella, Pueblo Mío.

7.

Su número es el 666

Es notable que la misma profecía nos advierta: “Aquí hay sabiduría. El que tiene entendimiento, cuente el número de la bestia, pues es número de hombre. Y su número es seiscientos sesenta y seis” (Apocalipsis 13:18).

El Papa ostenta una serie de títulos en latín, idioma madre de la Iglesia Católica Romana. Dos de estos son:  VICARIVS FILII DEI: traducido, “Representante del Hijo de Dios” (es una „blasfemia‟, pues el representante de Jesucristo es el Espíritu Santo - San Juan 14:16, 26).  DVX CLERI: traducido, „Jefe del Clero‟.

V I C A R I V S

5 +1+100

+1 +5

F I L I I

D E I

+1+50+1+1 +500 +1

D V X

= 666

C L E R I

500+5+10 +100+50

Como hemos estudiado en la escuela, en el sistema de numeración romano, los números son representados por letras. Así la I representa el 1, la V el 5, la X el 10, la L el 50, la C el 100 y la D el 500. Es impresionante. Si sumamos los valores de las letras que componen los títulos que se atribuye el Papa, ¡suman exactamente 666!

Si queremos verificar el código (Numeración Romana) comprobaremos que si sumamos sus símbolos básicos (sin los modernos agregados) también obtenemos 666…

+1

D C L X V I

= 666 500 100 50 10 5 1 666

“Y hacía que a todos, pequeños y grandes, ricos y pobres, libres y esclavos, se les pusiese una marca en la mano derecha, o en la frente; y que ninguno pudiese comprar ni vender, sino el que tuviese la marca o el nombre de la bestia, o el número de su nombre. Aquí hay sabiduría.

El que tiene entendimiento, cuente el número de la bestia, pues es número de hombre. Y su número es seiscientos sesenta y seis (Apocalipsis 13: 16-18).

Hoy ya podemos ver un adelanto de cómo la „Bestia‟ está imponiendo una marca, imperceptible para la mayoría de las personas, dado que se encuentra oculta en los códigos de barras, obligatorios para casi toda clase de productos. Como podemos observar, en el formato de código de barras más utilizado universalmente, hay tres pares de barras finas que sobresalen del resto de las barras. Gráficamente podemos ver que cada par de barras finas representan al número seis. En consecuencia, todo producto que posea un código de barras tiene implícitamente una marca, y esta es el 666.

Nota: en los códigos de barras, cada número del 0 al 9 es representado por un par de rayas negras y un par de rayas blancas, de distintos grosores. Cada número tiene tres formas de ser representado, con tres distintas combinaciones de pares de rayas (negras y blancas).

Para el número seis también hay tres tipos de combinaciones de pares de barras que lo representan, una de ellas es la doble barra fina que observamos en el código de más arriba.

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Capítulo 4: Salid de Ella, Pueblo Mío.

8.

Se asemeja a la „Babilonia pagana‟ y es „madre de otras rameras‟

“Y en su frente un nombre escrito, un misterio: Babilonia la grande, la madre de las rameras y de las abominaciones de la tierra” (Apocalipsis 17:5). Esta iglesia caída tiene hijas que han salido de ella y que también se han pervertido. Estas son las iglesias protestantes ecuménicas que reconocen la autoridad de su „Madre Iglesia‟, no guardando los mandamientos tal cual los dio Dios a Moisés en el monte Sinaí, al descansar el Domingo y no el Sábado, tal cual lo establece el cuarto mandamiento.

La Biblia identifica esta institución religiosa con el nombre de „Babilonia la grande‟, esto es porque el culto que se realiza en esta institución proviene del culto pagano ocultista de los babilonios. Veremos claros ejemplos de cómo la iglesia católica ha formado un „conglomerado‟ de prácticas y rituales paganos: 3

1. El culto pagano realizado a la diosa Semiramis y a su hijo Tammuz (culto a la „madre y al hijo‟) es introducido a la iglesia romana mediante el culto a María. La adoración babilónica de Isis, el Huevo Dorado de Astarté, y los ritos de fertilidad de la primavera son introducidos con el nombre cristiano de „Pascuas‟.

Semiramis y su hijo Tammuz

Isis con su hijo Iswara (en India)

Isis con su hijo Horus (en Egipto)

María con el "Niñito Jesús“

Isis era la diosa madre de Babilonia, de allí sale la adoración de María como madre de Dios. Los títulos que antes se atribuían a la diosa-madre pagana fueron poco a poco aplicados a María. Tales títulos indican claramente que el supuesto culto a María de hoy es en realidad una continuación del culto a la diosa pagana.

Asombrosa similitud entre las diosas: Isis, Semiramis y María…

3

Enciclopedia de religiones - Dos Babilonias, p. 20

Martín Hiram - “Salid de ella…

Capítulo 4: Salid de Ella, Pueblo Mío.

2. Cruz invertida: Se utiliza como un símbolo de blasfemia y rechazo a Jesucristo y a la Cristiandad.

3. Símbolos de adoración al dios „Sol‟: La adoración al dios Sol dentro del culto católico romano es por demás evidente. El día de descanso que observa es, implícitamente, en honor al dios Sol. El propio nombre del día domingo en ingles, Sunday, quiere decir „día del sol‟. El símbolo más importante es un círculo, que representa la orbe redonda del sol:

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Note el uso de la cruz “Pattée o Formée” en un antiguo rey pagano (Shamshi Adad V) 2800 años atrás, simbolizando la adoración pagana al dios Sol; y el uso del „Pallium‟ por parte del papa, en donde se observa la misma cruz.

También se puede visualizar las similitudes entre las bandas cruzadas que forman una “X” en el antiguo rey pagano y en el atuendo del papa.

Rey Pagano antiguo Ashur-nasir-pal II

Símbolo utilizado en el altar al dios sol “Shamash”, Usado en adoración satánica en la era babilónica.

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Mural al dios sol, Siglo IX a.C. (Note el símbolo del dios Sol en el altar pagano).

Diagrama de un altar católico de América y E.U. (Note exactamente el mismo símbolo del dios Sol en el altar católico).

Símbolo satánico al dios sol “Baal-Hadad, a la diosa lunar “Nanna” y al Rey BarRaqqah: todos representan el símbolo y la adoración al dios del sol.

En el presente, la iglesia Católica utiliza el “Monstrance”, veamos:

Mostrador que se utiliza para la comunión, representa un duplicado exacto de la adoración al dios Sol, Baal.

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4. Adoración pagana al dios Dagón: Nótese el uso de la mitra, de los antiguos sacerdotes paganos en honor al dios-pez “Dagón”, falso “salvador”.

A la izquierda, un sacerdote de Dagón llevando puesta su mitra, rociando agua bendita. A la derecha, dos sacerdotes de Dagón rociando agua bendita mientras están mirando hacia arriba a un símbolo Egipcio de Adoración al dios Sol. Abajo el uso de la Mitra por el papa en el presente:

5. “Corsier” - bastón de serpiente: símbolo satánico utilizado en los cultos paganos de la antigüedad, que también lo podemos observar en los rituales católico-romanos:

A la izquierda, la “diosa” Atena, con el bastón “corsier” en forma de serpiente en su mano, símbolo de poder. Al medio, el rey Tut, con su “crooker augur” (bastón de serpiente) para identificarse con “Osiris”, dios de la muerte. Abajo, Corsier de la institución católica romana, usado por obispos y altos oficiales.

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6. Tridente: en Babilonia, el tridente fue puesto en las manos de todos los dioses paganos.

E n Arriba, a la izquierda, dios Hindú, al medio, Neptuno con su tridente. Tanto el dios Sol de Babilonia como Lucifer, son representados con el mismo tridente. A la derecha vemos como la iglesia Católica Romana, en la catedral de San Pablo - Londres, cuatro tridentes salen de entre la cruz. También se puede notar el tridente postrado en la cabeza del niño “Jesús”.

7.

Rosario Los cultos paganos también usaban rosarios en sus prácticas. Era común enterrar a los faraones de Egipto con sus rosarios. El rosario es una práctica que resalta a la iglesia Católica Romana.

Si vamos a la Palabra de Dios, encontraremos que esta no es una práctica del verdadero cristiano, en Mateo 6:7 se nos dice: “Y orando, no uséis vanas repeticiones, como los gentiles, que piensan que por su palabrería serán oídos”. La verdadera oración es el acto de abrir el corazón a Dios como a un amigo.

8. Cono de Pino: en el paganismo representa el poder de la regeneración. Se puede encontrar en el “Tammuz” dios babilónico, y en el “dios” griego-romano de la bebida y rebeldía, con el cono de pino en su bastón, y como símbolo de la fertilidad. El bastón de pino, también simboliza el dios pagano Osiris.

S í m b o l o En el presente, la iglesia Católica Romana también la utiliza. La escultura de pino más grande en el mundo se encuentra en “La Plaza de Pino”, el Vaticano.

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9. “Llaves del Cielo y del Infierno”: Imagen pagana sosteniendo las llaves que “abren” los cielos y el infierno, así como la guerra y la paz. En el año 437, el Papa de esa época, proclamó a la iglesia Católica como dueña de las llaves que abren los cielos y el infierno.

Podemos ver claramente las “llaves” del cielo y el infierno en el escudo detrás del papa Benedicto XVI.

10. La falsa inmortalidad: La afirmación de la Iglesia Romana de que el alma es inmortal (decir que cuando una persona muere, en realidad no muere, sino que su alma se va al cielo, al infierno, o al purgatorio) es la base tanto de las religiones paganas (babilónicos, egipcios, etc.) como del espiritismo moderno y ha traído detrás una de las prácticas más abominables para Dios.

Dios odia que tengamos relación con Satanás porque sabe que éste seguramente nos engañará. La desproporción de nuestras facultades con las suyas es enorme. Por eso Dios ha prohibido terminantemente la comunicación con él. Nadie, podrá escapar de las consecuencias de una presunción tal. Pero Satanás es un astuto enemigo. Rara vez se presenta tal cual es. Siempre toma un disfraz bello o sofisticado. Uno de esos disfraces es el de seres humanos que han muerto y supuestamente se hallan conscientes en un estado inmaterial, y ansían comunicarse con nosotros. Asumen su misma forma y aún su tono de voz. Repiten sus frases y tal vez digan cosas de las que sólo tenía conocimiento el difunto. Es tan grande el engaño que Dios tuvo que prohibir directamente las comunicaciones con los muertos. “No acudan a los médium ni a los espiritistas. No los consulten contaminándose con ellos. Yo soy el Eterno vuestro Dios... Yo pondré mi rostro contra el que se vuelva a los médium y espiritistas para prostituirse siguiéndolos... No haya en ti... quien practique adivinación, astrología, hechicería o magia; ni quien sea adivino, ni médium, ni espiritista, ni quien consulte a los muertos.

Porque es abominable al Señor cualquiera que haga estas cosas... (Levítico 19:31; 20:6; Deuteronomio 18:10-12; Isaías 8:19; Lucas 11:13; 1° Corintios 3:16; Romanos 8:14).

El carácter sobrenatural de las manifestaciones espiritistas no puede ser negado. Dan avisos y advertencias que resultan exactos, y hacen despliegue de poderes extraordinarios. Los que creen que es sólo fraude y prestidigitación serán más fácilmente engañados, ya que cuando se encuentren frente a frente con las evidencias quedarán obligados a aceptarlas. “Y no es de extrañar, porque el mismo Satanás se disfraza como ángel de luz. Así que, no es mucho si también sus ministros se disfrazan como ministros de justicia” (2° Corintios 11:14-15).

Los muertos están muertos Dios es el único que tiene la inmortalidad propia (1ª Timoteo 6:16). La vida y existencia de todas sus criaturas están condicionadas a la obediencia a su Ley de Amor. Satanás y todos sus demonios están condenados a muerte por haberse rebelado contra ella. La sentencia divina ha sido decretada: “para siempre dejaras de ser” (Ezequiel 28:19).

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La Biblia no enseña que „tenemos un alma inmortal’, sino que ‘somos un alma

mortal’: “Formó... Jehová Dios al hombre del polvo de la tierra, y alentó en

su nariz soplo de vida; así llegó a ser el hombre un alma viviente -o ser viviente” (Génesis 2:7). Y luego dice: “el alma que pecare morirá” (Ezequiel 18:20).

Cuando el hombre muere, su alma deja de ser: “el polvo vuelve a la tierra, como era, y el espíritu vuelve a Dios, que lo dio” (Eclesiastés 12:7). Ese espíritu es la vida y no una identidad inmaterial y consciente, porque vuelve a Dios tanto el espíritu de las personas buenas como el de las malas. Hay “un destino común para todos, para el justo y para el malvado, el puro y el manchado... así el bueno como el pecador... viven y después (van) con los muertos”. Es más, lo tienen tanto los hombres como los animales: “Porque el hombre y la bestia tienen la misma suerte: muere el uno como la otra; y ambos tienen el mismo aliento de vida (espíritu). En nada aventaja el hombre a la bestia...

Todos caminan hacia una misma meta: todos han salido del polvo y todos vuelven al polvo.” (Eclesiastés 3:19-20).

Jesús comparó la muerte con un sueño: “Nuestro amigo Lázaro duerme; mas voy para despertarle... Jesús decía esto de la muerte de Lázaro; y ellos pensaban que hablaba del reposar del sueño. Entonces Jesús les dijo claramente: Lázaro ha muerto” (Juan 11:11-14). Pablo, Daniel, Job, Jeremías y otros escritores bíblicos también hicieron esa comparación: Es cosa sencilla para Dios, que guarda el original de nuestro código genético y un „compacto‟ de nuestra memoria despertar a la vida a los seres por él creados. Pero hasta que los muertos no resuciten, el que está muerto, muerto está. La muerte es un estado de inconsciencia total: “los que viven saben que han de morir;

pero los muertos nada saben... también su amor y su odio... fenecieron ya...

Pues sale su aliento y vuelve a la tierra. En ese mismo día perecen sus pensamientos... y nunca más tendrán parte en todo lo que se hace debajo del sol... (Eclesiastés 9:4-6; Salmos 146:4).

Satanás fue el primero en afirmar nuestra inmortalidad cuando le dijo a Eva: “No moriréis, sino que... seréis como Dios” (Génesis 3:4-5). La inmortalidad natural del alma es una doctrina de origen totalmente pagano. Los egipcios creían en ella y por eso se destacaron por su culto a los muertos. Luego fue cultivada por los filósofos griegos y a éstos les siguieron los romanos. Por último, San Agustín, influenciado por las ideas de Platón, trató de armonizar la filosofía griega con el cristianismo, y el resultado fue que introdujo el paganismo dentro de la Iglesia.

A la inmortalidad otros agregan la creencia en la reencarnación como un modo de evolución y perfeccionamiento. Pero esta idea es totalmente ajena a la Palabra de Dios: “está establecido para los hombres que mueran una sola vez, y después de esto el juicio” (Hebreos 9:27). Cuando una persona muere su caso queda decidido definitivamente y está en manos de la Justicia divina. Jesucristo dijo: “vendrá hora cuando los que están en los sepulcros oirán su voz; y los que hicieron lo bueno, saldrán a resurrección de vida; mas los que hicieron lo malo a resurrección de condenación” (Juan 5:28-29). Vale el mismo argumento para desechar la idea de purgatorio, institución romana sin sustento Bíblico. La creencia de que habrá segundas oportunidades luego de la muerte, hace que multitudes descuiden su salvación mientras disponen de tiempo para arrepentirse y obtener perdón. La Biblia dice: “Aún hay esperanza para todo aquél que está entre los vivos” (Eclesiastés 9:4).

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La Resurrección – La verdadera esperanza del cristiano La única expectativa de vida después de la muerte descansa en la esperanza de la resurrección. Jesucristo nos aseguró: “Yo soy la Resurrección y la Vida; el que cree en mí aunque esté muerto, vivirá. Y todo aquél que vive y cree en mí no morirá eternamente... y las puertas del sepulcro no prevalecerán... (porque) yo tengo las llaves del sepulcro.” (Juan 11:25-26; Mateo 16:18; Apocalipsis 1:18) Hablar del Regreso de Jesucristo es hablar de la resurrección: “No queremos hermanos que ignoréis acerca de los que duermen, para que no os entristezcáis como los otros que no tienen esperanza... Porque el mismo Señor, con voz de mando, con voz de arcángel, y con trompeta de Dios, descenderá del cielo; y los muertos en Cristo resucitarán primero... Luego nosotros los que vivimos, los que hayamos quedado... seremos transformados... y así estaremos siempre con el Señor.” (1ª Tesalonicenses 4:13-17; 1ª Corintios 15:52). Podemos mirar a la muerte de frente y decir: “Yo sé que mi Redentor vive... y después de deshecha esta mi piel, en mi carne he de ver a Dios. Al cual veré por mí mismo. Y mis ojos lo verán, y no otro” (Job 19:25-27).

9.

“Y la mujer que has visto es la gran ciudad que reina sobre los reyes de la tierra”

No hacen falta muchas palabras a esta altura…

10.

El „Pueblo de Dios‟ se encuentra dentro de ella, engañado y „embriagado‟

Así como hemos identificado claramente quien es la „ramera‟ y sus „hijas‟, también rameras, debemos alertar con más denuedo aún que la mayoría de los hijos de Dios se encuentran dentro de los fieles que asisten a estas iglesias. Dios les advierte y da un mensaje muy claro:

“Salid de ella pueblo mío, para que no seáis partícipes de sus pecados, ni recibáis parte de sus plagas (Apocalipsis 18:4).

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5- La Segunda Venida de Jesús

E

l 20 de julio de 1969 ha pasado a la historia como el día que marcó el comienzo de una nueva era para la humanidad. Algunos lo llamaron „el día más grande de todos los tiempos‟. Otros dijeron que a partir de entonces se iniciaba el camino de la „Mayor Esperanza‟ para el mundo. Ese día el hombre llegaba por primera vez a la luna. N. Armstrong y E. Aldrin, dos de los tres astronautas de la nave espacial Apolo XI, apoyaban su pie sobre la solitaria superficie lunar. ¡Una hazaña científica realmente admirable!

Pero cabe preguntarse: ¿anda mejor nuestro mundo desde que se inició la era del espacio? Todos los viajes espaciales, tripulados o no, ¿han permitido que se concretara la esperanza o la expectativa de un mundo más agradable y tranquilo para vivir? Ese era el sueño que tenía la gente en aquel memorable día de 1969. Veamos por un instante si el sueño se ha cumplido.

A pesar de los muchos intentos por crear un clima de paz en la tierra, todavía hay guerras en diversos lugares. El mundo dedica más dinero a la fabricación y compra de armas de guerra que a la educación, o a combatir los vicios, o a dar de comer a los hambrientos. Al parecer, el sueño no se ha cristalizado. Todavía hay miseria, hambre, injusticia, corrupción, ignorancia, vicios y destrucción en los cinco continentes. Pero felizmente, la expectativa y la esperanza no han muerto. Podemos alentar optimismo. ¿Quieres saber en qué podemos basar este optimismo? No en la ciencia espacial, ni en la electrónica moderna. No en la fuerza de los gobiernos. No en los tratados internacionales de paz.

Capítulo 5: La Segunda Venida de Jesús.

No en los falsos anuncios de algún pretendido profeta. Nuestro optimismo cristiano, de que el mundo cambiará para bien, se basa en la actuación directa de Dios. ¿Parece extraña la idea? Sin embargo, el libro que siempre dice la verdad –la Biblia- afirma que “lo que imposible para los hombres es posible para Dios” (S. Lucas 18:27).

Vivimos en días únicos, que no conocieron nuestros antepasados. Hablando sobre este tema, San Pablo dijo: “en los postreros días vendrán tiempos peligrosos, porque habrá hombres amadores de sí mismos, avaros, vanagloriosos, soberbios, blasfemos, desobedientes a los padres, ingratos, impíos, sin afecto natural, implacables, calumniadores, intemperantes, crueles, aborrecedores de lo bueno, traidores, impetuosos, infatuados, amadores de los deleites más que de Dios, que tendrán apariencia de piedad, pero negarán la eficacia de ella” (2 Timoteo 3:1-5). ¿No te parece que todas estas características abundan hoy, y que son las culpables de todo este cuadro de descomposición social, infelicidad, inseguridad y temor. La gente exclama con honda preocupación: “¡Qué tiempos difíciles nos ha tocado vivir!” “¡A qué extremo de maldad hemos llegado!” “¡Esto ya no tiene arreglo!”.

Jesús predijo que el mundo del último tiempo se parecería al mundo antediluviano de los días de Noé: “comían, bebían, se casaban y se daban en casamiento, hasta el día que entró Noé en el arca, y vino el diluvio y los destruyó a todos” (S. Lucas 17:27). Para completar esta descripción, recordemos que en aquellos días “la maldad de los hombres era mucha en la tierra, y que todo designio de los pensamientos del corazón de ellos era de continuo solamente al mal”. Y se añade: “la tierra estaba llena de violencia” (Génesis 6:5, 11, 13).

Además, Jesucristo amplió su predicción, diciendo que nuestros días se parecerían a los de la antigua Sodoma, donde la depravación era tanta que Dios debió intervenir con su „juicio destructor‟ (S. Lucas 17:28,29).

Lee un poco los diarios. Escucha los informativos de la radio y mira la televisión. Observa qué pasa a tu alrededor. Y comprenderás que el mal está arruinando la paz y la felicidad de la gente.

Con toda razón podrías preguntarte: “¿Qué deberían hacer los gobiernos para mejorar la condición del mundo?” Y la respuesta es: por más que luchen todos los gobiernos juntos para darnos un mundo mejor, no lo lograrán.

La maldad y la perversión se han metido tanto en el interior de las personas, que no hay forma de poder desarraigarlas. Entonces, ¿Qué fin nos espera? ¿Nos destruiremos los unos a los otros? ¿Se desatará una guerra nuclear que acabará con todos los seres humanos?

Algunos piensan que sí. ¿Qué piensas tú? Nosotros pensamos que ocurrirá lo que dice la Santa Biblia: que Dios intervendrá para poner punto final a todos los males que nos afligen.

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Capítulo 5: La Segunda Venida de Jesús.

El Origen y el Final del Mal Dios no creó al diablo. Dios creó a Lucifer, la criatura más bella, inteligente y poderosa que haya existido, y le dio el lugar más encumbrado en toda la Creación. Millones de millones de ángeles se deleitaban en cumplir sus órdenes. Sólo el Hijo de Dios, el Verbo Divino, el Vocero de la Deidad, por cuya Palabra Dios hizo el Universo, lo aventajaba. Y aquél que había sido tan favorecido quiso ser igual a Dios, y ocupar el lugar de Cristo, su Creador. Así se transformó en Satanás, el Enemigo de Dios. Comenzó a propagar su rebelión sigilosamente diciendo que él sólo trataba de ayudar a Dios. Hasta entonces, la Ley de Amor hacía que todos se olvidaran de sí mismos en beneficio de los demás, y el Universo entero cantaba de dicha y felicidad.

Satanás argumentaba que, si habían sido creados perfectos, no tenían por qué estar atados a una ley, y que cada uno debía satisfacer sus propios deseos. Esta „Libertad‟ proporcionaría una felicidad totalmente ignorada. Así propuso su política de alternativa al gobierno divino: la Ley del Egoísmo, cuya naturaleza y consecuencias eran entonces totalmente desconocidas.

Más tarde, su oposición a Dios fue abierta. Aseguraba que la Ley de Abnegación no se podía cumplir y acusaba a Dios de autócrata: de pedir obediencia a una ley que él mismo no la cumplía, ya que había creado a sus criaturas para que lo adoraran y ensalzaran, y así gratificarse egoístamente. Adjudicaba a la Administración Divina el estado de descontento que él mismo había causado. Una tercera parte de los ángeles fue engañada por sus sofismas, el resto permaneció leal a Dios sólo por amor y gratitud.

Dios podría haber aniquilado a Lucifer apenas se rebeló. Pero si lo hubiera hecho ni aún sus criaturas más inteligentes lo habrían comprendido, porque amaban al excelso querubín, y habrían servido a Dios, por temor más bien que por amor. Habría quedado en ellos la eterna duda acerca de si Lucifer tenía razón cuando acusaba a Dios de tirano y déspota. En su Sabiduría, Dios vio que era necesario dar al ángel rebelde la oportunidad de desarrollar su propuesta ante el Universo, y permitir que reinase sobre quienes lo elegían, para que todos vieran cuáles eran los inevitables frutos del mal. Desgraciadamente nuestros primeros padres desobedecieron a Dios a instancias de Satanás y quedaron cautivos de su voluntad. Pero el mal no existirá para siempre, sino que cuando haya llegado a su madurez Dios reivindicará sus derechos de propiedad, redimirá nuestra raza y rescatará nuestro mundo.

Mientras tanto, nuestra Tierra se ha convertido en un gran laboratorio. Millones de mundos fieles a Dios observan con intenso interés el conflicto furioso entre el bien y el mal que se libra en nuestro medio.

En la cruz quedó de manifiesto el carácter de Dios y el de Satanás. Cristo llevó su amor abnegado hasta las últimas consecuencias y demostró que las acusaciones de Satanás eran falsas.

También el Archiengañador fue desenmascarado. Cuando Satanás dio muerte a Cristo, quien lo había traído a él a la existencia, perdió hasta la última simpatía que le quedaba entre los ángeles.

Finalmente, cuando Dios le quite la vida que una vez le dio, a él y a todos sus seguidores, todo el Universo cantará unido: “Justo eres tú, oh Dios, Rey de la Eternidad.”

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Capítulo 5: La Segunda Venida de Jesús.

Señales anunciadoras Ahora que comprendemos que todo está bajo el control de Dios y que Él es el dueño de la historia, vislumbraremos mejor que la maldad que hoy abunda en la tierra, si bien nos entristece, nos está anunciando que Cristo pronto volverá. Y cuanto mayor sea la maldad, más cerca estaremos de ese día de gloria. Cuanto más negra esté la noche moral del mundo, más cerca estaremos del eterno amanecer de Dios.

¿Cuánto falta para que venga Cristo?

Cierta vez los discípulos le preguntaron a Jesús: “¿Qué señal habrá de tu venida y del fin del mundo”? (S. Mateo 24:3) y el Maestro se espació en una respuesta completa y orientadora. Dijo que inmediatamente antes de que Él regresara el mundo habría engaños religiosos, guerras entre las naciones, pestes, hambres, terremotos, angustia de la gente, inmoralidad, crisis en los hogares, etc. (S. Mateo 24:4-7; S. Lucas 17:26-30). Es decir, todo lo que ocurre en la actualidad.

Y además añadió: “cuando estas cosas comiencen a suceder, erguíos y levantad vuestra cabeza, porque vuestra redención está cerca… Mirad la higuera y sus árboles, cuando ya brotan, viéndolo, sabéis por vosotros mismos que el verano esta ya cerca. Así también, vosotros, cuando veáis que suceden estas cosas, sabed que está cerca el reino de Dios” (San Lucas 21:28-31).

De este diálogo, entre Jesús y sus discípulos, se desprenden varios hechos: 1. La segunda venida de Cristo coincide con el „fin del mundo‟ actual. Los dos acontecimientos ocurrirán al mismo tiempo.

2. Hoy vivimos en el „tiempo del fin‟, cuando están ocurriendo las señales que anuncian la venida del redentor y el comienzo de su reino.

3. Al observar estas señales y convencernos de que “está cerca el reino de Dios”, debemos prepararnos espiritualmente para ese día.

El reloj de Dios es perfecto. No tiene atrasos ni adelantos. Cuando llegue la hora exacta de la venida de Cristo, Él vendrá como lo prometió. Sus planes no cambiarán. Y ese reloj divino ya está por marcar el momento final.

El mayor espectáculo de la historia: ¿Te has imaginado alguna vez cómo será la venida de Cristo? Esta vez no vendrá como el „Niño de Belén‟. Vendrá como „Rey de reyes y Señor de señores‟. Vendrá en las nubes de los cielos, y todos lo verán (Apocalipsis 1:7). Cómo el relámpago que enciende el cielo de un extremo a otro, así será la venida de Cristo (S. Mateo 24:27). Será un espectáculo nunca visto, porque el Señor vendrá con „poder y gran gloria‟ (S. Lucas 21:27). Y esa gloria será tan grande, que los impíos no podrán soportarla, y dirán “a los montes y a las peñas: caed sobre nosotros, y escondednos del rostro de aquel que está sentado sobre el trono” (Apocalipsis 6:16).

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Capítulo 5: La Segunda Venida de Jesús.

El bien triunfa sobre el mal Jesús regresará como el Juez supremo que juzgará a todos los seres humanos. “Pagará a cada uno conforme a sus obras” (Mateo 16:27; Romanos 2:6). Y su juicio será justo y correcto, no se equivocará. El que lo haya aceptado como su Salvador personal y haya vivido en armonía con su voluntad divina, tendrá “una casa no hecha de manos, eterna, en los cielos” (2Corintios 5:1) ¿Y qué pasará con los impíos? Quedarán afuera, serán destruidos (2 Tesalonicenses 1:8-9).

San Pedro afirma que los cristianos “esperamos… cielos nuevos y tierra nueva, en los cuales mora la justicia” (2 S. Pedro 3:13). Ese es el mundo maravilloso que Cristo nos dará como recompensa por nuestro amor hacia Él. Allí no habrá ninguna clase de injusticia ni injustos.

Reinará la total armonía y la felicidad en un mundo perfecto. Allí nadie vivirá aburrido, insatisfecho o abrumado por algún problema, porque el mal –en todas sus formas- habrá quedado atrás para siempre.

“Y yo, Juan, vi la santa ciudad, la nueva Jerusalén, descender del cielo…El material de su muro era de jaspe, pero la ciudad era de oro puro, semejante al vidrio limpio. Los cimientos del muro de la ciudad estaban adornados con toda clase de piedras preciosas: jaspe…zafiro… ágata… esmeralda… ónice… cornalina… Las doce puertas eran doce perlas… Y la calle de la ciudad era de oro puro, como vidrio transparente” (Apocalipsis 21:2, 18-21). Hoy los hombres tienen a estos elementos como objetos para acreditar la riqueza de unos pocos, pero Dios los creó para que todos los disfrutáramos sin medida.

En el reino de Dios gozaremos de perpetua juventud. No se conocerán la enfermedad, el sufrimiento y la muerte. “Enjugará Dios toda lágrima de los ojos de ellos; y ya no habrá muerte, ni habrá más llanto, ni clamor, ni dolor; porque las primeras cosas pasaron” (Apocalipsis 21:4). ¿Imaginas un mundo sin hospitales y sin cementerios? ¡Qué grandioso! ¡Todos estaremos sanos por siempre, eternamente! Ni siquiera nos cansaremos, por más actividad que realicemos. Los niños jugarán sin peligro con toda clase de animales. Los jóvenes disfrutarán de los más variados esparcimientos, y ¡realmente gozarán de la vida! En verdad, allí todos seremos para siempre jóvenes.

El cielo es una escuela; su campo de estudio, el universo; su maestro, el Ser infinito. En el Edén fue establecida una dependencia de esta escuela y, una vez consumado el plan de redención, se reanudará la educación en la escuela del Edén... Restaurado a la presencia de Dios, el hombre volverá a ser enseñado por Él, como en el principio. Se desarrollará toda facultad y toda aptitud aumentará. Se llevarán adelante las mayores empresas y se lograrán las más elevadas aspiraciones. Y aún se levantarán nuevas alturas a las cuales llegar, nuevas maravillas que admirar, nuevas verdades que comprender, nuevos objetos que despertarán las facultades del cuerpo, la mente y el alma. Así como el conocimiento es progresivo, así también el amor, la reverencia y la dicha irán en aumento… Y a medida que los años de la eternidad transcurran, traerán consigo revelaciones más ricas y aún más gloriosas respecto de Dios y de Cristo.

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Capítulo 5: La Segunda Venida de Jesús.

Todos los tesoros del universo serán abiertos al estudio de los hijos de Dios. Con visión clara considerarán la magnificencia de la creación. El estudiante de la ciencia podrá leer los informes de la creación, sin hallar señales de la ley del mal. Escuchará la música de las voces de la naturaleza y no descubrirá ninguna nota de llanto ni voz de dolor... El nombre del Creador se encuentra escrito en todas las cosas, desde las más pequeñas hasta las más grandes, y en todas ellas se ostenta la riqueza de su poder.

Todo redimido comprenderá la obra de los ángeles en su propia vida. ¡Qué sensación le producirá conversar con el ángel que fue su guardián desde el primer momento; que vigiló sus pasos y cubrió su cabeza en el día de peligro; que estuvo con él en el valle de la sombra de muerte, que señaló su lugar de descanso, que fue el primero en saludarle en la mañana de la resurrección... Entonces serán esclarecidas todas las perplejidades de la vida. Donde a nosotros nos pareció ver sólo confusión y chasco, propósitos quebrantados y planes desbaratados, se verá un propósito grande, dominante, victorioso, y una armonía divina. Sabremos que el amor infinito ordenó los incidentes que nos parecieron más penosos. A medida que comprendamos el tierno cuidado de Aquel que hace que todas las cosas obren conjuntamente para nuestro bien, nos regocijaremos con gozo inefable y rebosante de gloria.

La familia humana, será una con la familia del cielo: millares de millares y millones de millones de criaturas que habitan el Universo incomprensible. Sólo la eternidad bastará para abarcarlo. La multitud de los redimidos viajará de un mundo a otro. Libres de las cadenas de la mortalidad, se lanzarán en incansable vuelo hacia los lejanos mundos… Entraremos con inefable deleite en el gozo y en la sabiduría de los seres no caídos. Compartiremos los tesoros ganados durante siglos y siglos pasados en la contemplación de la obra de Dios. Es por esto que „el Cielo‟, el Universo entero, será nuestro hogar. ¡Qué gozo tendremos cuando nos reencontremos con nuestros seres queridos, que la muerte había quitado de nuestro lado!

San Pablo describe: “Porque el Señor mismo con voz de mando, con voz de arcángel, y con trompeta de Dios, descenderá del cielo; y los muertos en Cristo resucitarán primero. Luego nosotros, los que vivimos, los que hayamos quedado, seremos arrebatados juntamente con ellos en las nubes para recibir al Señor en el aire, y así estaremos siempre con el Señor” (1Tesalonicenses 4:16-17). Sí, gracias a la resurrección de los muertos que producirá Jesús, las familias se volverán a unir para no separarse jamás. “Gozo perpetuo será sobre sus cabezas; y tendrán gozo y alegría, y huirán la tristeza y el gemido” (Isaías 35:10). El gozo más profundo lo tendremos cuando conozcamos a Jesús cara a cara, y ser sus eternos amigos. ¡El bien habrá triunfado definitivamente sobre el mal!

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Capítulo 5: La Segunda Venida de Jesús.

Como ladrón en la noche “Sepan que en los postreros días aparecerán individuos entregados a sus malas pasiones, que se burlarán de la verdad del evangelio. Dirán: ¡Conque Jesús prometió regresar! ¿Por qué no lo ha hecho todavía?... ¡Desde que murieron nuestros antepasados, todas las cosas siguen lo mismo que desde el primer día de la creación! … Aunque a algunos les parezca tardanza, el Señor no va a demorar el cumplimiento de su promesa; sólo que él, por evitar que alguno se pierda, está alargando pacientemente el plazo para darle a todo pecador ocasión de arrepentirse. Pero sabed que el día del Señor llegará repentinamente, como cuando un ladrón llega por la noche. Entonces desaparecerán los cielos en medio de un estruendo espantoso; los elementos se desintegrarán consumidos por el fuego, y la tierra, con todo lo que hay en ella, quedará destruida en el terrible incendio. Ante la certidumbre de aquellos acontecimientos que un día pondrán fin al mundo que conocemos, ¡comportaos santa y piadosamente a lo largo de vuestra existencia actual! Vivid en la anhelante expectativa del día aquel, preparados para el instante en que Dios ponga fuego a los cielos, y los cuerpos celestes se fundan y deshagan envueltos en llamas. Sin embargo, tened igualmente presente que entonces, conforme a la promesa de Dios, habrá unos nuevos cielos y una nueva tierra, y en ellos habitará la justicia. Amados, mientras esperáis el cumplimiento de esas cosas, dedicaos diligentemente a vivir sin dejaros manchar por el pecado, en paz con todos. Así, cuando Cristo vuelva os encontrará irreprensibles. Y pensad que si aún no ha venido es porque nos está dando tiempo para alcanzar la salvación (2 Pedro 3:3-15).

No ha habido otra esperanza, ni la habrá. Desde Adán, generación tras generación, los hijos de Dios, amantes de la paz y la justicia han dicho como Job en su angustiosa enfermedad: “Yo sé que mi Redentor vive, y que al fin aparecerá sobre la tierra; y después de deshecha esta mi piel, en mi carne he de ver a Dios. Al cual he de ver por mí mismo, y mis ojos lo contemplarán, y no otro, aunque mi corazón se muera dentro de mí” (Job 19:25-27).

O como San Pablo, poco antes de ser decapitado: “Porque yo ya estoy listo para ser sacrificado, y el tiempo de mi partida está cercano. He peleado la buena batalla, he acabado la carrera, he guardado la fe. Por lo demás, me está guardada la corona de justicia, la cual me dará el Señor, juez justo, en aquel día, y no solo a mí, sino también a todos los que aman su venida” (2Timoteo 4:6-8).

Cristo nos está dando a todos la oportunidad de arrepentirnos y de aceptarlo como nuestro Salvador. Si vivimos con Él, y hacemos su voluntad, estaremos preparados para su venida.

Y cuando lo veamos venir, diremos con alegría:

“Este es nuestro Dios, le hemos esperado, y nos salvará…”

(Isaías 25:9) Martín Hiram - “Salid de ella…

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6-Llamado a ser de Jesús

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i te encuentras leyendo este capítulo, no es por casualidad. Dentro de ti, hay algo que te induce a seguir investigando. No es otra cosa que la voz de Dios que está llamándote. San Pablo nos dice, en su carta a los Romanos, capítulo 1, versículo 6: “entre los cuales están también ustedes, llamados a ser de Jesucristo”.

Dios llama a sus hijos desde el comienzo mismo de nuestro mundo. En Génesis 3:8-9, encontramos el relato de la caída en pecado de Adán y Eva, nuestros primeros padres: “Y oyeron la voz de Jehová Dios que se paseaba en el huerto, al aire del día; y el hombre y su mujer se escondieron de la presencia de Jehová Dios entre los árboles del huerto. Mas Jehová Dios llamó al hombre, y le dijo ¿Dónde estás tú?”

Quizá durante mucho tiempo has estado escondiéndote de la presencia de Dios. Hoy Dios te llama y pregunta ¿dónde estás tú? Tal vez, como Adán le respondas: “Oí tu voz…, tuve miedo… y me escondí”, pero Dios no te llama para destruirte sino para salvarte. Él ha pagado tu deuda y hoy te está dando una oportunidad, quiere perdonarte todos tus pecados y darte su paz, la incomparable paz de su perdón. “Justificados, pues, por la fe, tenemos paz para con Dios, por medio de nuestro Señor Jesucristo” (Romanos 5:1).

Dios te conoce desde antes de nacer, desde que fuiste formado en el vientre de tu madre. Isaías dice: “Así dice Jehová, Creador tuyo… y Formador tuyo…: No temas, porque yo te redimí; te puse nombre, mío eres tú. Cuando pases por las aguas, yo estaré contigo; y si por los ríos, no te anegarán. Cuando pases por el fuego no te quemarás, ni la llama arderá en ti. Porque yo Jehová, Dios tuyo, soy tu Salvador… Porque a mis ojos fuiste de gran estima, fuiste honorable y yo te amé; daré, pues, hombres por ti y naciones por tu vida… No te acuerdes de las cosas pasadas, ni traigas a la memoria las cosas antiguas… Yo, yo soy el que borro tus rebeliones por amor de mí mismo, y no me acordaré más de tus pecados… así dice Jehová, Hacedor tuyo, y el que te formó desde el vientre, el cual te ayudará: No temas…”

Y si Dios nos perdona, ¿quién nos condenará?: “Y sabemos que a los que aman a Dios, todas las cosas les ayudan a bien, esto es, a los que conforme a su propósito son llamados.

Porque a los que antes conoció, también los predestinó para que fuesen hechos conformes a la imagen de su Hijo… y a los que predestinó, a estos también llamó; y a los que llamó también justificó; y a los que justificó, a éstos también glorificó. ¿Qué, pues diremos a esto? Si Dios es por nosotros, ¿quién contra nosotros? El que no escatimó ni a su propio Hijo, sino que lo entregó por todos nosotros, ¿cómo no nos dará también con él todas las cosas? ¿Quién acusará a los escogidos de Dios? Dios es el que justifica. ¿Quién es el que condenará? Cristo es el que murió; más aun el que también resucitó, el que además está a la diestra de Dios, el que también intercede por nosotros… por lo cual estoy seguro que ni la muerte, ni la vida, ni ángeles, ni principados, ni potestades, ni lo presente, ni lo porvenir, ni lo alto, ni lo profundo, ni ninguna otra cosa creada nos podrá separar del amor de Dios, que es en Cristo Jesús, Señor nuestro” (Isaías 43:1-5, 18, 25; 44:1; Romanos 8:28-39).

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San Pablo, hizo del llamamiento divino el sentido de su vida: “Cuantas cosas eran para mí ganancia, las he estimado por pérdida por la excelencia del conocimiento de Cristo Jesús, mi Señor, por amor del cual lo he perdido todo, y lo tengo por basura, para ganar a Cristo…

Hermanos, yo mismo no pretendo haberlo ya alcanzado; pero una cosa hago: olvidando ciertamente lo que queda atrás, y extendiéndome a lo que está delante, prosigo a la meta, al premio del supremo llamamiento de Dios en Cristo Jesús… Porque irrevocables son los dones y el llamamiento de Dios” (Filipenses 3:7-14; Romanos 11:29).

Cómo en todo llamamiento, el que llama tiene un propósito, un mandato hacia el que dirige su llamado: “Así dice Jehová, Creador de los cielos (Jesús)…: Yo Jehová te he llamado en justicia, y te sostendré por la mano; te guardaré y te pondré por pacto al pueblo, por luz de las naciones, para que abras los ojos de los ciegos, para que saques de la cárcel a los presos, y de casas de prisión a los que moran en tinieblas…” (Isaías 42:5-7).

Dios desea que participemos en su obra, que seamos instrumentos suyos en la salvación de otras personas. Quiere que abramos los ojos de los ciegos espirituales, mostrándoles las maravillas de su amor, que liberemos a los que están presos en sus pecados, sin vergüenza ni temor: “Porque no nos ha dado Dios espíritu de cobardía, sino de poder, de amor y de dominio propio. Por tanto, no te avergüences de dar testimonio de nuestro Señor… Antes participa de los sufrimientos del evangelio según el poder de Dios, quien nos salvó y nos llamó con santo llamado, no conforme a nuestras obras, sino según su propósito y su gracia, que nos dio en Cristo Jesús antes de que empezara el tiempo, y que se ha manifestado ahora por la aparición de nuestro Salvador Jesucristo, quien abolió la muerte, y sacó a la luz la vida y la inmortalidad por medio del evangelio. De este evangelio fui constituido predicador, apóstol y maestro de los gentiles. Por eso padezco, pero no me avergüenzo, porque sé a quién he creído, y estoy seguro de que es poderoso para guardar mi depósito para aquel día” (2 Timoteo 1:7-12).

Lamentablemente, no todos responderán al llamado celestial: “Jesús le respondió con esta parábola: Un hombre organizó una gran cena, a la que invitó a mucha gente. Cuando ya todo estaba preparado, envió a un siervo a anunciar a los invitados que ya podían acudir al banquete. Pero ellos, todos a una, comenzaron a excusarse. Uno dijo que acababa de comprar una finca y tenía que ir a verla; otro dijo que había comprado cinco yuntas de bueyes y tenía que ir a probarlos; y otro dijo que no podía asistir porque acababa de casarse. El siervo regresó y comunicó a su amo las excusas de aquellos invitados.

Entonces el amo, enojado, le ordenó que saliera por toda la ciudad y convidase a cuantos mendigos, mancos, cojos o ciegos encontrara en el camino. El siervo obedeció, pero como aún quedaban lugares vacíos en la sala del banquete, el amo le ordenó de nuevo: Ve ahora por los caminos y los cercados, e invita a todos los que gusten venir, hasta que la casa esté completamente llena. En cuanto a los primeros invitados, ninguno de ellos probará la cena que yo había preparado (S. Lucas 14:16-249. Esta parábola representa la condición de muchos de los que profesan creer la verdad. El Señor les ha enviado una invitación a venir a la cena que él ha preparado para ellos con gran costo de su parte, pero los intereses mundanales les parecen de mayor importancia. Están invitados a participar en cosas del tesoro celestial, pero prefieren el terrenal: embellecer su casa, cambiar el modelo de su auto o conseguir las comodidades y los Martín Hiram - “Salid de ella…

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lujos de nuestra sociedad consumista, y hacen de esas cosas terrenales una excusa para desobedecer el mandato celestial. Como los mencionados en la parábola, dicen: "No, Señor, no puedo seguirte: te ruego que me des por excusado." Cierran la puerta de su corazón al mensajero celestial que les dice: "Venid, que ya está todo preparado", pero la abren para dejar entrar las cargas del mundo y las preocupaciones de los negocios. Jesús llama en vano.

No hace falta más que informarse un poco para darnos cuenta de que nuestro mundo está al borde de una crisis estupenda. Hasta los ciegos pueden ver que:  La pérdida de valores morales ha destruido las familias y la violencia golpea en todos los rincones de la sociedad.  Una economía global, manipulada y corrupta, hace temblar a chicos y grandes.  Los recursos naturales se están agotando: el gas, el petróleo y el agua misma. Las naciones más poderosas buscan asegurárselos de cualquier manera. Como dijo Jesús, oímos de “guerras y rumores de guerras”.  Vivimos bajo la amenaza de pandemias que podrían llevarse la mitad del género humano.  Por otro lado, la naturaleza está convulsionada: sequías e inundaciones, huracanes y tempestades, terremotos y tsunamis, son la respuesta de un planeta maltratado.

El Espíritu de Dios nos avisa, nos advierte, llama nuestra atención una y otra vez para hacernos reflexionar y cambiar de conducta, antes de que venga sobre nosotros un tiempo de angustia “como no ha habido desde el principio del mundo hasta ahora, ni lo habrá” (Mateo 24:21).

Todavía estamos a tiempo para aferrarnos del Todopoderoso.

Jesús te está llamando. ¿Puedes oírlo? Si oyes hoy su voz, no endurezcas tu corazón: “He aquí yo estoy a la puerta y llamo; si alguno oye mi voz y abre la puerta, entraré a él, y cenaré con él y él conmigo. Al que venciere, le daré que se siente conmigo en mi trono, así como yo he vencido y me he sentado con mi padre en su trono” (Apocalipsis 3:20-21). Dios desea morar contigo, está a la puerta de tu corazón. ¿Lo dejarás entrar? ¡Sé un vencedor! Y obtiene las promesas de verdadera paz y felicidad en una vida sin final.

Cuando el gran conflicto haya terminado, ya no habrá más pecado ni pecadores. Todo el universo estará purificado. La misma pulsación de armonía y de gozo latirá en toda la creación. De Aquel que todo lo creó manarán vida, luz y contentamiento por toda la extensión del espacio infinito. Desde el átomo más imperceptible hasta el mundo más vasto, todas las cosas animadas e inanimadas, declararán en su belleza sin mácula y en júbilo perfecto, que Dios es amor.

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7- Apéndice Libros recomendados por el escritor         

Elena G. de White. Esperanza para vivir. ACES, Argentina.

Elena G. de White. Patriarcas y Profetas. ACES, Argentina.

Elena G. de White. Profetas y Reyes. Elena G. de White. ACES, Argentina.

Elena G. de White. El Deseado de Todas las Gentes. ACES, Argentina.

Elena G. de White. Los Hechos de los Apóstoles. ACES, Argentina.

Elena G. de White. El Conflicto de los Siglos. ACES, Argentina.

Alejandro Bullón. Señales de Esperanza. ACES, Argentina.

Mark Finley. Tiempo de Esperanza. ACES, Argentina.

Loron Wade. Los Diez Mandamientos. ACES, Argentina.

Datos de contacto El objeto de esta obra ha sido presentarte y atraerte hacia el maravilloso conocimiento de la Palabra de Dios, única guía confiable en este mundo de maldad. Has visto la „punta del iceberg‟, hay mucho más por seguir descubriendo.

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