Antología Poética - Jacinto Yaber by Matías Roncoroni

ANTOLOGÍA POÉTICA

QUÉ DIOS... JUJUY

Mi homenaje en Poesía y Canto

JACINTO YABER

ANTOLOGÍA POÉTICA

QUÉ DIOS...JUJUY

1era Ediciรณn. Buenos Aires. 2016

Buenos Aires, 24 de febrero de 2016. Amigo lector: Te agradezco la enorme deferencia que para mí significa contarme entre los leídos de tus libros, a sabiendas de que el presente es mi primera intención y visión bibliográfica: un poemario donde dibujo en homenajes mis sentires en directa conexión emocional con mi Jujuy natal mayoritariamente, su gente, su geografía histórica en sus hechos trascendentes abreviados exprofesos, sus paisajes, pero en el corto metraje de mi conocimiento personal; mi pequeña dosis académica y mi escolástica y breve intelectualidad, suplida a veces por mi enorme autodidáctica y callejera formación, contando con la alianza de una pluma sutil que dicta el alma y, en vuelo de poemas y canto, yo pretendo entregarte cual palomas de letras dibujadas. Me hubiese sido imposible estar aquí contigo en este libro sin el increíble y generoso aporte de personas, instituciones y empresas que, sobrevalorando lo creativo de un talento, me impusieron el gesto de su generosidad ampliada, su tiempo, trabajo y aporte económico, que a mí me supera en mi capacidad de asombro, y en sí mismo exaltece el granito cultural que representa este hijo nuevo, habitante de tu tiempo de lectura o biblioteca. Parapetado en mi visión individual, le puse el credo a cada página poética en su esencia. Si los sucesos son formas de latidos de vida permanentes, ella en sí misma es la secuencia de momentos y cada acontecer te enseña su temblar donde está el alma. En mi reconocimiento desde ti, yo digo al gracias eterno a Diseñobar de Buenos Aires, que diseñó y puso en circulación esta creación literaria; a su generoso titular Mauricio Gustavo Barouille –un señor más que ingeniero: para mí un inestimable amigo y compañero- y su equipo; a la empresa Ejesa en la persona de un señor con mayúscula, el ingeniero Ricardo Averzano, y al equipo de creativos que lo acompaña; a su rostro más visible, la Señora Gabriela Marsiglia; al Club Atlético Gimnasia y Esgrima de Jujuy y su C.D. en el apoyo inestimable de su actual vicepresidente Dr. Fernando Yécora, gestor inicial de este logro; al Colegio Nacional N°1 “Teodoro Sánchez de Bustamante”, a la profesora Gilda Zurueta de

Valdez y al cuerpo docente y directivo; a la arquitecta Alicia Calsina; a mi gran amigo Miguel Ángel Pereira y a la memoria de Pablo Teruel; al cuerpo directivo actual del Centro Polivalente de Arte; a los profesores Alejandro Condori y Jacinta Aima; a la enorme memoria del Profesor Luis Martínez. Un cronicado especial a un grande y a otro enorme periodista de El Tribuno de Jujuy, Licenciado Carlos Alfonso Ferraro, para mí el mejor periodista jujeño de mi generación, y al enorme Oscar Manuel D’Oliveira, culpables del nacimiento y exposición del poema Que Dios… Jujuy en Literarte, punto de partida de este libro. Oscar se fue sin verlo, pero es su impulsor principal. Sin duda mi maestro y amigo. Un parrafo especial a la poetisa y profesora de literatura jujeña, Señora Carmen Hebe Tanco, que lo llevó en en baner a la Universidad Complutense de Madrid en el área latinoamericana. Igual recordatorio acá a mi afectuoso camarada por su rango: Jefe del 5to de Artillería de Montaña, Teniente Coronel Leandro Yofre, quien lo adoptó al poema para lucirlo en la guardia y casino del regimiento. Al ingenio Río Grande La Mendieta en las personas del Dr. Hugo Jorge e ingeniero Ricardo Sánchez Riera por sus atentas colaboraciones al mural que generosamente luce en poesía el estadio del lobo jujeño, reivindicando el 23 de agosto en poema-mural. Con el perdón apropiado dejo expresa gratitud a quienes me acompañan desde otras latitudes celestiales, mis padres Margarita Ale y Ale Hassan Yaber; mis hermanos José Andrés, Fátima, Martín César y Margarita en todos mis sobrinos y sobrinos-nietos que los representan; a mis hijos Daniel, Carolina y Patricia Yaber Bono y a María Silvia Yaber Nelson, a las madres Alicia Martha Bono, madraza genial, y mi gratitud a mi compañera Teresa Silvia Nelson; a mis nietos Leonardo Hassan Yaber y Tomás Velez Yaber; mis yernos Juan Antonio Muller, Juan Alberto Maldonado y Martín Velez; a la madre de Leo, Raquel Zaugg; a mi hermana María Ysabel y a toda su descendencia, en una enorme coreografía afectiva junto a todos los amigos de infancia y de la vida del barrio y de mi origen. Digo con el alma: gracias Dios por tanta elocuente vivencia que me diste. Me quedan enormes este amor y el de mi tierra, Jujuy.

A mi origen

Mi infancia siempre será un arabesco por las tardes somnolientas de mi aldea, una traviesa razón… el don grotesco de un cielo barrilete en su tarea. No existe una misión más encomiable que el transitar mis recuerdos y sus detalles, volver por los azahares naranjeros al primaveral polvoriento de esas calles. El viento conventillo por mi rostro, asomándome a la vida por los sueños, que en la humilde ambición del tiro corto, cabalgara mi niñez sin ser su dueño. Desde el silvo amarillento en su plumaje me enseñaba su altivez el benteveo, viento norte con ardor casi salvaje, aun me asusta en su pasar cuando lo veo. Aquel patio de orfandad color ladrillo le hacía un gol a la red del gallinero, el cajón de lustrar era un sencillo, pero firme arquerazo en mi potrero. Desde el parque me gritaba en su zumbido algún trompo gambeteando las hamacas y el colgante tirador de veraneo baila al ritmo carnaval de una matraca. Le ganaba al Xibi-Xibi sus mojarras con botella miga pan bajo la arcilla. En preciosas zambullidas las pescaba junto al verde berrotal que las encubría.

A la honda, a la caĂąa, a las bolitas yo encerrĂŠ en mi corazĂłn de figuritas y el picado mĂĄs caliente me transita con la barra de mi origen y estas citas.

Mi reflexión

Me forjé un destino adentro y quiero pelearlo afuera. No busco encontrar por qué, por no darle el gusto a eso. Tengo dos aliados firmes, ambos de buena madera, un temperamento llano con un corazón de fuego, y si por los tres fallamos, ¡tengo a Dios con mis ideas! No me asustan los ladrones ni el murmullo del soberbio porque yo no sigo a perros, ni me acomodo entre cerdos. Acaso por ser humilde, me atraganté del proverbio: Al César lo que es del César…que si me olvido me pierdo. No existe sueño más lindo…que saber dónde me duermo. Dicen algunos que saben: “Aprendé de los que piensan”. Con ese razonamiento me quieren cambiar la idea, ignoran que bajo el sol se disipan las tinieblas. La fiera siembra temor, pero vive en madriguera. Dios me puso buena vista, y también entendedera. Es fácil que me equivoque…una vez todos los días porque apunto siempre a dar a las cosas su valia, pero nunca cambio el paso ni el sendero en mi porfía. Quiero hambrear por ser valiente, no comer por cobardía. ¡El tiempo que Dios me dio será pa’ cortar espinas! No necesito academia pa’ decantar sentimientos. Vivo, quiero, sueño y pienso…en la misma dirección, sé muy bien hallar calor, más allá del frío y los vientos. Por eso me hice a la vida una sola reflexión: ¡No hay gloria que gane el hombre! porque ella es cosa de Dios.

Mensajes

Adónde irán a dormir…los pensamientos cuando el alma se adormece con el sueño. No imagino desmayar los sentimientos, si el instinto natural detiene al dueño. Adónde irán las palaras que se callan cuando quedan silenciadas las gargantas. Me seduce imaginar…adónde encallan, los sonidos de la voz fuera del habla. Adónde irán las miradas…que nos faltan, si no están estampadas a sus pupilas. No son ciegos unos ojos que se espantan, cuando sueltan tras de sí sus energías. Adónde vuelven a gorjear las alegrías que se pierden al tañir de una tristeza. Cuán enorme dimensión tiene la noche que se pierde en su lugar…todos los días.

Tal vez, quizá…no sé

(Siete coplas para un adiós)

Tal vez, quizá…no sé la muerte cruce mi vida, y elija por fecha cierta un lunes al amanecer. No sé, tal vez quizá… no tenga ganas de verla, y, el lunes no me despierte cuando me venga a buscar. Quizá, no sé…tal vez la noche de mi infortunio se anuncie noche de farra, por si me quiero volver. Tal vez, quizá…no sé cuando mi tiempo se agote, y el martes que ya no exista tú quieras volverme a ver. No sé, tal vez…quizá la mañana de esa fecha tenga un sol de faz radiante y un suspiro tu mirar. Quizá no sé…tal vez yo escriba la tarde previa una copla con tu nombre que suene a besos de ayer. Tal vez…quizá…no sé no sé, tal vez…quizá quizá no sé…tal vez

la muerte me ande rondando y yo me quiera esconder. .

Ni siquiera conocidos

Nos miramos sin hablar…al comenzar la entrevista, un café casi al pasar justificando esa cita, punto final a ojos vista de una historia a terminal. Nunca fui…ya te lo dije, para tu alcurnia pintada, ni tu amor ni un ser que aflige, mucho menos, tu alma triste, ni el candor de tu mirada. Pasamos veintiocho abriles…de cuerpos entrelazados, vos recordando entre grises, los besos de un ser amado mientras tu cuerpo al que quise me ahogaba con sus orgasmos. No fui tu novio, tu amante, ni el ser querido que anclaba, tampoco tu acompañante ni vos mi reina ni esclava. Los dos fuimos por talante. Sólo la vaina y su espada. Los años que fuimos todo…Hoteles, giras y alcobas, ganas de estar, cielo y lodo…hoteles, giras, recovas, sin planear siempre fue el modo, que el alma nunca se cobra. Por eso sólo al mirarnos nos dimos por concluidos. Decir adiós sin hablarnos, amigos, sexo incluidos. Se acabó, no hay que cuidarnos…desde hoy ya decididos. Ni siquiera conocidos.

En silencio

Me recosté en silencio… a imaginar tu ausencia, sabiéndote a mi lado, corpórea y fantasmal; qué extraña sinfonía mi corazón alienta, mirando en sus latidos… los días que ya no están. ¿Por qué será el presente?... tan ruin con la memoria, abordando las horas que es preciso olvidar, si sólo habrá mañana, bailando en otra aurora, el día que el hoy me enseñe su senda novedad. Me recosté en silencio… A imaginar tu ausencia. ¡Qué torpe este motivo!... no hay nada si no estás.

Jujuy es carnaval

Ya despierta el alborozo, el viento rumbeando quenas, saliendo cuestas arriba que es tiempo de arriar las penas; pa’ que la lluvia del cerro corriendo moje las venas del arenal quebradeño, para acabar los silencios, con el latir de sus peñas. Ya todo Jujuy florece de serpentinas talqueadas, que en las chicas de comadre entre el vino y la moqueada, del diablero de Tilcara, que acullicando el ablande, desentierra carnaval, con el fuego de su danza. Desde León me voy rugiendo soltando risas de Yala, mi corazón Huacalera suelta el volcán de Tumbaya, tocando siete colores, con mi caja Purmamarca, para besar en Maimará, a mi cholita de tolas y corazón Humahuaca. Uquía no me despiertes del clericó que me macha, cuando me invites cordero, bordado de choclos y habas, pa’ cuando suba el aroma del queso i’ cabra a mi cara, me agarre el grito de ganas

de alborotar a la imilla. Con carnavales alzados, amando tras el ceniza, la furia de un nuevo entierro, que aguante las doce lunas, que viajan un aĂąo entero, sabiendo que aquĂ, yo espero, con el diablo de mi raza.

Canto al canto de Jujuy (Carta poema)

Por el pentagrama que hay en mi memoria, un cielo de notas quisiera pintar. Y en ese solfeo, sinfonía de historias… un coro en acordes pretendo nombrar. Jujuy!...dice en eco la voz de Yerbita. Los Hermanos Chañi están por tocar, con los Kerenikas y las Voces del Teuco… “Negro” Altamirano te vuelvo a escuchar… Los Changos del Huaico, con el Rumbo Trío, cuerda y capotraste para acompañar. Emerge la altura de Jorge Cafrune…gigante destino que vuelve a cantar. Pisando otras huellas miro a Leandro Ocampo, bandera en sonido que mi tierra dio. Cacharpaya adentro…Los Tekis en su encanto endiablan al “Fortu”, el erke mayor. Así acordoneando con Gregorio Puma… El Ricardo Vilca me vuelve a embrujar. Y en el bandoneo de Vedia en la Puna, por un bailecito me llego al Huancar… Para que los versos de Marcia y Alfredo, persigan el vuelo de Tomás Lipán. Sapo Cancionero me dice Hugo Chagra. Las Hermanas Cari, ya quieren coplear. Y en el sueño eterno de Edmundo Zaldívar el Humahuaqueño se viene a bailar. Con un ponchito runa Torres Aparicio… ¿Total qué? me dice y en pena se va… “Tukuta” Gordillo soltale tus vientos… y Olarte y el “Uña” lo han de acompañar. Con gorjeo de alondra Mónica Pantoja… Anida en sus cuerdas quebrada y tolar; el “Coya” Mercado se acopla a su caja…

pa’ que La Cantada encienda al Ramal. Rescato al Bruno Arias tonada de El Carmen, rodeándolo al Zapla…Mercedes y Andrés… El “Chango” Bellido se prende a este baile… con Los de Ledesma siguiéndole el tren. “Negrita” Cabana inventa una ronda… “Tarrito” Cuñado volvé a repicar… Y a tu dulce bombo Don Milton Cardozo, con labios de silbo los va a armonicar. Y el Ángel Velázquez se va por el mundo… Mago del charango y encima lutier. Perico ya sabe que tiene en sus sueños una serenata para San José. Con Los Aramayo vuelvo para el Norte. El “Arisco” Lamas me ayuda a llegar; Luisito Paredes pulsá tu garganta y en tiempo de Changos, volveme a cantar. El “Gordo” Barrojo con voz flauta dulce lo baña al Río Chico dejando un sentir… Para que las manos del “Fofa” y el “Paco”, endulcen tu viola “Burro” Lamadrid. Molina y Morales florean sus guitarras… para que en deleite se puedan cargar con garganta en dúo Bolívar y Aisama y el Jujuy de antaño me alcance a endulzar. Rolando Martínez silbame en tu quena… desde el Parque Roca hasta el San Martín. Que el Aldo Maccagno te encore a su piano y lo acompañemos al “Bacha” Bohuid. Escuchá Marita con voz Purmamarca, que el “Negro” Velarde está por fuellar. Y en esta cantata norteña se enmarcan las ganas de afines del César Maraz. Me voy despidiendo del “Chivo” Cordero… al “Pollo” Martínez lo escucho puntear… Me parece oírlos al “Tinto” …al “Oquincho” con el “Cacho” Castro y Los de Chalicán. El “Huevito” Helguera va Cuyaya adentro,

buscando otra huella pa’ serenatear. Y allá en “Memo” Vilte me endulzo por dentro si el Jaime Centella comienza a prosear. La Quiaca se torna estrella y baguala, en tu acento enorme Javier Pantaleón, y el azúcar-tierra vestida de caña te besó en tu cuna “Zamba” Quipildor. Tal vez no me alcance para nombrar a todos… le recuerdo al “Gato” y a José Simón, que Los Caballeros también a sus modos… dejaron su estilo, alma y emoción. Dejo en homenaje a todos los cantos, desde el Chañi al Negro…de este cielo azul, la estrella poema bañada de encantos… dormida en las voces de Los de Jujuy.

Pareceres

Los miedos tienen razones que te obligan a existir. El cielo entra en nubarrones y al sol le cuesta salir, el río logra en pedregones, pero es porfiado al seguir, las dudas se me asemejan al viento y su insensatez, se arremolina en sus quejas silba fuerte su altivez, como el alma que la aqueja lo que no sabe o no ve. La tristeza tiene a veces motivos de estar en Ti. a la lluvia se parece, porque te ayuda a vivir, siempre llega, moja y crece las ganas del porvenir. la fe no tiene argumentos, para estar en tu razón, nadie explica sentimientos, ni el latir del corazón. La montaña al movimiento lo frena con firme acción.

Mi secreto

Quizás se llamó Esther…aquella dama vestida de nostalgia en mi distancia. Tan sutil, como un ave en otra rama, desplegando entre sus alas su arrogancia. Nunca supe ni adónde…cómo y cuándo mi piel quedó adherida a sus rubores; como un ciego demencial yo fui enlazando su posar casi imperial a mis pasiones. Siempre estuvo tan lejos de mis ansias, como nieve a los veranos tropicales; pero felina a mi sangre la alteraba, cuando tigresa me quemaba en sus volcanes. Tal vez se llamó Esther…para mi tiempo, su celaje tan mujer que me habitaba. Con la simple desnudez de sus silencios la encadenó a mi boca desbordada. Yo dejé que creciera dentro mío la rugiente ternura que inspiraba; ese mirar ardiente, pero altivo, que en acuosa deleidad me enamoraba. Se se quedó o se fue…si vive o muere en la esfera final de mi esperanza, será siempre un puñal que a hierro hiere mi secreto más vital…su nombre en danza. Quizás se llamó Esther…aquella dama que se quedó dormida en mi añoranza.

La del valle

Ya no estás con tu sangre alborotada, en felina lascitud sobre aquel lecho; ni yo voy con ansias a tu entraña a engarzarnos los dos a un solo cuerpo./ No amanecen los tiempos ni las horas bajo el tierno rubor de nuestras risas; agotamos de placer…tantas auroras y después de todo el fuego… ni cenizas./ Está bien que nos fuimos… sin agravios/ a encerrarnos para siempre en dos silencios./ Sin posar un adiós en nuestros labios y enlodar el corazón con los desprecios./ Si se apaga la pasión…en una vida, el embate de este fin… da una esperanza./ Al subirnos a un vuelo en despedida y a soñar que otro placer nos de su danza./ Yo prometo a esa mujer…a la del Valle,/ por el tiempo enarbolado y…lo vivido ni rozar con la mirada si en la calle nos cruzamos por azar que da el destino,/

con el garbo trasparente del detalle que tan sólo…yo seré un desconocido./

A Silvana G Vestido de poema… Bailando en mi memoria Tu nombre, como en sueños Emerge juvenil. Para formar en versos Los giros de una historia Que canto y te confieso Que sólo es para ti. Silvana…dice el trino Que aprieto entre mis labios… Silvana y el impulso que esgrimo al escribir Me mece con mil letras, Palabras que en el alma… Tan sólo en tu milagro Podrán sobrevivir. Así se escucha el silbo Cancino de los días. Acompañando el tiempo Que queda por vivir. Todo esto me recuerda Que siendo melodías… Giramos en los sueños Que quedan por venir. No importan las quimeras… Los versos, ni la forma. Las cosas que vivimos, Lo bueno, ni el perdón.

Tal vez importe poco, Saber cómo crecimos, Mi vuelo de poeta, Tu estirpe y el amor. Así son los encuentros Causales de milagros. Silvana dice el gesto Vital de mi pasión. Disfrazado de espuma, Vertí sobre tus años Aprendiendo en tu tiempo El gesto y la canción. Mañana en un suspiro, Quizás me quede preso Y aprenda con un rezo Tu nombre a descifrar. Silvana…en cada paso Que estile con el alma, Tendrá como destino Tu nombre por solar… Y entonces si mis ojos Se animan cada noche, Silvana…será el beso Que quede por llorar.

Ayer me preguntaron Ayer me preguntaron… ¿Qué tiempo estoy sin verte? Y adónde están las horas que fueron de los dos. Ayer me preguntaron… tan torpes, como siempre, los que miran auroras de un cielo de otro sol. Me puse reflexivo… tal vez, indiferente, utilicé en respuesta tan sólo un no lo sé. Yo nunca he preguntado los vuelos de otra gente, quizás por esa puesta por poco te negué. Ayer me preguntaron por ti, si es que me acuerdo… si siento que mi ahora se ve distinto así. Les dije que he aprendido a verte en el recuerdo, sin rostro, ni memoria, sin nombre y no mentí. La vida es hoy y ahora, yo siempre así viví.

Amantes

El fuego de tu beso apasionado emerge desde el vientre de tus labios para posarse vital y emocionado sobre mi piel ardida de tus años. Quién sabe qué valor tiene tu esencia que desboca tu cuerpo en mi desvelo y somete a mi ser y su experiencia al vibrar lacerante de tu anhelo. No cuentan ni las horas ni los días, para saciar de dichas los encuentros, no saben las alcobas de porfías ni guardan para sí nuestros alientos. Yo oculto para mí todos los sueños que despiden tu voz de madrugada. Me adormecen las flores de tus senos que repican mi sien sobre tu almohada. Y le pido a tu amor guarde mi nombre, como yo me prohibí decir el tuyo. Es mezquino y visceral decirme un hombre si no encubro este placer con un arrullo. Hoy, después de soñarme en tus entrañas, resucité en un clamor que me desvela; adorarte desnuda en mil mañanas, para vestirte de emoción con un poema. .

Después no sé

¿De qué sirven los ecos detrás de las palabras? Le pregunté al silencio que habita tras la voz, después no sé, me dijo sabiendo que tú estabas camino de mi asombro buscando con tu boca, decirme sin saberlo el vuelo de un adiós. De qué sirven los besos que el alma desalienta cuando se apaga el fuego del último estertor. Después no sé, me dije, bañándome en el karma que entornan tus palabras cuando llegan altivas a embriagarme de vos. Después no sé, me dije, y al murmurar tu nombre…como elevando un rezo apenas como un hombre…me supliqué un perdón.

Hoy... amigo mío Al amigo Jorge Daniel Jamarlli y su capa bohemia y de amigos en San Pablo Reyes.

Hoy quiero confestarte amigo mío la alegría de un amor que ha culminado y aspira a que al volcarlo en este hastío me devuelva un corazón recuperado. ¿Sabés cuántas palabras se precisan? para decir adiós sin estridencias, y cuantas letras en boca se deslizan para morir el alma en la paciencia. Tal vez me sienta bien tu compañía o la enorme calidez de tu morada, este cerro que nos ciñe a su estadía al lamento del rocío y su madrugada. Estoy feliz de tu mesa y este vino que bendice en confesión…mi pluma alzada, me señala en derrotero…otro destino tan igual de soberbio…que al que estaba. Que bonito es lucirla…a la esperanza cuando vuelas a buscarla…con tus ansias y entonces la emoción de estar en gracia vuelve a darte la ilusión de un beso en danza. Hoy quiero acompañarte, amigo mío con el libre albedrío de tu mirada para saberme quizá bien entendido cuando deslice mi orfandad a tu palabra.

Tan sólo diré gracias, amigo mío a la eximia bohemia que alumbramos. Yo esta confesión que suena impío a otros dos corazones que enlodamos. Y tan sólo para vos…cierro el poema, que ha confesa sin razón se la he robado.

La casa en los perales

Tu casa en los perales…amigo Julio tiene el canto de un sol enamorado. El sabor de aire fresco y un diluvio, de aromas gentiles. Ya atrapados. Allí laten cantarinos recuerdos desbocados a la sombra del Hacen que gozoso hace galas de anfitrión intencionado con la sombra protectora de su espacio. Tiene el sesgo colonial de los tejados en señorial palmeral entrelazado. El trinar de las aves la ha entornado con el patio del verdor que la ha alfombrado. Guarda todo el trajín en su gramilla con el celo de tu esposa custodiada. El calor de la mesa y la familia dando chispa al asador junto a las aguas. Tiene todo el calor que te aconseja dormirte de bohemia cualquier tarde y es siesta veraniega que se queja porque un tucán la despierta con su alarde. La casa en los perales tiene el sesgo de la mano cobijante de un amigo. En la criolla sutileza de su acervo, da el bouquet de un buen vino compartido. Es muy lindo ese solar que guarda el trino de un sueño corazón agradecido que mateando el soñar hizo un destino donde el amor se hizo dueño de ese nido.

Yo bebĂ en ese vergel tierra mojada. La tarde musical de algĂşn poema, y en honor a la amistad que me ofertaba le di risa al temblor que siempre en vena surge de alma al sentir que me habitaba.

A tu alcoba

Me estremece el carisma de tu alcoba que succiona mi pasión en su embelezo, y tu piel como espada en carne asada me apuñala el corazón con cada beso. No te nombro por miedo a la penumbra que nos cubre a los dos a cuerpo entero, y a la osada desnudez de tus miradas, por ser todo el farol que nos alumbra. La mañana se declara enamorada del aroma palpitante de tu almohada. Como yo, se despereza entre tus senos, recorriéndolo feroz pero anhelante, tu espacio más vital de madrugada. No respondo a las horas ni a los días. Me compensan tus caricias candelarios. Cada espasmo susurrado aquí y ahora, suena a abrazo candente y a porfía y tu nombre volando por mis besos, se queda aprisionado a mis caricias.

Prefiero

Prefiero ser tu ayer, no tu mañana. Te lo grito en nuestro hoy por transferencia, al prohibirle a este querer me acune el alma, ni me acose el existir de tu impaciencia. No me acuses del tiempo que vivimos; yo no quiero el que viene y no habitamos. No pretendas saber por qué prefiero, ni adivines dónde fue lo que soñamos. Si la vida nos dibuja una entelequia, ya dejarnos sin presente en esta duda, de sentirnos ausentes y por ende indiferentes a aquella dulce ternura que inventamos. Prefiero no saber que nos amamos y mentirle al silencio por los miedos que nos deja el saber que abandonamos a conciencia el sentir por ser humanos.

Los dos caminos

La imponente deleidad de tu belleza hace cierta la razón de mi existencia y el latido de tu piel le da vivencia al fecundo palpitar de mi certeza. Somos dos refugiados en el cielo que el amor le ha inventado a los caminantes, le dio forma de nube a cada lecho que adormece nuestros sueños delirantes. No se entiende qué razón tiene la vida para adornar de pasión nuestros destinos, como sangre derramada en una herida nos señala corazón los dos caminos. ¿Quién inventó el amor? ¿Y quién los celos? Dicen que un ángel jugueteando en el averno le dio forma de mujer al terciopelo, a la mágica expresión con su halo eterno, Se enloqueció después, ¿o quedó enfermo?, o tan sólo se asustó y es poseído, y allí heredamos su emoción y el fuego eterno, que inmortal en cada amante está vestido, no existe el Lucifer en dulce infierno, que arrebate el el señorial de lo vivido.

A una memoria

Las deudas de un poemaâ&#x20AC;Śse pagan sin estrofas. El idioma del alma se tiene que mostrar con letras de silencio vital y estremecido vibrando en el aliento caliente de mi voz. Tal vez con el detalle ritual de cien palabras se escape una mirada que dice mucho mĂĄs rodeando al hemisferio ardiente de una espera que en actitud silente se pinta en mi ansiedad.

Epitafio Coya

Nunca digan que estoy muerto, tan sólo que me dormí. Tengo por lecho y por puerto la tierra donde nací. Jujuy no entiendo de eterno. Por siempre yo soy de aquí.

Confesión

Ya todo Jujuy florece

Tu cariño es el plasma de mi sangre, el sino más vital que hay en mi vida, la entelequia del dolor, ni ardor ni alarde, la razón desgarrante de mi herida. Tu pasión tiene el rol…de enalterarme la voraz servidumbre de mi especie, me limita el corazón hasta embriagarme con la espuma de tu piel que me adormece. No sé si sabrás…o no lo entiendes que tus labios cortan más que un noble acero. No me duelen los placeres que me enciendes con los besos tropicales de tu enero. La inquietante plenitud que hay en tu cuerpo, los contornos insinuantes que me alientas, se me asocian al temblor que en ansias suelto cuando trepo por las noches que me encuentras. Así es que en confesión…tan sólo digo lo que gritan mis silencios desbocados, que no cesen los placeres que te pido, que ni la muerte ponga fin a estos pecados.

¿Qué Dios…Jujuy? Homenaje a Sanque Salvador de Jujuy, dedicado a mi Valle natal en el es tiempo de arriar las penas; Bicentenario del Éxodopa’ Jujeño, en el mes coincidente con el natalicio que la lluvia del cerro de micorriendo hermanomoje José las Andrés Yaber. venas ¿Qué Dios te habrá inventado? Jujuy, pienso y te admiro. Con el alma en asombro, me indago, al preguntar: tal vez un Dios Poeta feliz y enamorado de un verde lujurioso te quiso galantear. ¿Qué Dios te ha bautizado? Jujuy, por territorio que no dejó tu nombre sostenga potestad. No existe el magisterio, que tenga por sentado origen de tus letras, tu acento gutural. ¿Qué Dios te habrá marcado? Jujuy, tu Xibi Xibi, quizás un Dios muy niño, corriendo por Galán. Con deditos de arcilla, sonrisas de mojarra, ornamentó a Cuyaya con brisas de cristal. ¿Qué Dios te habrá esculpido? Jujuy, Termas de Reyes. Yo creo que un Dios andino que supo descansar.

Su espíritu labriego llorando estremecido le dio a Yala Laguna guardando su mirar. ¿Qué Dios te habrá pintado? Jujuy tu Alto la Viña. Presiento que un Dios joven, con ganas de besar la piel de Los Perales, morena cual tu niña, dejando sobre un tarco su azul sentimental. ¿Qué Dios te habrá soñado? Jujuy, bajo del Grande, sus sendas de guijarros, con vientre de arenal. Yo sé que un Dios Obrero nadó sobre esas aguas soltando rumoroso su voz aluvional. ¿Qué Dios se ha recostado, Jujuy, sobre tu Nieva?, para ceñir su asombro sobre tu atardecer. Dicen que un Dios Bohemio besando tus estrellas tildó con luna nueva tu rojo amanecer.

Qué Dios soñó contigo? Jujuy para instalarte. Quién más que el Ser Supremo, te pudo imaginar. Lapachos oferentes, candor en doble cauce,un cielo anticipado que Él deja por solar.

El 25 de mayo de 1812

Vibrando en el espasmo…vital del nuevo día la Patria en tu pasiaje, Jujuy se te anunció y el Valle de la Historia, heralda estremecía enarbolando el Paño de la nueva Nación. Un pueblo recurrente, amante y libertario, testigo en privilegio del pacto del honor, fue fiel, con heroísmo, sangrando en el ideario,/ siguiendo a su Bandera, bendecida de amor./ Belgrano supo siempre, que aquí en tus serranías,/ guardabas toda el alma de la emanicpación, por eso que a su genio Jujuy te elevarías, para nacer la Patria de manto bicolor. Dos siglos sobreviven de aquel suceso arcano./ heredamos la gloria bendita en el altar, Gorriti fue signado destino y, de sus manos, la enseña sacrosanta nació a la libertad. Y aquí están los esfuerzos, vividos en dos centenios/ tu tierra fue la cuna de la argentinidad, cuando se nombre a Mayo, se dirá que es jujeño,/ el sol grabado a fuego de nuestra identidad.

Oda al Éxodo Jujeño

Qué injusta se presenta la historia con mi Tierra. Se suman ya dos siglos de enorme oscuridad. Ocultan como afrenta, después de tanta guerra la página más noble, que dio la libertad. Pretenden que el silencio tapone de ignorancia el gesto que hizo un Pueblo mostrando dignidad. No entienden que este Valle silente de prestancia, dio a luz la geografía de la argentinidad. No existe otra utopía en suelo americano que enseñe más arrojo y entrega en heredad que el Éxodo Jujeño, fundando con Belgrano un mito en la conciencia del alma regional. Centauro en montonero, morena causa en armas que en su simiente agraria por siempre sepultó al coloniaje infame que osado la acechaba y acá su tumba en suerte finalmente encontró. Son hijas de tu hazaña

de sangre libertaria las glorias que levantan en Salta y Tucumán, hermanas de tu causa de estirpe libertaria heredas la bandera bendita por tu afán. Ya es tiempo que el Agosto de tu Bicentenario derribe la ignominia, ceguera en extinción. Que el 23 de agosto, Jujeño Aniversario, se extienda al territorio y sea gala en la Nación, entonces habrá reivindicado la Patria tanto olvido, para que el sueño de los héroes descanse con honor. Ojalá pueda Jujuy mostrar el monumento, que se erija en gratitud, por la sangre y por la vida de tanta juventud que aquí se derramara buscando Libertad.

A Gimnasia y Esgrima de Jujuy

Ocho décadas y media…en tu estandarte ya supera a la vejez que no te alcanza. Otro marzo dieciocho y al nombrarte crece el grito de un gol por mi garganta. El paisaje de Jujuy va con tu nombre y es altar de su historia tu escenario. De la gesta de agosto sos el cobre, lo que hace colosal tu aniversario. Por la fé en tus colores desde niño, yo persigo la pasión que dan tus galas. Todo el sueño futbolero en mi cariño tomó el vuelo de ser hincha por tus alas. Cuántas veces gambeteándole al bolsillo me planté en otras tierras tribunero, regresando victorioso por tu brillo, jactancioso bien del Lobo y altanero. Sos el capo del norte…dicen muchos. Yo me sumo sin saber de apologías. El aliento del cantar yo siempre escucho redoblando por tus erradas noche y días. Que los cumplas feliz, mi club, mi amigo, mi cuadro, mi furor albiceleste. Cuando cumplas otros mil yo iré contigo por jujeño y de Gimnasia hasta la muerte.

Plegaria al arte y al vino Homenaje a Concepción - Tarija, Bolivia.

Hoy me vine a despedir…del valle de alma de vino y al irme quiero confiarte por los momentos vividos, hermano del sol y el arte y corazones de racimos, que al volver rumbo a mis cielos, tembién te llevo conmigo. Me tocó de conocerte en tu tercer pincelazo, de bohemias latitudes…por el color convocado, y allí mismo en el abrazo de tu artesana madera me encontré por vez primera…de tu suelo enamorado. En tu nombre…¡Concepción! Dejó su savia la luna. De rayas blancas engendró…a tus perales de altura. ¡Quién dice si no anda Baco…por tus arenas desnudas embiagado por tus cuencas…con su sonrisa valluna. Aquí el mismo San Vicente…se vistió de tinto razo, o en sus cepas de vidrio…Bendijo a Uriondo en un vaso. Y aquí se quedó a vivir, por este Edén deslumbrado, por tu belleza asombrado…a tus sarmientos de hinojos. Trocó su llanto en singanis…por el lugar de sus ojos. Yo dejo para tus tiempos, en esta oración el alma y aunque mi voz suene calma, rebazado de emoción, y en el vibrar de mis manos…te agradezco suelo hermano, tu bendita latitud…brindo por siempre…¡Salud! Por el valle y sus paisanos.

El Ángel Puerto Madero A Mauricio y Giselle, en Buenos Aires.

Lo soñaron de papel...hechos de nubes del cielo, sin pedir que sea ella o él ... fruto del amor terciopelo, sangre de Mauri en Giselle... dos alas de sol por credo y tanta magia y esmero... trajo ese bien concebido, El Angel Puerto Madero. Nunca fue ciencia y yo creo por el valor entendido, Dios puso oído a sus ruegos... por eso le fue cedido el secreto de ambos cuerpos... dieron piel al bienvenido. Que hermosa que es de verdad... lograr el ser más querido, el poema que conté ... a mí ya me fue advertido.

ÍNDICE

A mi orígen (22/4/2014)…..........................………………. pág. 5 Mi reflexión (1/9/1981)…..............................……………. pág. 11 Mensajes (22/4/2014)….……….............……........………. pág. 12 Tal vez…Quizá...No sé ………………………....………........... pág. 13 Ni siquiera conocidos (3/1/2012)…...............……......... pág. 15 En silencio………..………………………….……………….......... pág. 16 Jujuy es Carnaval……………..…………….…………….......... pág. 17 Canto al canto de Jujuy…………………………………......... pág. 19 Pareceres……………….………..……….…………….……........ pág. 22 Mi secreto………………………..………..……..………….......... pág. 25 La del valle (11/7/2014)….……........….…………….......... pág. 26 A Silvana G (un enero del siglo XXI)…………………........... pág. 28 Ayer me preguntaron………..………….……………............. pág. 30 Amantes……………………….…..…………………….…........... pág. 31 Después no sé (12/3/2015)……………………..…............ pág. 32 Hoy…amigo mío (24/2/2015)……………………………...... pág. 33 La casa en los perales (12/2/2016)…………………....... pág. 37 A tu alcoba (11/4/2013)……………………………………..... pág. 39 Prefiero (31/5/2015)………….……………………………....... pág. 40 Los dos caminos (11/4/2015)…………………………........ pág. 41 A una memoria (25/1/2014)………..…………..…….…..... pág. 42 Epitafio Coya…………..………..……………………………....... pág. 43 Confesión (27/10/2014)……..……………………………...... pág. 44 Que Dios…Jujuy……….………..……………………………...... pág. 47 El 25 de mayo de 1812……..…………….………………..... pág. 51 Oda al Éxodo Jujeño….……..………………….…….……...... pág. 53 A Gimnasia y Esgrima de Jujuy (17/2/2013)............... pág. 56 Plegaria al arte y al vino (3 de marzo de 2010)…...…... pág. 57 El ángel Puerto Madero…..………………….……………..... pág. 58

1 -- Canto al Canto de Jujuy / 2 - Jujuy en Setiembre (Por "Rumbo Trío") / 3 - A la Virgen de Río Blanco (Por "Rumbo Trío") / 4 - Al Pollo Martinez (Zamba- por Luis Córdoba) / 5 - Al Chacho Chung King (Zamba- por Luis Córdoba) / 6 - Ser tu Amigo (Canción -por Luis Córdoba) / 7 - El Valle Huayno (Huayno- por Erick Ocampo) / 8 - Yo se bien lo que te digo (Cueca- por Erick Ocampo) / 9 - Qué Dios...Jujuy (Zamba- por "La Cantada") / 10 - Jujuy es carnaval (Recitado-por Jacinto Yaber)

Jacinto Yaber nació en San Salvador de Jujuy el 3 de Mayo de 1944. Fue el tercer hijo entre seis hermanos. Su Madre, Margarita Ale, argentina, oriunda de la ciudad de Salta. Su padre, Ale Hassan Yaber, inmigrante libanés, musulman chii. Reportó orfandad desde muy pequeño merced a la prematura partida física de Margarita. Ingresó, junto a uno de sus hermanos, Martín Cesar, al Hogar Escuela de la ciudad de Jujuy, en lo que representaría su primera promoción, un ya lejano 5 de Junio de 1950. Cursó sus estudios primarios en el Colegio Del Salvador y en la Escuela N°36 "Juanita Stevens", ambos de la capital. Desplegó una existencia marcada por la autodidáctica formativa, en todo orden. Fue obrero-cosechero, empleado gastronómico y ejerció una notable y extensa acción gremial, social y deportiva. Ejerció el periodismo y acompañó con enjundia su sentir literario. Tiene la influencia de una época, marcándolo profundamente el sentir de Federico Garcia Lorca, Antonio Machado, Pablo Neruda y Jorge Luis Borges, así como el ideario de Raul Scalabrini Ortiz y de Arturo Jaureche. Su mensaje literario siempre representó una dosis mayúscula de frases imbuídas de calle, humor y acidez discursiva, así como de un profundo optimismo, mezcla de sueños y reflexión filosófica y ciudadana. Su mensaje abarca a su entorno geográfico y paisajístico, a los que enmarca con profunda pertenencia. Padre, Abuelo, Amigo: tiene un sentir personal para todo, lo que le permite reflejar una forma de ser muy perceptiva de su entorno y de su profundidad clarificante. Nos entrega, en éste, su primer libro, un relevante mensaje cultural, alejado de la academia, pero excesivamente cercano para lo que representa la simpleza del autodidacta. Asequible, pero contundente.

Nací norteño hasta el tope, vine al mundo... en este Valle, Soy piedra del Xibi-Xibi, que no se orada aunque talle, Yo soy jujeño señores... y es mi honor ese detalle. .

San Salvador de Jujuy. Diciembre de 2016.