Politecnico di Milano Scuola di Architettura e Società L.M. in Architettura, a.a. 2011/2012
Relatore Prof.ssa Ilaria Valente Correlatore estero Prof. Diego Carratalá Collado, Universitat Politècnica de València Tutor Arch. Mauro Marinelli
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Beyond the wall
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O LT R E I L M U R O |
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Más allá del muro |
Sequenza architettonica di paesaggi vinicoli a La Portera
Cateri na M o n t ip ò Matteo P uglisi
765969 766199
Testi in lingua inglese curati da Matteo Puglisi Testi in lingua spagnola curati da Caterina Montipò e Matteo Puglisi
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Index
INDICE
Indice
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ABSTRACT
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PR E FA Z I ON E d i Di e g o C a r r a t a l á C o l l a d o
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1. I N T R OD U Z I O NE
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1 s t P ar t: t he p a t h o f w i ne 2. PA R T E I : LA R U TA D E L V INO P ar te I : l a r ut a d e l v i no
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G r ou n d , l a nd , t e r r i t o r i e s 2.1 T E R R E , TE R R E NI, TE R R ITO R I Ti e r r as , t e r r e no s, t e r r i t o r i o s I -
te r r it o r i di U t iel-R equ en a G e o g r a fi a d e i l uo g hi S t o r i a d e i l uo g hi V i t i -cul t ur a
Te r r e e t essu t i d e L a Po r t er a - I n s e d i a me nt o d e La P o r t e r a - Te ss ut i r ur a l i e t e r r e ni a g r i co li - La tipologia del Corral I n d u s tr i a l a r chi t e ct ur e 2.2 L ’ A R C H I TE T TU R A D E L L A P R O D U ZIONE L a ar q u i t e ct ur a p a r a l a p r o d ucci ó n
16 19
35
48
La c an t in a c o m e p r o do t t o - La nd s ca p e , Ar chi t e ct ur e & W in e - L e ca t t e d r a l i d e l v i no
51
L a c an t in a c o m e lu o go
56
2 n d p ar t: s e q ue ncy i nt e r v e nt i o n 3. PA R T E I I : S E Q U E NZIAL ITÀ D E L L ’INTE R V E NTO P ar te I I : s e cue nci a s d e l a i nt e r v e nci ón
60
Str ate gi e s i n t he t e r r i t o r y 3.1 S T R AT E GIE NE L TE R R ITO R IO E s tr ateg i a s a ni v e l t e r r i t o r i a l
62
N u o v o asset t o dell’ a l d e a
65
D al co r r a l al m u r o
71
T h e p r o je ct 3.2 I L P R OG E T TO E l p r oy e ct o
74
P ro gr am m a f u n z io n ale
77
Pe r c o r si e sequ en z e - Da l l ’uv a a l v i no - E s p e r i e nz a d e l l uo g o
80
Ta v o le d i p r o get t o
86
C on c l u s i o ns 4. C ON C LU S I ON I C on c l u s i o ne s
106
IN D I C E D E L LE IM M AGINI
108
IN D I C E D E L LE TAV O L E
111
BI BL I OG R A F I A
112
RI N G R A Z I A M E NTI
115
El problema de la renovación de la
The case of production requalifica-
producción por la bodega Union
tion of the wine cooperative La Union
(La Portera, Requena, Valencia), nos
(La Portera, Requena, Valencia), reo-
vuelve al debate, que ya empezo
pens the spanish recent debate on
desde hace unos añon en España,
the role of wine industrial architecture
sobre la relación entre la arquitectura
in relation to its territory. The problem
industrial y su propio entorno territo-
of iconic architecture, only belonging
rial. La realización de unas arquitec-
to the product promotion, proposing
turas icónicas, con el único objetivo
a new image, has caused remarkable
de vender el producto sólo a través
deviations from the pursuit of quality
de la imagén “de calidad” de la ar-
improvement and its cultural conse-
quitectura, colleva la pérdida com-
quences on land. Our local presen-
pleta de la búsqueda para mejorar la
ce, research and knowledge about
calidad del producto sólo gracias a
land generating rules, have been
la relación con el territorio geográfico
the basis for providing an alternative
y cultural donde se construye. Vivir el
design solution. A solution that is the
lugar, observar y reconocer las reglas
result of a strong relationship with the
naturales y culturales que sujetan
landscape and the farming culture
este contexto territorial donde vamos
of this area. This way aims to be an
a proyectar, nos ha permitido fijar una
example of how a design conscious
fuerte relacion entre nuestra arqui-
of territorial identity creates a quali-
tectura y el paisaje, llegando a una
tative improvement on the product,
buena alternativa al problema de la
responding to business and produc-
arquitectura icónica. El recorrido que
tion needs.
nos ha llevado al proyecto muestra como un diseño consciente de la identidad territorial en que se aplica, genere una mejora de la calidad del producto y de la producción, también en relación con las necesidades comercial.
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ABSTRACT
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Il caso della riqualificazione produttiva della cooperativa vinicola La Union (La Portera, Requena, Valencia), riapre il dibattito in corso negli ultimi anni in Spa¬gna, sul ruolo dell’architettura produttiva vitivinicola e sulle relazione che essa instaura con i territori in cui si inserisce. Il problema di architetture iconiche volte solo alla promozione del prodotto, proponendosi come nuova immagine dello stesso, ha provocato veri e propri scostamenti dalla reale ricerca della qualità dello spazio e del manufatto architettonico e del suo radicamento culturale nel territorio. La presenza fisica in loco, la ricerca e l’individuazione delle strutture formali e generatrici del territorio in cui l’intervento progettuale va ad inserirsi, sono state la base per proporre un’alternativa metodologica e progettuale in grado di scaturire invece da una forte relazione con il paesaggio e la cultura agricola del luogo. La strada percorsa si propone quindi come possibile esemplificazione di quanto una progettazione consapevole dell’identità dei luoghi, generi un miglioramento qualitativo dei luoghi stessi, senza rinunciare a un miglioramento del prodotto vinicolo, dimostrandosi dunque in grado di rispondere efficacemente anche ad esigenze produttive e commerciali.
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P R E FA Z I O N E
di Diego Ca r r at al á C ol l ado
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El proyecto de Caterina Montipò y Matteo Puglisi, parte de un análisis profundo del territorio, una adecuada interpretación de las carencias del lugar, tanto a nivel urbano y paisajístico, como cultural y social y el estudio de un programa complejo. Han sabido conjugar todos estos elementos para dar una respuesta contundente, sin renunciar a las características tipológicas y morfológicas de la aldea de La Portera. Interpretando la construcción tradicional, de casas patio, con elementos murarios de gran potencia, y generando un sistema estructural muy eficaz de diafragmas paralelos, han sido capaces de resolver un problema urbano de gran calado, tejiendo un “sistema” que permite reorganizar un recorrido desde el mismo centro de La Portera hasta redefinir un nuevo límite de la localidad, hasta ahora inexistente. Enclavado entre dos vías de circulación, el proyecto resuelve la diferencia de nivel entre las dos arterias de comunicación, y pone en contacto al paseante con el paisaje que le circunda. Por un lado una zona boscosa y montañosa característica del Altiplano Requena-Utiel, y por otro unas visiones lejanas hacia las llanuras de producción vitivinícola. A través de estos muros con separaciones variables, se desarrolla el programa propio de una bodega deEl proyecto de Caterina y Matteo, parte de un análisis profundo del territorio, una adecuada producción de vino, en el que se aglutinan distintos
interpretación de las carencias del lugar, tanto a nivel urbano y paisajístico, como cultural y social y el estudio de un programa complejo.
equipamientos culturales y sociales que lo complementan.
Han sabido conjugar todos estos elementos para dar una respuesta contundente, sin renunciar a las
características tipológicas y morfológicas de la aldea de La Portera. La riqueza del proyecto proviene esencialmente de generar un paseo urbano
Interpretando la construcción tradicional, de casas patio, con elementos murarios de gran potencia, y
a través de él, sin renunciar a las características sensoriales que la producgenerando un sistema estructural muy eficaz de diafragmas paralelos, han sido capaces de resolver un problema urbano de gran calado, tejiendo un "sistema" que permite reorganizar un recorrido desde el
mismo centro de La Portera hasta redefinir un nuevo límite de la localidad, hasta ahora inexistente. ción del vino lleva consigo. Olores, colores, sabores, sensaciones espaciales,
Enclavado entre dos vías de circulación, el proyecto resuelve la diferencia de nivel entre las dos arterias
etc,... son parte fundamental del recorrido del paseante, que sin llegar a introde comunicación, y pone en contacto al paseante con el paisaje que le circunda. Por un lado una zona
boscosa y montañosa característica del Altiplano Requena‐Utiel, y por otro unas visiones lejanas hacia
ducirse en el edificio, es las llanuras de producción vitivinícola. capaz de “sentir” y captar la esencia del lugar.
A través de estos muros con separaciones variables, se desarrolla el programa propio de una bodega de
El programa del edificio se desarrolla linealmente a través de tres estratos, uno producción de vino, en el que se aglutinan distintos equipamientos culturales y sociales que lo complementan.
enterrado, otro a nivel de La riqueza del proyecto proviene esencialmente de generar un paseo urbano a través de él, sin calle y otro aéreo. Los muros organizan la secuencia renunciar a las características sensoriales que la producción del vino lleva consigo. Olores, colores,
de espacios, que volcándose unos sobre otros, buscan siempre las visiones sabores, sensaciones espaciales, etc,... son parte fundamental del recorrido del paseante, que sin llegar a introducirse en el edificio, es capaz de "sentir" y captar la esencia del lugar.
hacia el paisaje y el adecuado tratamiento de la luz. Unos patios, estratégicaEl programa del edificio se desarrolla linealmente a través de tres estratos, uno enterrado, otro a nivel de calle y otro aéreo. Los muros organizan la secuencia de espacios, que volcándose unos sobre otros,
mente insertados en la trama muraria, aportan esa riqueza espacial y crean buscan siempre las visiones hacia el paisaje y el adecuado tratamiento de la luz. Unos patios,
estratégicamente insertados en la trama muraria, aportan esa riqueza espacial y crean una atmósfera
una atmósfera adecuadaadecuada a cada tipo de actividad, a la vez que concatenan las distintas piezas del complejo programa a cada tipo de actividad, a la vez que concatenan las de una manera muy natural.
Una arquitectura precisa, eficaz y esencial que es capaz de "emocionar"... distintas piezas del complejo programa de una manera muy natural.
Una arquitectura precisa, eficaz y esencial que es capaz de “emocionar”. Valencia, 4 de abril de 2013
Diego Carratalá Collado Profesor de Proyectos de la ETSAV
Diego Carratalá Collado Profesor de Proyectos de la ETSAV
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1. INTRODUZIONE
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La tesi si propone come sperimentazione progettuale sul tema della produzione vitivinicola e in generale dell’architettura industriale in quanto parte di un paesaggio agricolo. Solo entro le condizioni di paesaggio, territorio e terreno si forma l’architettura, intesa come forma del luogo. Sottolineiamo l’uso del termine terreno che in questo contesto, a nostro avviso, si sostituisce o comunque prevale all’uso della parola suolo. La prima infatti per definizione si riferisce a “ciò che appartiene alla terra come luogo”1 a un “territorio, un’area coltivabile, terra coltivata, campo”2, dando una sensazione più diretta e viscerale di come si relazioni con l’architettura; al contrario il termine suolo potrebbe apparire riduttivo e meno esplicativo, in quanto si definisce come “parte superficiale del terreno, strato, piano”3. Un paesaggio vitivinicolo, come un qualsiasi altro paesaggio è stratificato, ricco nelle sue profondità, visibili e non. In Spagna, da alcuni anni, i grandi produttori di vino hanno intrapreso una strategia di sviluppo e promozione non solo attraverso la pubblicità diretta del proprio prodotto, ma anche attraverso singolari interventi architettonici firmati da “archistar” internazionali. Carattere predominante, comune a questi progetti, è il forte impatto mediatico che spesso risulta dissociato o addirittura incoerente con il programma funzionale idoneo per una cantina tradizionale. Al contrario si concentrano su temi di consumo di massa come se si trattasse di una pura attrazione turistica; ciascun produttore per promuovere la propria cantina e la qualità del suo prodotto si appoggia più all’immagine dell’architettura che all’effettiva qualità e origine del proprio vino. Questo fenomeno dipende dall’interpretazione che si sceglie di attribuire all’espressione “identità architettonica riconoscibile” che si contrappone all’anonimia, concetto che in questo settore come altri non è previsto: così come ogni prodotto è diverso dagli altri, ciascun produttore vuole che, allo stesso modo, gli spazi dove tale prodotto nasce siano riconoscibili. Con il termine “riconoscibile” non si intende per forza un manufatto che si imponga sul paesaggio, che risulti immediatamente individuabile o che stupisca il visitatore per la sua magnificenza e originalità; si intende al contrario un edificio “unico”, associabile solo a quel prodotto. Con questa seconda chiave di lettura non è più l’architettura a determinare la qualità del prodotto ma è il prodotto vino ad essere associato ad una precisa immagine architettonica. Il programma di una cantina prevede certamente momenti di socializzazione, accoglienza, scambio culturale ed esperienza sensoriale del vino affinché si fissi questa 11
OLTRE IL MURO. Sequenza architettonica di paesaggi vinicoli a La Portera
associazione nel visitatore, attraverso un percorso che sempre va dal vino all’architettura e non al contrario dall’architettura al vino. Il lavoro è strutturato in un due parti a loro volta suddivise secondo due aree tematiche una rispetto alla relazione col contesto e una relativa alla tipologia. Partendo da una lettura geografica della regione Utiel-Requena si è cercato di rintracciane le relazioni storiche che ne ha caratterizzato le trasformazioni e connessioni, sia a livello di organizzazione tra i centri urbani, sia per l’utilizzo delle terre di pertinenza, fino ad focalizzarsi sulle regole generative della vallata de La Portera e del suo tessuto urbano. Di seguito si presenta il dibattito, fortemente sentito in Spagna, sul ruolo dell’architettura in relazione alle produzioni vinicole e il suo coinvolgimento nel territorio di attuazione, confrontandone la compatibilità con il funzionamento delle stesse. Nella seconda parte si concretizza l’atto progettuale con le nostre risposte e attuazioni dei temi caratterizzanti, presentando le strategie di continuità organizzativa e tipologica in relazione al contesto urbano e paesaggistico della aldea e alle declinazioni programmatiche basate sulle sequenze dell’intervento, raccontandole seguendo i percorsi che permettono di vivere l’esperienza del luogo. Infine, le conclusioni riflettono su come l’esperienza formativa svolta in loco (Valencia) sia stata il filo conduttore per dare un’alternativa progettuale al tema delle cantine contemporanee.
1, 2 3
Nicola Zingarelli, Dizionario della lingua italiana, Zanichelli, Milano 1970, p. 1819
ivi., p. 1772
12
1st Part: the path of wine
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2 . PA R T E I : L A R U T A D E L V I N O Parte I: la ruta del vino
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Requena y sus aldeas surgen en la meseta de Utiel-Requena rodeado por sierras. Desde siempre la llanura ha sido interesado por los asentamientos urbanos y los cultivos, mientras que las montañas, acogedoras de la trashumancia, representan el margen y la frontera última. El rápido desarrollo del cultivo de la viña empieza en estas tierras en el siglo XIX, con la crisis de la industria de la seda y de los viñedos catalanos y francesec afectos de filoxera. Acaba entonces el tradicional monocoltivo de la especie de uva Bobal introduciendo las especies Tempranillo y Garhay, además de una baja percentual de Cabernet, Sauvignon, Chardonnet y Merlot. Hoy en día más del 90% de los campos están ocupados por las viñas. La Portera se coloca, hacia la mitad del siglo XIX, junto al eje principal de conexion entre el sur y Requena. Se encuentra al margen Oeste de los cultivos de su propia valle, que se desarrolla principalmente según la dirección Este-Oeste y está encerrada entre montañas por cada lado. El corral, tipología constructiva de estas tierras, se endtendía al principio como espacio cerrado por un muro en el medio de un campo utilizado por guardar animales, luego a lo largo del tiempo se desarrolló como espacio exterior y auxiliario de una casa de campos, siempre bordeado por un muro. La viticultura es la principal economía de la aldea: en el año 1958 los viticultores de la zona se unieron como cooperativa en la bodega La Union, que se encuentra justo al Sur de La Portera. Esta construcción tiene un impacto brutal sobre el paisaje y el territorio, además producen un vino de baja calidad, bueno solo para las mezclas. Llegar a una grande mejora de la calidad del vino producido, significa un cambio radical tanto en el proceso rpoductivo como en la arquitectura que lo acoge. 16
Requena and its “Aldeas” (villages) are located on a plain surrounded by mountains. The plain has always been characterized by organized settlements and cultivated fields, while the mountains, used for transhumance, have always had a marginal role. The fast development of wine production starts in this area in the late 19th century, with the decline of silk and French vineyards and Catalan with Filoxera. The traditional monocoltivation of the Bobal spece gets interrupted with the introduction of Tempranillo and Garhay species, as well as a small percentage of grapes of greater prestige as Cabernet, Sauvignon, Merlot and Chardonnet. Currently over 90% of agricultural land is used as a viniculture. La Portera is a rural hamlet that settled in the mid-nineteenth century along the main axis of the southern connection to Requena. It located at the western edge of agricultural land that characterizes its valley, elongated in the direction east-west and enclosed by the mountain ridges. The main type of settlement in the countryside is the corral: historically it was a fenced space inside an arable farming used for animals and, in later developments, as a domestic service block related to a “casa de campos”. Viticulture is the economic and social engine of the village: grapevine growers of the area have founded in 1958 the cooperative winery “La Union”, at the south of the town. La Union is an industrial environmentally impacting building producing poor quality wine, generally used for mixtures. The achievement of a higher production quality requires a radical change in both production processes and spaces.
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Ground, land, territories
2 . 1 T erre , terreni, territori
Tierras, terrenos, territorios
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Requena e le sue aldeas (frazioni) sorgono su un territorio pianeggiante circondato da catene montuose. Da sempre la pianura ha interessato l’organizzazione insediativa dominante ed i campi coltivati, mentre le montagne, utilizzate per la transumanza, assumevano un ruolo marginale, di confine. Il rapido sviluppo viticolo prende avvio in queste terre verso la fine del XIX secolo, con la crisi dell’industria della seta e dei vigneti francesi e catalani affetti da filoxera. Si interrompe quindi la tradizionale monocoltura della specie Bobal e si aggiungono le specie Tempranillo e Garhay, oltre a una bassa percentuale di Cabernet, Sauvignon, Chardonnet e Merlot, uve di maggior prestigio. Attualmente oltre il 90% dei terreni agricoli è adibito a viticoltura. La Portera è una frazione rurale che si insedia verso la metà del XIX secolo lungo il principale asse meridionale di collegamento con Requena. Si colloca al margine occidentale dei terreni agricoli che caratterizzano la sua valle, di forma allungata secondo la direzione Est-Ovest e racchiusa tra crinali montuosi. Il corral, principale tipologia insediativa rurale della zona, è inteso storicamente come spazio recintato all’interno di un terreno agricolo e destinato agli animali e, nei successivi sviluppi, come spazio domestico di servizio afferente ad una casa de campos. La viticoltura è il motore economico e sociale della frazione: i viticoltori della zona hanno fondato nel 1958 la cantina cooperativa “La Union”, situata a Sud del nucleo urbano. Si tratta di un edificio industriale impattante dal punto di vista ambientale e produttore di un vino dalla scarsa qualità, utilizzato per miscele. La ricerca di una più alta qualità del vino prodotto prevede un cambiamento radicale sia nei processi produttivi che nell’architettura che ospita tale processo.
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OLTRE IL MURO. Sequenza architettonica di paesaggi vinicoli a La Portera
Ill.1.La ruta del vino, inquadramento territoriale 18
2. Parte I: la ruta del vino
I territori di Utiel-Requena - Geografia dei luoghi La città di Requena ed il suo intorno più immediato, di cui l’aldea de La Portera entra a far parte, formano la sottounità comarcale del Campo y Sierra de Requena. La parte montuosa della sierra (catena montuosa) può essere considerata un tutt’uno unitario, per la parte pianeggiante, al contrario, si distinguono tre zone: il Llano del Rebollar, la Huerta de Requena e la Vega del Magro. Questo complesso, da un punto di vista morfologico, forma un insieme di sistemi montuosi (due anticrinali: Tejo-Juan Navarro e Herrada-Ceja) e altipiani dall’orientamento NordOvest-SudEst. La parte montuosa che circonda la valle in cui sorge la città di Requena, corrisponde alla prima fascia di anticrinale, composta da montagne dalle dimensioni più moderate ed inferiori rispetto alle cime presenti nella sierra vera e propria. Il primo anticrinale (Tejo-Juan Navarro), non è altro che un grande allineamento montuoso che chiude i territori requenesi a NordEst e che nei pressi di Requena è stato interrotto dalla fossa del Reatillo. Questa taglia trasversalmente la catena montuosa dividendo las sierras di Juan Navarro, Benaces, Pedriza e Atalaya da quelle di Tejo e Santa María. In entrambi i casi si tratta di un rilievo giurassico-cretaceo influenzato dalla fossa del Reatillo,
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OLTRE IL MURO. Sequenza architettonica di paesaggi vinicoli a La Portera
Ill.2. La Meseta di Requena-Utiel, mappa morfologica
Ill.3. Profilo topografico de la Meseta di Requena-Utiel, dove risalta l’identità geografica de la comarca, direzione Est-Ovest
Ill.4. La Meseta di Requena, foto aerea 20
2. Parte I: la ruta del vino
che ha portato alla formazione di numerose imperfezioni e di piccole valli di montagna come quelle di Benacas, Las Nougueras, La Pedriza e Villar de Olmos. Questo è quello che geograficamente viene definito come la Sierra de Requena, le cime delle montagne corrispondono con le creste giurassiche e l’altezza massima oscilla tra i 1100 ed i 1200 metri. L’altro anticrinale (Herrada-Ceja) ha un’estensione minore, la sua altezza massima è di 937 metri. Si tratta di una formazione cretacea parecchio estesa per la sua altezza, caratterizzata da molti boschi e con una grande varietà di flora e fauna. Tra le due formazioni montuose si sviluppa un largo corridoio che ha il suo inizio con il Llano del Rebollar, prosegue per Requena e la Vega del Magro fino a Utiel e Caudete. El Llano del Rebollar, perfettamente inquadrato tra la Sierra del Tejo e la Sierra de la Herrada, si è formato dalla stratificazione quaternaria dei sedimenti trasportati dalle acque provenienti dalle cime delle montagne. Requena e le sue aldeas (frazioni), così come la maggior parte delle città sorte nel corso della storia, sono state costruite su un terreno pianeggiante circondato da catene montuose. Da sempre la pianura ha interessato l’organizzazione insediativa dominante ed i campi coltivati, mentre le montagne assumevano un ruolo marginale, di confine e venivano utilizzate per la transumanza. Già gli antichi romani distinguevano tra ager e saltus, tra il pianeggiante e ordinato ambito delle sedi stabili e delle coltivazioni (cioè appunto della cultura) e la scoscesa e disordinata massa dei rilievi, regno della pastorizia e dell’assenza dei valori civili (cioè, letteralmemte, riferibili alla città). I greci, invece, avevano una parola: óros, che significava sia montagna, sia limite, ad evidenziare il netto contrasto che da sempre è stato percepito. Questo secondo significato di limite si avvicina a quello che la sierra rappresenta per Requena. I rilievi presenti fanno da confine ultimo, da limite alla parte pianeggiante dove hanno luogo: città, aldeas e campi coltivati. Il paesaggio che si forma è su più livelli e può essere percepito nella sua totalità solo dalle cime più alte, così come sostiene il geografo Farinelli, affinché un paesaggio sia possibile, si necessita di tre cose: un soggetto che guarda, qualcosa da guardare ed un massimo orizzonte possibile, un’altura che funzioni da punto di vantaggio e di osservazione4. Tornando più nello specifico, nella parte sud orientale dei confini comarcali di Requena si sviluppa un’unità sottocumunale composta da le aldeas de La Portera (145 abitanti), Hortunas (61 abitanti), Los Pedrones (257 abitanti), Casas de Sotos (165 abitanti) e Casas del Río (60 abitanti). Dal punto di vista fisico, questa unità che prende il nome di Lomas y cañadas de La Portera y 21
OLTRE IL MURO. Sequenza architettonica di paesaggi vinicoli a La Portera
los Pedrones, si trova entro i seguenti limiti: a nord el Llano del Campo e le montagne creatiche della Serratilla e dell’Herrada che, insieme alla Sierra de Martés, circonda l’area ad Est. A Sud la delimitazione è data dalla valle del Cabriel, mentre a ovest dalla Rambla de las Salinas de Hórtola. I rilievi più caratteristici dell’area sono colline calcaree lacustri di età micenea. A grandi linee è possibile distinguere tre aree. La prima è costituita dalle sopra citate colline e valli centrali, che danno vita ad un paesaggio collinare dell’altezza media di 600-700 metri sopra il livello del mare: è in questa fascia dove l’agricoltura prospera maggiormente e dove gran parte della popolazione si è stanziata, tra cui gli abitanti de La Portera. La parte collinare è formata da calcari bianchi di origine lacustre che danno vita ad un luogo molto fertile seppure difficile da arare, che da tempo viene occupato da boschi di pino od altri coltivi. La parti pianeggianti, invece, sono sempre formate da depositi collinari ma la loro composizione è più umida e conseguentemente più fertile. Sono le valli attualmente ad essere destinate alla coltivazione di vigneti (in passato di cereali), mentre nelle colline si alternano coltivazioni di vigneti con coltivazioni di mandorle. La seconda occupa la parte sudorientale e per la maggior parte è formata da terreni brulli e poco produttivi, le cosiddette “tierras malas”. La composizione del terreno è infatti prevalentemente costituita da marne, argille e gessi che a mala pena permettono la crescita di una sporadica vegetazione. La terza area corrisponde alla zona delle Serratilla, Herrada e della Sierra Martés, che coprono la parte nord-est e sud-est. Qui predominano suoli dalle rocce calcaree con alcune macchie di terra rossa, dedicati alla silvicoltura: una grande massa forestale risultato della ripopolazione artificiale iniziata negli anni Cinquanta e tutt’ora in atto.5
4
Farinelli F., Geografia. Un’introduzione ai modelli del mondo, Einaudi editore, Torino 2003, pp. 83-90
5
cfr. Piqueras Haba J., Centro de Estudios Requenenses, La Meseta de Requena-Utiel, Imprenta Govi,
Requena 1990 22
2. Parte I: la ruta del vino
Ill.5. La Meseta di Requena-Utiel, ortofoto
- Storia dei luoghi Dal punto di vista morfologico i territori requenesi si sviluppano tra catene montuose e altipiani su cui generalmente sorgono le varie frazioni ed i rispettivi campi coltivati. Il nome di Requena è di provenienza araba, deriva da Rakkana (la forte, la sicura), anche se non si escludono origini più antiche, iberiche o visigote. Le prime notizie documentarie testimoniano la presenza di Requena proprio nel periodo mussulmano, risalgono al X secolo e e si riferiscono agli itinerari bellici seguiti dalle truppe del califfo di Córdoba. L’origine del casco urbano, (centro storico) risale a questo periodo e grazie al suo stato di conservazione di città medioevale, Requena costituisce, attualmente, uno dei più interessanti complessi urbani dell’ambito valenciano. Dell’architettura musulmana si conservano oggi la gran parte della cerchia muraria e dieci torri ad essa annesse, così come parte del castello costruito sull’area più alta della città sopra ad un terreno composto per la maggior parte da tufo. La Requena mussulmana lascia ben presto spazio alle conquiste cristiane e tra la fine del 1238 e gli inizi del 1239 il vescovo di Cuenca, sotto la corona castellana di Ferdinando III detto “il Santo”, completa la conquista della città convertendola in cristiana. Requena diventa la nuova frontiera di Castilla e dal punto di vista urbano la città cresce e vengono edificate nuove chiese6. In questo periodo Requena dà vita al mercato di cereali più grande e prossimo alla città di Valencia. Le ordinanze municipali del 1479 indicano un aumento 23
OLTRE IL MURO. Sequenza architettonica di paesaggi vinicoli a La Portera
Ill.6. Mappa Hispania Novella, Berlinghieri, 1482
Ill.7. Estratto della mappa di Tomás López, Tierra de Requena II,1792
Ill.8. Croquis del territorio di Requena durante Guerra d’Indipendenza, servizio Geografico dell’Esercito, 1811 24
2. Parte I: la ruta del vino
considerevole della produzione di cereali, ed una regolazione per la raccolta dell’uva, anch’essa abbondante. L’agricoltura diventa la fonte principale di sostentamento. Inoltre l’abbondanza di allevamenti ovini, oltre ad incoraggiare l’esportazione di lana grezza, porta alla nascita di varie industrie tessili fino alla metà del XVIII secolo quando vengono assorbite nella crescente industria della seta7. La salita al potere dei re cattolici tra il 1474 ed il 1479 pone fine ad un periodo di conquiste e guerre ed apre un periodo di pace e tranquillità che permette di realizzare e completare i maggiori lavori architettonici così come quelli riguardanti le vie di comunicazione, più volte interrotti dalle continue inondazioni. Ciò nonostante la popolazione non cresce in modo considerevole a causa delle pestilenze che ripetutamente affliggono gli abitanti della zona. Con l’arrivo del XVI secolo e con le tendenze stilistiche provenienti dell’Italia la città si riorganizza sotto un’ottica rinascimentale, in particolar modo piazze e strade. Il 1500 ed il 1600 sono secoli di stabilità, in cui l’economia si basa principalmente sull’agricoltura. Il XVIII secolo si apre con la guerra di successione che vede il trionfo di Felipe de Anjou e l’arrivo dei Borbone nella comarca requenese. Nonostante un apertura di secolo difficile, il 1700 si rivela un periodo di crescita urbana e demografica molto importante. Senz’ombra di dubbio, quello che ha reso possibile questi cambiamenti è stato il repentino sviluppo, a Requena, dell’industria di seta che la rende il quarto centro di consumazione in Spagna, di questo materiale. La crescita economica ed il conseguente incremento di popolazione, hanno portato alla stesura di un piano urbanistico di espansione della città; Requena città aumenta sempre più le sue dimensioni mentre le aldeas rimangono piccoli centri rurali, disseminati sul territorio, che vivono di agricoltura. Il 1800 è un secolo totalmente diverso da quelli precedenti, un secolo difficile e di grandi cambiamenti per Requena, incluso il suo passaggio nel 1851 all’interno della provincia di Valencia. Alcuni degli avvenimenti che rendono questo secolo febbrile sono: la grande guerra contro i francesi, le costanti incursioni carliste, i disordini liberali, le frequenti epidemia di colera, il cambiamento nelle vie di comunicazione, la crisi dell’industria della seta e l’espansione della viticultura commerciale. Requena arriverà al termine del secolo con un aspetto molto diverso da quello del XVIII secolo: una città in crisi demografica in contrapposizione ad un forte sviluppo viticolo in corso nell’intorno rurale. Le guerre carliste che tengono impegnata Requena fino al 1880, i disordini e le rivolte popolari lasciano il proprio segno nell’economia della città8. L’industria 25
OLTRE IL MURO. Sequenza architettonica di paesaggi vinicoli a La Portera
di seta, che era la principale forma di guadagno e lavoro, entra in una crisi profonda da cui non riuscirà a risollevarsi. Per contro, come conseguenza al cambiamento economico, dalla seconda metà del XVIII secolo, inizia la grande espansione della coltivazione viticola che caratterizza il comune fino ai giorni nostri. Questo rapido sviluppo viticolo commerciale, che risponde alla domanda di vino europea, nasce come conseguenza alla crisi di “idium y filoxera” che affligge i vigneti francesi e catalani. La crisi industriale e la crescita del settore agricolo portano a ad un rilevante cambiamento nella distribuzione della popolazione nel comune di Requena: la città perde abitanti (da 10300 nel 1805 a 7400 nel 1887) in favore della crescita di insediamenti di borghi e villaggi disseminati all’interno dei confini comunali. Per di più il censimento della popolazione viene periodicamente dimezzato a causa della frequenza di epidemie e colera (1803, 1804, 1812, 1834, 1854, 1855, 1856, 1866, 1885, 1890, 1897) che si abbattono sulla popolazione causando un’alta mortalità. Un altro fenomeno di forte interesse per Requena e la sua economia è il grande cambiamento prodotto dalle nuove vie di comunicazione. Fino al 1700 la situazione si mantiene per lo più inalterata, con una produzione viticola poco estesa, presente in una serie di frazioni e distribuita intorno
Ill.9. Rete infrastrutturale, XVII secolo 26
2. Parte I: la ruta del vino
alla città. È solo dalla metà del medesimo secolo che questa inizia a diffondersi maggiormente ed a commercializzarsi per poi accelerare il ritmo nel XIX secolo. A questo proposito, testimonianze dell’epoca (1842), vedono ancora delle difficoltà nella coltivazione di vigna e produzione di vino nel territorio di Requena, causate da fattori intrinseci, le ordinanze sulla produzione interna, ed a fattori estrinseci dovuti alla carenza di vie di comunicazione efficienti. Requena risulta ancora una città poco aperta agli scambi ed al commercio, almeno fino al 1847, anno di svolta con l’apertura della carretera de las Cabrillas che connette Valencia con Madrid: una solida infrastruttura di trasporto che permette di allargare il traffico commerciale, allora quasi esclusivamente di grano e farina, ai commerci di vino. Inoltre le continue malattie che colpiscono i vigneti francesi aumentano considerevolmente la richiesta vinicola dall’estero, favorendo lo sviluppo dell’economia agricola dell’area di UtielRequena. Questi avvenimenti portano ad un significativo aumento delle piantagioni di viti e tale espansione viticola viene sostenuta e supportata dall’introduzione di una nuova tipologia di aratro, che rende il lavoro nei campi più efficiente e necessita di minore manodopera. La colonizzazione viticola porta anche uno
Ill.10. Rete infrastrutturale, 1997 27
OLTRE IL MURO. Sequenza architettonica di paesaggi vinicoli a La Portera
sviluppo demografico all’interno delle singole frazioni, sorgono nuove case di campagna ed alla coltivazione di grano e cereali si sostituisce la coltivazione di vite. Per questo motivo la popolazione di Requena città vede una decrescita: da 7532 abitanti nel 1857 a 6287 nel 1887, mentre nelle frazioni l’aumento è significativo: da circa 4804 a 7060 abitanti nel medesimo intervallo di tempo. A Requena si sviluppa una tendenza inversa a quella di qualche anno addietro: se nel secolo precedente gli abitanti del comune lasciavano i piccoli paesi per cercare fortuna nelle industrie di seta della città, ora il flusso migratorio si capovolge, parte dalla città e arriva nella campagna che offre maggiori possibilità lavorative e di sviluppo. Le aspirazioni commerciali vedono un ulteriore impulso con l’inaugurazione del tratto di ferrovia Valencia-Utiel nel 1887, che dà origine ad una serie di veri e propri quartieri di fabbriche, cantine e distillerie nei dintorni di ciascuna stazione ferroviaria: Requena, Sant’Antonio e soprattutto Utiel. Fino al 1912 l’area di Utiel-Requena riesce a sfuggire agli attacchi di filoxera. La sua propagazione è relativamente lenta e permette agli agricoltori di sostituire la specie di vite europea con quella americana, più resistente e che trova modo di espandersi nei terreni vergini rimanenti o nei campi un tempo dedicati alla coltivazione di grano. In questo modo i danni vengono limitati ed alla fine del 1950, quando termina il periodo di rassettamento post-filoxera, i vigneti di Utiel-Requena coprono una superficie di 40000 ettari, la coltivazione più estesa di tutto il valenciano. Nella metà del XX secolo i vigneti subiscono una lieve diminuzione, la maggior parte delle vigne collocate nelle zone più periferiche e meno produttive sono infatti proprietà di persone che non sono viticoltori a tempo pieno e generalmente vivono al di fuori dei confini comunali (Madrid, Valencia…). Se questi vigneti poco produttivi e mal gestiti vengono abbandonati, quelli dei veri viticoltori, per vocazione o per necessità, vengono migliorati: l’uva antecedentemente in uso viene sostituita con una migliore, più giovane e più sana, e vengono introdotte nuove varietà interrompendo il tradizionale monocoltivo della specie Bobal. Le principali specie ad essere coltivate ora sono: Bobal, Tempranillo, Garhay a cui vanno sommati un centinaio di ettari di varietà di grande prestigio, quali: Cabernet Sauvignon, Chardonnet e Merlot. Il risultato fa ben sperare per l’economia viticola e per i vini prodotti, specialmente per i rossi di Crianza e Reserva, che stanno dimostrando la loro buona qualità ottenendo consensi dal mercato internazionale.9
28
2. Parte I: la ruta del vino
Ill.11. Uso agricolo e forestale del suolo, meseta di Requena-Utiel
Ill.12. Evoluzione demografica di Requena-Utiel secondo le tappe economiche, dal 1560 al 1990
6
cfr. Pardo Pardo F., Desarrollo urbano de Requena, Ayuntamiento de Requena, Requena 2007
7
cfr. Piqueras Haba J., Centro de Estudios Requenenses, op. cit.
8
cfr. Pardo Pardo F., op. cit.
9
cfr. Piqueras Haba J., Centro de Estudios Requenenses, op. cit. 29
OLTRE IL MURO. Sequenza architettonica di paesaggi vinicoli a La Portera
- Viti-cultura Fino alla grande espansione viticola del XIX secolo, l’economia agricola della regione requenese dipende principalmente dalla coltivazione di cereali e dall’allevamento. I testi ufficiali più antichi sulla coltivazione della vite risalgono ai “Fueros de Requena” concessi da Alfonso X nel 1265, nei quali viene menzionata la figura del guardiano di vigne10. Ricerche archeologiche hanno però dimostrato che il consumo del vino era già presente nel VII secolo a.C. e che vi era una produzione che risale al V-IV secolo a.C.. Il consumo di vino prima, e la viticoltura poi, vengono infatti introdotti nella penisola iberica dai Fenici nel VIII a.C.. I colonizzatori Fenici si stabilizzano nel sud della Spagna, (a quel tempo denominata Tarsis) e qui avviano la coltivazione di vite, già presente nella terra natia, con la varietà di vite autoctona e silvestre denominata Lambrusca. Prove di questo sviluppo sono i ritrovamenti di resti archeologici rinvenuti nella città iberica di Kelin, da cui prende nome il primo vino prodotto detto vino di Kelin, in particolar modo i ritrovamenti sono stati di anfore, recipiente per eccellenza nell’antichità, che contenevano questa bevanda. Le anfore ritrovate appartengono sia alla cultura fenicia che alla produzione locale. Le prime coltivazioni di uva risalgono al secolo VII a.C. con ritrovamenti di acini nelle località di Cadiz, Castellò e Denia, ma solo dai secoli V-IV a.C. si rileva una presenza consistente di resti di uve. Bere il vino dà sempre è stato un rituale, un atto sociale. Oltre ad essere la tradizionale bevanda presente all’interno dei banchetti la sua importanza religiosa è rimasta sempre presente nel tempo, soprattutto all’interno dei riti funebri. Con la produzione propria da parte degli Iberici e la conoscenza dei modi di consumo tramite i Fenici, si può considerare il vino come la bevanda abituale maggiormente diffusa all’interno delle case.11
Img.13. Ricostruzione di un lagar scavato nella pietra de la Solana de las
Img.14. Anfore de Los Villares: 1. e
Pilillas, Requena (Valencia), disegno E. Díes Cusí
2. Iberiche, 3. Punica, 4.Romana
30
2. Parte I: la ruta del vino
Il passaggio dalla coltivazione di cereali alla viticultura ha presupposto un cambio sostanziale delle abitudini agricole: i campi coltivati a vite esigono una cura costante durante tutto l’arco dell’anno (come per esempio le potature durante i mesi invernali) e viene richiesta un’organizzazione sociale più ampia e complessa per la gestione dei macchinari per l’elaborazione del vino. Inoltre la coltivazione viticola necessita maggiore lavoro manuale rispetto al coltivo di cereali, lavoro che fino alla fine del 1700 viene svolto tradizionalmente con la zappa, non essendo ancora stato introdotto l’aratro forcella che necessita di un solo animale da tiro e che permette di avvicinarsi alla vite senza danneggiarla.12 Segno delle più antiche lavorazioni vinicole sono le piletas de la Rambla de los Morenos, vasche rettangolari di pigiatura, ricavate nella pietra per una profondità di 30 cm circa, con una apertura laterale per la fuoriuscita del mosto. Fino alla metà del secolo XIX la produzione vinicola è per lo più per utilizzo domestico, non esistono molti trullos di grandi dimensioni, ma spesso le case dispongono di una piccola stanza con pavimento inclinato (jaraiz), dove l’uva veniva pigiata ed il risultato si raccoglieva al fondo. Il vino che si ricavava veniva raccolto e lasciato successivamente fermentare in vasche di dimensioni minori.13 Nonostante il vino rimanga una bevanda molto diffusa, la nascita del Cristianesimo ed il conseguente declino dell’Impero Romano, segnano l’inizio di un periodo buio. Il vino è accusato di portare ebbrezza e piacere effimero. Si aggiunge inoltre la diffusione dell’Islamismo nel Mediterraneo tra 800 a.C. e il 1400 d.C. con la messa al bando della viticoltura in tutti i territori occupati. Solo nel Rinascimento si ritrova una letteratura che restituisca al vino il suo ruolo di protagonista della cultura occidentale e che torni a decantarne le qualità. In Spagna il 1400 è il secolo di unione delle corone di Castiglia e Aragona e la vite torna ad essere tradizionalmente coltivata nelle campagne, come a Requena, al tempo paese periferico che prendeva il nome di Ricchena o Richena.14 Dal XV al XIX secolo la coltivazione dell’uva, affiancata al coltivo di cereali e grano, si mantiene costante nel territorio rurale requenese, anche se il suo sviluppo è solamente agli inizi. In questi anni viene introdotto l’aratro forcella che semplifica il lavoro nei campi e via via la diffusione delle vigne prende il sopravvento, anche grazie all’inaspettata crisi che affligge l’economia industriale. Come conseguenza alla vertiginosa espansione di vigneti, a partire dal XIX secolo viene introdotta l’innovazione del trullo. Il trullo è uno spazio quadrangolare di dimensioni variabili, scavato nel terreno e rivestito da mattoni o 31
OLTRE IL MURO. Sequenza architettonica di paesaggi vinicoli a La Portera
Ill.15. Localizzazione dei vigneti di Requena-Utiel nel 1752, Catastro de Ensenada, cartografia Juan Piqueras
Ill.16. Cantine cooperative di Utiel-Requena e destinazioni delle loro produzioni, 1997
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2. Parte I: la ruta del vino
di cemento (in epoca più recente) sia sulle pareti che sul piano di calpestio. Questo viene generalmente ricoperto con un tavolato rimovibile sopra il quale l’uva, disposta in strati uniformi, vene pigiata. Una volta terminata la pigiatura, la polpa viene lasciata cadere all’interno del trullo per permettere la fermentazione in mosto. I pigiatori durante il loro lavoro, si aggrappavano ad una corda appesa al centro della stanza ed erano soliti indossare appositi calzari con una suola in canapa intrecciata, in modo da facilitare la pressione sull’uva.15 Il passaggio dalle pigiature tradizionale all’utilizzo di frantoi con tramoggia lignea o rulli metallici, inizialmente manuali ed in seguito motorizzati, non avvenne prima del XX secolo. Solamente negli anni Sessanta del Novecento, con l’apparizione massiva di cantine cooperartive, si passa ad una totale meccanizzazione del lavoro di elaborazione del vino.16
Ill. 1 7 . Ca s a s de P ra da s , trul l o de A niceto, fr o n te di a ccesso
Ill. 18 . E l Ren ega do , tr ul l os, vas c h e di ela bo r a zio n e
Ill. 19 . E l Ren ega do , tr ul l os, vas c he di ela bo r a zio n e
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OLTRE IL MURO. Sequenza architettonica di paesaggi vinicoli a La Portera
Ill.20. Bodega Casa de la Noria, Utiel, XX secolo
Ill.21. Bodega Redonda, XX secolo
10
cfr. Domenech F., 50 aniversario Fiesta de la Vendimia, Domenech, Valencia 1997
11
cfr. Mata Parreño C., El vino de Kelin: introducción a las práticas agrícolas y ganaderas de época ibérica en
óla comarca de Requena-Utiel, Consejo Regulador de la Denominación de Origen Utiel-Requena, Requena 1997 12
cfr. Piqueras Haba J., Centro de Estudios Requenenses, op. cit.
13
cfr. Catastro Marqués de la Ensenada, Archivo Municipal de Requena, 1752
14
cfr. Martínez Bermell F., Arte en la viña y el vino, Fomento del Arte Bodega Honda, Requena 1994.
15
cfr. Catastro vitícola y vinícola: denominación de origen Utiel-Requena, Ministerio de Agricultura, Madrid 1997
16
cfr. Pardo Pardo F., Museo municipal de Requena: la viña y la bodega en el campo de Requena, Ayuntamiento
de Requena, Requena 2000 34
2. Parte I: la ruta del vino
Terre e tessuti de La Portera - Insediamento de La P ortera La Portera sorge in un territorio prevalente montuoso, ed è situata in un altopiano, una lingua di terra pianeggiante-collinare posta ad un livello inferiore rispetto alle cime che la circondano. Proprio in queste lingue, trovano il loro spazio i vigneti che si estendono fino alle più vicine montagne che ne costituiscono l’orizzonte visivo.
Ill.22. La Portera, foto aerea
Il nome della aldea (frazione) deriva da una antica casa-lavoro che nella metà del diciasettesimo secolo era proprietà di una credente del convento di san Josè di Requena, conosciuta con il soprannome de “La Portera”. La primissima costruzione è un edificio che sorge sulla sommità di una collina, un tempo utilizzato come eremo, ed eretto agli inizi dell’Ottocento da alcune persone della zona, tra cui Manuel Haba, appartenete ad una delle famiglie di maggiore rilevanza de La Portera. I primi luoghi scelti per gli insediamenti sono la calle Iglesia e la plaza San José. Nonostante non sia mai stato un insediamento molto popoloso: nel 1970 si contano solo venti case disposte sulla strada che da Requena porta a Cofrentes, oggi calle Mayor. In breve tempo questa via conquista il primato come punto di attrazione per la costruzione delle nuove case oltre ad essere la principale arteria per gli spostamenti, dando origine ad uno sviluppo più lineare dell’aldea. Il numero di case cresce nel tempo in base alla popolazione residente: la popolazione passa da 142 abitanti nel 1887, a 337 nel 1920,
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OLTRE IL MURO. Sequenza architettonica di paesaggi vinicoli a La Portera
Ill.23-24. La Portera, foto di Mario Guillam贸n Vidal, 1959 - 1986
Ill.25. La Portera, foto attuale nei primi insediamenti
Ill.26. La Portera: vista panoramica dai terreni agricoli, sulla destra il nucleo urbano e sulla sinistra la attuale cantina La Union 36
2. Parte I: la ruta del vino
fino ad arrivare a 447 nel 1950, anno in cui si raggiunge il picco massimo. In seguito il paese vede una decrescita graduale degli abitanti, nel 1970 si riducono a 342, nel 1986 a 195 fino ad arrivare a soli 143 nel 1996. Al giorno d’oggi la frazione conta 145 abitanti, la situazione non è molto migliorata e la causa principale è sicuramente l’emigrazione dovuta alle industrie presenti nelle città. Nonostante i vari paesi dell’area vivano essenzialmente di agricoltura, ed in particolare della coltivazione di vite, non sono molte le famiglie che possono sostenersi unicamente con questa attività, tanto più che al giorno d’oggi molti processi per la coltivazione, raccolta ed elaborazione dell’uva sono stati meccanizzati. Questo potrebbe sembrare un controsenso se si pensa che la principale ragione della crescita delle aldeas nella provincia di Requena è stato proprio il fallimento dell’industria della seta a metà dell’Ottocento e il successivo sviluppo e commercializzazione dell’agricoltura viticola e del vino. Con il passare del tempo la moltitudine di agricoltori, nati in seguito alla crisi industriale, diminuisce e rimangono solo coloro che, per necessità o passione, svolgono il loro lavoro a tempo pieno. Poco a poco nascono nuove industrie nella città e sebbene l’agricoltura rimanga l’attività caratterizzante il territorio non è più l’unica forma di sostentamento della popolazione. Il problema dell’emigrazione si è fatto sentire, ma non ha sicuramente affetto la aldea de La Portera in modo drastico, come invece è avvenuto in altre frazioni, in cui buona parte della popolazione era solita tornare nel paese d’origine solo durante la stagione estiva ed il fine settimana. Al contrario La Portera, avendo risolto si dagli inizi degli anni Settanta il problema di fornitura dell’acqua potabile ed essendo ubicata in un luogo ameno per l’abbondanza di boschi nel territorio circostante, non è stata particolarmente afflitta dall’emigrazione dei suoi abitanti.
37
OLTRE IL MURO. Sequenza architettonica di paesaggi vinicoli a La Portera
Dal punto di vista economico La Portera poggia totalmente sull’agricoltura. La viticoltura è sicuramente il motore economico della frazione, anche se non mancano la coltivazione di mandorli, l’utilizzo della massa boschiva e l’allevamento di suini e pollame. Ad ogni modo, nessuna di queste attività può essere paragonata per estensione e ricavi alla viticultura ed alla seguente produzione di vino. I viticoltori della zona sono riuniti attorno alla cantina-cooperativa Union, fondata da 39 produttori di vino nel 1958. Attualmente raggiunge i 127 membri e la capacità di produzione oscilla tra i trenta e quarantacinque mila ettolitri di vino. L’edificio è situato al margine tra il nucleo consolidato della Portera ed il terreno agricolo. Si tratta di un edificio industriale impattante dal punto di vista ambientale e produttore di un vino dalla scarsa qualità utilizzato per esser miscelato con altri vini.17
Ill.28. Uso agricolo e forestale del suolo, Portera y Pedrones
17
38
cfr. Piqueras Haba J., Centro de Estudios Requenenses, op. cit.
2. Parte I: la ruta del vino
Ill.29. Valle de La Portera, ortofoto
- Tessuti rurali e terreni agricoli La Portera è una frazione rurale dallo sviluppo recente, iniziato a metà del 1800. Come la maggior parte dei paesi rurali, si sviluppa in modo del tutto spontaneo, secondo i predominanti segni orografici del territorio. La nascita di questa frazione è stata dettata dall’attività agricola che con il passare del tempo si è radicata nel luogo e nella cultura locale. Per questa ragione lo sviluppo del tessuto urbano non si realizza in modo regolare attorno ad una piazza, condensatrice delle attività sociali, come generalmente avviene. La piazza presente è più che altro uno slargo della strada principale, uno spazio su cui affacciano solamente i retri delle case, un lato dell’antico eremo e un edificio pubblico che oggi funge da centro sociale e insieme biblioteca. Lo sviluppo del paese va letto in modo parallelo alla calle Mayor e alla calle Real anche se la tendenza dell’edificazione più recente è stata quella di costruire le proprie abitazione spingendosi sempre più verso la campagna secondo un andamento radiale. Se gli isolati che si affacciano sulle vie principali sono completi e con un principio di regolarità, quelli ai margini del terreno agricolo iniziano ad aprirsi e a sfrangiarsi verso la campagna, fino a diventare singole case sparse in un verde di passaggio tra l’insediamento abitativo e le coltivazioni. Il paesaggio della valle de La Portera si caratterizza per diverse forme di antropizzazione del territorio. Predominante è la campagna, contraddistinta dalle cospicue coltivazioni viticole: queste occupano una lingua di terra alquanto vasta fino ad arrivare ai primi rilievi montuosi. 39
OLTRE IL MURO. Sequenza architettonica di paesaggi vinicoli a La Portera
Ill.30. Percorso Requena-LaPortera, relazioni e connessioni
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2. Parte I: la ruta del vino
Al margine occidentale del paesaggio agricolo si insedia il tessuto urbano de La Portera, che si sviluppa a partire dalla tipologia rurale del corral, caratteristica del luogo. Infine vi è il limite dell’orizzonte segnato dai crinali montuosi che racchiudono l’intera valle. Con il tempo nuovi tracciati viari hanno sostituito, affiancandosi, la strada di collegamento principale con Requena, spostandosi sempre più verso Ovest, uscendo dal nucleo urbano e portando il flusso dei mezzi di trasporto al di fuori del paese. Attualmente il collegamento tra Requena e La Portera avviene attraverso la carretera nacional n. 330 (strada nazionale). Questa strada segna profondamente il territorio, basti notare la differenza con cui il tessuto agricolo interagisce con i diversi tracciati viari: se lungo l’antica via di collegamento tra i due centri il disegno dei campi collabora con la traccia della strada, percorrendo la carretera nacional è chiaramente leggibile come questo segno abbia ripetutamente lacerato i tessuti preesistenti. Inoltre per consentire la sua costruzione è stato necessario tagliare nettamente le montagne che attraversa e conseguentemente modificare la morfologia del territorio: questo avviene dove la strada nazionale passa tangenzialmente a La Portera, tralasciando una lingua del crinale montuoso, a carattere boschivo, che si interpone come sacca residuale tra la strada stessa e il paese. La punta meridionale di questa piccola porzione di territorio è un’area recintata e invalicabile, destinata alla gestione di strade ed autostrade. In questo punto, poco più a sud, un incrocio di strade permette di connettere la carretera nacional alle due strade principali che attraversano La Portera: gli spazi che si interpongono tra queste vie risultano come ulteriori sacche irrisolte di terreno non utilizzato; una di queste è occupata dallo stabilimento della cooperativa vinicola la “Union”.
1956
1977
1991
Ill.31. La Portera, soglie storiche, nucleo urbano, infrastrutture e vigneti
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OLTRE IL MURO. Sequenza architettonica di paesaggi vinicoli a La Portera
- La tipologia del corral La Portera, in quanto insediamento rurale, è caratterizzata dalla tipologia del corral (aia), nella sua accezione agricola e non urbana. Testimonianze del corral arrivano dal XVIII secolo tramitre il Catastro Maqués de la Ensenada che raccoglie le proprietà di ciascun abitante della comarca di Requena, dai più benestanti ai più poveri. I possedimenti si distinguono in: casas de lugar (case nella città di Requena), casas de campo (case rurali presenti nelle aldeas), tierras (terreno coltivato), secanos (terre non coltivate), viñas (vigneti con possibile produzione di vino), nuevos activos (nuovi introiti), zensos (forme di debito o credito), ganados (allevamenti), industrial (attività industriali), ed altre proprietà come ad esempio hornos (forni), molinos (mulini). Nella descrizione della tipologia delle casas de campo è quasi sempre presente un corral. Questo elenco di possedimenti permette di conoscere le principali attività e le tipologie edilizie presenti, entrambe strettamente connesse e radicate nel territorio sul quale sorgono. La tipologia abitativa più diffusa nella campagna requenese è sicuramente la casa de campo ed a seconda delle sue caratteristiche si riescono a dedurre le condizioni economiche della famiglia a cui apparteneva. Innanzi tutto le casas de campos possono essere di uno o due piani. Le case a due piani sono la maggioranza (circa l’84% del totale) e lo spazio in esse viene perfettamente organizzato e gerarchizzato. Al piano terra lo spazio abitato si apre su un patio o corral, suddiviso in due aree, entrambe dedicate ai lavori della vita quotidiana, alla cucina o all’eventuale spazio per i domestici. Nella pianta superiore si sviluppa lo spazio dormitorio. Questa disposizione permette di distinguere chiaramente le diverse aree e di separare la zona di vita della famiglia da quella di lavoro degli animali, garantendo maggiore igiene ed ordine. Le case ad un piano sono, invece, di metratura inferiore. Le più piccole presentano una sola grande stanza in cui si riuniscono tutte le funzioni: cucina, sala, dormitorio che generalmente affacciano direttamente sul corral: in queste case, che sono anche le più antiche, animali e persone vivono a stretto contatto. Le tipologie edilizie presenti ne La Portera sono: la casa habitación, il trullo, la bodega ed il corral. La casa habitación è l’edificio in cui normalmente vivono le famiglie e generalmente presenta un’altezza di due o tre piani. Il trullo è propriamente uno spazio quadrangolare chiuso e recintato, di dimensioni variabili, scavato nel terreno, in cui si pigia l’uva per ricavarne mosto, l’accesso avviene direttamente dal piano stradale tramite una porta finestra di dimensione tali da favorire lo scarico dell’uva dai carri. Bodega è lo stabilimento, 42
2. Parte I: la ruta del vino
industriale o un tempo a livello famigliare, in cui il vino viene prodotto. Il corral può assumere diversi significati. Un primo significato lo identifica come luogo, tipico delle case rurali, solo parzialmente coperto, che serve come recinto per gli animali. Nella sua declinazione urbana il corral può essere anche di vicinato, un isolato con un unico corral centrale per diverse famiglie. Un ulteriore definizione lo connota invece come luogo, casa, patio o teatro in cui vengono rappresentate le commedie. I corrales, intesi nella prima accezione, sono gli elementi caratterizzanti degli insediamenti rurali e nello specifico de La Portera. Questa forma di recinzione, se si trova all’interno del paese può essere costruita per delimitare lo spazio proprio di una o più case affiancate le une alle altre, o nel caso sia situata nella campagna può essere un evento isolato; altre volte si trovano più corrales affiancati, uniti o separati. Nei paesi sorgono come spazio destinato agli animali che vengono allevati o come spazio domestico di servizio, mentre i corrales che sorgono in aperta campagna svolgono la funzione di recinti per la transumanza degli ovini o per il loro allevamento stanziale. Quest’ultimi possono essere di proprietà, ma spesso la gestione veniva affidata ai pastori, che in cambio devolvevano al proprietario non del denaro, ma il concime prodotto dal bestiame, un bene utile per la coltivazione delle terre.
Ill.32. Estratti del catastro Marqués de la Ensenada, 1752
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OLTRE IL MURO. Sequenza architettonica di paesaggi vinicoli a La Portera
Ill.33. Esempio di casas de campos con corrales del XVIII secolo, Catastro de la Ensenada
Ill.34. Processo costruttivo di un muro con la tecnica del tapial: 1. 2. 3. 4. 5. 6. 44
Collocazione delle pietro come base del muro Fissaggio a misura del tavolato Rinforzo della casseratura con pali e corde Tensione delle corde tramite un torniquete Pulizia della superficie del tapial Preparazione delle finiture
2. Parte I: la ruta del vino
Ill.35. Esempio di casas de campos con corrales del XVIII secolo, Catastro de la Ensenada
La tecnica costruttiva più antica, utilizzata anche nella costruzione dei corrales, è quella del tapial de tierra: un muro spesso circa 80 centimetri con o senza zoccolatura in pietra e costituito da calce, terra ed acqua. Il grande spessore di questi muri funge da isolante termico e allo stesso tempo garantisce la giusta resistenza per sopportare gli sforzi trasmessi dalla copertura, formata da una struttura lignea e coperta da un cañize (canne legate con delle corde) sul quale poggiano le tegole. L’erezione del muro con il metodo del tapial (da tapia: terra amalgamata e compattata) avviene all’interno di una casseratura lignea, creando degli strati di terra e sassi, nei quali viene versata dell’acqua ed il tutto si compattata. Una volta tolta la casseratura il muro viene rivestito su tutti i lati con della calce bianca che funge da impermeabilizzante, solo nella parte superiore si dispongono listelli di pietra come finitura. Questa tecnica costruttiva risulta duratura nel tempo solo se l’impermeabilizzazione, fatta con la calce, resiste alle infiltrazioni di acqua, in caso contrario il muro si deteriora in breve tempo. I materiali impiegati per la costruzioni delle case sono legati all’intorno naturale e fisico del luogo ed essenzialmente sono: terra, fango, calce, intonaco, pietra, legno e mattoni di piccole dimensioni. La terra era senza dubbio il materiale più utilizzato per erigere le pareti, un materiale povero che sebbene si deteriorasse con maggiore facilità nel corso del tempo, era anche il materiale più facile da reperire e di gran lunga più economico. 45
OLTRE IL MURO. Sequenza architettonica di paesaggi vinicoli a La Portera
La causa principale dell’assenza degli altri materiali da costruzione è dovuta, infatti, al loro prezzo elevato sul mercato. Generalmente pietra e mattone, i materiali più duraturi, venivano utilizzati per realizzare la parte contro terra del muro, per isolarlo meglio dal suolo ed evitare le infiltrazioni di acqua. Erigere un intera casa con questi materiali è indice di elevate possibilità economiche da parte della famiglia che la possedeva. I muri del corral presentano un’altezza che varia approssimativamente dai 2 ai 5 metri, la loro altezza funziona da deterrente per eventuali ladri di bestiame o per gli attacchi di lupi e volpi. Nei casi in cui l’altezza sia molto elevata spesso compaiono dei contrafforti in pietra per dare una maggiore stabilità al muro. All’interno dei corrales si trova sempre una parte copertura, a falda unica, rivolta verso sud che garantisce l’ombreggiamento del bestiame nelle ore più calde. Al loro interno spesso è presente un pozzo coperto con la canaletta che trasporta l’acqua da un sito ad un altro e generalmente è presente anche una vasca, che prende il nome di algibe, che contiene l’acqua pluviale proveniente dalla copertura.18
18
46
cfr. Catastro Marqués de la Ensenada, Archivo Municipal de Requena, 1752
Ill.36. Corral de Periquín Cañá Grande Lucio y Pedro López Cano
El debate, abierto en España en los
In Spain we talk in the last decade of
últimos años, sobre las “catedrales
“ wine cathedrals” to indicate a ten-
del vino” se refiere a aquellos pro-
dency to design new wineries iden-
yectos de bodegas pensados solo
tified as iconic architecture, devoted
como arquitecturas icónicas y según
to the laws of sales markets: these
las leyes del mercado de la venta:
buildings aim to surprise, with at-
se contruyen entonces arquitecturas
tractive and startling shapes but they
cautivadoras e impresionantes, pero
often fail to respond adequately to
que la mayoría de las veces no sa-
the functional issues, because they
ben solucionar los problemas funcio-
are disconnected from the context,
nales de una bodega porque desco-
which is distorted by the intervention.
nectados del contexto y del paisaje
The spaces of a winery should be
donde surgen.
developed in necessary respect
Los espacios de una bodega ten-
of the natural wine production pro-
drían que desarrollarse según el na-
cess, reaching by these to establish
tural proceso de producción del vino,
relationships between the spaces
estableciendo solo gracias a ésto las
themselves and the ground. Take
conexiones entre los espacios y con
advantage of the natural gradient of
el terreno. Aprovechar de la orografía
the topography, that allows both not
y de los desniveles naturales del
to use mechanical systems to move
terreno nos permite no recorrer al
the grapes and wine, referring to a
utilizo de pompas y sistemas meca-
dynamic fluid that takes advantage
nicos para mover las uvas y el vino,
of the gravity, and can find its own
sino aprovechar de la caída natural
temperature and humidity relying
por gravedad; además, gracias a la
on energy coming straight from the
energía de la tierra cada espacio en-
earth, without resorting to any sophi-
couentra y mantiene su temperatura
sticated air-conditioning systems.
ideal sin necesitar una climatización
Today’s challenge is to build wineries
artificial.
that are both industrial sites suitable
El verdadero desafío actual es pro-
for the production, but also evocative
yectar bodegas que sean al mismo
ambience, not anonymous and indif-
tiempo
industriales,
ferent that do not respect the mystici-
adaptos para la producción, y tam-
sm and exclusivity of the product; en-
bién lugares singulares, con un pro-
vironments in complete synergy with
pio caracter y significado, respec-
the landscape, in order to not alter
tando la exclusividad del producto:
the naturalness of the areas that ho-
arquitecturas integradas en el paisaje
sting the vineyards, but practical and
y que crecen a empezar del contexto
efficient to ensure the sustainability of
natural, de tal manera que se man-
production processes.
arquitecturas
tenga el territorio que acoge las viñas y que la producción sea desarrollable y sostenible. 48
|
Industrial architecture
2.2 L’ARCHITETTURA DELLA PRODUZIONE
La arquitectura para la producción
|
In Spagna si parla nell’ultimo decennio di “cattedrali del vino” per indicare la tendenza a progettare nuove cantine vinicole identificate come architetture iconiche, devote alle sole leggi dei mercati di vendita: si realizzano quindi edifici che sorprendono, accattivanti e dalle sensazionali forme, ma che spesso non riescono a rispondere adeguatamente alle questioni funzionali, in quanto sconnessi dal contesto, che risulta snaturato dall’intervento. Gli spazi di una cantina si dovrebbero sviluppare nell’indispensabile rispetto del naturale processo produttivo del vino, arrivando, solo grazie a questo, a stabilire le relazioni tra gli spazi stessi e con il terreno. Sfruttare i naturali dislivelli dell’orografia consente sia di non utilizzare sistemi meccanici e di pompaggio per la movimentazione delle uve e del vino, rimandando ad una dinamica del fluidi che sfrutti la gravità, sia di poter trovare la propria temperatura e umidità affidandosi all’energia proveniente direttamente dalla terra, senza ricorrere a sofisticati impianti di climatizzazione. La sfida odierna è realizzare cantine che siano al contempo luoghi industriali adatti alla produzione, ma anche ambienti suggestivi, non anonimi e indifferenti che non rispetterebbero la misticità ed esclusività del prodotto; ambienti perfettamente integrati con il paesaggio, in modo da non alterare la naturalità dei territori che ospitano le vigne, ma pratici ed efficienti per garantire la sostenibilità dei processi produttivi.
49
Img.37. Cantina vinicola cooperativa Union, La Portera
2. Parte I: la ruta del vino
La cantina come prodotto - Landscape, Architecture & W ine Realizzazioni che si scostano dagli esercizi delle “archistar”, prevedono un veritiero legame con il territorio e con realtà produttiva in cui si collocano, rinnovandone la tradizione ed esaltandone i valori, seppur aggiornati ma non snaturati. Progettazioni così intese si basano su rapporto profondo con il territorio e i suoi vigneti, facendo memore delle antiche pratiche , alle originarie scansioni temporali della lavorazione della terra e l’ausilio di architetture per facilitarne le operazioni , scandendone ritmi e passaggi. È evidente la necessità di recuperare e saper attualizzare in chiave moderna e sostenibile, i dettami della manualistica ottocentesca che pongono l’attenzione sulla coesistenza tra funzione e forma, senza lasciarne prevaricare una sull’altra: ricercare cantine tra tradizione ed innovazione, progettate non solo per stupire, ma per introdurre il nuovo per migliorarne l’attività e la qualità del vino, preservandone il valore culturale19. Se non si rispettano dei principi minimi per mantenere i paesaggio e l’intorno, questa tipologia di costruzioni rischia di moltiplicarsi nella stessa zona e trasformarla in un parco tematicoindustriale, come nel caso della Rioja, presentando sei firme nel raggio di 50 km; crediamo che sia necessario mantenere una connessione logica con l’estetica dell’intorno rurale, elemento che da senso e valore alla regione. Proprio dall’esperienza Spagnola della Roija e dalla riflessione sul ruolo dell’archittettura per la promozione della cultura del vino, alcuni enti locali si sono rivolti al portale Arquideas, creando il concorso Landscape, Architecture & Wine (LA&W) per analizzare l’idoneità di quelle soluzioni e proporre delle alternative possibili, che dinamizzino l’immagine di una cantina e il suo territorio. Nel bando si pone l’attenzione sulle sinergie che legano l’edificio produttivo al paesaggio, riportando le parole dell’Arch. Arizcuren, durante II Congresso Internazionale Vino e Territorio, svoltosi in Italia nel 2009. Per l’architetto riojano “il futuro delle nuove cantine passa per l’approfondimento della relazione col paesaggio e il saper incorporare la saggezza delle architetture più tradizionali con le nuove tecniche di progettazione sostenibile, lungi dall’idea di colonizzare il territorio sulle quali si appoggiano, ma al contrario costruendo in armonia col paesaggio e ottenere il consenso per rafforzare la propria immagine di marca attraverso l’integrazione con l’intorno naturale.”20
19
Rossetti M., Cantine: Tecnologie Architetture sostenibilità, Maggioli Editore, Repubblica di San Marino 2011, p. 7
20
« Landscape, Architecture & Wine (LA&W) », portale Arquideas, www.arquideas.com 51
OLTRE IL MURO. Sequenza architettonica di paesaggi vinicoli a La Portera
1. Bodegas López de Heredia/ Viña Torrodia Arch. Zaha Hadid 2. Bodegas Baigorri Arch. Iñaki Aspiazu
3. Viña Real Arch. Philipe Maizières 4. Bodegas Campo Viejo Arch. Ignacio Quemada 5. Bodegas Regalía de Ollauri Arch. Arizcuren arquitectos 6. Bodegas Darien Arch. Jesus Marino Pascual 7. Consejo Regulador D.O. Ribera del Duero Arch. Barozzi y Veiga 8. Bodega Contador Arch. Héctos Herrera Ribas 9. Bodegas Protos Arch. Richard Rogers & Alonso Balaguer 10. Bodega Marqués de Riscal Arch. Frank Gehry 11. Bodegas Señorío de Arinzano Arch. Rafael Moneo 12. Bodegas Marco Real Arch. Patxi Mangado
13. Bodegas Ysios Arch. Santiago Calatrava 14. Bodega Portia Arch. Norman Foster
Img.38. Viaggio formativo della Universidad Politécnica di Valencia, le cattedrali del vino, La Rioja e Ribera del Duero
52
2. Parte I: la ruta del vino
- Le cattedrali del vino L’uomo contemporaneo, come nell’antichità, sente tutt’oggi la necessità di legare ad una certa ritualità alcuni momenti della vita, creando identità che ne permettano la celebrazione collettiva. Ciò che varia dalle antiche tradizioni sopravvissute (nozze, funerali) è il sovrapporsi di nuovi miti o simboli di modernità , cosicché il sacro ed il profano si fondono nella celebrazione del “prodotto”. Queste nuove liturgie moderne si basano sul consumismo, la ricchezza e la fama, necessitando di appositi spazi e luoghi dotati di una scenografia che ne amplifichi il gesto. Risulta coerente identificare in “cattedrali del commercio” quegli spazi e architetture monumentali e riconoscibili dove si svolgono questi riti collettivi come nei grandi magazzini, cinema multisala e parchi tematici; si parla di “cattedrali del vino” per identificare la tendenza degli ultimo decennio a progettare nuove cantine vinicole, caratterizzate da un forte dualismo tra funzione produttiva e aspetto mediatico.21 È interessante parlare di architettura come marca, come immagine della identità che rappresenta; esempi applicati di questo genere sono alcuni interventi di Calatrava o Einsenmann, la cui finalità di impostare un edificio come icona in una determinata città o luogo per renderla visibile al mondo, è messa in discussione dallo scarso risultato raggiunto o sovrastimato. Il rischio di una “architettura iconica”, devota alle sole leggi di mercati di vendita, è quello di creare edifici che sorprendano, dalle sensazionali forme, ma che non funzionino adeguatamente, che siano sconnessi dal contesto prive di attenzione sociale; applicare la pura promozione del prodotto pur di raggiungere un’immagine accattivante, può snaturare la visione reale dell’intervento. Come già successe per Prada incaricando progetti a Rem Koohlass o Cartier con Jean Nouvell, allo stesso modo negli ultimi anni alcune cantine hanno deciso di intraprendere un percorso iconografico, ovvero di creare, attraverso l’immagine dell’architettura, degli edifici che siano oggetti di culto e venerazione. Così l’architettura e il vino segnano il XXI secolo creando dei paesaggi più propri di un museo all’aria aperta. Queste nuove costruzioni sono, per molti, dei gioielli che riflettono più il potere che un investimento ragionato. Lo sviluppo dell’architettura riguardanti le cantine ha dato un salto di qualità e prodotto un boom dell’enoturismo, anche se alcuni progetti vengono classificati come attentati al paesaggio. Nei casi più eclatanti è evidente che la notevole quantità di investimento messa nelle mani dell’architettura risponde alla logica di pubblicità dove le grandi imprese spesso spingono, però sarebbe un’ingiustizia ridurre solo a questa 53
OLTRE IL MURO. Sequenza architettonica di paesaggi vinicoli a La Portera
casistica tutto l’orizzonte della progettazione vinicola. In passato la funzione della cantina era fortemente legata al risvolto sociale che svolgeva, accentrando a sé l’intera comunità di riferimento per eventi topici della produzione: raccolta e vendemmia, aspetto che nei recenti sviluppi si è posto in chiave di enfatizzazione e spettacolarizzazione tra parte produttiva e relazione col pubblico. Spesso però la declinazione formale architettonica degli interventi risulta non più in relazione col paesaggio, ma in contrapposizione, stagliandosi come oggetto riconoscibile per il prodotto proposto al mercato, prima ancora di rispondere alle complesse esigenze funzionali di un centro enologico odierno. Questo tipo di progettazione è anche definito come esercizio di architainment, ovvero fusione tra architecture ed entertainment, definendo una tendenza a impiegare metodi e strumenti dello spettacolo per costruire architetture iconiche.22 In questa accezione l’architettura perde la sua anima e si volgarizza in mera forma pubblicitaria, al contrario l’intento principe dovrebbe rimanere sempre quello di porsi al sevizio della società, creando spazi favorevoli alla cultura e sensibili al cotesto urbano o naturale nel quale vengono realizzati, con programmi funzionali a lunga distanza. Spesso l’architettura contemporanea non si pone in dubbio rispetto alla continuità storica, che invece è l’unica via per poter credere in qualcosa con convinzione e difenderla; senza si cade in gesti che esprimono un qualcosa privo di contenuto. Il proposito di questa tipologia di edificazioni è quello di trasformare le cantine produttive in centri nevralgici, nei quali oltre a svolgersi tutte le attività della vitivinicoltura, si sviluppano una serie di attività destinate alla promozione e diffusione del prodotto che si genera in quei luoghi e la cultura del vino in generale. Sperimentazioni precedenti a quelle più eclatanti di Calatrava e Gerhy, si trovano nelle Cantine Campillo, a Laguardia: l’edificio esteriormente tradizionale, dai tratti di palazzo francese, si presenta mimetizzandosi nell’idea di paesaggio di vigne, ma al suo interno nasconde una incantevole sala di invecchiamento con barrique di rovere, il cui fine è semplicemente quello di dilettare tutti coloro che la contemplano. Nella Rioja Alavesa, si situa uno degli edifici più discussi sul tema e con maggiore ripercussione sociale, trattandosi inoltre non di una cantina ma di un albergo. Lo stesso Gerhy, si dice, sia stato convinto a progettare l’edificio solo dopo una mossa di promozione del prodotto, degustando una pregiata bottiglia prodotta nel 1929, anno della sua nascita; di certo dalla realizzazione 54
2. Parte I: la ruta del vino
di questo gioco di elementi rettilinei in pietra che si incontrano con un lazzo di lamiere di titanio, posto come un regalo con fiocco nel mezzo dei vigneti, si è registrato indubbiamente un moltiplicarsi delle visite al paese. Altro approccio si vede nel progetto di Ignacio Quemada per la Bodega Alcorta: l’edificio risulta pensato dal punto di vista del visitatore, creando successioni di visioni tra interno ed esterno scandite da corridoi e passerelle, come nella composizione di una pellicola cinematografica.
Ill.39. Dall’alto verso il basso: cantina Marqués de Riscal di F. Gerhy, cantina Ysios di S. Calatrava, cantina Portia di N. Foster
21
Rossetti M., op. cit., p. 5
22
ivi., p. 6 55
OLTRE IL MURO. Sequenza architettonica di paesaggi vinicoli a La Portera
La cantina come luogo Gli spazi di una cantina si dovrebbero sviluppare nell’indispensabile rispetto del naturale processo produttivo del vino, dalla raccolta dell’uva al prodotto finito, secondo tecniche e metodi tradizionali. Il pieno rispetto della naturalità della poduzione porta alla definizione delle caratteristiche igrotermiche,materiche e illuminotecniche degli spazi e, soprattutto, a stabilire spazialmente e geograficamente le relazioni tra gli spazi. Ciascun ambiente della cantina, corrispondente ad un momento preciso e definito della produzione; dovrà stabilire una rapporto ben preciso con il terreno e il territorio circostante, così da trovare la propria temperatura e umidità affidandosi all’energia proveniente direttamente dalla terra, senza ricorrere a sofisticati impianti di climatizzazione. Inoltre sfruttare i naturali dislivelli dell’orografia consente di non utilizzare sistemi meccanici e di pompaggio per la movimentazione delle uve, del mosto e del vino, rimandando per quanto possibile ad una dinamica del fluidi che sfrutti la gravità. “Con il nome di cantina si sogliono indicare tutte le parti di un edificio che sono necessarie alla manifattura del vino ed alla sua conservazione.”23 La manualistica tecnica sulle “costruzioni enotecniche”24 tra XIX e XX secolo ci consente di individuare lo sviluppo fondamentale di una cantina, ritrovando tecniche e metodi tradizionali, oltre che il buonsenso e la regola d’arte. Cerchiamo quindi di percorrere questi spazi basilari per la realizzazione di una cantina. Innanzitutto l’area di recezione, scelta e pigiatura dell’uva dovrebbe trovarsi immediatamente sopra l’area di fermentazione o tinaia: dopo una prima selezione manuale dell’uva, l’eliminazione dei raspi ela macinazione dei grappoli attraverso macchine pigiatrici diraspatrici, il mosto viene per caduta naturale e con l’aiuto di nastri trasportatori lasciata cadere in depositi o tini di grandi dimensioni. Ad un livello inferiore troviamo quindi la tinaia, locale “nel quale avviene la fermentazione alcoolica e il mosto si trasforma in vino”25. La relazione con il terreno di questo locale dipende dal clima e dal luogo dove si inserisce, può essere al pianterreno o in parte interrato; “una buona tinaia nei paesi caldi è un edificio molto grande, specialmente in altezza e ben ventilato, con recipienti non troppo grandi”26. La ventilazione, che deve essere di tipo circolare, qui è fondamentale, in questo modo si eliminano i gas pesanti rilasciati dalla fermentazione che al contrario si accumulerebbero sul fondo dell’ambiente. Adiacente alla tinaia si colloca l’area di elaborazione nella quale arriva il vino giovane per una ulteriore elaborazione (svinatura e fermentazione lenta), per poi subire un ulteriore invecchiamento oppure diventare vino pronto all’uso, 56
2. Parte I: la ruta del vino
quindi passare all’imbottigliamento e stoccaggio: la sua collocazione ideale sarebbe seminterrata in quanto consentirebbe un maggiore controllo delle temperature raggiunte dal vino nei vari periodi in cui stanzia nei depositi. Anche in questo caso è importantissimo garantire un appriopriato ricircolo d’aria e la ventilazione dell’ambiente, con le stesse modalità valide per la tinaia; di fatto questi due ambienti si avvicinano molto per necessità, conformazione e caratteristiche fisiche. Il vino prosegue il percorso produttivo passando nella zona di conservazione o invecchiamento, detta anche barricaia dal nome (barrique) delle botti utilizzate, più piccole rispetto a quelle utilizzate per la fermentazione e l’elaborazione. Questo spazio rappresenta il cuore vero e proprio della cantina, luogo mistico e identificativo, in quanto è proprio qui dove prendono vita le caratteristiche che contraddistinguono un vino di eccellenza da uno di scarsa qualità: a dare forza a questi aspetti sicuramente concorre il carattere ipogeo ideale per questo ambiente, che necessita il mantenimento di caratteristiche igrotermiche precise e ben controllate. Il carattere ipogeo consente inoltre il passaggio del vino da un locale all’altro per gravità, evitando l’utilizzo di sistemi di pompaggio che, soprattutto in questa fase, rovinerebbero le qualità e le caratteristiche strutturali del vino. La ventilazione in questo caso va limitata, affinchè sia appena sufficiente per mantenere l’ambiente puro ed impedire la formazione di muffe, così come l’illuminazione, che sia naturale o artificiale,deve essere ridotta, soffusa e ben controllata. Vicino alla barricaia trova posto la bottiglieria, ultima zona dove il vino viene conservato prima di ritornare al piano terreno e trasportato a destinazione. Al funzionamento di questi luoghi principali di una cantina collaborano spazi accessori come locali tecnici e di servizio, magazzini per attrezzature, macchinari, casse, botti vuote e bottiglie vuote, zona di imbottigliamento e lavaggio delle bottiglie vuote, area di stoccaggio e spedizione del prodotto finito. A questi si aggiungono gli ambienti dei lavoratori della cantina e il laboratorio dell’enologo, oltre ad un’area amministrativa per la direzione tecnica e commerciale. Indispensabile per la concezione contemporanea di cantina è la relazione sociale e di interazione con il pubblico, necessaria per portare ad una conoscenza profonda del proprio prodotto; si ricorre quindi a spazi espositivi, aree didattiche, una zona di degustazione, l’enoteca, un archivio, una sala di ricevimento dei visitatori e un punto vendita al dettaglio. Le condizioni imposte dall’ indispensabile sostenibilità dei processi produttivi rendono difficile il dialogo con le contemporanee dinamiche industriali e ostacolano la risposta alle esigenze commerciali, legate alla necessità di rendere visitabile ed ospitale ogni luogo ed ogni fase della produzione. Per tali motivi, 57
OLTRE IL MURO. Sequenza architettonica di paesaggi vinicoli a La Portera
spesso negli ultimi anni le scelte strategiche dei luoghi di produzione vinicola vertevano verso un adeguamento alle nuove condizioni imposte dal mercato: nella pratica progettuale si privilegiano tutti quei temi mediatici e pubblicitari che concentrano la ricerca sul raggiungimento di un impatto stupefacente, singolare e scenografico, persino monumentale, dimenticandosi o trascurando le esigenze di un edificio industriale e la sostenibilità del processo produttivo. La sfida odierna è realizzare cantine che siano al contempo luoghi industriali adatti all’intera produzione, ma anche ambienti suggestivi, non anonimi e indifferenti che non rispetterebbero la misticità ed esclusività del prodotto; ambienti perfettamente integrati con il paesaggio, in modo da non alterare la naturalità dei territori che ospitano le vigne, ma pratici ed efficienti per garantire la sostenibilità della lavorazione e del trasporto del prodotto finito. Prescindendo invece dalla morfologia dell’edificio, dal tipo di produzione, dal luogo e dal contesto, si possono individuare una serie di connotazioni che una cantina odierna dovrebbe avere. Un’identità architettonica riconoscibile; inteso non come manufatto che si imponga sul paesaggio o che risulti immediatamente identificabile, quanto piuttosto come edificio “unico”, associabile solo a quel prodotto e a quella precisa esperienza. Favorire l’accoglienza dei visitatori, la socializzazione, lo scambio culturale e l’esperienza sensoriale del vino, attraverso strutture ricettive che consentano ai viaggiatori di associare al viaggio anche altre esperienze di tipo formativo sulla storia e costumi locali; il
Ill.40. Processo di produzione del vino, schema generale di funzionamento
58
2. Parte I: la ruta del vino
“peso” progettuale di tali funzioni è almeno pari a quello di un corretto sistema di produzione”27. Coniugare tradizione e modernità, dove la tradizione sta nel giusto rispetto verso una pratica che accompagna la storia dell’uomo da sempre, assumendo una forma di sacralità che nell’esperienza della cantina si dovrebbe continuare a percepire. Infine, una cantina dovrebbe essere energicamente efficiente, sia nei processi produttivi che nei cosumi legati all’edificio, per ridurne il fortissimo impatto ambientale, per mettere chi visita la cantina nelle migliori condizioni possibili per degustare vino e per la creazione di un ambiente ideale, dal punto di vista igrotermico, per i processi di vinificazione e invecchiamento28.
23
Rossetti M., op. cit., p. 10
24
ivi., p. 22
25
ivi., p. 30
26
ivi., p. 32
27
ivi., p. 15
28
ivi., p. 16 59
2nd part: sequency intervention
| 3. PA R T E I I : SEQUE NZI A LI T à DE LL ’IN TERV EN TO | Parte II: secuencias de la intervención
Los ejes que constituyen la estructura de La Portera y ne definen los accesos principales son la calle Mayor, antigua conexión con Requena, y la calle Real. La nueva carretera nacional n. 330 representa hoy en día el nuevo enlace entra Requena y La Portera; pasa tangente a La Portera y justo en este punto corta la montaña, dejando hacia el pueblo un recodo de la sierra que cierra a Oeste la valle. El pueblo se conecta con la campaña a través de unas carreteras secundarias, dispuestas de manera trasversal con respecto a la espina calle mayor-calle Real, estableciendo un ritmo de mirada y conexión con el paisaje. Se identifica una nueva propuesta para las carreteras principales. La calle Mayor vuelve a pasar por su antiguo trazado, al Sur de las contrucciones, dibujando de esta manera la nueva plaza y punto central del pueblo en frente a la iglesia y siendo así la más importante entre las dos carreteras: la calle Real por consiguiente vuelve al papel de ausilio y suporte. Por un lado de la nueva plaza se eleva el centro administrativo del nuevo complejo que, a empezar de este punto, se desarrolla de manera longitudinal entre las dos calles. El proyecto se une al ritmo interior propio de cada manzana, tocado por los muros de los corrales de los cuales se conserva solo el trozo trasversal a la carretera. Sin la parte del muro que cierra el corral hacia el exterior, se establecen nuevas conexiones con el paisaje. Entre los muros transversales se componen según varios niveles los volumenes, cada uno con una propia y especifica función. Si el muro se pone como elemento estructural del proyecto, la sección entre dos muros es en cambio lo que lo genera. Cada paso de un muro a otro fija un momento del paisaje, devolvendonos una imagen inmóvil y consoladora para el hombre. Todavía el paisaje es un organismo vivo. Cruzar un muro detrás de otro y coger cada paso un fragmento de este paisaje, nos lleva al final del recorrido a percibirlo y entenderlo dinámicamente como suma total de los momentos; se construye entonces la memoria de este lugar. 62
Bearing spine and main access roads of La Portera are the Calle Mayor, the oldest link between Requena and La Portera, and Calle Real. Currently the connection between Requena and La Portera is defined by high-way n. 330, that passes tangentially to the country, at the west, crossing the mountain ridge and forming a sac of forest that overlooks the village. The town is connected with the countryside to the east through a series of secondary roads, arranged radially in relation to main axis, beating out a rhythm of opening and connection with the landscape. It is identified a new framework for the two longitudinal streets. The Calle Mayor recovers its main role, retaking the ancient track to the south of the country and thus defining a new centrality near the parish church: now the Calle Real takes a secondary role, to help and support the Calle Mayor. On the new square there is the administrative center of the new complex, which from this point is developed longitudinally, between these two streets. The project takes shape matching at the internal rhythm of the isolates dictated by the walls of corrals, keeping only the transversal element. By removing the wall of the end of each enclosure is setting out further moments of contact and connection with the rural landscape. Between the walls are articulated volumes at various levels, each one contains a specific function. The wall is the load and structural element of the intervention, instead the section of the interval is what generates the project. Each change to another sector, captures a moment of the landscape, bringing back momentarily a still image, crystallized comforting to humans. But the landscape is a living organism. Pass through a wall after another and fix each time a piece of this landscape brings us, once you reach the end of the path, that had indeed perceived dynamically as the sum of moments, creating within us the memory of this place.
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Strategies in the territory
3 . 1 S T RAT E GI E NE L TERRITORIO
Estrategias a nivel territorial
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Spina portante e principali vie di accesso de La Portera sono la calle Mayor, collegamento più antico tra Requena e La Portera, e la calle Real. Attualmente il collegamento tra Requena e La Portera è definito dalla carretera nacional n. 330 che passa tangenzialmente al paese, verso Ovest, tagliando il crinale montuoso e formando una sacca boschiva di risulta che si affaccia sul paese. Il nucleo urbano si collega con la campagna verso Est attraverso una serie di strade secondarie, disposte a raggiera rispetto alla spina principale, scandendo un ritmo di apertura e di connessione con il paesaggio. Si individua un nuovo assetto per le due strade longitudinali. La calle Mayor si riappropria del suo ruolo principale, recuperando l’antica traccia a sud del paese e definendo così una nuova centralità in prossimità della chiesa parrocchiale: la calle Real assume ora un ruolo secondario, di ausilio e supporto alla calle Mayor. Sulla nuova piazza si affaccia il centro amministrativo del nuovo complesso, che da questo punto si sviluppa longitudinalmente, compreso tra queste due strade. Il progetto prende forma intonandosi al ritmo interno degli isolati dettato dai muri dei corrales, mantenendone solo l’elemento trasversale. Eliminando il muro di chiusura di ogni recinto si stabiliscono ulteriori momenti di contatto e connessione con il paesaggio agricolo. Compresi tra i muri si articolano su vari livelli i volumi contenenti ciascuno una funzione specifica. Il muro è l’elemento portante e strutturale dell’intervento, la sezione dell’intervallo è invece ciò che genera il progetto. Ogni passaggio da un setto all’altro, coglie un attimo del paesaggio, restituendone momentaneamente un’immagine fissa, cristallizzata, confortante per l’uomo. Ma il paesaggio è un organismo vivo. Oltrepassare un muro dopo l’altro e fissare ogni volta un frammento di questo paesaggio, ci porta, una volta raggiunta la fine del percorso, ad averlo in realtà percepito dinamicamente come somma di attimi, costruendo dentro di noi la memoria di questo luogo.
63
OLTRE IL MURO. Sequenza architettonica di paesaggi vinicoli a La Portera
Ill.41. La valle de La Portera, vista dai primi insediamenti 64
3. Parte II: sequenzialità dell’intervento
Nuovo assetto dell’ aldea La Portera è una piccola aldea appartenente alla comarca di Requena, conta 145 abitanti e come ogni frazione di questa area geografica trova il suo sviluppo in una valle compresa tra le catene montuose dell’anticrinale e si caratterizza per forte presenza di coltivo a vigna. Tracce evidenti e strutturali del nucleo urbano sono la calle Mayor, collegamento più antico tra Requena e La Portera, e la calle Real: entrambe le strade, con andamento Nord-Sud, segueno la direzione principale del collegamento Requena-La Portera, attualmente definito dalla carretera nacional n. 330, realizzata evidentemente senza considerare la naturale orografia del territorio, in quanto zone montuose e valli vengono attraversate da questa subendo un taglio e una separazione drastica. Questa nuova strada non attraversa il paese, bensì passa tangenzialmente ad esso, verso Ovest, attraversando il crinale montuoso a cui si accosta il nucleo urbano, diventando un ulteriore limite in questa direzione e formando una sacca di risulta tra la sua stessa traccia e le strade Mayor e Real, che al contrario costituiscono insieme la spina principale de La Portera e sono le uniche vie di accesso al paese dalla carretera nacional. Questa sacca residuale, a carattere principalmente boschivo in quanto risulta della zona montuosa, vede un tentativo di insediamento nella parte nord del paese; verrà mantenuta come tale e costituirà un vero e proprio fronte naturale, un affaccio verde a cui il paese stesso e il progetto proposto guarderanno e si relazioneranno. La valle de La Portera con i suoi vigneti si estende nelle altre tre direzioni, principalmente verso Est, fino ad addossarsi anch’essa ad un altro crinale montuoso. Il nucleo urbano si collega con la campagna attraverso una serie di strade secondarie, disposte a raggiera rispetto alla spina principale, scandendo un ritmo di apertura e di connessione del paese verso il paesaggio. Solo tre di queste vie proseguono come collegamenti con altri punti del territrorio, le atre invece o terminano inconcluse nell’incontro con la campagna o circondano gli isolati, sottolineando il passaggio tra urbano e agricolo.
65
OLTRE IL MURO. Sequenza architettonica di paesaggi vinicoli a La Portera
Ill.42. Sequenza di aperture del nucleo urbano verso il paesaggio agricolo
Ill.43. La valle de La Portera: misure, sequenze, recinti
Ill.44. Strategia progettuale: misure, sequenze, recinti 66
3. Parte II: sequenzialità dell’intervento
L’irresolutezza di alcune di queste aperture dell’urbano verso la valle fanno si che la parte di campi prossimi al paese assumano un ruolo del tutto incerto tra preservare questa fascia di territorio per un futuro sviluppo urbano o proseguire con i vigneti fino a ridosso del paese, ristabilendo il pieno contatto con la campagna e il carattere di nucleo urbano rurale che compete a La Portera. La strategia progettuale appoggia e fa sua questa ultima opzione, potenziando il carattere rurale del paese in ogni suo intervento, rispettando ritmi e aperture del paese verso il paesaggio agricolo e ripristinando quei punti di contatto che erano andati persi: vengono così risolti tutti i punti di incontro tra il paesaggio e nucleo urbano consolidato, un nuovo assetto delle due strade principali longitudinali individua una possibile espansione consona alla forma insediativa del paese. L’esistente cantina soccombe di fronte al pieno rispetto di questi principi, in quanto, come la carretera nacional, risulta un momento di forte degrado e impatto inserito in questo paesaggio rurale, slegato da qualsiasi lettura territoriale. Così la calle Mayor si riappropria del suo ruolo principale, recuperando la traccia ormai dimenticata a sud del paese: diventa la strada principale che dalla carretera nacional porta all’interno de La Portera, attraversa la piazza antica fino a formare successivamente quella che sarà la nuova piazza, luogo accentratore del rinnovato assetto dello spazio aperto del nucleo urbano. La strada prosegue verso Sud diventando per il progetto il segno di passaggio dal costruito ai vigneti, fino a ricollegarsi in un secondo momento con la strada nazionale. La calle Real, sulla quale si affaccia il fronte naturale della montagna a Ovest, assume ora un ruolo secondario, di ausilio e supporto alla calle Mayor, in quanto corre parrallelamente ad essa, aiutandola a definire la conformazione della nuova piazza e trovando inizio e fine nei punto dove la strada principale segna gli accessi al nucleo urbano. Con questo nuovo assetto della spina portante del paese, si forma una nuova centralità in corrispondenza della chiesa parrochiale e sulla quale si affaccerà il centro amministrativo del nuovo complesso; da questo punto si sviluppa longitudinalmente, compreso tra queste due strade, la parte di terreno su cui appoggia il progetto, riprendendo e potenziando la misura ed il ritmo con cui il paese si rivolge, aprendosi, verso la valle. Se trasversalmente il progetto lavo67
OLTRE IL MURO. Sequenza architettonica di paesaggi vinicoli a La Portera
Ill.45. La valle de La Portera: spazio aperto
Ill.46. Strategia progettuale: spazio aperto
68
3. Parte II: sequenzialità dell’intervento
ra sul recupero di questo contatto con il territorio naturale, longitudinalmente permette la completa attraversabilità, a livello di spazio pubblico, scandendo e guidando il passaggio dall’urbano all’agricolo.
Ill.47. La tipologia del corral a La Portera: misure, sequenze, recinti
Ill.48. Lettura schematica della tipologia del corral
69
OLTRE IL MURO. Sequenza architettonica di paesaggi vinicoli a La Portera
Ill.49. Planivolumetrico e sequenza di sezioni generative del progetto
70
3. Parte II: sequenzialità dell’intervento
Dal corral al muro Se da una parte il nucleo urbano consolidato presenta, come abbiamo detto, una serie di aperture verso il terreno agricolo, scandita dalle strade che intercorrono tra gli isolati, dall’altro è altrettanto forte la chiusura e l’introversione caratteristica di ciascun isolato. Causa di questa introspezione è sicuramente la tipologia insediativa caratteristica delle costruzioni rurali di questo territorio e in particolare de La Portera; qui diversi corrales, più o meno articolati e diversamente composti, si susseguono uno all’altro all’interno di ogni isolato, creando un ritmo interno battuto dai muri, componenti di questi recinti, che attraversano trasversalmente ciascuna manzana (isolato). Il progetto prende forma intonandosi al ritmo interno dei corrales, mantenendone la struttura trasversale; allo stesso tempo si riallaccia alla serie di aperture verso la valle, eliminando il muro di chiusura di ogni recinto e creando ad ogni intervallo tra i muri trasversali un momento di contatto e connessione con il paesaggio agricolo. All’interno degli intervalli, considerati gli spazi compresi tra due muri, si articolano su vari livelli i volumi contenenti ciascuno una funzione specifica, e ciascuno dotato di uno sguardo privilegiato, direzionato o verso la montagna o verso l’agricolo. Il progetto si radica nel terreno stabilendo di volta in volta il giusto rapporto con il paesaggio, agricolo o montuoso: in questo modo la transizione da un paesaggio all’altro viene mantenuta e proprio in questo passaggio si integra l’edificio. Mentre ogni volume privilegia una direzione di sguardo, il percorso che attraversa come spazio pubblico l’intero complesso, mantiene sempre entrambe le visuali: se verso Ovest lo sguardo si scontra immediatamente con il verde boschivo, verso Est la visuale,inquadrata lateralmente dai muri, domina longitudinalmente i vigneti fino alle montagne, le quali guidano la vista verticalmente fino al cielo. Se il muro è l’elemento portante e strutturale dell’intervento, la sezione dell’intervallo diventa generativa del progetto. La struttura del complesso aiuta l’uomo ad avvicinarsi all’ordine naturale: ogni intervallo, ogni passaggio da un setto all’altro, coglie un attimo di questo paesaggio, restituendocene momentaneamente un’immagine fissa, cristallizzata, confortante per l’uomo abituato a concepire il paesaggio come qualcosa di immobile. Spesso ricordiamo solo una fotografia di un determinato momento, ma quell’attimo è il risultato di tutti i momenti anteriori, memoria di tutti i segni passati29.
29
Turri E., Antropologia del paesaggio, Marsilio Editori, Venezia 2008, p. 84 71
OLTRE IL MURO. Sequenza architettonica di paesaggi vinicoli a La Portera
Ma il paesaggio è un organismo vivo, soggetto a incessanti mutamenti e mosso da diversi tempi, come quello dei grandi mutamenti e delle grandi trasformazioni geologiche, come il ritmo proprio del paesaggio dato dalle stagioni, dai cambiamenti quotidiani, o ancora quella tensione costante che lega in ogni istanante un fatto ad un altro30. Passare da un intervallo all’altro, oltrepassare un muro dopo l’altro e fare tesoro ogni volta di un attimo di quel paesaggio, ci porta, una volta raggiunta la fine del percorso, ad aver perce-
Ill.50. Fotoinserimento
30
72
Turri E., op. cit., p. 83
3. Parte II: sequenzialità dell’intervento
pito dimanicamente come somma di attimi questo paesaggio, ci porta ad interiorizzare attraverso la memoria di queste immagini l’esperienza di questo preciso contesto, naturale e urbano. Urbano perchè allo stesso modo l’edificio cristallizza dentro ogni volume una sola e precisa funzione. Attraversando il progetto si avrà una esperienza completa, a livello visivo, tattile ed olfattivo, tanto della pratica di fare il vino come del suo paesaggio agricolo di riferimento e della cultura del luogo.
73
El proyecto crece y se genera desde
The project is generated from the
el terreno, buscando la justa integra-
ground and by this takes form, see-
ción con el paesaje y la sostenibili-
king integration with the landscape
dad de la producción.
and the sustainability of the produc-
El programa del complejo se desa-
tion process.
rolla según tres áreas funcionales. La
The complex is declined in three
más importante, la industrial, se com-
functional aspects. The main one is
pone por espacios auxiliarios para la
industrial, consisting of management
gestion, fermentación y elaboración,
auxiliary areas, processing areas,
crianza, embotellado y producto
aging, bottling and shipping areas. A
acabado. El aspecto cultural incluye
cultural aspect, includes educational
áreas de formación, exposición y co-
areas, exhibition and training rooms.
nocimiento. Por fin el caracter social
A social character which provides
que incluye espacios para el ocio y
receptive spaces, leisure and en-
la estancia.
tertainment areas, in addition to the
El proyecto se pone como transición
treatment of public space and of the
desde el caracter úrbano del pue-
environment.
blo hasta el paesaje natural de los
The project is developed in a gradual
campos, gracias a la posibilidad de
transition from the urban to the lan-
recorrer el intero complejo a nivel de
dscape through the complete practi-
espazio público, además de tratar
cability of all public open spaces that
el recorrido que transforma la uva en
make it up. The path leads from the
vino y en producto acabado, hasta
vineyard, to the must, to the wine, to
llegar a ser conocido y entendido por
the product and till a product aware-
los visitantes, a través de una contro-
ness by the public, through a control-
lada sucesion de vistas al exterior o al
led sequence of internal or external
interios del edificio y del contacto di-
views and direct or indirect contact of
recto o no con los espacios del vino.
the spaces of the wine. Through the
Recorrer el proyecto nos lleva a tener
project will have a complete expe-
un conocimiento visual, táctil y olfati-
rience, a visual, tactile and olfactory,
vo tanto de la cultura y de la practica
about the practice of making wine as
de hacer el vino, como de su paisaje
its references to agricultural landsca-
y de la cultura de este lugar.
pe and culture of the place.
74
|
The project
3 .2 I L PROGET TO
El proyecto
|
Il progetto si genera dal terreno e da questo prende forma, ricercando l’integrazione con il paesaggio e la sostenibilità del processo produttivo. Il complesso si declina secondo tre aspetti funzionali. Quello principale industriale, composto da aree ausiliari di gestione, aree di elaborazione, invecchiamento, imbottigliamento e spedizione del prodotto. Un risvolto culturale, comprensivo di aree didattiche, espositive e formative. Un carattere sociale, che prevede spazi recettivi, di ozio e svago, oltre al trattamento dello spazio pubblico e dell’intorno. L’intervento sviluppa in maniera graduale sia la transizione dal contesto urbano a quello paesaggistico, attraverso la totale percorribilità pubblica di tutti gli spazi aperti che lo compongono, sia il percorso che dai vigneti porta all’uva, al mosto, al vino, al prodotto finito e alla consapevolezza del prodotto da parte del pubblico, attraverso una controllata successione di visuali interne o esterne e contatti diretti o indiretti degli spazi del vino. Attraversando il progetto si avrà un’esperienza completa, a livello visivo, tattile ed olfattivo, tanto della pratica di fare il vino come del suo paesaggio agricolo di riferimento e della cultura del luogo.
75
OLTRE IL MURO. Sequenza architettonica di paesaggi vinicoli a La Portera
Ill.51. Vista generale del progetto dal paesaggio 76
3. Parte II: sequenzialità dell’intervento
Programma funzionale La progettazione del complesso si declina nei seguenti aspetti funzionali: quello principale industriale, uno a risvolto culturale e uno di carattere sociale. Ricercando l’integrazione nel paesaggio si preserva e rafforza l’intorno e la sostenibilità del complesso. La parte industriale risulta il cuore dell’intero programma, ovvero la causa dell’intervento, gli spazi ad essa relazionati si compongono per: - Area Ausiliare (700 m2 ca.): magazzino e deposito mezzi agricoli, casa del guardiano (preesistenza); zona di ricezione delle uve e che permetta carico e scarico merce, tale spazio deve intendersi agibile da camion (raggio di sterzo 15 metri) e con tettoia; spazi per l’amministrazione centrale dell’impresa e del complesso. - Area di Fermentazione ed Elaborazione (1200 m2 ca.): grande spazio diafano di grandi dimensioni atto ad alloggiare le tinaie di fermentazione e il loro accesso delle bocche superiori, quindi con altezze minime di 8 metri. Lo spazio risulta progettato con una struttura per grandi luci (15 metri) permettendo una giusta organizzazione degli ingombri e garantendo il passaggio di piccoli mezzi per la gestione delle lavorazioni, inoltre essendo uno spazio di lavoro vanno garantite una illuminazione naturale, seppur controllata, e una ventilazione anch’essa naturale per l’espulsione dei gas prodotti durante i processi della fermentazione; magazzini vari per alloggiamento utensili e impianti; laboratorio dell’enologo; un piccolo ufficio; spogliatoio e servizi per i lavoratori.
77
OLTRE IL MURO. Sequenza architettonica di paesaggi vinicoli a La Portera Ill.52. Programma funzionale
78
3. Parte II: sequenzialità dell’intervento
- Area di Invecchiamento (1500 m2 ca.): grande spazio caratterizzato da un microclima costane durante tutto l’anno, sia per temperature che umidità, dove si posizionano le botti in rovere per il riposo dei vini per raggiungere le preziose caratteristiche organolettiche che conferiscono sapori, odori e colore unici. L’illuminazione e l’interferenza con l’esterno devono essere minime anche per sottolineare la sacralità del luogo che risulta piena di intensità emotiva; sono necessari inoltre locali tecnici per gli impianti igrotermici. - Area di Imbottigliamento (500 m2 ca.): spazi concatenati tra loro per le operazioni di travaso, e preparazione del prodotto finale; magazzino refrigerato; macchinari imbottigliamento ed etichettamento; locali lavaggio bottiglie; magazzino per bottiglie e per spedizione prodotto finito. Le parti di interpretazione della cultura del vino si articolano a diversi livelli di approfondimento e fruizione da parte della comunità in loco e/o dei visitatori (1000 m2 ca.). Un primo approccio è al tema è garantito dalla stessa prossimità del paesaggio vitivinicolo, creando spazi che ne favoriscano la percezione e la contemplazione. Altro elemento attrattivo è la possibilità di visita della stessa cantina nelle differenti fasi di lavorazione, ma mantenendo una doppia circolazione che non interferisca con le attività dei lavoratori e che coinvolga il visitatore in prima persona nella sala di degustazione. Passo successivo e di maggior intensità professionalizzante si trova nelle sale adibite a esposizioni, un piccolo auditorium e infine nelle vere e proprie aule di formazione. L’aspetto sociale (800 m2 ca.), meno impegnato rispetto alla formazione, si concretizza nella promozione del turismo rurale, con la presenza di una Hall centrale sia per la gestione del struttura di accoglienza per il soggiorno (10 stanze diversificate per utenza), permettendo una maggiore relazione e sedimentazione della conoscenza del territorio, sia per gli altri aspetti di svago ed ozio, rintracciabili nel centro benessere di vino terapia, la piscina pubblica, il ristorante, la caffetteria e il negozio per la vendita diretta. Il trattamento dello spazio aperto è alla base di tutto l’intervento, creando percorsi e accessi diversificati all’interno del complesso, con una continua relazione tra interno ed esterno e zone di sosta e di contemplazione del paesaggio.
79
OLTRE IL MURO. Sequenza architettonica di paesaggi vinicoli a La Portera
Percorsi e sequenze - Dall’uva al vino La lavorazione dell’uva in vino è un percorso ritmato da scansioni naturali legate al territorio in cui si coltivano le vigne. Nella regione di Utiel-Requena il processo di raccolta e vendemmia inizia a fine agosto e si protrae con celebrazioni popolari fino a metà settembre, avvenimenti molto sentiti dalla comunità locale, trovando però nel caso della cooperativa vinicola Union, una mancata empatia sulla presenza architettonica e del prodotto finale, sostituita ad una logica puramente industriale di minore qualità, fornendo vini da miscela o così detti da “tavola”, tipica del periodo di fondazione 1956. Le uve Bobal e Tempranillo, varietà maggiormente diffuse, vengono raccolte e trasportate nel’area di ricezione, situata a livello stradale e ad una quota massima relativa per facilitarne il trasporto e le successive sequenze di lavorazione. I grappoli vengono fatti passare prima nella diraspatrice e pigiati per estrarne il succo, i resti cadono nella vano di raccolta sottostante, invece il mosto inizia il processo a “cascata”: il flusso viene convogliato nei primi tini di fermentazione, di dimensione maggiore e ad una quota d’ingresso leggermente ribassata rispetto alle prime operazioni di pulitura, successivamente il mosto viene mosso per pressione stessa del fluido nei tini di deposito. Questi primi passaggi avvengono nelle navate di grande luce e semi-interrate, la grande parete vetrata a sud-est ne garantisce i requisiti di illuminazione mentre la ventilazione circolare è attuata dalle aperture a tutt’altezza presenti parzialmente nella vetrata stessa e dalle bocchette d’aspirazione nella parete opaca del volume, che danno all’intercapedine retrostante per facilitarne l’espulsione dei gas; la finitura del pavimento, in cemento composito,
Ill.53. Sezione costruttiva, area di elaborazione e fermentazione 80
3. Parte II: sequenzialità dell’intervento
e delle canaline di scolo, rispondono ai criteri di resistenza e di facile pulizia per preservare un ambiente igienizzato e privo di qualsiasi contaminazione, tema presente anche per le aperture che sono filtrate da una rete anti-insetti. Da questo punto in poi l’elaborazione del vino si divide in due categorie: i vini giovani, che non richiedono invecchiamento vengono pompati direttamente nell’adiacente area di imbottigliamento, invece i vini di maggior qualità continuano la discesa nel terreno attraverso condutture apposite, arrivando nell’area interrata di invecchiamento in barricaia, dove posso riposare diversi mesi o anni a seconda del tipo di vino, in condizioni termo-igrometriche costanti tutto l’anno grazie all’inerzia termica della terra stessa. L’ambiente è totalmente introverso, solo occasionali patii portano una luce fortemente controllata, che conferisce allo spazio un’atmosfera di sacralità e di memoria della natura, l’andamento variabile dei varchi tra una parete e l’altra suggerisce ulteriormente l’idea di trovarsi in un luogo di trasformazione e la presenza cromatica dei listelli in legno per il controllo settico, come seconda pelle dei soffitti e delle pareti, ne sottolinea la percezione viscerale. Trascorso il periodo necessario le barriques vengono riportate al livello superiore nella zona di imbottigliamento per travasarne il contenuto nelle bottiglie per un ulteriore invecchiamento o per la spedizione e la vendita. I contenitori vitrei vengono immagazzinati in casse negli spazi posti frotalemnte alle navate di elaborazione, e ritrasportati, con l’ausilio di un montacarichi, a livello stradale nella zona di carico scarico comune alla ricezione dell’uva.
81
OLTRE IL MURO. Sequenza architettonica di paesaggi vinicoli a La Portera
Ill.54. Piante ipogee, livello -1(destra) e -2 (sinistra), spazi della produzione
Ill.55. Sezione costruttiva, area di invecchiamento e camera della struttura recettiva 82
3. Parte II: sequenzialità dell’intervento
- Esperienza del luogo L’intervento sviluppa in maniera graduale la transizione da contesto urbano a paesaggistico, mostrandola in maniera diretta attraverso la totale percorribilità pubblica di tutti gli spazi che lo compongono. Questa gradazione trova il principio nella nuova centralità della frazione, la piazza, luogo di riferimento sociale, da qui si incomincia a scoprire la sequenzialità degli spazi che porta all’immersione nel paesaggio agreste. Passando sotto l’edificio dell’Amministrazione si varcano una serie di alternanze di spazi verdi didattici e degli spiazzi di connessione tra la calle Mayor e le due preesistenze. Oltrepassando il primo isolato ancora relazionato ad un contesto urbano, si continua il percorso nell’area di progetto maggiormente legata all’andamento del territorio; il susseguirsi di pareti attraversabili che scandiscono le diverse funzioni del complesso, lo sguardo del pedone è catturato ad ogni passaggio tra le pareti che scandiscono il programma dell’edificio, sviluppato o allo stesso livello, o sopra o sotto, ma mantenendo sempre lo sfondo paesaggistico agreste e boschivo. In ordine all’osservatore viene proposta la visione dell’aule di formazione soprastanti, del patio comune alle sale mostre e conferenza, dalla continuità dei setti della spa nei campi di vigne, dall’affaccio del ristornate, dai volumi delle stanze sopraelevate e dai patii che suggeriscono la presenza della barricaia sottostante, fino alla grande balconata antistante alla parte produttiva e contrapposta al belvedere immerso nelle coltivazioni.
83
OLTRE IL MURO. Sequenza architettonica di paesaggi vinicoli a La Portera
Ulteriore percezione del luogo avviene per mezzo del percorso di visita alla cantina; la hall centrale leggermente ribassata rispetto al piano del percorso pubblico, invita ad entrarvi ed iniziare la scoperta del funzionamento dell’intero processo produttivo. Il visitatore viene accompagnato verso l’ingresso dei lavoratori, rivolto a monte, attraversando la copertura della zona di invecchiamento, discendendo per le scale ad unidirezionali si ha nuovamente la sensazione di addentrarsi nel luogo di creazione del vino fino a fermarsi al livello dei tini, dando la differente prospettiva delle navate viste sempre dall’esterno. Successivamente di continua la discesa per la rampa alla barricaia dove il cambiamento totale d’atmosfera investe il visitatore, imponendo la propria forza di luogo esteso di quiete assoluta e distacco temporale, nel mezzo vi si trova la sala di degustazione, defilata lateralmente e che fuoriesce dalla terra per ricondurre visivamente all’immagine originaria del prodotto: le vigne. Attraversate tutte le scansioni di portali a livello interrato si risale alla hall con un ascensore trasparente che guarda ai tre livelli dell’intervento.
Ill.56. (da destra a sinistra) Alzato SudEst, pianta piano terra e relazioni con il suolo, sezione longitudinale 84
3. Parte II: sequenzialità dell’intervento
Ill.57. Sequenza delle principali sezioni trasversali del progetto 85
Tavole di progetto
The w ine t our | TAV OL A 1 | L A R UTA DE L VIN O | La r ut a de l vino
86
Int e r pr e t a t ions of t he sur ve y | TAV OLA 2 | LET TUR E IN TE R PR E TATIVE | I nt e r pr e t a ci贸n de l t e r r it or io
S t r a t e gie s | TAVO L A 3 | STR ATE G IE | P r opue st a
The pr oj e ct | TAVO L A 4 | IL PR O GE T TO | E l pr oye ct o
Re la t ionship w it h t he gr ound | TAV OLA 5 | RA PPO R TO C O N IL SUO LO | R e la ci贸n con e l sue lo
1st floor | TAV OLA 6 | PIAN TA PR IM O PIAN O | P r im e r a pla nt a
Unde r gr ound floor s | TAV O L A 7 | L IVE L L I IPO G E I | N i vel es h i pog eos
S e que nce of se ct ions | TAV OLA 8 | SE Q UE N Z A DI SE Z IO N I | S e cue ncia de se ccione s
Const r uct ive se ct ions | TAV OLE 9 - 10 - 11 | SE Z IO N I C O STR UT TIVE | S e ccione s const r uct iva s
Llegar a un diseño completo de una
The attainment of a planning of a
bodega, junto a sus problemas ar-
winery, characterized from various
quitecturales, sociales y culturales,
architectural and social themes, that
que se ponga en continuidad con el
results in continuity with the territory,
territorio, depende inevitablemente
it is undeniably tied to the under-
de una profunda comprension de las
standing of the dynamics that cha-
leyes de este contexto y de su pai-
racterize it. Only thanks to a physical
saje.
presence in the place and a com-
Solo viviendo en el lugar y gracias a
parison on the architectural deve-
una experiencia directa del desarrol-
lopments on the theme “the culture
lo del tema de la cultura del vino, a
of the wine”, faced during the year
lo largo del año de estudios Erasmus
of experience Erasmus in the Valen-
en España (Valencia) donde ya hace
cian region, in Spain where already
años se abrí el debate sobre la rela-
the debate is open for a long time
ción entre paisaje y arquitectura del
on the relationship between territory
vino, conseguimos estudiar, cono-
and architectures of this theme, it has
cer, juzgar y reflexionar sobre la ma-
succeeded in deepening, to under-
nera de entender esta relación en los
stand, to criticize the good and bad
ejemplos españoles, buenos y me-
approaches, proper of the Spanish
nos, entendiedo todo lo que nece-
culture, intending what the today’s
sita hoy en día una bodega pero sin
necessities of a wine cellar were, but
olvidar que la exigencia de tansfor-
without forgetting its cultural and terri-
mación llega siempre del contexto
torial roots that express this demand
social, cultural y territorial.
of transformation of it.
El proyecto responde a los proble-
The complex responds to the need of
mas de identidad de la bodega y de
identification of the winery for the pro-
la imagén del producto, además crea
duction and promotion of the product,
una relacón fuerte con el paisaje en-
but it is set in continuous relationship
señando con el arquitectura la origén
with the place in which is found and
del producto, sin buscar y proponer
from which is born, emphasizing the
una propia y nueva relidad que resul-
strength of the intervention of it or re-
taría falsa y estropearía el territorio.
vealing in the architectural act the origin of the product, without imposing a parallel reality.
106
|
Conclusions
CO N C LU SION I
Conclusiones
|
Il raggiungimento della progettazione di un complesso enologico, caratterizzato da varie tematiche architetturali e socio-culturali, che risulti in continuità con il territorio è innegabilmente legato alla comprensione delle dinamiche che caratterizzano questo contesto. Solo grazie ad una presenza fisica nel luogo ed un confronto sugli sviluppi architettonici sul tema “la cultura del vino”, affrontato durante l’anno di esperienza Erasmus in Spagna (Valencia) dove già da tempo è aperto il dibattito sulla relazione tra territorio e architettura del vino, si è riusciti ad approfondire, comprendere, criticare gli approcci da seguire e non, propri della cultura spagnola, intendendo quali fossero le necessità odierne di una cantina, ma senza dimenticarne le radici culturali e territoriali che esprimono questa esigenza di trasformazione. Il complesso risponde alle tematiche di identificazione della cantina per la produzione e promozione del prodotto, si pone in continua relazione con il luogo in cui si trova e dal quale nasce, enfatizzandone la forza dell’intervento ovvero palesando nel gesto architettonico la provenienza del prodotto, senza imporre una realtà parallela.
107
Ill. 1. La ruta del vino, inquadramento territoriale, pp.18-19 Ill. 2. La Meseta di Requena-Utiel, mappa morfologica, p.20 Ill.3. Profilo topografico de la Meseta di Requena-Utiel, dove risalta l’identità geografica de la comarca, direzione Est-Ovest, p.20 Ill.4. La Meseta di Requena, foto aerea, p.20 Ill.5. La Meseta di Requena-Utiel, ortofoto, p.23 Ill.6. Mappa Hispania Novella, Berlinghieri, 1482, p.24 Ill.7. Estratto della mappa di Tomás López, Tierra de Requena II,1792, p.24 Ill.8. Croquis del territorio di Requena durante Guerra d’Indipendenza, servizio Geografico dell’Esercito, 1811, p.24 Ill.9. Rete infrastrutturale, XVII secolo, p.26 Ill.10. Rete infrastrutturale, 1997, p.27 Ill.11. Uso agricolo e forestale del suolo, meseta di Requena-Utiel, p.29 Ill.12. Evoluzione demografica di Requena-Utiel secondo le tappe economiche, dal 1560 al 1990, p.29 Ill.13. Ricostruzione di un lagar scavato nella pietra de la Solana de las Pilillas, Requena (Valencia), disegno E. Díes Cusí, p.30 Ill.14. Anfore de Los Villares: 1. e 2. Iberiche, 3. Punica, 4.Romana, p.30 Ill.15. Localizzazione dei vigneti di Requena-Utiel nel 1752, Catastro de Ensenada, cartografia Juan Piqueras, p.32 Ill.16. Cantine cooperative di Utiel-Requena e destinazioni delle loro produzioni, 1997, p.32 Ill.17. Casas de Pradas, trullo de Aniceto, fronte di accesso, p.33 Ill.18. El Renegado, trullos, vasche di elaborazione, p.33 Img.19. El Renegado, trullos, vasche di elaborazione, p.33 Img.20. Bodega Casa de la Noria, Utiel, XX secolo, p.34 Img.21. Bodega Redonda, XX secolo, p.34 Img.22. La Portera, foto aerea, p.35 Ill.23-24. La Portera, foto di Mario Guillamón Vidal, 1959 - 1986, p.36 Ill.25. La Portera, foto attuale nei primi insediamenti, p.36
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I NDI CE DE LLE IMMAGIN I
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Ill.26. La Portera: vista panoramica dai terreni agricoli, sulla destra il nucleo urbano e sulla sinistra la attuale cantina La Union, p.36 Ill.28. Uso agricolo e forestale del suolo, Portera y Pedrones, p.38 Ill.29. Valle de La Portera, ortofoto, p.39 Ill.30. Percorso Requena-LaPortera, relazioni e connessioni, p.40 Ill.31. La Portera, soglie storiche, nucleo urbano, infrastrutture e vigneti, p.41 Ill.32. Estratti del catastro Marqués de la Ensenada, 1752, p.43 Ill.33. Esempio di casas de campos con corrales del XVIII secolo, Catastro de la Ensenada, p.44 Ill.34. Processo costruttivo di un muro con la tecnica del tapial, p.44 Ill.35. Esempio di casas de campos con corrales del XVIII secolo, Catastro de la Ensenada, p.45 Ill.36. Corral de Periquín Cañá Grande Lucio y Pedro López Cano, p.47 Ill.37. Cantina vinicola cooperativa Union, La Portera, p.50 Ill.38. Viaggio formativo della Universidad Politécnica di Valencia, le cattedrali del vino, La Rioja e Ribera del Duero, p.52 Ill.39. Dall’alto verso il basso: cantina Marqués de Riscal di F. Gerhy, cantina Ysios di S. Calatrava, cantina Portia di N. Foster, p.55 Ill.40. Processo di produzione del vino, schema generale di funzionamento, p.58 Ill.41. La valle de La Portera, vista dai primi insediamenti, p.64 Ill.42. Sequenza di aperture del nucleo urbano verso il paesaggio agricolo, p.66 Ill.43. La valle de La Portera: misure, sequenze, recinti, p.66 Ill.44. Strategia progettuale: misure, sequenze, recinti, p.66 Ill.45. La valle de La Portera: spazio aperto, p.68 Ill.46. Strategia progettuale: spazio aperto, p.68 Ill.47. La tipologia del corral a La Portera: misure, sequenze, recinti, p.69 Ill.48. Lettura schematica della tipologia del corral, p.69 Ill.49. Planivolumetrico e sequenza di sezioni generative del progetto, p.70 Ill.50. Fotoinserimento, p.72
109
Ill.51. Vista generale del progetto dal paesaggio, p.76 Ill.52. Programma funzionale, p.78 Ill.53. Sezione costruttiva, area di elaborazione e fermentazione, p.80 Ill.54. Piante ipogee, livello -1(destra) e -2 (sinistra), spazi della produzione, p.82 Ill.55. Sezione costruttiva, area di invecchiamento e camera della struttura recettiva, p.82 Ill.56. (da destra a sinistra) Alzato SudEst, pianta piano terra e relazioni con il suolo, sezione longitudinale, p.84 Ill.57. Sequenza delle principali sezioni trasversali del progetto, p.85
110
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I NDI CE DE LLE TAV OLE
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Tavola 1. La ruta del vino | The route of wine | La ruta del vino | Tavola 2. Letture interpretative | Interpretations of the survey | Interpretaci贸n del territorio | Tavola 3. Strategie | Strategies | Propuesta | Tavola 4. Il progetto | The project | El proyecto | Tavola 5. Rapporto con il suolo | Relationship with the ground | Relaci贸n con el suelo | Tavola 6. Pianta primo piano | 1st floor | Primera planta | Tavola 7. Livelli ipogei | Underground floor | Niveles hipogeos | Tavola 8. Sequenza di sezioni | Sequence of sections | Secuencia de secciones | Tavola 9. Sezioni costruttive | Constructive sections | Secciones constructivas | Tavola 10. Sezioni costruttive | Constructive sections | Secciones constructivas | Tavola 11. Sezioni costruttive | Constructive sections | Secciones constructivas |
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VOLUMI Aguilar I., Historia del ferrocarril en las comarcas valencianas. La plana Utiel-Requena, Generalitat Valenciana Canselleria d’infrastructures i trasport, Valencia 2008 Turri E., Antropologia del paesaggio, prefazione di Farinelli F., Marsilio Editori, Venezia 2008 Cárcel Ramos A., La Aldea de la Portera Requena, Valencia 1981 Catastro Marqués de la Ensenada, Archivo Municipal de Requena, 1752 El catastro de Ensanada: magna averiguación fiscal para alivio de los Vasallos y mejor conocimiento de los Reinos (1749-1756). Meseta de Requena-Utiel 1752-2011, exposición en la Iglesia de Santa María de Requena, Ayuntamiento de Requena, Requena 2011 Catastro vitícola y vinícola: denominación de origen Utiel-Requena, Ministerio de Agricultura, Madrid 1997 Domenech F., 50 aniversario Fiesta de la Vendimia, Domenech, Valencia 1997 Espuelas F., El claro en el bosque, Reflexiones sobre el vacio en arquitectura, Fundación Caja de Arquitectos, Barcelona, 1999 Farinelli F., Geografia. Un’introduzione ai modelli del mondo, Einaudi editore, Torino 2003 Hernández López C., Calles y Casas en el Campo de Montiel. Hogares y espacio doméstico en las tierras de el bonillo en el siglo XVIII, Instituto de estudios albacetenses “Don Juan Manuel” de la excma. Diputación de Albacete, Albacete 2007 Martínez Bermell F., Arte en la viña y el vino, Fomento del Arte Bodega Honda, Requena 1994 Mata Parreño C., El vino de Kelin: introducción a las práticas agrícolas y ganaderas de época ibérica en òla comarca de Requena-Utiel, Consejo Regulador de la Denominación de Origen Utiel-Requena, Requena 1997 Molina I., Monumento Nacional a la Vendimia, Artes Gráficas Molina, Requena 1953 Pardo Pardo F., Museo municipal de Requena: la viña y la bodega en el campo de Requena, Ayuntamiento de Requena, Requena 2000 Piqueras Haba J., Centro de Estudios Requenenses, La Meseta de Requena-Utiel, Imprenta Govi, Requena 1990 Pirazzini V., Cantine, Motta Architettura, Milano 2008 Rossetti M., Cantine: Tecnologie Architetture sostenibilità, Maggioli Editore, Repubblica di San Marino 2011 Rosselló i Verger V. M., 55 ciutats valencianes, Universitat de València Secretariat de Publicacions, Valencia 1984 Turri E., Antropologia del paesaggio, Marsilio Editori, Venezia 2008 Zingarelli N., Dizionario della lingua italiana, Zanichelli, Milano 1970
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BI BLIOGRAF IA
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RIVISTE E ARTICOLI Casamonti M., «Wineries: from parts of buildings to portions of the landscape», Area. Rivista di architettura e arti del progetto, 2011, n. 117 (luglio/agosto), pp. 2-172 editoriale Di Giuliomaria P., «Le Forme del vino», Gambero Rosso, 2010, Ottobre, http://www.cattedralidelvino.it/r/articolo%20rivista%20Gambero%20agosto.pdf , p. 76-83 Gosálvez P., « Seis sueños de arquitectura y vino», El País, 2006, 21 Octubre, http:// elpais.com/diario/2006/10/21/viajero/1161464226_850215.html Millanes Mato A., «¿Arquitectura de pasarela? », http://www.lehman.cuny.edu/ciberletras/v12/millanesmato.html Muñoz Navarro D. & Urzainqui Sánchez S., El camino real de Valencia a castilla, Generalitat Valenciana Canselleria d’infrastructures i trasport, Valencia 2011 Pearman H., «The incredible new architecture of wine: a publishing phenomenon», The World of Fine Wine magazine, 2006, issue #9, http://www.hughpearman.com/2006/05. html Piqueras Haba J., La estación de viticultura y enología de requena, 1911-2011: un siglo al servicio del sector vitivinícola, la formación de enólogos y el fomento del cooperativismo, Publicaciones de la Universidad de Valencia, Valencia 2011 Rella M., «Rioja, Appuntamento con gli archistar», Gambero Rosso, 2011, Aprile, http:// darien.es/ImagenesArticulos/articulo_it.pdf, p. 75-82. Rocchi Balbi E., «Archistar e investimenti milionari», Il Caffè, 2009, 18 Ottobre, http:// epaper3.tagesanzeiger.ch/ee/ilca/_main_/2009/10/18/015/, p.15 Rossetti M., «Cantine d’autore», Costruire, 2010, Agosto, p. 59-66 Tortorelli F., «Progetti DiVini», Gambero Rosso, 2010, Agosto, http://www.cattedralidelvino.it/r/72-77_venezia.pdf, p. 72-77
SITI http://www.arquideas.com http://blog-arq.com/2012/04/30/la-arquitectura-del-vino http://www.cattedralidelvino.it/ http://www.paesaggio.net/cantine.asp http://www.thewinetraveller.it/page-architettura-e-design.html
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RINGRAZIAMENTI Si ringrazia la Professoressa Ilaria Valente per aver creduto fin dall’inizio in questo progetto estero, appoggiandoci con fiducia in ogni fase del percorso. Si ringrazia il Professore Diego Carratalá Collado, docente presso la Universitat Politècnica de València, per averci appoggiato, seguito e cresciuto tanto nell’atto progettuale come nell’esperienza formativa estera. Si ringrazia l’Arch. Mauro Marinelli per il prezioso aiuto e costante appoggio sia morale che di tutoraggio. Ringraziamo infine le nostre familie per il supporto e la fiducia riposta in noi durante l’intero percorso universitario.