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Gracias a su arquitectura extremadamente fácil de convertir, la BMW R 18 (original) está predestinada a la personalización. La BMW R se reenfoca en lo esencial: tecnología purista, sin lujos y, por supuesto, el “Big Boxer”.

BMW R18 “SPIRIT OF PASSION”.

Legendaria colaboración con Kingston Custom.

El fabricante alemán BMW presenta una motocicleta perfecta y esa es la R18, una Crusier con un motor Bóxer con la cilindrada más potente jamás hecha por la marca bávara. El motor Bóxer, en el cual la marca deposita su confianza desde 1923, es de doble cilindro y 1802 cc que entrega una potencia de 91 caballos de fuerza y un torque de 158 Nm, prometiendo dinamitar tu adrenalina en la carretera.

Con su aspecto alargado y bajo, muestra un enorme e impresionante motor que rodea su bastidor de acero, regalándonos un diseño hermoso y atemporal. El ronco sonido del motor, pero a su vez armonioso, eriza la piel de quien lo escucha por primera vez.

La moto R18 pertenece a la serie SoulFuel, una colaboración entre BMW Motorrad y personalizadores seleccionados.

Después de Roland Sands, Dirk Oehlerking –piloto de motos, diseñador y artesano–, en colaboracion con BMW Motorrad, le dan un look único a la R18 bautizandola como “Spirit of Passion” bajo la firma de Kingston Custom, conocida sobre el planeta por sus creaciones personalizadas. Pero si lo que esperas es ver una transformación completa en esta belleza, definida por el mismo Dirk como “perfecta”, te vas a quedar esperando.

Si bien, la motocicleta luce muy diferente de su aspecto original, los cambios no fueron a profundidad, pues dice Oehlerking: “El cuadro es 100% original y sofisticado, por lo que no se debe cambiar nada aquí”. Sin embargo, al ver el carenado (el revestimiento externo de la R18), sin duda sabes que estás ante una pieza única y que la mano es de Kingston Custom, pues el diseño es simplemente espectacular. El manillar y el guardabarros fueron hechos completamente a mano, no así el escape, pero también ha sido modificado al estilo Kingston Roadster.

El asiento, las intermitentes Kellerman y el faro delantero LED, también fueron cambiados respecto a las piezas originales. Toda la moto en conjunto nos hace ver la influencia del art decó de los años 20.

Aunque el trabajo de Dirk con BMW no es una novedad, pues tiene en su historia 17 creaciones con la marca alemana, asegura que este proyecto es el más impresionante de su carrera, dejando plasmada su pasión por la creación en una motocicleta que ya era hermosa, pero convirtiéndola en una pieza de arte atemporal.