Ante el problema planteado para el Simposio Baapa, que simplificado en: Qué estamos haciendo bien en cuestiones de uso y/o manejo de nuestros recursos naturales en la Región Oriental, qué necesita de un golpe de timón y hacia donde debemos dirigirnos para asegurar la calidad de vida en esta región? Podemos resumir y concluir cuanto sigue: La realidad de la Región Oriental, que en muchos casos es la de todo el país, nos hace ver los desafíos que tenemos por delante. Entre ellos, si miramos los cambios que se van produciendo en cuestiones climatológicas nos muestran gracias a las investigaciones realizadas por la Facultad Politécnica de la Universidad Nacional de Asunción, cómo en todo el país va aumentando la Temperatura, así como también la frecuencia de días húmedos, y cómo dichos resultados han permitido inferir ciertos modelos como expectativas futuras, que nos indican 2 escenarios posibles y las afectaciones que las mismas tendrán sobre la salud, agricultura, los bosques, el agua y las especies naturales en general. Ambos modelos, aunque difieren en intensidad, representan cambios a los que deberemos acomodarnos y con los que deberemos de aprender a vivir mediante adaptaciones que sobre todo se refieren a cambios de costumbres que lentamente deberemos de ir desarrollando. Qué diferencia se pueden producir si desde ya, incorporamos las recomendaciones que sobre todo se refieren a saber administrar los recursos, tanto los renovables como los no renovables, si estamos hablando de cambios regionales como mundiales? Y salta a la luz que la conciencia de la gente con respecto a los cambios presentes como futuros es lo único que pueda asegurar que el escenario esperado sea el menos impactante, para lo cual el cambio de actitud con respecto al medio en el cual vivimos, reconociendo que somos parte dependiente del mismo y como receptor de nuestras mismas acciones, será lo único que brinde la posibilidad de que aun es posible hacer algo al respecto. El involucramiento de las Organizaciones de la Sociedad Civil que nos ha mostrado tanto WWF como la Cooperativa Colonias Unidas, en una forma organizada y planificada con propuestas y alternativas que tratan de ser innovadoras, pretenden lograr dicho cambio de actitud hacia el uso de los recursos naturales empezando con trabajar contra el éxodo de los propietarios de sus tierras, peleando por la identidad de las regiones como por una valoración real de los mismos partiendo de lo tangible, en forma de incentivos y pretendiendo se extienda hasta el intangible, pero igual importante rol que los mismos cumplen dentro de los ecosistemas como equilibradores en todo el medio. Cooperativas así como otras OSC´s proponen el cambio de actitud hacia el recurso forestal mediante procesos de adecuación a las legislaciones ambientales, con acciones concretas, controladas y graduales como un reconocimiento de que los procedimientos ordinarios no han sido eficientes ni efectivos y que el cambio de actitud es necesario. Resultados favorables, así como otros no tanto pero que de igual forma sirven para rectificar los caminos y que sobre todo, marca el compromiso que tienen estas Organizaciones en sus actividades.
La relación de lo antes mencionado, con lo manifestado por las Autoridades Administrativas que norman el uso del recurso forestal, el INFONA, sobre la aplicación de la Ley que prohíbe las actividades de transformación y conversión de bosques en la Región Oriental, vigente desde hace 6 años, manifestaron como conclusión que existen evidencias de que la aplicación de dicha Ley ha sido efectiva como freno al cambio de uso de suelos forestales, aunque las actividades ilegales no han sido eliminadas, lo cual se constituía en el primer objetivo de dicha Ley. Pero manifestaron, que los otros objetivos propuestos por dicha ley, como la recuperación y mejoramiento del bosques, no se han cumplido, llegando los problemas a transformarse en amenazas incluso sobre el recurso hídrico sobre el cual descargan las actividades productivas, apeligrando asi la continuidad de dichas actividades a futuro. Esta realidad que coindice con la visión de futuro presentada con respecto al acuífero Guaraní, el más importante en cuanto a volumen de agua registrada para la Región oriental y el mas evaluado en toda la región de su área de distribución y donde se presenta nuevamente la necesidad de cambios de actitud hacia el mismo, así como de buenas prácticas ambientales con respecto al recurso, sobre todo en lo que se refiere a eliminación de desechos urbanos, sólidos y líquidos donde prepondera la necesidad de ciudades con plantas de tratamiento de aguas negras, siguiendo las recomendaciones antes mencionadas en la primera presentación. Así también, manifestaron como opinión, que el traslado de las actividades de desmonte hacia la Región Chaqueña se ha recrudecido como consecuencia de dicha prohibición, y que por lo tanto, según sus opiniones, no es recomendable una ley parecida en la región occidental. Esta lectura de las circunstancias que ha llevado al estado de presiones actuales existentes sobre la región chaqueña, por la importancia que tienen, tampoco debe tapar otras cuestiones de relevancia que han favorecido dicho cambio de zona, como ser el beneficioso momento que viene pasando la producción ganadera en cuestiones de precios, sobre todo internacionales, lo que posibilita que las inversiones sean mucho más que interesantes en este rubro, volviendo desleal el conflicto contra la conservación de los recursos forestales que no representan diferencias económicas de relevancia y ante la ausencia de incentivos que las protejan. Así bien, hemos podido observar cómo, los cambios de uso de suelo que se presentan tanto en el sector chaqueño como en la región oriental, se encuentran ligados en materia de salud pública, observando los resultados de investigaciones que nos indican la forma en que vectores de enfermedades íntimamente relacionados a una zona especifica, son transportados y prosperan en otras zonas sin dificultad alguna, más que para los pobladores, que cada vez están más expuestos a enfermedades hasta hace poco restringidos a zonas y microclimas. Y de ello tomamos como ejemplo el caso del hantavirus cada vez mas distribuido en la región oriental, o lo que escuchábamos sobre la leishmaniasis transmitida por vectores de bosque, cada vez más presente en la región chaqueña. Y como esperanzador visión de cambios organizados, hemos visto los resultados de los trabajos de investigación sobre especies más prioritarias para las actividades de restauración en los bosques del Baapa, donde a diferencia de hace 4-5 años, los interesados debían experimentar sobre las mejores
formas de realizar actividades de reforestación con visión de restauración ecológica o seguir con las practicas de monocultivos en base a especies exóticas que eran las que abundaban y existían. Y poder ser realistas observando los resultados presentados por dicha investigación realizada en el marco de una investigación de doctorado, en admitir y registrar que los tiempos de transformación de los ecosistemas hacia ecosistemas en con características de tales, son de 30 años o más. Esta realidad ahora manejada con tiempos comprobables, al igual que mucha de la información presentada en este simposio, nos da un detalle de que nuestras acciones deben ser mas rápidas y eficientes que hasta el momento, al menos para la región oriental, pero que los caminos a ser tomados están marcados en base a las experiencias presentadas, las que representan solo una pequeña muestra de todo lo que se realiza en función de experiencias validas para el muestreo y para la toma de decisiones. Por lo cual, más que nunca ha quedado demostrado, que para la región oriental debemos ser mas eficientes en las acciones y a la par, seguir siendo motivados por reuniones como el 1er Congreso de MA, que nos ha reunido y dado la oportunidad de conocer lo que el Paraguay produce en materia de trabajos intelectuales y lo que resta por hacer y con quienes.