divulgación científica
Anticoagulantes de acción directa Perspectiva práctica desde Urgencias de Navarra. l Anabel Bardón Ranz. Responsable de la Sección de Enfermedades Tromboembólicas de SEMES Navarra y médico de urgencias en el Complejo Hospitalario de Navarra (CHN).
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urante décadas la anticoagulación oral es el tratamiento y prevención de la enfermedad tromboembólica venosa, que agrupa la trombosis venosa profunda y la embolia pulmonar; de la prevención del ICTUS en pacientes con fibrilación auricular; y de la prevención de embolia y trombosis en pacientes portadores de válvulas cardíacas.
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nº 131 | Enero 2021
Este tratamiento se realiza habitualmente con antivitamina K (AVK), cuyo uso es complejo y requiere controles periódicos. La aparición de los nuevos anticoagulantes orales de acción directa (ACOD), como el inhibidor directo de la trombina dabigatrán etexilato (Pradaxa®) en el 2008 [1,2], los inhibidores directos del factor X activado (FXa) rivaroxabán (Xarelto®) [6,7] y apixabán (Eliquis®) [3,4] y edoxabán (Lixiana®) en el 2015 [10.11], aportan ventajas en su administración al ser a dosis fijas y no requerir monitoreo. Esto último ha supuesto un aumento de su uso en la época de la pandemia covid-19, al limitar el número de consultas que se deben hacer para su control y presentar menos interacciones con los fármacos utilizados en el tratamiento de la propia infección. Hay que tener en cuenta que la fibrilación auricular (FA) es la arritmia cardiaca crónica más frecuente y se calcula que afecta a un 1-2% de la población [1,2]. Su prevalencia se incrementa con la edad, de modo que se estima que la padece un 8,5% de la población española mayor de 60 años [3]. La FA confiere a los pacientes que la padecen un riesgo de ictus y embolia sistémica superior en 5 veces al de la población general. Se estima que 1 de cada 5 ictus isquémicos está asociado a la presencia de FA, por lo que uno de los pilares del tratamiento son los anticoagulantes. La utilización de los ACOD se asocia con beneficios e inconvenientes respecto del uso de AVK, que han sido y son materia de amplia discusión en las evaluaciones de las agencias reguladoras.