PROTOZOOS TISULARES 2 AUTORES DOCENTES MICROBIOLOGIA
CLAUDIA CLAVIJO ROMERO MARCELA GOMEZ GARZON ADRIANA JIMENEZ ROJAS DIANA ORTIZ JIMENEZ
PRACTICA PARASITOLOGIA # 3 PROTOZOOS TISULARES (2ª PARTE)
Toxoplasma sp., Plasmodium sp.
Phylum III. Apicomplexa Class 2. Sporozoea Subclass 2. Coccidia Order 3. Eucoccidia o Toxoplasma, Plasmodium OBJETIVO DE LA PRÁCTICA
Al finalizar la sesión Nº 3, el estudiante estará en capacidad de identificar correctamente el agente etiológico de la Toxoplasmosis, bajo el reconocimiento microscópico de algunas formas evolutivas del parasito. Al finalizar la sesión Nº 3, el estudiante estará en capacidad de reconocer en forma apropiada microscópicamente e interpretar las diferentes formas del parasito en extensiones de sangre periférica (FSP y/o Gota gruesa)
Al finalizar la sesión Nº 3, el estudiante estará en capacidad de describir puntualmente los diferentes exámenes de laboratorio que permiten evidenciar la infección con estos parásitos tisulares.
INTRODUCCIÓN
Toxoplasma gondii La toxoplasmosis es una enfermedad zoonótica de distribución mundial producida por el Toxoplasma gondii, parásito que tiene como huésped definitivo a los felinos y como huésped intermediario los humanos y otros vertebrados. El humano se infecta por: 1) la ingestión de carne mal cocida (principalmente de cerdo y cordero) con quistes tisulares, 2) ingestión de agua o alimentos contaminados con ooquistes (liberados en heces de felinos), 3) por transmisión vertical cuando la madre se infecta agudamente, 4) por transfusiones sanguíneas (puede sobrevivir a la conservación en temperaturas de refrigeración de la sangre) y 5) por transplante de órganos. Para entender mejor esta parasitosis es necesario conocer el ciclo de vida del Toxoplasma gondii. Observe y analice el siguiente gráfico sobre el ciclo de vida del parásito:
La mayoría de infecciones por Toxoplasma son asintomáticas y en los casos sintomáticos los signos y síntomas de presentación pueden ser inespecíficos por lo que es fundamental la determinación de anticuerpos contra el parasito para confirmar su diagnóstico. El laboratorio juega, entonces, un papel crucial para determinar la etiología en esta infección parasitaria. La estrategia diagnóstica puede basarse en técnicas serológicas que midan anticuerpos específico en suero, ya que la demostración del parasito en los tejidos suele resultar difícil, en las infecciones graves se debe recurrir a las técnicas de inoculación al ratón y el cultivo celular para las infecciones graves o potencialmente peligrosas, como la infección aguda en la embarazada, la toxoplasmosis cerebral y la infección congénita. PRUEBAS DIAGNOSTICAS DE LABORATORIO: 1) Aislamiento del parásito en cultivos o inoculación en ratón con sangre del paciente con infección aguda. 2) Examen directo: Se observan quistes en biopsia de tejidos, principalmente de músculo esquelético y miocardio, cerebro, ojo. 3) Reacción en cadena de la polimerasa: De utilidad en el diagnóstico de toxoplasmosis congénita, ocular, cerebral y diseminada. 4) Determinación de anticuerpos: Es la prueba más empleada para el diagnóstico de la enfermedad. La IgG aparece 1 a 3 semanas después de adquirida la infección y alcanza su máximo nivel 3 a 6 meses después para luego descender y quedar a bajos niveles por el resto de la vida. La elevación de IgG específicas para Toxoplasma en muestras tomadas con un intervalo de cuatro semanas puede ser utilizada como criterio diagnóstico pero tiene el inconveniente de que retarda el diagnóstico. La detección de IgM
puede ser marcador de infección activa, sin embargo se debe tener precaución en su interpretación debido a que puede permanecer positiva por años después de la infección aguda. Existen diferentes técnicas para evidenciar la presencia de los anticuerpos. El método de referencia emplea el colorante de Sabin y Feldman, pero es una técnica que solo se emplea en laboratorios de referencia porque requiere de la reacción con formas parasitarias vivas. La Inmunofluorescencia Indirecta y la ELISA son las técnicas más empleadas en laboratorios clínicos.
Plasmodium sp. El Plasmodium es el agente etiológico del paludismo, una de las llamadas enfermedades tropicales más prevalente en el mundo. Los ciclos de vida de estos protozoos son muy variados y complejos. El conocimiento de éstos permite realizar una toma de la muestra en el momento adecuado con el fin de poder observar el agente biológico y con ello realizar el diagnóstico certero de la enfermedad.
Ciclo de vida: Etapas exo-eritrocíticas o hepáticas La infección en el hombre inicia cuando el mosquito hembra Anopheles infectado con protozoos del género Plasmodium pica a una persona e inyectan las formas in-
fecciosas llamadas esporozoitos los cuales se introducen en la sangre y van hasta al hígado donde invaden rápidamente las células hepáticas (hepatocitos) allí se reproducen de forma asexual formando el esquizonte hepático dando lugar a miles de merozoitos hasta lograr la ruptura de estas células. Etapas eritrocíticas o sanguíneas Los merozoitos individuales invaden los eritrocitos o glóbulos rojos donde inician un segundo ciclo de reproducción apareciendo los trofozoítos Nuevamente por esquizogénesis se multiplica en el interior de dichas células, formándose el esquizonte hemático. También se rompe la célula, en este caso el eritrocito, liberando nuevos merozoitos, La mayoría de los merozoitos continúan con este ciclo replicativo infectando nuevos eritrocitos, pero algunos se convierten en gametocitos, masculinos y femeninos Etapas en el mosquito. Si el individuo infectado es nuevamente picado por un mosquito, los gametocitos masculinos y femeninos pasan al mosquito. En el interior de éste se diferencian en gametos (4-8 microgametos por cada gametocito masculino y un macrogameto por cada gametocito femenino) y al fusionarse ambos gametos, se producen los zigotos los cuales a su vez, se convierten en oocinetos móviles y alargados, que invaden la pared intestinal del mosquito, donde se desarrollan en ooquistes. Los ooquistes crecen, se rompen y liberan una nueva generación de esporozoitos, que hacen su camino a la glándulas salivares del mosquito. Es en esta fase en la que el Plasmodium puede volver a ser inyectado en el huésped
Diagnóstico de laboratorio: 1) Examen directo: Es la prueba clave en el diagnóstico y consiste en demostrar e identificar en el microscopio directa de las variadas formas del agente infectante en muestras de sangre, para lo cual se debe solicitar una gota gruesa o extendidos de sangre periférica obtenidas en el momento que el parásito transita por la sangre (parasitemia) coloreados con Giemsa o Wright
En la actualidad la técnica de la gota gruesa es el método de elección porque permite analizar hasta 40 veces más cantidad de sangre que el frotis de sangre periférico; su desventaja es que al lisar los glóbulos rojos no permite diferenciar la especie. La determinación de especie requiere una observación detenida de la extensión (frotis) de sangre. Es importante que la revisión microscópica sea realizada por profesionales experimentados idóneos que tengan la capacidad de distinguir los elementos formes de la sangre, de otros microorganismos sanguíneos y de microorganismos o artefactos que puedan estar presentes en la lámina o en el colorante. La técnica de coloración con la substancia fluorescente naranja de acridina o QBC no mejora la sensibilidad del procedimiento, pero sí ofrece mayor precisión en la determinación de especies y en el diagnóstico de infecciones mixtas. Actualmente existen kits para el diagnóstico rápido de P. falciparum con alta especificidad y sensibilidad basados en pruebas de captura de antígeno. 2) Pruebas de biología molecular: Se está experimentando la detección de P. falciparum utilizando métodos de hibridación del DNA del plasmodio marcado radiactivamente y que podrían detectar parasitemia de 0,0001% en 10 mL de sangre. De momento, se llevan a cabo sólo en laboratorios de investigación. 3) Determinación de anticuerpos o métodos serológicos: Tienen valor para estudios epidemiológicos y para sustentar una sospecha en casos de parasitemia baja. También tienen aplicación entre las crisis agudas de P. vivax en las que no se pudo realizar una gota gruesa o cuando ésta fue negativa debido a parasitemias bajas. Títulos de anticuerpos inmunofluorescentes superiores a 1/200 (IgM) serían muy sospechosos de una infección reciente o de una crisis de recaída. Sin embargo, los títulos superiores a 1/64 reflejan una inmunorrespuesta a la infección, pero no confirman necesariamente la presencia de parásitos circulantes. La utilización de un solo antígeno limita la especificidad de la serología; sin embargo, existe una reactividad cruzada entre las especies de plasmodios, aunque en grado de sensibilidad menor que el de la especie utilizada. En pacientes con enfermedad crónica se examina material de medula ósea o punción esplénica.
ACTIVIDADES 1) Observe las siguientes preparaciones microscópicas y grafique todas las formas parasitarias que observe teniendo en cuenta género y especie.
FORMA DE VIDA
Plasmodium falciparum
Trofozoito joven anular
Gametocito
FORMA DE VIDA Trofozoito ameboide
Esquizonte
Plasmodium vivax
TROFOZOITOS (TAQUIZOITOS) DE Toxoplasma EN LÍQUIDO CEFALORRAQUÍDEO CON COLORACIÓN GIEMSA
DESCRIPCION MICROSCOPICA
Tamaño: 4-6 x 2-4 micras Forma: media luna con extremo en punta a) Citoplasma azul pálido b) Microporo c) Núcleo semicentral color rojizo. QUISTE TISULAR (BRADIZOITOS INTERNOS) DE Toxoplasma EN BIOPSIA CEREBRAL CON COLORACIÓN GIEMSA
DESCRIPCION MICROSCOPICA
Tamaño: 10—50 micras Forma: esférica Contienen centenares de Bradizoítos