Historia de la Denominación de Origen del Pisco Chileno
1492
Junto al descubrimiento de América, la vid europea llega al nuevo continente.
1535
Junto a la instalación del virreinato del Perú, la vid comienza a avanzar hacia el Sur.
1549
Pertenecientes al conquistador Francisco de Aguirre, se conocen las primeras plantaciones de vides en los alrededores de La Serena, hacia el valle de Elqui.
1600
Los Valles de Copiapó, Huasco, Elqui, Limarí y Choapa producen vinos de calidad que van a los más importantes centros poblacionales, ubicados de preferencia al Norte.
Siglo
XVII
Ante la dificultad del traslado de vinos, con su consiguiente pérdida, los productores deciden destilarlos, obteniéndose un producto de grandes condiciones, muy apetecido sobre todo en los grandes centros mineros. El puerto de Coquimbo se instala, como parte de la ruta comercial, que iba de sur a norte.
Siglo
XVIII
Con el nombre “Pisco”, en forma imperceptible, se ha denominado al producto, ya sea porque es un nombre quéchua que se da a los aguardientes, o al contenedor de éste, o bien, pudiera ser, por ser el puerto de desembarque del aguardiente que iba a Lima y sus alrededores para surtir al exigente consumidor de la ciudad y, sobretodo, de las grandes instalaciones mineras del Alto Perú.
1750
En el testamento notarial de doña Gerónima de Rivera y Rojas, en San Ildefonso de Elqui, a 9 de junio de 1750, se señala que se poseen 9 botijas de “Pisco”. En 1758, aparece una botija de “Pisco” en el testamento de don Cristóbal Rodríguez.
Historia de la Denominación de Origen del Pisco Chileno
1850
Un grupo de productores de aguardiente, ya denominado como “Pisco”, dan un nuevo impulso a la industria local y se embarcan con la importación de nuevas cepas y alambiques franceses. Juan de Dios Peralta, Luis Hernández, Olegario Alba, José María Goyenechea (Copiapó), Juan de Dios Pérez de Arce, son precursores del gran despegue que tendrá la industria pisquera chilena en el siglo siguiente.
1882
“Pisco G”, primera marca de pisco registrada en Chile. Fue otorgada al vinicultor José María Goyenechea de Copiapó.
1883
Juan de Dios Pérez de Arce, de Vicuña, inscribe la marca “PISCO YTALIA”.
1886-1900
1902
Productores de Pisco chilenos participan en importantes ferias y concursos internacionales, lugares en que se obtienen valiosas medallas, que consolidan la imagen del producto nacional, como la Exposición Universal de Liverpool, la Exposición Universal de Paris, etc. Se dictan las primeras normas reglamentarias al Pisco. Se hace distinción entre piscos naturales (procedentes de vinos) y alcoholes agrícolas (procedentes de otros cultivos). Se establecen normas tributarias diferentes, según la procedencia del alcohol.
Historia de la Denominación de Origen del Pisco Chileno
1902-1929
1931
1931-1935
1936
1963-1973
Se empiezan a conocer pequeñas propiedades vitícolas, dedicadas a la producción y envasado de Pisco, cada una con su marca, las cuales forman parte importante del paisaje de los valles pisqueros. Este período de auge, termina con la gran crisis económica mundial de 1929. La industria unida, ha enfrentado la crisis. Al final de ella, logra la dictación del decreto N° 181, del 15 de Mayo de 1931, que establece que “solamente podrá denominarse Pisco, al aguardiente obtenido por destilación de caldos de uvas, cosechadas al interior de una parte muy determinada de las provincias de Atacama y Coquimbo”. Firma el decreto, el ex presidente don Carlos Ibañez del Campo. Manteniendo esta unidad, un conjunto de pequeños productores deciden asociarse y crean la Cooperativa Agrícola Control Pisquero de Elqui Ltda. (Pisco Control). En 1934 aparece la Cooperativa de Pequeños Productores de Uvas, que luego se transformaría en la Cooperativa Agrícola y Pisquera Elqui Ltda. (Pisco Capel). Un número importante de productores más capitalizados, logran sortear la crisis con sus propias marcas: Tres Cruces, Tres Erres, Hernández, Peralta, John Barnes, Tacam, Perry, etc.z Los productores organizados, vislumbrando el potencial que tendría la palabra Pisco, como lugar de origen, y en reconocimiento al significado del valle de Elqui en su historia, solicita y obtiene el cambio del nombre del pueblo de La Unión, por el de Pisco Elqui (Ley 5.798), la “cuna del Pisco chileno”. La actividad pisquera ha rendido sus frutos y es seleccionada, por los organismos de desarrollo agropecuario (CORFO,) como “palanca para el desarrollo agrícola e industrial” de las regiones de Atacama y Coquimbo (Plan Pisquero).
Historia de la Denominación de Origen del Pisco Chileno
1980-1990
La industria, luego de una readecuación a fondo, producto del gran colapso económico del primer lustro, comienza a reaccionar frente a un mercado diferente, con precios y estrategias comerciales mucho más afinadas, en un ambiente de competencia total. Se incentiva fuertemente la libertad de plantación de nuevos viñedos de uva pisquera, teniendo en cuenta las grandes expectativas de crecimiento del consumo de Pisco en el país.
1990-2000
El país es una economía abierta y la internación de productos competitivos al Pisco es muy abundante. La oferta de Pisco es abundante y la demanda de pisco desciende ante la amplia y favorable oferta de productos importados. Una nueva crisis se avecina.
2001-2012
Comienza con la reforma tributaria que deja al Pisco en el mismo punto de los licores extranjeros, con aranceles bajos y con tasas de cambio muy favorables a la internación de mercaderías. A pesar de ello, la industria se defiende con la creación de nuevas formas de consumo de Pisco (cócteles), nuevos y complementarios usos para la uva pisquera y, sobretodo, hacia finales de la década, optando por la “premiumización” del producto, con resultados que, hasta ahora, se han mostrado muy favorables.
2013
Sin duda, un año difícil para la agricultura regional, la sequía ya lleva tres años de severidad; la base productiva, el agricultor, se resiente, pero la industria pisquera y sus nuevos conceptos, apelando a su historia, sabrán seguir adelante, como lo ha hecho en esta larga y fructífera historia del Pisco Chileno.
Sangrita Chilena PREPARACIÓN Rebanar ½ de cebolla blanca grande en medias lunas finas. Colocar en un bol con una cucharada de sal kosher y dejar reposar por media hora. Enjuagar la sal y poner las cebollas en el procesador de alimentos o licuadora con: 1 libra de tomates maduros en cuartos 6-8 ramitas de cilantro (las tapas de hoja solamente) 1 cucharadita de vinagre de vino blanco Mezclar hasta que quede líquido. Filtrar a través de un chinois. Descartar los sólidos. Refrigerar. Rinde aproximadamente 12 oz de líquido.
Para servir, humedecer el borde exterior de un vaso y bordear con merquén (la especia nativa de Chile preparada principalmente de pimientos ahumados, también a veces escrita como merkén; en un apuro, se puede substituir el chile chipotle finamente triturado). Llenar con la sangrita y servir con un shot de pisco chileno al lado. Esto se puede conservar refrigerado durante 12-18 horas, y de hecho mejora, con un poco de tiempo de maceración. Pisco recomendado: Cualquier pisco artesanal o aromático.
Albahaca Sour
PREPARACIÓN Agitar bien con hielo: 1 ½ oz/45 ml pisco chileno ¾ oz/22 ml de zumo de limón verde ¾ oz/22 ml de jarabe simple 1:1 Colar de una mitad de la coctelera a la otra mitad y desechar el hielo. Añadir 4-6 hojas de albahaca fresca a la mitad vacía de la coctelera, verter la bebida de nuevo en la coctelera y agitar de nuevo, brevemente. Verter sin colar en una copa de champán helada. Pisco recomendado: Un pisco más neutral.
Santiago Sour PREPARACIÓN Agitar bien con hielo: 1 ½ oz/45 ml pisco chileno ¾ oz/22 ml de jarabe sencillo (partes iguales de azúcar y agua por volumen) ½ oz/15 ml zumo de limón fresco ¼ oz / 8 ml zumo de naranja fresco Colar en una copa de cóctel helada y hacer flotar en la parte superior del cóctel con cuidado ½ oz/15 ml de Cabernet chileno (es más fácil flotar el vino si se vierte de una copa de jerez o algo similar y no directamente de la botella, simplemente se vierte lenta y suavemente sobre la parte trasera de una cuchara de bar sostenida justo por encima del cóctel). Recomendación de pisco: Cualquier pisco que no haya pasado por envejecimiento en barricas de roble americano durante más de un año. Esto resulta especialmente bien con los piscos aromáticos y artesanales.
Bellavista PREPARACIÓN Revolver bien con hielo quebrado: 1 ½ oz/45 ml pisco chileno ¾ oz/22 ml Amaro Lucano o Cynar ¾ oz/22 ml de vino tinto Carménère de Chile 1 cucharadita / 5 ml jarabe enriquecido (dos partes de azúcar Demerara, 1 parte de agua por volumen, agitados a fuego lento hasta que el azúcar quede disuelta) [opcional: 2 pizcas de Angostura] Colar en una copa de cóctel helada y añadir una tira de corte fino de cáscara de naranja a la que se le ha aplicado un poco de presión en la parte superior de la bebida. Pisco recomendado: Cualquier pisco que haya pasado por un envejecimiento en madera bastante importante, de preferencia en barricas de roble americano.
Todos los cócteles fueron creados por el mixólogo estadounidense, David Wondrich, como parte del programa PIT “Nuestro Pisco”. Más antecedentes en www.nuestropisco.cl
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