Las decisiones dentro de ese ámbito deben tomarse por mayoría cualificada, eliminando el derecho de veto que la actual unanimidad otorga a los Estados. Una UE solidaria no puede permitirse una competencia fiscal desleal entre los Estados miembros, que favorece la deslocalización de nuestras empresas. Para poder disponer de los recursos necesarios que exige el pilar social que impulsaremos, es necesario dotar a la UE de un presupuesto adecuado, del 2 por ciento del PIB europeo. Abogaremos por la simplificación y el aumento de los recursos propios de la Unión, impulsando la definitiva adopción de una «Tasa Tobin» comunitaria a las transacciones financieras así como la asignación al presupuesto de la UE de los beneficios del Banco Central Europeo, de una fracción de las base del impuesto de sociedades, de un impuesto a las emisiones de CO2, y de un impuesto a la facturación de las grandes plataformas tecnológicas que prestan servicios, para asegurar que tributan allá donde generan beneficios (GAFAs: Google, Amazon, Facebook y Apple). Propondremos la creación de un Fondo Soberano de la Eurozona para adquisición de activos financieros, aumentando la propiedad pública del capital para reducir la desigualdad, y generando un nuevo recurso propio de la Unión.
2.3. Políticas de género e igualdad, una prioridad europea:(ODS 5 y 10) Las políticas de igualdad son una bandera de la familia socialista: Las impulsaremos, en cada uno de los Estados miembros, y lucharemos para que formen parte preferente de las agendas de las instituciones europeas. El espíritu del 8 de Marzo, compartido con otras fuerzas progresistas, debe trasladarse a la incorporación de la perspectiva de 14