Viernes 26 de mayo de 2006
15 Fútbol
El
EQUIPO DE LA
Elduayen, Balint, Juric, Loren,Limperger, Edu... Todos estos nombres han quedado presentes en la memoria de los aficionados burgaleses al fútbol. Todos ellos formaron parte de aquel Real Burgos que durante dos temporadas luchó por Europa.
C
orría el 6 de mayo de 1990 cuando algo cambió la tranquilidad y armonía de la ciudad de Burgos. Su equipo, el Real Burgos, lograba el ascenso matemático a la Primera División. No era algo nuevo en la ciudad, ya que antes se habían vivido ascensos del Burgos C.F. Sin embargo, existía un sentimiento especial. Las nuevas generaciones estaban volcadas con el equipo, con una alegría que contagiaba al equipo. La primera temporada en la máxima categoría se presentaba apasionante. Con Martínez Laredo en la presidencia, Novoa en el banquillo y el fichaje de jugadores de cierto renombre el equipo adquirió el sobrenombre de "matagigantes". Esa temporada todo el fútbol español coincidía, el Real Burgos había sido el equipo revelación del campeonato. No en vano, había logrado alcanzar la undécima posición. La temporada 90/91 debía ser la de la confirmación. El equipo aguantó durante más de la mitad de la temporada en la tercera posición, pero las circunstancias le relegarón a la novena.
ilusión E l
Al finalizar la temporada, el club se convirtió en SAD pese a la renuncia de Laredo. Era el principio del fin.
L AS
BURGOS ansía un c r a c k
TARDES MÁS HERMOSAS Eran las cinco de la tarde de un domingo caluroso. Un Real Madrid invicto en su campo se disponía a dar buena cuenta de un equipo que acababa de ascender. Ningún equipo recién ascendido había conseguido ganar en el Bernabéu. Corría el minuto 55 de la segunda parte. Un balón largo de Ayúcar fue controlado por Edu ante la atenta mirada de un Fernando Hierro, aún sin consagrar. El burgalés consiguió zafarse del central en velocidad con cierta facilidad. El Bernabéu enmudeció. Paco Buyo no logró parar al centrocampista burgalés que de disparo raso perforó la portería merengue. Los cientos de seguidores burgaleses que habían acudido al campo no se lo podían creer. Habían hecho historia. Quizá el gol de Juric sea la jugada que permanecerá en la memoria de los aficionados. El partido fue seguido en toda España, ya que fue transmitido en directo por Canal Plus. El Plantío se llenó para ver en acción a la Quinta del Buitre. Fueron muchos los que se tuvieron que quedar en los bares siguiendo el partido. Un gol de Hugo Sánchez había puesto el 0-1 en el marcador. El Burgos, con el apoyo incondicional del público logró empatar en el ecuador de la 2ª
parte. El árbitro iba a pitar el final del partido cuando Balint mandó un pelotazo a la banda donde se encontraba Juric quien, sin pensárselo dos veces, lanzó un potente tiro desde cuarenta metros que se coló como un misil en la portería madrilista. El delirio se hizo patente tanto en el estadio como en el resto de la ciudad. España entera se tuvo que rendir ante la garra y el coraje del equipo burgalés.
LOS JUGADORES CLAVES El rumano Balint era burgalés de adopción. La afición de Burgos veía en él la punta de lanza que les dispararía hacia Europa. Dos años antes de llegar a Burgos, Gaby Pelé Balint se había proclamado campeón de Europa con el Steaua de Bucarest. Junto a Loren y Juric formó parte de una de las delanteras más temidas del fútbol español. Loren tuvo muchos entrenadores y todos confiaron en él. Este burgalés nacido el 7 de octubre de 1966, logró cautivar a la parroquia burgalesa. Pese a nacer en Burgos, sus primeros pasos en el fútbol los dio en la Real Sociedad y el Athletic de Bilbao. Durante estos años desempeñó la función de defensa central. Su proyección y seguridad hicieron que el Burgos se fijase en él. El Real Burgos había perdido un buen defensa, pero había ganado un gran delantero.
Samuel de la Rubia Criado
en
Plantío
"El estado de salud del deporte burgalés pasa por uno de sus grandes momentos". Cuántas veces los aficionados y protagonistas del deporte local han querido escuchar esta frase. Sin embargo, la marcha de los acontecimientos, no parece que vaya a hacernos pronunciar tal sentencia. Al inicio de temporada, los burgaleses apoyan a conjuntos como el Burgos CF, el Autocid Ford, el Burgos Fútbol Sala animando y acompañando al equipo como si les fuera la vida en ello. Un gesto apasionado y encomiable de la afición burgalesa, que, sin embargo, es consciente de que ningún equipo masculino, en ningún deporte, se encuentra en la élite. Es cierto que la oferta deportiva es diversa y amplia, pero la alta competición brilla por su ausencia. ¿Cuáles son las causas de esta crisis que nos está asolando desde hace ya algunos años? Toda crisis, tanto directa como indirecta, tiene algún punto relacionado con la economía y, en el caso que nos ocupa, varios. Todo proyecto deportivo que desee imprimir ilusión y ambición debe sustentarse en una inversión económica que asegure resultados o, por lo menos, despierte la atención de quienes se preguntan si se volverá a repetir la misma historia negativa de años atrás. Ese es el principal problema del deporte burgalés. No existen iniciativas empresariales ni institucionales tendentes a apoyar al deporte, y sin éstas no cabe esperar resultados. La afición sufre así un desengaño, una sensación de soledad que la impulsa a dejar los campos vacíos. Es un círculo vicioso que se repite cada temporada. Otro aspecto importante es la necesidad de mimar la base. Crear una fuerte institucionalización de las categorías inferiores, darlas apoyo y confianza a medio y largo plazo. Si ambos elementos -el apoyo económico y la consolidación de las generaciones de deportistas veniderasse conjugan, las aspiraciones del deporte burgalés estarían más cerca de los campeonatos nacionales del más alto nivel y de la posibilidad de codearse con los grandes, labrarse un nombre dentro del competitivo y gratificante deporte español. La unión hace la fuerza, y la fuerza el éxito.
El Burgos CF mantiene intactas sus opciones de ascenso a 2ª división, al igual que el Mirandés a 2ªB, mientras que la Arandina ha realizado una campaña discreta moviéndose en la mitad de la tabla clasificatoria durante toda la temporada. Mientras tanto, el Big Mat Fontecha de fútbol femenino ha finalizado la liga en una meritoria segunda posición, adaptándose de forma brillante a la nueva categoría, tras consumarse la pasada temporada el descenso de Superliga. En baloncesto, la sensación es parecida, el Autocid, a pesar de ser año tras año favorito para el ascenso a LEB 1, se encuentra en una categoría no acorde con la ciudad que representa. En cuanto a baloncesto femenino se refiere, la situación es diferente. El Arranza-Jopisa fue capaz de alcanzar los playoffs que dan derecho a competir por el título nacional, donde fue eliminado por uno de los conjuntos más potentes, el Hondarribia de Irún. El equipo femenino de voleibol, el Universidad de Burgos, ha cuajado una campaña excepcional, no sólo por su cuarta posición final en la Superliga y a su merecida clasificación para disputar el torneo continental la próxima temporada, sino por alcanzar el hito histórico de clasificarse para disputar la FINAL FOUR de la COPA FEV, en la que logró un brillante tercer puesto. El máximo representante del fútbol sala masculino en nuestra ciudad, el Burgos CF, tras los apuros de la última temporada por mantener la categoría, se ha repuesto y ha llevado a cabo una gran actuación en el Grupo 3 de Primera Nacional, categoría paralela a la 2ª División B del fútbol hierba. No está mal cómo ha finalizado la campaña acaparando las posiciones privilegiadas de la tabla. Esta escuadra goza de un gran mérito, ya que todos sus jugadores son burgaleses y totalmente amateurs. Esta es la vitalidad y la salud de la que goza el deporte en Burgos. Los burgaleses no deben cejar en su empeño de seguir apoyando el deporte para que esta mala racha represente tan sólo un ciclo a superar. Burgos merece, aunque sólo sea por su gran afición, la alta competición y el éxito deportivo. Sergio Cardero Núñez Rubén Pérez Cuesta