Ejercicios básicos en tu rutina Practicar ejercicio diariamente es una de las piezas fundamentales que debes tomar en cuenta para tener una mente y cuerpo saludables, por ello elaboramos un listado para que conozcas algunas rutinas de ejercicio que no deben de faltarte y que bien, puedes realizar desde la comodidad de tu casa. Antes de empezar a realizar estos ejercicios te recomendamos que calientes mínimo 10 minutos antes y como medida de precaución; también puedes consultar con tu médico antes de emprender éstas u otras rutinas ejercicio, y estar segura que te encuentras en óptimas condiciones para realizar cualquier tipo de actividad física. Los ejercicios que no deben de faltar en tu rutina son:
Una sola pierna. Deberás plantar el pie dere-
cho en el piso y flexionar ligeramente la rodilla, levanta la pierna izquierda detrás de ti para que tu pierna derecha se encuentre paralela al suelo. Inclínate hacia adelante con las caderas y baja lentamente tu cuerpo lo más que puedas, has una pausa de un minuto y luego empuja el cuerpo hacia atrás a la posición inicial. Este ejercicio te servirá para tonificar los glúteos y a prevenir los dolores de espalda. De lado. Recuéstate sobre tu lado izquierdo con las rodillas bien rectas, pon el antebrazo en el piso y con las caderas empieza a levantarte hasta que tu cuerpo forme una línea recta desde los tobillos hasta los hombros. Trata de mantener esta posición durante 30 segundos, date la la vuelta y repite la misma rutina. Este ejercicio te servirá para reducir el tamaño de la cintura. Push ups. Recuéstate boca abajo, extiende los brazos, y con las manos y las piernas levántate todo lo que puedas. Luego baja lentamente hasta que quedes a unos centímetros antes de tocar el suelo, mantente firme con los brazos por dos minutos. Es importante que ninguna parte de tu cuerpo toque el piso. Deberás asegurarte de mantener las caderas levantadas todo el tiempo. Realizando este ejercicio quemarás una canti-
dad bastante significativa de calorías, además de que todo tu cuerpo se ejercita al mismo tiempo y se endurecen los músculos del pecho. Segunda Posición. Ponte de pie con los pies más anchos que los hombros, baja tu cuerpo doblando las rodillas hasta que tus muslos estén paralelos al suelo. Lleva los brazos en alto, y los hombros hacia abajo y hacia atrás. Haz una pausa y mantente por un minuto en esta posición. Este ejercicio tonifica los glúteos y esculpe el interior de los muslos. Levantando el brazo. Colócate en una posición de plancha, pero dobla los codos y apoya tu peso en los antebrazos en lugar de en tus manos. El cuerpo debe formar una línea recta desde los hombros hasta los tobillos. Mantente firme mientras levantas el brazo derecho hacia frente. Mantén la posición de cinco a diez segundos y luego cambia de brazo. Con este ejercicio mejoras bastante tu postura, al caminar darás la impresión de ser más lata y con el cuerpo más estilizado, además de que fortaleces los brazos. No está por demás decir que, para notar los resultados, debes combinar estas rutinas con una alimentación balanceada.
Cuidados en Niños cuando Toman el Sol El sol nos brinda grandes beneficios a la salud, sin importar la edad, pero el abuso puede ocasionar grandes problema a la larga. Los bebés son más vulnerables, aquí te decimos cómo cuidarlos. Todos los seres humanos necesitamos exponernos aunque sea unos cuantos minutos al sol, porque es la principal fuente de vitamina D (importante para absorber calcio). Pero el hecho de exponernos a los rayos del sol sin protección, puede provocar lesiones en los ojos, en la piel, inmunodepresión e incluso cáncer. La mayoría de las personas acumulan entre 50% y 80% del total de exposición al sol, antes de cumplir 18 años. Por eso es importante que nosotros, los papás, les enseñemos a nuestros hijos, desde que son muy pequeñitos a disfrutar del sol de forma segura. Cuidados Bajo el Sol Los dermatólogos hacen las siguientes recomendaciones, para mantener a tu pequeño a salvo bajo los rayos del sol: No expongas a tus hijos a los rayos solares entre las 10:00 y 16:00 horas, pues la radiación es más intensa, aunque los días estén nublados. Siempre colócalos bajo la sombra de un árbol, sombrilla o techo. Si se meten al mar o a la alberca, que lo hagan con una gorra o sombrero y una camiseta especial para el agua, de las que ya incluyen protección contra los UVA y UVB. Si lo llevas en carriola, baja la capota para que le cubras el rostro y la cabeza. Vístelos con ropa fresca que cubra todo su cuerpo. Busca prendas que no dejen pasar los rayos UV. Para asegurarte de que sea la tela adecuada coloca una mano dentro de cada prenda y comprueba que no la puedes ver a través de la tela. Acostúmbralos a llevar sombreros o gorras con viseras, para que hagan sombra sobre la carita y las orejas.
El agua refleja e intensifica los rayos solares. Usa bloqueadores y protectores solares en crema, resistentes al agua y al sudor con FSP 50. Aplícalo 30 minutos antes de que se expongan al sol y reaplícalo cada 30 a 45 minutos, o antes si se diluyen con el agua. Las pantallas no deben utilizarse en bebés menores de seis meses, sin consultar al pediatra. Usa suficiente producto en todo el cuerpo y no olvides la nariz, los pies, las mejillas, las orejas y los hombros. Una vez que ya han salido de la alberca o del mar, báñalos con agua dulce y un jabón suave para retirar los rastros de arena y bloqueador solar. Aplica una crema humectante especial para después de asolearse. Mientras se encuentren bajo los rayos solares, procura que tu bebé tome agua incluso si está en la etapa en que únicamente se alimenta con leche. Los Más Pequeños No se recomienda exponer directamente al sol a bebés menores de seis meses de edad (ni en la alberca ni en el mar) ya que pueden sufrir quemaduras, golpes de calor y estados de inconciencia. Estos trastornos ocurren cuando los niños se calientan en exceso y se deshidratan. No dudes en llamar a tu pediatra si: Tu hijo tiene fiebre inexplicable superior a los 38.9º C La piel quemada parece infectada Si a tu bebé le molesta mucho la luz, ya que esto puede indicar que se quemó las córneas
El Acné dice qué Órgano tiene Problemas Checa nuestra lista para saber qué significa el lugar donde más te sale acné. La medicina china tiene un secreto: Para saber qué está causando el acné en una persona, ponen atención en el lugar específico donde está saliendo, pues dicen que cada lugar está conectado con algún órgano del cuerpo. Y es que el acné es sólo un pequeño síntoma que indica qué órgano está teniendo problemas. Aquí te mostramos una lista de qué órgano o sistema debes cuidarte más, dependiendo del lugar donde más te sale acné:
Granos en la frente: Problemas en el aparato
digestivo. Para eliminarlos, come menos alimentos procesados y grasas. Empieza a tomar más agua.
Granos entre la cejas: Problemas con el
hígado. Trata de ingerir menos alcohol y productos lácteos ya que son pesados para tu hígado.
Granos a los lados de los ojos: Problemas en los riñones. Todo lo que tenga que ver con la parte de alrededor de los ojos, significa que tienes cierta deshidratación.
Granos en la nariz: Problemas con la presión arterial. Deja de comer tanto picante y carne. Granos en las mejillas: Problemas en el siste-
ma respiratorio. Este es una área problema para la gente que tiene alergias y/o fuma. También puede ser causado por una elevación de temperatura.
Granos en la barbilla: Problemas hormonales.
Es el lugar del estrés y los cambios hormonales. Dormir bien y tomar mucha agua puede ayudar a disminuirlos.
Granos en el mentón: Problemas en el estómago. Comer mucha fibra puede ayudar a que los granos o la erupción desaparezca.
Enseña hábitos de higiene a tus pequeños
Debemos fomentar a nuestros hijos, desde que son muy pequeños, que tengan buenos hábitos de higiene, ya que es un factor que les proporciona seguridad, previene enfermedades e, incluso, puede significar aceptación en su círculo social.
Es verdad que no resulta sencillo lograr que nuestros hijos obedezcan nuestra rutina diaria de higiene para con ellos, por ejemplo que se laven las manos antes de comer o que se laven los dientes antes de acostarse. Por eso es primordial enseñarles desde sus primeros años de vida, dándoles varios ejemplos que puedan imitar. Cada vez que pongamos en práctica los hábitos de aseo, es importante aplicarlo en un momento grato. No lo hagas en medio de regaños o malos modos. Otro de los factores importantes es que como papás mostremos interés y alegría cada vez que los niños realicen la rutina de limpieza, de ésta forma los hijos lo vincularán con algo positivo y bueno. Estimulemos a nuestros pequeños de manera divertida para que realicen la rutina de limpieza y aseo, por ejemplo, desde que son bebés conviene hacerles reír mientras los bañas para lo asocien con sensaciones gratas. Cuando son muy chiquitos, tú eres la quien tiene que bañarlos pero conforme a van creciendo tienes que ir enseñándoles a que solitos se froten y tallen, para que a partir de los 6 años lo hagan sin nuestra ayuda. Explícale lo importante de hacerlo diario y las repercusiones de no hacerlo. Un buen truco a la hora del baño es comprar champús anti-enredos y que no irriten los ojos, para que sea un momento más grato para tus pequeños. Si el tema es lavarse los dientes debemos de ser más constantes, ya que es un hábito que no les agrada mucho, se les olvida o evitan hacerlo.
Cuando son pequeños debemos utilizar un cepillo especial, y desde los tres años acostumbrarlos a adquirir el hábito de tener limpios los dientes. Cuando queramos enseñarles a lavarse las manos es muy importante, como con los demás hábitos, que te vea a ti hacerlo a menudo. Cada vez que llegues de la calle con tu pequeño o cuando vayan a comer, recuérdale que hay que lavarse las manos y hazlo tú junto con él. Coloca al lado del lavabo un taburete para que él pueda usar más cómodamente el grifo, procura que éste pequeño mueble tenga patas antiderrapantes para evitar accidentes.
3 Consejos para Cenar Saludablemente
"Saltarse la cena" o consumir solo frutas para bajar de peso, son sólo mitos. Mejor toma nota de estos consejos saludables.
Así como hemos hablado del desayuno en numerosas ocasiones, es turno de darle la importancia también a la cena. Seguramente has escuchado que “saltarse la cena” te ayuda a bajar de peso, o que debes cenar únicamente frutas pues se digieren más rápido; estos pueden ser mitos y a veces no muy saludables. Por ello, te invitamos a seguir estas saludables recomendaciones para empezar a armar un buen menú de cenas para toda la semana.
1. Cenar entre 2 y 3 Horas Antes de Dormir
Es indispensable cuidar la hora en que se hace la cena, porque así le damos tiempo a nuestro aparato digestivo que trabaje correctamente, para no sentirte mal o con indigestión antes de dormir. Nuestro sistema digestivo trabaja más lento por las noches, pues debe prepararse para el día siguiente y es muy probable que haya menor cantidad de enzimas para hacer la digestión de forma adecuada.
2. Alimentos Bajos en Grasa
Los alimentos que elijas son muy importantes, lo más recomendable es cenar cereales con fibra, verduras o frutas, que son más fáciles de digerir en comparación con las carnes. El hecho de que elijas alimentos bajos en grasa favorecerá el tiempo de digestión; en este caso puedes cenar lácteos descremados (queso, yogurt, leche) o alimentos de origen animal magros como el atún, pechuga de pollo o pechuga de pavo.
3. Cuidar las Porciones
Aún cuando el cuerpo gasta energía mientras duerme, ésta es mínima. Las porciones en la cena deben ser pequeñas; modéralas y procura que sean menores a las de la comida. Cuando nos saltamos la cena, predisponemos a nuestro organismo a un ahorro de energía, es decir, el metabolismo se hace más lento y además tendremos más hambre al día siguiente en el desayuno, gracias al ayuno de tantas horas, por lo que se podría consumir una cantidad de
alimento mayor a la que se consumiría cuando cenas. A continuación te proporcionamos una opción de cena que ayudará a mejorar tu digestión por su contenido de fibra y que te caerá ligera por la noche. Receta: Ensalada de manzana, apio y queso (1 porción) Ingredientes ¼ de taza de apio en rodajas. 2 tazas de lechuga o espinaca cruda lavada y desinfectada. 1 manzana en cubitos. ½ taza de yogurt natural bajo en grasa y azúcar. Perejil picado al gusto. ¼ de taza de uvas en mitades. ½ taza de cereal. 60 gramos de queso panela en cubitos. Instrucciones 1. Mezcla el apio, la lechuga, manzana, uvas y queso en un tazón. 2. En un recipiente aparte mezcla el yogurt con el perejil picado, reserva para aderezar. 3. Sirve y agrega cereal encima ya sea antes o después del aderezo.