VIAJE A PORTUGAL : (BATALHA , LAIRIA, NAZARÉ, COIMBRA Y FÁTIMA) OCTUBRE DEL 2012-10-18
El viaje comenzó a la 2,45 de la madrugada del día 12 de Octubre del 2012, como de costumbre todos fuimos puntuales y deseosos de pasarlo lo mejor posible. Dado la hora de salida en un principio parecía que nos dormiríamos hasta la primera parada, que se tenía prevista hacerla pasadas dos horas y media o tres horas. Pero la realidad es que no fue así, por que como casi siempre ocurre, y sobre todo cuando hay buen rollo y ganas de pasarlo bien. Nuestros amigos Toñín , Eugenio y Checa entre otros, nos quitaron , yo creo el poco sueño que teníamos con sus ocurrencias y sus chistes Y como íbamos de excursión y a pasarlo bien pues era lo propio y natural. Entonces las cabezadas y lo sueños fueron escasos y cortos, y entre risas y alguna que otra broma lo pasamos bastante bien. Nuestra primera parada la hicimos en un restaurante de carretera en el Km. 200., de la autovía de Extremadura. Se tomó café, y cada cual hizo sus necesidades fisiológicas necesarias, reanudando el viaje tras treinta minutos de parada. Se continúo el viaje con el mismo ambiente y ganas de cachondeo con que lo habíamos iniciado. Sobre las 8,30 /h. Ya en territorio portugués, fue cuándo en un Centro Comercial, por cierto que se llamaba “CENTRO COMERCIAL FATIMA “, fue donde desayunamos y repusimos fuerzas para el largo día que teníamos por delante. A las 9,30/h. nos esperaba un guía para dirigirnos hacia la localidad de Batahla y realizar nuestra primera visita.
Batalha (Portugal) Batalha es una vila portuguesa en el Distrito de Leiria, região Centro y subregión de Pinhal Litoral, con cerca de 7 500 habitantes Es sede de un municipio con 103,56 km² de área y 15 002 habitantes (2001), subdividido en 4 freguesias. El municipio está limitado al norte y oeste por los municipios de Leiria, al este por Vila Nova de Ourém, al sureste por Alcanena y al sudeste por Porto de Mós.
Historia
Monasterio dominico de Santa María da Vitória, Batalha La villa fue fundada por el rey D. João I, juntamente con el Monasterio de Santa Maria da Vitória, para agradecer el auxílio divino concedido en la victoria de la batalla de Aljubarrota (14 de agosto de 1385) contra los castellanos. Monasterio de Batalha El Convento de Santa Maria da Vitória (también conocido como Monasterio de Batalha) se sitúa en Batalha, Portugal, y fue mandado edificar por el rey Juan I como agradecimiento del auxilio divino y celebración de la victoria en la Batalla de Aljubarrota. Es uno de los mejores y más originales ejemplos de la arquitectura gótica tardía en Portugal, mezclado con el estilo manuelino. Se sorprende al espectador con su profusión de frontones, chapiteles, pináculos y contrafuertes. Se ha convertido en un símbolo de El monasterio fue construido para agradecer a la Virgen María la victoria de las tropas de Portugal sobre las de Castilla en la batalla de Aljubarrota en 1385, cumpliendo la promesa del rey Juan I de Portugal. La batalla puso final a la crisis de 1383-1385. El monasterio tardó dos siglos en ser construido, empezándose en 1386 y terminándose en 1517, durante el reinado de casi siete reyes.
Monasterio dominico de Santa María da Vitória, Batalha.
Monasterio dominico de Santa María da Vitória, Batalha
El monasterio de Batalha es uno de los más importantes monasterios góticos de Portugal.
Requirió los esfuerzos de casi quince arquitectos (Mestre das Obras da Batalha), pero para siete de ellos el título no fue nada más que un honor otorgado temporalmente. La construcción necesitó recursos extraordinarios, tanto humanos como materiales. Se utilizaron estilos artístico y técnicas que eran desconocidos hasta ese momento en Portugal. En el inicio de las obras del Monasterio de Batalha fue construido un pequeño templo, cuyos vestigios eran todavía visibles en los albores del siglo XIX. Esta edificación, Santa Maria-a-Velha (Santa María la Vieja) , también conocida por Igreja Velha (Iglesia Vieja) servía de local para la celebración de los sacramentos (las crónicas de la época dicen que era una iglesia humilde) y como cementerio para los primeros habitantes de Batalha: los arquitectos y los obreros que construían el monasterio. El primer arquitecto fue el portugués Afonso Domingues quien se encargó de la obra hasta 1402. Él fue quién diseñó la planta y muchas de las estructuras en la iglesia y el claustro son responsabilidad suya. Su estilo era, básicamente, gótico radiante. Sin embargo hay influencias del periodo inglés denominado Periodo Perpendicular. Hay similitudes con la fachada de York Minster y con la nave central y el crucero de la Catedral de Canterbury. Se sabe que al proyecto inicial corresponden la iglesia, el claustro y las dependencias monásticas inherentes, como la sala capitular, la sacristía, el refectorio y anexos. Es un modelo que se asemeja al adoptado, en términos de organización interna, al del gran monasterio alcobacense. El trabajo de Domingues fue continuado por Huguet desde 1402 hasta el año 1438. Este arquitecto, probablemente descendiente de catalanes, introdujo el gótico flamígero. Éste se manifiesta en la fachada principal, en la cúpula de la sala capitular, en la Capela do Fundador(Capilla del Fundador), en la estructura básica de las Capelas Imperfeitas (Capillas Inacabadas) y en las naves septentrional y oriental del claustro principal. Fue el responsable de elevar la altura de la nave central hasta los 32,46 m. Alterando las proporciones consiguió que el interior de la iglesia pareciera incluso más estrecho. Terminó el transepto pero murió antes de finalizar las Capelas Imperfeitas. La Capela do Fundador, es una capilla funeraria, que fue añadida al proyecto inicial por el propio rey Juan I. Lo mismo sucedió con la rotonda funeraria conocida por Capelas Imperfeitas, iniciativa del rey Eduardo I de Portugal.
Durante el reinado de Alfonso V de Portugal, el arquitecto portugués Fernão de Évora continuó el proceso de construcción durante 1448 y 1477. Añadió el claustro de Afonso V (o menor) y las dependencias adyacentes. Fue
sucedido por el arquitecto Mateus Fernandes el Viejo durante el periodo 1480-1515. Este maestro del estilo manuelino trabajó en el pórtico de las Capelas Imperfeitas. Su hijo de nombre homólogo realizó la tracería de las arcadas del Claustro Real. Durante el reinado de Juan II fue notable su desinterés por la construcción. El trabajo en el monasterio continuó en el reinado de Juan III de Portugal con la incorporación de la excelente tribuna renacentista (1532) de Juan de Castillo, único arquitecto con obras en cinco monumentos declarados Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. La construcción se interrumpió en 1516-1517, cuando el rey Manuel I decidió dedicar todos sus esfuerzos en la construcción del Monasterios de los Jerónimos, en Lisboa. El terremoto de 1755 provocó algunos daños en el edificio, pero mucho más grandes fueron los daños infligidos por las tropas napoleónicas de Masséna, quien saqueó y quemó el edificio en 1810 y 1811. Posteriormente cuando los Dominicos fueron expulsados del complejo en el año 1834, la iglesia y el monasterio fueron abandonados y terminaron en ruinas. En el 1840 el rey Fernando II de Portugal comenzó un programa de restauración del monasterio abandonado, salvando esta joya de la arquitectura gótica. Fue restaurado en el siglo XIX, bajo la dirección de Luís Mouzinho de Albuquerque, de acuerdo con la traza de Thomas Pitt, viajero inglés que estuvo en Portugal a finales del siglo XVIII y que fue la persona que diera a conocer por toda Europa el monasterio a través de sus grabados. En esta restauración el edificio sufrió transformaciones más o menos profundas, marcadas por la destrucción de dos claustros, al lado de las Capelas Imperfeitas y, en el marco de la extinción de las órdenes religiosas en Portugal, por la retirada total de los símbolos religiosos, buscando convertir el monasterio en un símbolo glorioso de la Dinastía de Avis y sobre todo de su primera generación (la denominada Ínclita Geração -generación ínclita- de Camões). Data de esta fecha la actual configuración de la Capela do Fundador y la vulgarización del término de Monasterio de Batalha (para celebrar la victoria sobre Castilla en Aljubarrota) en detrimento de Santa Maria da Vitória, en una tentativa de erradicar definitivamente las denominaciones que recordasen el pasado religioso del edificio. La restauración duró hasta los primeros años del siglo XX. Fue declarado monumento nacional en el año 1907. En el año 1980 el monasterio fue convertido en museo. En 1983 fue incorporado por la Unesco a su lista de lugares Patrimonio de la Humanidad.
Caracterización arquitectónica Planta En planta de cruz latina, la iglesia revela el apego a la tradición del gótico mendicante portugués. Se trata de un templo de 3 naves, con transepto pronunciado y cinco capillas en la cabecera, siendo las laterales de igual profundidad (las más interiores en alineación con las colaterales, las exteriores dando para el brazo final del transepto), todas ellas precedidas de un tramo recto (ligeramente prolongando en el ábside).
Dimensiones La iglesia, que posee 80 m de longitud, 22 m de ancho y un vano máximo en la flecha de 32,5 m, revela un sistema proporcional relativamente simple. La diferencia de altura entre las naves laterales y la nave central está en una razón de 3:2 o razón sesquitércia, corriente en el gótico. La misma «razón» fue adoptada para determinar la relación entre la anchura del templo y su longitud – desde la puerta axial hasta el arco triunfal – y más tarde, para determinar la dimensión de la Capilla del Fundador que, así, forma un cuadrado que ocupa tres veces el cuerpo de la iglesia (cabecera excluida).
Cubierta El templo sólo difere de sus congéneres más antiguos en el hecho de ser completamente abovedado, y de mucho mayor tamaño. Con ocho tramos, marcados por una arcada longitudinal. Este trazado es fiel con todo el proyecto inicial mostrando una condición de continuidad a las tradiciones portuguesas, habiendo apenas que solucionar los trámites relativos al abovedamiento. La experiencia de la girola de la Catedral de Lisboa debe haber sido importante para este hecho, sabiéndose además, que el maestro Afonso Domingues ,arquitecto constructor, vivió en Lisboa en la freguesía de Madalena, siendo natural de esta ciudad, y pudiendo haber aprendido allí. Los pilares de las naves son polistilos y de gran espesor, siendo cada columna adosada, ininterumpida desde la base hasta el capitel, sin ninguna marca de cornisa, siendo esto válido también para las columnas medias que sustentan los arcos torales de la nave central. La cubierta de las tres naves es estructuralmente idéntica, con arcos torales simples, dos nervios cruzados y una ligadura uniendo las claves longitudinalmente. Lo mismo sucede para el transepto, donde se registran cinco tramos de bóveda, de ocho paños cada una y con el mismo sistema de ojivas cruzadas (siendo obviamenta mayores los tramos del crucero). El uso de bóvedas en la nave central, más alta que las laterales, obligó a la utilización de arbotantes,
que descargaran su peso en los estribos del flanco exterior del templo, al nivel de la cubierta de las laterales, Las bóvedas de las capilla de la cabecera, con techo poligonal de cinco tramos cada una, son cubiertas por bóvedas de ojivas, con nervios que nacen de los arcos adosados a las paredes, dotadas de dos tramos rectos solidarios con el techo poligonal, formado por nervios radiantes, con las claves también unidas por ligaduras. Este sistema evitó cualquier refuerzo exterior, limitándose el respectivo apoyo a los contrafuertes radiales. El maestro Afonso Domingues no finalizó la obra, dejando, con todo, casi configurado todo el templo (con excepción tal vez de las partes más levadas) y buena parte de la zona caustral. Así, en el interior es fácil percibir la intervención del maestro portugués en las bóvedas de las naves (dotadas de grandes claves de decoración naturalista).
Alzado En términos de alzado, las diferencias existentes son consecuencia del abovedamiento general de las naves de la iglesia. La iluminación se realiza a través de ventanales apuntados, desde los flancos colaterales y por un claristorio que corre a lo largo de la pared superior de la nave central, donde se abren ventanales apuntados en el centro de los arcos. Conviene recordar también, que el hecho de que el ábside de la cabecera de Batalha posea aventanamiento en dos alturas (en vez de sólo una ventana por paño) es, según Mário T. Chico, resultado de la influencia directa del ábside alfonsino de la Catedral de Lisboa, ya construida en aquellos tiempos. Todo esto apunta a la importancia de la primera fase de obras debida a Domingues.
Ábside El ábside parece ser de terminación posterior, con su arco triunfal angrelado, pudiendo igualmente considerarse dos fases de trabajo en las capillas laterales. En la zona de las dependencias claustrales es posible que los trabajos hubiesen avanzado más rápido que en el cuerpo del templo. Las galerías norte y occidental ya estarían levantadas, pero fue Huguet quien habría terminado las del lado sur y oriental (todas ellas con siete tramos), respetando, sin embargo, el trazado anterior, con bóvedas de crucería de grandes claves unidas por ligadura longitudinal, sin ménsulas, descansando en finas columnillas a uno y otro lado de las paredes.
Áreas de interés en el Monasterio Sala do Capítulo Le correspondió al maestro Huguet finalizar la célebre Sala do Capítulo, de planta cuadrada, cubierta por una bóveda de estrella de un solo vuelo. Esta bóveda es, efectivamente, una obra de notable técnica constructiva gótica, estando formada por dieciséis nervios radiales, ocho partiendo de las paredes, y los restantes de las claves secundarias exteriores, convergiendo en una gran clave central de decoración vegetalista, desarrollada en dos coronas. La cara exterior de esta sala, que da para la galería del claustro, está formada por un portal de rasgado profundo, con cinco arquivoltas por fuera y cuatro por dentro, con el vano decorado por cogollos radiantes. A cada lado se abren dos grandes vanos partidos, ocupados cada uno de ellos por dos ventanas geminadas con una bandera recortada y rejillada según los preceptos del gótico flamígero. Están sobrepujadas por un óculo. La sala capitular posee una decoración figurativa digna de registro: el tema dominante es mariano, destacando en la ventana sur, hacia el claustro, en dos capiteles, una representación de la Anunciación, con la Virgen a la derecha y el ángel a la izquierda. Nuestra Señora sujeta una vasija con su brazo derecho, teniendo el cuello adornado por un collar de colgantes en forma de mano (signos apotropaicos), y el ángel la típica filacteria enrollada alrededor del cuerpo. Otro elemento iconográfico bastante conocido, es la representación, en una de las ménsulas, de lo que se supone es, con bastante razón, el maestro cantero, en forma de retrato (está notablemente individualizada la expresión del rostro). Vestido con un traje de principios del siglo XV, una túnica ajustada con faja, turbante trazado e inclinado, sujeta en la mano izquierda una regla teniendo la otra mano posada en la rodilla derecha.
Capela do Fundador Uno de los edificios adyacentes al monasterio más importante y que marca indeleblemente su carácter "real", siendo bien esclarecedor en cuanto a los intentos llevados a cabo, es, precisamente la llamada Capela do Fundador. Se trata de una construcción situada a la derecha del templo, adosada a la pared exterior de la nave sur, por donde tiene la entrada. Tiene planta cuadrada, en la cual se inscribe en el centro un octógono, que se desarrolla en volumen hacia arriba, hasta el nivel del segundo piso, haciendo, también, de linterna. Esta capilla fue trazada por el maestro Huguet y se encontraba todavía en obras en 1426. Fue terminada poco después del fallecimiento del monarca, que fue trasladado a ella, junto a la reina, un año después (1434). Por el exterior, se impone como una masa homogénea acentuando la horizontalidad del
frontispicio del templo. Ofrece tres caras libres, cada una de las cuales rematada por dos contrafuertes, y donde se abren tres ventanales, con lo que queda el eje más ancho que los restantes. En la parte superior, sobresale al exterior el octógono central de donde parten ocho arbotantes acanalados apoyados en los contrafuertes exteriores, que se prolongan en pegões pinaculaos más allá del techo. El conjunto está rematado por un friso de enrejados flamígeros. Originalmente, el octógono estaba coronado por un gran coruchéu en aguja, que se desmoronó en el terremoto de 1755. En el interior, la luz procede de las vidrieras de la fachada y de las ventanas de dos luces existentes en cada cara del octógono central. Es una luz diáfana, que incide particularmente en el centro del monumento, donde se levanta el mausoleo de los reyes. La bóveda es compleja, formada por arcos cruceros, que partiendo de baquetas embebidas en las paredes, entroncan en las claves centrales, a partir de las cuales los nervios descansan su peso sobre las baquetas de la cara exterior del octógono central, formando, de esta forma, una especie de nave o girola. El octógono propiamente dicho, en el centro del edificio, está formado por ocho pilares compuestos, de columnas enfeixadas, y se abre a través de ocho arcos apuntados con el intrados decorado con trilobulós. Su interior tiene dos alturas: la inferior corresponde a los pilares y arcos, mientras que en la superior se abren las ventanas lucernarias. También la bóveda de este cuerpo central es estrellada, con ocho brazos principales, ocho terceletes y dieciséis nervios secundarios, apoyados en ocho claves radiales y una clave central de gran diámetro, mostrando el enrejillado, dentro del cual se inscriben, en relieve, las armas reales. En las paredes se abren arcos sólidos que albergan las tumbas de los príncipes de Avis: D. Pedro, su mujer y D. Fernando. Las tumbas dentro del nicho, de vuelta quebrada con arquivolta exterior en contracurva, poseen frontales en relieve decorados con los escudos de los príncipes, encuadrados por ornamentación floral, siendo en su totalidad uno de los primeros y más profusos conjuntos de heráldica familiar de gran porte existente en Portugal, de acuerdo, además con esquemas seguramente importados de Inglaterra. Otros arcos sólidos vacíos preveían más depósitos tumulares, pero fueron desaprovechados de acuerdo a la decisión del rey Duarte de construir un nuevo panteón, siendo simplemente rellenados en 1901.
Capelas Imperfeitas El panteón del rey Duarte, también conocido por las Capillas Inacabadas fue diseñado teniendo en cuenta una lectura rigurosa del testamento de Juan I, que optó por crear su propio espacio funerario. Así, el rey Duarte dio inicio a la edificación de una rotonda detrás de la
cabecera. De cualquier modo, las obras, dirigidas también por Huguet, no fueron terminadas, ya que, iniciadas notablemente en 1434, el monarca falleció 4 años después dejándolas incompletas. Pero el trazado estaba ciertamente diseñado, y las obras de los reinados siguientes fueron lentamente intentando acabar el edificio, dejando, sin embargo, por hacer lo principal: el lanzamiento de la gran bóveda central. Al contrario de lo que se podría juzgar, esta operación no tendría grandes problemas técnicos ya que el vano a cubrir es poco mayor que el existente en la Sala Capitular. Se trata, efectivamente, de un edifico con un cuerpo central octogonal y entrada por el eje (articulada en una cabecera con un atrio abovedado), a la salida del cual se disponen siete capillas radiantes. Surgiendo de los grandes macizos polistilos que conforman la estructura, se levantaría un cuerpo octogonal provisto de grandes ventanales, abovedado y debidamente escorado en arbotantes, previsto para configurar un amplio espacio de planta centrada completamente unificado. Las capillas existentes se abren al recinto a través de grandes arcos apuntados angrelados, poseyendo cada una de ellas un coro recto y un techo prismástico de tres caras, con un solo ventanal de dos luces en cada cara y cubierta de bóveda enervada. Entre las capillas, sirviendo de refuerzo, se abren seis pequeñas áreas de planta triangular, sin acceso, más bajas que las capillas y decoradas exteriormente con un ventanal. En 1528 fue nombrado maestro de obras de este Monasterio al arquitecto cántabro Juan de Castillo. Sus principales obras se corresponden con la loggia y la unión de la cabecera de la iglesia con las capillas imperfectas.
Portada
Detalle de la portada con el tímpano y las arquivoltas. La portada, construida en 1509, muestra en la arquivolta una profusión de 78 estatuas, repartidas en seis filas, de reyes y reinas del Viejo Testamento, profetas, santos y ángeles, algunos con instrumentos musicales medievales. En las jambas se representan a los doce apóstoles, entre los que hay uno que sujeta al demonio con cadenas. El tímpano muestra un pantocrátor y un tetramorfos de los cuatro evangelistas con su símbolo característico cada uno. El conjunto se remata con la coronación de la Virgen María. Todas las figuras humanas aparecen bajo doseletes.
Capelas Imperfeitas
Las capillas imperfectas. Las denominadas Capelas Imperfeitas (Capillas Inacabadas) permanecen como testimonio de que, realmente, el monasterio nunca fue terminado. Forman una estructura octogonal separada que está anexa al coro de la Iglesia (vía un retrocoro) y a la que sólo se puede acceder desde el exterior.
Sala Capitular Debida al maestro Huguet que fue el encargado de finalizar la célebre Sala do Capítulo, es un espacio de planta cuadrada, cubierta por una abovedada de estrella. Se trata de una construcción de puro estilo gótico, estando formada por dieciséis nervaduras radiales, ocho de las cuales se lanzan sobre las paredes, las restantes lanzadas a los espacios exteriores exteriores, convergiendo todas ellas en una columna central de decoración vegetal. Hoy en día contiene la tumba del soldado desconocido en honor a los soldados portugueses muertos en la Primera Guerra Mundial.
Tumbas reales en el monasterio El monasterio alberga los restos de algunos reyes portugueses de la Dinastía de Avís. La necrópolis real se compone de la Capilla del Fundador (finalizada en 1434) y de las capillas inacabadas (construidas de 1490 a 1515).
Juan I (1385-1433) y su esposa Felipa de Lancaster (1360-1415), hija de Juan de Gante, Duque de Lancaster. sus hijos: o Pedro (1392-1449), Duque de Coimbra, regente de Portugal, y su esposa Isabel de Aragón (14091443), hija de Jaime II, Conde de Urgel. o Enrique el Navegante (1394-1460), con estatua yacente o Juan (1400-1442), Duque de Beja, y su esposa Isabel (1402-1465), hija de Alfonso I Duque de Braganza o Fernando, el príncipe santo (1402-1443) Duarte I (1433-1438) y su esposa Leonor. Alfonso V (1438-1481) Juan II (1481-1495).
Las tumbas fueron profanadas, lo mismo que las del monasterio de Alcobaça, por los soldados franceses en 1810. En la sala capitular se encuentra la Tumba del Soldado Desconocido portugués, que contiene los cuerpos de dos soldados portugueses muertos en combate durante la Primera Guerra Mundial
Una vez terminada la visita al Monasterio de Batalha, nos dirigimos al Leiria , don teníamos el Hotel, tras unos 35 o 40 minutos llegamos y lo primero que hicimos fue comer, y posteriormente a la comida se nos entregaron las llaves de las habitaciones. Por la tarde y después de descansar tras la comida, por grupos que se formaron de forma espontánea y según el grado de relación personal que teníamos cada uno nos lanzamos a conocer esta Ciudad de Leiria; nos indicaron que merecía la pena visitar el Casco Viejo, que era donde se encontraba la Catedral y el Castillo, todas las calles empedradas y muchas cuestas, cada uno llegó hasta donde pudo y el que quiso se sentó en alguna terraza o Bar a tomarse una cerveza o refresco.
Leiria
es una ciudad portuguesa, con cerca de 50.167 habitantes y capital del concelho y del distrito de Leiria, localizada en el litoral, en las márgenes del río Lis, junto al castillo donde fue fundada como villa en 1135. Presenta un clima templado marítimo, lluvioso, con temperaturas suaves. Se puede observar un notable crecimiento demográfico del 271,2% con respecto a 1960, así como también un acusado envejecimiento, aunque inferior al de la población del distrito. En las últimas décadas, Leiria ha conocido un importante desarrollo industrial y cultural, con la creación de escuelas e institutos de enseñanza superior que atraen a un gran número de jóvenes, incluso de otros distritos. La población activa de la ciudad trabaja mayoritariamente en actividades del sector terciario (70,4%) y secundario (18,6%). En 1991 tenía 27.531 residentes, repartidos en seis parroquias (freguesias): Marrazes, Leiria, Pousos, Parceiros, Barreira y BarrosaLugares de interés
Castillo de Leiria. Catedral de Santa Ana Escuela Superior de Educación (Escola Superior de Educação en portugués).
Catedral de Leiria
Catedral de Leiria, vista desde el castillo La catedral de Leiria es una iglesia edificada en el centro de la ciudad de Leiria, en Portugal.
Historia La iglesia fue construida entre 1550 y 1574, según un proyecto del arquitecto Afonso Álvares. La ciudad había
sido elevada a diócesis en 1545, gracias a una petición de Juan III al papa Pablo III, y las iglesias de Nuestra Señora da Pena y de San Pedro eran demasiado pequeñas para la población, haciéndose necesaria la construcción de una nueva iglesia adecuada para la nueva dignidad. La primera piedra fue colocada el 1 de agosto de 1550, convirtiéndose en uno de los más importantes edificios del Renacimiento tardío de Portugal. El edificio fue alterado posteriormente de sucesivas etapas, según el gusto de los obispos de la diócesis. La catedral fue parcialmente destruida en el terremoto de Lisboa de 1755, por lo que se realizaron reformas que la dieron el robusto aspecto actual. De la construcción original, en la fachada frontal, apenas quedan 3 paneles en la entrada, dos de los cuales corresponden al central o mayor. El edificio también sufrió daños durante las invasiones francesas: en 1811, las tropas francesas le prendieron fuego, destruyendo gran parte de su decoración interior.
Descripción La catedral combina los estilos manierista y barroco, por lo que la fachada tiene una apariencia pesada y fría, y el interior es simple, con dos series de pilares grandes y robustos, tres naves decoradas con bóvedas, acentuando la sobriedad y la armonía de la construcción, influida por la Contrarreforma. De la inexistencia de ornamentos y la grandilocuencia espacial de las naves, surgen en oposición las tres capillas rectangulares, con retablos renacentistas. Destaca la capilla mayor, realizada por Baltasar Álvares y fray João Torriano: su altar contiene una talla dorada y paneles pintados por Simão Rodrigues, realizados entre 1605 y 1615, además de dos tribunas del siglo XVII colocadas a ambos lados. La capilla del baptisterio, en la nave lateral izquierda, de estilo barroco, posee una pila bautismal monolítica. En las capillas se encuentras diversas lápidas, algunas, en la nave lateral derecha, realizadas por Ernesto Korrodi. Detrás de la catedral, al este, se encuentra el claustro, constituido por tres galerías y un austero patio interior, realizado en piedra, en el que hay un pozo. La sacristía, situada en una galería lateral a la derecha del claustro, está decorada con azulejos del siglo XVII y tiene una fuente de mármol. Delante de la catedral se encuentra un gran atrio, con una escalera ondulada, que fue mandada construir en 1603-1604 por el obispo Pedro de Castilho, que también mandó construir los claustros. La catedral es una de las pocas en Portugal en las que la torre campanario está separada del edificio principal. A la izquierda del edificio se encuentran tres arcos, de los que, según una leyenda, uno fue usado por un rico
hombre de la ciudad para esconder sus posesiones, estando en los otros dos la enfermedad y el hambre, por lo que nadie se atrevería a buscar las riquezas, por desconocer cual de los arcos oculta las riquezas.
CASTILLO DE
LEIRIA
Sobre las 8 de la tarde fuimos llegando al hotel para cenar y después, unos se fueron a la cama, después de un rato de tertulia y otro jugaron unas manos de brisca, sobre todo las Sras, y así transcurrió nuestro primer día de viaje. Mañana tenemos desayuno a las 8,30/h. y a las 9 /h., partimos para Coimbra y después visitaremos Nazaré.
Nuestro segundo día de viaje, comenzó a las 8,30/h, desayunando y a las 9/h, nos esperaba en el autocar la guía. Nos dirigimos a Coimbra, más o menos media hora de viaje. En primer lugar y durante el viaje nos fue explicando superficialmente las características de la Ciudad de Coimbra. En principio nos llevaron a un mirador de la Ciudad, desde donde se domina prácticamente toda ella, con unas vistas muy bonitas. Al fondo, en la parte mas alta de la Ciudad se veía un edificio bastante grande, nos indicó que era la Universidad de Coimbra, que poco después visitaríamos. Tras 15 o 20 minutos para tomar fotografías desde este mirador, comenzamos una visita panorámica de la Ciudad de Coimbra desde el autocar. Viendo los lugares mas importantes y frecuentados de la
Ciudad. El autocar nos llevó hasta la parte más alta, donde se encuentra la famosa Universidad de Coimbra. Entramos en un gran patio porticado y con unas fachadas muy bonitas, tanto como la de la Biblioteca y la del Rectorado. Un estudiante de Veterinaria con su paca negra, nos dio una ligera explicación sobre la Universidad, y nos ofreció comprar una monografía con las mejores fotografías y un DVD con Fados (canción típica portuguesa) e imágenes de todo Portugal. Seguidamente iniciamos la bajada por unas calles empedradas y muy pintorescas, bastantes estrechas; todas ellas llenas de pequeños comercios de regalos y recuerdos. Nos detuvimos en la fachada de la Catedral Nueva y de la Catedral vieja. Una vez abajo nos dejaron una hora de tiempo libre para visitar la Ciudad por nuestra cuenta. La mayoría del personal nos perdimos por las cafeterías, terrazas y en un mercadillo de ropa que había. A La hora convenida todos estábamos enfrente del Hotel Astoria para retomar nuestra excursión.
C O I M B R A Coímbra (en portugués, Coimbra) es una ciudad portuguesa, capital del Distrito de Coímbra, situada en la Región Centro y subregión de Baixo Mondego, con cerca de 150.000 habitantes. Situada a poco más de 200 km de Lisboa y a 150 km de Oporto, está bañada por el río Mondego. Fue capital nacional de la Cultura en 2003. Historia Ciudad de calles estrechas, patios, escaleras y arcos medievales, Coímbra fue la cuna del nacimiento de seis reyes portugueses y de la primera dinastía, así como de la primera Universidad de Portugal y una de las más antiguas de Europa. Los romanos llamaron a la ciudad, que se erguía por una colina sobre el río Mondego, Æminium. Más tarde, a medida que aumentó su importancia paso a ser designada por Conímbriga. En el 714, tras la conquista musulmana de la península ibérica, la ciudad fue parte de Al-Ándalus con una importante comunidad mozárabe y pronto se convertiría en un lugar estratégico comercial entre el norte cristiano y el sur árabe. En 1064 la ciudad fue reconquistada por Fernando I de León. Coímbra renace y se convierte en la ciudad más importante al sur del Duero, capital de un vasto condado gobernado por el mozárabe Sisnando Davídiz. Con el Condado
Portucalense, el conde Enrique y la reina Teresa la convirtieron en su residencia, y vería nacer entre sus seguras murallas al primer rey de Portugal, Alfonso I de Portugal, que la nombraría capital del Condado, en detrimento de Guimarães. Hasta 1255 Coímbra no perdió este privilegio, cuando la capital portuguesa pasó a ser Lisboa. En el siglo XII, Coímbra presentaba ya una estructura urbana dividida entre la ciudad alta, designada por Alta o Almedina, donde vivían los aristócratas, los clérigos y, más tarde, los estudiantes, y por Baja, la zona del comercio, los artesanos y los barrios junto al río. Desde mediados del siglo XVI la historia de la ciudad gira en torno a la Universidad de Coímbra, y a partir del siglo XIX empieza a expandirse más allá del casco amurallado, que llega incluso a desaparecer por las reformas llevadas a cabo por el Marqués de Pombal. La primera mitad del siglo XIX, tras tiempos difíciles para Coímbra, con la ocupación de la ciudad por las tropas de Junot y Massena, durante la invasión francesa y, posteriormente, la extinción de las órdenes religiosas. Sin embargo, en la segunda mitad de este siglo, vería recuperar el esplendor perdido: en 1856 surge el primer telégrafo eléctrico en la ciudad y la iluminación a gas, en 1864 es inaugurado el ferrocarril y 11 años después nace el puente férreo sobre las aguas del río Mondego.
Monumentos y edificios
Sede antigua de la Universidad de Coímbra.
Imagen de CoĂmbra.
Iglesia de Santa Cruz.
Órgano de la Iglesia de Santa Cruz.
Iglesia de Santiago.
Plaza del Comercio.
Universidad de Coímbra.
Sede antigua de la Universidad de Coímbra. Biblioteca Joanina. Capilla de San Miguel. Torre de la Universidad. Arcosna. Arcos del Jardín. Puerta Férrea. Convento de Santa Clara-La Nueva. Convento de Santa María de Celas. Convento de San Francisco. Monasterio de Celas. Monasterio de Santa Clara-La Vieja. Iglesia de la Santa Cruz. Iglesia de Santa Justa. Iglesia de San Antonio de Olivales. Iglesia de San Bartolomé.
Iglesia de San Salvador. Iglesia de Santiago. Sé Nova (Catedral Nueva). Sé Velha (Catedral Antigua). Palacio de Justicia. Quinta de las Lágrimas. Torre de Anto. Rio Mondego. Jardín Botánico. Parque temático "Portugal dos Pequenitos". Acueducto. Museo de Arte Sacra de la Universidad. Museo Académico. Museo Antropológico. Casa Museo Bissaya Barreto. Museo de Física. Museo de Mineralogía y Geología. Museo de Historia Natural. Museo Nacional de la Ciencia y la Técnica. Museo Nacional Machado de Castro. Museo Militar. Museo de los Transportes. Museo Zoológico. Museo de la Santa Casa de la Misericordia. Estádio Cidade de Coimbra.
Su antecedente inmediato es el Estudo Geral fundado en 1290 en Lisboa y transferido a Coímbra en 1308 por el rey Dionisio (Dinis) el Labrador,1 sólo un siglo más tarde de la fundación de la nación portuguesa. Antes, en 1288, fue elaborada una Súplica al papa Nicolás IV firmada por los abades de los monasterios de Alcobaça, Santa Cruz de Coímbra y San Vicente de Lisboa y por los párrocos de 24 iglesias y conventos del reino. En este documento se solicitaba la fundación de un "Estudio General" financiado por las instituciones religiosas firmantes. Realmente, no se sabe si esta Súplica llegó a la Santa Sede. El 1 de marzo de 1290, Dionisio I firmó en Leiria, el documento “Scientiae thesaurus mirabilis”, que instituía la propia Universidad y pedía al papa Nicolás IV la confirmación. La bula “De statu regni Portugaliae” del papa Nicolás IV, con fecha de 9 de agosto de 1290, reconocía el Estudio General, con las facultades de Artes, Derecho Canónico, Derecho Civil y Medicina. La de Teología se reservó a los conventos dominicos y franciscanos (hasta aproximadamente el año 1380 en que pasó a formar parte de la enseñanza del sistema portugués). La universidad se instaló en Coímbra, en el Palacio de Alcáçova en 1308.
En 1338 el organismo se trasladó a Lisboa, donde permaneció hasta 1354, año en el que volvió a Coímbra. Pero en 1377 volvió de nuevo para la capital portuguesa. Allí permaneció hasta 1537, fecha en la que, por orden del rey Juan III volvió a Coímbra, hasta nuestros días.
Facultades
Rectorado de la Universidad de Coímbra.
Puerta de Minerva en el Paço. Actualmente cuenta con ocho facultades: Letras, Derecho, Medicina, Ciencias y Tecnología, Farmacia, Economía, Psicología y Ciencias de la Educación y Ciencias del Deporte y Educación Física, en las que estudian cerca de 22000 alumnos. La Universidad se divide en tres grandes 'polos':
La Alta Universitária, donde se sitúan el rectorado y los servicios administrativos, compartiendo el histórico edificio de la Universidad con la Facultad de Derecho. En la Alta universitária aún se
encuentran las Facultades de Letras y Psicología, así como los Departamentos de Ciencias y Tecnología. Completan el conjunto el edificio de la Biblioteca General y el Archivo y la Dirección e la Facultad de Ciencias y Tecnología.
El Polo II o Polo de Ingeniería, se sitúan todos los departamento de la Facultad de Ciencias y Tecnología: o
Departamento de Ingeniería Electrotécnica y de Ordenadores o Departamento de Ingeniería Informática o Departamento de Ingeniería Civil o Departamento de Ingeniería Química o Departamento de Ingeniería Mecánica El Polo III, o Polo de Ciencias de la Salud, se encuentran los cursos de área médica, así como algunos laboratorios de investigación asociados. La Facultad de Economía, situado en un palacete en la Avenida Dias da Silva, se encuentra apartado de los otros tres polos.
Biblioteca Joanina
Interior de la Biblioteca Joanina
La Biblioteca Joanina es una biblioteca de la Universidad de Coimbra, erigida en el siglo XVIII, situada en el patio de la Facultad de Derecho y mandada a construir por el rey Juan V; forma parte de la Biblioteca General de la Universidad de Coimbra. En otros tiempos, fue también conocida como Biblioteca de Cámara. Su estilo es marcadamente rococó, siendo reconocida como una de las más originales y espectaculares bibliotecas barrocas europeas. Además de lugar para la investigación de muchos estudiosos, el espacio se utiliza frecuentemente como sala de conciertos, exposiciones y otros eventos culturales.
Historia
Exterior de la Biblioteca Joanina Su construcción comenzó en el año 1717, en el exterior del primitivo perímetro urbano islámico, sobre la antigua cárcel del Palacio Real, con el objetivo de albergar la biblioteca universitaria de Coimbra, y fue concluida en 1728. Fue construida según el proyecto real de reforma de los estudios universitarios; consecuencia de la difusión de las ideas de la Ilustración en Portugal. El maestro de obras fue João Carvalho Ferreira. La decoración se realizó algunos años más tarde, en vísperas de la Reforma Pombalina; los frescos de los techos y cornisas fueron pintados por Antonio Simões Ribeiro, pintor, y Vicente Nunes, dorador. El gran retrato del rey se atribuye al italiano Domenico Dupri y la pintura y dorado de los estantes fue hecha por Manuel da Silva. El mobiliario, en maderas exóticas brasileñas y orientales, fue ejecutado por el tallador Francesco Gualdini.
Arquitectura
Detalle del interior de la Biblioteca Joanina Su exterior se asemeja a un gran paralelepípedo en el que resalta su portada de estilo barroco, coronada por un gran escudo del monarca que la mandó construir: Juan V. El interior consta de tres salas que se comunican entre sí, a través de arcos idénticos al de la portada. Las paredes de las salas están completamente cubiertas de estantes decorados con motivos chinos variando de una a otra el color del fondo. Así, en la primera sala los motivos dorados contrastan con el fondo verde; en tanto que en la segunda resaltan sobre un fondo rojo y finalmente, en la tercera el fondo es negro. Todo el interior está presidido por un retrato del rey Juan V que, colocado en lo alto de la pared de la última sala, funciona como punto de fuga. La nave central se asemeja a una capilla donde el retrato del rey Juan V ocupa el lugar del altar. La moldura dorada del cuadro simula una cortina que se abre para mostrar en una "espléndida composición alegórica" al rey.
Fondos bibliográficos La Joanina reúne cerca de 70000 volúmenes, la mayor parte de los cuales están en la planta principal; la única abierta al público de las tres de las que consta el edificio. En ella se conservan los principales fondos de Libro Antiguo (documentos hasta el 1800) de la Universidad. Sus cerca de 1250 m2 actuales se obtuvieron con la disposición de dos niveles de sótanos para depósito y salas de trabajo
Capilla de San Miguel (Coímbra)
El altar de la capilla de San Miguel. La capilla de San Miguel, (portugués, Capela de São Miguel), es la capilla de la Universidad de Coímbra. Los planos de la capilla se realizaron y ejecutaron en el primer cuarto del siglo XVI, por Marco Pires, aunque la obra fue completada paulatinamente durante los siglos XVII y XVIII; entre 1733 y 1738, le fue añadida un grandioso órgano barroco, que fue ornamentado con pintura por Gabriel Ferreira da Cunha, al estilo chinoiserie.1
Catedral Nueva de Coímbra Catedral Nueva de Coímbra
Tipo
Catedral
Ubicación
Coímbra, Portugal Uso
Culto
Católico Arquitectura
Construcción
siglo XVI - siglo XVIII
Estilo
Manierismo -
arquitectónico
Barroco
La Catedral Nueva de Coímbra, de la ciudad de Coímbra en Portugal, está situada en la plaza principal cerca de la Universidad de Coímbra. Originalmente, la Catedral Nueva fue la iglesia del Colegio de los Jesuitas (Colegio de las Once Mil Vírgenes), que se había instalado en Coímbra en 1541. La iglesia comenzó a construirse en 1598, por un arquitecto responsable del proyecto de los jesuitas de Portugal,
Baltazar Álvares, influida por la Iglesia de San Vicente de Fora (Lisboa). Las obras fueron muy lentas y el culto no comenzó hasta 1640 y el templo se inauguró en 1698. En 1759, los jesuitas fueron expulsados de Portugal y el Marqués de Pombal, en 1772, hizo transferir la sede episcopal de Coímbra de la Catedral Vieja a la espaciosa iglesia jesuítica.
Arquitectura La fachada de la iglesia está marcada por fuertes líneas y tiene cuatro estatuas de santos jesuitas. En la parte superior de la fachada, finalizada en el siglo XVIII, la decoración es barroca, que contrasta con las partes más bajas, de estilo manierista. El interior es de una nave abovedada con capillas laterales y crucero con bóveda y cúpula. El transepto y el presbiterio están decorados con enormes retablos de talla dorada, construidos a finales del siglo XVII y principio del siglo XVIII. Las capillas laterales contienen retablos manieristas y barrocos. La sillería del coro, del siglo XVII, fue traída de la Catedral Vieja así como la magnífica pila bautismal de una de la capillas lateral, esculpida en estilo gótico manuelino por Pedro y Felipe Henriques en el siglo XVI.
Catedral Vieja de Coímbra
Fachada principal de la Catedral Vieja de Coímbra. La Catedral Vieja de Coímbra (en portugués: Sé Velha de Coimbra) es uno de los edificios de estilo románico más importantes de Portugal. La construcción de la Catedral comenzó después de la Batalla de Ourique (1139), cuando Afonso Henriques se declaró rey de Portugal y escogió Coímbra como capital del reino. En la catedral está enterrado Sesnando, Conde de Coímbra.
Historia Coímbra (llamada Aeminium en la época romana) fue sede episcopal desde el siglo V, cuando sucedió a la vecina Conímbriga, que había sido invadida por los suevos en 468. A pesar de su larga historia, no existen noticias precisas de la Catedral de Coímbra desde la época germánica hasta la construcción de la Catedral Vieja. En 1139, después de la Batalla de Ourique, Afonso Henriques decidió financiar la construcción de una nueva catedral. Las obras deben de haber comenzado en tiempos del obispo Bernardo (muerto en 1146), pero el impulso definitivo lo dió el obispo Miguel Salomão que ayudó a la financiación de la misma en 1162. En el año 1182, aunque todavía no estaba concluida, las obras de la Catedral estaban lo suficientemente adelantadas como para recibir los despojos mortales del obispo Bernudos, que fue el sucesor de Miguel Salomão. En 1185 fue la sede de la coronación del segundo rey de Portugal, Sancho I. Los trabajos principales terminaron a inicios del siglo XIII con la conclusión del claustro – empezado hacia el año 1218– durante el reinado de Alfonso II. La obra de la catedral románica se atribuye al maestro Roberto, que dirigía las obras de la Catedral de Lisboa y
en la misma época visitaba Coímbra periódicamente. La dirección de las obras quedó a cargo del maestro Bernardo, seguido del maestro Soeiro, arquitecto que después trabajó en otras iglesias de la diócesis de Porto. En el siglo XVI se hicieron algunos trabajos de mayor importancia: las capillas, las naves y los pilares fueron recubiertos con azulejos; se construyó la Porta Especiosa en el lado norte y se modificó el absidiolo sur en estilo renacentista, pero lo esencial se mantuvo en estilo románico. En 1772, después de que los jesuitas fueran expulsados de Portugal por el Marqués de Pombal, la sede episcopal fue transferida a la antigua iglesia jesuítica de estilo manierista que se convertirá en la Sé Nova de Coimbra (Catedral Nueva de Coímbra).
Vista de la Porta Especiosa, de estilo renacentista, en la fachada norte de la catedral, obra de João de Ruão.
Arquitectura La Sé Velha de Coimbra es la única catedral románica portuguesa de la época de la reconquista que ha sobrevivido prácticamente intacta hasta nuestros días. La Catedral Vieja y en menor grado las iglesias de Santiago y San Salvador son el exponente de las fase alfonsina del románico coimbrano. Otras iglesias de la ciudad como el monasterio de la Santa Cruz y la iglesia de São João de Almeida fueron muy alteradas con lo que perdieron su carácter románico original.
Vista exterior del ábside principal (capela-mór) y la torre-linterna románica de la Catedral Vieja. Vista desde el exterior la Catedral Vieja parece un pequeño castillo, con muros altos coronados con almenas, así como con pocas y estrechas ventanas. La apariencia de fortaleza es común a las catedrales de la época y se explica por el clima bélico de la reconquista. La fachada oeste (principal) tiene una especie de torre central avanzada con un portal con múltiples arquivoltas y un ventanal que es similar a una portada. Los capiteles, arquivoltas y jambas de la portada y del ventanal están decorados con motivos románicos con influencias árabes y pre románicas. La fachada está reforzada por contrafuertes que ayudan a compensar la fuerte inclinación del terreno. La fachada norte tiene dos portadas de estilo renacentista, siendo notable la Porta Especiosa, que es un pórtico de tres pisos, tipo retablo, construido en la década de 1530 por João de Ruão. Esta portada es una de las obras principales del primer renacimiento en Portugal. En el lado este se observa el ábside principal románico y dos absidiolos, el de lado sur modificado en estilo renacentista. Sobre el transepto hay una torre-linterna cuadrangular con algunas alteraciones del siglo XVIII. El interior es de tres naves y cinco tramos, con el transepto poco desarrollado, la cabecera formada por el abside y dos absidiolos. La catedral está cubierta por una bóveda de cañón en la nave central y el transepto, y por bóvedas de arista en las naves laterales. La nave principal tiene un elegante triforio (galería con arcadas) en el segundo piso. Todas las columnas del interior tienen capiteles decorados con temas geométricos, vegetales o animales. Las ventanas de la torre-linterna del crucero y el ventanal de la fachada principal conforman las principales entradas de luz natural de la catedral. El claustro que se encuentra en la parte sur del templo, fue construido durante el reinado de Alfonso II en un periodo de transición al gótico. Cada una de las caras del
claustro tiene cinco arcos ojivales, envolviendo cada uno un par de arcos geminados de medio punto, rasgándose cada bandera con un pequeño rosetón decorado con tracería muy simple. Los tramos son cuadrados, con naves abovedadas, arcos ojivales muy apuntados y cruceros de volta entera. Los capiteles de los arcos están decorados en su mayoría con motivos vegetales. Un elemento particular son las esquinas del claustro donde se produce el encuentro de dos arcadas góticas que se interrumpen mutuamente a media altura, lo que produce un efecto original.
Arte El aspecto más notable de la decoración románica de la Catedral Vieja es la gran cantidad de capiteles esculpidos (cerca de 380), lo que la convierte en uno de los principales núcleos de la escultura románica portuguesa. Los motivos son geométricos y vegetales de influencia árabe o pre-románica, así como cuadrúpedos y aves enfrentadas. Prácticamente no hay representaciones humanas y no hay ninguna escena bíblica. La ausencia de figura humanas se considera, tal vez, consecuencia de que los artistas fueran mozárabes que se habían establecido en Coímbra en el siglo XII.
Claustro románico-gótico de la Catedral Vieja. De la época gótica (siglos XIII-XIV) subsisten varias tumbas con estatuas yacentes a lo largo de las naves laterales, algunas de ellas muy deterioradas. Uno de los más llamativos es la tumba de Vataça (o Betaça), una dama bizantina que vino a Portugal a finales del siglo XIII acompañando a Isabel de Aragón que venía a casarse con el rey Dinis. La tumba de Vataça lleva el emblema del Imperio bizantino: Una águila de dos cabezas. Entre el siglo XV y XVI, el obispo Jorge de Almeida promovió una gran campaña decorativa. Los pilares de las naves y las paredes laterales fueron recubierto con azulejos hispano-árabes sevillanos. Estos azulejos, pintados y con motivos geométricos, fueron retirados en una reforma posterior, pero todavía pueden apreciarse algunos pedazos en ciertos puntos de la catedral. Otra adición importante fue el retablo, construido entre 1498 y
1502 por los tallistas flamencos Olivier de Gand y Jean d'Ypres en estilo gótico flamígero. Este retablo, un intrincado panel con figuras esculpidas que ilustran la historia de la Virgen y de Jesús ocupa casi todo el espacio de la capela-mor románica y es el mejor de los retablos de este tipo en Portugal. El altar gótico está apoyado sobre una mesa de altar románica con inscripciones. El absidiolo norte (capilla de São Pedro), en el que está enterrado el obispo Jorge de Almeida, tiene un altar renacentista de Nicolau de Chanterenne. El absidiolo sur fue totalmente reconstruido en estilo renacentista (terminado cerca de 1566) y tiene un magnífico retablo en piedra que representa a Jesús y a los apóstoles, obra del escultor João de Ruão. En la década de 1530, João de Ruão construyó la Porta Especiosa en la fachada norte. En el transepto se encuentra también una pila bautismal gótico-renacentista (entre de 1520-40), obra del portugués Diogo Pires o-Moço, que esta originalmente en la iglesia de São João de Almedina. La pila bautismal manuelina de la Catedral Vieja se encuentra hoy en la Sé Nova de Coimbra (antigua iglesia de los jesuitas).
El río Mondego es un río portugués, que nace a 1425 m de altitud en la Sierra de la Estrella (Serra da Estrela en portugués), concejo de Gouveia. Recorre 234 km hasta desembocar en el océano Atlántico en la localidad de Figueira da Foz y abarca una cuenca hidrográfica de unos 6644 km². Se trata del río más largo que recorre exclusivamente tierras de Portugal. En su cabecera es conocido como Mondeguinho. Los romanos ya lo llamaban el río de Munda, que significa transparencia, claridad o pureza. Los principales afluentes del Mondego son, desde la cabecera hasta su desembocadura, los siguientes: el Dão (río) (derecha), el Alva (izquierda), el Ceira (izquierda), y una vez pasado Coímbra, el Arunca (izquierda) y el Pranto (izquierda). A lo largo de su curso, el Mondego pasa por Manteigas, Guarda, Celorico da Beira, Fornos de Algodres, Gouveia, Mangualde, Seia, Nelas, Oliveira do Hospital, Carregal do Sal, Tábua, Santa Comba Dão, Mortágua, Penacova, Vila Nova de Poiares, Coímbra, Montemor-o-Velho, Soure y Figueira da Foz.
Nos dirigimos a Nazaré: Ciudad costera con un mirador en la parte más alta de la Ciudad desde donde se domina una estupenda vista de toda la costa y de su magnífica playa, que después visitaremos. Desde este mirador nos hicimos todos una gran cantidad de fotografía, tanto del paisaje que se dominaba como de nosotros mismos, en este lugar tan bonito y pintoresco. Después, en el autocar bajamos a la fabulosa playa que tiene Nazaré, y dimos una vuelta por su paseo marítimo, observando cómo secan el pescado que pescan y luego lo venden a los Bares y en el mercado; era curioso de ver y de oler. Una vez terminada la visita a Nazaré, nos dirigimos al Hotel para comer, y posteriormente tener un pequeño descanso.
N A Z A R É Nazaré es una vila portuguesa en distrito de Leiria, región Centro y subregión del Oeste, con cerca de 10 100 habitantes. En el Océano Atlántico da nombre al llamado Cañón de Nazaré. Es la sede de un pequeno municipio con 80,49 km² de área y 15 060 habitantes (2001), subdividido en 3 freguesias. Los municipios están rodeados al norte, al este y al sur por el municipio de Alcobaça y al oeste tiene litoral en el Océano Atlántico
Historia El concelho tuvo la foral en el año 1514. El municipio la vila y la freguesia se denominaban anteriormente Pederneira en el año 1912. Hoy en día Pederneira es un barrio con la sede del concelho, manteniendo el edifício de los antiguos Paços do Concelho. Junto a las ciudades portuguesas de Elvas y Santarém, Nazaré tiene a la ciudad española de Badajoz en su lista de ciudades hermanadas Nazaré recoge anualmente un torneo internacional de balonmano en los días de la Pascua. Este torneo lo organizó por vez primera el Dr. Fernando Soares con la intención de insertar el balonmano en la cultura de Nazaré. En dicho torneo pueden participar equipos portugueses e internacional desde la categoría "infantis" hasta la categoría "Juvenis" de ambos sexos.
A las 5,30 de la tarde nos dirigiremos a Fátima para visitar y participar en la procesión del rosario nocturno. Esta noche cenamos en Fátima, en otro Hotel, llamado “CORONA DE FATIMA “, donde también comeremos mañana.
Santuario de Fátima El Santuario de Fátima, localizado en la Cova da Iria, freguesía de Fátima (Portugal) es uno de los más importantes santuarios marianos del mundo. El santuario está situado a 11 km de la ciudad de Ourém, a 25 km de Leiria, 120 km de Lisboa, 180 km de Oporto y está aproximadamente a 300 metros encima del nivel del mar, en pleno macizo calcáreo de Extremadura.
Historia En 1917, Lúcia de Jesus, Francisco Marto y Jacinta Marto (conocidos como "los tres pastorcitos"), afirmaron haber presenciado varias apariciones de la Virgen María. En una de esas apariciones les habría dicho que construyeran una capilla en aquel lugar, que actualmente es la parte central del Santuario donde está guardada una imagen de Nossa Senhora. Con el paso del tiempo el Santuario se extendió, hasta hoy en día, en que existen ya dos basílicas, aumentado así la capacidad del acogimiento de los peregrinos en el recinto abierto.
El Santuario de Fátima El Santuario de Fátima está compuesto principalmente por la Capilla de las Apariciones, Recinto de Oración, Basílica de Nuestra Señora del Rosario, Casa de Retiro de Nuestra Señora del Carmen y Rectorado, Casa de Retiro de Nuestra Señora de los Dolores y Albergue para enfermos, Plaza Pío XII, Centro Pastoral Pablo VI y la nueva Iglesia de la Santísima Trinidad. La Azinheira Grande era la encina más grande de la Cova da Iria en 1917 y, por eso, también es parte de la historia de las apariciones. Junto a ella, esperaban los pastorcitos a que apareciera la Virgen María.
La Cruz Alta tiene 27 m de altura. Un módulo de hormigón del muro de Berlín recuerda la intervención de Dios, prometida en Fátima, en la caída del comunismo. El Presépio es una escena del nacimiento de Jesús, cuyo autor es el escultor José Aurélio y está situado junto al Rectorado.
Basílica y las Columnatas
Imagen de la Virgen de Fátima en un pedestal de la Capilla de las Apariciones que marca el sitio exacto donde estaba la encina sobre la cual los tres pastorcitos dicen haber visto Nuestra Señora.
Interior de la Basílica del Santuario.
Basílica del Rosario La Basílica de Nuestra Señora del Rosario, comenzó a ser construida en 1928, en estilo neo-barroco, según un proyecto del arquitecto holandés G. Van Kriecken, consagrándose el 7 de octubre de 1953. En 1954 le fue concedido el título de Basílica Menor, por el Papa Pio XII.
La torre tiene 65 m de altura, estando rematada por una corona de bronce de 7000 kg, encimada por una cruz, iluminada durante la noche. El día 13 de mayo de 1958, fue inaugurada una gran estatua del Inmaculado Corazón de María. En junio de 1959 fue colocada en el nicho de la fachada de la Basílica. El abside la capilla mayor se encuentra presidido por un relieve en piedra que representa a la Santísima Trinidad coronando a María, de Maximiano Alves. A la entrada de la Basílica se encuentran estatuas de los grandes apóstoles del Rosario y de la devoción al Inmaculado Corazón de María. En el lado derecho, se encuentra la imagen de San Juan Eudes, fundador de la Congregación de Jesús y María (Eudistas) y de la Congregación de Nuestra Señora de la Caridad del Refugio (también de autoría de Martinho de Brito). En el lado izquierdo, una estatua de San Esteban, primer rey de Hungría, de António do Amaral de Paiva. Las tumbas de los hermanos Francisco y Jacinta Marto, se encuentran respectivamente en el extremo derecho e izquierdo del transepto.
Columnatas Es el conjunto arquitectónico que una la Basílica a los edificios construidos a cada lado del Recinto. Obra del arquitecto António Lino, está constituida por 200 columnas y 14 altares. En los retablos de los altares se pueden ver las 14 estaciones de la Vía Sacra, ejecutadas en cerâmica policromada, cuyo autor es Lino António. Hay diecisiete estatuas de mármol encima de la Columnata. Representan a los santos portugueses, santos fundadores de congregaciones religiosas y otros apóstoles de la devoción a Nuestra Señora, siendo todas de escultores portugueses. Las estatuas mayores miden 3,20 m y representan los cuatro santos portugueses: San Juan de Dios (autor: Álvaro Brée), San Juan de Brito (António Duarte), San António de Lisboa (Leopoldo de Almeida) y el Beato Nuno de Santa María (Barata Feio). Las más pequeñas representan a santa Teresa de Ávila (Maria Amélia Carvalheira da Silva), san Francisco de Sales (M. A. Carvalheira da Silva), san Marcelino Champagnat (Vasco Pereira da Conceição), san Juan Bautista de la Salle (Vítor Marques), san Alfonso Maria de Ligorio (M. A. Carvalheira da Silva), san Juan Bosco (J. M. Mouta Barradas) y santo Domingo Sávio (J. M. Mouta Barradas), san Luis María Grignion de Montfort (Domingos Soares Branco), san Vicente de Paúl (José Fernandes de Sousa Caldas), san
Simón Stock (M. A. Carvalleira da Silva), san Ignacio de Loyola (M. A. Carvalheira da Silva), san Pablo de la Cruz (Jaime Ferreira dos Santos), san Juan de la Cruz (M. A. Carvalheira da Silva) y santa Beatriz da Silva (Maria Irene Vilar). La estatuta del Sagrado Corazón de Jesús aparece en el centro del recinto de oración. Es de bronce dorado y fue ofrecida por un peregrino anónimo y bendecida por el Nuncio Apostólico, monseñor Beda Cardinale, el 13 de mayo de 1932. Su localización simboliza la centralidad de Jesús en el mensaje de Fátima. En la base del monumento se encuentra una fuente.
Capilla de las Apariciones
La Capilla de las Apariciones. La Capilla de las Apariciones (o Capelinha das Aparições, en portugués) está construida en el lugar de las apariciones que tuvieron lugar desde el 28 de abril al 15 de junio de 1919. Se celebró la primera misa el 13 de octubre de 1921. El 6 de marzo de 1922, fue dinamitada por desconocidos, pero se reconstruyó ese mismo año. El pedestal donde se encuentra la Imagen de la Virgen marca el sitio exacto donde estaba la pequeña encina sobre la cual la Virgen se mostró a los pastorcitos el 13 de mayo, junio, julio, septiembre y octubre de 1917. La madera que se encuentra encima de la imagen de la Virgen fue embarcada en el navío «Krasnaya Gorka», el 12 de septiembre de 1988, en el puerto ruso de Igarka, al norte de la Unión Soviética.
otros lugares importantes
La Cruz Alta de Fátima y la Iglesia de la Santísima Trinidad.
Capilla de San José El templo contiene la Capilla de San José. Cada uno de los 14 altares laterales representa un misterio del Rosario. La Coronación de Nuestra Señora de Fátima, el 13 de mayo de 1946, y el final del Año Santo, el 13 de octubre de 1951, son evocados en las dos lapidas, a la entrada de la capilla mayor. El arco de crucero ostenta un mosaico, donde se lee Regina Sacratissimi Rosarii Fatimae ora pro nobis. En el lado derecho de la capilla mayor, se encuentra una estatua de Santo Domingo de Guzmán, el gran apóstol del rosario en el siglo XIII (autoría de Maria Amélia Carvalheira da silva). En el lado izquierdo, San Antonio María Claret, fundador de la Congregación de Misioneros del Corazón de María (autoría de Martinho de Brito) y copatrón de la Diócesis de Canarias.
Iglesia de la Santísima Trinidad
Mosaico con la Coronación de la Virgen. Al final de la explanada se encuentra la Iglesia de la Santísima Trinidad con 9.000 asientos, obra del arquitecto Alexandros Tombazis. Se inauguró el 13 de octubre de 2007.
Peregrinaciones Anualmente más de cinco millones de visitantes, de todos los países, se desplazan allí. Las mayores peregrinaciones tienen lugar anualmente desde los días 12 y 13 de mayo al 13 de octubre, siendo tradicionalmente hechas a pie. El 13 de agosto, tiene lugar una gran peregrinación, dedicada al emigrante. El CNC (Centro Nacional de Cultura) en colaboración con las entidades responsables del Santuario de Fátima lanzaron en 2003 un proyecto cuya finalidad era, a semejante de lo que ocurre con las peregrinaciones al Santuario de Santiago de Compostela, a marcar los Caminos de Fátima para guiar a los innumerables peregrinos que todos los años se dirigen a pie al Santuário, creando los Caminos de Fátima. De este proyecto nacieron dos caminos más, el Camino do Tejo, que une Lisboa a Fátima, y el Camino do Norte, que enlaza O Oporto y Fátima. El Camino do Tejo acaba de ser terminado, con sus flechas azules indicando la ruta, mientras que el Camino do Norte se encuentra en fase de conclusión. Se ha difundido por todo el mundo el Culto a la Virgen de Fátima, gracias a los viajes de las Vírgenes Peregrinas (imágenes de la Virgen de Fátima que recorren varios países) y a los emigrantes portugueses. Así es posible encontrar varias iglesias, parroquias, diócesis, escuelas, hospitales, monumentos, etc. dedicadas a Nuestra Señora de Fátima. El actual rector de este Santuario es el Padre Virgilio Antunes.
Galería fotográfica
Torre de la Basílica del Rosario
Escena del nacimiento de Jesús.
Iglesia de la Santísima Trinidad de Fátima
Estatua del Papa Juan Pablo II
Vista panorámica
Vista panorámica del Santuario de Nuestra Señora de Fátima (con la Capilla de las Apariciones y la Basílica del Rosario).
Estuvimos en Fátima la tarde del sábado y la mañana del domingo, en la que asistimos a la misa del peregrino con una emocionante despedida de la Virgen, agitando los pañuelos blancos al aire.
Una vez terminada esta misa del peregrino, nos dirigimos al Hotel “CORONA DE FATIMA” donde nos sirvieron la comida. Por la mañana del domingo y antes de llegar a la explanada de la Basílica de la Virgen de Fátima, nos llevaron a una bodega de vino de Oporto, donde nos explicaron su elaboración y nos dieron a catar varios vinos y licores de dicha bodega. Y el que más y el que menos, alguna botella de Oporto llevó a Tembleque, para su degustación con la familia, Terminada la comida, emprendimos viaje de regreso a Tembleque, que se realizó con toda normalidad, y con el buen humor que hemos mantenido durante todo el viaje. GRACIAS A TODOS, POR QUE ENTRE TODOS HEMOS CONSEGUIDO UN VIAJE AMENO Y AGRADABLE. “ UN PUEBLO NOBLE, ES AQUEL, QUE TRABAJA, RESPETA Y SE DIVIERTE”