PROYECTA TU FLUJO

Alex Arriaga

“Con el mismo gusto me habría zampado una ración de sardinas, pero también a eso hube de renunciar porque gastar dinero no entraba en mi presupuesto.” Eduardo Mendoza.

Es muy común escuchar comentarios en las finanzas personales sobre: no me alcanza, apenas llegué a la quincena, me urge que llegué el próximo pago de mi sueldo, etc.

Todo por una desordenada administración de nuestro flujo de efectivo, esto se puede evitar con un presupuesto adecuado. Para tener no tener este tipo de problemas, te voy a sugerir una serie de pasos para elaborar tu presupuesto y poder tener una mayor tranquilidad económica mes a mes. Todo en 5 simples pasos que cualquiera puede seguir:

1. Calcula tus ingresos. No importa si eres asalariado, freelancer o emprendedor. Todos podemos tener una retribución promedio mensual. Debes de considerar todos los ingresos ordinarios: quincena, bonos, aguinaldo, etc. No consideres las deducciones, sólo lo que realmente entra como dinero que puedes utilizar. Suma todas las entradas que puedes tener en un año (promedio) y divídelos entre 12 meses. Este es tu ingreso neto mensual

2. Calcula tus gastos fijos y variables. Es uno de los pilares para que esta proyección dé resultado. Debes de ser consciente de cuales son tus gastos mensuales (incluye los anuales como predial, tenencia, seguros, etc.) en los que identifiques todos los gastos repetitivos cada mes. Ahora incluye los gastos que puedes tener esporádicamente por recreación, festejos o imprevistos. La suma de todo, en el año, entre 12 meses debe ser tu egreso neto mensual.

a.Incluye un gasto de ahorro/inversión.

En tus gastos es de suma importancia que incluyas un gasto fijo y/o variable que vaya directo a ahorro e inversiones. Puede ser un porcentaje de tu in greso y/o un monto fijo mensual.

3. Ajusta si es necesario. Este punto es crucial para que funcione el presupuesto. La suma de tus ingresos netos menos la suma de tus egresos netos debe ser mayor a cero. En caso contrario, debemos de reformular nuestros gastos, quitar y/o ajustar los que sean posibles. Este es un punto en el que, si formas parte de una familia, debes de discutir con todos, pues generalmente habrá que hacer el esfuerzo por quitar algunas cosas. Si la suma de todo es positiva, ¡felicidades! Ahora puedes hacer una planeación de ahorro e inversiones para futuro (viajes, festejos, fondo de emergencia, etc.) siempre priorizando lo que sea más importante para ti. Debes de estar consciente que debemos ajustar en cualquier cambio de nuestra rutina (cambio de trabajo, matrimonio, hijos, etc.).

4. Proyecta tu flujo. Ya tienes un presupuesto de tu flujo de efectivo. Ahora tienes que impulsarlo a futuro. Mes a mes puedes ver dónde habrá más y menos dinero (muy diferente en fechas festivas o eventos programados), para poder tener una proyección correcta de lo que puede ocurrir posteriormente. Si ves algún nuevo contratiempo, debes regresar al punto 3 para ajustar lo necesario. 5. Revisa los resultados. Todos debemos de tener una revisión periódica de nuestros resultados. Ya que tenemos nuestra proyección, debemos de revisar, al terminar cada periodo, qué faltó y qué sobró. Para poder ajustar nuestro presupuesto y saber, previo a los problemas, si es probable que tengamos un contratiempo a futuro o, mejor aún, tengamos una tranquilidad por el cumplimiento el día de mañana.

Estos pasos son muy simples, se pueden aplicar en cualquier nivel de vida que te plantees: soltero, al iniciar un matrimonio, al emprender, cuando nazca un bebé, etc. Lo más preponderante es hacerlo lo ANTES POSIBLE. Para conocer nuestra situación actual, establecer nuestras prioridades y metas, cambiar nuestros malos hábitos y vivir más serenamente nuestra vida financiera.

Recuerda, no es difícil proyectar tu flujo si empiezas a ordenar tus ingresos y gastos hoy.

“Ley de Keops: no hay obra que termine dentro del plazo o del presupuesto fijado.” Robert Heinlein.