Mundo Latino Magazine Edición 05

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12. Consejos

Roturas ROMÁNTICAS Por Germán Giovanni Flórez

En un planeta de billones de habitantes donde cada encapsula dentro de su cerebrito/a un mundo aparentemente diferente, la idea de que existe una experiencia que todos o la gran mayoría podamos compartir de manera casi exacta es bastante inverosímil. Eso si, no todas estas experiencias compartidas son positivas; es mas, muchas de ellas te harán sentir como si te estuvieses arrastrando entre vestíbulos del mismísimo infierno. Ejemplo perfecto, una Rotura Romántica. Pregúntale a cualquier ser humano con una pizca de experiencia en el tema, en cualquier lugar del mundo, y escucharas de ellos lo que siente perder un amor: “me siento como mier*a, se siente horrible, no me hablen, quiero estar sola, no me vuelvo a enamorar, etc.” Frases que describen un sentimiento espantoso, de esos que dejan un mal sabor en nuestro paladar natural y sentimental, un sentimiento de dolor, tristeza y vacío que te llena los pulmones y te sacude la bilis. Creo que todos podemos compartir ese sentir, por mas machos que seamos, por mas orgullosas y maduras ese dolor es inevitable.


Como con todo, hay algunas verdades que te pueden ayudar a apaciguar el dolor, no importa tu situación, aquí se las recuerdo:

5De lasVerdades que nadie te avisó 1) Dolor es inevitable... sufrimiento es opcional. Es totalmente innecesario decir esto, pero valga la redundancia hay que reiterarlo: Roturas Románticas DUELEN. Te machacan el pecho, parten el corazón y te retuercen los intestinos. Cuando piensas en ella o el, te consume el dolor, te agobian los recuerdos, y sientes con certeza que algo ha muerto, literalmente. Algo que creaste, alimentaste y hasta cierto punto cuidaste y hecho tuyo, ya deja de existir. De ese punto en adelante vivirá en tu recuerdo (y ojala en el de tu ex), o en la ventana de un pasado. La fase de penas y lamentos es inevitable, no importa quien sea o donde sea, hay que atravesarla. Lo bueno es que esta fase se disipa con el tiempo, creando un nuevo circulo social, distrayéndote con nuevas actividades (no seré explicito sobre cuales), así que trata de distraer tu mente, tu cuerpo y haz buen uso de tu tiempo. El sufrir no es un requisito. El sufrimiento y el dolor son distintos. El sufrimiento es más furtivo e insidioso tomando generalmente la forma de preguntas que dan vueltas en tu cabeza hasta no poder más. “¿por qué no lo ví antes, como no me dí cuenta? ¿en que fallé? ¿por qué, por qué, porrrrqueeeeeeé yooooooo!!!!??? esto puede durar por siempre, preguntas sin respuestas, o respuestas que no te van agradar. La clave es RECONOCER esta agonía retórica y darte cuenta que no te esta llevando a nada positivo.

2) Cuidado con la palabra “merezco.” Cuando hablemos de sufrimiento innecesario, no hay mejor palabra que “merecer”. Típicamente utilizada en la conjugación “Yo merezco mejor” ó “Yo no merezco alguien mejor” é incluso “ella no me merece,” etc., la lista sigue. El problema es que la noción de merecer a una persona o el tipo de relación es una trampa. “El Merecer” tendrá el significado que queramos darle en ese preciso momento. Seamos realistas, analicemos la moneda por los dos lados y preguntémonos, ¿quien se merece la relación perfecta? ¿Quién no? La realidad es que nadie merece ser maltrato(a) de manera física, mental o verbal- nadie, en lo absoluto. Todos tenemos el derecho de ser feliz, todos merecemos serlo y permitir que otros lo sean. ¿Que te mereces tu?

3) Corriendo de la realidad no la hará desaparecer. Hacemos muchas cosas para lidiar con el dolor y sufrimiento asociados con una rotura romántica. Nos impulsamos por los excesos: comiendo, durmiendo, bebiendo, visitando sicólogos, brincando de barra en barra, modificando nuestra apariencia física, escribiendo o publicando estupideces en las redes sociales, en fin, la lista es extensa.

Algunas estas estrategias son inofensivas, algunas no lo son. De igual manera recurrimos a ellas por la misma y sencilla razón: haremos lo necesario para escapar del dolor. Llenar tu vida de distracciones puede ser lo que necesites durante ese periodo de espera, pero esta acción puede ser contraproducente y causar un mayor daño. Enfrenta la realidad por más dura que sea, acéptala, aprende de ella y sigue adelante, este no es el final del camino.

4) Tu historia, su historia, la verdadera historia. Los humanos somos maestros cuentistas. Recreamos escenarios de nuestras vivencias, roturas y triunfos sentimentales, y personales, bajo detalladas y heroicas historias del “malo vs. bueno”- sobra decirlo, siempre seremos los buenos, y cuando aceptamos nuestra culpa solo un mínimo margen de error nos separa de esa fronteras de los súper buenos. Historias que generalmente contienen frases como: “Que amargada es esta vieja, este man chimbea mucho, me utilizó, ya no me llena, la amo pero quiero darle una lección, etc,” se convierten en el 80% de nuestras conversaciones rutinarias (el otro 20% lo gastamos hablando de las historias de amor de otras personas). Nos sumergimos en un drama y creamos fabulas que nosotros mismo terminamos creyendo, todo para sentirnos mejor. Muy pocas son las personas que optan por mantenerse integras ante tal situación y aceptan su verdad con silencio y madurez.

5) No tienes que perdonar a tu ex (o a ti misma) pero si lo haces, estarás tomando pasos hacia tu felicidad y un comienzo sin ataduras al pasado. Un análisis superficial del tema nos presenta una triste realidad: no hay un límite al daño que nos podemos hacer como seres humanos. Irrespetarnos como seres humanos, abuso emocional, abuso físico, abandono, blasfemia, robo, enfermedades venéreas, etc. son solo algunas de las cosas a las que sometemos a aquellas personas que comparten nuestras vidas. Eventualmente, y lastimosamente, es a veces tarde cuando despertamos y nos damos cuenta que aun hay vida después de este pasaje. Que el mundo es hermoso y que quieres descubrirlo, contigo misma o con ese ser que valore tu ser y tus ideales. Lo importante aquí no navega sobre lo que te hicieron o lo que hiciste ya que ese capitulo de tu vida esta cerrado, lo valioso es eso con que te quedaste. Esa enseñanza y ese respeto por lo vivido te conllevan al perdón. Si no perdonas, ataras tu corazón a un muelle de resentimiento y malos hábitos sentimentales. No robes tu propia felicidad, no manches tu futuro con sombras del pasado. Pinta de colorido tu vida y abrázala con esa tu mágica sonrisa.

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por El Supernumerario

SECUESTRO

14. Cronica

n el año 2005, me reencontré, por pura casualidad, con mi amigo de la infancia, Carlos Llano, en el aeropuerto de Bogotá. Él llegaba en el vuelo de American por una cuestión de negocios, en compañía de su esposa; y yo, en el de Avianca, una vez más, invitado a una conferencia o a un festival o a un colegio, para hablar de mis libros y escritos. Contándonos nuestras vidas, tomamos juntos el taxi al centro; ellos al Sheraton, yo al Dann Carlton. Intercambiamos mails y teléfonos, pero nunca los utilizamos. Un año más tarde, y no crean que esto es una digresión, me invitaron a un congreso literario en Corea del Sur.

E

Mientras que en Colombia el riesgo es que quieras quedarte, en Corea del Norte el riesgo es que no te dejen salir. De modo que cuando me invitaron a Corea del Sur, tomé el buen recaudo de preguntar dónde comenzaba el límite con el manicomio de Kim Jong II. No obstante mis prevenciones, me llevaron hasta el paralelo donde las dos Coreas se enfrentan y, para mi gran sorpresa, me pareció ver la cara, del lado de Corea del Norte, de Marianela, la esposa de mi amigo Carlos Llano. Fue un segundo, y luego la cara se desvaneció en el aire.

Desde el 2006, cuando eso me ocurrió, hasta el año 2010, no volví a ver a Llano ni a su esposa; de modo que mi percepción del rostro de su señora en aquel escenario bizarro permanecía entre corchetes de incredulidad, ponderando interiormente yo si se trataría de un espejismo, una alucinación o si realmente había visto a Marianela Llano en la frontera, y su rostro se había esfumado en el aire como un globo de helio escapado de la mano de un niño. Yo no había compartido con ella, en toda mi vida, más que un viaje en taxi; de modo que bien podía haberla confundido con cualquier otra mujer. En el 2010, Sergio y yo nos cruzamos nuevamente en Bogotá. Por primera vez usó mi mail, me dijo que sabía que yo estaba en la ciudad y me citó en el café Juan Valdez. Lucía desmejorado. Yo volvía por un asunto literario, pero él ya no por negocios. Se había prendado de una colombiana y, separado desde el 2006 de Nela, por fin había tomado la decisión de apartarse de sus hijos y venir a vivir a Bogotá. Entonces, su novia colombiana decidió dar fin al romance.

Amparado en que ya no era el marido de Helena, me animé a consultarlo acerca del rostro de su “ex” en Corea del Norte. La cara de Sergio, ya de por sí marchita, empalideció. Dejó caer la cabeza hacia abajo. Estaba admitiendo mi visión. —Cuando nos encontramos aquí mismo, en Bogotá, en 2005 —comenzó Sergio— conocí a Lina. Me enamoré perdidamente. ¿Vos viste los culos que tienen las colombianas? Su comentario extemporáneo me desconcertó. —No me he puesto a pensar en ello —repliqué. Sergio me observó demudado. Pero yo quería que terminara de narrarme su historia. —En fin —siguió—. Encontrarte en aquel 2005 fue providencial. Marianela volvió una semana antes a Colombia, para que los niños no estuvieran tanto tiempo sin los dos. Yo debía regresar una semana más tarde. Permanecí en Colombia, debido a Lina, cinco meses más de lo esperado. —¡Eso es mucho tiempo! —casi grité.

—¿Vos viste el culo de las colombianas? —repitió. —El riesgo es que te quedes —comenté. Pero también pregunté—: ¿Qué le dijiste a Nela? —Que me habían secuestrado las Farc. —Buena excusa —apunté. —Y a vos también —agregó Sergio—. Ni bien regresé a Nueva York, a Marianela, que como recordarás es licenciada en educación, le asignaron una misión de la Unicef en Corea del Norte. Mi intención era permanecer casado hasta que mi hija cumpliera los quince, porque la gran ilusión de la nena era su fiesta y no soportaría vivirla con los padres separados o, mucho peor aun, renunciar a la fiesta porque la madre, recién abandonada, no aceptara realizarla. Vos eras mi gran coartada. Nos habían secuestrado juntos. Era mucho más verosímil. El gobierno americano callaba la noticia porque negociaban en secreto, por intermedio de Chávez. —¡Yo no quiero que Chávez pida por mí! —estallé. —Precisamente —explicó Carlos—. Me liberaron solo a mí. Cuando salimos para Corea del Norte, vos todavía estabas secuestrado por las Farc. Ni bien regresáramos a NY, festejaríamos la fiesta de la nena. Yo ya había pensado en tal vez continuar con Nela un par de años más. —Pero entonces me vio… —entendí. —Y se desmayó —completó Sergio—. Arruinaste la fiesta de mi hija y mi matrimonio. Yo diría que mi vida. ¿Qué carajo estabas haciendo en Corea del Sur en el 2006? —Yo no arruiné nada —me defendí— ¿En qué cabeza cabe quedarse cinco meses por un culo y hacerme secuestrar por las Farc? Podrías haber generado un escándalo internacional. —La violencia en este país —dijo Llano— y el fin de mi matrimonio tienen la misma raíz: la humanidad, incluyendo a los propios colombianos, no está preparada para estos culos.

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16.Sexualidad

Diario Actriz Amateur de

Una

onestamente, nunca me ha llamado mucho la atención el porno, pero recuerdo c l a r a m e n t e “La dulce boca de Erika”; una película protagonizada por una hermosa sueca que hacia el papel de una extraterrestre llegada de Venus (obviamente), enviada a satisfacer a todos los hombres, dándoles la mejor chupada de sus vidas. 1987. Algunas otras películas que me gustaron, curiosamente están ubicadas en décadas anteriores, me gusta mucho el erotismo del cine sexual de los 30’s y 40’s; la iluminación y el color de los 60’s, la intensidad de las formas en los 70’s y sólo Erika en los 80’s. De ahí en adelante mis encuentros con el porno fueron mas ocasionales que otra cosa; siempre me parecieron forzadas las situaciones y las escenas mal concebidas y mal realizadas; puedo decir que no disfruto del porno.

H

Sin embargo, y debido a que hace unos días este argumento salió a colación en una charla, estuve de invitado en la grabación de una película porno de mediano presupuesto, pero como cronista nada más, y la verdad, excepto las situaciones sexuales, no deja de ser una producción completamente normal de video o fotografía; un grupo pequeño de gente, equipos profesionales, buena iluminación (me sorprendió); un baño y un espacio destinado para los cambios de ropa y un área para invitados compuesta por un sofá de cuero marrón oscuro, una mesita de centro con snacks, un par de tragos, soda y agua, mucha agua, porque las luces deshidratan. La escena planeada era un trío, doble penetración y por supuesto el bien conocido y nunca mal ponderado “cum shot”. No encontraba material para esta columna, y justo cuando estaba por despedirme, la conocí.


Jackie tiene 23 años y vive en Brooklyn, llegó de Venezuela hace seis para terminar high school, pero por problemas políticos de su familia con el gobierno, tuvo que quedarse en un sitio que nisiquiera le llamaba la atención; hace dos años vive con Marcelo de quien es también asistente, quien nació en Punta de Este y creció en Buenos Aires y nadie sabe ni se explica por qué razón, no le gusta el fútbol. Marcelo nunca se inmuta por nada. Hace unos días, Marcelo buscaba unos lentes para su nueva/vieja cámara en Craig’s List, uno de los sitios de prestación de servicios más visitados en EU, y en la categoría que se hallaba (tv / film / video) halló uno tras otros ejemplos como “Chicas con lindos pies hasta $400” o “Sexy girls looking for fun and $$$”, y más por el estilo. - Amor, por qué no llamás? - Estás loco o eres pendejo, o todas las anteriores La propuesta de llamar le sonó ridícula e inapropiada, pero Marcelo, mayor, de mente abierta y con más millas acumuladas en el viaje de la vida le contó algunas de sus experiencias en Barcelona en los noventas, cuando estudiaba fotografía y hacía porno y se prostituía para poder pagar sus gastos. La conversación entró en detalles cada vez más precisos: Cómo mirar a la cámara o cómo ser seductor sin ser cliché. Jackie se estaba comenzando a interesar; se calentó la cosa y después de hacer el amor, la chica decidió responder a uno de esos llamados. El primero al que respondió resultó ser para una empresa de escorts -damas de compañía-; eso no le sonó para nada. Envió un email al segundo aviso que encontró y, para su sorpresa, le llamó una mujer, quien en un tono de voz muy agradable le explicó sin pormenores de qué se trataba el negocio… - Cuánto mides? - Metro cincuenta y cuatro - De que color es tu pelo? - Castaño claro con iluminaciones - Rasurada o con vellitos? - Depende - Y las teticas son naturales u operadas? - Naturales, 34B muy lindas, al menos eso dice mi novio Cita viernes a las 3PM en un estudio en Long Island City para una prueba.

Long Island City, NY. Viernes 03:00PM Jackie y Marcelo están en la puerta de un inmenso edificio que años atrás albergó una fábrica de telas y que hoy día está lleno de estudios de artistas; Jackie está nerviosa y Marcelo la calma con abrazos. - Si querés nos vamos - Ya llegamos, por lo menos quiero saber si soy capaz de hacerlo La mujer que la llamó tres días antes bajó a abrirles la puerta, síganme, les dijo. Piso 4, un pasillo largo y blanco muy bien iluminado, perfecto para una escena épica de Matrix, el estudio estaba bien al fondo, ultima puerta a la izquierda. Jackie temblaba de nervios, Marcelo la seguía confortando. El lugar no estaba para nada mal; el estudio era un espacio industrial de techos altos y grandes ventanas que filtraban una bella luz del día. El equipo de producción no era muy grande, William y Andrés, los dos camarógrafos, un luminotécnico y la mujer que la llamó, quien es la productora/directora/propietaria del negocio. Se llama Káren y es colombiana, todo un mujerón, en sus treinta y cinco más o menos, voz ronca, actitud de jefe, jean levantacolas y cara de “pa’ las que sea bizcocho”; hay dos chicos y una nena maqui-llándose en el extremo del estudio. - Pasa, hoy vamos a hacer una película completa, por eso las luces, así aprovechamos y hacemos tu prueba con todas las de la ley, lista? - Si señora - OK, ve a maquillarte y Sandra, la otra actriz te explica todo, ella lleva un tiempo en esto.

Jackie se quita la ropa y efectivamente, sus teticas son 34B muy bonitas, como su novio lo dice. El está sentado junto a mí en el sitio que Káren designó para los visitantes. Ni se inmutaba. Káren toma el control de la situación: - Celulares off, silence total… Jackie, sientate en el sofá y dame un orgasmo. - Así de la nada? - Así de la nada linda, podés? Jackie tomó un lápiz de la mesita de centro y lo empezó a lamer como si fuera un falo, lo deslizó por su diminuto pero armónico cuerpo y empezó a metérselo de a poquitos entre su vulva recién depilada: yo estaba que me tiraba en el sofá a comerme hasta el último de sus suspiros, Marcelo ni se inmutaba; Jackie empezó a jadear más fuerte, y de su cuerpo mojado y tembloroso salió un rugido gutural de victoria; un orgasmo perfecto. Como si nada incorporó, miró fijamente a Káren pidiendo su aprobación, todos estábamos gratamente sorprendidos. Marcelo ni se inmutaba. Karen le entregó $250 por el cásting, Jackie estaba regresando a su estado normal, se vistió tímidamente y guardó el dinero en su bolso imitación de Louis Vutton. Chica, El pago por escena es $750, yo puedo hacer un cambio de última hora en el guión (había guión) y te pongo, si querés, dijo Karen. - ¡De una! Marcelo ni se inmutaba. Ni se inmuto, cuando por veinte minutos dos hombres con enormes herramientas cabalgaban sobre su novia y la penetraban doblemente mientras se manoseaba y besaba con otra bella chica que soltaba unos gemidos de perrita, ni cuando le chupaba esto al uno y esto al otro, ni cuando como épico remate, los dos hombres eyacularon montones industriales de semen en su cara y tetas. Marcelo ni se inmutaba. !Corten¡ Quien hace unos momentos era una fiera tragándose toda la carne que le cupiera por sus orificios, volvía a la normalidad, junto con Sandra la otra actriz, caminó tímida hacia el baño, se ducharon juntas para lavarse todo el aceite de la piel; regresó donde Marcelo, quien aun estaba sentado a mi lado, la abrazó y salieron juntos, aquí no pasó nada, Marcelo ni se inmutaba. Antes de salir les di mi tarjeta. Jackie me llamó unos días después, quería un final para este cuento. Me contó que, cuando llegaron al apartamento ella estaba feliz, casi mil dólares en una hora de trabajo; había comprado una botella de vino y quería celebrar; Marcelo se encerró media hora en la habitación. Salió con una maleta en la mano. - ¡Puta es lo que sos! Sólo fue cosa de inventarme un par de historias y saliste como loca a tirar con quien fuera, igual que en Up-state (Se había enterado de su encuentro con un ex-novio; por comentarios de amigos en común, supo que ese fin de semana que ella se había ido donde las primas en New Jersey, estaba en Up-State gozando de lo lindo). Por lo menos me voy tranquilo sabiendo que te dejo con trabajo haciendo lo que mejor sabés. Marcelo si se inmutaba.

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18. Cuento

Los Su ños

ESPOSA de mi

¡ Tuve que aceptar que me dijera el nombre de otro, en sueños! i amigo Ángel me confesó que su esposa, en sueños, susurraba el nombre de otro. Hasta el día en que me lo contó, no se había atrevido a averiguar de quién se trataba.

M

—Solo repite “Juan” —me explicó—. Y no hay ningún Juan en nuestro círculo íntimo. —Afortunadamente —comenté—. Pero… ¿por qué te inquietas? Tal vez sea el nombre de un perro de su infancia… — Ni modo —replicó Ángel—. Las señales son inequívocas: jadea, se mueve acompasadamente, todo en sueños, y repite el nombre. Por otra parte, cuando una mujer repite un nombre en sueños, no hay ninguna otra posibilidad: ni tú te la crees la del perro. Acepté en silencio. Un tiempo después, Ángel me citó en un bar en Alphabet City. —Ocurrió algo extraño —retomó—. Cuando repitió el nombre, en sueños, jadeando, me acerqué a ella, tú sabes, sin despertarla, y le

hice cosas que nunca me ha dejado hacerle despierta… —¡Felicidades! —contesté. —Fue un delirio… una maravilla… Pero… —¿Pero qué? —Tuve que aceptar que me dijera el nombre de otro, en sueños. Permanecí mirándolo en silencio. Finalmente dije: —¿Qué preferirías? ¿Qué se acueste con otro y le diga tu nombre? ¿O que te deje hacerle de todo y te diga el nombre de otro? Ahora el silencio lo hizo Ángel. Pero finalmente declaró:

—Que lo hiciera todo conmigo y me llamara por mi nombre, despierta. —Pero eso no lo logran ni los ángeles —argumenté—. A lo máximo que puede aspirar un hombre es a que una mujer pierda el pudor con él, que además lo respete es pedir demasiado. Yo ya me he resignado a que nuestra única dignidad es que las mujeres se nos entreguen sin reservas. Mientras lo hagan,

pueden llamarnos “vagos”, “malvados”, “canallas”, lo que quieran, incluso por otros nombres. Siempre y cuando se entreguen con nosotros y no con otros. —Pero todo indica que alguna vez se entregó del mismo modo a este mismo Juan. Y que quizás todavía lo haga… —Que lo haga en la actualidad —reflexioné— lo descarto por completo. En ese caso, no se te entregaría. Y lo que pueda haber ocurrido en el pasado, es un terreno que hemos perdido desde que se dejó de usar la virginidad como prenda matrimonial. —¿Entonces? —Disfruta de lo que tienes. Y grita tú también el nombre de otra, si eso te sirve. —No —me contradijo Ángel—. Yo no grito ni cuando termino… —¿Por qué? —A ver si no se despierta…

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20. Humor

Estado Civil

SEPARADO a

Ratos

Mi amigo Bernardo lleva 15 años casado con la misma mujer. Fue su primera novia y es la madre de sus hijos. Nos habíamos encontrado de casualidad en un bar en Astoria, y compartíamos un cafecito. —Quince años —le dije— Debes ser el único de nuestra era que llegó a los 15 años de matrimonio, héroe.

—Todo comenzó cuando me reencontré, de casualidad, con Laura, una compañera de la secundaria. Tú la conociste.

—Quería presentarme en el libro Guinness —aceptó Bernardo—. Pero me dijeron que lo mío no es un récord, sino una exageración.

—Una belleza —rememoré.

—Resentidos —lo consentí—. Seguro que son todos separados. —Divorciados —aclaró Bernardo—. Porque separado también lo he sido yo. —¿Cómo? —pregunté asombrado—. Si siempre has vivido con Adriana… —Sí, siempre he vivido con ella. Y nunca me divorcié. Pero me separé una pila de veces. —¿Qué ocurrió? ¿Te mandó a dormir al sofá? A eso no se puede llamar una separación. —No. Siempre hemos dormido en la misma cama, y amorosamente. Pero me separé, decidí que ya no éramos pareja, muchas veces. —¿Pero cómo? —continué—. Yo nunca me enteré… Me estás reconociendo que siempre vivieron juntos. —Por supuesto que vivimos siempre juntos —insistió Bernardo—. De hecho, Adriana nunca se enteró de que nos separamos. —Me doy por vencido —admití—. No entiendo nada.

—Pues bien, me preguntó qué había sido de mi vida, e involuntariamente respondí: “Me separé”. —¿Le mentiste? —No era mi intención. Pero de pronto descubrí que no le estaba mintiendo: desde que la vi y hasta que terminamos de hacer el amor en el albergue transitorio, decidí que me había separado de Adriana. Esa misma noche, cuando Laura me envió un mail para sugerirme vernos, le respondí que se me hacía imposible porque me había reconciliado con mi esposa. Desde entonces, cada vez que encuentro una mujer que lo merece, me separo de Adriana y, sin que la misma Adriana lo sepa, me vuelvo a reconciliar con ella cuando el encuentro furtivo termina. Fíjate: ni soy infiel ni le hago daño. Piensa en cuántos sujetos arruinan sus familias por un amor pasajero, o les son infieles a sus esposas. Yo no comulgo con unos ni con otros. —Digamos que te separas, semanal o mensualmente, durante una hora y media. —Menos. Una hora, cuarenta y cinco minutos. He llegado a separarme por media hora. Son separaciones como cualquier separación, lo que cambia es el factor tiempo. Mi método, patentado en mi memoria con el título de ‘Sistema aleatorio’, podría haber salvado el mundo más de una vez.


—Al menos impedir la Guerra de Troya. —No, esos estaban perdidos, querían guerrear. Se la llevó de una punta a otra de la Tierra. No califica en el sistema aleatorio. Pongamos el caso Clinton. —Pues bien, ¿por qué cayó? —Cayó sentado, en el sillón, con la Lewinsky arriba —recordé. —No precisamente arriba —precisó Bernardo—. Pero imagínate que le hubieran aplicado el sistema aleatorio. Mientras le enseñaba a fumar el habano a la Lewinsky, Bill estaba separado. —Lógico —coincidí—. El factor tiempo. El tiempo y el sentido se modifican el uno al otro. —No se puede llamar infidelidad a lo que hiciste antes de conocer a tu mujer, ni a lo que haces luego de haberte separado de ella. Para eso existen las separaciones. —No creo que los republicanos hubieran aceptado la explicación. —Hubiera valido la pena intentarlo. Tal vez hoy el mundo sería muy distinto. — ¿Y el libro de los Guinness no te aceptaría el récord de la separación más corta? —Por supuesto que sí. Pero no estoy dispuesto a que Adriana sepa que alguna vez nos hemos separado, ni siquiera por diez minutos. Es el único amor de mi vida.

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22. Entretenimiento



24. Humor

Razones Científicas

Cuando el profesor descubrió la sustancia para resucitar personas, lo anunció simultáneamente de dos modos: publicó su hallazgo en el discreto boletín de científicos de segunda en internet y se lo dijo a su esposa. Jacinta, que lo había acompañado durante toda su vida de científico inútil, sin talento para los negocios ni encanto para la cotidianidad, supo que, por única vez, su esposo tenía algo serio entre manos. Pero su primera reacción fue decirle que era un estúpido por haberlo publicado en internet. No hay genio ni profeta que no siga siendo un idiota para su propia esposa. Jacinta contaba por esos días con cincuenta años, cinco menos que su marido. Había sido una mujer de buen ver hasta los cuarenta. No podía echarle la culpa a la maternidad por haber perdido frescura y belleza, porque no habían procreado, ni por decisión ni por azar. Augusto había estado siempre muy ocupado en sus investigaciones. Jacinta le fue fiel hasta marchitarse. Ahora ella lo alertó: su descubrimiento lo convertiría en presa codiciada por las grandes potencias.

Y, efectivamente, la noticia corrió como un reguero de pólvora. El profesor Augusto Donsante había sido capaz de fabricar tan solo una dosis de su elíxir, de modo que la resucitación se limitaría a una persona. Los chinos, inmediatamente, se lanzaron en busca de Donsante, ofreciéndole Pekín a cambio de que reviviera al Gran Timonel, o un disparo en la nuca si se negaba. Ente los rusos estalló una miniguerra civil entre quienes querían capturar a Donsante para que resucitara a Lenin y aquellos que preferían compartir el samovar con el padrecito Stalin. Los fanáticos de Michael Jackson se las arreglaron para proponerle a Donsante las regalías eternas del ídolo a cambio de regresarlo a la vida. Pero nada podía esa propuesta contra la de McCartney para que lo reuniera con Lennon de este lado. Un grupo peronista decidió matar a Donsante para robarle la dosis y recuperar al General. Pero incluso si no hallaban la dosis, se conformaban con matar a Donsante. La atmósfera de Donsante se enturbió de tal modo que no le quedó más remedio que huir. Jacinta lo ayudó a camuflarse y escapó junto a él alrededor del mundo. Paradójicamente, el impresionante hallazgo de Augusto Donsante, el único significativo de una carrera intrascendente, no le proporcionó a la pareja riqueza ni bienestar, sino que los convirtió en verdaderos parias. Huyeron en trenes de pésima categoría, en aviones cochambrosos, tan incómodos como inseguros; en carros tirados por mulas malolientes. Comieron desperdicios, debieron hacer sus necesidades en letrinas insufribles. Habitaron los peores tugurios y pasaron semanas sin poder bañarse ni lavarse los dientes. Mientras permanecían ocultos en una selva del Amazonas, casi imposibilitados de mirarse el uno al otro por lo frondoso de la vegetación y las nubes de insectos, un pigmeo disparó un dardo envenenado con curare contra uno de los pechos de Jacinta. La mujer murió a las pocas horas, entre estertores y sufrimientos indescriptibles. Pero su marido, a diferencia de todos los maridos de la historia humana, contaba con el único antídoto infalible, no solo contra el curare en particular, sino contra la muerte en todo su dominio.


La muerte de Jacinta tuvo el efecto de detener de súbito la persecución de la que era objeto Augusto Donsante. Desde los chinos hasta los fanáticos de Michael Jackson se dieron por vencidos al comprender que el científico utilizaría su única dosis para resucitar a su compañera de toda la vida y sacrificada compañera de fuga hasta el último instante. Por eso la ola de estupor cuando, ya de regreso al mundo, la periodista le preguntó por qué no había optado por resucitar a su esposa. —J a c i n t a n o h a b í a c r ec i d o co n m igo —explicó Donsante—. Yo descubrí una fórmula única en la historia de la humanidad. Y ella… ¿qué hizo? Ni siquiera se doctoró. Es cierto, me ayudó a escapar. Pero eso lo hubiera hecho cualquiera con dos dedos de frente. Mientras huíamos, yo leía a Tolstói, y ella continuaba suspirando por la Selecciones del Reader’s Digest. Yo quería escuchar música clásica, y ella, José Vélez. Nos separaban apenas unos pocos años, pero yo en un par de meses maduré, y ella no creció conmigo. —Pero si el problema era la madurez… — reaccionó la periodista—, ¿por qué decidió, entonces, resucitar a una indígena de 18 años, que lo sigue a sol y a sombra como si usted fuera un ídolo precolombino? —Bueno, es que Nanimba, mi nueva esposa, creció de otro modo: tiene las tetas más grandes que yo haya visto en mi vida.

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Modelos

Mundo Latino NY

Modelos: Criss Maldonado Yonaly Caceres FotografĂ­a: Mundo Latino NY Gabriel Rodriguez Maquillaje: Angie Vasquez



Criss

Maldonado Modelo Colombiana, Profesional Diseñadora de ropa y accesorios.

Fotografía: Mundo Latino NY Gabriel Rodriguez Maquillaje: Angie Vasquez Accesorios: La Beau Traje de baño Elektra Boutique Agradecimientos: Nunez Dental



Yonaly Caceres Modelo Dominicano y Empresario.

FotografĂ­a: Mundo Latino NY Gabriel Rodriguez





36. Recetas



38. Entretenimiento



40. Entretenimiento





44. Entretenimiento





48. Farandula



50. Farandula



52. Farandula











62. Música

Por: Narliwd Sanchez

P

or muchos entendidos en la materia, Panamá es considerado

La ciudad de New York tendrá la gran oportunidad de ver en escena

neral” lanzan sus primeros gritos de guerra con un pegajoso

secutivas, Viernes 29 de Junio (evento solo para menores) y Sábado

el país donde nace el Reggaetón. Exponentes como “El Ge-

ritmo que mezcla el Reggae Jamaiquino con los irreverentes ritmos Rap y Hip-Hop Estadounidenses.

Sin embargo, los Boricuas son considerados como los pioneros del Reggaetón. Es en la isla del encanto donde se genera el mayor movi-

miento Reggaetonero, el cuál fué condenado a muchas críticas por

a estos dos grandes del género Urbano en dos presentaciones con30 de Junio (evento para mayores de 21) en la discoteca “Exotics

Lounge” localizada en 79-21 Queens Boulevard, Elmhurst. Todo esto gracias a “CRIME SCENE” una compañía que toma el riesgo de crear espectáculos originales con talentosos artistas de la música “Urbana” dándole un toque moderno y juvenil a la ciudad de New York.

sus letras. El Reggaetón cada día es más aceptado por los distintos

“Nuestra compañía va mas haya de ser una empresa contratante y

mundial. Artistas como: Tego Calderón, Daddy Yankee, Don Chezi-

drea Restrepo, Presidenta. Entre tanto, Rubén De La Pava, Creador

círculos sociales e igualmente cuenta con más seguidores a nivel

na, Baby Rasta y Gringo, entre otros, se han encargado de sacar del “underground” la lirica pecaminosa, para mostrarla con orgullo al mundo, más limpia y más enriquecida.

Países como Venezuela, Argentina, España, Republica Dominicana,

busca la satisfacción de los asistentes a cada evento” asegura An-

de la marca, enfatiza que “Crime Scene” es la única compañía dedicada en su totalidad al género urbano”, y agrega: “Fuimos los primeros en atrevernos a traer los nuevos exponentes del Reggaetón a La Gran Manzana.”

México y Estados Unidos han adoptado al Reggaetón como un ritmo indispensable para su entretenimiento. Hablando de acogida, es Medellín, la segunda ciudad más importante de Colombia,

denominada como la capital Suramericana del Reggaeton. Artistas puertorriqueños como Ñengo Flow, J Alvarez, y Lui G 21 Plus gozan

de gran admiración del publico. Ñejo y Dalmata, en especial, han conquistado el corazón de los Colombianos a tal punto que actualmente residen en la capital Antioqueña.

El Dalmation y Ñejo el Broky, como son reconocidos en la industria,

crearon grandes producciones como “Broke And Famous” y “Still

Broke” donde se destacan éxitos como: Pasarela, Hoy Me Atrevo, Un Call, Algo Musical, No Quiere Novio, Sexo en la Playa, Así es la Vida, Eso Que Tienes Tu, No Necesito, See you Mami, entre otras. Ahora

ocupan la primera y segunda posición en la lista de los “40 Principales” con sus temas “Dile a Tu Amiga” (Producción por Nely El Arma

Secreta) y “Escápate Conmigo” (Producción por Chris Jeday) e interpretada en colaboración con el artista Colombiano Wolfine. Con el

triunfo musical en sus manos, Ñejo y Dalmata continúan trabajando en su próximo álbum “Road To Riches” (Producción por DJ Elektrik).

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