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Se derrumbó el principal banco suizo y genera pánico en Occidente

Por Andrés Pescara.- El sistema financiero de Occidente sigue dando señales de un claro derrumbe. A los tres bancos estadounidenses que cayeron en la semana anterior (SVB, FR y SGB) ahora se agregó el principal de Suiza. El Crédit Suisse (CS), cayó en el momento en que Europa, siguiendo las órdenes de Estados Unidos, ha bloqueado a la Federación Rusa y por ello están pagando una energía escasa tres veces más cara y su propia economía enfrenta un derrumbe como no se veía a pocos años de la Segunda Guerra Mundial. Desesperadamente buscan que otro banco lo absorba para evitar un efecto dominó que ya parece imparable. El 15 de marzo de 2023 se anunció la caída tras haber perdido un 13 % de su valor al cierre de una rueda en la que tocó un piso de -30 %, algo impensado para una institución financiera del siempre (hasta ahora) sólido mercado suizo. Cuando el CS pidió a través de sus directivos un voto de confianza de sus inversores todo se disparó en sentido contrario.

Para evitar el efecto contagio el Banco Central Europeo (BCE) subió las tasas de interés, pero esa medida ya no parece entusiasmar a nadie. Cuando el Banco Nacional Saudita, principal accionista, anunció que ya no pondría más dinero en Credit Suisse que en 2022 perdió u$s 7.920 millones de dólares el efecto pánico se disparó. Lo que el banco perdió en el ejercicio anterior es superior a la descapitaliza- ción provocada por la crisis de 2008.

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Mas allá de la pérdida operativa indicada en el párrafo anterior, durante 2022 se fugaron u$s 100.000 millones que no pudieron retener subiendo las tasas de interés.

Ulrich Koerner, CEO del CS admitió la inutilidad de las medidas tomadas para detener la situación de caída. El Gobierno suizo y el BCE buscan desesperadamente un comprador para evitar que se empiecen a contagiar más bancos.

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