De la musa mistonga a la metafísica del default
Laura Erpen
Fragmento de un ensayo de la escritora para la cátedra de Antropología Una mirada del tango desde la Cuestión de Género
Laura Erpen, de Concepción del Uruguay, Entre Ríos, Argentina
La lectura de la literatura desde los arquetipos es un abordaje bastante frecuente . Annis Pratt propone en su libro Dancing with Goddesses, que posible encontrar arquetipos literarios clásicos en la poesía contemporánea y se dedica a un arquetipo en particular: el de la Medusa. Con respecto al mismo señala que : es netamente femenino, y remarca poder e independencia. En las sociedades patriarcales , obviamente, este arquetipo fue visto desde lo negativo . De allí que C. G. Jung y su discípulo Erich Neumann asocian a la Medusa con el concepto de "madre terrible". ¿A qué responden estos universos teóricos? Indudablemente asocian el poder con lo masculino y la pasividad con lo femenino . Para la fuente que hemos consultado : “ son indudablemente parte de la base de la construcción de los imaginarios nacionales de fines de siglo XIX en Latinoamérica. Desde esta ideología, la construcción de la patria requerirá de un papel femenino que discrepe tácitamente con una "madre terrible" independiente tanto en el campo sexual como el económico.” Sin embargo ,ello no impidió que “ algunas mujeres se independizaran y desde la marginalidad crearan una realidad que contradiga los horizontes propuestos por el imaginario de la nación. Esto generó que, por ejemplo en la literatura tanguera, el arquetipo de la mujer terrible apareciera explícito en infinidad de ejemplos, dando a su vez testimonio de la existencia de estas "malevas" de las orillas de Buenos Aires.[1] La mujer como factor de producción también se verifica en relación con la raza negra , habiéndose establecido que : existían propietarios de negras y mulatas que las obligaban a ejercer la prostitución, otros propietarios las obligaban a fabricar velas, tortas o empanadas, pues de esta manera producían ingresos que servían para mantener a la familia blanca.[2] La repercusión en lo social se manifestó en la búsqueda de nuevos desempeños que trataran de solucionar la problemática del momento .Así :
“Desde el punto de vista social, la influencia parisina en la cultura del cabaret dio un toque de excentricidad a un problema angustiante que había venido asolando a la población desde principios de siglo, pero en la segunda década se magnificó: la falta de empleo y la prostitución. Esta se desarrollo promovida por una situación demográfica desequilibrada debido a que los contingentes inmigratorios —y migratorios— eran en su mayoría formados por hombres, lo que ocasionó una notable "carencia" de mujeres en la capital.”[3] Como expresión cultural urbana marginal y marginada de este posible modelo de Nación que centraba su núcleo firme en el campo , el tango reflejó este universo femenino desvalorizando la figura de la mujer : “Esta búsqueda de regreso a unos orígenes rurales, naturales y gauchescos, trastocará con las nuevas modalidades urbanas inmersa en una cultura enriquecida por la inmigración como es el caso de la italiana, tan presente en la cultura tanguera y que eran vistas como promiscuas, subversivas y delictivas por las clases oligárquicas nacionales en el poder. [4] Este proyecto de nación necesitaba mujeres dedicadas a la producción de sujetos , con sexualidad femenina controlada . En contraposición , la Buenos Aires pletórica de inmigrantes – hombres en su mayoría – mostraba “ una creciente demanda de prostitutas “ lo que se convertía en “ una amenaza a los ideales del Estado de generar una sociedad moralmente conservadora. “ El resultado de esta demanda generó , a su vez , otra visión del cuerpo femenino : como productor de beneficios lucrativos . “ De esta forma el cuerpo de la mujer se vuelve un espacio codiciado no solamente por los ideales del estado, sino también por los intereses de los cafiolos (proxenetas) de los arrabales porteños” .[5] Prueba de esta nueva lógica en la cultura urbana , son estos datos que transcribimos : En 1833 un informe policial indicaba la existencia de turbios lupanares y casas de juego donde también se bailaba. Por ser lugares de conflictos permanentes se ejercía sobre ellos cierta represión, años después, con un gobierno mas permisivo, tuvieron auge lasacademias de baile “ a precios módicos y con las mejores comodidades y decencia”. En 1857 los bailes se habían organizado, comenzaban a las cinco de la tarde y finalizaban a las tres de la mañana, siempre y cuando los serenos no los disolvieran antes. Se reunían cantidades de personas, los caballeros ( que superaban en número a las damas) pagaban cinco pesos a un italiano que hacia de maestro de ceremonias. Las damas asistían estimuladas por una prima de quince pesos por noche (pagados con anticipación por la empresa) y un par de zapatos en atención a los que se rompían bailando toda la noche, ademas les obsequiaban cigarros de papel o de hoja . [6] Pero hay datos que aseguran las excepciones . Tal , el caso de La Moreira , célebre en aquellos
tiempos , muy lejos de jugar un papel pasivo en la historia. “ Sus características de mujer fálica se extienden en la inversión que ella misma presenta al ser ella además una intermediaria entre el deseo sexual masculino y el deseo económico de las prostitutas. Será, según Sebastián Tallón, una cafishia, socia de su marido en el reclutamiento de pupilas y, por sobre todo, administradora y proveedora del hogar, característica netamente masculina en la sociedad patriarcal. Esta imagen de mujer independiente en lo económico, propondrá un perfil subversivo y peligroso no sólo para los códigos e ideales del estado patriarcal, sino también para el mundo marginal. La amenaza de independencia de estas mujeres planteaba una quiebra económica y un peligro al sustento diario. No es exagerado el énfasis que se ponía en el provecho económico que estas mujeres ofrecían.” [7] La elección de este arquetipo de la Medusa, supone un discurso implícitamente masculino y patriarcal, presente en la conciencia colectiva. “ En algunos casos, este arquetipo se contraponía abierta y explícitamente a la imagen femenina materna y supuestamente saludable que los proyectos higienistas de fines del siglo XIX proponían para la "ciudad-organismo", usando términos de Salessi.” Todo este recorrido se puede constatar palmo a palmo en la historia del tango , en cuyas letras aparece retratada la evolución de la cuestión género. Desde “ Mi noche triste” , las letras vienen mostrando una suma de arquetipos que resumiremos de manera suscinta : La percanta La pebeta La pelandruna La papusa La madama La atorranta La francesita La costurerita que dio aquel mal paso La solterona … La madre La vieja
Etc…etc… ... dejando atrás muchas denominaciones que el amable lector podrá reponer encendiendo su gramófono personal! Dice Mirtha Alvarez : “ Ubico la época del tongo desde su nacimiento en 1880 como música y danza hasta los años 1960 ya que entiendo que a partir de este momento surge otro tipo de mujer en la Argentina (y quizás en el mundo). De manera que la poesía popular queda, para mí, desplegada en las letras de las canciones del incipiente rock nacional. Surge así la "muchacha ojos de papel", mientras que el tango comienza un doble camino: por un lado se acentúa el desarrollo instrumental, fundamentalmente la línea de Piazzolla y Rovira, mientras que por el lado de las letras se privilegia como protagonista más a la ciudad de Buenos Aires que a sus mujeres. Curiosamente comienza a destacarse una poetisa: Eladia Blázquez “ . [8] Curioso resulta el siguiente señalamiento que hace la misma autora: “ De hecho, en nuestra ciudad al cafiolo se le llamaba, burlonamente, el "cafishio del café con leche", ya que poseía solamente una o, a lo sumo, dos pupilas que trabajaban para él pero no era dueño de un prostíbulo. La forma empresarial de la prostitución fue traída por extranjeros y, en general, explotadas por ellos. Es decir que al macho porteño, además del negocio, lo unían a su mujer lazos de amor. Una de las funciones a la que se asocia a la madre es la nutricia. Así, gozando sexualmente de la misma que le da de comer, el rufián logra condensaren una a la madre y a la puta. Se podrá objetar que no todos los porteños eran rufianes, lo que es verdad. “ El hombre del tango es paradojal , quizás por ello se manifiesta lo que indica la crítica: “Este tango – ( por Mi noche triste) - marca el comienzo de uno de los dramas de amor propios del tango: el hombre abandonado. Así también empieza a construirse esta mujer paradigmática, que, con diversos matices, se repetirá en tantos letras. En este caso el hombre llora la pérdida por partida doble: la mujer sexual, degradada en su condición de objeto de goce y la mujer maternal elevada al rango de objeto de idealización. Desde esta perspectiva sostengo que la mujer creada por las letras de los tangos era una mezcla de debilidad y fortaleza. Su posición de dominio la acerca al rasgo que Lacan destaca en la Madre para el niño pequeño: todopoderosa. Al perderla el hombre se destruye. Es una dimensión pasional del amor encarnado en un tipo de mujer que es capaz de llevar al hombre a lo peor. “[9] Y en relación con la figura materna , habremos de decir que el tango la propone con un sentido
hiperbólico y un sobredimensionamiento notable . “ Pocos temas son de tanta estima como el tema de "la madre" en el tango. Infinidad de letras de tango atribuyen a la "santa" un espacio opuesto al de la "mina", dos términos que son, en el lunfardo, irreconciliables. Tal es el grado de devoción hacia la imagen de la madre, que en algunas letras de tango como "Victoria", de Enrique Santos Discépolo, se celebra que la mujer se haya marchado con otro hombre, ocasionando esta libertad del abandonado, el retorno a la casa materna. La madre es prácticamente de una forma inequívoca una santa que abnegadamente acepta los dolores y las carencias de la vida cotidiana de una forma pasiva.”[10] Con todo , el empoderamiento de las mujeres se instituye en este juego difícil contra un discurso masculino instituido y tomado como estatuto para la configuración de un modelo de nación . “ La lucha y la resistencia a estos preconceptos de mujer pasiva no se hacen esperar a la hora de releer la historia de la Argentina. Posiblemente los mayores ejemplos de esta resistencia se entrevean no solamente en ejemplos literarios como el de la Moreira, o en figuras históricas como Eva Perón; sino en la vida cotidiana ocupando el espacio externo de la calle y de la protesta atribuido solamente al hombre por la autocracia patriarcal. Quizás el mejor ejemplo sea el caso de Las Madres de Plaza de Mayo, reconciliadoras imágenes de madre activa en contraposición a la dictadura. O como propone Masiello, en "las microprácticas de las mujeres [que] han abierto un espacio para la acción; permiten una teoría del poder de gestión cultural que invita a repensar la formación del Estado." [11]
Del empowerment de cantantes y de sus cantares …
Muchas fueron las cantantes de tango que se destacaron a lo largo de su historia. ¿Quién puede dejar de pensar en algunos nombres esenciales que , quizás , resumimos y simplificamos peligrosamente si mencionamos a Tita Merello , Azucena Maizani , Ada Falcón , Tania? Cada una de ellas guarda su lugar en la historia . Un dato que corrobora lo que apuntáramos anteriormente sobre el género es el que nos indica que muchas de las cantantes de tango que se destacaron en los 40 y los 50 , fueron presentadas en concursos o apoyadas o guiadas por sus madres . La muerte de los maridos , la consiguiente necesidad de mantener el hogar , los sueños de juventud , la incidencia de la cinematografía o el fervor por la radio , llevó a que muchas mujeres se convirtieran en promotoras de sus hijas . Entre estos casos , podríamos citar a Ada Falcón , un de las verdaderas “ divas” que generó todo un mito que incluye , además , el de su pronto retiro en plena juventud . Ada Falcón se aisló en Salsipuedes , Córdoba . Allí falleció a los 98 años , en el año 2002 .
Lo exótico llega en la figura de Rango Fujisawa , quien – invitada por Troilo para cantar en un espectáculo al que asistía … - interpretó sus mejores éxitos trabajando la canción desde la fonética , puesto que no sabía el idioma . Famosa fue su interpretación de “ Mama , yo quiero un novio “ … , un verdadero clásico. Con todo , y en relación con los cantores , el listado resultado menor . El que corresponde a los hombres , es notablemente más abundante . Sin embargo y en referencia a la calidad , la cuestión es inversamente proporcional: las mujeres del tango adoptan un rol acorde con los nuevos tiempos y logran un éxito resonante. En el caso de Susana Rinaldi , su figura fuerte la lleva a interpretaciones de un color poco hallable y con cierto matiz académico y poderosamente colocado en el escenario musical y aún en el de la política . Egresada del Conservatorio de Arte Dramático , sus interpretaciones se acercan a lo histriónico , por lo que algunos sugieren que se trata de verdaderos monólogos musicales con matiz actoral. Hacia los 70 , los intelectuales y los estudiantes universitarios la condujeron a un lugar de privilegio . Rosana Falasca se constituyó en un joven valor prematuramente desaparecido a los 30 años . Quedaba inconclusa una carrera signada por el éxito y la popularidad que le dieron el cine y la televisión , principalmente el programa “ Grandes Valores del tango” de Silvio Soldán . Curioso caso es el de Nelly Omar , quien inaugurara una nueva fisonomía al adoptar el “ poncho” para actuar . Urgida por la pobreza – entró en las “ listas negras” de la dictadura que desalojó al gobierno de Perón y fue perseguida por su amistad con Eva – apeló a esta prenda para disimular la escasez de medios con los cuales presentarse con vestimenta acorde a los escenarios . Adriana Varela – una de las figuras de la nueva generación .. - adopta un tono audaz y desprejuiciado , bien “ canyengue” , continuando con la tradición que fundara Ruth Durante . Su postura frente a la interpretación recuerda al “ fraseo” transgresor de Goyeneche . En el caso de Eladia Blázquez , creemos estar frente a un fenómeno francamente borroso pero sólido e indiscutible . Comenzó a cantar desde muy pequeña y lo hizo a partir de formatos españoles . Esta cuestión melódica probablemente aparezca en su producción actual , puesto que muchas de sus obras abandonan aquel matiz que denomináramos mistongo , para acercarse a una postura más próxima al bolero . De hecho , su primera composición fue , precisamente , un bolero escrito a los 14 años . El contrapunto que a continuación presentamos , parece convenir en que el discurso femenino crítico adquiere la fuerza que en el crak del 30 hizo suya Discepolín y que ahora aparece como una forma cultural de “ empowerment” en la Blázquez de esta Argentina del default , en marcada simetría . Pero , paralelamente , puede notarse una búsqueda de salida solidaria para la resolución del conflicto vital , un aire esperanzado que en Discepolín no se advirtiera .
En medio de este contexto arrasado y en este país devastado que pretende reescribir su historia , la obra de Eladia propone descubrir una utopía en contraposición a la desesperanza del hombre solo que ha perdido toda ilusión …
La lectura de la literatura desde los arquetipos es un abordaje bastante frecuente . Annis Pratt propone en su libro Dancing with Goddesses, que posible encontrar arquetipos literarios clásicos en la poesía contemporánea y se dedica a un arquetipo en particular: el de la Medusa. Con respecto al mismo señala que : es netamente femenino, y remarca poder e independencia. En las sociedades patriarcales , obviamente, este arquetipo fue visto desde lo negativo . De allí que C. G. Jung y su discípulo Erich Neumann asocian a la Medusa con el concepto de "madre terrible". ¿A qué responden estos universos teóricos? Indudablemente asocian el poder con lo masculino y la pasividad con lo femenino . Para la fuente que hemos consultado : “ son indudablemente parte de la base de la construcción de los imaginarios nacionales de fines de siglo XIX en Latinoamérica. Desde esta ideología, la construcción de la patria requerirá de un papel femenino que discrepe tácitamente con una "madre terrible" independiente tanto en el campo sexual como el económico.” Sin embargo ,ello no impidió que “ algunas mujeres se independizaran y desde la marginalidad crearan una realidad que contradiga los horizontes propuestos por el imaginario de la nación. Esto generó que, por ejemplo en la literatura tanguera, el arquetipo de la mujer terrible apareciera explícito en infinidad de ejemplos, dando a su vez testimonio de la existencia de estas "malevas" de las orillas de Buenos Aires.[12] La mujer como factor de producción también se verifica en relación con la raza negra , habiéndose establecido que : existían propietarios de negras y mulatas que las obligaban a ejercer la prostitución, otros propietarios las obligaban a fabricar velas, tortas o empanadas, pues de esta manera producían ingresos que servían para mantener a la familia blanca.[13]
La repercusión en lo social se manifestó en la búsqueda de nuevos desempeños que trataran de solucionar la problemática del momento .Así :
“Desde el punto de vista social, la influencia parisina en la cultura del cabaret dio un toque de excentricidad a un problema angustiante que había venido asolando a la población desde principios de siglo, pero en la segunda década se magnificó: la falta de empleo y la prostitución. Esta se desarrollo promovida por una situación demográfica desequilibrada debido a que los contingentes inmigratorios —y migratorios— eran en su mayoría formados por hombres, lo que ocasionó una notable "carencia" de mujeres en la capital.”[14] Como expresión cultural urbana marginal y marginada de este posible modelo de Nación que centraba su núcleo firme en el campo , el tango reflejó este universo femenino desvalorizando la figura de la mujer : “Esta búsqueda de regreso a unos orígenes rurales, naturales y gauchescos, trastocará con las nuevas modalidades urbanas inmersa en una cultura enriquecida por la inmigración como es el caso de la italiana, tan presente en la cultura tanguera y que eran vistas como promiscuas, subversivas y delictivas por las clases oligárquicas nacionales en el poder. [15] Este proyecto de nación necesitaba mujeres dedicadas a la producción de sujetos , con sexualidad femenina controlada . En contraposición , la Buenos Aires pletórica de inmigrantes – hombres en su mayoría – mostraba “ una creciente demanda de prostitutas “ lo que se convertía en “ una amenaza a los ideales del Estado de generar una sociedad moralmente conservadora. “ El resultado de esta demanda generó , a su vez , otra visión del cuerpo femenino : como productor de beneficios lucrativos . “ De esta forma el cuerpo de la mujer se vuelve un espacio codiciado no solamente por los ideales del estado, sino también por los intereses de los cafiolos (proxenetas) de los arrabales porteños” .[16] Prueba de esta nueva lógica en la cultura urbana , son estos datos que transcribimos : En 1833 un informe policial indicaba la existencia de turbios lupanares y casas de juego donde también se bailaba. Por ser lugares de conflictos permanentes se ejercía sobre ellos cierta represión, años después, con un gobierno mas permisivo, tuvieron auge lasacademias de baile “ a precios módicos y con las mejores comodidades y decencia”. En 1857 los bailes se habían organizado, comenzaban a las cinco de la tarde y finalizaban a las tres de la mañana, siempre y cuando los serenos no los disolvieran antes. Se reunían cantidades de personas, los caballeros ( que superaban en número a las damas) pagaban cinco pesos a un italiano que hacia de maestro de ceremonias. Las damas asistían estimuladas por una prima de quince pesos por noche (pagados con anticipación por la empresa) y un par de zapatos en atención a los que se rompían bailando toda la noche, ademas les obsequiaban cigarros de papel o de hoja . [17] Pero hay datos que aseguran las excepciones . Tal , el caso de La Moreira , célebre en aquellos
tiempos , muy lejos de jugar un papel pasivo en la historia. “ Sus características de mujer fálica se extienden en la inversión que ella misma presenta al ser ella además una intermediaria entre el deseo sexual masculino y el deseo económico de las prostitutas. Será, según Sebastián Tallón, una cafishia, socia de su marido en el reclutamiento de pupilas y, por sobre todo, administradora y proveedora del hogar, característica netamente masculina en la sociedad patriarcal. Esta imagen de mujer independiente en lo económico, propondrá un perfil subversivo y peligroso no sólo para los códigos e ideales del estado patriarcal, sino también para el mundo marginal. La amenaza de independencia de estas mujeres planteaba una quiebra económica y un peligro al sustento diario. No es exagerado el énfasis que se ponía en el provecho económico que estas mujeres ofrecían.” [18] La elección de este arquetipo de la Medusa, supone un discurso implícitamente masculino y patriarcal, presente en la conciencia colectiva. “ En algunos casos, este arquetipo se contraponía abierta y explícitamente a la imagen femenina materna y supuestamente saludable que los proyectos higienistas de fines del siglo XIX proponían para la "ciudad-organismo", usando términos de Salessi.” Todo este recorrido se puede constatar palmo a palmo en la historia del tango , en cuyas letras aparece retratada la evolución de la cuestión género. Desde “ Mi noche triste” , las letras vienen mostrando una suma de arquetipos que resumiremos de manera suscinta :
La percanta La pebeta La pelandruna La papusa La madama La atorranta La francesita La costurerita que dio aquel mal paso La solterona … La madre
La vieja Etc…etc…
.. dejando atrás muchas denominaciones que el amable lector podrá reponer encendiendo su gramófono personal! Dice Mirtha Alvarez : “ Ubico la época del tongo desde su nacimiento en 1880 como música y danza hasta los años 1960 ya que entiendo que a partir de este momento surge otro tipo de mujer en la Argentina (y quizás en el mundo). De manera que la poesía popular queda, para mí, desplegada en las letras de las canciones del incipiente rock nacional. Surge así la "muchacha ojos de papel", mientras que el tango comienza un doble camino: por un lado se acentúa el desarrollo instrumental, fundamentalmente la línea de Piazzolla y Rovira, mientras que por el lado de las letras se privilegia como protagonista más a la ciudad de Buenos Aires que a sus mujeres. Curiosamente comienza a destacarse una poetisa: Eladia Blázquez “ . [19] Curioso resulta el siguiente señalamiento que hace la misma autora: “ De hecho, en nuestra ciudad al cafiolo se le llamaba, burlonamente, el "cafishio del café con leche", ya que poseía solamente una o, a lo sumo, dos pupilas que trabajaban para él pero no era dueño de un prostíbulo. La forma empresarial de la prostitución fue traída por extranjeros y, en general, explotadas por ellos. Es decir que al macho porteño, además del negocio, lo unían a su mujer lazos de amor. Una de las funciones a la que se asocia a la madre es la nutricia. Así, gozando sexualmente de la misma que le da de comer, el rufián logra condensaren una a la madre y a la puta. Se podrá objetar que no todos los porteños eran rufianes, lo que es verdad. “ El hombre del tango es paradojal , quizás por ello se manifiesta lo que indica la crítica: “Este tango – ( por Mi noche triste) - marca el comienzo de uno de los dramas de amor propios del tango: el hombre abandonado. Así también empieza a construirse esta mujer paradigmática, que, con diversos matices, se repetirá en tantos letras. En este caso el hombre llora la pérdida por partida doble: la mujer sexual, degradada en su condición de objeto de goce y la mujer maternal elevada al rango de objeto de idealización. Desde esta perspectiva sostengo que la mujer creada por las letras de los tangos era una mezcla de debilidad y fortaleza. Su posición de dominio la acerca al rasgo que Lacan destaca en la Madre para el niño pequeño: todopoderosa. Al perderla el hombre se destruye. Es una dimensión pasional del amor
encarnado en un tipo de mujer que es capaz de llevar al hombre a lo peor. “[20] Y en relación con la figura materna , habremos de decir que el tango la propone con un sentido hiperbólico y un sobredimensionamiento notable . “ Pocos temas son de tanta estima como el tema de "la madre" en el tango. Infinidad de letras de tango atribuyen a la "santa" un espacio opuesto al de la "mina", dos términos que son, en el lunfardo, irreconciliables. Tal es el grado de devoción hacia la imagen de la madre, que en algunas letras de tango como "Victoria", de Enrique Santos Discépolo, se celebra que la mujer se haya marchado con otro hombre, ocasionando esta libertad del abandonado, el retorno a la casa materna. La madre es prácticamente de una forma inequívoca una santa que abnegadamente acepta los dolores y las carencias de la vida cotidiana de una forma pasiva.”[21] Con todo , el empoderamiento de las mujeres se instituye en este juego difícil contra un discurso masculino instituido y tomado como estatuto para la configuración de un modelo de nación . “ La lucha y la resistencia a estos preconceptos de mujer pasiva no se hacen esperar a la hora de releer la historia de la Argentina. Posiblemente los mayores ejemplos de esta resistencia se entrevean no solamente en ejemplos literarios como el de la Moreira, o en figuras históricas como Eva Perón; sino en la vida cotidiana ocupando el espacio externo de la calle y de la protesta atribuido solamente al hombre por la autocracia patriarcal. Quizás el mejor ejemplo sea el caso de Las Madres de Plaza de Mayo, reconciliadoras imágenes de madre activa en contraposición a la dictadura. O como propone Masiello, en "las microprácticas de las mujeres [que] han abierto un espacio para la acción; permiten una teoría del poder de gestión cultural que invita a repensar la formación del Estado." [22]
Del empowerment de cantantes y de sus cantares …
Muchas fueron las cantantes de tango que se destacaron a lo largo de su historia. ¿Quién puede dejar de pensar en algunos nombres esenciales que , quizás , resumimos y simplificamos peligrosamente si mencionamos a Tita Merello , Azucena Maizani , Ada Falcón , Tania? Cada una de ellas guarda su lugar en la historia . Un dato que corrobora lo que apuntáramos anteriormente sobre el género es el que nos indica que muchas de las cantantes de tango que se destacaron en los 40 y los 50 , fueron presentadas en concursos o apoyadas o guiadas por sus madres . La muerte de los maridos , la consiguiente necesidad de mantener el hogar , los sueños de juventud , la incidencia de la cinematografía o el fervor por la radio , llevó a que muchas mujeres se convirtieran en promotoras de sus hijas .
Entre estos casos , podríamos citar a Ada Falcón , un de las verdaderas “ divas” que generó todo un mito que incluye , además , el de su pronto retiro en plena juventud . Ada Falcón se aisló en Salsipuedes , Córdoba . Allí falleció a los 98 años , en el año 2002 . Lo exótico llega en la figura de Rango Fujisawa , quien – invitada por Troilo para cantar en un espectáculo al que asistía … - interpretó sus mejores éxitos trabajando la canción desde la fonética , puesto que no sabía el idioma . Famosa fue su interpretación de “ Mama , yo quiero un novio “ … , un verdadero clásico. Con todo , y en relación con los cantores , el listado resultado menor . El que corresponde a los hombres , es notablemente más abundante . Sin embargo y en referencia a la calidad , la cuestión es inversamente proporcional: las mujeres del tango adoptan un rol acorde con los nuevos tiempos y logran un éxito resonante. En el caso de Susana Rinaldi , su figura fuerte la lleva a interpretaciones de un color poco hallable y con cierto matiz académico y poderosamente colocado en el escenario musical y aún en el de la política . Egresada del Conservatorio de Arte Dramático , sus interpretaciones se acercan a lo histriónico , por lo que algunos sugieren que se trata de verdaderos monólogos musicales con matiz actoral. Hacia los 70 , los intelectuales y los estudiantes universitarios la condujeron a un lugar de privilegio . Rosana Falasca se constituyó en un joven valor prematuramente desaparecido a los 30 años . Quedaba inconclusa una carrera signada por el éxito y la popularidad que le dieron el cine y la televisión , principalmente el programa “ Grandes Valores del tango” de Silvio Soldán . Curioso caso es el de Nelly Omar , quien inaugurara una nueva fisonomía al adoptar el “ poncho” para actuar . Urgida por la pobreza – entró en las “ listas negras” de la dictadura que desalojó al gobierno de Perón y fue perseguida por su amistad con Eva – apeló a esta prenda para disimular la escasez de medios con los cuales presentarse con vestimenta acorde a los escenarios . Adriana Varela – una de las figuras de la nueva generación .. - adopta un tono audaz y desprejuiciado , bien “ canyengue” , continuando con la tradición que fundara Ruth Durante . Su postura frente a la interpretación recuerda al “ fraseo” transgresor de Goyeneche . En el caso de Eladia Blázquez , creemos estar frente a un fenómeno francamente borroso pero sólido e indiscutible . Comenzó a cantar desde muy pequeña y lo hizo a partir de formatos españoles . Esta cuestión melódica probablemente aparezca en su producción actual , puesto que muchas de sus obras abandonan aquel matiz que denomináramos mistongo , para acercarse a una postura más próxima al bolero . De hecho , su primera composición fue , precisamente , un bolero escrito a los 14 años . El contrapunto que a continuación presentamos , parece convenir en que el discurso femenino crítico adquiere la fuerza que en el crak del 30 hizo suya Discepolín y que ahora aparece como una forma cultural de “ empowerment” en la Blázquez de esta Argentina del default , en
marcada simetría . Pero , paralelamente , puede notarse una búsqueda de salida solidaria para la resolución del conflicto vital , un aire esperanzado que en Discepolín no se advirtiera . En medio de este contexto arrasado y en este país devastado que pretende reescribir su historia , la obra de Eladia propone descubrir una utopía en contraposición a la desesperanza del hombre solo que ha perdido toda ilusión …
Discépolo Eladia Blázquez Yira – Yira Contame una historia Cambalache Argentina primer mundo Desencanto Honrar la vida Uno A un semejante
Notas y Bibliografía [1] Banga Fabián. University of California at Berkeley. Calzadoras de dagas, representación de arquetipos femeninos en la literatura tanguera de principios del siglo XX. http://www.everba.com/summer03/fabian_tango.htm
[2] CORIA, JUAN CARLOS . NEGROS EN LOS CENSOS ESPAÑOLES. http://www.geocities.com/maf140369/historia/coria8.htm
[3] Silvia Pellarolo. "De minas y tangos, sainetes y cabaret" [4] Silvia Pellarolo. "De minas y tangos, sainetes y cabaret" [5] Pellarolo , Silvia . Op.cit [6] Lamas , Rosa .La mujer , el humor y el tango . http://www.geocities.com/Broadway/Wing/1963/index.htm [7] Banga Fabián. Op. Cit. [8] Mirta VázquezLas mujeres en el tango
[9] Originalmente publicado en la revista Club de Tango, Nº 37, Buenos Aires, Julio-Agosto de 1999.
[10] Banga Fabián. Op. Cit. [11] Banga Fabián. Op. Cit. [12] Banga Fabián. University of California at Berkeley. Calzadoras de dagas, representación de arquetipos femeninos en la literatura tanguera de principios del siglo XX. http://www.everba.com/summer03/fabian_tango.htm
[13] CORIA, JUAN CARLOS . NEGROS EN LOS CENSOS ESPAÑOLES. http://www.geocities.com/maf140369/historia/coria8.htm
[14] Silvia Pellarolo. "De minas y tangos, sainetes y cabaret" [15] Silvia Pellarolo. "De minas y tangos, sainetes y cabaret" [16] Pellarolo , Silvia . Op.cit [17] Lamas , Rosa .La mujer , el humor y el tango . http://www.geocities.com/Broadway/Wing/1963/index.htm
[18] Banga Fabiรกn. Op. Cit. [19] Mirta VรกzquezLas mujeres en el tango
[20] Originalmente publicado en la revista Club de Tango, Nยบ 37, Buenos Aires, Julio-Agosto de 1999.
[21] Banga Fabiรกn. Op. Cit. [22] Banga Fabiรกn. Op. Cit.