Catálogo "Arte Contemporáneo Figurativo del S. XXI" | Colección Permanente | MEAM by Museo Europeo De Arte Moderno

ART CONTEMPORANI SEGLE XXI Col·lecció de la «Fundació de les Arts i els Artistes»

ARTE CONTEMPORANEO SIGLO XXI Colección de la «Fundació de les Arts i els Artistes»

CONTEMPORARY ART XXI CENTURY «Fundació de les Arts i els Artistes» Collection’s

1ª edición: Junio 2011 2ª edición: Agosto 2012 Editor: Infiesta Editor Maquetación: José A. Santander Producción: Alfa Fotografía: Antoni Bofill Kim Castells Dani Rovira

ÍNDICE MUSEO: EL EDIFICIO J. M. Infiesta: La primera exposición del MEAM Lluís Permanyer: Historia y trascendencia histórica del Palau Gomis

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Estudio documental del edificio Fotografías del edificio antes y después de la restauración y de las diversas actividades del Museo

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CATÁLOGO PINTURA Alonso Xoubanova, Luis F. Antúnez del Cerro, Salvador Asano, Akihito Asensio Sanagustín, Carlos Bahamonde, Aldo Bassez, Mathieu Beel, Paul Bogani, Alessio Buigas, Arquer Capozzoli Emanueli, Glauco Carbonell Fouliqué, María Carpintero, Alejandro Carrillo Cruz, Francisco Casals, David Casañé González, Jaume Castang, Maïa Castellanos García, Andrés Castellanos López, Pepe Castelló Avilleira, Antonio Castillo Oñate, Miguel Cazorla, Antonio Ceña Ruiz, José Luis Cerrato Rincón, Antonio Chiang, Ricard Collar, Enrique Coluccelli, María Comoretti, Vania Compagnucci, Andrés G. Corella García, José Luis Cossío, Juan Manuel Cruz Tordesillas, Antonio De Ávila, Antonio De la Fuente, Ignacio De Olano, Marta Del Toro, Pedro Díaz Alamá, Jordi Díaz Gálvez, Yoel Domínguez, Goyo Drukker, Sam

44 47 48 50 51 54 56 58 59 60 61 62 64 65 66 67 68 70 71 72 73 74 75 76 77 79 80 81 82 85 89 91 92 93 94 95 99 101 102

Durán Silva, Lorenzo M. 103 Esparza Murillo, Mikel 104 Estudillo Pérez, Ignacio 105 Fernández, Lorenzo 106 Fernández, Soledad 107 Ferrando Menárguez, Paco 108 Flórez Soler, Henry 109 Florkin, Valery 110 Franco Fraga, Iván Carlos 111 Fuentes López, Ismael 113 Gallego García, Jorge 115 Garcés Sigas, Juan Guillermo 117 Gil Gutiérrez, Juan Carlos 118 Golucho 119 González Coves, Daniel 121 González García, Ricardo 122 Goytisolo Gil, Gonzalo 123 Grün, Gabriel 124 Huertas Torrejón, Manuel 125 Hurtado Mateos, Manuel 126 Izquierdo, Jorge 132 Jiménez Scheroff, José M. 133 Jordá i Frasquet, Inmaculada 134 Kassan, David 135 Lago, Lino 136 Lázaro, Isidoro 137 Llarch Juanet, Adrià 138 López Pascual, Fernando 139 Lu, Fang 140 Maeso, Pablo 142 Malinsky, Charles 143 Marco, Alejandro 145 Marijuán, Carlos 148 Martínez Peciña, Arantzazu 150 Mateos Prieto, Constantino 152 Mateu, Julià 153 Meana, Kike 156 Mendivil Blanco, Amelia 162 Mendoza Mancillas, Edgar 163 Menpo 164 Millán, Joaquín 165

Minguillón, David Montaña, Alfredo Moragrega Espuña, Oriol Morales Ramiro, Eloy Moreno Aguado, Juan Moya, Miguel Ángel Mújica, Sito Muñoz Vera, Guillermo Muro Aguado, Carlos Naranjo, Eduardo Naranjo Bernal, José Carlos Naranjo Torres, Juan Naylor, David Nieto, Juan B. Nieto Pantoja, Jesús Olazábal, Mikel Páez, Manuel Pavez Arce, Mario Perdiguero, Juan Pérez Collar, José Pfalzgraf, Maximilian Pina Alegre, Adriá Piotrowsky, Leszek Ragel Nieto, Susana Ramírez de Arellano, Fermín Ríos Villar, Laura Rizzo, Luis Roa, Francisco Roldán, Alfredo Roy, Juan Manuel J. Ruiz Pérez, Javier Sacris Sánchez Alba, Jesús Santibáñez Servat, Pablo Saura Riaza, Carlos Scazzosi, Doriano Sedano Vivanco, Guillermo Solera del Rio, José M. Steen, Monique Subirá Domingo, Juan Teixidor, Martí

166 167 168 169 171 172 173 174 175 177 179 180 181 182 188 189 191 193 194 195 196 197 198 199 200 201 202 204 206 207 210 211 213 214 215 216 218 219 220 221 222

Toledo, Álvaro Torices, Javier Trigo Trigo, Modesto Ulibin, Guennadi Vaca de León, Ángel Valero, Jaime Valls, Dino Ventrone, Luciano Villalba, Jorge Zabalegui Iriarte, Mirentxu

227 228 230 231 234 235 236 239 242 243

ESCULTURA Belmonte Cortés, José M Codina Font, Pol Coello, César Rodrigo Egea Izquierdo, Jorge Galliani Michelangelo Granero, Luisa Gwiazda, Grzegorz Guerrero Serrano, Teresa Jiménez Molina, Wenceslao Kopecky, Miroslav Lasanta Jimeno, Andrés Lorenzo Vicente, Emiliano Martínez Pérez, José M. Mas Pujolràs, Gerard Méndez Padín, Xesús Mer Morán Nevado Zazo, Abraham Ricci, Ricardo Riveras Tobia, Patricia Róbalo, Flávia Rosenzweig, Ana Sánchez Pérez, Joao Rodrigo Santín Benito, Antonio Slowczynska, Monika

246 247 248 249 251 252 254 259 260 261 263 264 265 266 267 268 271 272 273 274 275 276 278 279 280

Arte contemporáneo del siglo XXI: La primera exposición del MEAM

En junio de 2011, finalmente, ha abierto sus puertas el nuevo Museo Europeo de Arte Moderno (MEAM). Y lo ha hecho presentando al gran público una originalísima colección de pintura y escultura figurativas de artistas contemporáneos. El MEAM es la plasmación material de una trayectoria de trabajo y esfuerzo de la «Fundació de les Arts i els Artistes», creada en 2005 con la única finalidad de apoyar y valorar el arte moderno y a los artistas contemporáneos que se han mantenido fieles a la figuración. La inauguración de este museo no es el fin de ninguna etapa, sino el inicio de una trayectoria que, de verdad, ahora empieza. La apertura de puertas de este museo debe suponer un antes y un después de la figuración por ocupar el lugar que le corresponde en la imagen pública del arte contemporáneo. Los inicios en la gestión de una Fundación privada, sin ánimo de lucro, no han sido fáciles. Ni los inicios ni los años posteriores. La crisis económica ha cortado radicalmente los fondos financieros con los que la Fundación contaba para su desarrollo. Lo cierto es que muy pocos apostaban por la supervivencia de una institución que nacía tan aparentemente débil y tan huérfana de apoyos institucionales. Pero la Fundación ha encontrado una inesperada base de solidez, un apoyo que afianza su seguridad: Es la fuerza de los propios artistas. Sí, sí, de los artistas. Es el apoyo de los miles de autores que, año tras año, le han dado su reconocimiento y han hecho de la Fundación una plasmación real de la lucha de cada uno de ellos por su propio reconocimiento. La Fundación es y será lo que los artistas mismos quieran que sea. Porque ellos son su única razón de ser. Ellos son la excusa que justifica su existencia. Y cuanta más cohesión y unidad exista entre los artistas contemporáneos, más justificación tendrá la Fundación para dar a conocer al mundo una obra colectiva que está decidida a no seguir marginada de las páginas de la historia del arte de nuestro siglo. El MEAM es el nuevo templo de esta nueva religión. La religión de los que creen, en pleno siglo XXI, en el Arte. Un arte que ya no se conforma con la experimentación convertida en fin en sí misma, ni con el permanente ensayo de formas sin lograr ninguna definitiva, ni con el culto al ruido por el ruido, ni con video montajes lastrados por el aburrimiento. En fin, un arte que se justifique en sí mismo por ser algo directo, expreso, rotundo, absoluto, real, inteligible y genial. El arte ha de ser asimilable para el espectador. El arte ha de ir dirigido al hombre de la calle, no al erudito. El arte ha de hablar el lenguaje del pueblo, no el de los académicos. El intelectual puede escribir interesantes ensayos sobre la obra de arte, pero el artista no vive de esos ensayos. Los académicos pueden aplaudir a los artistas ya consagrados, pero eso no les garantizará sobrevivir a su tiempo. Lo único que da sentido al arte es saber conectar con la gente, llegar a la sensibilidad del espectador. Y para eso no hacen falta títulos ni diplomas. Basta con saber crear. La abstracción y todos los ismos que nacieron como un proceso de ruptura con el arte a lo largo del siglo pasado, han acabado sentándose en los sillones de las academias contemporáneas e imponiendo sus cánones estéticos en todas las instituciones oficiales. La experimentación copa todas las ferias de arte contemporáneo.

Y aquel olor inicial de aire fresco, de ruptura, de novedad, ha sido sustituido por el tufillo de lo rancio, lo manido, lo repetitivo y, en resumen, lo aburrido. Porque no hay en verdad nada más aburrido que la reiterada repetición de lo que se dice novedoso cuando ya ha perdido el encanto de la novedad. El arte que, hasta ahora, se creía con el derecho de apropiarse con carácter de exclusividad del calificativo de contemporáneo, ha dejado de decir cosas interesantes. Lo que el MEAM presenta en ésta su primera exposición es otra forma, profundamente original, de ver y sentir el arte contemporáneo. Y si esta exposición genera polémica sobre los caminos del arte más actual, habrá valido la pena. Es un retorno a los orígenes que se nos habían ocultado repetidamente. Es el reconocimiento de los valores que se han negado año tras año en las universidades y las escuelas. Es el valor de la calidad sobre la novedad. Es el valor de la tradición, la recuperación del valor del oficio, la importancia del trabajo personal en soledad, es el culto al genio, el reconocimiento de las obras de los grandes maestros. Es el retorno a virtudes como la perseverancia, la constancia, la creación personal. Es abandonar los demagógicos montajes de objetos inconexos para retornar a la intimidad del taller del artista, a la creación de la obra personal, elaborada, meditada y largamente perseguida. Esta primera exposición que presenta el MEAM: «Artistas contemporáneos del siglo XXI», es un homenaje a todos estos artistas que nos han acompañado, que han trabajado para que nosotros aprendamos a disfrutar su obra, y que siguen trabajando con la ilusión de llegar a crear una obra que perviva, que supere nuestras pequeñas y breves vidas, y que finalmente sea admirada y reconocida por la mayoría de nuestros contemporáneos. El MEAM no puede disimular su orgullo al presentar esta selección de artistas vivos, que a buen seguro el público apreciará y valorará. A la vez que siente la frustración de no poder presentar la obra de tantos otros artistas, igualmente meritorios y exquisitos, que por razón de espacio o de economía, no han podido ser incluidos entre las paredes de nuestro museo. Tal vez en un futuro próximo tengamos la oportunidad de subsanar este defecto. Que el visitante que entre a conocer este nuevo espacio aprenda a pasearse por sus salas, paladeando sus exquisitos rincones y obteniendo la sensación de placer que desean transmitirle todos y cada uno de los artistas representados. Cada una de las obras expuestas está colocada para acompañarle en su estancia entre nosotros y para, después, cuando vuelva al mundo exterior, dejar un bello, íntimo y reconfortante recuerdo. José Manuel Infiesta

21st-century Contemporary Art: the first exhibition of the MEAM

In June 2011 the European M useum of Modern Art (MEAM) has finally opened. Moreover, it has done so by presenting to the general public an extremely original collection of figurative painting and sculpture by contemporary artists. The MEAM is the material form of a long period of work and effort made by the «Fundació de les Arts i els Artistes», created in 2005 with the sole aim of supporting and giving value to modern art and contemporary artists that have remained loyal to figurative creation. The opening of this museum is not the end of any stage, but rather the beginning of a path that, in reality, starts right now. The opening of this museum represents a turning point in figurative art since it occupies the place that corresponds to the public image of contemporary art. The early days of a non-profit private foundation have been by no means easy. Neither the early days nor the later years: the economic crisis has dramatically cut the finances that the Foundation counted on for its development. The truth is that very few people thought that an institution that was founded so apparently weak and devoid of institutional support would survive. However, the Foundation has found an unexpected base of solidity, a support that guarantees its security: that is the strength of the artists themselves. That’s right, of the artists. It is the support of thousands of artists who, year after year, have given it its recognition and have made the Foundation a real expression of the struggle of each one of them for their own recognition. The Foundation is and will be what the artists want it to be. This is because they are the sole raison d’être. They are the excuse that justifies its existence. And the more cohesion and unity that exists among contemporary artists, the Foundation will have more justification to show to the world a collective work that is determined to continue not to be marginalised from the pages of the history of art of this century. The MEAM is the new temple of this new religion; the religion of those who believe, now in the 21st century, in Art. An art that no longer conforms to experimentation turned into an end in itself, or with the permanent experiments of forms without achieving anything definitive, or with the worship of noise for noise’s sake, or with video montages weighed down by boredom. In short, an art that is justifiable in itself for being rather direct, expressive, clear, total, real, intelligible and brilliant. Art must be easy to assimilate for the spectator. Art must be aimed at the person in the street, not the scholarly. Art must speak the language of the people, not that of the academics. The intellectual may write interesting essays about the work of art, but the artist does not make a living from these essays. Academics may applause the already consecrated artists, but this will not guarantee they survive their time. The only thing that gives meaning to art is being able to connect with people, reaching the sensitivity of the spectator. And to achieve this they do not need qualifications or diplomas. They just need to be able to create. Abstraction and all the isms that appeared as a process of rupture with the art tradition throughout the last century, have ended up seated in the armchairs of contemporary academies and imposing their aesthetic rules on all the official institutions. Experimentation monopolises all the contemporary art fairs.

And that initial scent of fresh air, of rupture, of newness, has been replaced by the slight smell of what is rancid, stale, repetitive and, to sum up, what is boring. Because, in reality, there is nothing more boring than the reiterated repetition of what claims to be innovative when it has already lost the charm of the new. In fact many contemporary art centres, linked to public authorities and subsidised by official status, produce such a feeling of boredom that their enormous spaces end up irremissibly empty and in them the echo resounds of the footsteps of the occasional solitary visitor. The art which, until now, was created with the right to appropriate exclusively the qualification of contemporary, no longer has interesting things to say. What the MEAM presents in this, its first exhibition, is another form, profoundly original, of seeing and sensing contemporary art. And if this exhibition generates controversy about the paths of the most current art, it will have been well worth it. It is a return to the origins that had been repeatedly concealed from us. It is the recognition of the values that have been denied year after year in the universities and schools. It is the value of quality over the novelty. It is the value of tradition, the recovery of the value of craftsmanship, the importance of personal work alone, it is the homage to genius, the recognition of the works of the grand masters. It is the return to virtues such as perseverance, constancy and personal creation. It is about abandoning demagogic montages of unconnected objects to return to the intimacy of the artist’s studio, to the creation of the personal work, elaborated, meditated and for a long time persecuted. This first exhibition presented by the MEAM: «21st-century Contemporary Artists» is a homage to all these artists who have accompanied us, who have worked so that we learn to enjoy their work, and who continue working with the illusion of being able to create a work that survives, that outlasts our small and brief lives, and which is finally admired and recognised by the majority of our contemporaries. The MEAM cannot hide its pride on presenting this selection of active artists, who the public will certainly appreciate and value. We also feel frustration at not being able to present the work of so many other artists, equally meritorious and exquisite, which for reasons of space or economy, have not been able to be included in the rooms of our museum. Perhaps in the near future we will have the chance to remedy this defect. May the visitor who enters to discover this new space learn to walk through its rooms, savouring its exquisite corners and obtaining the sensation of pleasure that each and every one of the artists represented here wish to transmit to them. Every one of the works exhibited is placed to accompany you in your stay with us and so that, afterwards, when you return to the outside world, you are left with an intimate, beautiful and comforting memory. José Manuel Infiesta

El Concurso De Pintura Y Escultura Figurativas

The Figurative Painting And Sculpture Competition

La colección que presenta el MEAM se ha formado, en buena parte, en torno a las mejores obras seleccionadas en el Concurso de Pintura y Escultura Figurativas, que cada año convoca la «Fundació de les Arts i els Artistes». En cada convocatoria, mil artistas procedentes de más de cincuenta países, participan en esta iniciativa y, con su participación, dan consistencia a la propia razón de ser de la Fundación. Un jurado rigurosamente independiente selecciona las mejores obras y otorga las menciones de honor y los premios. Gran parte de ellos forman la colección que ahora se presenta al gran público en el nuevo museo creado especialmente para ello. El jurado ha estado formado por:

The collection that the MEAM presents has been formed, in the main, by the best works selected in the Figurative Painting and Sculpture Competition, which the «Fundació de les Arts i els Artistes» holds each year. In each year’s competition, a thousand artists from more than fifty countries take part, and their participation provides solidity to the very raison d’être of the foundation. A rigorously independent jury selects the best works and awards the mentions of honour and prizes. A large part of them forms the collection that is now being presented to the general public in the new museum created especially for this purpose. The jury has been made up of:

Modalidad pintura: José Manuel Infiesta Monterde Antonio López García Eduardo Naranjo Leandro Navarro Ungria Tomás Paredes Manuel Parralo Dorado Javier Rubio Nomblot Santiago Sánchez Echebarría Antonio Zambrana Lara Modalidad escultura: Fernando Capa Eduard Duran José Manuel Infiesta Monterde Julio López Hernández Francisco López Hernández José Marín Medina

Painting section: José Manuel Infiesta Monterde Antonio López García Eduardo Naranjo Leandro Navarro Ungria Tomás Paredes Manuel Parralo Dorado Javier Rubio Nomblot Santiago Sánchez Echebarría Antonio Zambrana Lara Sculpture section: Fernando Capa Eduard Duran José Manuel Infiesta Monterde Julio López Hernández Francisco López Hernández José Marín Medina

Historia y trascendencia urbanística del Palacio Gomis por Lluís Permanyer

Francesc de Gomis, un acaudalado mercader de telas barcelonés con un popular establecimiento comercial en la calle Argenteria, compró dos casas sencillas que Ana María Rey poseía en la calle Barra de Ferro, 5 y 5 bis. Corría el año 1791. De Gomis contrató al prestigioso maestro de obras Joan Garrido i Bertran (Barcelona, 1724-1792), profesional al servicio del Obispado y de la Real Audiencia; había proyectado en su ciudad natal la restauración del monumento a Santa Eulàlia, en la plaza del Pedró, pero sobre todo la formidable sede del Gremi dels Velers o de l’Art Major de la Seda (1758), que aún admiramos hoy en día en la Via Laietana. También había proyectado la casa de un antepasado de Martí de Riquer en la calle dels Escudellers 2 (1764), chaflán con la calle Nou de Sant Francesc. Gomis le encargó que derruyera aquellas casas viejas y prosaicas, uniera las dos fincas y construyera un edificio representativo de su considerable poder económico. El resultado de la obra pasó a ser conocido entonces como el palau Gomis. No escatimó en nada y el resultado constituyó una magnificencia singular. La ornamentación original se repartía con generosidad y eficacia por doquier. La pieza más espectacular fue el gran salón principal, del cual se ignora la fecha exacta de construcción. Éste consiste en un impresionante espacio cúbico regular de nueve metros de lado. Si el resto de estancias se decoraron con techos pintados, estucados y molduras de yeso, en el salón la ornamentación se enriquece además con un friso ancho esculpido en relieve con grupos de ménades o figuras femeninas cinceladas por una mano profesional y muy afinada. Puede ser definido como el conjunto barroco catalán tardío, inspirado en un neoclasicismo civil francés, más relevante de la época. El lugar era magnífico y bien escogido. En efecto, casi en el chaflán de la calle más noble de la ciudad: Montcada; honraba el apellido de los magnates que ya en el siglo XI financiaron el primer espacio público medieval proyectado en su totalidad como un eje urbano. Un seguido de palacios, casi todos rehabilitados, lo siguen ennobleciendo. El nombre Barra de Ferro (Barra de Hierro) se originó a raíz del 22 de septiembre de 1668 cuando el Ayuntamiento, según precisa la Rúbrica de Bruniquer, pagó « 32 libras y 12 sueldos para las barras de hierro que se pusieron en la boca de la cloaca y también para la barrera». La estrategia militar del megalómano Bonaparte perjudicó directamente a Gomis, por culpa del poderoso ocupante Lechi. Giuseppe Lechi, militar italiano profesional (1766-1836), se había puesto rápidamente al servicio de Napoleón. A finales de 1807 y en calidad de general de división que regía el Cuerpo de Observación de los Pirineos Orientales, esperaba en la frontera francesa la orden de pasar a España por el paso de Le Perthus. El 13 de febrero entró en Barcelona con 5400 soldados y 1500 caballos; también hace lo mismo el general Duhesme. Lechi escogió el Palau Gomis para ir a vivir. El general Philibert Duhesme intentó instalarse primero en el palacio del barón de Maldà, en la calle del Pi, pero finalmente ocupó, en primer lugar la casa del marqués de Villel en la plaza de Sant Josep Oriol, y después el palacio March de Reus en La Rambla. Los generales Frère, Chabran, Clement, Schwartz y algunos otros, también escogieron las mejores casas. Bally, cirujano mayor, se instaló en la casa Martí, de la calle Basea. Y el capitán de caballería Balbir, en la casa Valldejuli, en la calle Ample.

Lechi fue más listo que el general español Ezpeleta: aprovechó la ingenuidad de la guarnición de la Ciutadella para ocuparla sin disparar ni un solo tiro, fingiendo que iba a pasar revista a la tropa. Y entonces se autonombró gobernador militar, es decir, quien mandaba sobre todas las fuerzas francesas acuarteladas en Barcelona y en sus fuertes. Una de las primeras medidas que tomó Lechi fue encarcelar a los barceloneses más influyentes y ricos, con tal de extorsionarlos. Uno de los detenidos fue precisamente el amo del palacio que él había ocupado: Gomis, que pertenecía a la Junta de Suministros, es decir, aquéllos que debían facilitar al ocupante francés aprovisionamiento y dinero. Justo en la puerta del palau Gomis sucedió un incidente grotesco, que indignó a una ciudad ya airada. Curiosamente no fue relatado por Juan Mercader en su extensa monografía sobre la invasión napoleónica (Barcelona durante la ocupación francesa); lo cuenta, en cambio, Lluís Almerich en los tres volúmenes consagrados a evocar calles (Història dels carrers de la Barcelona vella). El general puso mucha vigilancia en su nueva residencia. Y un día, al pasar un menestral por delante del portal, que iba picando su pastilla de tabaco con la hoja de un pequeño cuchillo, fue advertido por uno de los centinelas que no dudó en tomar medidas inmediatas y muy enérgicas, ordenándole que se detuviera. Tan concentrado estaba el buen hombre en lo que hacía, que no se dio cuenta de lo que le decían y siguió como si nada. El soldado no se lo pensó dos veces: le disparó y le hirió de cierta gravedad. El suceso revolucionó al vecindario; Lechi intentó justificarlo al mostrar el pequeño cuchillo, calificándolo de puñal, argumentando que el menestral había intentado una acometida. Nadie dio crédito a una versión tan poco contrastada. La situación se agravó aún más al día siguiente, al morir el herido. El general temió por su seguridad y decidió trasladarse a vivir al palacio que la familia francesa Larrard poseía en la calle Ample; y no fue solo: le acompañaba La Ruga, su amante italiana. Lechi consideraba que mejoraba su situación estratégica, dada la proximidad de La Rambla y la caserna de las Drassanes. El palau Gomis fue entonces ocupado por M.Bourdon, comisario interventor. Lechi es definido por los historiadores como un tipo sin escrúpulos morales, arbitrario, capaz de hacer todo tipo de ilegalidades con tal de conseguir lo que en cada momento quería. Obligaba a la policía a emplear la violencia para conseguir los pagos. El asesinato del usurero milanés Canton le costó el cargo. Cuando el general Guvion de Saint-Cyr abandonó Barcelona el 15 de abril de 1809, se llevó a Lechi. Francesc de Gomis disfrutó bien poco de aquel palacio que había ordenado construir con tanta ilusión y gasto: murió el año 1815. No pudo ver, ni sufrir, todo lo sucedido después, que empezaba a mutilar sensiblemente un edificio tan noble. Y es que en 1860 se inauguró la apertura de la calle Princesa. Era un hecho ineluctable, ya que formaba parte de la primera gran transformación urbanística, constituida por un eje (calles Ferran, Jaume I y Princesa) basado en la línea recta, el camino más corto, rápido y directo para unir la Ciutadella con La Rambla. El proyecto, que dio pie a la creación de la plaza Sant Jaume, la que sin duda merecían unos Ayuntamiento y Generalitat construidos uno enfrente del otro, fue ejecutado por el arquitecto municipal Josep Mas i Vila. De todas formas, es necesario precisar que no había sido fruto de su imaginación creativa, sino de la aplicación de la estrategia militar que habían ideado los franceses. En efecto, el hecho de que Lechi viviera en el palau Gomis le permitió reflexionar sobre la densidad asiática que ya sufría Barcelona y que dificultaba gravemente la movilidad de sus tropas. Fue entonces cuando ya se consideró conveniente conseguir comunicar por vía directa y ancha la Ciutadella con La Rambla, donde los ocupantes franceses tenían el cuartel general y la caserna de las Drassanes. A pesar de que la construcción de aquel eje exigía un derribo de una envergadura tremenda, que sentenciaba muchas casas y también algunos edificios históricos relevantes, poco después de la derrota del francés ya fue llevado a cabo

con un dinamismo y una prisa nunca vistas antes. Por ejemplo, en la construcción de la calle Ferran, un capitán general inquieto por la resistencia tenaz exhibida por un convento de monjas sentenciado al desahucio, ordenó que si no era evacuado inmediatamente, lo derribaría a cañonazos. Así, el nacimiento de la calle Princesa supuso la destrucción de una parte del palau Gomis, que además quedó dividido: la parte menos noble quedó aislada al otro lado de la nueva calle. Hay que precisar que, por otra parte, había ganado así una fachada relevante a la calle Princesa, la de los números 16 y 18, proyectada por el arquitecto Miquel Garriga i Roca; a principios del siglo XX apareció el portal de sensual curva modernista. La mutilación no acabó aquí, por desgracia. El patio elegante y equilibrado también fue modificado sensiblemente. Lo cierto es que cuando alguien se encuentra delante del número 5 de Barra de Ferro, ni la fachada ni el sorprendente tamaño del portal permiten intuir la magnificencia interior que esconde. Quizá por eso se atrevieron a persistir en la mutilación, que acabó degenerando en la ocupación del formidable vacío del salón principal, que se llenó con pequeñas estancias y se parceló en tres pisos; en el principal vivió el editor Gustavo Gili. Se instalaron también la Escola de Sabaters y una pensión. No está mal. Por tanto, la realidad era que el palau Gomis había desaparecido, engullido por aquel inmerecido y humillante destino. No sorprende que cuando en 1944 la editorial Dalmau publicó el libro de Ramon Aliberch, Las casas señoriales de Barcelona, no mereciese ser evocado, sino simplemente mencionado y sin ningún adjetivo. La recuperación se hizo esperar: la pintora holandesa Gertrud D-Trudy Derksen lo compró, lo hizo rehabilitar, bajo la responsabilidad de los experimentados arquitectos Mercè Zazurca y Josep Gorgues, mereciendo un premio FAD por ello y lo inauguró en 2002 como centro de exposiciones de arte contemporáneo y otras actividades culturales. Fue, como quien dice, flor de un solo día; no me sorprendió en absoluto: lo vi venir el mismo día de su apertura, al hablar un rato con la artista y su compañera, que se encargaba del mecenazgo. Al menos permaneció cerrado, sin ningún otro tipo de penitencia. Hasta la primavera del 2011, gracias al arquitecto y editor José Manuel Infiesta Monterde, el nuevo propietario: lo ha restaurado y adecuado para mostrar una selección de su nutrida colección de arte contemporáneo figurativo. Lluís Permanyer

Història i transcendència urbanística del Palau Gomis per Lluís Permanyer

Francesc de Gomis, un acabalat mercader de teles barceloní amb un popular establiment comercial al carrer d’Argenteria, va comprar dues cases senzilles que Anna Maria Rey posseïa al carrer Barra de Ferro, 5 i 5 bis. Corria el 1791. Va contractar el prestigiós mestre d’obres Joan Garrido i Bertran (Barcelona, 1724-1792), professional al servei del Bisbat i de la Reial Audiència; havia projectat a la seva ciutat nadiua la restauració del monument a Santa Eulàlia, a la plaça del Pedró, però sobretot la formidable seu del Gremi dels Velers o de l’Art Major de la Seda (1758), que encara admirem avui a la Via Laietana. També havia projectat la casa (1764) d’un avantpassat de Martí de Riquer al carrer dels Escudellers 2, xamfrà Nou de Sant Francesc. Gomis li va encarregar que enderroqués aquelles cases velles i prosaiques, unís les dues finques i li posés dempeus un edifici que fos ben representatiu del seu considerable poder econòmic. El resultat va ser el que tot seguit va passar a ser conegut com el palau Gomis. No va escatimar res i el resultat va constituir una magnificència singular. La ornamentació original es repartia amb generositat i eficàcia per arreu. La peça més espectacular va ser el gran saló principal, del qual s’ignora la data exacta en què es va construir. Consisteix en un impressionant espai cúbic regular de nou metres de costat. Si la resta de les cambres van ser ornamentades amb sostres pintats, estucats i motllures de guix, al saló la decoració s’enriqueix a més a més amb un fris ample, esculpit en relleu amb grups de mènades o figures femenines cisellades per una mà molt professional i afinada. Pot ser definit com el conjunt barroc tardà , inspirat en un neoclassicisme civil francès, més rellevant de l’època. El lloc era magnífic i ben triat. En efecte, gairebé al xamfrà del carrer més noble de la ciutat: Montcada; honorava el cognom dels magnats que ja al segle XI van finançar el primer espai públic medieval projectat tot ell com un eix urbà. Un seguit de palaus, gairebé tots rehabilitats, segueixen ennoblint-lo. El nom Barra de Ferro es va originar arran del 22 de setembre de 1668 quan l’Ajuntament, segons precisa la Rúbrica de Bruniquer, va pagar «32 lliures i 12 sous per les barres de ferro que posaren a la boca de la claveguera i també per a la barrera». L’estratègia militar del megalòman Bonaparte va perjudicar molt directament Gomis, per culpa del poderós ocupant Lechi. Giuseppe Lechi, militar italià professional (1766-1836), aviat s’havia posat al servei de l’exèrcit de Napoleó. A finals del 1807 i en qualitat de general de divisió, que manava el Cos d’Observació dels Pirineus Orientals, esperava a la frontera francesa l’ordre de passar a Espanya pel coll del Perthus. El 13 de febrer va entrar a Barcelona amb 5.400 soldats i 1.500 cavalls; també fa el mateix el general Duhesme. Lechi va escollir el palau Gomis per anar a viure. El general Philibert Duhesme va intentar primer instal•lar-se al palau del baró de Maldà, al carrer del Pi, però finalment va ocupar primer la casa del marquès de Villel, a la plaça de Sant Josep Oriol, i després el palau March de Reus, a la Rambla. Els generals Frère, Chabran, Clement, Schwartz i altres, també es van triar les cases millors. Bally, cirurgià major, es va instal•lar a la casa Martí, del carrer Basea. I el capità de cavalleria Balbir, a la casa Valldejuli, al carrer Ample. Lechi havia estat molt més llest que el general espanyol Ezpeleta: va aprofitar la ingenuïtat de la guarnició de la Ciutadella per ocupar-la sense disparar ni un tret, en fer veure que anava a passar revista a la tropa. I llavors es va autoanomenar governador militar, és a dir, que manava totes les forces franceses aquarterades a Barcelona i als seus forts. Una de les pri-

meres mesures que va prendre Lechi fou empresonar els barcelonins més influents i més rics, per tal d’extorsionar-los. Un dels detinguts va ser precisament l’amo del palau que ell havia ocupat: Gomis, que pertanyia a la Junta de Subministres, és a dir, els qui havien de lliurar a l’ocupant francès aprovisionament i diners. Just a la porta del palau Gomis va succeir un incident grotesc, que va indignar una ciutat ja irada. Curiosament no va ser relatat per Juan Mercader en la seva extensa monografia sobre la invasió napoleònica (Barcelona durante la ocupación francesa); ho conta, en canvi, Lluís Almerich en els tres volums consagrats a evocar carrers (Història dels carrers de la Barcelona vella). El general va posar molta vigilància a la seva nova residència. I un dia, en passar un menestral per davant del portal que anava picant amb una fulla de ganivetet la pastilla de tabac; un dels sentinelles, en descobrir-ho, no va dubtar a prendre les mesures immediates i ben enèrgiques: li va ordenar que es deturés. Tan concentrat estava el bon home en el que feia, que no es va adonar del que li deia, i va seguir com si res. El soldat no s’ho va pensar dues vegades: li va disparar i el va ferir d’una certa gravetat. El fet va revoltar el veïnat; Lechi va intentar justificar-ho, en mostrar el ganivetet, que va qualificar de punyal, tot argumentant que havia intentat una escomesa. Ningú no va donar crèdit a una versió gens enraonada. La situació es va agreujar l’endemà mateix, en morir el ferit. El general va témer per la seva seguretat i va decidir traslladar-se a viure al palau que la família francesa Larrard posseïa al carrer Ample; no hi va anar sol: el va acompanyar La Ruga, l’amant italiana. Lechi considerava que millorava la seva situació estratègica, en raó de la proximitat de La Rambla i la caserna de les Drassanes. El palau Gomis va ser llavors ocupat tot seguit per M. Bourdon, comissari interventor. Lechi és definit pels historiadors com un tipus sense escrúpols morals, arbitrari, capaç de fer tota mena d’il•legalitats per tal d’aconseguir el que a cada moment volia. Obligava a la policia a emprar la violència per aconseguir els pagaments. L’assassinat de l’usurer milanès Canton li va costar el càrrec. Quan el general Guvion de Saint-Cyr va abandonar Barcelona el 15 d’abril de 1809, es va emportar Lechi. Francesc de Gomis va gaudir ben poc aquell palau que havia manat enlairar amb tant d’ il•lusió i despesa: va morir el 1815. No va poder veure, ni patir, tot el que va succeir, que començava a mutilar sensiblement un edifici tan noble. I és que el 1860 es va inaugurar l’obertura del carrer de la Princesa. Era un fet ineluctable, ja que formava part de la primera gran transformació urbanística, constituïda per un eix (Ferran, Jaume I i Princesa) basat en la línea recta, el camí més curt, ràpid i directe per unir la Ciutadella amb La Rambla. El projecte, que va donar peu a la creació de la plaça de Sant Jaume, la que sens dubte mereixien uns Ajuntament i Generalitat encarats, va ser executat per l’arquitecte municipal Josep Mas i Vila. Cal precisar, però, que no havia estat fruit de la seva imaginació creativa, sinó de l’aplicació de l’estratègia militar que havien ideat els francesos. En efecte, el fet que Lechi visqués al palau Gomis li va permetre de reflexionar sobre la densitat asiàtica que ja patia Barcelona i que dificultava greument la mobilitat de les seves tropes. Va ser llavors quan ja es va considerar la conveniència d’aconseguir comunicar per via directa i ampla la Ciutadella amb La Rambla, on els ocupants francesos hi tenien el quarter general i la caserna de Drassanes. Malgrat que la construcció d’aquell eix exigia un enderroc d’una envergadura tremenda, que sentenciava un munt de cases i també alguns edificis històrics rellevants, poc després de la derrota del francès ja va ser portat a terme amb un dinamisme i una pressa mai no vistes. Per exemple, en la construcció del carrer Ferran, un capità general inquiet per la resistència tenaç exhibida per un convent de monges sentenciat al desnonament, va ordenar que si no era evacuat tot seguit, l’enderrocaria a canonades. Així doncs, el naixement del carrer de la Princesa va suposar la destrucció d’una part del

palau Gomis, que a més va quedar dividit: la part menys noble va restar aïllada a l’altre cantó del nou carrer. Cal precisar que, en canvi, havia guanyat així una façana rellevant a Princesa, la dels números 16 i 18, projectada per l’arquitecte Miquel Garriga i Roca; a principis del segle XX va aparèixer el portal de sensual corba modernista La mutilació no es va aturar aquí, per desgràcia. El pati elegant i equilibrat va ser també escapçat sensiblement. El cert és que quan hom es troba davant del número 5 de Barra de Ferro, ni la fatxada ni la sorprenent grandària del portal permeten intuir la magnificència interior que amaga. Potser per això es van veure amb cor de persistir en la mutilació, que va degenerar en l’ocupació del formidable buit del saló principal, que va ser omplert amb petites cambres i parcel•lat en tres pisos; al principal hi va viure l’editor Gustau Gili. S’hi van instal•lar també l’Escola de Sabaters i una pensió. Déu n’hi do. Així doncs, la realitat era que el palau Gomis havia desaparegut, engolit per aquell immerescut i humiliant destí. No sorprèn que quan el 1944 l’editorial Dalmau va publicar el llibre de Ramon Aliberch, Las casas señoriales de Barcelona, no mereixés ser evocat, sinó simplement mencionat i sense cap adjectiu. La recuperació es va fer esperar: la pintora holandesa Gertrud D-Trudy Derksen el va comprar, el va fer rehabilitar, sota la responsabilitat entenimentada dels arquitectes Mercè Zazurca i Josep Gorgues, i el va inaugurar el 2002 com a centre d’exposicions d’art contemporani i altres activitats culturals, mereixent un premi FAD. Va ser, com qui diu, flor d’un dia; no em va sorprendre gens ni mica: ho vaig veure venir el mateix dia que es va obrir, en parlar una estona amb l’artista i la seva companya, que suportava el mecenatge. Almenys va romandre tancat, sense cap altra mena de penitència. Fins a la primavera del 2011, gràcies a l’arquitecte i editor José Manuel Infiesta Monterde, el nou propietari: l’ha restaurat i adequat per mostrar una selecció de la seva nodrida col•lecció d’art contemporani figuratiu. Lluís Permanyer

Estudio documental de la finca de la c/ Princesa 16-18; Barra de Ferro, 5-5bis, de la ciudad de Barcelona (Estudio realizado por el Gabinete de Gestión y documentación del patrimonio arquitectónico de Francesc Caballé y Reinald Gonzalez, s.c.p.) CONSIDERACIONES PREVIAS El objetivo del presente estudio de documentación ha sido la investigación e interpretación de todas aquellas noticias históricas referidas al edificio actualmente existente en la calle Princesa, 16-18 y Barra de Ferro, 3-5. Tratándose de un edificio protegido por el «Catàleg de patrimoni Arquitectònic Històrico-artístic de la ciutat de Barcelona», la finca disponía ya de cierta documentación histórica (archivística y bibliográfica), aunque referida exclusivamente a su actual fachada principal de la calle Princesa y a la decoración modernista de su vestíbulo. La investigación documental sobre la finca se ha dirigido de forma exhaustiva a la obtención de noticias históricas de todo el conjunto.

LOCALIZACIÓN La finca objeto de este estudio histórico-documental se localiza en una de las zonas con más solera y sabor de la ciudad vieja de Barcelona. En efecto, la actual parcela se desarrolla y afronta sus fachadas tanto a la calle Princesa como a la calle conocida como de la «Barra de Ferro», en uno de los barrios —el de la Ribera— con mayor peso histórico de la Ciudad. Se trata, pues, de uno de los paisajes urbanos que más vicisitudes ha vivido a lo largo de los tiempos, especialmente a partir de la época medieval. Junto a las ya citadas calles de Princesa y de Barra de Ferro, la actual finca se halla muy próxima a la conocida calle de Montcada y a la calle de los Carders, probablemente una de las vías más antiguas de acceso a la antigua ciudad de Barcelona. El edificio se desarrolla actualmente en una manzana de casas que muestra una planta en forma ligeramente trapezoidal, con límites a las calles de la Princesa, de Montcada, Barra de Ferro, Carassa y Cotoners. La razón última de esta peculiar fisonomía obedece básicamente a dos causas distintas. En primer lugar, porque en esta zona de la ciudad se mantiene la trama urbana medieval, y ésta muestra una evolución histórica francamente original. En segundo lugar, porque la apertura de la calle Princesa, a mediados del siglo XIX desde la plaza de Sant Jaume hasta la calle Comerç, representó la mutilación parcial de la citada trama medieval y, en el caso que nos ocupa, partió literalmente la manzana primigenia en dos mitades. Esta operación urbanística transformó totalmente la zona, representando además la partición de la propiedad original de nuestra parcela. Así pues, el edificio que vemos hoy en día, no es sino una parte de la construcción original, cuyas dimensiones eran mucho mayores que en la actualidad. Actualmente la fachada principal del edificio es la que afronta a la calle Princesa, pero el frontis original del edificio era el de la calle Barra de Ferro, tal como muestra la presencia del gran patio descubierto que se localiza en el lado más septentrional de la actual parcela. Este patio dispone de una gran escalinata que, a ras de suelo, y previo paso de la crugía

tranversal del primer cuerpo de edificio, comunica directamente con el nivel del Principal. El diseño de patio y acceso directo al Principal a través de una escalinata, es uno de los modelos más prototípicos de la arquitectura catalana residencial y civil, prácticamente desde el siglo XIII. En el caso que nos ocupa, no obstante, se trata de una evolución de dicho modelo medieval, ya que el primer tramo de la escalinata se desarrolla por el interior de una de las crugías longitudinales del patio (con relación a su acceso desde Barra de Ferro), siendo éste, un modelo representativo de la arquitectura barcelonesa del siglo XVIII. Uno de los elementos más significativos de la finca es precisamente su piso Principal. Efectivamente, se trata de un nivel en el que, junto a sus grandes dimensiones y organización interior —aspectos ya de por sí notables—, destaca la presencia de una gran sala que se desarrolla hasta el tejado del edificio, aunque disponiendo de cubierta propia a dos aguas. Dicha sala, que merecerá un capítulo específico al final de este trabajo, dispone de una planta prácticamente cuadrada y es probablemente uno de los mejores ejemplos conservados de la decoración neoclasicista de influencia francesa en la ciudad de Barcelona.

PRIMERAS REFERENCIAS La finca objeto de este estudio está situada en la calle Princesa nº16-18, aunque anteriormente tenía su entrada principal por la calle de la Barra de Ferro. Registradas con este último nombre, encontramos que en el catastro de 1716 aparecen dos casas; la nº3 y la nº5, propiedad de Ana María Rey, la cual residía en una de ellas, mientras que la otra la tenía en alquiler. La primera noticia documentada sobre la construcción del actual edificio está fechada el 8 de marzo de 1791, cuando Francesc Gomis solicitó permiso para realizar reformas en las casas que poseía en la nombrada calle de Barra de Ferro. Así pues, en un momento indeterminado del siglo XVIII la propiedad de la finca pasó de Ana Maria Rey a la familia Gomis. Ignoramos, no obstante, a través de qué títulos se produjo esta transacción, aunque podemos aventurar que la adquisición la realizó el propio Francesc Gomis. Sea como fuere, el hecho es que la finca pasó a ser propiedad de esta familia de tenderos, uno de los grupos —entre el gremio de merceros— más dinámico de la Barcelona de los años 1740-1760. Las «botigues» —tiendas— de los mercaderes de lienzos, junto con los «Julians Mercers» y los «Corredores Situación de las principales tiendas de mercaderes de de Lonja», tenían su centro en la iglesia de Santa María del Mar, mientras que lienzos en 1793. Francesc Gomis aparece en la calle la sede se ubicaba en la calle Plateria, donde precisamente Francesc Gomis Platería. poseía su tienda. Francesc Gomis fue una de las figuras más importantes de este colectivo durante la segunda mitad del siglo XVIII, ya que aparece mencionado como uno de los maestros más ricos y se le cita ocupando diversos cargos relevantes de la citada corporación de merceros. El enriquecimiento de Francesc Gomis hizo que diversificara sus negocios y actuase como mercader. Llegó a ser uno de los directivos de la Junta de Fábricas, así como de la «Junta d’Auxilis» de Barcelona. Otro

ejemplo que nos demuestra la posición social de Francesc Gomis la tenemos en hechos como la contribución en el impuesto de millones, en el que a título de individuo del comercio aporta 10.000 reales, cifra que representaba la tercera parte del total reunido por los colegios y gremios. Aunque no ha podido documentarse a ciencia cierta, parece ser que Francesc Gomis mantuvo un posicionamiento afrancesado durante la ocupación de Barcelona por las tropas napoleónicas durante la Guerra de la Independencia (1804-1812). La tradición señala que en esta casa de la calle Barra de Ferro se alojó el general francés Lechi, que estuvo al mando de las tropas francesas en la ciudad. Este hecho nos informa igualmente de la calidad y prestancia que debía tener o adquirir la casa de la calle de la Barra de Ferro. En el momento de su muerte, en 1815, Francesc Gomis poseía una fortuna y patrimonio considerable con diversas fincas en Barcelona, Martorell, Sarriá i Sant Gervasi.

Fachada de la calle Barra de Ferro presentada en el proyecto de reedificación de 1791. (AHCB)

LA CONSTRUCCIÓN DE LA CASA GOMIS DE LA CALLE BARRA DE FERRO El 19 de marzo de 1791 el Ayuntamiento de Barcelona concedió el permiso para realizar las obras solicitadas por Francesc Gomis en su casa de la calle de Barra de Ferro. De la instancia presentada en la solicitud, se desprende que el antiguo edificio estaba muy maltrecho, aunque no se precisa el alcance de las obras de reconstrucción. En cualquier caso, la reedificación de la fachada —de la cual poseemos su alzado— fue total; se derribó y fue construida de nuevo, dotándola de las aperturas pertinentes, con balcones, ventanas y puertas. Si observamos la imagen que reproducimos en este estudio, veremos que se trata de una casa con tres pisos, alcanzando una altura de 85 palmos incluyendo la baranda y sin tener en cuenta el tragaluz, más elevado. El portal principal —de grandes dimensiones para permitir el giro y entrada de los carros en una calle tan estrecha— estaba protegido con un guardarruedas. Aunque el plano que acompaña la instancia no está firmado, podemos compararlo con el realizado en 1799 (ocho años más tarde) por Joan Garrido para levantar una casa en la calle Flassaders, también propiedad de Francesc Gomis.

Proyecto de la casa de F. Gomis en la calle Flassaders.

Muestra de la grafia de los proyectos de las casas de Francesc Gomis. Arriba, calle Barra de Ferro. Abajo, calle de Flassaders, firmada por Joan Garrido.

Como podemos comprobar, aparte del recurso al recuadro negro que emmarca el proyecto, el título del alzado emplea la misma grafología, lo que nos hace suponer que el autor del proyecto de la casa de Barra de Ferro y responsable de su ejecución fue el maestro de obras Joan Garrido. Joan Garrido i Julià obtuvo la maestría por la Confraria de Mestres de Cases i Molers el día 19 de abril de 1773. Era hijo primogénito de Joan Garrido i Bertrán, procedía de toda una familia de maestros de obras barceloneses. Sucedió a su padre como maestro de las obras de la Audiencia del Principado y ejerció los cargos de credenciero en 1781, prohombre tercero en 1791 y examinador de su corporación profesional en 1793 y 1795.

LA APERTURA DE LA CALLE PRINCESA Y LA AFECTACION DE LA FINCA La apertura de la nueva calle Princesa comportó la expropiación de diferentes casas o porciones de éstas a lo largo de todo su trazado, y en nuestro caso, afectó al edificio que poseía la familia Gomis en la calle Barra de Ferro. El 28 de agosto de 1852 Javiera de Gomis —esposa de Pablo Agustín Gomis, hijo de Francesc Gomis— confió al arquitecto Miguel Garriga i Roca para que, junto con el arquitecto Francisco Daniel Molina, nombrado por el Corregidor de la ciudad, realizase la valoración de los daños y perjuicios por los cuales tenía que ser indemnizada. La valoración conjunta entre los dos arquitectos resultó imposible, por no llegar éstos a ningún acuerdo y, por tanto, cada uno hizo su propio dictamen. Fue necesaria una tercera opinión, solicitada por el juez de primera instancia, quien nombró con este fin al arquitecto Josep Casademunt. El interés histórico de estos dictámenes radica tanto en su mismo contenido, como por el hecho de estar realizados por tres de los más reputados y significativos arquitectos catalanes de la primera mitad del siglo XIX. Dado el valor descriptivo respecto de la finca que trasmiten los citados dictámenes, se expone a continuación sus distintos puntos de vista.

Francisco Daniel Molina En su informe, Francisco Daniel Molina da los límites y extensión de la finca, resultando que por el sureste linda con la misma calle Barra de Ferro, por el noroeste con la propiedad del marqués de Castellvell, por el suroeste con el Sr. Manuel Riba i por el noroeste con los señores Gualba, Font y Roca. En total, dispone de 32.794 palmos, de los que tienen que ser

expropiados 7.670 palmos, resultando un total de 25.124 palmos. De los palmos expropiados, 4.308 y medio son edificados, mientras que 3.361 y medio pertenecen al jardín. La zona afectada se corresponde con el centro de la finca, dividiéndola así por su mitad y dejando a un lado (colindante con la calle Barra de Ferro) 16.962 palmos y a otro lado (colindante con los señores Gualba, Font y Roca) 8.162 palmos. Francisco Daniel Molina considera que la casa adquirirá un gran valor cuando la nueva calle sea completada, y por tanto no entiende que el perjuicio para la propiedad sea elevado. Con estos argumentos decide guiarse por las valoraciones que se han realizado de casas vecinas —afectadas por el mismo problema— sin tener en cuenta cómo la calle afecta a cada una de las construcciones. Con este sistema, no muestra una visión individual de cada edificio sino que únicamente refleja el valor que posee una cantidad de metros determinados, sin sopesar lo que contienen, ni la calidad de su construcción. La des- Plano realizado por Francisco Daniel Molina que recripción que realiza de la finca se limita a decirnos que se compone de tiendas fleja la zona ocupada por la nueva calle Princesa, así como la porción de la finca de los Gomis —señalada y almacenes en el primer piso y parte del segundo. El arquitecto pretende dejar con el nº5— que será expropiada. (AMA) claro su buen razonamiento a la hora de realizar el peritaje y con ello sacar de dudas al tercer perito, sobre todo por lo que acontece a la propuesta de derribo y construcción de nueva planta que, como veremos más adelante, propone Garriga i Roca. El arquitecto entiende que la nueva calle (Princesa) beneficiará en gran medida a las casas colindantes y por tanto, una vez hechas las reformas pertinentes, la finca de Casimiro Gomis quedará en perfecta disposición de ser alquilada, obteniendo un mayor beneficio del que se disponía hasta la fecha. Siguiendo este razonamiento, la apertura de la calle Princesa no será un perjuicio, sino más bien todo lo contrario y en consecuencia el perito considera la indemnización únicamente por los palmos expropiados, pero en ningún momento por las reformas necesarias.

Miquel Garriga i Roca Al realizar su valoración, Miquel Garriga i Roca —el arquitecto representante de la propiedad—, coincide con Francisco Daniel Molina en las medidas de la finca y en los palmos que deben de ser expropiados, pero su punto de vista respecto a la forma en que debe llevarse a cabo la indemnización es completamente distinta. El arquitecto considera importante ver cómo la apertura de la nueva calle Princesa afecta a la finca y, por tanto, cree conveniente realizar una minuciosa descripción de la morada de los Gomis, destacando las partes que se verán afectadas. En primer lugar se describe el jardín, el cual posee cascadas, dos surtidores, adornos, gradas, cañerías, depósito de agua, cloacas, árboles frutales, etc., que se perderán por completo. En segundo lugar describe la casa de los Gomis que consta de espaciosos almacenes en el piso bajo, bodega, repostería y otros accesorios en el entresuelo; las salas principales, dormitorios, co-

medor, cocina, etc.,en el piso noble; bonitas y cómodas habitaciones de la familia, independientes unas de otras, en el segundo piso y, en el tercero, las estancias para los criados. Todo esto, según Garriga i Roca, construido con materiales de gran calidad. Coincidiendo con Francisco Daniel Molina, nos muestra que la parte colindante con Barra de Ferro se compone de 16.961’963 palmos, pero destaca que sólo 15.708 palmos son edificados, perteneciendo el resto a zona de jardín —que por ser de tan pequeñas dimensiones desestima su mención—. Esta parte del edificio disfruta de entrada, tienda, amplios almacenes y una cómoda y majestuosa escalera en el piso llano. En el piso principal, un magnífico salón de planta cuadrilátera que se remonta al segundo piso «decorado con los más exquisitos recursos del arte» (probablemente el actual gran salón del Principal), otro salón de planta circular «asimismo decorado ricamente», magníficas piezas de respeto en completa harmonía con los salones, mármol en todo el pavimento, las paredes pintadas, estucadas o empapeladas y dorados los adornos; en el segundo piso, las estancias para la familia y los criados —debemos pensar aquí, teniendo en cuenta la descripción general que hace en primer lugar, que los criados están situados en un tercer piso. Antes de describir la segunda parte de la casa, aquélla que quedará al otro lado de la calle Princesa, expone todas aquellas consideraciones que cree convenientes para realizar una buena valoración de los daños y perjuicios que comporta una expropiación como la que aquí se plantea. Así defiende su punto de vista ante el expuesto por Daniel Molina, ya que considera que: «tantas bellezas y perfecciones del arte prodigados en un edificio, quizá el que raya a más alta esfera entre los que encierra Barcelona, arrastran el juicio de todo concienzudo Facultativo a las siguientes consideraciones, que ha desoído o no ha estimado en todo su valor el expresado Arquitecto Sr. Molina». Miquel Garriga i Roca destaca los daños que provocará dicha expropiación, haciendo énfasis en el perjuicio que supone el dividir la casa por la mitad, así como el problema que conllevará una reforma, sobre todo teniendo en cuenta la dificultad a la hora de encontrar unos materiales de tan buena calidad como los que posee en estos momentos y que al mismo tiempo mantengan una harmonía con el conjunto. Siguiendo este razonamiento refleja la necesidad de derribar y construir de nueva planta, cosa que afectará a la devaluación de la propiedad, incluso teniendo en cuenta el beneficio que aportará la nueva calle Princesa, cuando esté completamente realizada. Por este motivo, solicita al Ayuntamiento que se haga cargo de parte de los gastos de adaptación de la finca a las nuevas circunstancias. Teniendo en cuenta todos estos argumentos y consideraciones, Miquel Garriga realiza su peritaje que, más adelante, y contrastado con el de Daniel Molina, dará lugar a una tercera valoración.

Josep Casademunt El peritaje del arquitecto y catedrático Josep Casademunt fue solicitado por el juez de primera instancia del distrito segundo, Narciso de Linares. Casademunt considera el problema que supone la división de la casa en dos partes tal y como lo planteaba Garriga i Roca pero, teniendo en cuenta que los materiales constructivos son de muy alta calidad, no cree necesaria la demolición y consecuente reedificación que defendía Garriga i Roca. Con estos argumentos, y valorando los datos aportados por los dos peritos, realizará su valoración, que será entregada el 13 de febrero de 1854. Una vez hechas las pertinentes valoraciones para poder indemnizar adecuadamente a la familia Gomis, se procede a la expropiación el 10 de marzo de 1854. Ante la partición del edificio, la familia Gomis optó por la venta de la parcela

resultante del lado de montaña de la calle Princesa, reservándose para su reedificación el grueso de la finca que daba a la calle Barra de Ferro.

LA REEDIFICACIÓN DE LA NUEVA FACHADA Las reformas para adaptar la casa a la nueva calle debían comenzar inmediatamente, una vez realizada la explanación de la nueva calle, pero la defunción de Casimiro Gomis, el 31 de agosto de 1854, las paralizó durante un cierto tiempo. Fue su viuda, Rosa de Gomis i Portolá quien, en una instancia al Ayuntamiento fechada el 9 de noviembre de 1854, pide disculpas por el retraso e indica que el próximo lunes, día 13, los operarios volverán al trabajo. La construcción de una nueva fachada provocará un giro de 180º en la orientación de la finca. Aprovechando la nueva calle Princesa, que tanto valor proporcionará a los edificios que albergue, se decide priorizar la entrada a la casa por esta calle y no por Barra de Ferro como había sido hasta entonces. Con esta intención, Rosa de Gomis, el 24 de marzo de 1855, presenta el proyecto de alzado de la nueva fachada —obra del mismo Miquel Garriga i Roca—, que se situará en los números 16 y 18 de la calle Princesa. En el proyecto no constan planos de plantas, por lo que no sabemos cómo pudo resolverse la reforma de los interiores. La solicitud del permiso de obras obtendrá su respuesta de concesión el 27 de abril del mismo año. Proyecto de la fachada de la calle Princesa, dibujado por el La nueva fachada proyectada alcanzaba una altura de 100 palmos arquitecto Miguel Garriga y Roca, 1855. (AMA) incluyendo la baranda, siguiendo la normativa aprobada el 2 de marzo de 1843. Con estas prerrogativas el alzado muestra un nivel de entresuelo y tres pisos con solera y terrado plano y transitable. Todo ello distribuido con balcones corridos que abrazan dos aperturas en el piso principal y ventanas en el resto de niveles, a excepción del centro del edificio que adquiere una prioridad que queda remarcada por los balcones corridos de tres aperturas en el primer y tercer piso. La única fuente documental que permite conocer el alcance de la reconstrucción del nuevo frente de la calle Princesa, es la colección de planos parcelarios de la ciudad de Barcelona, realizados por el propio Miquel Garriga i Roca a finales de la década de 1850 —conocidos como «quarterons»—. En estos planos, Garriga i Roca utiliza unos có«Quarteró» de Garriga y Roca donde aparece la finca de los digos de color para diferenciar la cronología de los edificios. En el caso Gomis diferenciando la parte de nueva construcción. (AHCB) que nos ocupa, la casa de los Gomis aparece tintada con dos colores:

la parte de Barra de Ferro como construcción antigua y el frente de la calle Princesa, de nueva construcción. Teniendo en cuenta que Garriga i Roca es el autor tanto del proyecto de reconstrucción de la casa, como del«quarteró», hemos de pensar que éste representa fielmente las partes del edificio que fueron reedificadas en 1856.

ÚLTIMAS REFERENCIAS La nueva casa, situada en la calle Princesa nº16-18, se mantendrá propiedad de la familia Gomis por línea hereditaria. El primero en heredar la finca fue el hijo de Rosa de Gomis y Casimiro Gomis, Luís Gomis i Ros (abogado); una vez éste fallece en el año 1914, la finca pasó a manos de su esposa Teresa Pallejà. Teresa Pallejà volvió a casarse, esta vez con José Parellada Faura, también abogado. A su muerte dejó la casa, en herencia, al marido y éste hará lo propio con su hijo, José Ignacio Parellada Camprubí. Será éste último el que decida vender la finca en régimen de propiedad horizontal el 16 de julio de 1958. Estando la finca en propiedad de Teresa Pallejà encontramos noticias de nuevas reformas. Esta vez se trata de realizar una tribuna en el primer piso y por tanto, transformar una ventana en un balcón. El permiso de obras será solicitado el 26 de septiembre de 1928 por el arquitecto Salvador Puiggrós. Con anterioridad a estas fechas —presumiblemente en la década de 1910—, la finca debió sufrir alguna otra reforma interior importante, aunque no documentada, que afectó al vestíbulo y a la actual escalera de vecinos. A esta operación obedece la decoración de estilo modernista, con la puerta de arco ultrapasado, el arrimadero con azulejos vidriados y las paredes estucadas con plafones y decoración floral.

LA GRAN SALA Es con toda seguridad el gran salón del Principal la estructura más significativa de todo el edificio. Efectivamente, las grandes dimensiones de este ámbito serían suficientes para proclamarlo como la estancia más importante del conjunto. Sin embargo no es su tamaño, sino su decoración aquello que más llama la atención y singulariza este espacio como uno de los más importantes en la arquitectura civil barcelonesa. Razones hay para argumentarlo. Así, a tenor de las referencias y deducciones elaboradas durante esta investigación, estamos en condiciones de fechar este conjunto en el período que media entre 1791 y 1815. Proyecto de la tribuna realizado por el arquitecto Salvador Puiggrós,1928. (AMA)

Aunque el proyecto de reconstrucción del edificio de Francesc Gomis es de 1791 y que en función de ello hemos de suponer que la construcción de este espacio sería de esta fecha, creemos que la decoración que ha llegado hasta nuestros días es de una cronología algo posterior. Los argumentos de esta concreción temporal obedecen a dos tipos, unos de carácter estilístico y otros de carácter material. En relación al primero de ellos, se ha de destacar que la decoración figurativa de los paneles en yeso presenta diferencias de calidad que serían interpretables como resultado de la intervención de distintos artesanos o campañas decorativas; especialmente en lo que se refiere al tratamiento de las figuras de los «putti» y de las «ménades». Por lo que se refiere a los argumentos de carácter material, todo parece apuntar a una operación de recrecimiento mediante la construcción de unos tabiques separados de las paredes de carga, sobre los que se disponen las placas y el resto de elementos de yeso y estuco. Estos grandes tabiques se desarrollan en alzado desde el suelo hasta el techo y están realizados con ladrillo macizo de cuatro centímetros de grosor, materiales y técnica que apuntan a una datación más decimonónica. Existen otros elementos de carácter artístico que permiten una mayor apreciación estilistico-cronológica. Mientras que la mayoría de figuras de las paredes obedecen a diseños de la tradición estilística tardo barroca catalana (como las que se pueden apreciar en los esgrafiados de las fachadas barcelonesas de la misma cronología), los relieves femeninos de los paneles del techo parecerían responder a la más pura tradición neoclásica francesa. Esta dicotomía podría llegar a demostrar la participación de distintos artistas y artesanos, correspondiendo a los primeros la realización de los citados paneles del techo. A tenor de lo apuntado hasta ahora, la fecha de 1791 parecería pues, algo temprana para la calidad, gusto y acabado de la decoración de la sala. Sería necesaria una investigación más detallada sobre la personalidad de Francesc Gomis y su posición dentro de la sociedad barcelonesa del momento para poder determinar su nivel de modernidad y afrancesamiento a la hora de reedificar y decorar su residencia. A nivel documental, disponemos de algunas referencias a la calidad de los acabados de la residencia de Francesc Gomis, frecuentada por la alta sociedad barcelonesa de la época y que, como hemos visto, alojó a uno de los generales franceses napoleónicos durante la posesión de Barcelona en la Guerra de la Independencia. Así, a su muerte, sucedida en 1815, el inventario post-mortem de sus bienes nos permite rescatar la magnificencia que tuvo su casa de la calle Barra de Ferro. En él, se describen las distintas estancias que componían el edificio, destacando lo que viene referido como «Saló principal» y otro conocido como la «sala nomenada Obra Nova». Ambas se encontraban profusamente decoradas. La primera, con ocho canapés de caoba con respaldo carmesí, una araña de cristal, cuatro ángeles de estuco sosteniendo un adorno de tres luces y cuatro espejos en la pared; la sala de la Obra Nova, con nueve sillas y un canapé de caoba, una araña de cristal, dos jarrones, un reloj de bronce, tres figuras de bronce doradas, cuatro figuras de yeso, un «pianoforte» de caoba, dos cuadros al óleo con miembros de la familia, un espejo y seis cortinas de tela. Si la actual gran sala correspondiera a «la sala nomenada Obra Nova», estaríamos delante del dato documental que nos confirmaría una nueva actuación en un salón, posterior a la del resto de la casa —de ahí la singularidad de referirse como «nova», es decir nueva— y realizada con anterioridad a 1815. Sea como fuere, la decoración de la sala es, con toda verosimilitud, la mejor muestra del neoclasicismo civil francés que se conoce en la ciudad de Barcelona.

CRONOLOGÍA DE LA FINCA Finales s. XII Consolidación de la trama urbana de la zona y nacimiento de la isla de casas donde se levantarán mediados s. XIII: los antepasados del actual edificio. 1257-1373: La zona se convierte en residencia de familias notables de la ciudad. 1716: La finca situada en Barra de Ferro, señalada con el nº5, aparece en el catastro a nombre de Ana María Rey. 1791: 8 de marzo: Francesc Gomis, propietario de la finca situada en Barra de Ferro nº3-5,solicita permiso de obras para reformar la vivienda, que se encuentra en muy mal estado de conservación. 19 de marzo: Se concede el permiso para realizar dichas obras. 1792-1815: Realización de la decoración de la gran sala del principal. Entre 1807 y 1809 fue residencia del general Giuseppe Lechi, que capitaneaba las tropas napoleónicas que ocuparon la ciudad de Barcelona. 1852 ∙28 de agosto: Javiera de Gomis nombra al arquitecto Miguel Garriga i Roca para que haga la valoración de los daños y perjuicios que supondrá la apertura de la nueva calle Princesa y consecuente expropiación. 1853 ∙diciembre: Francisco Daniel Molina, arquitecto nombrado por el Corregidor de la ciudad, y Miquel Garriga i Roca presentan, de forma individual, el peritaje de la finca. 1854 ∙13 de febrero: Josep Casademunt, arquitecto nombrado por el juez de primera instancia como tercer perito, hace entrega de su valoración de daños y perjuicios. 10 de marzo: se resuelve la expropiación de parte de los terrenos de la finca, que queda dividida por el proyecto de apertura de la calle. 4 de mayo: formalización de la venta de los terrenos de la casa que quedaban al norte de la nueva calle. 1855 ∙24 de marzo: Rosa de Gomis solicita permiso de obras para adecuar la finca a la nueva calle Princesa. Adjunta a la petición el plano en alzado de la fachada, firmado por el arquitecto Miquel Garriga i Roca. 27 de abril: Se concede el permiso de obras. Antes 1915 (aprox.): Obras de reforma interior que comprenden la realización del vestíbulo modernista y la reorganización de los accesos a los pisos. 1928 ∙26 de septiembre: El arquitecto Salvador Puiggrós solicita, en nombre de la propietaria de la finca Teresa Pallejà, un permiso de obras para realizar una tribuna y transformar una ventana en balcón. 1958 ∙16 de julio: José Ignacio Parellada Camprubí, propietario de la finca, la divide en régimen de propiedad horizontal. Desde entonces ha tenido innumerables usos, como escuela de zapateros, pensión, comercio, y diversos propietarios, desde Cáritas hasta una importante pintora holandesa, para acabar como sede de la «Fundació de les Arts i els Artistes» y el Museu Europeo de Arte Moderno.

Colectivo de artistas representados en el Museo, asistentes a la inauguraci贸n de las salas el 8 de Junio del 2011

Fotomontajes realizados de los cuatro lados de la gran sala central, en el estado que presentaba en 1999, antes de las actuaciones de restauraci贸n realizadas ya en este siglo por los arquitectos Merc猫 Zazurca y Josep Gorgues, y que mereciera un premio FAD de restauraci贸n e interiorismo.

Estado de las instalaciones antes de la 煤ltima intervenci贸n (2005) para la creaci贸n del Museo. (Fotos de Kim Castells)

Fotos: Kim Castells

Proceso de colocación de la escultura de mármol ‘Das Licht’ (‘La Luz’) en el patio del museo. Trabajos dirigidos por Nacho Godeo. (2011)

Espacios interiores del Museo, tras la última restauración, realizada los años 2009 a 2011. La obra ha sido dirigida por el arquitecto Jordi Garcés, en colaboración con el arquitecto técnico Ramón Sala y el también arquitecto José Manuel Infiesta. Los trabajos de albañilería y restauración los han dirigido los maestros de obras Joan Jané Lucas y Marcelo Rescalvo. La restauración de pintura y pigmentos de paredes y techos es obra de la decoradora Maria Coluccelli. Los trabajos de hierro y la escalera metálica se deben a la cerrajería de Ivan Godeo. Los trabajos de instalaciones han sido dirigidos por Luis Descalzo y, entre otras firmas colaboradoras, figuran Finsa, Vallés Seguretat, Proclima, etc (Fotos: Kim Castells)

Fotos: Kim Castells

Espacios interiores del Museo (Fotos: Antoni Bofill)

Inauguraci贸n del Museo, el 8 de Junio del 2011 (Fotos: Antoni Bofill)

Diversos instantes de la fiesta inaugural del Museo, el 8 de Junio del 2011 (Fotos: Antoni Bofill)

Fiesta con motivo de la celebración de la ‘Nit dels Museus’, Junio 2012, con gran asistencia de público (Fotos: Antoni Bofil)l

Fotos: Antoni Bofill

Concierto habitual de los Sรกbados por la tarde, de repertorio clรกsico, en la sala grande de la planta primera (Fotomontaje: Antoni Bofill)

PINTURA

Luis Felipe Alonso Xoubanova (Madrid - 1985) Mi madre Cheres (2008) 189 x 145 cm Ă&#x201C;leo sobre lienzo

Luis Felipe Alonso Xoubanova (Madrid - 1985) Lola (2009) 146 x 114 cm Ă&#x201C;leo sobre lienzo

Luis Felipe Alonso Xoubanova) (Madrid - 1985) La vecina (2010)

146 x 97 cm Ă&#x201C;leo sobre lienzo

Salvador Antúnez del Cerro (Madrid - 1982) Pedro, ¿eres tú? (2011) 120 x 150 cm Óleo sobre tabla

Akihito Asano (Jap贸n - 1977) Retrato de Tomoe (2008) 170 x 100cm Oleo y temple al huevo sobre tabla

Akihito Asano (Jap贸n - 1977) La chica del pendiente azul (2010) 162 x 114 cm Mixta sobre lienzo

Carlos Asensio Sanagustín (Castellón - 1986) L’avi (2010) 100 x 100 cm Óleo sobre lienzo

Aldo Bahamonde (Santiago de Chile - 1963) Crucificado 205 x 101 cm Ă&#x201C;leo sobre lienzo

Aldo Bahamonde (Santiago de Chile - 1963)

Academia 69 x 49 cm Dibujo sobre papel

Aldo Bahamonde (Santiago de Chile - 1963)

Estudio 28 x 22 cm Dibujo sobre papel

Aldo Bahamonde (Santiago de Chile - 1963) Desnudo femenino 64 x 142 cm Dibujo sobre papel

Aldo Bahamonde (Santiago de Chile - 1963)

Retrato 39 x 31 cm Óleo sobre lienzo

Aldo Bahamonde (Santiago de Chile - 1963)

Niño con máscara amarilla 90 x 40 cm Óleo sobre lienzo

Aldo Bahamonde (Santiago de Chile - 1963) Sin tĂtulo

Aldo Bahamonde (Santiago de Chile - 1963) Estudio para crucificado

65 x 83 cm Pastel

160 x 120 cm Dibujo

Aldo Bahamonde (Santiago de Chile - 1963) Academias 70 x 110 cm Dibujo

60 x 90 cm Dibujo

Mathieu Bassez (Bélgica - 1969) Sin título (2008) 200 x 100 cm Óleo sobre lienzo

Mathieu Bassez (Bélgica - 1969) La Bohème II (2008) 200 x 100 cm Óleo sobre lienzo

Paul Beel (Ohio, USA - 1970) Glazed Irene (2005) 160 x 160 cm Ă&#x201C;leo sobre lienzo

Paul Beel (Ohio, USA - 1970) Filippo from life with laser level (2006) 100 x 100 cm Ă&#x201C;leo sobre lienzo

Alessio Bogani (Italia - 1977) Fuori e sera (2008) 188 x 140 cm Mixta sobre lienzo

Arquer Buigas (Barcelona - 1932) Paisaje Urbano (1982) 71 x 90 cm Óleo sobre lienzo

Arquer Buigas (Barcelona - 1932) Hace frio (1985)

65 x 35 cm Óleo sobre lienzo

Arquer Buigas (Barcelona - 1932) Retrato de espaldas (1983) 46 x 37 cm Óleo sobre lienzo

Arquer Buigas (Barcelona - 1932) En las caballerizas (1983) 49 x 60 cm Óleo sobre lienzo

Glauco Capozzoli Emanueli

(Montevideo, Uruguay, 1929-2003)

Desnudo Femenino

Desnudo

73 x 50 cm Grafito

72 x 50 cm Grafito

María Carbonell Fouliqué (Valencia - 1980) (2006)

120 x 100 cm Óleo

María Carbonell Fouliqué (Valencia - 1980) De lo visible a lo invisible (2008) 71 x 103 cm Óleo

Alejandro Carpintero (Madrid - 1981) Autorretrato (2008) 180 x 180 cm Ă&#x201C;leo sobre lienzo

Alejandro Carpintero (Madrid - 1981) Conozco un lugar en el bosque (2009) 180 x 180 cm TĂŠcnica Mixta sobre lienzo

Francisco Carrillo Cruz (JaĂŠn - 1954) Alberto en reposo (2006) 180 x 190 cm Ă&#x201C;leo sobre tabla entelada

David Casals (Barcelona - 1976) Memòria d’un riu II (2009) 125 x 175 cm Óleo sobre aluminio

Jaume Casañé González Paula (2006) 61 x 96 cm Óleo sobre lienzo

Maïa Castang Composición (2003) 200 x 190 cm Técnica mixta sobre tabla

Andrés Castellanos García (Madrid - 1956) Arbol Azul (2008) 146 x 110 cm Óleo sobre tabla

Andrés Castellanos García (Madrid - 1956) Caballo Blanco (2009) 190 x 146 cm Óleo y acrílico sobre tabla

Pepe Castellanos López (Barcelona - 1969) Carta para Elvira (2009) 140 x 170 cm Óleo sobre tabla

Antonio Castelló Avilleira (Toledo - 1972) Models #1 (2011) 200 x 300 cm Díptico Óleo sobre lienzo

Miguel Castillo OĂąate (Valencia - 1962) Cita a las dos (2007) 195 x 195 cm Ă&#x201C;leo sobre lienzo

Antonio Cazorla (Punta UmbrĂa, Huelva - 1961) Desnudo (2005) 65 x 116 cm Ă&#x201C;leo sobre lienzo

José Luis Ceña Ruiz (Madrid 1982) Ocaso (2010) 130 x 180 cm Óleo sobre lienzo

Antonio Cerrato Rincón (Badajoz - 1955) A las puertas del bosque (2008) 180 x 180 cm Óleo sobre lienzo

Ricard Chiang (Barcelona 1966) Sobre la hierba (2008) 122 x 200 cm AcrĂlico sobre tabla

Enrique Collar (Paraguay - 1964) Lila (2008) 200 x 170 cm Ă&#x201C;leo sobre lienzo

Enrique Collar (Paraguay - 1964) Chica con pecas (2010) 200 x 150 cm Ă&#x201C;leo sobre lienzo

Maria Coluccelli (Perú - 1970) Visión bajo el agua (2009)

130 x 267 cm Técnica mixta sobre tabla

Vania Comoretti (Italia - 1975) Rotazione (2006) 47 x 197 cm Acuarela, tinta china y pastel sobre papel

AndrĂŠs G. Compagnucci (La Plata, Argentina - 1966) Lago del Retiro (2005) 110 x 150 cm Ă&#x201C;leo sobre lienzo

José Luis Corella García (Valencia - 1959) Yo (2006) 124 x 66 cm Óleo sobre tabla

José Luis Corella García (Valencia - 1959) Serie X (2006) 70 x 70 cm Óleo sobre tabla

José Luis Corella García (Valencia - 1959) La Princesita (2005) 100 x 122 cm Óleo sobre tabla

Juan Manuel Coss铆o (Madrid - 1960) El entierro de la verdad (2005) 165 x 120 cm Aer贸grafo sobre tabla

Juan Manuel Coss铆o (Madrid - 1960) Umbilical I (2006) 153 x 110 cm Aer贸grafo sobre tabla

Juan Manuel Cossío (Madrid - 1960) De natura II (2006) 85 x 120 cm Aerógrafo sobre tabla

Juan Manuel Cossío (Madrid - 1960) Pai - Pai (2008) 80 x 70 cm Acrílico sobre lienzo

Juan Manuel Cossío (Madrid - 1960) Una Pietá con Julia (2007) 150 x 100 cm Aerógrafo sobre tabla

Antonio Cruz Tordesillas (Madrid - 1960) S/T (2006) 73 x 100 cm AcrĂlico sobre lienzo

Antonio Cruz Tordesillas (Madrid - 1960) S/T (2006) 100 x 74 cm AcrĂlico sobre lienzo

Antonio de Ávila (Ávila - 1958) Rosal Amarillo II (2010) 162 x 195 cm Óleo sobre lienzo

Juan Ignacio De la Fuente (Murcia - 1974) Dos chapatas (2009) 70 x 100 cm Lรกpiz sobre papel

Marta De Olano (Barcelona - 1971) Paisaje Nevado (2008) 200 x 200 cm Ă&#x201C;leo sobre lienzo

Pedro Del Toro (Madrid - 1970) Gran VĂa en silencio (2006) 195 x 195 cm Ă&#x201C;leo sobre lienzo

Jordi Díaz Alamà (Barcelona- 1986) 05:00 am (2009) 195 x 130 cm Óleo sobre lienzo

Jordi Díaz Alamà (Barcelona- 1986) Paty, quiere y no puede (2010) 130 x 300 cm Óleo sobre lienzo

Jordi Díaz Alamà (Barcelona- 1986) Generación del 86 (2011) 200 x 300 cm Óleo sobre tabla

Jordi Díaz Alamà (Barcelona- 1986) Academias (2011) 40 x 60 cm c/u Grafito

Yoel Díaz Gálvez (Guadalajara, México - 1979) La partida (2009) 200 x 200 cm Óleo sobre lienzo

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Yoel Diaz Gálvez (Guadalajara, Mexico - 1979) Travesía de ensueño (2010) 200 x 200 cm Óleo sobre lienzo

Goyo Domínguez (Fuentecen, Burgos - 1960) La Mañana (2005) 54 x 46 cm Óleo sobre lienzo

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Sam Drukker (Goes, Holanda - 1957)

Fire (2008) 180 x 115 cm Ă&#x201C;leo sobre lienzo

Lorenzo Manuel DurĂĄn Silva Entre cielo y tierra (2007) 60 x 80 cm Ă&#x201C;leo sobre lienzo

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Mikel Esparza Murillo (Pamplona - 1958) Reflejo II (2009) 195 x 195 cm Ă&#x201C;leo sobre lienzo

Ignacio Estudilo Pérez (Frontera- 1985) La abuela (Luisa Peña) (2010) 150 x 150 cm Técnica Mixta sobre lienzo

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Lorenzo Fernández (Madrid - 1970) Memento Mori (2011) 120 x 200 cm Óleo y acrílico sobre tabla (Propiedad Particular)

Soledad FernĂĄndez (Madrid, 1945) Tarde quebrada (2003) 142 x 185 cm Ă&#x201C;leo sobre lienzo

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Paco Ferrando Menárguez (Barcelona - 1946) Hierro y cáñamo (2006) 130 x 97 cm Óleo sobre lienzo

Henry Flórez Soler (Madrid - 1971) Susana y los viejos (2006) 173 x 122 cm Óleo sobre tabla entelada

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Valery Florkin (Manchester (UK)) Does he understand why people want to get anything from him (2010) 162 x 130 cm LĂĄpiz y acrĂlico sobre tela

Ivรกn Carlos Franco Fraga (Cortegada - 1979) Detrรกs de la cortina (2006) 120 x 99 cm ร leo sobre lienzo

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Iván Carlos Franco Fraga (Cortegada - 1979)

Sceptic (Autorretrato) (2008) 80 x 100 cm Óleo sobre lienzo

Iván Carlos Franco Fraga (Cortegada - 1979) S/T (2006)

90 x 120 cm Óleo sobre lienzo

Ismael Fuentes López (Valencia - 1981) Lu (2007) 195 x 146 cm Óleo sobre lienzo

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Ismael Fuentes López (Valencia - 1981) Cirila, mi abuela (2006) 180 x 116 cm Óleo sobre lienzo

Jorge Gallego GarcĂa (Montellano, Sevilla - 1980) Tic - tac (2006) 116 x 189 cm Ă&#x201C;leo sobre lienzo

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Jorge Gallego GarcĂa (Montellano, Sevilla - 1980) Retrato de familia (2009) 162 x 195 cm Ă&#x201C;leo sobre lienzo

Juan Guillermo GarcĂŠs Sigas (Palma Soriano, Cuba) - 1953) Sur (2006) 175 x 200 cm Ă&#x201C;leo, alambre e hilo sobre lienzo

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Juan Carlos Gil Gutiﾃｩrrez (ﾃ」ila - 1964) Composiciﾃｳn (2006) 122 x 195 cm Tﾃｩcnica mixta sobre tabla

Golucho (Miguel Angel Mayo) (Madrid - 1949) DĂptico (2009) 190 x 80 cm c/u LĂĄpiz y aguada sobre tabla

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Golucho (Miguel Angel Mayo) (Madrid - 1949) Retrato de insomnios (2007) 120 x 170 cm TĂŠcnica mixta sobre tabla

Daniel Gonzรกlez Coves (Alicante - 1985) Eli y naranja quebrada (2010) 180 x 120 cm ร leo sobre lienzo

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Ricardo González García (Santander - 1976) Ya es la hora (2008) 150 x 150 cm Óleo sobre lienzo

Gonzalo Goytisolo Gil (Barcelona - 1966) De luz tangente 5 = Fragancia de oscuridad (2007) 146 x 300 cm Ă&#x201C;leo sobre lienzo

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Gabriel GrĂźn (Buenos Aires, Argentina - 1978) Sirena (2006) 180 x 60 cm Ă&#x201C;leo sobre lienzo

Manuel Huertas Torrejon (Madrid - 1953) Y una, entre luz y penumbra (2005) 195 x 195 cm Ă&#x201C;leo sobre tabla

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Manuel Hurtado Mateos (Barcelona - 1959) Venus nació en mi estudio (2005) 195 x 81 cm Óleo sobre lienzo

Manuel Hurtado Mateos (Barcelona - 1959)

Ella también tuvo un sueño (2005) 73 x 54 cm Óleo sobre lienzo

Manuel Hurtado Mateos (Barcelona - 1959)

Mi Gioconda (2005) 73 x 54 cm Óleo sobre lienzo)

Manuel Hurtado Mateos (Barcelona - 1959) Salve Regina (2004) 116 x 81 cm Ă&#x201C;leo sobre lienzo

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Manuel Hurtado Mateos (Barcelona - 1959) A la flor de lo eterno, nada le puede manchar (2006) 100 x 100 cm Ă&#x201C;leo sobre lienzo

Manuel Hurtado Mateos (Barcelona - 1959) El persistente y helado vacio de nuestras insatisfechas almas (2006) 89 x 116 cm Ă&#x201C;leo sobre lienzo

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Manuel Hurtado Mateos (Barcelona - 1959) No te equivoques, una rosa es una rosa (2006) 130 x 81 cm Ă&#x201C;leo sobre lienzo

Manuel Hurtado Mateos (Barcelona - 1959) Pronto pasarĂĄ la primavera; y sin embargo, todo parece ilimitado (2006) 130 x 97 cm Ă&#x201C;leo sobre lienzo

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Manuel Hurtado Mateos (Barcelona - 1959) Suscitas ensoĂąaciones (2007) 146 x 114 cm Ă&#x201C;leo sobre lienzo

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Manuel Hurtado Mateos (Barcelona - 1959) Gracia Plena (2007) 116 x 89 cm Óleo sobre lienzo

Manuel Hurtado Mateos (Barcelona - 1959) Sola; impuesto sobre el dolor añadido (2007) 150 x 150 cm Óleo sobre lienzo

Manuel Hurtado Mateos (Barcelona - 1959) Umbracle (2004) 130 x 97 cm Óleo sobre lienzo

132

Jorge Izquierdo (Chile - 1978) Atardecer con perro escabullido (2006) 195 x 130 cm Ă&#x201C;leo sobre lienzo

Jose Miguel Jiménez Scheroff (Jaén - 1988) Vanitas (2011) 200 x 146 cm Óleo sobre lienzo

133

134

Inmaculada Jordá i Frasquet (Premià de mar - 1965) Gargolas del 2010 (2010) 200 x 81 cm Óleo sobre lienzo

David Kassan (USA - 1977) Carmen (2010) 71,1 x 68,6 cm Ă&#x201C;leo sobre tabla

135

136

Lino Lago Barreiro (Pontevedra - 1973) El Mundo (2007) 195 x 295 cm Acr铆lico y 贸leo sobre lienzo

Isidoro Lรกzaro (Barcelona - 1949) Odalisca (2003) 160 x 120 cm ร leo sobre tela

137

138

AdriĂ Llarch Juanet (Barcelona - 1982) Perro (2008) 130 x 130 cm AcrĂlico sobre lienzo

Fernando López Pascual (Málaga - 1945) Joker (2005) 41 x 27 cm Óleo sobre tabla

139

140

Fang Lu (Corea - 1977) Adiana’s eyes II (2008) 73 x 162 cm Técnica mixta sobre lienzo

Fang Lu (Corea - 1977) Autorretrato del artista (2006) 150 x 150 cm TĂŠcnica mixta sobre lienzo

141

142

Pablo Maeso (Barcelona - 1964) Anselmo de camino a los Monjes (2005) 50 x 50 cm TĂŠcnica mixta sobre lienzo

143

Charles Malinsky (Yorkton / CAN - 1956) A promise at dawn (2005) 130 x 72 cm Óleo sobre lienzo

Charles Malinsky (Yorkton / CAN - 1956)

The Dawn shrugged her shoulders in long, stony profile (2005) 60 x 25 cm Óleo sobre lienzo

Charles Malinsky (Yorkton / CAN - 1956)

All that’s best of dark bright met in the aspect of her eyes (2005) 48 x 42 cm Óleo sobre lienzo

144

Charles Malinsky (Yorkton / CAN - 1956) Rhapsody (2005) 144 x 110 cm Ă&#x201C;leo sobre lienzo

Charles Malinsky (Yorkton / CAN - 1956) I hoist the flag of my posturing queen (2005) 60 x 30 cm Ă&#x201C;leo sobre lienzo

Alejandro Marco Montalvo (Valencia - 1986) Estudio limitado de una identidad (2009) 150 x 105 cm Ă&#x201C;leo sobre lienzo

145

146

Alejandro Marco Montalvo (Valencia - 1986) Autorretrato (2010) 162 x 162 cm Ă&#x201C;leo sobre lienzo

Alejandro Marco Montalvo (Valencia - 1986) Las manos de la experiencia (2006) 170 x 140 cm Ă&#x201C;leo sobre lienzo

147

148

Carlos Marijuรกn (Madrid - 1955) S/T (2010) 88,5 x 122 cm ร leo sobre tabla

Carlos Marijuรกn (Madrid - 1955) Ciro (2009) 145 x 122 cm ร leo sobre tabla

149

150

Arantzazu Martínez Peciña (Vitoria - 1977) El angel caído (2007) 114 x 73 cm Óleo sobre lienzo

Arantzazu Martínez Peciña (Vitoria - 1977) La casa de las brujas (2008) 180 x 90 cm Óleo sobre lienzo

152

Constantino Mateos Prieto (Barcelona - 1953) Conca de BarberĂ (2008) 91 x 130 cm Grafito sobre papel encolado a tabla

Julià Mateu (Barcelona - 1941) Gaviotas (1986) 70 x 56 cm Plumilla y acuarela sobre papel

Julià Mateu (Barcelona - 1941) Wagner (1987) 70 x 100 cm Dibujo a lápiz sobre papel

153

154

Julià Mateu (Barcelona - 1941) La familia Quàntica (1987) 74 x 105 cm Litografía

Julià Mateu (Barcelona - 1941) L’Esperit de Pelops a la Mediterrània (1988) 112 x 52 cm c/u Litografías

Julià Mateu (Barcelona - 1941) Tríptico (1988) 55 x 76 cm c/u Grafito sobre papel

155

156

Kike Meana (Madrid - 1969) Ramona (2008) 200 x 110 cm Mixto sobre tabla

Kike Meana (Madrid - 1969) Metamorfosis con robo de mi hijo (2009) 197 x 100 cm Mixta sobre tabla

157

158

Kike Meana (Madrid - 1969) Obsesiones de Van Dyk (2010) 122 x 100 cm Ă&#x201C;leo sobre lienzo

Kike Meana (Madrid - 1969) Habanera (2006) 197 x 110 cm Mixta sobre tabla

160

Kike Meana (Madrid - 1969) Reebok (2008) 50 x 70 cm Mixta sobre tabla

Kike Meana (Madrid - 1969) Amalia (2007) 75 x 100 cm Mixta sobre tabla

Kike Meana (Madrid - 1969) El piano (2011) 110 x 197 cm Ă&#x201C;leo sobre lienzo

161

162

Amelia Mendivil Blanco (Madrid - 1961) El SueĂąo de Rodin (2007) 120 x 240 cm Ă&#x201C;leo sobre lino encolado a tabla

Edgar Mendoza Mancillas (Durango (MEX) - 1967) La Merienda (2008) 200 x 200 cm Ă&#x201C;leo sobre lienzo

163

164

Menpo Durango (Madrid - 1961) Autorretrato 44 (2007) 100 x 120 cm Acrilico y 贸leo sobre lienzo

Joaqu铆n Millan (Arganda del Rey, Madrid - 1964) Neue Nationalgalerie. Berlin 2011 (2011) 122 x 152 cm Temple a la cola y carb贸n sobre tabla encolada (Propiedad Particular)

165

166

David Minguill贸n (Barcelona - 1964) Humano (2007) 100 x 150 cm Acrilico y 贸leo sobre tabla

Alfredo Montañà (Asturias - 1945) (2004)

200 x 150 cm Óleo sobre lienzo

167

168

Oriol Moragrega EspuĂąa (Barcelona - 1972) Galgos (2006) 154 x 200 cm AcrĂlico sobre lienzo

Eloy Morales Ramiro (Madrid - 1973) Bosque negro (2008) 100 x 200 cm Ă&#x201C;leo sobre tabla

169

170

Eloy Morales Ramiro (Madrid - 1973) La pintura en mi cabeza (2010) 160 x 160 cm Ă&#x201C;leo sobre tabla

Juan Moreno Aguado (Madrid - 1954) Taller (2010) 150 x 300 cm Ă&#x201C;leo sobre lienzo

171

172

Miguel Angel Moya (Valencia - 1970) Retratos (polĂptico) (2007) 125 x 125 cm Ă&#x201C;leo sobre tabla

Sito MĂşjica (Barcelona) PhilomythĂŠs/Mitomani (2011) 50 x 130 cm 16 dibujos sobre papel

173

174

Guillermo Muñoz Vera (Concepción, Chile - 1956) Maia con Kalashnikov (2007) 70 x 100 cm Óleo sobre tabla

Carlos Muro Aguado (Madrid - 1947) Composici贸n 497 (2006) 195 x 195 cm Acr铆lico sobre lienzo

175

176

Carlos Muro Aguado (Madrid - 1947) Composici贸n 805 Paula I (2007) 250 x 150 cm Acr铆lico sobre lienzo

Eduardo Naranjo (Badajoz - 1944) La joven del piercing (2006) 81 x 61 cm Grafito sobre papel

177

178

Eduardo Naranjo (Badajoz - 1944) Vanesa (2002) 210 x 250 cm Ă&#x201C;leo sobre lienzo (Propiedad Particular)

José Carlos Naranjo Bernal (Cádiz - 1983) La Perla (2011) 141 x 190 cm Óleo sobre papel fabriano

179

180

Juan Naranjo Torres (Madrid - 1979) 2:00 am (2006) 122 x 163 cm Ă&#x201C;leo sobre tabla entelada

David Naylor (Andover, Inglaterra, 1965) “Made in Spain” (2012) 19 x 25 cm Acrílico sobre dibond (aluminio y PVC)

181

182

Juan Bautista Nieto (Lora del Rio, Sevilla - 1963) Desnudo (Díptico) (2006) 62 x 30 cm c/u Acuarelas sobre papel

Juan Bautista Nieto (Lora del Rio, Sevilla - 1963)

El beso (2006) 100 x 170 cm Técnica mixta sobre tabla

Juan Bautista Nieto (Lora del Rio, Sevilla - 1963) La habitaci贸n (2007) 200 x 200 cm T茅cnica mixta sobre tabla

183

184

Juan Bautista Nieto (Lora del Rio, Sevilla - 1963) S/T (2005) 95 x 172 cm Técnica mixta sobre tabla

Juan Bautista Nieto (Lora del Rio, Sevilla - 1963) Isabel con jersey rojo (2007) 80 x 205 cm Técnica mixta sobre tabla

Juan Bautista Nieto (Lora del Rio, Sevilla - 1963) Llamada en espera (2008) 180 x 180 cm TĂŠcnica mixta sobre tabla

185

186

Juan Bautista Nieto (Lora del Rio, Sevilla - 1963) Desnudo de espaldas (2006) 105 x 181 cm TĂŠcnica mixta sobre tabla

Juan Bautista Nieto (Lora del Rio, Sevilla - 1963) Perpetua Mobile (2004) 200 x 156 cm AcrĂlico y tinta sobre madera

187

188

Jesús Nieto Pantoja (Madrid - 1945) Sonrisa (2011) 116 x 116 cm Óleo sobre lienzo

Mikel Olozábal (Vitoria - 1977) El proceso de transformación del miedo en arte (2008) 160 x 120 cm Óleo sobre lienzo

189

190

Mikel Olozรกbal (Vitoria - 1977) La Crisis (2009) 180 x 125 cm ร leo sobre lienzo

Manuel Páez Álvarez (Valencia - 1976) La visita (2006) 114,5 x 146,5 cm Óleo sobre lienzo

191

192

Manuel Páez Álvarez (Valencia - 1976)

Sanctasanctórum

(taller para farsantes) (2007)

250 x 195 cm Óleo sobre lienzo

Mario Andrés Pavez Arce Paño violeta (2006) 114 x 195 cm Óleo sobre lienzo

193

194

Juan Perdiguero (Madrid - 1963) Macaco pensante (2010) 121 x 86 cm Dibujo en tinta sobre papel emulsionado

José Pérez Collar (Asturias - 1948) Ciruelas (2007) 110 x 228 cm Óleo sobre lienzo (políptico)

195

196

Maximilian Pfalzgraf (Holanda - 1962) P.E.I. - La Torre (2006) 183 x 118 cm Ă&#x201C;leo y temple al huevo sobre tabla

Adriá Pina Alegre (L’Alcudia, Valencia - 1959) Mano con tinte (2010) 70 x 100 cm Acrílico sobre lienzo

197

198

Leszek Piotrowsky (Polonia - 1984) Maja (2010) 170 x 200 cm Ă&#x201C;leo sobre lienzo

Susana Ragel Nieto (Madrid - 1981) La nuca (2010) 130 x 162 cm Ă&#x201C;leo sobre lienzo

199

200

Fermín Ramírez de Arellano (Madrid - 1955) La roca (2008) 198 x 201 cm Emulsión acrílica y pigmentos sobre lienzo

Laura RĂos Villar (Madrid - 1986) Elena y su sombra (2010) 190 x 120 cm Ă&#x201C;leo sobre tabla

201

202

Luis Rizzo Rey (Barcelona - 1959) Yeni Venezuela (2010) 85 x 100 cm Ă&#x201C;leo sobre lienzo (Propiedad Particular)

Luis Rizzo Rey (Barcelona - 1959) Desnudo femenino (2011) 81 x 225 cm Ă&#x201C;leo sobre tabla (Propiedad Particular)

203

204

Francisco Roa (Guadalajara - 1956) Ver贸nica, David y Gonzalo (2010) 29 x 12 cm c/u Carb贸n/Papel encolado a tabla

Francisco Roa (Guadalajara - 1956) S/T (2010) 125 x 70 cm Carb贸n/Papel encolado a tabla

205

206

Alfredo Roldรกn (Madrid - 1965) La visita rรกpida (2006) 100 x 180 cm ร leo sobre lienzo

Juan Manuel Jaimes Roy (Argentina - 1980) La conquista de Baco a la India (2003) 197 x 148 cm Ă&#x201C;leo sobre tela

207

208

Juan Manuel Jaimes Roy (Argentina - 1980) La altanera (2005)

Juan Manuel Jaimes Roy (Argentina - 1980) Lo sentimental (2005)

187 x 118 cm Óleo sobre tela

158 x 118 cm Óleo sobre tela

Juan Manuel Jaimes Roy (Argentina - 1980) Ballo Degli Montesco (2006) 168 x 118 cm Óleo sobre tela

Juan Manuel Jaimes Roy (Argentina - 1980) La hoja está en blanco (2006)

Juan Manuel Jaimes Roy (Argentina - 1980) El guardia (2004)

130 x 120 cm Óleo sobre tela

34 x 26 cm Óleo sobre tela

Juan Manuel Jaimes Roy (Argentina - 1980) Encanto veneciano (2004) 39 x 24 cm Acuarela

210

Javier Ruiz PĂŠrez (Madrid - 1989) Los amigos (2011) 200 x 180 cm Ă&#x201C;leo sobre lienzo

Sacris (Barcelona - 1969) Desnuda (2010) 116,5 x 146,4 cm Ă&#x201C;leo sobre lienzo

Sacris (Barcelona - 1969) Josefa (2008) 101 x 81 cm Ă&#x201C;leo sobre lienzo

211

212

Sacris (Barcelona - 1969) Educación religiosa (2007) 138 x 115 cm Óleo sobre lienzo

Jesús Sánchez Alba (Madrid - 1975) Autorretrato al borde de la mesa (2010) 180 x 180 cm Óleo sobre lienzo

213

214

Pablo Santibáñez Servat (Madrid - 1972) Patagonia I (2006) 122 x 180 cm Óleo sobre lienzo

Carlos Saura Riaza (Valencia - 1960) Porvenir (2006) 145 x 195 cm AcrĂlico sobre lienzo

215

216

Doriano Scazzosi (Milรกn - 1960) Autorretrato (2004) 144 x 64 cm ร leo sobre tabla

Doriano Scazzosi (Milán - 1960)

Mística (2005) 116 x 49 cm Óleo sobre tabla

Doriano Scazzosi (Milán - 1960) Ángel (2006) 142 x 70 cm Óleo sobre tabla

217

218

Guillermo Sedano Vivanco (Burgos - 1976) Carretera nevada (2008) 180 x 180 cm Ă&#x201C;leo sobre lienzo

José M. Solera del Río (Jerez 1962) 007 (2009) 162 x 114 cm Óleo sobre lienzo

219

220

Monique Steen (Breda, Holanda - 1976) Retrato (2008) 81 x 100 cm TĂŠcnica mixta sobre lienzo

Juan Subirรก Domingo (Barcelona - 1954) Confidencias en azul (2007) 97 x 130 cm ร leo sobre lienzo

221

222

MartĂ Teixidor (Barcelona - 1930) Dresden (1990)

280 x 500 cm Ă&#x201C;leo sobre lienzo

223

224

Martí Teixidor (Barcelona - 1930) La prima ballerina (1998) 146 x 114 cm Óleo sobre tela Martí Teixidor (Barcelona - 1930) La infanta Nila (1999) 146 x 97 cm Óleo sobre lienzo

Martí Teixidor (Barcelona - 1930) Lo inimaginable en una sociedad sana (Díptico) (1997) 146 x 114 cm c/u Óleo sobre lienzo

225

226

MartĂ Teixidor (Barcelona - 1930) Ronda de guasa y puterio (2005) 185 x 200 cm Ă&#x201C;leo sobre lienzo

Ă lvaro Toledo (Madrid - 1965) Mi hermano (1993) 170 x 185 cm Ă&#x201C;leo sobre tabla

227

228

Javier Torices (Madrid - 1968) Cala Conta - Ibiza (2006) 180 x 180 cm TĂŠcnica mixta sobre tabla

Javier Torices (Madrid - 1968) De paso (2007) 180 x 270 cm TĂŠcnica mixta sobre tabla

229

230

Modesto Trigo Trigo (Gundiv贸s, Lugo - 1960) Desnudo (2005) 100 x 65 cm Grafito

Guennadi Ulibin (San Petersburgo - 1973) Ă&#x161;ltima mirada (2006) 146 x 130 cm Ă&#x201C;leo sobre lienzo

231

232

Guennadi Ulibin (San Petersburgo - 1973) Astra (2007) 130 x 130 cm Ă&#x201C;leo sobre lienzo

Guennadi Ulibin (San Petersburgo - 1973) La extraña (2007) 146 x 80 cm Óleo sobre lienzo

233

234

Angel Vaca de Le贸n (Barcelona - 1966) Emergiendo IV (2010) 130 x 130 cm T茅cnica mixta sobre lienzo

Jaime Valero Perandones (Madrid - 1967) (2006)

92 x 131 cm Ă&#x201C;leo sobre tabla

235

236

Dino Valls (Zaragoza - 1959) Dissectio (PolĂptico de 6 piezas) (2002) 55 x 135 cm Ă&#x201C;leo y pan de oro sobre tabla

Dino Valls (Zaragoza - 1959) In Memoriam (1993) 72 x 58 cm Temple de huevo y 贸leo sobre tabla

237

238

Dino Valls (Zaragoza - 1959) La tercera márgen del rio (1985)

Dino Valls (Zaragoza - 1959) Vanitas I-II (Díptico) (1989)

94 x 74 cm Óleo sobre lienzo

41 x 31 cm c/u Óleo sobre tabla

Luciano Ventrone (Roma - 1942) Una notte guardando il cielo (2006) 80 x 100 cm Ă&#x201C;leo sobre lienzo

239

240

Luciano Ventrone (Roma - 1942) Desnudo (2007) 100 x 80 cm Ă&#x201C;leo sobre lienzo

Luciano Ventrone (Roma - 1942) Desnudo (2007) 80 x 100 cm Ă&#x201C;leo sobre lienzo

241

242

Jorge Villalba (Alicante - 1975) Der Heilige Antonius (San Antonio) (2008) 210 x 200 cm Óleo sobre lienzo Obra donada por: Prof. Dr. Jürgen Weyer, RISK-CONSULTING Prof. Dr. Weyer GmbH, Köln/Colonia, Alemania.

Mirentxu Zabalegui Iriarte (Lazkao, Guipuzcoa - 1955) Últimas luces de la tarde en el Paseo de Colón (2011) 80 x 80 cm Óleo sobre tabla

243

245

ESCULTURA

246

José Manuel Belmonte Cortés (Córdoba - 1964) Hombre Pájaro (2007) 180 x 100 x 70 cm Bronce

Pol Codina Font (Barcelona - 1983) GrĂ vida (2010) 70 x 40 x 35 cm Hierro forjado

247

248

César Rodrigo Coello (México - 1959) Pose 22-44 segundos (2010) 67 x 37 x 28 cm Bronce

César Rodrigo Coello (México - 1959) Original vs copia (2008) 60 x 22 x 30 cm Bronce

Jorge Egea Izquierdo (Barcelona - 1975) Sostenibilidad (2010) 196 x 55 x 55 cm Terracota

249

250

Jorge Egea Izquierdo (Barcelona - 1975) Hermai - 7 figuras (2010) 190 x 40 x 30 cm c/u Terracota policromada y hierro (Colecci贸n Particular)

Michelangelo Galliani (Montecchio, Emilia, Italia - 1975) Marmo in vitro (2008) 40 x 30 x 30 cm Mรกrmol bardiglio

251

252

Luisa Granero (Barcelona - 1924-2012) Mediterrรกnea (1990) 210 x 50 x 30 cm Piedra

Luisa Granero (Barcelona - 1924-2012) Joven con manto (1992) 48 x 26 x 34 cm Mรกrmol negro

253

254

Grzegorz Gwiazda (Polonia - 1984) Behold the Man (2010) 195 x 200 x 200 cm Papel con resina

Grzegorz Gwiazda (Polonia - 1984) Over the world (2011)

Grzegorz Gwiazda (Polonia - 1984) Old (2011)

75 x 50 x 20 cm Bronce

85 x 15 x 20 cm Bronce

255

256

Grzegorz Gwiazda (Polonia - 1984) Sitting man (2011) 150 x 100 x 100 cm Resina

257

Grzegorz Gwiazda (Polonia - 1984) Minotaur (2011) 10 x 30 x 25 cm Bronce y piedra

Grzegorz Gwiazda (Polonia - 1984) Secret 2 (2011)

Grzegorz Gwiazda (Polonia - 1984) Secret (2011)

75 x 30 x 30 cm Resina

15 x 15 x 15 cm Bronce

258

Grzegorz Gwiazda (Polonia - 1984) Idealista (2011)

Grzegorz Gwiazda (Polonia - 1984) Portrait of the old man (2011)

25 x 20 x 20 cm Bronce

50 x 35 x 30 cm Bronce

Grzegorz Gwiazda (Polonia - 1984) Racionalista (2011) 15 x 15 x 15 cm Bronce

Teresa Guerrero Serrano (Madrid - 1966) Esgrima (2010) 129 x 40 x 90 cm Madera

259

260

Wenceslao JimĂŠnez Molina (Toledo - 1955) Torso MediterrĂĄneo (2009) 120 x 68 x 45 cm Bronce

Miroslav Kopecky (Polonia) Lâ&#x20AC;&#x2122;atterrissage des anges (2010) 120 x 60 x 30 cm Marmol de EspaĂąa

261

262

Miroslav Kopecky (Polonia) L’homme avec l’agneau (2011) 115 x 37 x 27 cm Mármol

Emiliano Lorenzo Vicente (Barcelona - 1960) ¿Qué estás mirando? (2011) 50 x 70 x 50 cm Mármol negro de Calatorao

263

264

AndrĂŠs Lasanta Jimeno (Madrid - 1970) Nonato (2008) 150 x 100 x 230 cm Bronce

José Manuel Martínez Pérez (Madrid - 1972) Esclavos (2010) 120 x 41 x 36 cm Bronce

265

266

Gerard Mas Pujolràs (Barcelona - 1976) Antroporcino (2008) 26 x 70 x 72 cm Mármol rosa portugués

Xesús Méndez Padín (Pontevedra - 1965) Ainé (2009) 135 x 50 x 30 cm Granito en talla directa

267

268

Mer (Badajoz - 1954) Aida (2002) 65 x 65 x 59 cm Marmol estatuario Carrara

Mer (Badajoz - 1954) Emma (2003) 85 x 172 x 77 cm Marmol blanco pi Carrara

269

Mer (Badajoz - 1954) Br端nnhilde (2004) 70 x 42 x 35 cm Travertino rojo persa

Mer (Badajoz - 1954) Waltraute (2004) 70 x 45 x 35 cm Travertino rojo persa

270

Mer (Badajoz - 1954) Montse (2001) 70 x 42 x 35 cm Marmol estatuario Carrara

Morán Sociedad Artística (Cáceres - 1956) Parce que je rêve, je ne suis pas (2009) 108 x 155 x 81 cm Resina de Poliéster y polvo de marmol (Propiedad Particular)

271

272

Abraham Nevado Zazo (Madrid - 1980) Sinergia - 4289 hojas de papel dise単adas, cortadas y ensambladas una a una (2009) 59 x 52 x 58 cm Papel

Riccardo Ricci (Le Spezia, Italia - 1970) Simiossis (2008) 150 x 50 x 30 cm Mรกrmol blanco de Carrara

273

274

Patricia Riveras Tobia (Barcelona - 1969) Sin tĂtulo (2010) 100 x 40 x 40 cm CerĂĄmica patinada en hierro

Flรกvia Robalo (Lucca, Italia - 1973) Maternidad (2009) 55 x 20 x 30 cm Madera policromada

275

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Ana Rosenzweig (MĂŠxico - 1956) Testigo NĂşmero 27 (2008) 58 x 28 x 36 cm Barro refractario modelado en pastillaje

Ana Rosenzweig (M茅xico - 1956) Mujer de sal (2009) 105 x 60 x 45 cm Pastillaje de gres con porcelana y 贸xidos

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Joao Rodrigo Sánchez Pérez (Alicante - 1981) Esto sí es un ensamblaje (2010) 130 x 40 x 40 cm Modelado

Joao Rodrigo Sánchez Pérez (Alicante - 1981) Esto no es un ensamblaje (2009) 50 x 20 x 20 cm Talla directa piedra

Antonio SantĂn Benito (Madrid - 1978) Estudio para torso (2008) 120 x 100 x 60 cm Talla directa sobre madera

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Monika Slomczynska (Polonia - 1983) Powr贸t (regreso) (2010) 54 x 30 x 16 cm Bronce