Boletín 09034 / 18 de marzo de 2009
Renuncian organizaciones sociales y campesinas al Consejo Consultivo Mixto de la Cibiogem, no están dispuestas a avalar la ilegalidad con que actúan los funcionarios públicos. - Denuncian que este órgano de consulta únicamente es una simulación, pues no se toman en cuenta sus observaciones. - Presidencia y las dependencias que integran la CIBIOGEM atentan contra el marco legal por la presión de las empresas trasnacionales. La reforma del Reglamento de la Ley de Bioseguridad de Organismos Genéticamente Modificados (LBOGM) recientemente publicada en el Diario Oficial de la Federación (DOF) evidencia el desprecio de la CIBIOGEM por las opiniones de sus órganos de consulta. En el acuerdo CCM/ORD/01/2009-11 se hizo un extrañamiento a la Sagarpa en relación al procedimiento presentado en diciembre de 2008 ante la COFEMER para convertir la consulta de un Acuerdo en una reforma al reglamento. El oficio consensado señala “el extrañamiento del CCM por no haber sido informado oportunamente de las consideraciones que llevaron a Sagarpa a modificar el procedimiento en comento…” Sin embargo, en este caso, como en muchos otros acuerdos a los que arribó este órgano de consulta, su opinión no fue tomada en cuenta. Por ello, las organizaciones del sector social y campesino: la Asociación de Empresas Comercializadoras del Campo (ANEC), el Grupo de Estudios Ambientales (GEA), Greenpeace y Semillas de Vida, renunciaron a continuar como integrantes del Consejo Consultivo Mixto de dicha comisión promotora de las siembras experimentales en nuestro país. Las organizaciones dijeron no estar dispuestas a avalar los ilícitos que están cometiendo la misma Presidencia y las dependencias que integran la CIBIOGEM (1), ahora presidida por Alberto Cárdenas,
quienes a toda costa pretenden autorizar la siembra del maíz transgénico que está contaminando nuestros campos, poniendo en riesgo a los campesinos y a nuestro principal alimento, sin tomar en cuenta los órganos de consulta establecidos en la Ley de Bioseguridad. “Esta renuncia obedece a la gran responsabilidad ciudadana que para nosotras significa la representación social, no podemos estar fingiendo una participación, nuestro deber hacia nuestro país y los miles de ciudadanos que nos han manifestado su oposición a la introducción de maíz transgénico nos obliga hoy a renunciar públicamente a esta encomienda. Hoy la pregunta es si es justo mantener aparatos tan costosos sólo para justificar una supuesta participación. No queremos ser parte de esta farsa y mucho menos cometer algún ilícito”, manifestó Adelita San Vicente de Semillas de Vida. “Felipe Calderón, Alberto Cárdenas, secretario de Agricultura y Juan Elvira, titular de Medio Ambiente se han negado sistemáticamente a un debate público, a cumplir la ley y argumentar racionalmente sus posturas a favor de la contaminación transgénica. Lejos de actuar como hombres de Estado y servidores públicos deciden con base a la fe y se comportan como simples agentes de ventas de Monsanto. Las organizaciones campesinas independientes de México decimos NO a la siembra de maíz transgénico. Podemos duplicar la producción de maíz sin poner en riesgo nuestro patrimonio, ni la salud de los mexicanos”, afirmó Víctor Suárez Carrera, Director Ejecutivo de la ANEC. La Reforma al Reglamento de la LBOGM, tiene visos de inconstitucionalidad, pues pasa por alto las disposiciones establecidas por el Congreso de la Unión en la Ley de Biosguridad al eliminar el Régimen de Protección Especial del Maíz, reduciéndolo a un instrumento meramente informativo que se establecerá en el Sistema Nacional de Bioseguridad de OGM. Asimismo, determina una serie de disposiciones inaplicables y que se superponen a la misma Ley. Por otra parte, el procedimiento para la publicación de dicha modificación se llevó a cabo sin haberla sometido a consulta pública, violando así la Ley Federal de Procedimiento Administrativo (LFPA, Artículo 69J). Las secretarías integrantes de la Cibiogem no tomaron en cuenta la participación del CCM, que trabajó para proporcionar a esta comisión la información científica necesaria para trabajar la construcción de un verdadero marco de bioseguridad, a través de la realización de un foro con
científicos expertos en materia de conservación de semillas y políticas de bioseguridad. Los resultados de ese foro tampoco fueron tomados en cuenta, quedando únicamente en papel como minuta de una reunión extraordinaria. Los científicos y expertos sobre el origen del maíz en nuestro territorio recomendaron en varias ocasiones, entre otras cosas: considerar todo México como Centro de Origen y de Diversidad del Maíz y por lo tanto, implementar un biomonitoreo ante los casos de contaminación detectados hasta ese entonces, con el fin de conocer la situación de la dispersión del maíz transgénico en México, como diagnóstico imprescindible para definir la situación real del maíz nativo. Con la publicación en el DOF, la posibilidad de acceder a la información relativa a la contaminación ha quedado cancelada, ya que en lo sucesivo se mezclará la diversidad de transgenes liberados en el ambiente. Ante la necesidad de proteger el maíz mexicano, resulta ridículo que las autoridades mexicanas planteen como medida de bioseguridad la autorización de la siembra de maíz transgénico. Con ello eliminan la posibilidad de evaluar caso por caso los impactos de las siembras experimentales. “Exigimos que se establezca un verdadero régimen de protección para el maíz mexicano, el cual debería empezar con cerrar las fronteras a cualquier importación de grano o semilla que no fuera garantizada libre de transgénicos, lo cual le tocaría comprobar al país exportador. Las autoridades deberían orientar los recursos económicos y esfuerzos a monitorear las entradas de maíz al país. El segundo paso debe ser la prohibición de la siembra de maíz transgénico, comestible o no comestible, en su centro de origen”, dijo Catherine Marielle, coordinadora del Programa Sistemas Alimentarios Sustentables de GEA. “Denunciamos la falta de transparencia en materia de bioseguridad de transgénicos del gobierno de Felipe Calderón y hacemos responsables a todos y cada uno de los firmantes de la modificación del reglamento de la LBOGM, ya que en aras de allanar el camino de las transnacionales están poniendo en un grave riesgo de contaminación al alimento básico de los mexicanos, al centro de origen y diversidad genética del mismo, al medio ambiente, a los productores y a los consumidores. Tendrán que dar la cara a la futuras generaciones por haber favorecido el monopolio de este importante grano”, denunció Aleira Lara, coordinadora de la campaña de agricultura sustentable y transgénicos de Greenpeace.
Las organizaciones concluyeron que no permitirán que el patrimonio genético del maíz mexicano sea vendido a monopolios extranjeros con la intención de acabar con la soberanía alimentaria de nuestro país y que continuarán con las acciones legales y de protesta civil para preservar las variedades de este grano tan importante para México y el mundo.
Notas: 1. Felipe de Jesús Calderón Hinojosa, Jefe del Ejecutivo; Juan Rafael Elvira Quesada, titular de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales; Gerardo Ruiz Mateos, titular de la secretaría de Economía; Alberto Cárdenas Jiménez, titular de la secretaría de Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación; Josefina Eugenia Vázquez Mota, titular de la secretaría de Educación Pública, José Ángel Córdova Villalobos, titular de la secretaría de Salud. Más información con: - Enrique Pérez, coordinador de prensa y comunicación, ANEC, A.C. tels. 56-61-59-14 / 56-62-92-97 044-55-16-44-67-08, email: prensanec@gmail.com - Raúl Estrada en los tels. 044-55-2746-3236 / 044-55-4084-5326 y 5687 9595 ext. 120, email: raul.estrada@greenpeace.org