Zenbakia Número
94
Febrero otsaila février
2015
Nafarroa Navarra Navarre
1,5 €
Los Fueros on line El debate de los Fueros viene de antiguo. Si será viejo que allá por el siglo XIII movilizó a los infanzones de Obanos (que forzaron al rey Teobaldo la redacción del Fuero General), animó en el XIX las guerras carlistas y levantó aquella agitación multitudinaria que dio en llamarse la Gamazada. Y sin embargo no podemos asegurar que exista una idea clara de qué fueron, qué representaron en la vida de nuestros antepasados, o qué queda de ellos cuando descubrimos a la Barcina declarándose defensora acérrima de los Fueros. ¿De qué? Lo que sí sabemos es que fue algo muy navarro, muy propio de nuestra organización política, cuando éramos independientes, y que sobrevivió a la conquista, aunque fuera perdiendo valor y degradándose, a menudo como coartada de la dominación. Efectivamente, desde la conquista de Navarra los Fueros han estado en el ojo de la polémica y la manipulación. Han sido el soporte de ideologías –foralistas; todas lo eran en algunos momentos– y de acuerdos que supuestamente cerraron guerras –“Se confirman los Fueros de las Provincias Vascongadas y de Navarra, sin perjuicio de la unidad constitucional de la Monarquía” –... Para conocer el significado de los Fueros, su sentido inicial y su evolución en el tiempo, Nabarralde organizó el pasado año un curso on line, bajo la dirección del catedrático de Historia Medieval José Luis Orella Unzué. El resultado fue excelente en términos de participación y resultados. Este año reeditamos el curso, que se impartirá en marzo, y que puede seguirse por internet tanto en euskera como en castellano. La matriculación se abrirá en febrero.
2015eko sareko ikastaroak “Euskal Herriko Historia” sareko ikastaroa amaitu berri du Nabarraldek. Bigarren edizio honen balorazioa oso positiboa izan da: parte hartze altua, ikasleen jarrera aktiboa, gauza berriak ikasteko edo aspaldi ikasitakoak berrikusi eta eztabaidatzeko grina, eta hiru hilabeteko irmotasuna eta lana. Maila altua izan du aurtengo edizioak ere, ikasleek lortutako emaitzei dagokionez. Eta hiru zifratara gerturatzen den parte hartzea ez da marka makala sareko ikastaro batentzat. Horrek guztiak erakusten du euskal gizartean badagoela gure historiari eta erreferenteei buruzko interesa, eta antzeko ikastaroek badutela tarte bat heziketa eta formazio eskaintzan. Bigarren edizio honetan edukiak berrikusi eta eguneratu dira, eta material osagarri berriak eskaini dira, direla artikuluak, direla kronogramak edo mapak. Nafarroako Ikastolen Elkartearekin elkarlanean eskainitako ikastaro hau nafar gobernuak homologatua da, eta ikasleek 9 kreditu jaso dituzte amaieran. Gure historiari buruzko ezagutza zabaltzea eta hezkuntza sisteman historia ikuspegi propio batetik lantzeko joera bultzatzea dira 2015 honetarako helburu estrategikoetatik bi. Urrutiko hezkuntzak hezkuntza sistema aldatuko duenaren iritzia gero eta zabalduagoa da irakasle eta profesionalen artean. Izan ere, teknologia berriei esker e-learning edo urrutiko hezkuntza gero eta erabilerrazago eta merkeago bilakatzen ari da, eta hezkuntza ofizialaren eremuan bere lekutxoa lortu du dagoeneko. Hori dela eta, Nabarraldek sareko hezkuntzaren aldeko apustua egingo du aurten ere, era honetako ikastaroen eskaintza areagotuz.
Horren adierazle da martxoaren 4tik apirilaren 1era luzatuko den “Foruak” online ikastaroa. José Luis Orella Unzué Erdi Aroko historian katedraduna izango du zuzendari eta foruak zer diren, nondik datozen, nolako bilakaera historikoa izan duten, eta gaur egungo foru sistemak izango ditu aztergai. Matrikulazio eta informazio eskatzea edizioa@nafarroa.biz helbidean edo 948 211057 telefonoan egin daiteke.
Ikastaro hau nafar gobernuak homologatua da, eta ikasleek 9 kreditu jaso dituzte amaieran
Honekin batera “Genozidio Kulturalari” buruzko beste ikastaro bat prestatzen ari gara, maiatzean argia ikusiko duena. Raphael Lemkinek, Holokaustotik ihes egindako legelari poloniar juduak, Gizadiaren kontrako eraso gisa definitu zuen genozidioa. Baina bere ohiko adieraz gain, eta kultura giza talde bat egiten eta bereizten duen elementua den heinean, talde horrekiko jazarpen kulturala ere talde horren desagertzea dakar, genozidio kulturala alegia.
Nabarralde SL · info@nabarralde.com · www.nabarralde.com · Tel. (34) 948 21 10 57 · Bidankoze kalea 3 · 31014 Iruñea NAFARROA · LG: NA-2449/2005 · ISSN. 1885-2181
94
«2»
Reflexiones sobre banderas Mikel Burgui En la Edad Media siendo nuestro Reyno independiente, no existió propiamente una bandera de Navarra sino un estandarte real, un símbolo personal del Rey que incluía su emblema dinástico y las armas del Reyno. Poco a poco se fue identificando como del Reyno el escudo blocado con barras perladas. El que vemos en la foto (siglo XIV) está varias veces repetido en el trono de la Virgen de Uxue. Sin salir de nuestro pueblo también tenemos el mismo escudo en la bóveda gótica, en la Cruz del Saludo, en la arqueta del corazón de Carlos II y en el cáliz de Carlos III. Este es el escudo de Navarra mientras fue independiente ya que las barras perladas no se convierten en cadenas hasta más tarde. (…) HABLEMOS DE BANDERAS La palabra “banda” o bandera define el estandarte o emblema de un grupo (bando) de personas. De ahí las palabras banderizo y banderizos: gente agrupada en un bando, bajo una bandera. ORIGEN Aunque en muchos casos en el interior de las banderas figure un escudo, el origen de estas enseñas no está relacionado con los escudos heráldicos sino con los colores que componen las telas para que solo con divisarlos a distancia se sepa a qué país o territorio pertenecen. LOS COLORES FUERON ELEGIDOS POR SENTIDO PRÁCTICO Un oteador solamente puede identificar un escudo o un estandarte si éstos están cerca. El problema es identificar un escudo a grandes distancias. Por eso se buscó la solución de usar telas con bandas de colores (banderas) para poder saber de qué país era un ejercito en tierra o un navío aunque éste estuviera lejano en alta mar. (…) EN LA EDAD MODERNA LAS BANDERAS DEJAN DE REPRESENTAR AL REY Y SUS EJÉRCITOS, SE REDISEÑAN Y PASAN A SER SÍMBOLO DE UN PAÍS Hasta el siglo XIX las banderas representaban a los ejércitos de las distintas monarquías existentes.
Aunque en muchos casos en el interior de las banderas figure un escudo, el origen de estas enseñas no está relacionado con los escudos heráldicos sino con los colores que componen las telas para que solo con divisarlos a distancia se sepa a qué país o territorio pertenecen
sanción gubernativa y tuvo que exiliarse. En cuanto a la bandera española, es de todos sabido que en 1931, caída la monarquía, se oficializó la tricolor, y que tras el alzamiento franquista se volvió a implantar la rojigualda con los métodos que todos conocemos...Nuestro escudo fue afeado por los alzados con un laurel que al fin pudimos quitar después de morir el dictador... En los primeros años del postfranquismo cada uno quería ver sus banderas en el balcón del ayuntamiento de su localidad.. Unos estaban encariñados con la rojigulada, otros la repudiaban y añoraban la republicana, otros querían que el lugar preferente del balcón fueran para la de Navarra y la Ikurriña. Las banderas nacionales, como signo de identificación colectiva de los habitantes de un ter r itor io son un fenómeno relativamente reciente. La II República española optó por la roja, amarilla y morada que numerosos grupos republicanos habían venido usando como alternativa a la enseña rojigualda, que identificaban con la monarquía borbónica.
Posteriormente el castellano Luis Correa, cronista del Duque de Alba durante la conquista en 1512, menciona que las tropas navarras, que en octubre-diciembre de ese mismo año trataban de expulsar a los castellanos, enarbolaban una enseña roja y lo relata así: “en la delantera trescientos hombres de armas a pie con una bandera colorada con ciertas bandas de oro en ella a la cual todos aguardaban y juraron de no la desamparar”.
La mayoría de las banderas del mundo de hoy no representan a los monarcas como antaño, sino a los ciudadanos y al territorio donde habitan.
LA BANDERA DE NAVARRA SE APROBÓ EN 1910 Y EL GOBIERNO DE ESPAÑA REPRIMIÓ SU USO
Entre las banderas de los estados con representación en la ONU se considera que la de Dinamarca es la más antigua ya que data del siglo XIV. EL COLOR ROJO, REPRESENTATIVO DE NAVARRA La evolución del estandarte con escudo a tener bandera no se dio en Navarra, simplemente porque nuestro reino perdió su independencia antes de darse dicha evolución. Navarra, por imposición ajena, pasó a estar dividida en dos territorios supeditados uno a la monarquía española y otro a la francesa. Aun así, tenemos noticia del uso de algo que podríamos decir bandera de Navarra antes de 1512. El color rojo en una tela, identificando al portador como navarro, lo vemos a mediados del siglo XIV cuando los soldados del rey Carlos II de Navarra intentaban adueñarse de París. Como distintivo llevaban en sus boinas este color según refiere Martín Larrayoz.
En 1910, Campión, Altadill y Hermilio de Oloriz miembros de de la Asociación Eúskara, diseñaron la bandera de Navarra con el escudo sobre tela roja basándose en el color de fondo de nuestro escudo y en los antecedentes históricos que hemos mencionado antes. A pesar de que fuera la mismísima Diputación Foral de Navarra quien aprobó la bandera diseñada por estos notables, el Gobierno de España se opuso rotundamente a su exhibición en lugares oficiales. Muestra del talante represivo contra quien osara ponerla en un balcón oficial es lo que le ocurrió a Don Santiago Doxandabaratz concejal nacionalista de Tafalla. Por iniciativa suya se puso la bandera de Navar ra en el balcón del ayuntamiento el día de San Francisco Javier, 3 de diciembre de 1923. Varios componentes del Somatén, que celebraba ese día una concentración en la ciudad, subieron al balcón y la retiraron. A Santiago Doxandabaratz se le impuso
Al tratar de unir todas las posibilidades había incompatibilidades con lo legal y con la querencia de cada vecino en particular. A cada uno le gustaba una o alguna y no quería ver las otras… En Uxue se actuó sabiamente optando por alejarse de embrollos, seguir como de costumbre y no poner ninguna en el balcón municipal. Aquel acuerdo tácito se respetó hasta mediados de abril del 2013. Ahora, en la casa consistorial de Uxue lucen las cuatro banderas que por imperativo legal hay que poner en Navarra: De izquierda a derecha la local (Ujué), España, Navarra y Europa. El lugar preferencial lo tienen las de España y Navarra que están en el centro. Luego la de Ujué y la de Europa. El protocolo exige ese orden. Si el orden exigido se altera, multa. Si se pone una bandera más o una menos, es motivo de sanción. No poner ninguna también es sancionable. EPÍLOGO. Hagamos un rápido repaso mental de nuestra historia y recordemos que fue en 1512 cuando Navarra fue invadida y perdió su independencia. De no haber ocurrido tan desgraciado evento…. ¿Cuáles serían ahora nuestras banderas? Pues la de Uxue por ser nuestra villa y la de Navarra por ser nuestra nación. (…) Artículo completo en: http://ujue-uxue.blogspot. com.es/2013/04/reflexionestras-la-obligada-colocacion. html
Nafarroa, Euskal Herriaren ardatza / La conciencia navarra de Euskal Herria / Navarre, l’ Etat basque / Nafarroa, Euskal Herriaren ardatza / La conciencia navarra de Euskal Herria / Navarre, l’ Etat basque
otsaila 2015 febrero
«3»
Trebiñuk eserlekua behar du Arabako Biltzar Nagusietan Iñigo Larramendi Ipar Amerikako britaniar kolonoak (ondoren Amerikako Estatu Batuak sortu zuten horiek) metropoliaren kontra jarduten hasi zirenean, lelo bat erabili zuten: no taxation without representation. Hots, ordezkapenarik gabe, zergarik ez.
Arabako alderdien artean ba omen dago Trebiñurekin bat egiteko nahi irmo bat
Izan ere, ordezkapenaren kontuak bere biziko garrantzitsua izan du hainbat prozesu istorikotan. Ipar Amerikaren kasuan, gatazka fiskala bezala hasi zena independentzia bezala amaitu zen; eta, ordura arte, zalantzarik gabe britaniarrak ziren horiek estatu batuarrak bihurtu ziren… eta dena, ordezkapen arazo batetik abiatuta.
Kasu hartan, ordezkapenaren kontuak banantze prozesu bat zabaldu zuen; gurean, aldiz, batasun prozesu baten abiapuntua izan daiteke. Gaztela-Leonek eta Espainiak Trebiñuren egoera aldaltzeko inongo borondaterik ez daukatela argi eta garbi utzi dute. Gaztela eta Espainia aldatzen saiatzea baino, ez al da errazagoa gure burua aldatzea? Arabako alderdien artean ba omen dago Trebiñurekin bat egiteko nahi irmo bat, eta Biltzar Nagusien azken bileran batzarkide gehienek Trebiñu Zortzigarren Koadrila bezala hartzea adostu zuten. Ez litzateke bat ere logikoa izango, orduan, Trebiñuk Batzar horietan
ordezkapenik ez edukitzea: no policy without representation. Datorren urtean Batzar Nagusietarako hauteskundeak direla eta, zentzuzkoa izango litzateke, batzarkide gehienek hala nahi izango balute, eserleku bat Trebiñurentzat uztea, legez edo de facto. Jakina, ordezkari hori trebiñutarrek aukeratu behar izango lukete, egokitzat jotzen den prozedura demokratikoaren bitartez, Batzar Nagusietarako hauteskundeekin batera edo beste une batean. Baliteke, ustez Trebiñurekin bat egitearen aldeko batzuk konpromesu honen aurka agertzea. Zilegi litzateke, orduan, zalantzatan jartzea ustezko babes hori benetazkoa den, edo keinu hutsa den.
Baliteke indarrean dagoen legediak, Arabatik bertatik edo eremu nazionaletik etorritakoa, aukera honi uko egitea, Arabako eta Trebiñuko ordezkari gehienak aldekoak izan arren. Zilegi litzateke, orduan, daukagun legedi hori benetan autogobernu bat ote den, edo agian bestelako gauza bat, galdetzea. Izan ere, autogobernua eta berezko gobernua ez dira gauza bera. Hor dago hordagoa. Norbait jokatzeko prest? Referencia http://martinttipia. com/2014/12/31/trebinuk-eserlekua-behar-du-arabako-biltzar-nagusietan/#more-604
Cuando el nacionalismo parece invisible Ferrán Archilés Detrás de lo que se califica de banal no necesariamente se esconde la intrascendencia.Ya se sabe que un argumento repetido acaba convirtiendo en una realidad, incluso, constitucional.Y es que los nacionalistas siempre son los otros, según las tesis de Michael Billg, que llega a España veinte años después. En 2006 la editorial AFERS publicó la traducción del trabajo imprescindible de Michael Billig, ‘Nacionalismo banal’. Ahora, otra editorial imprescindible como es Capitán Swing ha sacado a la luz una traducción al español. Es significativo que no haya sido hasta ahora, y a manos de una editorial pequeña, es decir casi veinte años después de la edición original inglesa, cuando se haya publicado la traducción española. Significativo porque el trabajo de Billig defiende una tesis incómoda, como es la presencia de un discurso nacionalista aparentemente invisible en Estados donde se supone que no hay nacionalismo. Billig construye su libro sobre el ejemplo de los
Nacionalistas, ya se sabe, son siempre los otros: los franceses con su chovinismo y los catalanes y los vascos con su aldeanismo
Estados Unidos y también sobre el caso británico. Pero lo cierto es que las tesis de Billig, tan matizadas como sea necesario, pueden aplicarse a otros casos como Francia o España, sin ir más lejos. Por mucho tiempo la inexistencia de un nacionalismo español ha sido una afirmación constantemente repetida y no precisamente de manera inocente. Repetida por quienes están dispuestos a reivindicar el «patriotismo» (a menudo adjetivado como constitucional) o simplemente la «normalidad» de ser español. Nacionalistas, ya se sabe, son siempre los otros: los franceses con su chovinismo y los catalanes y los vascos con su aldeanismo. El libro de Billig, sin embargo, invita a reflexionar de otra manera y a prestar atención a la forma en que llegan a naturalizarse hasta el punto de parecer evidentes e incuestionables las identidades nacionales. De hecho, cuanto más exitosas son las identidades nacionales, más invisibles resultan; cuanto más asumidos y naturalizados los respectivos nacionalismos, más banales se muestran. Como el personaje de Molière, que no sabía que hablaba en prosa.
¿Es el nacionalismo español un caso de nacionalismo banal? La hipótesis merece más de un pensamiento. A juzgar por la intensidad y volumen de las negaciones sobre la existencia misma de un «nacionalismo español», la respuesta no podrá ser más que afirmativa... Las tesis de Billig han sido objeto, en los últimos años, de una notable atención y se han originado a su alrededor muchos debates. Su posible aplicación al caso español, pero se ha demorado. De todas formas ha sido precisamente desde la Universidad de Valencia desde donde se han hecho más esfuerzos, posiblemente, para explorar esta dimensión: estudios sobre fútbol, cine, televisión o política han ido viendo la luz en los últimos años. Una de las virtudes de las propuestas de Billig es que nos ha hecho mirar hacia los aspectos más aparentemente inocentes a través de los cuales se construye el nacionalismo. Los mapas del tiempo, la literatura, las series televisivas o los deportes (con el fútbol como referente inexcusable) son ejemplos
de los temas que en los últimos años se han ido explorando. De «la roja» a Aida, de los escritos de Muñoz Molina o los diarios de Trapiello pasando por Top Chef o Blancanieves, la nación española se banaliza cotidianamente. Naturalmente no todas las personas reciben el mismo impacto ni producen la misma digestión. Pero todos vivimos en una esfera comunicativa donde la nación española omnipresente (una nación española donde la diversidad cultural no tiene cabida más que como estereotipo) niega su nacionalismo. No es de extrañar, pues, que cuando llega la hora de las demandas de los «otros» nacionalismos, la incomprensión y el desprecio sea lo más generalizado. Referencia EDITORIAL AFERS http://editorialafers.blogspot.com. es/2015/01/quan-el-nacionalisme-sembla-invisible.html
Nabarralde SL · info@nabarralde.com · www.nabarralde.com · Tel. (34) 948 21 10 57 · Bidankoze kalea 3 · 31014 Iruñea NAFARROA · LG: NA-2449/2005 · ISSN. 1885-2181
94
«4»
De Navarra a Buenos Aires José Joaquín Saldias Cuando Francés de Beaumont y Navarra se embarcó rumbo al Río de la Plata en el año 1598 para ocupar sendos cargos burócratas lo hizo consciente de que cumplía un destino al menos dichoso. Nacido en Pamplona en 1560, pertenecía a la familia que en 1512 abrió las puertas del Estado vascón a los castellanos. Ese pasado de infamia no significaba una carga para él, por el contrario se creía predestinado a continuar prácticas caracterizadas por la codicia, la traición y al menos el desinterés por la condición humana. Así traficó esclavos, fue contrabandista, político y fiel ejecutor de las órdenes que desde España se impartían con el objeto de apropiarse de los recursos naturales americanos. El genocidio de los pueblos originarios no fue impedimento para satisfacer a sus superiores. Cuando falleció en 1620 legó $ 2.000 a la orden de los franciscanos, de esta manera Francés pagaba sus culpas y pecados en este mundo. La posteridad, orgullosa de sus actos, le reservó un lugar en los libros de Historia, autores navarros, argentinos y paraguayos aplauden en sus páginas su ejemplar “vida y obra”. Una herencia menos gloriosa de sus actos tuvieron los Pampas, Querandíes, Chaná, Timbúes, Charrúas, etc. El pueblo Chaná fue exterminado, cuentan los cronistas que acompañaron a los conquistadores que las mujeres chaná abortaban para impedir un futuro de esclavitud. Del pueblo Pampa-Het sólo se conservan cuatro o cinco palabras de su lengua, la misma suerte corrieron los Querandiés, los Timbúes y los Charrúas.
Nacido en Pamplona en 1560, pertenecía a la familia que en 1512 abrió las puertas del Estado vascón a los castellanos
No es este el lugar de analizar las motivaciones que originaron el genocidio americano. Sí me parece necesario puntualizar las explicaciones que pretenden justificar lo injustificable y lo que
IRUÑEA: IZANAREN HONDAMENDIA 10 EURO
Zergatik suntsitzen da Iruñeko hondarea? DOKUMENTALA SALGAI NABARRALDEN
es peor aún su permanencia en el presente. En otras palabras ¿desde dónde la historia oficial convierte en héroe al traidor? ¿Cómo se defiende la continuidad en el tiempo del genocidio como condición necesaria para el progreso capitalista y el beneficio personal de aquellos que construyeron la “Hispanidad”?, ese mito que todo lo justifica. La hispanidad es un discurso claramente determinado por la voluntad de administrar una memoria única, de gestionar la historia y de encubrir el engaño y la manipulación del incipiente capitalismo moderno mediante el cultivo extremo de las formas culturales, un discurso culturalista guiado por la supresión de la di-
Cuando Francés de Beaumont y Navarra se embarcó rumbo al Río de la Plata en el año 1598 para ocupar sendos cargos burócratas lo hizo consciente de que cumplía un destino al menos dichoso
sensión y de la conciencia crítica para promover una cultura oficial al servicio del silencio. Nadie en América piensa que San Martín o Bolívar fueron guerrilleros o terroristas que atentaban contra el bien común, por el contrario todo el mundo acepta que salvaron a sus pueblos de la esclavitud para ser independientes. ¿Por qué en Euskal Herria no se valora de igual modo a los que luchan por su independencia?
PAMPLONA: EL SAQUEO DE LA MEMORIA ¿Por qué se destruye 10 el patrimonio de Pamplona? EUROS DOCUMENTAL A LA VENTA EN NABARRALDE
Nafarroa, Euskal Herriaren ardatza / La conciencia navarra de Euskal Herria / Navarre, l’ Etat basque / Nafarroa, Euskal Herriaren ardatza / La conciencia navarra de Euskal Herria / Navarre, l’ Etat basque
otsaila 2015 febrero
«5»
Cultura, poder y compromiso Salvador Cardús i Ros Prendre partit, la obra del dramaturgo Ronald Harwood, ha llegado al teatro Goya dirigida y protagonizada por Josep Maria Pou, con un indiscutible don de la oportunidad. Se trata de la puesta en escena de los interrogatorios preliminares que sirvieron para acusar de complicidad con el régimen nazi al director de la Orquesta Filarmónica de Berlín, Wilhelm Furtwängler. El Tribunal de Desnazificación, en 1946, lo acabó absolviendo de todos los cargos, pero la sospecha de connivencia con el nazismo nunca más se la quitó de encima. La confrontación entre Furtwängler (Josep Maria Pou) y el militar norteamericano responsable del expediente (Andrés Herrera), en una actuación memorable, sirve para desarrollar una seria reflexión sobre las relaciones siempre controvertidas -y llenas de ambigüedad- entre cultura y poder político. Prendre partit pone en evidencia que la confrontación entre cultura y poder político no tan sólo es inevitable, sino que es consustancial de su relación. El poder político recurre a la cultura para poder legitimar la existencia y cohesionar su ámbito de dominación, y la cultura necesita el apoyo directo o indirecto del poder político para poderse expresar y ser reconocida. Eso para no hablar de las relaciones de poder intrínsecas de la acción cultural (de competencia en el mercado, en las luchas por la notoriedad y el reconocimiento o en las diatribas entre posicionamientos ideológicos). Como en el caso del deporte, pedir que no se mezcle cultura y poder político es una absurdidad. En todo caso, lo que se puede discutir es de qué forma se deben relacionar a fin de que cada uno de los campos no traspase los límites de aquello que, según los diversos criterios, se considera su espacio legítimo de autonomía y libertad. He dicho que Prendre partit llegaba en un momento oportuno porque si la relación entre cultura y poder político es siempre controvertida, en los momentos de incertidumbre y transformación política radical, todavía más. Cuando el compromiso del creador, del artista, del intelectual, se mueve en las plácidas aguas de un marco político hegemónico y estable, esta vinculación puede situarse en la confortabilidad de lo implícito y, en un cómodo ejercicio de au-
El mundo de la cultura, artistas, académicos e intelectuales, no está inmunizado de la tentación populista
toengaño, puede hacerse invisible en los ojos de ambas partes. Y, claro está, del ciudadano que los observa. Es el mundo del “banal nationalism” -en expresión de Michael Billig-, o de las apelaciones fáciles a la independencia de los dos espacios. Pero cuando las hegemonías políticas quedan en entredicho, se acaba el tiempo de placidez y los compromisos dados por descontado se hacen visibles y son puestos en cuestión. Son estas circunstancias de conmoción política las que descubren las espirales de silencio: las anteriores, en las que muchos habían vivido relajadamente, y las de nuevo cuño, de las que aquellos ahora se escandalizan. Es ahora cuando las nuevas correcciones políticas, en nombre de los principios retóricos nacientes, quieren imponerse sobre la vieja “buena educación”, convertida en convención inútil.Y es en estos tiempos que reaparecen los policías de la opinión legítima, siempre atentos a censurar y condenar a quien se aparte de los esquemas de pensamiento, bien sea de los tradicionales, bien sea de los que pretenden sustituir a los de la hegemonía anterior. En eso, nada parece cambiar. Es también ahora, cuando el compromiso es más difícil de en-
mascarar, que se exacerban las estrategias para disimularlo. En este caso, la simulación de independencia crítica y creativa se ampara en un supuesto cosmopolitismo neutral o en un fingido cientifismo lleno de artificios para permitir la supervivencia hasta que las aguas vuelvan al cauce y se sepa cuál es la apuesta ganadora. En el campo de determinadas ciencias sociales, sorprende ver cómo los que nunca tuvieron escrúpulos a la hora de exhibir y usar su militancia para articular el espacio académico -cuando esta era hegemónica-, ahora se abstienen de tomar partido bajo el pretexto de una exquisita asepsia científica. El disimulo del compromiso ideológico también puede llegar por parte del campo político. Porque una cosa es pedir legítimamente que el artista, el académico o el intelectual se comprometan políticamente como ciudadanos, y la otra sería refugiarse en este espacio para esquivar una definición precisa de los objetivos políticos a los que se adhieren.Ya lo advertía Karl Mannheim cuando recordaba que la intelectualidad no estaba en condiciones de constituir su propio partido.Y añadía: “Si alguien cree que un partido de intelectuales es necesario, es que ha errado la diagnosis sobre los intelectuales”.
El mundo de la cultura, artistas, académicos e intelectuales, no está inmunizado de la tentación populista. Ahora mismo estamos asistiendo a un caso notorio en el que se utiliza la procedencia del campo universitario para disolver la confrontación entre derechas e izquierdas y sustituirla por un demagógico “los de abajo contra los de arriba”. Mannheim acababa la frase anterior -escrita, atención, en 1932- de esta manera: “Más aún: la formación de un partido de los intelectuales llevaría inevitablemente al fascismo”. Ni que decir tiene que también habrá que ser muy cuidadoso, las próximas semanas, a la hora de concretar -si las hay- listas electorales de la “sociedad civil”, de independientes, de académicos o de expertos. El dilema del compromiso entre cultura y poder político se planteará de manera concisa, sin posibles subterfugios parapetados en retóricas abstractas. El compromiso puede nacer de la independencia de criterio a la hora de tomar partido, pero la independencia crítica no debería servir para enmascarar ni hacer más ligero el compromiso en circunstancias excepcionales. Por favor, pasen por el Goya. La Vanguardia
Nabarralde SL · info@nabarralde.com · www.nabarralde.com · Tel. (34) 948 21 10 57 · Bidankoze kalea 3 · 31014 Iruñea NAFARROA · LG: NA-2449/2005 · ISSN. 1885-2181
94
«6»
Txillardegi Josu Tellabide Jose Luis Alvarez Enparantza Txillardegi hil zen hirugarren urteurrenean gaude. Bere izena ez duzue ez leku bat izendatzeko ez ezertarako erabiltzea nahi. Bada, Txillardegiren merituak denek ezagutzen dituzte, zuek ere bai noski. Zer dela eta, orduan, ezetz hori izena bere omenez erabiltzeko? Badirudi ahalmenik eza duzuela ideia politiko desberdinak dituzten pertsonen oroitza onartzeko. Zer iruditzen zaizue norbaitek esango balu Vargas Llosak edo Saramagok eta abarrek ez dutela oroimena izateko eskubiderik, edota ezin dutela sari internazionalik jaso, edo ezin direla inon aipatuak izan bere meritu literarioengatik? Zoratuta egon behar da horrelako zerbait esan edo egiteko. Meritu literario horiek errekonozitzeak ez du esan nahi Vargas Llosa eskuindarra ez denik eta Saramago komunista ez zenik... Gauza bat dira pertsona horien jokaera politikoak eta beste bat
Politikara dedikatzen denak derrigorrean gorrotoak etxean utzi behar ditu, eta oposizio politikoa egiten ikasi, zeren bestela, oposizioa baino gehiago sabotajea da egiten dena
da haiek duten artea, trebezia eta merituak jakinduriaren edo artearen edozein alorretan. Gauzak analizatzen, arrazoitzen, ulertzen jakin behar da. Guk aipatutako pertsona horiek (adibide gisa) bere ideologia dela-eta kondenatu edo goraipa ditzakegu. Baina beraien merituak ezin dira ukatu. Bada autogorrotoa deitzen dena, gure arteko ezin ikusia; bada gauzak ulertzeko arazoak edo... Txillardegiren etsaiak euskaldunon etsai bertsuak dira, eta zer ari zarete? Donostian beti izan eta diren egiazko agintariak ez dira zuetaz ezta gutaz ere fidatzen, eta, agintaritza beraiek dutenez, beraiek erabaki dute beti nor goraipatu behar den gure herrian. Politikara dedikatzen denak derrigorrean gorrotoak etxean utzi behar ditu, eta oposizio politikoa egiten ikasi, zeren bestela, oposizioa baino gehiago sabotajea da egiten dena (gorrotoak itsutasuna dakar, eta jakinduriarik ezak, atrebentzia handia).
Esan, mesedez, zer iruditzen zaizue Reyes Católicos eta Alfonso VIII pertsonaiek kale izenak izatea (bi adibidetxo jartzeagatik)? Zer meritu dituzte lehendabizikoek? Gerrara, inbasioetara, jendeak, armaz noski, hiltzera bidaltzea; Granadako liburutegiko literaturazko izugarri balio handiko obrak erretzea han sartu zirenean… Horiek meritu kulturalak edo gizakiaren aldekoak al dira? Eta bigarrenak, gerretara ere dedikatu zena, gure herria inbaditu eta okupatzen? Aitzol euskaltzale, idazle, kazetari, bertsolari eta sindikalista erraldoia torturatu eta asesinatu zuten. 1936ko urriaren 17ko La Voz de España-k eta El Diario Vasco-k agertzen zuten berria: «Capturado el energúmeno Aitzol, sacerdote separatista». 78 urte ondoren oroitu da norbait... eta haren oroimenez kale bat jarri da... badirudi baimena orain eman dutela Donostiako egiazko agintariek. Ez al zuen orain arte �2014ra arte� oroimenik merezi? Bada Pio Barojaren kasua, oso adierazgarria. Pio Baroja oso kritikoa izan zen; «Soy donostiarra pero no siento gran entusiasmo por ello. Para qué adornar la ciudad con bagatelas de bazar que no sirven para nada? La inspiración de los monumentos de San Sebastián ha partido de contratistas, maestros de obras y de concejales», zioen. Noizbait jarri behar eta, hil eta hamasei urtera jarri zioten pasealeku bati haren izena. Fernando Sasiain Donostiak izan duen alkaterik hoberenetakoa izan zen (1931-1936); errepublikanoa bera. Pertsona zintzo eta politikari gailena, Donostiako hainbat proiektu eta obra kultural aurrera ateratakoa, errepresio krudela jasan zuen, ondasun guztiak lapurtu zizkioten eta eroetxe batean ahaztuta hil zen. 35 urte pasa behar izan dira kale batean izena oroitzeko, eta 56 urte San Telmo museoko alde berriari haren izena jartzeko. Izen asko badira Donostiako oroimenean: ar istokrata, politikar i, er re-
ge, santu, elizgizon, militar, jauntxo, kontratista, promotore, alkate eta zinegotzi ohiak, eta abar. Baina kulturarekin loturiko pertsonak, gutxi. Hona hemen adibide batzuk: -Gros auzoa. Jose Grosen semea zen Tomás Grosek eta Juan Miguel Iribas lur-jabeek eraiki zuten auzoa, eta aurrenekoen izena hartu zuen; negozioa biena zen, baina. Kultura gizonak? Ez, negozio gizon soilak baizik. Eta, noski, zinegotzi eta alkate izanak! Auzoa mendeetan Zurriola deitzen zen ordura arte. Jose Maria Salaverria idazle eta kazetaria. Oso adierazgarriak dira bere lanak: «Vieja España», «Los Conquistadores», «El Muchacho español», «Santa Teresa de Jesús», «Las Sombras de Loyola»... 19361939 urte artean «La Voz de España»-n idatzi zuen beti. Claudio Anton Luzuriagaz zer esan... Legegizona zen, Oñatin ikasia, errege espainolak Donostiako diputatu izendatu zuen. Beti Foruen aurka ibili zen, horiek industriaren hazkundea oztopatzen zutelako, bere esanetan; aduanak Ebrotik Irunera aldatzeko borrokatu eta lortu zuen 1841ean. Ordainez, ministro egin zuen erregeak. Jose Matia Calvo. Merkataria omen zen. Esklabo beltzen trafikora dedikatzen zen bere «Bella Vascongada» fragatarekin. Hil eta gero zerua irabazteko ahaleginetan, zahar behartsuentzat asiloa, gaur Matia Fundazioa dena, egiteko eman omen zuen dirua. Eta bere izena kale nagusi batek darama, gainera. Agian aipatu pertsonaia horien merituak Txillardegirenak baino ere handiagoak al dira? Galdetzen dugu... Herri baten historiaren adierazgarri garbiak dira kaleen eta leku edo monumentuen izenak. Izen horietan islatzen baita izan zen eta den Donostiako historia. Donostiak Kulturaren Hiriburua izan behar omen du 2016. urtean. Urtebete bakarrik gelditzen da ezinikusiak alde batera uzteko. Bestela, gauzak horrela, Pello Kirten xelebre hura proposatuko du ergelen batek hiriko esparru kultural bati izena emateko! Jakin beharko dugu bereizten... Agian, ikastaro intentsibo bat jaso beharrean gaude. Berria
Nafarroa, Euskal Herriaren ardatza / La conciencia navarra de Euskal Herria / Navarre, l’ Etat basque / Nafarroa, Euskal Herriaren ardatza / La conciencia navarra de Euskal Herria / Navarre, l’ Etat basque
otsaila 2015 febrero
«7»
Adierazpen zer?
Errelatoa Beñi Agirre Errelatoa da gakoa. Errelato on eta sasoiko duenak aurrera egiten du. Errelato propioa ez duen herriak desagertzeko arriskua du. Euskaraz bada esaera bat honetara ere molda daitekeena: izena duenak izana du; alegia, errelato propioa duen herriak, izena du; beraz, izana. Espainia demokratikoaren ipuina amaitu da. Lehen, konkista eskubidearen errelatoari esker, mundu osoan zituzten kolonien ondasunak ebazten zituzten inpunitate osoz; orain, Bilboko kaleetan banatutako eltzetxoetan bilatzen dute, inpunitate osoz, harrapakina. Trantsizioa ez da inorentzat eredua eta Espainia ez dago munduko potentzia ekonomikoen zerrendan: Asko aldatu zaie ipuina. Ipuinak Kataluniarekin egin du talka eta kataluniarrek euren errealitatearekin. Kataluniako gizarte zibilak tentu eta mimo handiz euren errelatoa eraiki ondoren, narrazio bera jarri dute kolokan alderdiek. Europan herri subirano eta independente izatea, Estatu propioarekin munduan lehiatzea eta euren kultura eurek baino hobeto inork ez duela maitatzen aldarrikatzetik, ezker-eskuin errelato zaharkituan jausi dira ia-ia. Esker-eskuin dikotomia zaharkitua dagoela ez dut nik esaten, Espainiaren ipuina berrasmatu nahian ari diren batzuk baizik. Orain, kasta eta herri xehearen artekoa omen da kontua. Goikoen eta behekoen arteko hegemonia omen da lehia. Agian arrazoia dute ekonomi neokapitalistaren atzaparretan erorita aberatsak oso aberats direla eta, erdi-mailakoak desagertuta, gainerakoak gero eta pobreagoak garela. Goiko eta behekoen arteko narrazio horretan, ordea, kasta konkistatzaileez eta herrien independentziaz hustu egiten da errelatoa. Hegemoniaren narraziotik desagertu egiten da Espainiari mendean geratzen zaizkion herrien independentziarako eskubide eta zilegitasuna.
Ana Telletxea Delako adierazpen askatasunarekin bueltaka nabil egunotan. Entzuten eta irakurtzen dudan guztiaren harira galdera bera datorkit etengabe gogora: Frantzia bezalako herrialde bateko buruek adierazpen askatasunaren aldeko manifestazioa? Parisko gertakizunaren erraietan sakondu gabe (eta gaiaren azterketarik ere egin gabe), adierazpen askatasunaren kontura halako kontraesan batek errefusa sortzen dio edonori. Ez gara herri bakarra adierazpen askatasuna ebatsia duena, baina ongi ezagutzen dugu adierazpen askatasunaren garestia; ohituta gaude utopia horren dantza antzura. Adierazpen askatasuna ez baita bera batzuena eta besteena. Batzuek adierazpena egin orduko galtzen dute askatasuna. Besteek, aldiz, aho ahaldunek, negozioa dute eufemismoarekin eta etekina manipulazioarekin. Mugarik ez,
haiengan, legearen babesaz estaltzen baita adierazpen bakoitzaren egiazko eta ezkutuko asmoa. Adierazpen askatasunarena iruzurra da (ez bada gure egongela edo sukaldean praktikatzeko, eta sobera ozen ez badugu egiten). Izan ere, “Adierazpen askatasuna jendeak aditu nahi ez duena esatea da” esan zuen Animal Farm lanaren idazle zen George Orwell-ek. Eta esan eta irauli behar ez direnak ongi kontrolatu behar dituenez botereak, adierazpen askatasuna deserosoa zaio oso. Ez hori bakarrik, irizpide askea etsaia du. Zentzu horretan, politikoki zuzenak izaten ohitu nahi izan du jendartea. Aita Santuak ere esan du adierazpen askatasunak mugak dituela. Jakin dezagun. Hori teknikoki ezinezkoa bada ere, praktikan hala bizitzen ohituak gara; etengabeko mugekin. Eta gaurko bitartekoei esker iritzi askeko garela senti dezakegun arren, gero eta kontrol handiagoa dugu, gero eta zigortuagoa dago gizabidea,
gero eta neurri eta lege murriztaile gehiago daukagu, eta nahi dugun hori ezin dugu nonahi, nolanahi, nornahiri esan. Eta hori egunerokora iragan da, gutako norbait adierazpen askatasun purua praktikan jartzen ausartzen bada, zentsura ere egiten diogu baten batek: “zer ari zara?/ Zaude isilik!/ ez esan halakorik!/ Ixo! Arraro begiratzen gaituzte/…”. Hasierako gogoetari helduz, eta baten batek ongi esan zuen gisaz, pentsamendu askatasunik gabe, adierazpen askatasunak ez du ezertarako balio. Eztabaidak parametro jakin batzuetan koka ditzagun bideratzen gaituzte, eta hori askatasuna bailitzan jardun gaitezen animatzen gaituzte, baina marra pasatu gabe. Gogora datorkit ironia sinple baina argi hura: “Niri ez dit inork esaten zer egin behar dudan. Neronek bakarrik asmatzen dut”.
Espainiar buruzagi politiko batek galdetu zion bere buruari Bartzelonako mitin batean: “Katalunia Espainiatik alde egitea nahi dut nik?” “Ez”, erantzun zion bere buruari ere; “baina badakit kastakoek iraindu zaituztetela” gehitu zuen. Esaldiaren lehenengo aldea adierazteko zilegitasun osoa zeukan; bigarrenean ordea, talka egiten du kataluniarren narrazioarekin. Zeren eta kontua ez da Espainiak Katalunia iraintzen duen ala maitatzen duen; kontua da, Kataluniak baduela herri bezala errelatoa eta kataluniarrei soilik dagokiela horri buruz erabakitzea. Esaldiaren bigarren parteko “hori zuek erabaki behar duzue” hustean, esatean ala ez, jokatzen da Kataluniako errelatoaren hegemonia. Euskal Herrian, ez gaude errelatoaren hegemoniaren borrokatik kanpo. Herri bat gara. Kataluniarren antzera, gure kultura guk geuk baino hobeto inork ez duela maitatzen aldarrikatzen dugu. Hala ere, Donostia 2016 Europako Kultur Hiriburua egitasmoa euskaltasunez hustu egin da. Uko egin zaio narrazio propioari. Edertasuna lehenesten duen ekitalditxoen artean pasako da Europan eta munduan herri hau Euskal Herria dela eta nafar Estatu izan ginela erakusteko aukera. Errelatoan ez dago euskaldunen kultura, kultura baizik. Euskal Herriaren askapen prozesuan ez dago independentziaren borroka, borroka baizik. Bilbo, Donostia, Baiona… Milaka manifestarien ahotsak independentziaz hustu egin dira. Desioak aldarrikatzen dira, ez da egiten errelatorik. Piztiaren krudelkeria, mendeku gosea, humanitate eza salatzen da, piztiak lokartuko duelakoan. Baina piztiak badaki bere indarra bere errelatoa dela eta ez du hori zaintzarik gabe utziko. Uneoro erakutsi behar du bera dela lurralde hau ere konkistatu zuena eta gu mendeko garela, konkista eskubidea babesten dutela eurek egindako legeek, krudelkeria bere errelatoari nagusitasuna ematen dion tresna dela, piztia pizti izatea bermatzen duena. Piztia eroriko da errelatoa galtzen duenean, beste narrazioak berea zaharkitua uzten duenean, ez bihotza samurtzen zaionean.
Nabarralde SL · info@nabarralde.com · www.nabarralde.com · Tel. (34) 948 21 10 57 · Bidankoze kalea 3 · 31014 Iruñea NAFARROA · LG: NA-2449/2005 · ISSN. 1885-2181
Zuzendaria: Angel Rekalde Editorea: Olaia Aldaz Diseinua: Nabarralde
«8»
Laguntzaileak: Mikel Burgui, Iñigo Larramendi, José Joaquín Saldias, Ana Telletxea, Beñi Agirre, José Miguel Martínez Urmeneta, Iturralde Elkartea...
94. ZENBAKIA otsaila 2015
Nafarroa Euskal Herria da!
Angel Rekalde “Errare humanum est”. Errar es humano. No tan conocida es la segunda parte del dicho:“sed perseverare diabolicum”. Perseverar, diabólico.Ya que a estas alturas de la vida la creencia en el diablo no tiene demasiado predicamento, podemos echar mano de otra reflexión que se ajusta como un guante a esa tendencia bípeda a insistir una y otra veces en errores de los que nos suponíamos escarmentados: el hombre es el único animal que tropieza dos veces en la misma piedra. Entre tropiezos, esta divagación viene a cuento de esa iniciativa de la Diputación de Gipuzkoa de poner, en la frontera de malhechores que nos separa de la Alta Navarra, carteles de publicidad:“Iruñea, Leizaran... Euskal Herria. Basque Country’.
El problema es que ya hace muchos años ese mismo mensaje se gritó, con la mejor voluntad del mundo, y tuvo un efecto contraproducente: Nafarroa Euskadi da!
Para que haya menos dudas de lo que se pretende anunciar, el panel viene ilustrado con los escudos de los
territorios históricos. Es decir, Nafarroa es una parte, menor, del conjunto. Un resto desgajado, perdido, que habría que reinsertar en el conjunto que somos nosotros, los que lo tenemos claro. El problema es que ya hace muchos años ese mismo mensaje se gritó, con la mejor voluntad del mundo, y tuvo un efecto contraproducente: Nafarroa Euskadi da! Exactamente la misma cantinela; con la variación musical de que donde ponía Euskadi hoy ponemos Euskal Herria, porque somos más guays y nos distinguimos del PNV (pero, como se ve, no de aquella mentalidad). Hay que reconocer que el cartel de lugares de interés turístico está bien planteado en términos de publicidad. La primera condición, llamar la atención. Que no pase desapercibido. Si hace falta, levantar ampollas, que la altura de la polémica es proporcional al radio del círculo de su mancha extendida. No se le puede negar al autor la habilidad para meter cizaña y el gusto por la provocación.
Era previsible que la inmediata reacción de los navarreros sería la de poner el grito en el cielo. ¡Que vienen los vascos! Como si hubieran invocado a los muertos de una vieja batalla a una nueva cruzada... Encantados. Si hicieron su agosto con aquella versión de “... Euskadi da”, ahora se frotan las manos, a pocos meses vista de las elecciones, ante la perspectiva del filón. ¡A defender las fronteras! Ya nos imaginamos a la Barcina dando el mitin en la cuneta de la autovía, debajo del cartel. Ha sido el dibujante Oroz quien ha puesto los puntos sobre las íes con una viñeta que toma de la historia una precisión justificada. El mismo cartel, pero a la contra: “Donostia, Hondarribia, Malmasín, Durango... Reino de Navarra” Euskal Herria Nafarroa da, viene a decir. Es el mensaje de la Diputación guipuzcoana, el mismo, pero con los pies sobre la tierra, sobre la historia real de nuestro pasado. La historia, en efecto, nos da una perspectiva para entender (y
abordar) la realidad. Euskadi; Euskal Herria; Basque Country... todo ello ha sido Nafarroa. Una visión unitaria del país. La memoria ofrece una integración imaginaria en medio de una desvertebración nefasta. Un territorio. Una nación. Una historia. Un relato. Una narración que permite integrar espacios, voluntades y sensibilidades. Está claro que ahí tenemos un problema real, y que no acertamos a solucionarlo. En esa polémica mal planteada (ya lo advirtió Telesforo Monzón) nos volvemos a enredar en la división. En las posiciones ideológicas y mitológicas mal avenidas. En el ‘y tú más’. Ni el navarrerismo rancio, cunetero, ni el nacionalismo bizkaitarra derivado del imaginario vascongado, del Irurac bat de los caballeritos de Azkoitia, nos ofrecen un proyecto cívico, de futuro, integrador. Erasmo de Rotterdam decía en su “Elogio de la locura” que, sin cierto grado de estupidez, el ser humano no llegaría siquiera a nacer. ¿Es posible que sigamos naciendo?
Eman izena nabarkide izateko
Hazte socio de Nabarralde info@nabarralde.com · www.nabarralde.com · (34) 948 21 10 57 · Bidankoze kalea 3 · 31014 · Iruñea/Pamplona/Pampelune · NAFARROA-NAVARRA-NAVARRE · DLNA: 2449/2005 · ISNN 1885-2181
Izen - abizenak Nombre y apellidos: Helbidea / Dirección:
Herria / Población:
Posta kodea / Código postal:
Hizkuntza / Idioma:
E-mail:
Telefonoa / Teléfono:
Kutxa edo Bankua / Caja o Banco (12€): Kontu zenbakia / Nº de cuenta (20 dígitos):
Nafarroa, Euskal Herriaren ardatza / La conciencia navarra de Euskal Herria / Navarre, l’ Etat basque / Nafarroa, Euskal Herriaren ardatza / La conciencia navarra de Euskal Herria / Navarre, l’ Etat basque