BREVE HISTORIA DEL SUPREMO CONSEJO DE LA MASONERÍA VENEZOLANA.
Edgar Perramón Q.
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SUMARIO
1.- Introducción
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2.- Antecedentes de la fundación y re-fundación del Supremo Consejo, 4 1824-1840 3.- Soberanos Grandes Comendadores, 1824-2010/12
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4.- Los Grados 33 conferidos por Cerneau
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5.- Los fundadores del Supremo Consejo
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6.- Otros siete grandes servidores
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7.- Once personalidades se incorporan al Supremo Consejo
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8.- La universalidad masónica en el Supremo Consejo
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9.- Masones en el Panteón Nacional
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10.- Labor humanista de la Masonería Escocesa
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Caracas 2010 Segunda Edición Revisada
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1.- Introducción. Ocho años después del discurso que pronunció, en la Gran Logia de París, el 27 de diciembre de 1736, el padre espiritual de los altos grados, el barón escocés Andrés Miguel Ramsay (1686-1743), nació la Masonería Escocesa, en 1744, en el puerto francés de Burdeos, a orilla del río Garona y a 96 km. del Atlántico. Burdeos había sido, desde la Edad Media, un centro de notable actividad económica, particularmente merced al comercio de vino, azúcar y café entre Francia, África y las colonias americanas. Más tarde, por su importancia, Burdeos fue sede provisional del gobierno francés en 1870, 1914 y 1940. Ramsay, doctorado en la Universidad de Oxford y de alta versación en estudios teológicos, hacía derivar a la Orden únicamente de ese espíritu noble y solidario de los cruzados, punto de partida de la Masonería Escocesa. Las ocho cruzadas, sostenidas por los templarios y predicada por Urbano II en el año 1095, con el perdón de todos los pecados a aquellos que marcharan a oriente a defender a los peregrinos, se desarrollaron durante 175 años, precisamente entre 1095 y 1270. Su último Gran Maestro, Jacobo de Molay, acusado de hereje por Felipe IV, el Hermoso, y el Papa Clemente V, murió en la hoguera, en Paris, delante de Notre-Dame, a los 74 años, en la tarde del 18 de marzo de 1314. Las ideas de una Logia de Perfección en Burdeos en 1744, fecha que coincide con la fundación de la “Parfait Harmonie”, creada, probablemente, con el único propósito de conferir Grados Escoceses, por lo menos los Grados de Perfección, se extendieron a París, donde se fundó un Capítulo, de muy corta vida, llamado de Clermont, en 1754, con tres grados superiores al de Maestro y, luego, se fundó, también en París, el Consejo de Emperadores de Oriente y Occidente, llamado Rito de Perfección, en 1758, con 25 grados, incluidos los tres grados simbólicos. Al Consejo también se le llamó Gran Logia Soberana de San Juan de Jerusalén. El Rito de Perfección, que viajó a América, a Santo Domingo y a Jamaica, en brazos de Esteban Morín, en 1761, fue ampliado a 33 grados, en Kingston, Jamaica, por "Morín y, u, otros" en o alrededor de 1767, como señala el Informe Lindsay (4.9.1948) del Comité de Historia del Supremo Consejo del Grado 33 para la Jurisdicción Norte de los EE.UU. (Citerior, Santiago, N º 33-34, 35-36, 1953). 3
Más tarde se fundó, el 31 de mayo de 1801, en Charleston, Carolina del Sur, EU.UU., el primer Supremo Consejo del Rito Escocés Antiguo y Aceptado, bajo la legislación de las Grandes Constituciones del 1º de mayo de 1786 de Berlín, revisadas por la Convención de Lausanne, del 22 de septiembre de 1875. Este primer Supremo Consejo cambió su sede, en 1870, a Washington, D.C.
2.- Antecedentes de la fundación y re-fundación del Supremo Consejo, 1824-1840. En ese marco de la Masonería Escocesa, que comprende los Grados 4º al 33, se funda el Supremo Consejo del Grado 33 para la República de Venezuela el 24 de junio de 1824, conjuntamente con la Gran Logia de Venezuela. Eran tiempos en que la economía del país, de 785.000 habitantes, estaba orientada hacia la producción exportadora de cacao y café como punteros, tabaco, añil y cueros de reses y algunos otros productos de escasa cuantía. Desde 1824, el Supremo Consejo ha tenido 56 Soberanos Grandes Comendadores, en 69 períodos de poco más de tres años de promedio cada uno. La Masonería había llegado a Venezuela, con su pensamiento liberador y de avanzada, antes de 1824, a través de una Logia que formaron en 1797 los cuatro masones y profesores españoles, de la Logia “España” de Madrid, Juan Bautista Picornell, Manuel Cortés de Campomanes, José Lax y Sebastián Andrés, condenados y deportados un año antes por la monarquía a La Guaira y quienes iniciaron a José María España y Manuel Gual, los primeros mártires de la Masonería, y, probablemente, a don Simón Rodríguez. Otras raíces masónicas se encuentran en la Gran Reunión Americana de Londres (1798) y las Logias Lautarinas (1800-1823), que fueron sus sucursales en el proceso emancipador hispanoamericano, establecidas y animadas en Europa y América por el Precursor y notable inspirador de la Masonería, Generalísimo Francisco de Miranda. (Lautaro fue el indígena chileno que murió luchando cuando no cumplía 22 años, en 1557, y de quien le habló a su Maestro, Francisco de Miranda, su joven discípulo y futuro Libertador de Chile, Bernardo O¨Higgins, cuando tenía 20 años, en 1798, en 4
Londres. Lautaro ha sido inmortalizado en “La Araucana” el primer gran poema épico de la lengua castellana, escrito por Alonso de Ercilla y Zúñiga, en 1569). También hay más antecedentes de los primeros tiempos de la Masonería en Venezuela en las Logias “Perfecta Armonía” N º 74 de Cumaná (1811), “Patria” de Carúpano (1814) y “Concordia” de Angostura, hoy Ciudad Bolívar (1818), que funcionaron bajo la jurisdicción de Grandes Logias del exterior y a las que ingresaron numerosos patriotas venezolanos. Es posible que ya en 1808 funcionara en Pampatar una logia masónica, la Logia “San Juan de la Margarita”, no bien precisada todavía, en la Isla de Margarita. Después de fundados ambos altos cuerpos masónicos, aparecen registradas las primeras Logias simbólicas bajo la jurisdicción de la Gran Logia, con la incorporación de otras ya existentes: “Perfecta Armonía” Nº 74 de Cumaná (1811), “Protectora de las Virtudes” Nº 1 de Barcelona (1812), “Regeneradores” de Maracaibo (1812), “Patria” de Carúpano (1814), “Concordia” de Angostura (1818), “Unión” (1821) y “Fraternidad Colombiana” de Caracas (1823). La Logia “Patria” fue una Logia mártir, cuyos miembros, por su vocación independentista y libertaria, fueron ejecutados, al filo de una espada, el 25 de enero de 1815 y, ante la severa orden oficial de no ser inhumados, sus cuerpos se arrojaron en un cerro cercano. Bolívar se conmovió al comprobar el fanatismo realista en su emotiva visita de solidaridad el 1º de junio de 1816. Las Logias “Concordia”, “Fraternidad” y “Unión” jugaron un papel importantísimo en apoyo al sueño unitario e integrador de Bolívar de la Patria Grande Latinoamericana que los intereses particulares y contrarios de las oligarquías y fuerzas sociales cancelaron en 1830. Es un hecho que la Masonería, como vanguardia libertaria de su tiempo, contribuyó admirable y generosamente a proveer de Libertadores y Presidentes a la mitad de América del Sur, comenzando en el Caribe y finalizando en las lejanas punas heladas del Alto Perú, siempre con esa idea de la integración y la unidad latinoamericana. La presencia de la Masonería se encuentra en la Independencia de toda Hispanoamérica y, en el caso de Venezuela, en los acontecimientos del 19 de abril de 1810 y el 5 de julio de 1811 cuando se firma la Declaración de la Independencia. 5
Se podría decir que el Supremo Consejo de Venezuela dio sus primeros pasos el 21 de abril de 1824, con la presencia en Caracas del notable joyero e intelectual francés, de 61 años, Joseph Cerneau, quien era portador de una Carta-Patente del Supremo Consejo Unido para el Hemisferio Occidental, que él fundó en Nueva York en 1813. Este Supremo Consejo Unido, con sede en Nueva York, existió hasta 1867 cuando, legalizando lo suyo, se fusionó con el Supremo Consejo del Grado 33 de la Jurisdicción Norte de los Estados Unidos, también fundado en 1813, en Boston, y que, desde 1968, tiene su sede en Lexington, Massachusetts. El Supremo Consejo de Venezuela fue fundado en Caracas el 24 de junio de 1824 cuando el país tenía 766.100 habitantes- y su primer Soberano Gran Comendador y, a la vez, primer Gran Maestro de la Gran Logia de Venezuela, fue Diego Bautista Urbaneja Sturdy, un abogado barcelonés de 42 años, miembro de la Corte Suprema de Justicia, que luego habría de ser su Presidente (1843 y 1852-1853), Ministro de Hacienda (1830) y tres veces Vicepresidente de la República (1831, 1832 y 1847). Como el liderazgo político y masónico, no siempre separado, se vio absorbido, en esos 16 años, entre 1824 y 1840, por los acontecimientos del proceso independentista impulsado por la Masonería, el Supremo Consejo fue re-fundado el 10 de mayo de 1840, bajo la dirección del Soberano Gran Comendador José Antonio Páez Herrera, de 50 años, Presidente de la República en su segundo período constitucional (18391843). En 1840 Venezuela tenía 945.348 habitantes. La Gran Logia de Venezuela ya se había reactivado, dos años antes, el 9 de septiembre 1838, bajo la misma dirección del Gran Maestro Urbaneja Sturdy. “La misión de los Supremos Consejos -según la Convención de Lausana de 1875, en el párrafo 7º- es la de enseñar las doctrinas masónicas y dirigir sus acciones por la pureza de los principios”. A través de un armónico sistema de enseñanza, los Supremos Consejos profundizan gradualmente las enseñanzas del simbolismo para perfeccionar al Maestro Masón y procurar que su labor de "conducir, guiar e instruir", sea más sólida y eficiente en las Logias Simbólicas. La Masonería Escocesa es, pues, algo así como un curso de perfeccionamiento para Maestros para que éstos, a su vez, vuelvan a su cátedra en el 6
simbolismo con una mejor comprensión de sus deberes y con una mayor profundidad y eficiencia de su actividad docente. Sólo con estudio se adquiere la competencia de defender a la Orden con hechos, con palabras y con una acción ejemplarizadora. La Masonería Escocesa, como instituto de perfeccionamiento ético y Sociedad de Pensamiento, exalta las virtudes y los valores de solidaridad y justicia social, defiende los derechos humanos, los derechos al trabajo, la salud, la educación laica y el medio ambiente, procura elevar lo humano y mostrar las ideas y el camino que conducen hacia la renovación y hacia un futuro de mayor participación y progreso. En esta tarea, ya no cabe preguntar si el masón es creyente o no creyente, porque la Orden no es una iglesia más en la disputa por el mundo de los fieles, sino cabe luchar por la justicia social a través del trabajo individual que cada uno haga en la sociedad. Frente a los nuevos desafíos sociales, en que no están permitidas las desesperanzas, la Masonería, surgida de las raíces mismas de nuestra historia, sabe contribuir y blindar con sus ideales cada momento para dar al hombre y, en general, al pueblo y a la sociedad toda un mejor destino común. 3.- Soberanos Grandes Comendadores, 1824-2010/12. De los 56 Soberanos Grandes Comendadores del Supremo Consejo de Venezuela, entre los períodos de 1824 a 2010/12, siete fueron Presidentes de Venezuela en los períodos constitucionales que se señalan: José Antonio Páez Herrera en tres períodos 1830-1835,1839-1843 y 1861-1863; Carlos Soublette Jerez en dos períodos: 18351839 y 1843-1847; José Gregorio Monagas Burgos en 1851-1855; Manuel Felipe Tovar y Tovar en 1860-1861; Juan Crisóstomo Falcón Zavarce en 1863-1868; Raimundo Andueza Palacio en 1890-1892; y Joaquín Crespo Torres en dos períodos, 1884-1886 y 1892-1898. De los 56 Soberanos Grandes Comendadores, tres fueron Vice-Presidentes de la República: Diego Bautista Urbaneja Sturdy en 1831, 1832 y 1847; Santos Michelena Rojas en 1841 y 1843; y Manuel Ezequiel Bruzual en 1868. De los 56 Soberanos Grandes Comendadores, doce están en el Panteón Nacional: Urbaneja, Páez, Soublette, Blanco, Aranda, Avendaño, Silva, Monagas (José Gregorio), Echeandía, Falcón, Bruzual y Andueza. 7
En la larga lista de las máximas autoridades de la Masonería Escocesa Venezolana, se encuentran igualmente nombres de destacados políticos, profesionales, académicos, empresarios, comerciantes y dirigentes sociales que cubren los 69 períodos que se indican: 1.- Diego Bautista Urbaneja Sturdy 2.- José Antonio Páez Herrera 3.- Manuel López de Umerez 4.- Santos Michelena Rojas 5.- Felipe Esteves Acevedo 6.- Carlos Soublette Jerez 7.- José Ángel Freire 8.- Santiago Mariño Carige 9.- José Félix Blanco 10.- Francisco Arand 11.- Francisco de Paula Avendaño López 12.- Justo Briceño Otálora 13.- José Laurencio Silva Flores 14.- Manuel Cala 15.- José Gregorio Monagas Burgos 16.- Manuel Felipe Tovar y Tovar 17.- Manuel María Echeandía 18.- Pedro Gual Escandón 19.- Francisco Conde 20.- José de Austria Reina 21.- Juan Crisóstomo Falcón Zavarce 22.- Manuel Ezequiel Bruzual 23.- Isaac José Pardo 24.- José Félix Herrera 25.- Pedro E. Hernández 26.- Fernando Arvelo 27.- Rafael Martínez 28.- José Rafael Pacheco 29.- Pedro Medina 30.- Raimundo Andueza Palacio 31.- Juan Tomás Pérez 32.- Wenceslao Carías Pérez 33.- Joaquín Crespo Torres 34.- José Sebastián Gabazut
1824-1840 1840-1842 1842-1843 1845-1846. 1846-1847 1847-1848 1848-1849 1849-1850 1850-1851 1851-1852 1852-1853 1853-1854 1854-1855 1855-1856 1856-1857 1857-1858 1858-1859 1859-1860 1860-1862 1862-1864 1864-1865 1865-1966 1867-1868 1868-1871 1873-1877 1877-1881 1881-4882 1882-1883 1882-1885 1885-1888 1888-1891 1891-1894 1894-1898 1902-1905 8
1843-1845
1866-1867
1871-1873
1898-1902
35.- Máximo Crescentino 36.- Emilio Conde Flores 37.- Rafael Villavicencio Cerdeña 38.- Domingo Antonio Coronil 39.- Manuel Porras Ortíz 40.- Agustín Beroes 41- Felipe S. Maduro 42.- Ricardo Vanegas A. 43.- Federico Roig Febles 44.- Jacobo Bendahan Chocrón 45.- Nicanor García Baptista 46.Buenaventura Briceño Belisario 47.- Celestino B. Romero 48.- Waldemar Hait 49.- Carlos Rodríguez-Jiménez 50.- Pedro Ruíz Paz-Castillo 51.- Miguel Tejeda Rodríguez 52.- César Obdulio Iriarte Aliz 53.- Edito Acevedo 54.- Domingo Vega de Armas 55.- Rafael Regadiz Amaro 56.- Miguel Cabrera Manzo
1905-1909 1909-1912 1912-1912 1913-1916 1916-1919 1923-1925 1931-1934 1934-1935 1935-1940 1950-1955 1955-1960 1960-1965 1965-1970 1970-1973 1976-1979 1979-1982 1985 1985-1991 1994-1997 2000-2003 2003-2006 2006-2009
1919-1923 1925-1930
1940-1945
1945-1950
1973-1976 1982-1985 1991-1994 1997-2000 2009-2010
4.- Los Grados 33 conferidos por Cerneau. El 21 de abril de 1824, Joseph Cerneau -dos meses antes de la fundación del Supremo Consejo del Grado 33 y de la Gran Logia el 24 de junio de 1824-confirió, en Caracas, el Grado 33 a diversas personalidades, en su mayoría, como dice el ilustre historiador y masón venezolano Mario Briceño Perozo, adalides de la Independencia ("Los Masones y la Independencia. La obra de Carnicelli", Boletín del Centro de Historia del Estado Falcón, Año XXXV, N º 34, Dic. 1988). Cerneau viajó desde Nueva York a Caracas en los primeros días de abril de 1824 en calidad de Gran Comisionado Especial del Supremo Consejo Unido del Grado 33 para el Hemisferio Occidental para agrupar a los miembros de las Logias que trabajaban, en distintas ciudades del país, bajo los auspicios de Grandes Logias del exterior, y constituir un solo Cuerpo Masónico, rector de todas las actividades masónicas que se realizaban en el país para darles mayor unidad y eficacia. 9
Cerneau había vivido en Santo Domingo y Cuba y, desde 1806, residía en Nueva York. Como representante del Rito de Perfección de 25 grados, fundado en París en 1758, fundó muchas logias y en todas ellas dejó el recuerdo de un masón fervoroso e incansable. Más tarde, como miembro del Supremo Consejo Unido de Nueva York fundó numerosos Cuerpos Escoceses que cumplieron una valiosa tarea al servicio de los ideales masónicos. En 1827, a los 64 años, regresó desde Nueva York con su familia a Francia, donde murió entre los años 1841 y 1845, alrededor de los 80 años. La nómina de los setenta y siete Grados 33 conferidos por Cerneau, en el mismo orden en que se encuentran en el Archivo Blanco-Azpúrua, Tomo I, fol. 298 y vto., del Archivo General de la Nación, es la siguiente: 1.2.3.4.5.6.7.8.9.10.11.12.13.14.15.16.17.18.19.20.21.22.23.24.-
Diego Bautista Urbaneja Sturdy. Francisco de Paula Santander Omaña. Carlos Soublette Jerez Andrés Narvarte. Francisco de Paula Avendaño López. Lino de Clemente Palacios. Manuel M. Quintero. José de España. Vicente del Castillo. José Toribio Iribarren. José María Pelgrón Pardo. José Manuel Landa. Francisco Vicente Parejo. José Gabriel Lugo Freites. Santiago Mariño Carige. José Manuel Morales. Rafael Lugo. Francisco Conde. José Manuel Olivares. José Cordero. Carlos Cornejo. José María de Rojas. Antonio Febres Cordero. José María del Castillo. 10
25.26.27.28.29.30.31.3233.34.35.36.37.38.39.40.41.42.43.44.45.46.47.48.49.50.51.52.53.54.55.56.57.58.59.60.61.62.63.-
Andrés Caballero. Tomás Yanez. Juan M. Barry. George Woodberry. Leonardo Giménez. José Tadeo Monagas Burgos. Diego Vallenilla. 3 Manuel Maneiro. José Francisco Bermúdez Figuera. José Antonio Páez Herrera. Juan Bautista Arismendi Subero. Manuel López de Umerez. Francisco Aranda. José de Austria Reina. Felipe Esteves Acevedo. José Remigio Martín. Ramón Landa. José María Lovera. Gerónimo Pompa. José Manuel Rivero. Manuel Cala. Juan José Conde. Francisco Carabaño Judas Tadeo Piñango Mellado Juan Bautista Monserrat. José María Ponce. José Santiago Rodríguez. Simón Bolívar Palacios. Juan Escalon Valentín Osío. José Antonio Gonell. Joaquín Telechea. Manuel Vicente Hui5 Juan Mainó. Carlos Padrón. José Grau. Miguel Vargas. Esteban Escobar. Manuel Muñoz 11
64.65.66.67.68.69.70.71.72.73.74.75.76.77.-
Rafael Urdaneta Farías. Ramón Machado. Agustín Armario. Santos Michelena Rojas. José De Lima. Pedro Gual Escandón Andrés Torrellas. Pablo D. Micheli. Fernando Peñalver Pedro Briceño Méndez. Rafael Hermoso Pedro Herrera. Matías Padrón. Juan Bautista Dalla-Costa.
Cerneau concedió, además, en abril de 1824, los siguientes Grados a destacadas figuras de la vida venezolana: Once Grados 32 a Pedro Guillén, Miguel Borrás, José Ángel Alamo, Vicente Michelena, José Ángel Freyre, Bartolomé Manrique, Antonio María Brito, José María Llamozas, Miguel Rivas, José María Lanz y Francisco Hernáiz; Ocho Grados 30 a José S. Plaza, José Francisco Machado, Ramón Plaza, Nicolás Mayor, José María Muñoz, José Miguel Rodríguez, Antonio Soublette y Juan Hurtado, y concedió, también, treinta y tres Grados no especificados a Vicente Michelena, José Freyre, José Teodoro, José Maitín, Antonio Leocadio Guzmán, Roberto Basalo, Ramón Lozano, Simón Hernández, Pedro Vaamonde, Félix Blanco, Remigio Armas, Francisco de Paula Pardo, Juan Bautista Mijares, Antonio Valero, Luis Domingo Correa, Francisco Conde, hijo, Ramón Yépez, Luis Delpech, José Antonio González, Francisco Ignacio Carreño, Jerónimo Márquez, Ramón Pérez, Alejo Betancourt, Pedro Tomás Siso, Donald Queznedy, Pedro Manuel Tirado, Francisco Rivas Galindo, George Corzer, José María Velásquez, Domingo Briceño y Briceño, Mauricio Coba, Ramón Sosa y Francisco Parejo, hijo Es decir, el Comisionado Especial del Supremo Consejo Unido de Nueva York concedió un total de 129 Grados. 12
En la lista no está Sucre, pero para 1811, señala Briceño Perozo, se le citaba en la logia “Perfecta Armonía” de Cumaná y durante su estada en Bolivia, de la que fue su Presidente (1825-1828), mantuvo lazos de viva hermandad con los masones de Chuquisaca, hoy Sucre. 5.- Los fundadores del Supremo Consejo. Los veinte fundadores del Supremo Consejo de Venezuela que en 1824 recibieron el Grado 33 a través del Gran Comisionado Especial, Joseph Cerneau, fueron figuras esclarecidas de Venezuela y todas ellas dejaron un testimonio de patriotismo y espíritu libertario y progresista. De esta directiva del Supremo Consejo están, en el Panteón Nacional, siete ilustres venezolanos: José Antonio Páez Herrera, Diego Bautista Urbaneja Sturdy, Carlos Soublette Jerez, Tomás José Sanabria Meleán, Juan José Conde, Judas Tadeo Piñango Mellado y Francisco de Paula Avendaño López. En la misma directiva figuran, además, cuatro Alcaldes de Caracas: Carlos Cornejo, José Toribio Iribarren, José María Pelgrón y Gerónimo Pompa y dos miembros del Cabildo: José de Austria Reina y Vicente del Castillo. Su nómina es la siguiente, siguiendo el orden de los cargos que ocuparon: 1.
Diego Bautista Urbaneja Sturdy, hijo de Barcelona, Estado Anzoátegui, de 42 años en junio de 1824, abogado, presidente de la Corte Suprema de Justicia (1843 y 1852-1853), y tres veces Vicepresidente de la República en 1831, 1832 y 1847. Primer Soberano Gran Comendador entre 1824 y 1840 cuando se funda el Supremo Consejo el 24 de junio de 1824, conjuntamente con la Gran Logia. Primer Gran Diputado (1840-1842) cuando se refunda el Supremo Consejo, el 10 de mayo de 1840. Urbaneja Sturdy asumió de nuevo el cargo de Soberano Gran Comendador en el período 1843-1845.Falleció en Caracas, a los 74 años, en 1856.
2.
José Antonio Páez Herrera, hijo de Curpa, Estado Portuguesa, de 34 años en junio de 1824, general, tres veces Presidente de la República en los períodos 1830-1835, 1839-1843 y 1861-1863. 13
Primer Soberano Gran Comendador cuando se re-funda el Supremo Consejo, 16 años más tarde, el 10 de mayo de 1840, con muy pocos cambios respecto de la directiva anterior, la del 24 de junio de 1824. Falleció en Nueva York, a los 83 años, en 1873. 3.
4.
Carlos Soublette Jerez, hijo de La Guaira, general, senador, diplomático, de 34 años cuando recibe el Grado 33 en 1824, Presidente de la República en los períodos 1837-1839 y 1843-1847. Uno de sus hijos, Evaristo Soublette Buroz fue, más tarde, Gran Maestro de la Gran Logia de Chile entre 1877 y 1881.Segundo Gran Diputado.Falleció en Caracas, a los 81 años, en 1870. Manuel López de Umerez, abogado, Fiscal de la Corte Superior de Justicia de Caracas, de honda concepción republicana. Lugar Teniente Comendador (Vicepresidente)
5.- Tomás José Sanabria Meleán, abogado, a los 28 años era miembro de la Corte de Justicia del Distrito Norte de Caracas, Rector de la Universidad Central de Venezuela, en 1841, y Ministro del Interior y de Justicia, en 1847. No figura entre los Grados 33 conferidos por Cerneau, el 21 de abril de 1824. Lo recibió poco después e integró la directiva de 1840. Gran Ministro de Estado (Orador). Falleció en Caracas, a los 54 años, en 1850. 6.- José María Pelgrón Pardo, hijo de Caracas, de 43 años, educador y periodista, formó parte del grupo de los revolucionarios del 19 de abril de 1810, secretario del Congreso Nacional, Alcalde de Caracas y colaborador de los diversos periódicos de la época. Gran Secretario General y Gran Canciller. Falleció en Caracas, a los 64 años, en 1845. 7.- Francisco Conde, hijo de Caracas, de 44 años, general, uno de los fundadores de la Gran Colombia (1819-1830), Gobernador de Guayana en 1821, hoy Estado Bolívar, y de Barinas, en 1823. Gran Tesorero. Falleció en Caracas, a los 62 años, en 1842. 14
8.-
Carlos Cornejo, Alcalde de Caracas en 1824. Primer Gran Experto.
9.- Gerónimo Pompa, hijo de Guatire, escritor ("El amor casado",1850) y botánico ("Medicamentos Indígenas",1868), Alcalde de Caracas en 1826, diputado, autor del primer proyecto para establecer institutos industriales en el país en 1845 y promotor del primer Ateneo de Caracas en 1852. Se incorpora a la directiva del Supremo Consejo en su re-fundación en 1840. Segundo Gran Experto. Falleció en Caracas, a los 70 años, en 1880. 10.- Vicente del Castillo, abogado, miembro del Cabildo de Caracas en 1821-1822, patriota esclarecido. Primer Gran Maestro de Ceremonias. 11.- José María Lovera, abogado, alto funcionario gubernamental, de sólidas ideas republicanas. Segundo Gran Maestro de Ceremonias. 12.- José María Ponce, en 1810 se alistó en las filas patriotas, Comandante en varias batallas en Barquisimeto en 1813, Carúpano, Ocumare de la Costa y El Juncal en 1816 y alto funcionario de gobierno. Tercer Gran Maestro de Ceremonias. Falleció en Caracas en 1852. 13.- José de Austria Reina, hijo de Caracas, general, miembro del Cabildo de Caracas en 1821-1822, Ministro de Guerra en 1858 y uno de los primeros historiadores militares ("Bosquejo de la historia militar de Venezuela"). Cuarto Gran Maestro de Ceremonias. Falleció en Caracas, a los 72 años, en 1863. 14.- Juan José Conde, hijo de Caracas, general, Jefe del Estado Mayor en la Campaña de Coro, primer Comandante en la Batalla de Carabobo el 24 de junio de 1821, miembro de la Corte Marcial de Caracas, Gobernador de Guayana, hoy Estado Bolívar, e historiador militar ("Proclamas de Bolívar", Caracas, 1842). Primer Capitán de Guardias (Guarda Templo). Falleció en Caracas, a los 55 años, en 1848. 15
15.- Felipe Esteves Acevedo, hijo de Maiquetía, activo luchador en el movimiento revolucionario de 1810, Comandante General de la Marina en el Orinoco en 1818 y Ministro de la Corte Marcial en 1829. Segundo Capitán de Guardias (Guarda Templo). Falleció en Caracas, a los 70 años, en 1849. Los cinco miembros sin cargos de dicho Supremo Consejo fueron los siguientes: 16.- José Gabriel Lugo Freites, hijo de San Felipe, Estado Yaracuy, de 35 años cuando recibió el Grado 33 en 1824, en 1810 se sumó al movimiento revolucionario iniciado en Caracas, general, Comandante General de Occidente en 1821 y 1822, Comandante de La Guaira en 1824 y 1830, Ministro de la Corte Marcial en 1842 y senador. Falleció en Caracas, a los 79 años, en 1868. 17.- José Manuel Morales, ex Gobernador y Administrador General de Correos del Departamento de Venezuela durante la República de la Gran Colombia (18191930). 18.- José Toribio Iribarren, diplomático y Alcalde de Caracas, en 1826. 19.- Judas Tadeo Piñango Mellado, hijo de Caracas, general, entregado a la causa patriota, uno de los vencedores de la Batalla de Carabobo del 24 de junio de 1821, y Gobernador de Mérida. Recibió, a los 34 años, el Grado 33, en 1824. Falleció en Coro, Estado Falcón, a los 58 años, en 1848. 20.- Francisco de Paula Avendaño López, hijo de Cumaná, Estado Sucre, general, Gobernador de Cumaná en 1838 y Guayana, hoy Estado Bolívar, en 1843; Ministro de Guerra y Marina en 1845-1847 y Director de la Academia de Matemáticas de Caracas en 1848-1850. Introdujo en Venezuela el arte de la litografía en los años 1823-1825 y son notables sus ensayos, en ese período, con el pintor caraqueño Juan Lovera Arechederra (1776-1841), el pintor de los próceres ("El 19 de abril de 1810",1835; "El 5 de julio de 1811",1837; "Simón Bolívar",1827; "José María Vargas",1836). Falleció en La Guaira, a los 78 años, en 1870.
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6.- Otros siete grandes servidores. En la nómina a quienes, a través de Cerneau, se otorgó, en abril de 1824, el Grado 33, se encuentran otras siete figuras patriotas que no ocuparon cargos directivos en el Supremo Consejo, pero que cumplieron un servicio único a la Patria y a la Masonería. Todos ellos se encuentran en el Panteón Nacional: 1.- Simón Bolívar, en abril de 1824, entonces de 41 años, se encontraba en Trujillo, Perú, recuperándose, todavía, de una grave enfermedad sufrida en Pativilca, a unos 200 km. al norte de Lima, razón por la cual no estuvo presente en la ceremonia. No hay certeza que haya recibido más tarde tal distinción. Bolívar ingresó a la Masonería, a los 21 años, en Cádiz, en su segundo viaje a Europa, en enero de 1804, ya viudo de María Teresa Toro, que había fallecido, después de ocho meses de matrimonio, en San Mateo, Estado Aragua, a 91 km. de Caracas, en enero de 1803. En 1805 y 1806, Bolívar asistía regularmente a la Logia San Alejandro de Escocia de París, el primer y tercer miércoles de cada mes, donde recibió sus Grados de Compañero y Maestro. Entre los integrantes de esa Logia, figuraba Bolívar como Oficial español y su nómina se conserva en la Biblioteca Nacional de París. Su vida masónica activa fue breve, dado su combate por la libertad y la justicia, pero supo dejar en su obra y pensamiento huellas profundas e indelebles registradas en sus grandes Documentos: Manifiesto de Cartagena, 1812, Carta de Jamaica, 1815, y Discurso de Angostura, 1819, en sus 10.000 documentos, 2.052 cartas y 193 proclamas. El 3 de diciembre de 1814 Bolívar fue excomulgado por un edicto de los gobernadores del arzobispado de Bogotá, los canónigos Juan Bautista Pey y José Domingo Duquesne y el 4 de agosto de 1829 fue calificado de liberal y ateo por la Sagrada Congregación de Negocios Eclesiásticos Extraordinarios del Vaticano, en su sesión 116. Bolívar, fue el creador de la Gran Colombia, con Venezuela, Colombia y Ecuador unidos y, más tarde, Perú y Bolivia, el sueño de la Patria Grande 17
Latinoamericana, con más de doscientas lenguas indígenas, que se extinguió con su vida en 1830. Su escenario físico fue de más de 5 millones de Km.2, equivalente a 23 países de Europa o al doble de los desplazamientos de Napoleón, participó en 79 batallas y más de 400 acciones de armas y cabalgó 64.000 Km. en 25 años de lucha y sacrificio. Falleció en Santa Marta, Colombia, a los 47 años, en 1830. 2.- Santiago Mariño Carige, de 36 años entonces, hijo del Valle del Espíritu Santo de la Isla de Margarita, libertador de oriente, general y Jefe del Estado Mayor del Ejército Libertador en Carabobo, el 24 de junio de 1821, Intendente de Maturín en 1827 y Ministro de Guerra y Marina en 1830. Dejó importantes trabajos sobre la Masonería. Su "Relación Histórica de la Masonería en Venezuela" (Imprenta de V. Espinal, Caracas, 1852), es un valioso estudio crítico sobre el papel y responsabilidad de la Masonería en la sociedad. Falleció en La Victoria, Estado Aragua, a los 66 años, en 1854. 3.- Rafael Urdaneta Farías, hijo de Maracaibo, también de 36 años en 1824, vigoroso paladín de la libertad, general de División a los 27 años en 1815, Intendente del Zulia en 1824, Ministro de Guerra y Marina en 1828-1829 y 1843, último Presidente de la Gran Colombia en 1830 y Gobernador de Guayana, (Estado Bolívar), en 1842. Mientras cumplía funciones diplomáticas, encomendadas por el Presidente Soublette, falleció en París, a los 57 años, en 1845. 4.- Juan Bautista Arismendi Subero, hijo de La Asunción de la Isla de Margarita, general, senador, Gobernador de Caracas y notable luchador por Margarita, Barcelona y Guayana. En 1814 recibió la condecoración de la Orden de los Libertadores de Venezuela. Falleció en Caracas, a los 71 años, en 1841. 5.- José Tadeo Monagas Burgos, hijo de Maturín, de 40 años en 1824, general, Gobernador de Barcelona y dos veces Presidente de la República, en los 18
períodos 1847-1851 y 1855-1858. Decretó, el 3 de abril de 1849, la abolición de la pena de muerte y estableció las nuevas bases de las concesiones ferroviarias y de los convenios de comercio y navegación. Falleció en El Valle, Caracas, a los 83 años, en 1868. 6.- Lino de Clemente Palacios, hijo de Caracas, de 47 años en 1824 cuando recibe el Grado 33, Ministro de Marina y Guerra de la Junta Suprema de Gobierno del 19 de abril de 1810, firmó el Acta de la Independencia (1811), vicealmirante de brillante trayectoria militar, diplomático y primer Ministro de la Defensa que tuvo Venezuela. Falleció en Caracas, a los 67 años, en 1834. 7.- Francisco Aranda, hijo de Caracas, de 26 años en 1824, abogado, senador, diplomático, autor del Código de Procedimiento Civil de 1836, Ministro de Relaciones Exteriores en 1842-1843, Presidente del Congreso Nacional en 1847-1851 y Ministro del Interior en 1859. Falleció en Caracas, a los 75 años, en 1873. 7.- Once personalidades se incorporan al Supremo Consejo. Más tarde se incorporaron al Supremo Consejo otras once personalidades, que hoy también están en el Panteón Nacional: 1. José Francisco Bermúdez Figuera, hijo de San José de Aerocuar -parroquia nominada hoy Municipio Andrés Mata, en el Estado Sucre-, general y luchador en Carabobo y Puerto Cabello, Intendente de Cumaná en 1823. Falleció, trágicamente, en Cumaná, a los 49 años, en 1831. 2.- José Félix Blanco, hijo de Caracas, general, combatiente en las filas del Ejército Libertador, Ministro de Guerra y Marina en 1837 y capellán del Ejército patriota de occidente. A él se debe el documento relativo a la visita de Cerneau en 1824, que hoy se conserva en el Archivo General de la Nación. Falleció en Caracas, a los 90 años, en 1872. 19
3.- José Laurencio Silva Flores, hijo de El Tinaco, Estado Cojedes, general, combatiente del Ejército Libertador en Venezuela, Colombia y Perú y notable ejemplo de lealtad. Acompañó al Libertador Simón Bolívar en sus últimos momentos en la quinta San Pedro Alejandrino en Santa Marta, el 17 de diciembre de 1830, y es uno de sus albaceas testamentarios. Una camisa suya reemplazó a la que tenía rasgada el Libertador. Falleció en Valencia, Estado Carabobo, a los 82 años, en 1873. 4.-
José Gregorio Monagas Burgos, hijo de Aragua de Barcelona, Estado Anzoátegui, Presidente de la República, en el período de 1851-1855 y quien promulga la abolición de la esclavitud, el 24 de marzo de 1854. Falleció en Maracaibo, a los 63 años, en 1858.
5.- Antonio Leocadio Guzmán Agueda, hijo de Caracas, fundador del Partido Liberal (1840) y de "El Venezolano", periódico de agitación democrática que circuló entre agosto de 1840 y mayo de 1845, diplomático y Vicepresidente de la República en 1849. Falleció en Caracas, a los 83 años, en 1884. 6.- Tomás Lander Acal, hijo de Caracas, patriarca y apóstol del liberalismo venezolano, senador, vehemente luchador por la justicia y la libertad de pensamiento y cultos. Su obra dispersa está recopilada en el "Pensamiento Político Venezolano del Siglo XIX". Falleció en Caracas, a los 58 años, en 1845, cuando estaba siendo postulado como candidato liberal a la Presidencia de la República para las elecciones de 1846. 7.- Juan Crisóstomo Falcón Zavarce, hijo del Hato "Tabe", en el Estado que, en su honor, lleva su nombre, Presidente de la República en el período 1863-1868. A fines de abril de 1868 renunció a la Presidencia. Falleció en Fort de France, capital de Martinica, a los 50 años, en 1870. 8.-
Manuel Ezequiel Bruzual, hijo de Santa Marta, Colombia, general, Ministro de Guerra y Marina y Vicepresidente de la República en 1868. Falleció en Willemstad, capital de Curazao, a los 36 años, en 1868. 20
9.- Juan de Dios Monzón, hijo de Trujillo, Estado Trujillo, médico y político, Ministro de Crédito Público en 1877, Gobernador de Coro en 1885 y Vicepresidente de la República en 1882 y 1884. Falleció en Caracas, a los 60 años, mientras ejercía la Vicepresidencia de la República, en 1884. 10.- Francisco Linares Alcántara, hijo de Turmero, Estado Aragua, general, gobernante de apertura política, elegido Presidente de la República para el bienio 1877-1879. Falleció en La Guaira, en el ejercicio de la Presidencia de la República, a los 53 años, en 1878. Los otros dos Presidentes que murieron cuando desempeñaban el cargo fueron José Tadeo Monagas Burgos, en El Valle, Caracas, el 18 de noviembre de 1868, a los 84 años; y Juan Vicente Gómez Chacón, en Maracay, el 17 de diciembre de 1935, a los 78 años. 11.- Raimundo Andueza Palacio, hijo de Guanare, Estado Portuguesa, médico y abogado, senador, Presidente del Congreso en 1876, Ministro de Relaciones Exteriores en 1877 y 1899-1900 y Presidente de la República en el período 1890-1892. Falleció en Caracas, a los 53 años, en 1900. 8.- La universalidad masónica en el Supremo Consejo. Entre quienes recibieron en Caracas, en abril de 1824, el Grado 33, figuran, también, como testimonios de la universalidad masónica, por sobre nacionalidades, creencias y razas, dos españoles, Juan Bautista Monserrat y Juan M. Barry; dos colombianos, Francisco de Paula Santander Omaña y José María del Castillo y Rada; un norteamericano, Juan Daniel Danells; un inglés, George Woodberry; un italiano Juan Bautista Dalla-Costa, y un brasileño, José Ignacio Abreu e Lima. Juan Bautista Dalla-Costa nació en Génova, Italia, llegó a Ciudad Bolívar en 1814, donde casó con Isabel Soublette, hermana del general Carlos Soublette Jerez, futuro Presidente de Venezuela (1837-1839, 1843-1847). Desde su llegada al país contribuyó decididamente a la causa patriótica y en abril de 1824 recibió el Grado 33. 21
Su hija Teresa contrajo matrimonio con Leandro Miranda Andrews (1804-1886), el hijo mayor del Precursor, Generalísimo Francisco de Miranda (1750-1816), fundador de la Gran Reunión Americana, en 1798, en Londres, con sus sucursales las Logias Lautarinas, establecidas en Europa y América para la emancipación continental, y uno de los grandes inspiradores de la Masonería Venezolana. Leandro falleció a los 82 años en París y Francisco, el otro hijo del Generalísimo, murió a los 25 años en Cerinza, Colombia. Su hijo, Juan Bautista Dalla-Costa Soublette (1823-1894), fue un distinguido diplomático y hombre público. Fue tres veces Gobernador de Guayana (Estado Bolívar). Promulgó el primer Código de Minas y fue un adelantado en materia de instrucción pública, obligatoria y gratuita. Representó a Venezuela ante el Gobierno de Estados Unidos en torno a diversos convenios. Al igual que su padre, recibió, más tarde, el Grado 33. El general brasileño José Ignacio Abreu e Lima, fue ayudante del Ejército Libertador, fiel y leal amigo de Bolívar, con quien participa en numerosas batallas. Servidor incansable de la Masonería, funda la Logia “Unión” de Caracas en 1821 y trabaja fervorosamente por la causa libertaria de Venezuela, que le distinguió con las más altas condecoraciones. Abreu e Lima murió, en 1869, a los 75 años, en su tierra natal de Pernambuco, donde precisamente Venezuela ha querido renovar su gratitud perpetuando su nombre en una gran refinería. En su lecho de muerte, la iglesia le condenó por ser defensor de la libertad de cultos y luego le negó su sepultura. 9.- Masones en el Panteón Nacional. El Panteón Nacional fue construido por el tres veces Presidente de Venezuela y distinguido miembro de la Masonería Antonio Guzmán Blanco e inaugurado el 28 de octubre de 1875. El 11 de enero de 1876, por decreto presidencial, son trasladados a dicho recinto, los restos de los próceres de nuestra Independencia. Guzmán Blanco hizo trasladar al Panteón Nacional los restos de Bolívar, el 28 de octubre de 1876. 22
Dos años antes, en 1874, había inaugurado, en la antigua Plaza Mayor, convertida en Plaza Bolívar, la réplica de la estatua ecuestre del Libertador, obra del gran escultor italiano Adamo Tadolini, y erigida, quince años antes, en Lima, en 1859. En el Panteón Nacional se encuentran los restos de 140 ilustres venezolanos que han dado brillo a la Patria y, entre ellos, 40 masones: Lisandro Alvarado Marchena, Raimundo Andueza Palacio, Francisco Aranda, Juan Bautista Arismendi Subero, Francisco de Paula Avendaño López, Andrés Bello López (cenotafio), José Francisco Bermúdez Figuera, Andrés Eloy Blanco Iturbe, Rufino Blanco Fombona, José Félix Blanco, Simón Bolívar Palacios, Luis Brión Detrois, Manuel Ezequiel Bruzual, Juan José Conde, Lino de Clemente Palacios, Manuel María Echeandía, Juan Crisóstomo Falcón Zavarce, Antonio Leocadio Guzmán Agueda, Tomás Lander Acal, Francisco Linares Alcántara, Santiago Mariño Carige, Francisco de Miranda Rodríguez (cenotafio), José Gregorio Monagas Burgos, José Tadeo Monagas Burgos, Juan de Dios Monzón, Daniel Florencio O'Leary Burke, José Antonio Páez Herrera, Juan Antonio Pérez Bonalde, Judas Tadeo Piñango Mellado, Simón Rodríguez, José Tomás Sanabria Meleán, José Laurencio Silva Flores, Carlos Soublette Jerez, Antonio José de Sucre Alcalá (cenotafio), Diego Bautista Urbaneja Sturdy, José María Vargas Ponce y Ezequiel Zamora Correa. El Presidente Guzmán Blanco decretó, en 1875, la repatriación de los restos del Presidente de Venezuela (1860-1861) y Soberano Gran Comendador, Manuel Felipe Tovar y Tovar (1857-1858) y su solemne inhumación en el Panteón Nacional, pero tal decreto todavía no se ha cumplido. El Presidente Tovar, hijo de Caracas, fue un destacado político, filántropo y humanista que cumplió una obra relevante y patriótica, desde los días de la Junta Suprema de 1810, de la cual fue uno de los dos co-Presidentes. Con su tío Martín Tovar Ponte, donó los terrenos para la Colonia Tovar y El Jarillo. En su gobierno constitucional de sólo trece meses, tuvo particular preocupación e interés por la educación y el equilibrio social. El Presidente Tovar fue el primer Mandatario elegido por voto directo y secreto del país, en abril de 1860, y sus restos reposan todavía en el cementerio de Epinay, en las afueras de París, donde falleció, de un ataque cardíaco, a los 63 años, en 1866. 23
10.- Labor humanista de la Masonería Escocesa. La Masonería Venezolana, como institución filosófica, ética e iniciática, basada en el sentimiento de la fraternidad, la solidaridad y la justicia social, cumple, desde el 24 de junio de 1824, una activa labor humanista y de progreso al servicio del país. A través de los Cuerpos Escoceses distribuidos en el Distrito Federal y los 23 Estados del país y, a través de los Cuerpos que funcionan, bajo su jurisdicción, en Aruba, territorio autónomo del Reino de los Países Bajos, el Supremo Consejo trabaja para extender sus ideales libertarios, de paz, solidaridad y justicia social. La Masonería Escocesa al proclamar la defensa de los valores morales y el fortalecimiento de las tradiciones patrióticas, culturales y espirituales, busca, a través de los suyos, promover una sociedad más participativa, más justa y humana, particularmente en un momento en que cunde la injusticia y la pobreza se extiende por el mundo con su inmensa carga de pesadumbre. La Masonería Escocesa renueva en esta hora su plena confianza en la capacidad creadora de Venezuela y de los suyos con la esperanza de hacer algo más por el país, su progreso, bienestar y soberanía. E. P. Q. Caracas, 2010.
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