
4 minute read
DIscovery Precast: Planta de prefabri
Ampliemos la mirada de la industrialización hacia las empresas que realmente pueden hacer cambios y saben que su decisión de transformación provocará el impacto que les permitirá transcender en el escenario actual y los futuros. Opinión de Rodrigo Sciaraffi a, Director Regional de Discovery Precast y Director Comercial de Pretam.
Advertisement
Una planta de prefabricados considera una estructura de organización e instalaciones con líneas de producción y equipamiento que permiten lograr altos niveles de productividad. Todas las etapas desde la arquitectura, ingeniería, instalación de moldaje, armadura, insertos, recesos y rasgos, distribución, colocación y consolidación del hormigón hasta el curado de las piezas prefabricadas, continuando la carga, estiba, traslado, montaje y construcción, se desarrollan bajo un sistema de gestión organizado con procedimientos, protocolos y responsabilidades de todos los participantes junto a coordinaciones con cada equipo de obra. Todo lo anterior es realizado por un equipo humano cuyas competencias en producción serial y condiciones de seguridad, por la continua manipulación de piezas de alto tonelaje, son muy relevantes: es un grupo de técnicos y profesionales “seteados” con una mirada industrializada. La trazabilidad del proceso es total y garantiza al cliente que el producto y servicio contratado cumplan a cabalidad todas las especificaciones del proyecto.
Transformación de la persona y la industria
Nacido en la construcción tradicional, me he convertido en un “profesional industrializado”. Son muy pocos, los que nacen industrializados y prefabricadores, y como la mayoría, he vivido obras enfrentándome a las desviaciones rutinarias en los procesos, que el ecosistema del sector construcción siempre les asignaba erradamente, un grado y connotación base de “inamovible”. Todo esto siempre con una explicación, y más aún, con el impedimento de no disponer tiempo para invertir en subsanarlas porque había que avanzar - ya estábamos atrasados - , y de todas maneras, se iba y podía arreglar en el camino. La competencia de la mano de obra, programación de entrega de materiales, proceso constructivo, coordinaciones internas e inspecciones, autorizaciones, planos aptos para construir, RFI, el libro de obra o las condiciones climáticas; son generalmente los aspectos cuya incidencia en cada proyecto son calificadas cuantitativamente para explicar porque las obras no cumplen con el presupuesto y el plazo de construcción.
Los temas y conversaciones que duelen
Si un estudio señalaba plazo de 10 meses y USD 10 mill (venta a mandante; consideremos 3% de utilidad), terminando en 13 meses, vendiéndose en USD 12 mill con una utilidad de 0,4%, las razones de esta variación y pérdida de valor son claras según el flanco:


1 El estudio se hizo en forma errada: errores de obra, personal, menos asignación de recursos, etc., 2 El mandante presenta un proyecto “apto para fabricar” en forma incompleta y además, con condiciones contractuales que exigen a la constructora una visión futurista y 3D de todo el proceso tomando como base la información disponible. Esto, inevitablemente, genera modificaciones y aumentos de obras que se valorizan durante el mismo contrato a valores que no alcanzan a interpretar el desfase y reagrupación de recursos, en contraste a como se hubiese hecho desde el origen. Sumado a esto que la presentación de obras y cobros adicionales se sobre valoran tratando de atender pérdidas de partidas por el impacto de desviaciones y el mandante al mismo tiempo las minimiza en forma exagerada… generando un círculo vicioso que da como resultado que apenas se alcancen a cubrir los gastos generales tanto de la propia obra como de oficina central, pero que permite a las empresas seguir flotando.
Nuestro futuro “on line”
Los quiero invitar a que consideren ahora un proyecto integrado desde el inicio con tecnología 3D y escenarios virtuales de trabajo, es decir, olvídense de la carta Gantt 2D sino que en una en tercera dimensión. Ahora visualicen un proyecto que desde la etapa de licitación es explicado paso a paso como se va construir, cuales son los recursos necesarios de este y cuáles serían los plazos para desarrollarlo. Al tener toda esa información, el mandante recibe una planificación y programación de trabajo virtual detallada en la cual “se ve obligado” a generar un proyecto apto para construir “de verdad”.
¿Es mucho pedir?
De ninguna manera, esto ya existe como tecnología y otorga certeza a los proyectos disminuyendo drásticamente desviaciones, que como hemos señalado anteriormente, sólo significan pérdida de rentabilidad. Como la causa raíz lleva años tratando de dilucidarse, y sólo queda la pérdida de productividad y el bajo nivel de rentabilidad de los proyectos, hay que avanzar raudamente en implementar digitalización en la construcción.
¿Quién debe pagar la digitalización de procesos en la construcción?
Las constructoras deben analizar cuánto han dejado de ganar, y con una fracción de dicha pérdida pueden formar un equipo completo para abordar sus proyectos desde la etapa temprana con tecnología e innovación.
¿Y qué tiene que ver todo esto con el uso de prefabricados de hormigón?
El uso de prefabricados de hormigón es una metodología constructiva que otorga altísima certeza de plazo y costo, mayor estándar de calidad y durabilidad, y un grado de sustentabilidad superior al ciclo de vida del proyecto. Por eso la constructora tiene que comenzar a pensar en transformarse en una “constructora industrializada”. Antes era un proceso que podía implementar en el tiempo según el nivel de competitividad del mercado, con pequeñas intervenciones como pilotos, y proyectando su nivel de efectividad en un escenario que nadie aceptaba el proceso de cambio hacia la industrialización de procesos; ahora es inevitable porque el escenario con COVID-19 te obliga a reformular absolutamente todo. N&C
Comenta en Twitter
