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Al Servicio de la Comunidad

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Rol Preventivo

Rol Preventivo

junto a sus instituciones estaba en constante progreso y transformación de acuerdo a las necesidades del Estado y su gobierno del momento, en este sentido, se observa cómo desaparece un organismo policial como los ya mencionados para dar paso a otro, como el caso de la (Disip), la cual trae directrices ya conocidas y ejecutadas por policías desaparecidas como “La Sagrada” de Gómez, la (SN) de Pérez Jiménez, y la (Digepol) de Betancourt: son atribuciones que ya se conocían, son policías que se nutren de nociones tradicionalistas, de los rezagos del pasado gomecista, incluso.

En tiempos de Pérez Jiménez y Rómulo Betancourt, se retoma la perspectiva del gobierno de Eleazar López Contreras (19361941): la lucha en contra de las ideas anticomunistas (la democracia anticomunista), por ello es que mantenemos que pasado aproximadamente más de dos décadas, las policías post-pérezjimenistas se conservan en estado de hibernación al sostener principios que provenían desde los primeros años que se instaura el gobierno de Juan Vicente Gómez (1908-1936), recuérdese que es bajo esta administración gubernamental que se acuña como primicia constitucional el inciso sexto anticomunista, esto trae como consecuencia el prescindir de métodos nuevos desde el punto de vista institucional y social, amén de

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preservar esos ideales que manaban de la Venezuela rural.

En ese sentido, la Disip nace en el seno del gobierno de Rafael Caldera, en 1969, quien de acuerdo a lo planteado por Urbaneja (2007) dice que: “Durante el gobierno de Caldera culminó el proceso de pacificación que se había venido adelantando durante el gobierno de Leoni. Con ella se lograba la definitiva reincorporación a la vida política legal del PCV y del MIR”. (p.50), el gobierno socialcristiano tuvo unas características diferentes a sus antecesores como el de Rómulo Betancourt y Raúl Leoni, quienes luego del pérezjimenismo asumieron la responsabilidad de dirigir los destinos del país luego de la Junta Militar de 1958, pero el aparato policial seguía con sus viejas prácticas represivas.

A todo esto, quedaba por definir el papel del Estado con respecto a la seguridad de la nación, y habiendo disminuido considerablemente la existencia de focos guerrilleros y aumento de participación de los partidos políticos en el fortalecimiento de la democracia liberal, las fuerzas represivas del

Estado se abocaron a la búsqueda de un nuevo enemigo interno, no ya político. En este estado de cosas, la violencia institucional

toma nuevos tintes, ahora menos políticos, pero mucho más generalizada. (p.141) (ibídem)

El primer gobierno de Caldera en Venezuela, de acuerdo con Urbaneja, por su integración a la vida civil de los revolucionarios de los partidos de izquierda, y el aparato policial de entonces tuvo que redimensionar sus formas de operar para cumplir con tareas aparentemente diferentes, pero la fuerza pública mantenía su represión contra el único que siempre ha sido criminalizado por el Estado, el investigador se refiere al pueblo, las políticas de intervención de Caldera, crearon una fuerte resistencia por parte de la sociedad.

Ante el olvido del prometedor programa económico propuesto por el gobierno, [de Caldera] se localizó un nuevo enemigo interno: todo un nuevo contingente que reclamaba la solución de sus conflictos, no ya políticos, sino sociales y económicos y hacia ellos irá enfocada la nueva escala de represión (p.142) (ibídem).

En consecuencia, el nuevo enemigo del gobierno venezolano para 1969, como ya se mencionó, es la sociedad, la cual venía ya despertando y haciendo conciencia de sus realidades locales y de todo lo que acontecía en el país, en consecuencia era necesario

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