h
Sistema Inmunolรณgico Vร CTOR OMAR DAVID TARRILLO SILVA
Introducción:
Históricamente, inmunidad significa protección frente a la enfermedad infecciosa. Las células y moléculas responsables de la inmunidad constituyen el sistema inmune y la respuesta global y coordinada tras la introducción de sustancias extrañas es la respuesta inmunitaria. Constantemente, nuestro organismo está expuesto a microorganismos (bacterias, virus, hongos y parásitos) que se encuentran en la piel, boca, vías respiratorias, intestino, incluso en los ojos. Muchos de estos agentes son capaces de originar enfermedades graves si invaden los tejidos más profundos. Además, estamos expuestos en forma intermitente a otras bacterias y virus del ambiente (distintos de los que suelen encontrarse en nuestro organismo) que pueden causar enfermedades mortales como neumonía, fiebre tifoidea, gangrena gaseosa, etc. El sistema inmune del hombre representa la culminación de un largo proceso evolutivo que se inicia en peces primitivos, como la lamprea, en los cuales se observan los primeros indicios rudimentarios de mecanismos de defensa frente a sustancias extrañas a su organismo. A lo largo de la escala animal se observa el progresivo desarrollo de este sistema y su creciente complejidad funcional hasta llegar, en el caso del hombre, a una serie de funciones altamente desarrolladas, cuya finalidad primaria consiste en poder mantener la supervivencia de nuestro organismo en el medio hostil, representado por elementos biológicos nocivos con capacidad de producir enfermedad y muerte, en el que se desenvuelve nuestro ciclo vital. El sistema innato está presente desde el nacimiento y protege a un individuo de patógenos sin importar las experiencias, mientras que la inmunidad adaptativa se presenta sólo después de una infección o inmunización y por lo tanto es "adquirida" durante la vida.
El sistema inmunitario, sistema inmune o sistema inmunológico es aquel conjunto de estructuras y procesos biológicos en el interior de un ser vivo que le permiten mantener la homeostasis o equilibrio interno frente a agresiones externas, ya sean de naturaleza biológica (agentes patógenos) o físico-químicas (como contaminantes o radiaciones), e internas (por ejemplo, células cancerosas). El sistema inmunitario se encuentra compuesto por células que se encuentran en distintos fluidos, tejidos y órganos, principalmente: piel, médula ósea, sangre, timo, sistema linfático, bazo, mucosas. En la médula ósea se generan las células especializadas en la función inmune: neutrófilos, eosinófilos, basófilos, mastocitos, monocitos, células dendríticas y macrófagos; todas ellas se movilizan a través de la sangre y el sistema linfático hacia los distintos órganos. Se conocen 3 funciones: *Defensa: el sistema inmunológico va a contrarrestar la agresión de agentes extraños como bacterias y otros agentes. Eliminándolos o neutralizándolos. *Hemostasia: se encarga de mantener las estructuras y funciones es estado normal. Por ej. Las células que han envejecido y modificado su estructura y su función serán eliminadas. *Vigilancia: se encarga de detectar células anormales en el organismo y las va a tratar de eliminar rápidamente. Además mediante la autorregulación el sistema inmunológico va a dirigir y controlar la formación de los elementos defensivos del organismo. En el sistema inmunológico tenemos órganos centrales como la medula ósea, timo y órganos periféricos con el bazo, los ganglios y nódulos linfáticos. Los órganos centrales son los encargados de formar los elementos inmunológicos, mientras que los órganos periféricos son los reservorios de los elementos y células inmunológicas.
Inmunidad: Es la capacidad del organismo de resistir y defenderse de la agresión de agentes extraños a él. Confiere RESISTENCIA a un agente infeccioso específico. INMUNIDAD NATURAL: • ACTIVA: Se produce tras padecer una enfermedad infecciosa. En este caso, las células inmunitarias reconocen al microorganismo y mantienen una memoria inmunológica del mismo, por lo que ante una nueva exposición se pone en marcha una respuesta inmediata contra él mediante la liberación de anticuerpos específicos. La duración de este tipo de inmunidad es muy prolongada (incluso en algunos casos de por vida). • PASIVA: La inmunidad puede se conferida a un individuo transfiriéndole inmunoglobulinas por vía tras placentaria o por medio del calostro y la leche ,es aquella que los recién nacidos reciben de su madre. Les dura unos 6 meses de vida. INMUNIDAD ADQUIRIDA: • ACTIVA: es cuando nosotros creamos la respuesta inmune inyectando al antígeno. (vacunación). • PASIVA: Se produce tras inyectar a un individuo inmunoglobulinas (anticuerpos) provenientes de un animal o de otra persona inmunizada activamente contra determinada enfermedad. Mediante la inoculación de estos anticuerpos se consigue una protección inmediata del sujeto, pero como dichas Ig inoculadas son destruidas progresivamente, este tipo de inmunidad es de corta duración , es decir tienen una utilidad transitoria frente a determinada enfermedad ( Ej suero anti ofidicos) Se transmite por Ac o linfocitos preformados en otro huésped •Ventaja principal es la disponibilidad inmediata de grandes cantidades de Ac •Desventaja, corto periodo de vida de los Ac y posibles reacciones de hipersensibilidad si se administran Ac de otras especies
Existen dos líneas de defensa: la defensa primaria o inespecífica y la secundaria o específica. Defensa primaria o inespecífica: comprende las barreras que no permiten la entrada de materiales nocivos al cuerpo. Dentro de ello se incluyen aquellas defensas del organismo, cuya respuesta es la misma, con independencia del tipo de microorganismo que intenta colonizarnos. Para invadir el cuerpo de los animales, los microorganismos deben atravesar su piel o bien penetrar por alguno de sus orificios naturales. La piel de los mamíferos es una barrera mecánica gracias a su grosor, al proceso de queratinización y a la descamación de las capas externas. Además la secreción de las glándulas sebáceas y el sudor determinan la existencia de un pH ácido. Por añadido, la flora bacteriana de la piel impide el asentamiento y desarrollo de otros microbios que se depositan sobre ella. En las aberturas naturales, como boca, ano, vías respiratorias, urogenitales y digestivas, las barreras defensivas son las secreciones mucosas que recubren los epitelios, En la saliva, en la secreción lacrimal y en la secreción nasal, existe una enzima, la lisozima; en el esperma la espermina, ambas con función bactericida. La secreción ácida del epitelio vaginal y de los conductos digestivos, forman un ambiente desfavorable para el desarrollo de microorganismos. En las mucosas respiratorias, los microbios y las partículas extrañas quedan atrapados en el mucus y son eliminados mediante el movimiento ciliar de las células epiteliales, por la tos y el estornudo.
Defensa secundaria oespecífica: Las defensas específicas se basan en el reconocimiento de los determinantes antigénicos localizados en la superficie del germen patógeno o en las toxinas producidas por éstos. Una vez que el sistema inmunitario reconoce la naturaleza del antígeno, lanza contra él dos tipos de respuestas, que actúan de modo secuencial: La respuesta humoral, basada en la síntesis de anticuerpos por los linfocitos B . En el plasma sanguíneo , se encuentran un tipo particular de globulinas que tienen la capacidad de reaccionar específicamente con las partículas extrañas ( antígenos ), anulando su posible efecto patógeno. Se las denomina genéricamente inmunoglobulinas o anticuerpos. Las células B están involucradas en la respuesta inmune humoral, o serologica. Producen inmunoglobulinas La respuesta celular , mediada por linfocitos T, que destruyen los microorganismos portadores de dicho antígeno, y las células propias si están infectadas por ellos. Los linfocitos B y los linfocitos T son clases importantes de linfocitos y son derivadas de las células madre en la médula ósea. Las células T están involucradas en la respuesta inmunitaria mediada por células, o sea destruyen los Antigenos. Tanto los B como los T son linfocitos morfológicamente iguales pero funcionalmente distintos.
Características de la Respuesta Inmune: • • • • • •
Diversidad Memoria : secundaria . más rápida, eficiente y de mayor magnitud. Especialización: es especial y diferente para cada Ag Autolimitada: solo se auto regula Tolerancia: reconoce lo propio y lo ajeno Especificidad
Aspectos estructurales del sistema inmune: Límites: piel y mucosas. El cuerpo humano está protegido del medio por una barrera mecánica continua, formada por una membrana cutánea (la piel) y membranas mucosas. La piel es el órgano más grande del cuerpo y la principal barrera física entre el organismo y el medio exterior. Además, la piel es un participante activo en la defensa del huésped, ya que tiene la capacidad de generar y apoyar las reacciones inmunitarias locales debido a que cuenta entre sus componentes con linfocitos y macrófagos cutáneos. En su composición, consta de una capa epidérmica separada de la dermis subyacente por un membrana basal. La mayoría de los microorganismos no sobreviven sobre la piel debido a la acción inhibitoria directa del ácido láctico y los ácidos grasos de las secreciones sudoríparas y sebáceas, y el pH ácido que generan. Al igual que la piel, los epitelios mucosos representan barras entre los ambientes interno y externo y, por lo tanto, constituyen una importante primera línea de defensa. El moco secretado por las membranas mucosas que revisten las superficies internas del organismo también actúa como barrera protectora que bloquea la adherencia de las bacterias a las células epiteliales. Elementos del sistema inmune El sistema inmune está constituido por una serie de componentes, que en conjunto interactúan para llevar a cabo la función de protección del cuerpo humano. Los principales elementos del sistema inmune son cé- lulas, barreras físicas y químicas y sustancias antimicrobianas. Células del sistema inmune Las células del sistema inmune son los leucocitos o glóbulos blancos. Se llaman así porque que no poseen color propio, por carecer de proteínas coloreadas. A diferencia de los hematíes y las plaquetas, los leucocitos son células completas provistas de membrana, citoplasma y núcleo, en las que es posible distinguir al microscopio diversos tipos morfológicos, cada uno de los cuales posee una actividad concreta dentro del común denominador de la función defensiva que les es propia.
Los leucocitos que normalmente se encuentran en la sangre periférica son de tres tipos: 1. Granulocitos o polimorfonucleares. Los polimorfonucleares (también llamados granulocitos, por los grá- nulos que poseen en el citoplasma), tienen el núcleo segmentado y, según las características tintoriales de sus gránulos, se dividen en: * Neutrófilos * Eosinófilos * Basófilos El tamaño de los granulocitos neutrófilos oscila entre 12 y 14 mm y su núcleo está formado por cromatina madura y densa. Con la tinción panóptica (May- Grünwald- Giemsa), el citoplasma presenta un color ligeramente rosado y está ocupado por una fina granulación puntiforme de color neutro. Los granulocitos eosinófilos tienen 10-12 mm de diámetro y poseen el núcleo típicamente bilobulado. El citoplasma de color ligeramente azulado está ocupado por gránulos gruesos, que con la tinción panóptica. 2.
Los linfocitos son las células que específicamente reconocen y responden a los antígenos extraños. Son células de tamaño pequeño (6-8 mm), aunque en ocasiones pueden ser un poco más grandes (linfocitos grandes: 10-25 mm). El núcleo nunca presenta segmentación y es redondeado, con una discreta zona invaginada. El citoplasma suele ser escaso, basófilo (de color azul claro) y forma una delgada banda perinuclear. En ocasiones puede presentar una fina granulación citoplasmática azurófila. Los linfocitos constan de diferentes subgrupos que difieren en sus funciones y productos proteicos, aunque todos ellos parecen morfológicamente similares. Una clase de linfocitos son los linfocitos B, así llamados porque se observó en las aves que maduraban en un órgano denominado bolsa de Fabricio. La segunda clase principal de linfocitos son los linfocitos T, cuyos precursores provienen de la médula ósea y después migran y maduran en el timo (de allí su nombre). Los linfocitos T se subdividen en poblaciones funcionalmente distintas, siendo las mejor definidas las células T colaboradoras y las células T citotóxicas.
3. Los monocitos son las células de mayor tamaño que circulan en la sangre periférica normal. Tienen un diámetro aproximado de 14-20 mm. El núcleo casi siempre es reniforme y está formado por una cromatina laxa y de aspecto ondulado (cromatina “peinada”). El citoplasma es amplio, de color gris pálido y posee una granulación azurófila muy fina y abundante. Se mantienen muy poco tiempo en la sangre (10-20 horas) antes de salir de los capilares hacia los tejidos. Allí se agrandan y se transforman en los macrófagos tisulares. En esta forma pueden vivir meses o incluso años. Pueden activarse por una gran variedad de estí- mulos y pueden adquirir diferentes formas. Algunos llegan a tener un citoplasma abundante y se llaman células epiteloides, por parecerse a las epiteliales. Y también pueden fusionarse y formar células gigantes multinucleadas.
Barreras físicas y químicas: Piel y mucosas y sus secreciones: Además de formar una pared protectora, la piel y las mucosas operan mediante otros mecanismos inmunes adicionales, las barreras mecánicas y químicas: • Sebo cutáneo: contiene agentes inhibidores de patógenos, ácidos grasos, y generan un pH ácido. • Mucosa: la viscosidad impide el movimiento de los microorganismos y de otras partículas extrañas atrapadas en el mucus. Así, por ejemplo, en la mucosa respiratoria, mediante mecanismos como el movimiento de los cilios, la tos y los estornudos, pueden ser eliminados al exterior. •Enzimas: proteínas capaces de destruir patógenos • Secreciones (sudor, lágrimas, saliva): acción de dilución y lavado; además contiene enzimas que inhiben el crecimiento microbiano. Muchos de los líquidos corporales secretados contienen sustancias bactericidas, como el ácido en el jugo gástrico, la espermina y el zinc en el semen, la lactoperoxidasa en la leche y la lisozima en las lágrimas, secreciones nasales y la saliva. Sustancias antimicrobianas Diferentes sustancias del cuerpo humano participan y colaboran con la defensa del organismo, como los anticuerpos, las citoquinas, el complemento, y el complejo mayor de histocompatibilidad. La interacción del antígeno con los anticuerpos de membrana de las células B constituye la fase de reconocimiento de la inmunidad humoral. Los anticuerpos también se producen en una forma secretada por la progenie de células B que se diferencia en respuesta a la estimulación antigénica. Estos anticuerpos secretados se unen al antígeno y desencadenan varias de las funciones efectoras del sistema inmunitario.
Órganos del Sistema inmunológico: Los órganos involucrados en el sistema inmunológico se denominan órganos linfoides. Afectan el crecimiento, el desarrollo y la liberación de linfocitos (cierto tipo de glóbulo blanco). Los vasos sanguíneos y los vasos linfáticos son partes importantes de los órganos linfoides, debido a que transportan los linfocitos hacia y desde diferentes partes del cuerpo. Cada órgano linfoide desempeña una función en la producción y la activación de los linfocitos. Los órganos linfoides incluyen los siguientes: •
Adenoides. Dos glándulas ubicadas en la parte posterior del conducto nasal.
•
Médula ósea. El tejido suave y esponjoso que se encuentra en las cavidades óseas.
•
Ganglios linfáticos. Pequeños órganos con forma de frijol que se encuentran por todo el cuerpo y se conectan a través de los vasos linfáticos.
•
Vasos linfáticos. Red de canales por todo el cuerpo que transportan linfocitos hacia los órganos linfoides y el torrente sanguíneo.
•
Placas de Peyer. Tejido linfático en el intestino delgado.
•
Bazo. Órgano del tamaño de un puño ubicado en la cavidad abdominal.
•
Timo. Dos lóbulos que se unen por delante de la tráquea, detrás del esternón.
•
Amígdalas. Dos masas ovaladas en la parte posterior de la garganta.
Características del Sistema Inmunológico:
Sistema inmunitario innato
Sistema inmunitario adaptativo
La respuesta no es específica.
Respuesta específica contra patógenos y antígenos.
La exposición conduce a la respuesta máxima inmediata.
Demora entre la exposición y la respuesta máxima.
Inmunidad mediada por células y componentes humorales.
Inmunidad mediada por células y componentes humorales.
Sin memoria inmunológica.
La exposición conduce a la memoria inmunológica.
Presente en casi todas las formas de vida.
Presente solo en vertebrados mandibulados.
Tanto la inmunidad innata como la adaptativa dependen de la habilidad del sistema inmunitario para distinguir entre las moléculas propias y las que no lo son. En inmunología, las moléculas propias son aquellos componentes de un organismo que el sistema inmunitario distingue de las substancias extrañas. Al contrario, las moléculas que no son parte del organismo, son reconocidas como moléculas extrañas. Un tipo de moléculas extrañas son los llamados antígenos , son substancias que se enlazan a receptores inmunitarios específicos y desencadenan una respuesta inmunitaria.
Regulación fisiológica: Las hormonas pueden modular la sensibilidad del sistema inmunitario. Por ejemplo, se sabe que las hormonas sexuales femeninas estimulan las reacciones tanto del sistema inmunitario adaptativo como del innato. Algunas enfermedades autoinmunes como el lupus eritematoso afectan con mayor frecuencia a las mujeres, y su comienzo coincide a menudo con la pubertad. Por el contrario, andrógenos como la testosterona parece que deprimen al sistema inmunitario.117 Otras hormonas, como la prolactina y la hormona de crecimiento o vitaminas como la vitamina D, parece que también regulan las respuestas del sistema inmunitario. Se piensa que el descenso progresivo en los niveles de hormonas con la edad, pudiera ser parcialmente responsable del debilitamiento de las respuestas inmunitarias en individuos de edad avanzada. A la inversa, algunas hormonas son reguladas por el sistema inmunitario, sobre todo la actividad de la hormona tiroidea. El sistema inmunitario se ve potenciado con el sueño y el descanso, mientras que resulta perjudicado por el estrés. Las dietas pueden afectar al sistema inmunitario; por ejemplo frutas frescas, vegetales y comida rica en ciertos ácidos grasos favorecen el mantenimiento de un sistema inmunitario saludable. Asimismo, la desnutrición fetal puede causar una debilitación de por vida del sistema inmunitario. En las medicinas tradicionales, se cree que algunas plantas pueden estimular el sistema inmunitario y ciertos estudios así lo han sugerido, aunque su mecanismo de acción es complejo y difícil de caracterizar.
Trastornos de la inmunidad humana: El sistema inmunitario es un complejo notablemente eficaz que incorpora especificidad, inducibilidad y adaptación. No obstante, a veces se producen fallos que pueden agruparse, de forma genérica, dentro de las tres siguientes categorías: inmunodeficiencia, autoinmunidad e hipersensibilidad.
Inmunodeficiencias: La inmunodeficiencia ocurre cuando uno o más de los componentes del sistema inmunitario quedan inactivos. La capacidad del sistema inmunitario de responder a patógenos y enfermedades es reducida tanto en los niños como en los ancianos, y la respuesta inmunitaria empieza a entrar en declive a partir de aproximadamente los cincuenta años de edad, debido a la inmunosenescencia. (es una disminución progresiva de la respuesta inmune que afecta a todos los componentes del sistema inmunológico). En los países desarrollados, la obesidad, el alcoholismo y el uso de drogas son causas habituales de una función inmunitaria pobre. Sin embargo, la malnutrición es la causa más habitual de inmunodeficiencia en los países en desarrollo. Se asocia una dieta carente de suficientes proteínas con deficiencias en la inmunidad celular, la actividad del complemento, el funcionamiento de los fagocitos, las concentraciones de anticuerpos IgA y la producción de citocinas. La deficiencia de nutrientes concretos como hierro, cobre, zinc, selenio, vitaminas A, C, E y B6, y ácido fólico (vitamina B9) también reducen la respuesta inmunitaria.Además, la pérdida del timo a una edad temprana a causa de una mutación genética o la extirpación quirúrgica resulta en una grave inmunodeficiencia y una gran vulnerabilidad a las infecciones. La inmunodeficiencia puede ser heredada o adquirida.26 La enfermedad granulomatosa crónica, en que los fagocitos tienen una capacidad reducida de destruir patógenos, es un ejemplo de inmunodeficiencia heredada o congénita. El sida y algunos tipos de cáncer causan una inmunodeficiencia adquirida.
Autoinmunidad Las respuestas inmunes exageradas abarcan el otro extremo de la disfunción inmunitaria, particularmente las enfermedades autoinmunes. Aquí el sistema inmunitario falla en distinguir adecuadamente lo propio de lo extraño y ataca a partes del propio organismo. En circunstancias normales, muchas células T y anticuerpos reaccionan con péptidos del propio organismo. Existen, sin embargo, células especializadas (localizadas en el timo y en la médula ósea) que participan en la eliminación de linfocitos jóvenes que reaccionan contra antígenos propios, para prevenir así la autoinmunidad.82 Las reacciones autoinmunes pueden desencadenarse de varias maneras: Una sustancia corporal que, por lo regular, abarca un área específica y es liberada en la circulación general; y en consecuencia, se encuentra escondida en el sistema inmunitario.
La alteración de una sustancia corporal. El sistema inmunitario responde a una sustancia extraña —antígeno— que parece tener las mismas características a una sustancia natural del cuerpo e involuntariamente procede a atacar tanto las sustancias del cuerpo como las extrañas. El mal funcionamiento de las células que controlan la producción de anticuerpos.
Hipersensibilidad La hipersensibilidad es una inmunorespuesta que daña los tejidos propios del cuerpo. Está dividida en cuatro clases (Tipos I-IV) basándose en los mecanismos involucrados y el tiempo de desarrollo de la reacción hipersensible. El tipo I de hipersensibilidad es una reacción inmediata o anafiláctica, relacionada con alergias. Los síntomas van desde un malestar suave hasta la muerte. El tipo I de hipersensibilidad está mediado por la inmunoglobulina E, que es liberada por mastocitos y basófilos. El tipo II de hipersensibilidad se produce cuando los anticuerpos se ligan a antígenos localizados sobre las células propias del paciente, marcándolas para su destrucción. También recibe el nombre de hipersensibilidad dependiente de anticuerpos o citotóxica y es mediada por anticuerpos de tipo IgG e IgM. Los inmunocomplejos (agregados de antígenos, proteínas del complemento, y anticuerpos IgG e IgM ) depositados en varios tejidos desencadenan la hipersensibilidad de tipo III. La hipersensibilidad de tipo IV (también conocida como "hipersensibilidad de tipo retardado") generalmente tarda entre dos y tres días en desarrollarse. Las reacciones de tipo IV están implicadas en muchas enfermedades autoinmunes e infecciosas, pero también incluyen dermatitis de contacto. Estas reacciones son mediadas por las células T, monocitos y macrófagos. A continuación, hábitos que pueden dañar su sistema inmune.
Enfermedades del sistema inmunológico: A todos los seres vivos pueden atacarlos agentes causantes de enfermedades. Incluso las bacterias, tan pequeñas que un millón de ellas cabrían en la cabeza de un alfiler, tienen sistemas de defensa contra las infecciones por virus. Este tipo de protección se hace más sofisticado conforme los organismos se hacen más complejos.
• SIDA (síndrome de inmunodeficiencia adquirida): El virus de la inmunodeficiencia humana (VIH) causa el SIDA. Este virus ataca al sistema inmunitario y deja al organismo sin defensas contra las infecciones. Las bacterias comunes, los hongos levaduriformes, los parásitos y los virus que no suelen provocar enfermedades serias en personas sanas pueden provocar enfermedades mortales en las personas con SIDA. Sólo se transmite a través de la sangre, el semen, las secreciones vaginales y la leche materna normalmente. Hay otros métodos de transmisión (aunque es muy raro qe suceda con estos): una lesión accidental con una aguja infectada, inseminación artificial por un semen donado infectado y a través de trasplantes de órganos con órganos infectados. No se propaga por un abrazo, picaduras de mosquitos, participación en deportes, tocar cosas que antes las a tocado otra persona infectada. Las personas que tienen más facilidad en que se contagien por el SIDA son: -Drogadictos que comparten agujas para inyectarse drogas. -Bebés nacidos de madres con VIH que no recibieron la terapia para VIH durante el embarazo -Los compañeros sexuales de personas que participan en actividades de alto riesgo (como el uso de drogas inyectadas o el sexo anal).
• LUPUS ERITEMATOSO: El lupus eritematoso es un a enfermedad que afecta a los tejidos y hace que se inflame el tejido conjuntivo, debido a la union de anticuerpos a las celulas del organismo El lupus puede afectar cualquier parte del organismo, aunque los sitios más frecuentes son el corazón, las articulaciones, la piel, los pulmones, los vasos sangineos, el higado, los riñones (órgano que se ve afectado con más frecuencia) y el sistema nervioso. El lupus se suele encontrar en Asia y en África, afecta 9 veces mas a la mujer que al hombre. Las primeras manifestaciones de la enfermedad se observan entre los 15 y 45 años de edad. Aunque hasta el momento no hay una cura, los síntomas se tratan principalmente con dosis bajas de corticosteroides, inmunodepresores y antipalúdicos como la hidroxicloroquina. En Europa, Estados Unidos y Canada, la expectativa de vida al cabo de 10 años es de 90%, al cabo de 20 años de un 78%.
• ANEMIA: La anemia es una enfermedad de la sangre, consecuencia de una alteración de la sangre y la disminución de glóbulos rojos que condiciona uan concentracion baja de hemoglobina ( una proteína de la sangre). La anemia se considera crónica si dura más de cinco meses. Los síntomas y signos de la anemia se correlacionan con su intensidad, su rapidez de instalación y el sitio donde se produce. Otros factores que intervienen en el cuadro sintomático son la edad, el estado nutritivo, cardiovascular y respiratorio. Los síntomas que se observan en la anemia aguda se denominan sindrome anemico, e incluyen: debilidad, palpitaciones y falta de aire con el esfuerzo. También puede incluir síntomas propios de otros sistemas, como cardiovascular, disnea de esfuerzo marcada, depresión, cambios de carácter como irritabilidad. En la pérdida súbita de sangre y en particular si es voluminosa, predominan los síntomas de inestabilidad vascular por hipotensión, contracción vascular, aparecen los signos del schock hipovolémico, tales como confusión, sudoración, y taquicardia.
• DENGUE: Es una enfermedad que es transmitida por el mosquito aedes aegypti, que se cría en el agua acumulada en recipientes y objetos en desuso. El dengue es causado por cuatro serotipos del virus del dengue: DEN-1, DEN-2, DEN-3 ó DEN-4 El origen del término Dengue no está del todo claro. Una teoría dice que deriva de la frase de la lengua swahili : "Ka-dinga pepo" Es más frecuente en niños y personas mayores. Las primeras epidemias fueron en África, Asia y América del Norte en 1781. CÍCLO: 1.-Un mosquito hembra ingiere sangre que tiene el virus del dengue. Este se replica en el epitelio intestinal, ganglios nerviosos, cuerpo graso y glándulas salivales del mosquito. 2.-El virus entra a la célula, la replicación se realiza en el citoplasma y es acompañada por la proliferación del retículo endoplasmatico liso y rugoso. 3.-Este ciclo en el mosquito dura de ocho a doce días dependiendo de las condiciones ambientales; una vez infectado, el mosquito permanece así toda su vida. A pesar de que no existe un medicamento específico para tratar esta enfermedad, actualmente si existe un tratamiento basado en las manifestaciones clínicas que ha demostrado reducir la mortalidad: Grupo A: Pacientes que pueden ser enviados a su casa porque no tienen alteración hemodinámica, no pertenecen a un grupo de riesgo ni tienen signos de alarma. El manejo se basa en el aumento de la ingesta de líquidos orales se recomienda para prevenir la deshidratación. Para aliviar el dolor y la fiebre es muy importante no tomar aspirinas y farmacos antiinflamatorios, ya que estos medicamentos pueden agravar la hemorragia asociada con algunas de estas infecciones, por sus efectos anticoagulantes, en su lugar los pacientes deben tomar paracetamol para el manejo de la fiebre y el dolor. Grupo B: Pacientes con signos de alarma y/o que pertencen a un grupo de riesgo. Dichos pacientes requieren hospitalización por al menos 72 horas para hacer reposición de líquidos endovenosos, monitoreo estricto de signos vitales, gasto urinario y medición de hematocrito Grupo C: Pacientes con diagnóstico de dengue grave, que requieren manejo en Unidades de Cuidado Intensivo.
• CÁNCER: El cáncer no es una enfermedad sino varias enfermedades. Hay más de 100 tipos de cáncer. El cuerpo está compuesto de muchos tipos de células. Estas células crecen y se dividen para producir nuevas células conforme el cuerpo las necesita. Cuando las células envejecen, mueren y éstas son reemplazadas por células nuevas. Pero a veces, este proceso ordenado de división de células se descontrola. Células nuevas se siguen formando cuando el cuerpo no las necesita. Cuando esto pasa, las células viejas no mueren cuando deberían morir. Estas células que no son necesarias pueden formar una masa de tejido. A ese tejido se le llama tumor. Hay dos tipos de tumores benignos o malignos: Los tumores benignos no son cancerosos. Generalmente se pueden extraer. En la mayoría de los casos, estos tumores no vuelven a crecer. Las células de los tumores benignos no se diseminan o riegan a otros tejidos o partes del cuerpo. Los tumores malignos son cancerosos. Las células en estos tumores pueden invadir el tejido a su alrededor y diseminarse a otros órganos del cuerpo. Cuando el cáncer se disemina de una parte del cuerpo a otra, se llama metástasis.
Referencias bibliográficas: •
• • • • •
F. Lozano Soto (2012). «Introducción al sistema inmunológico, sus principales elementos y la respuesta inmunitaria». En Farreras; Rozman. Medicina Interna (17 edición). Barcelona, España: Elsevier España. pp. 2453-2488. ISBN 9788480868969. Delvis, Peter J. (2016). «Panorama general del sistema inmunitario» (en inglés). Merck Sharp & Dohme Corp. Consultado el 21 de junio de 2016. Berkow, Roberts (2008). «16». Manual Merck: Home edition (2da. edición). Océano. p. 837. ISBN 84-494-1184-X. Abbas AK, Lichtman AH, Pober JS. Congenital and acquired immunodeficiences. En: Cellular and Molecular Immunology. 3 ed. New York: W.B. Saunders Company; 1997. p.439-62. Armann AJ. Immunodeficiencies diseases. En: Stites DP, Stobo JD, Fudenberg HH, Wells JV, eds. Basic & Clinical Immunology. California: Lange Medical Publications; 1984. p. 384-422. Julián Pérez Porto y Ana Gardey. Publicado: 2011. Actualizado: 2014.Definicion de: Definición de sistema inmune (https://definicion.de/sistema-inmune/)