Brenda, hija de familia tan bien que hasta estudió en EE UU, andaba libremente por el pueblo con faldita arriba de la rodilla y una sonrisa eterna... Pandilla con diez amigas formaba, Las Micas, divinas a los ojos de los narcos, que se paseaban por Cartago como Pedro por su casa. Tenía 16 años apenas cuando se pegó y apegó a Rasguño como tabla de salvación de algo que ahora, visto con distancia, ella misma no sabe qué era. Y se convirtió en su secretaria, amante, mujer, madre de su hijo. Durante el tiempo de apogeo de Rasguño, Brenda le acompañó siempre. "Me llevaba a todas partes, a reuniones de capos, y yo, 'gracias por presentarme a estos bandidos', que a veces veía todo desde el helicópero e igual era superbacano. Sí, la adrenalina, el miedo que sentía estar ahí, rodeada de Colombia entera, de los delincuentes más poderosos del país. No sé cómo explicarlo, ni siquiera es estar en unos premios de Hollywood, porque esa gente es normal; en cambio, estos son a veces de admirar por ver hasta dónde han llegado, con esa cabeza que tienen, otros sin estudiar, otros siendo profesionales, otros recogedores de café y en ese puesto. No sé, impresionante. Ver que uno habla peor que la empleada de servicio de la casa, como que lo pone a pensar. ¿El cerebro de este está en la pistola o en la cabeza?". Los mismos (o parecidos) protagonistas que copaban y copan titulares de los medios en América Latina (y más allá). Un ejemplo del ambiente kitsch en que se mueven -sin entrar en violencias, heridos y muertos que son reguero infinito- podría ser este (hay cientos) aparecido en El Universal de México en 2008: "Capturan a 15 presuntos narcos implicados con dos carteles de Colombia. Los acusan de proveer de media tonelada de cocaína... Fueron aprehendidos durante una rave en una lujosa residencia provista de zoológico... Entre los colombianos detenidos, 11, hay cuatro mujeres... formaban parte de las relaciones públicas del grupo delictivo, algunas vinculadas de manera sentimental con los capos...". "En esa época, en Cartago, el que no era narco, quería ser", dice otra mujer de las muchas junto a ellos en el Valle. Las persiguen, las arrebatan, y ellas se pegan, se dejan seducir por cochazos, ropa de marca, dinero fácil, rumbeo, cirugía estética (sobre todo las tetas, una obsesión). Todas responden o suelen a un prototipo: hermosas, voluptuosas, muy jóvenes. Influenciables. Las mujeres de los narcos son adolescentes reclutadas a la salida misma de la escuela, engatusadas y perseguidas hasta que caen y abandonan luego familia, estudios... De habitual, les gustan a ellos virginales, "que no estén usadas", suelen decir, "carne fresca" e intercambiable. Así lo cuentan ellas. Violeta Corrales, hija de narcos asentados, ex mujer de Juan Carlos Giraldo, alias Tortuga: "Tenía buen corazón, me invitaba a salir, me compraba cosas, compartíamos juntos. No me gustaba, pero es como cuando tienes una amiga fea, compartes tanto, tanto, que la empiezas a ver bonita... Así fue como empezó mi rollo con Tortuga". Él tenía 30. Su hermana Frida es de historia similar; desde niña ennoviada con Arcángel Henao, alias El Mocho, encarcelado en EE UU, quien la quiso de veras y la dejó ir. Ella anda casada y con hijo hoy con otro. Ambas viven en EE UU. "Yo no había cumplido 15 cuando ya estaba encarretada con un narcotraficante. Luego a mí me mataron a mi papá y cambié, antes era muy fresca", recuerda Violeta. Entre las mujeres de este mundo criminal hay de todo. Las que (se dice que ellas controlan ya el 20% del tráfico mundial) son socias de peso o se hicieron grandes con negocio propio, como Sandra Avila Beltrán, mexicana (La Reina del Pacífico), tanto que hasta le dedican narcocorridos, quien decía que lo del tráfico lo "llevaba en la sangre"; la detuvieron mientras compraba en un shopping y aún tuvo tiempo de pararse a pintarse los labios y charlar extenso y jugoso en un atasco con los polis que la acompañaban (presos de pánico por si los asaltaban mientras). Las hay consagradas, tipo Patricia Monsalve Muñoz, reina de la cocaína en Medellín, o la misma Lorena, de los hermanos Henao del Valle, tan sanguinaria que se cree que envenenó al marido. Están las que quisieron quedar en plan "yo no he roto un plato", como Solange Forza, que anduvo en prisión y reparte exclusivas. Y también las que son amantes de altura y luego escriben un libro contando, como Virginia Vallejo, la de Pablo Escobar, jefe con ambición política del cartel de Medellín, que siendo periodista y popular editó Amando a Pablo, odiando a Escobar y pegó la campanada. Pero la mayoría son aves de paso. Unas, víctimas; otras, ambiciosas; algunas, prendadas en verdad de sus hombres. Los quieren y están siempre ahí, de florero y retaguardia. De ellas se conoce poco, apenas un minuto de fama en alguna revista de cotilleos; un corto tiempo de chance mientras dura el encantamiento del capo; mucho maltrato luego y finalmente... puerta. Es destino habitual. A pesar de su lealtad. Brenda, por ejemplo, atendió y siguió a Rasguño a todas partes y países, detenido o extraditado (él confesó en 2007 su participación en asesinatos, sobornos, blanqueo de dinero, tráfico) y le consintió amoríos puntuales con muchas, y de seguido con una: Olivia, su sombra, su rival de años. Ahora anda criando sola a su hijo en Miami. "Me gusta acá porque
no tengo la chapa en la cabeza como allá... Si me invitan a salir, yo salgo, rumbeo, voy a comer, con amigos... En cambio en Colombia era distinto. Un día Hernando me dijo: "Ponte a mariquear o a güevonear y te llega la cabeza de ese hijueputa". "Lo único que se necesita para caer es estar arriba", dice Brenda, porque lo sabe bien. Como las otras cinco (Violeta, además de Pamela, Frida, Renata y Noelia) que hablan en el libro Las muñecas de los narcos (Aguilar), escrito por Andrés López y Juan Camilo Ferrand. Uno, ex narco del cartel del Valle desde adolescente, que se entregó en EE UU; el otro, periodista. Ambos se conocen cuando a este le encargan un reportaje sobre el otro a cuento del libro que López había escrito durante el lustro que pasó en prisión, El cartel de los sapos, del que surgiría luego la serie famosa El cartel. Empezaron a trabajar juntos. "Y un día al ver la serie apreciamos que había mucha historia ahí perdida... lo propusimos. Y una mujer llamó a la otra... Nos sentamos a escucharlas... Yo no conocía a ninguna de antes, pero sí a sus esposos", dice López. "Nunca se había contado ese día a día al lado de peligrosos narcos... Y es esta una galería de personajes, de más blandos a más fuertes, que ofrecen testimonios gordos, historias circulares y distintas... Y a través de sus peripecias se traslucen bien las de ellos y las de Colombia en ese tiempo... Lo triste es que esta estructura se ha ido arraigando en otros países, Puerto Rico, México, EE UU...", puntualiza. Pamela es de Cali, clase media, no le faltaba de nada. Hasta que, con 16 años, conoció a Erick, de 33, el primer narco en su camino: "Era divino, superbuena gente, pero yo en esa época, una niñita. El hijuemadre me enredó. Duramos dos años de novios. El primero, porque yo quería, y el segundo, obligada. Yo le decía que no quería salir con él, pero ahí me reviraba. 'Ah, ¿no? A vos no te voy a hacer nada, pero lo primero que hago es matar a tu papá y luego a tu mamá. Con eso te quedás sufriendo toda la vida'. Yo le cogí miedo... no le dejé, prefería tener papá". Hasta que otro más poderoso se fijó en ella y le quitó de enmedio. Luego apareció otro, Piraña, Leyner Valencia Espinosa; se enamoró: repetición de la historia, previo paso por Felipe Montoya, sobrino casado del gran capo Diego Montoya. Con 20, Pamela tenía apartamento y asistenta. "Y nadie me echaba los perros porque sabían que yo andaba con el Gordo. Es que Cali es un infierno. La vida tuya, el que no la sabe se la inventa, pero todo el mundo la sabe". Rompió con todo, tras presenciar incluso asesinatos, y se marchó a Miami. Hoy, inmigrante sin papeles, es asistenta. "No vale la pena meterse con estas personas. Creen que todo lo pueden comprar con la plata. Ojalá la plata nos hiciera felices... Yo mientras estuve, tuve todo. Igual no era feliz. Ahora solo quiero amor, otro tipo de persona, que trabaje, de otro estilo, que me respete, quiera una familia". "Los nombres de ellos son reales en el libro, los de ellas no, pero si vas a Cartago todo el mundo sabe quién es quién", cuenta López, quién ha vivido su propia travesía como arrepentido. "Es difícil decir cuál de estas mujeres me impresionó más: Brenda, por su resistencia; Noelia, que se tira al oceáno a entregarse... Son niñas heroínas para mí". Jóvenes de edad, pero viejas en experiencia. Los narcos les suelen ocultar información de sus fechorías, les muestran otra cara, son padres y amantes tiernos a ratos, hombres poderosos un día y fugitivos al otro. Un mundo en el que corren las relaciones como dinero y joyas en maletas en huidas desesperadas de mansión en mansión, de país en país. Renata. Fue desde niña muy activa, contadora de millones en Nueva York, mula camino de EE UU, mujer fantástica del narco Robin y de Felipe Montoya, bajadora de plata desde México a Colombia, dueña de su propio negocio de ropa. "La vida de muñeca está llena de mentiras, de ilusiones". En su independencia habla de ello como ajeno: "Son patonas, tetonas y culonas, por fuera muy bellas, pero por dentro vacías. Sólo piensan en lo que pueden conseguir de los mágicos y no en lo que pueden lograr por sí mismas". Eso sí, presume de mantenerse intacta en otro sentido: "Ni mis tetas ni mi culo son de traqueteo. Todo fue trabajadito. Nada, gracias a Dios, es de ninguno de esos hijueputas". Noelia, buena estudiante, de familia humilde y honesta. "Yo me casé con Johnny Cano porque estaba embarazada, si no, no". Cano no tenía entonces ni oficio ni beneficio. Hasta que empezó a trabajar para Rasguño y le siguió la estela y las costumbres: dinero, mucha ostentación, otra mujer, "una niña de 15, bonita, espigada, dispuesta a sacarle hasta el último peso". Tuvo Noelia con él dos hijos. "Ya despues se volvió tan tremendo... ya no me gustaba compartir con él. Yo sí lo amé... Me porté siempre bien, fui gran esposa, nunca infiel. Él fue mi primer y único hombre. Una cosa sí aclaro: nunca me tocó ver que hiciera algo malo a alguien". Hasta que él cayó detenido y Noelia acabó implicada por comprar con dinero del narco... Y se entregó en EE UU, dejando atrás a sus hijos. "Me subieron al avión por atrás esposada, y ahí sí lloré desconsolada". Ya libre, le
dirá a él, cansada de su trajín: "Yo como mujer a usted ya no lo quiero... Yo ya tenía mucha rabia. Claro, que cuando uno deja de querer, perdona, y yo ya lo perdoné". Así, las seis mujeres narran sus vidas como en telenovela: "Algunas al principio se frenaban, otras estaban ávidas de compartir aventura y desdicha...". Material tienen en estas páginas. El mundo del narcotráfico en boca femenina sabe a fiesta, a rave, orgías, mucho dispendio y disparo que corre; mucha droga, amenaza, palizas y abuso de poder también. Y ahonda en amoríos, traiciones, cariño filial, celos poderosos que hasta remueven el cartel... Ellas se detienen en detalles sobre su vída íntima, sus primeras veces, en análisis sobre unas y otras, y lo acontecido. Como Pamela, al comparar generaciones: "Me gustaban más las muñecas de antes, eran más lindas, rubias, despampanantes, no supertetonas como ahora. Tenían más clase, cada una su estilito. Ahora todas son indias, pelinegras, el pelo largo, la teta tamaño 38, la cinturita de avispa y el culo desproporcional, horrible, todo puntudo. Con una cara ordinaria, pero por detrás cuerpo espectacular". ¿Y ellos? "Ahora son groseros. Los de hace diez años daban superregalazos, mientras que ahora las viejas les tienen que aguantar que tengan mujer, moza, recontramoza, novia, noviecita y amante. Ahí las contentan con cualquier limosna para pagar la luz. Ya no quedan espléndidos. Eso allá está super, supermalo. Y si los hay, ya les cambió la personalidad". Casi todas han dejado atrás aquel tiempo. Pero cuesta imaginarlas hoy fregando suelos o camino de la facultad (la mayoría son aún veinteañeras) con tal pasado. Lo certifica López: "Con o sin papel, fueron compañeras oficiales, mandaban en casa, eran patronas de un ejército de empleados que veían en ellas la extensión del poder del jefe; mujeres a las que se les debía respeto y sumisión". Las Muñecas de la Mafia” cuenta la historia de seis mujeres, que por diferentes motivos terminan involucrándose en el mundo de la mafia colombiana. • Brenda, una chica que trata de salir adelante a pesar de las dificultades. • Olivia, amiga de Brenda, que solo busca conseguir la vida que ‘se merece’ convirtiéndose en la esposa de un narco. • Renata, la inocente, quien por ayudar a sus padres termina metiéndose en más de un problema. • Violeta, hija de uno de los narcos, acostumbrada al negocio desde muy pequeña, consumida al final por su sed de venganza. • Pamela, hija de ‘el capi’ piloto de uno de los narcos quien, al descubrir la verdad, se verá enrededa en la famosa frase ‘un clavo saca a otro clavo’. Todas estas mujeres pudieron tener un destino diferente pero se equivocaron y sus vidas, al igual que sus destinos, quedarán marcados siempre por sus erradas decisiones. Las Muñecas • Amparo Grisales…. Lucrecia (Esposa de braulio. Le encanta el dinero. Protege a su marido de todas las mujeres que se le acerquen, enamorada de nicanor, al final de la serie no se sabe si termina en Panama o en Uruguay se dice que esta escribiendo un libro de sus memorias) • Angélica Blandon…. Brenda( es cupido de braulio y olivia, es la mejor amiga de olivia y se enamora de braulio ,es honrada, buena amiga y no se deja llevar por las apariencias… el eje de la historia son sus vivencias, queda embarazada de Braulio al final de la serie) • Catherine Escobar…. Olivia (Le gusta mucho el dinero y después se enamoró de braulio, al final de la serie es llevada a la carcel por la acusacion de testaferrato) • Yuli Ferreira…. Renata (Mujer de leonel. Es bella e ingenua, Muere en miami llevando la droga de erick en su estomago, es enterrada como N.N en miami puesto que al llegar a la ciudad se comienza a sentir mal en el aereopuerto y deja su equipaje con todas sus cosas tiradas en el aereopuerto ) • Alejandra Sandoval…. Violeta (Enamorada de giovanni, Le ayuda a su papa al tráfico de drogas, tiene una alianza con Nicanor el cual la traiciona para que Norman la mate a cambio de Erik para firmar la paz, Asesinada por Norman) • Andrea Gómez…. Pamela (Hija del capitán Horacio Rojas y que por circunstancias de la vida se enreda amorosamente con los mafiosos, Ayuda a la policia a capturar a asdrubal pero al no lograrlo esta ordena que la maten pero es rescatada por la policia entonces asdrubal al darse cuenta de esto le ordena a Erick que asesine a la madre de pamela, ximena pera vengarse de ella, pamela temina trabajando de criada en EE.UU)
Mafiosos del Clan de Braulio • Fernando Solórzano…. Braulio Bermúdez (Protagonista-villano. Narcotraficante. Esposo de lucrecia. Le encantan las mujeres jóvenes. Detesta a su mujer, Capturado por la policia recluido en la carcel y extraditado a EE.UU.) • Diego Vásquez…. Norman (Villano. Esposo de noelia. Mano derecha de braulio, Traiciona a Braulio al secuestrar a su hija y robarle el dinero, muerto por la DEA) • Julián Román…. Erick (Villano. Guardaespalda de braulio. Obsesionado con pamela,asesinado por Nicanor a cambio de violeta para firmar la paz) • Juan Pablo Franco…. Leonel (Esposo de renata, Le gusta maltratar a su mujer, Contador de braulio, asesinado por Norman) • Lincoln Palomeque…. Giovanni (Enamorado de violeta, Le toca volverse cómplice de braulio por matar accidentalmente uno de sus guardaespaldas) • Orlando Valenzuela…. Gregorio (Papa de Violeta, Traficante de drogas, asesinado por Norman) • Mauricio Vélez…. Asdrúbal (Narcotraficante. Amigo de braulio. Enamorado de pamela, extraditado a Estados Unidos) • Alex Gil…. Sultán (Hombre de Braulio. Asesinado por Claudio) Mafiosos del Clan de Nicanor • Félix Antequera…. Nicanor Pedraza(Villano. Rival de Braulio en el negocio del narcotráfico y enamorado de Lucrecia, capturado por la DEA) • Julián Arángo…. Claudio(Sobrino de Nicanor. Enamorado de Pamela. Asesinado por Norman y Erick) • Walter Luengas…. Marlon (Asesinado por Norman y Erick) • Alejandro López…. Alejo (Mano derecha de Nicanor. Asesinado por Erick) Otros • Andrea Guzmán…. Noelia (Mujer de norman. Mejor amiga de lucrecia) • Jorge Herrera…. Israel. (Acosador de renata. Asesinado por braulio) • Jéssica San Juan…. Guadalupe (Hija de Braulio y Lucrecia.) • Fabián Mendoza…. Marcos (Novio de Guadalupe. Asesinado por Braulio)