Playboy: El buen periodismo detrás de los desnudos

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El buen periodismo detrรกs de los desnudos



o yo leo playboy por los artículos

“YO LEO PLAYBOY POR LOS ARTÍCULOS ” Cuando un alumno llevó una entrevista realizada por Playboy para un trabajo en clase, la expresión de sorpresa era imposible quitarla del rostro del docente. Anonadado no podía creer que uno de sus estudiantes usara una revista para adultos como referente. Esbozando una sonrisa afirmó “Playboy no es un medio serio”.   Esto nos cuenta el editor periodístico de Playboy México, Arturo Flores, quien deja en evidencia cómo la revista desde la escuela de periodismo ha sido discriminada.

Por: Leslye Peñalillo — Paloma Rivera

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caso ¿Las mujeres desnudas valen más que mil palabras?   Más allá de las fotos provocadoras, las luces, cócteles, lujosos casinos y colas esponjosas, Playboy desde su primera impresión en 1953, ha mantenido un compromiso con el periodismoy la literatura entre sus páginas. Con una visión rupturista, Hugh Hefner, el primer editor, director y fundador de la revista, creó un medio con que logró romper las reglas que tenía la sociedad estadounidense durante los 50s, poniendo en discusión temas que en aquel entonces eran tabúes.   Casi 70 años han pasado desde que Hugh Hefner presentó el primer número de la revista en la mesa de su cocina. Esta entregaba un estilo de vida personal, encarnando la máxima expresión del privilegio masculino heterosexual, la libertad sexual y de expresión. Donde la moral norteamericana encontró una respuesta inmediata y directa, respecto a los ideales morales de post guerra.   En las palabras del mismo Hugh Hefner, comentó en el documental Cómo Playboy cambió al mundo. “La intención principal de la Playboy fue crear una revista urbana sofisticada para hombres jóvenes, porque la Esquire siempre había sido para hombres maduros de buen estatus.” Playboy comenzaría a crear su propio nicho el cual entregaría al lector literatura

(Fuente: Playboy)

de ficción, artículos sobre música y erotismo.   En la actualidad las mujeres semidesnudas con poses provocativas, la estética y el juego del showbiz de la marca, para parte del público refleja obscenidad. No se le reconoce dentro del oficio periodístico.   Para el periodista Pablo Márquez, ex editor de la revista Rolling Stone en Chile, “en el fondo el envase era evidentemente un envase más bien frívolo. Muchos pueden no haberlo considerado una fuente periodística seria, pero los artículos que se hacían ahí, era bastante serios, bastante profundos”. El periodista también comparó la lógica con The Clinic, el cual combina humor “en una fuente de periodismo bastante interesante y variada”.   No es necesario usar una lupa para entender a Playboy como medio periodístico, sin embargo, el desconocimiento ha llevado a la revista a cargar con etiquetas como: pornografía, utilizar a las mujeres como objetos y sobrexplotarlas ¿de periodismo? Ninguna palabra. Sin bajar los brazos Hefner creía en su visión y no por nada siguió sacando números, llegando a un tiraje de aproximadamente 7,5 millones de ejemplares, superando dos veces el de la reconocida revista Time.   La fórmula basada en exaltar la sexualidad como derecho del hombres y mujeres acompañado de un contenido literario dio resulta-

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El primer tiraje superó los 50 mil ejemplares vendidos seis años más tarde Playboy era la revista más distribuida en Estados Unidos, superando el millón de ejemplares vendidos (Fuente: Beatriz Colomina).

do. Se invitaba al lector a entender que los desnudos pasaban a ser solo una parte de la revista, si bien era lo más reconocido, estaba lejos de ser el enfoque central. Implementando así, una manera distinta de entregar información, lo que también comenta Pablo Márquez, "yo creo que lo que hizo Hefner fue más bien una nueva forma de mostrar el Periodismo, que también podría convivir con lo que tradicionalmente no era catalogado como medio informativo".   Para el actual editor de Playboy México, Arturo Flores, la revista sí una trascendencia de un buen oficio periodístico, “en su momento Playboy fue la única revista en Estados Unidos en entrevistar a un expresidente, que fue Jimmy Carter, entrevistó a Fidel Castro, por ejemplo, si es un medio serio, pero es difícil concebir que un medio serio publique fotos de desnudos”, que tampoco tiene que ser banal o superfluo, sino artístico.   Además de los despegables de las conejitas, el vello púbico, ilustraciones seductoras y vanguardistas, Playboy se jactó de tener uno de los mejores trabajos literarios y periodísticos. Su compromiso con la tinta y el papel se asemejaba a una producción realizada por Esquire, Good Housekeeping o The New Yorker. La revista de Hefner no solo se preocupaba de una bella fotografía sino de la calidad de escritos.   Según lo que menciona la ex editora de la revista Paula, Milena Vodanovic, «las otras revistas que mostraban mujeres desnudas no tenían esta calidad de interés por el showbiz y por el periodismo como el que tenía Playboy, entonces es una mezcla muy propia de esta revista. Sácale las mujeres desnudas y Playboy es un Esquire».   La ex editora literaria de Playboy Amy Grace Loyd, en un artículo de The Guardian, resume que la fórmula del éxito de la revista es debido a que “tiene cosas que atraen el ojo del público y a su vez cosas que enriquecen su vida intelectual y espiritual”.   La revista de Hefner se estableció rápidamente como una potencia editorial, con un compromiso presupuestario de calidad y una influencia cultural cada vez mayor. Playboy mostró una forma distinta de hacer periodismo, combinando el poder de las letras y la estética seductoras de las Playmates. Manteniendo una escena juguetona de placer, entretención y libertad.


Fuente Cultura Colectiva

¿DISCRIMINACIÓN? A

my Grace Loyd, comentó que su tarea en la revista era ubicarla dentro de las piezas literarias de ficción, aunque siempre rodeada de prejuicios superficiales. A raíz de esto vivió un incómodo momento. “No mucho después de que me contrataron en Playboy, me encontré con un ex colega de una revista famosa y le conté sobre mi nueva publicación, y ella dijo con ternura: «Bueno, la ficción erótica también tiene su lugar, ¿no?». Detrás de esas palabras se ve reflejado el demerito hacia la revista, sino que también evidencia el desconocimiento hacia Playboy, la cual desde sus inicios compartió la pluma de Ray Bradbury, Arthur Conan Doyle y Alberto Moravia, Vladimir Nabokov, Hunter S. Thompson y John Updike”.   Las cosas y las personas no se rigen en base a una sola característica. Playboy y Hugh Hefner eran complicados de entender. ¿Mostrar el cuerpo natural de una mujer mientras se hablan de derechos raciales y pastillas anticon-

ceptivas? Imposible, pero no para el disruptivo conejito. ­  La delicadeza y filosofía de cómo Playboy podía recorrer páginas de literatura acompañado de senos, es de admirar. La postura política encarnaba la vanguardia del humano, el cual rompe barreras para comunicarse y demostrar lo que quiere. No se trata de ser letrado para entender la visión, sino de romper lo conocido como “medio serio”.   En conversación con la ex editora de la revista Playboy en México Mónica Maristain, nos comenta que las personas si bien conocen muy bien las conejitas y el logo, poco y nada saben del contenido de la revista “la gente desconoce todo, se sigue la corriente de las cosas digamos, ¿cuánta gente leería Playboy en el mundo? ¿cuánta gente llevaría Playboy para que la vea todo el mundo? Si era como una vergüenza”.

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EL LUJO PLASMADO EN PAPEL H

efner fue capaz de convertir lo que pudo ser una revista ordinaria a una de las marcas más icónicas a nivel mundial. Si nos remontamos a sus inicios, Playboy tuvo un fuerte auge en los 60s y a pesar de consolidarse desde su primera edición en 1953, la llegada de la Revolución Sexual en Estados Unidos fortaleció la esencia rebelde de Playboy. Mientras los estadounidenses se libraban del fantasma de la Segunda Guerra Mundial, comenzaba a nacer una necesidad del disfrute. Fue así como Playboy se encargó de ofrecer al hombre blanco y heterosexual, entretención sin moverse de su casa.   Este aire hedonista lo entrega su línea editorial la cual se basaba en consumismo, desde que trago tomar, hasta cómo vestir. Esto no debe tener una connotación negativa, al final, el propósito de los medios de comunicación es entregar un mensaje que va dirigido a cierto público.   Esta revista chicaguense se dirigía a un receptor que tuviera ganas de divertirse, que tuviera apetito de desligarse del “buen ciudadano”. Así lo recalca Milena quien manifiesta su mirada hacia la revista. “Había un objeto de deseo, un aspiracionismo de ser así. Yo creo que mucha gente que leía Playboy era porque estaban las propagandas de whiskey, diciendo como «aquí es donde pertenezco». Yo creo que la sociedad fue cambiando e invitaba a una elegancia. Era una revista que te daba como un estatus”.   Si se observa a Playboy desde una mirada actual no se diferencia mucho de otras revistas de entretenimiento masculino, sin embargo, el premio gordo es gracias a través de los textos, entrevistas, cuentos y artículos presentados.   Dentro de la fantasía, masculinidad y una nueva versión de la sexualidad femenina, Milena Vodanovic, destaca la importancia de la gran lectura que abarcaba: “Hay piezas bien notables, antologías, escritores, cronistas y guionistas, que en las páginas de Playboy publicaron grandes pie-zas periodísticas”. ­­  La envoltura provocativa de la revista y la libertad de expresión que producía permitió que Playboy se convirtiera en el espacio ideal o 06

para la publicación de literatura alternativa.   En este contexto el ex periodista de revista Cosas, Jonathan Reyes, comparte la transversalidad que plasma la revista, “el nacimiento del periodismo narrativo, a mi juicio, fue en Playboy. Este era el espacio que se le daba a los periodistas para literalmente crear y no censurar”.

Dan Mouer en Vietnam en 1966. (Fuente: The New York Times)


La importancia de la revista Playboy para los soldados en Vietnam no solo giraba en torno a las modelos. Las tropas adoptaron al conejito de la revista como su mascota. El logotipo de la compañía se podía ver en aviones, helicópteros y tanques e incluso en vestimenta. Así mismo el gobierno usaba Playboy como un arma estratégica para “motivar” a los soldados.

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PLUMAS DEL SIGLO XX D

urante el primer año de la revista, los números que aparecían en Playboy eran publicaciones que se encontraban en el dominio público y que cualquiera podía hacer uso de estos. Fue así como Hefner aprovechó de incluir al creador del icónico detective Sherlock Holmes, Sir Arthur Conan Doyle, en la revista. Todo cambió en 1954 cuando un lector llamado Ray Russell, escribió una carta a Hefner comentando lo mucho que le gustaba la revista, donde apareció una incógnita que cambiaría el curso de Playboy. De manera irónica preguntó por qué no publicaba textos del siglo en que vivía. Desde ahí, Russell se unió como editor asociado, colocando en las páginas textos de algunos escritores vanguardistas, a quienes se les negaba la participación en editoriales o en las revistas más conservadoras.   Los primeros ejemplos de la reinvención editorial aparecieron entre en los ejemplares de marzo y mayo de 1954, por partes, se comenzó a publicar la novela de Ray Bradbury, Fahrenheit 451. “Se la vendí a Hef por 400 dólares. Una ganga”, declaró el autor años después. El texto se convirtió en un éxito notable tanto por la crítica como en ventas, las cuales aumentaron casi el doble además de despertar el interés mundo literario.   Para Pablo Márquez, “el éxito se reflejaba por la cantidad de ejemplares que se vendían. Daba para contratar las mejores plumas de la época, y hacer un contrapeso editorial a la foto

de la chica desnuda del mes (…) Truman Capote, Hunter S. Thompson, participaron haciendo artículos periodísticos profundos, en el fondo hay grandes investigaciones, reportajes y grandes artículos de opinión, fue una revista que estuvo super conectada a una época donde pasaron cosas”, comentó el ex editor. ­  La revista no solamente sirvió como tribuna para mostrar material literario, sino que también, como un espacio para escritores y todo tipo de creadores de renombre, lo que dio como resultado una histórica colección de crónicas y reflejos sociales norteamericanos y mundiales.   Muchos escritores veían el libertinaje de Playboy un espacio dorado para publicar los cuentos que las editoriales les negaban. Truman Capote aprovechó de hacer revelaciones sociales sexuales de las estrellas de Hollywood. Henry Miller utilizó la plataforma como única promoción

Alice Denham fue la única mujer en posar en Playboy y escribir. Esta es la clara representación de seducción y buen periodismo, al estilo de la revista. (Fuente: Playboy)


de sus novelas sexuales. Chuck Palahniuk utilizaba las páginas de Playboy para publicar adelantos prohibidos de su otra, en una entrevista para Playboy México, Palahniuk conversó con Hiroshi Takahashi y comentó que no quiso escribir para revistas como The New Yorker, Esquire o Harper’s puesto que en ese entonces, esos medios lo veían como un escritor políticamente incorrecto, y dichas revistas tenían miedo de ofender a sus lectores, por lo que no lo leerían ni aceptarían en la mayoría de los medios estadounidense, exceptuando a Playboy, quienes sí lo publicaban y no lo censuraban.   “Estamos dispuesto a publicar cosas que otros no se atrevían y los escritores estaban contentos por eso. Muy pronto tuvimos la mayor circulación en el ámbito masculino, así que podíamos pagar más dinero”, menciona Hugh Hefner en el documental Cómo Playboy cambió al mundo.   De este modo se convirtió en un espacio que iba más allá de lo superficial de las poses provocativas y senos perfectos. Hefner le entregó al lector promedio una visión renovada sobre la curiosidad intelectual y literaria. Dentro del desfile de mujeres desnudas, las letras vestían sus cuerpos. Afloraron las raíces de una combinación literaria que entregaba un placer irreverente en la narración de autores dentro de una lámina que estaba lejos de la censura.


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entro de las plumas que participaron en la revista, aparece Alice Denham, además de sus escritos, fue el único caso en que el texto era ilustrado con foto propias posando como Playmate, obteniendo una recompensa monetaria mucho más alta que como escritora. Hefner mostró el cuerpo y la mente de Denham, retratándola en topless junto a su cuento El Acuerdo (1956). Una historia de una mujer que queda sin dinero en Las Vegas y acepta dormir con un viejo tahúr. El cuento publicado en la revista llamó la atención de la editorial Doubleday, quienes le comentaron que estaban interesados en ella para escribir una novela. A pesar del éxito, Playboy rechazó otros dos textos de Denham, justificando que la revista ya no recibiría escritos de mujeres. Acción que duró durante varios años.   “Por supuesto que no era igualitario”, escribió la autora y modelo sobre Hefner. “Pero él poseía una de las características masculinas más finas que yo conocía: le gustaba mi escritura”.   Por otro lado el escritor y periodista británico Ian Fleming, publicó en varias ediciones historias sobre el agente Bond... James Bond, personaje que configura la inteligencia, elegancia y masculinidad, categorías idénticas que Playboy pretendía representar como un símbolo de la nueva masculinidad de la época, a través de cánones precisos que caracterizaban a la publicación. También se publicó sus obras Al servicio secreto de su majestad (1963) y Solo para tus ojos (2006) parte de la saga de James Bond.   Dentro de los prejuicios que significaban las voces femeninas durante los 60s en Estado Unidos, la escritora feminista Ursula K. Le Guin de forma oculta, bajo sus iniciales U. K. Le Guin, intentó introducir nuevamente la literatura escrita por mujeres a la revista, publicando Nueve Vidas (1969), una historia de ciencia ficción, clones, minería extraterrestre y amor. La autora comentó que el editor de ese momento le impuso firmar con sus iniciales para no llamar a atención, puesto que según él, a los lectores “les asustaban las historias escritas por mujeres” Le Guin tiempo después manifestó que esa había sido la primera vez que enfrentó prejuicios como autora, donde cuestionó su manera de reaccionar, “me sorprende darme cuenta lo dócilmente que seguí la corriente”.   Considerado el mejor escritor para niños, responsable de El fantástico Sr. zorro, Charlie y la o 10

fábrica de chocolate y Matilda, Ronald Dahl, participó con historias alejadas al público infantil, incursionó en el campo de las fantasías oscuras, como Mi tío Oswald (1965 y 1974) que trataban relatos de inescrupulosa y funesta seducción, cuyo personaje, el tío Oswald, fue llamado por el mismo autor como “el peor fornicador de la historia”.   La escritora y actual ícono feminista Margaret Atwood, saltó a la fama con su libro El cuento de la criada (1985), que luego fue adaptado para una serie de TV, publicó una amplia lista de cuentos, poesías y guiones, los que en su mayoría han sido publicados por Playboy, destacando The Big Man (1991) donde muestra una extrañísima visión sobre la masculinidad, el amor y la belleza que sorprendió por su profundidad psicológica, además de The Bad News (2006)   Considerado uno de los escritores más influyentes del siglo XX, Kurt Vonnegut, quien aparte de publicar Buena Puntería y Desayuno de campeones. Novelas donde explora la ciencia ficción y un lado más satírico de sí mismo; al igual que Atwood, publicó de forma constante en la revista algunos cuentos.   El escritor, activista y ganador del premio Pulitzer en tres ocasiones, Norman Mailer, publicó en 1976 su cuento Trial of the Warlock. Tal era el reconocimiento, que Playboy invirtió miles de dólares para enviar a Mailer al continente africano, con la finalidad de cubrir la histórica pelea de boxeo de George Foreman y Muhammad Ali en el entonces Zaire (ahora República Democrática del Congo) en 1974.   El creador del periodismo Gonzo Hunter S. Thompson, participó en la revista con varios artículos como The Charge of the Weird Brigade (1981) además de aprovechar el espacio sin censura que Playboy entregaba para escribir sobre “pornografía de parejas”.


o soy mujer y trabajo en playboy

«SOY MUJER Y TRABAJO EN PLAYBOY» E

n medios de las elecciones del 2008 en Estados Unidos y el aumento del periodismo en línea. Para Glynnis Macnicol, uno de los mejores trabajos que ha tenido, fue cuando comenzaba su carrera como reportera en la revista Playboy. Para la periodista Playboy significaba estar dentro de los pesos pesados del Nuevo Periodismo.   Macnicol le planteó al entonces editor en jefe Chris Napolitano, la idea de hacer un blog político, puesto que sería inteligente tener a una mujer cubriendo la elección en la que una mujer se postulaba a la presidencia, en este caso la ex congresista Cynthia McKinney. “Me encantó la idea de infiltrarme en una revista lleva de pezones y arbustos con historias sobre mujeres inteligentes y poderosas”, escribió Macnicol en una columna para Elle.   Dentro de las emociones de la periodista, el reconocimiento del nombre para ella era estimulante.

“No hay mejor línea de apertura para un periodista que Hola, trabajo para la revista Playboy

parte del equipo de Playboy desde 1970 y permaneció allí durante más de tres décadas, incluso llegando al puesto de editora. “Fue un lugar verdaderamente maravilloso para trabajar. Lo que me interesó de Playboy fue que era un ambiente completamente igualitario”.   “El trabajo fue realmente satisfactorio desde el punto de vista intelectual. Trabajé con personas excelentes. Me sorprendió lo aburrido que fue mi trabajo después de eso. Seguí yendo de un trabajo a otro pensando que tenía que haber otro lugar que fuera igual de interesante”, le responde Patty Lamberti, quien trabajó cinco años como editora desde el 2000. “Cuando mirabas hacia arriba, predominaban las mujeres”, agrega.   “La mentalidad que se mostraba en la revista era muy diferente a la de las personas que trabajaban allí”, le menciona Heather Haebe, quien fue parte del departamento editorial entre el 2000 y 2008. “La gente ahí era extraordinaria”.   Para Macnicol trabajar en la revista era estar dentro de una sororidad, donde todas se entregaban apoyo mutuo dentro de la oficina y que a pesar de los prejuicios que la sociedad tenía respecto al magazine, se mostraban orgullosas que Playboy estuviera dentro de su curriculum.

Para Macnicol la revista no es sinónimo de mujeres expuestas, incluso menciona haber hablado con colegas en su misión de descubrir cómo era ser mujer detrás de los desnudos femeninos y trabajar en una revista que por años se le ha considerado machista.   “Cualquiera que sea la hostilidad dirigida a Hefner, las orejas de conejo y las colas y todo eso no tuvo absolutamente ningún impacto en trabajar allí”, le dice Barbara Nellis, quien fue 11 o


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PLAYBOY INTERVIEW

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as aspiraciones de John Lennon y su último encuentro con Paul McCartney, conversaciones en un hotel de Paris con Gabriel García Márquez, diálogos que nunca son banales junto a Roberto Bolaño y críticas políticas por parte de Martín Luther King Jr. Son algunas pláticas que se transformaron en entrevistas memorables las cuales se han replicado, utilizado como base para escribir artículos y libros, hasta documentales al respecto. Un aspecto que posiciona y distingue a Playboy del resto de su competencia.   El archivo de la revista revela una colección de profundas, personales y perspicaces entrevistas a políticos, cineastas, escritores, músicos y un sinfín de figuras culturales que comparten profundos y fascinantes momentos de la cultura pop, la historia mundial y mayormente estadounidense. Donde lo que se encuentra al desnudo son las emociones de los entrevistados.   En 1962, el principal icono del mundo del jazz, Miles Davis, conversó con el escritor y periodista afroamericano, ganador de un Premio Pulitzer, Alex Haley; siendo la primera entrevista oficial publicada en Playboy. Aunque el principal motivo de la entrevista fue la fascinación que Hefner tenía por el jazz, el artículo se convirtió en una primera línea mediática en el Movimiento por los Derechos Civiles. Incorporando la noción de igualdad racial dentro del ADN de la revista. Se utilizó el medio como plataforma para presentar figuras prominentes que no recibían el mismo trato en los principales medios de comunicación de la época.   En una charla sincera y esclarecedora, Davis habló sobre las dificultades de ser un hombre de raza negra dentro del mundo de la música:   “En la escuela secundaria fui el mejor en la clase de música con la trompeta, pero los premios fueron a los muchachos con ojos azules. Decidí superar a cualquier blanco en mi cuerno”. Miles Davis. Playboy. Septiembre 1965

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WwWwWwWwWw PLAYBOY: ¿Hay locales o lugares donde no te guste tocar? DAVIS: ¡Hay muchísimos donde me niego a tocar! No acepto conciertos en ningún lugar del Sur (de Estados Unidos). Ya te he dicho que no aguanto (las leyes de segregación racial) Jim Crow, así que no pienso acercarme por allí. Ya hay bastante (racismo) en el Norte, pero al menos tienes el apoyo de algunas leyes. Tampoco pienso tocar en sitios donde sé que tocar para ese público es malgastar tu aliento. Me refiero a esos pijos blanquitos que tiran de cuenta de gastos y para los que la música es una excusa para colocarse y pavonearse delante de las mujeres que los acompañan. No han venido a escuchar buena música, ni siquiera saben divertirse. Beben demasiado, son ruidosos, hacen lo posible para que se sepa que están ahí. Saltan y bailan y cantan. No tienen modales: no respetan a las mujeres. Piensan que cuando hay un negro en el escenario no es más que un Tío Tom que está ahí para entretenerlos.

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asta hoy la entrevista sigue siendo una ventana significativa a uno de los más venerados dentro del mundo del jazz. Sus opiniones sobre raza, política y cultura siguen siendo importante y hacen una lectura más amena, además de ser un recordatorio de la complejidad estadounidense. Con el tiempo las entrevistas se convirtieron en el sello de excelencia de la revista.   Poco después de recibir el premio Nobel de la Paz, el activista defensor de los derechos civiles de los afroamericanos, Martin Luther King Jr, le concedió a Playboy una de sus más largas y emotivas conferencias. Esta entrevista se transformó en una pieza histórica de relevancia social, donde en 20 páginas el activista dio un recorrido desde la primera vez que sufrió racismo, secretos de situaciones familiares que


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vivió por causa del odio racial, hasta reflexionar sobre los derechos civiles y dolores colectivos del racismo en Estados Unidos.  “Debo reconocer el hecho, como todos los líderes en una posición como la mía deberían hacerlo, sucederme en cualquier momento. Sin embargo, siento que mi causa es tan justa y moral que, si tuviera que perder la vida, de alguna forma eso ayudaría a la causa. Siento que tengo que aceptar el trabajo que tengo de ayudar a esta nación y a este mundo a ser un mejor lugar para todos los hombres, tanto como los blancos”. Martin Luther King Jr. Playboy 1965.

WwWwWwWwWw PLAYBOY: ¿Qué significa «militancia no violenta»? MARTIN LUTHER KING: Significa que un hombre fuerte debe ser tan militante como moderado. Debe ser realista como idealista. Si he de merecerme la confianza que ha depositado en mí parte de mi raza, debo ser ambas cosas. Por eso la no violencia es un arma tan justa como poderosa. Si te enfrentas a un hombre que te ha maltratado con crueldad durante mucho tiempo y le dices: “Castígame si quieres, no me lo merezco pero lo aceptaré, y así el mundo sabrá que tengo razón y tú te equivocas”, entonces esgrimes un arma tan poderosa como justa. Ese hombre, tu opresor, sufrirá una derrota moral de forma automática y, si tiene algo de conciencia, sentirá vergüenza de sí mismo.

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(Fuente: Playboy) 10 o


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o existe un puesto asegurado de cuál es la mejor entrevista realizada en Playboy, sin embargo para Mónica Maristain, la mejor publicación que de la revista fue la efectuada a John Lennon, “se le dio a una entrevista maravillosa, hoy cada vez que vamos a hablar de Lennon, leemos otra vez esa entrevista”.   El artista recibió al periodista David Sheff en su hogar en Manhattan en septiembre de 1980, quien en ese momento se encontraba junto a Yoko Ono grabando el álbum Double Fantasy, un año antes de su asesinato. El cofundador de The Beatles, en la conversación habló de los motivos por los que abandonó la vida pública entre 1975 y 1980, su separación con la banda, además de defender su relación con la artista conceptual.   “Me convertí en un hombre de casa por varias razones. Desde que tuve 22 hasta los 30 tuve obligaciones relacionadas con contratos, el rock and roll ya no era divertido (…) Cualquiera que afirme tener algún interés en mí como artista individual, incluso como parte de los Beatles, ha entendido absolutamente que todo lo que dije no tiene que ver con Yoko. Y si no pueden ver eso, no ven nada. Simplemente se están masturbando para ... podría ser cualquiera. Mick Jagger o alguien más ... No lo necesito. Déjalos perseguir a Wings. Solo olvídate de mí. Si eso es lo que quieres, ve tras Paul o Mick. No estoy aquí para eso. Si eso no es aparente en mi pasado, lo digo en negro y verde, junto a todas las tetas y los culos en la página 196. Ve a jugar con los otros chicos. No me molestes Ve a jugar con Rolling Wings.”

John Lennon. Playboy 1981.

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Dentro de la cultura de artistas contemporáneos, ya sea en categorías de música, el arte o el cine, parte del gran espectro de personajes seleccionados para entrevistar en la revista aparecen: David Bowie y Bob Dylan; Stanley Kubrick, Quentin Tarantino, Christopher Nolan y Woody Allen; Muhammad Ali y Steve Jobs.   La ex periodista de Playboy Estados Unidos, Claudia Dreifus, en una entrevista para Viceversa Magazine comenta que “desde los 60s hasta los 90s, las entrevistas de Playboy eran las más prestigiosas en el mundo periodístico. Había más espacio para desarrollar el formato y se volvió todo un arte. Entonces estando en Playboy se tenía más espacio y más dinero para hacer cosas que ningún otro medio permitía. Toda la gente importante pasaba por Playboy”.   El continente Latinoamericano no se quedaba atrás, el escritor chileno Roberto Bolaño dio su última entrevista a la edición mexicana días antes de fallecer, el reportaje de 10 páginas se publicó en julio del 2003 realizado por la entonces editora de Playboy México, Mónica Maristain. La conversación con la periodista argentina radicada en México ha sido replicada en medios como The Guardian y The New York Times.   “Bueno la entrevista él la quiso hacer, nosotros nos comunicábamos por correo anteriormente, habíamos hecho una amistad a partir de esa comunicación por correo el en un momento dijo: «por qué no me haces una entrevista frívola como las que tú haces» y después que se la hice fue como: «Ah me encantó, después que la publiques en Playboy la quiero mandar a El Mercurio», así fue digamos, y en el medio se murió, pero fue su idea aparecer en la revista” Nos comenta Mónica Maristain vía telefónica.

Hugh Hefner en su casa en Las Vegas 1966 (Fuente: Magnum)

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WwWwWwWwWw PLAYBOY: ¿Quién lo hizo creer que es mejor poeta que narrador? BOLAÑO: La gradación del rubor que siento cuando, por pura casualidad, abro un libro mío de poesía o uno de prosa. Me ruboriza menos el de poesía. PLAYBOY: ¿Usted es chileno, español o mexicano? BOLAÑO: Soy latinoamericano. PLAYBOY: ¿Qué es la patria para usted? BOLAÑO: Lamento dar una respuesta más bien cursi. Mi única patria son mis dos hijos, Lautaro y Alexandra. Y tal vez, pero en un segundo plano, algunos instantes, algunas calles, algunos rostros escenas o libros que están dentro de mí y que algún día olvidaré, que es lo mejor que uno puede hacer con la patria.

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Playboy logró fusionar dos conceptos muy diferentes, al lado de cada chica desnuda se asoma un texto periodístico.

entro de los íconos de las letras latinoamericanas, Gabriel García Márquez, participó en una entrevista para Playboy Estados Unidos, la que fue publicada luego de recibir el Nobel de Literatura en febrero de 1983. El autor había sido contactado un poco antes de ganar el premio, comentó que al principio no le había sonado la idea, hasta que su hijo Rodrigo, le recordó la historia literaria que tenía y el hecho de ser una de las revistas más leídas del mundo. Así “Gabo”, recibió en su casa en París a la periodista Claudia Dreifus.   “No conocía a nadie que me pudiera llevar a Gabo, pero tenía el contacto de su traductor de inglés, Gregory Rabassa. Sabía que García Márquez era evasivo y que no daba muchas entrevistas. Invité a su traductor a comer y le hablé de una posible entrevista y de los temas que quería tratar, de su obra y el descubrimiento de la literatura latinoamericana en el mundo. Unos días después, Gabo me llamó, Rabassa ya le había hablado de mi proyecto y él a ver si valía la pena… Al final aceptó y acordamos


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vernos en Paris. Ocho semanas después de estudiar como si tuviera una sustentación de tesis, me reuní con él y con mi intérprete en la capital francesa”, comentó la periodista para Viceversa Magazine.   La entrevista se tradujo en 18 páginas hablando sobre los orígenes del autor colombiano y sus influencias literarias, su opinión política sobre la Guerra Fría, la visión que tenía de los Estados Unidos, la Unión Soviética, las dictaduras latinoamericanas, las guerrillas de Centro América, además de su visión del amor como eje de Cien años de Soledad, erotismo y sexo. La conversación fue tan distendida que platicó de sus amigos el líder panameño Omar Torrijos y el revolucionario Fidel Castro. El ex mandatario cubano también se sumó a la lista de participantes de Playboy en dos ocasiones, la primera en 1967 entrevistado por Lee Lockwood y en 1985 realizada Jeffrey M. Elliot junto al congresista Mervyn M. Dymally.

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egún el autor del libro: Fidel Castro. El Comediante Playboy: Sexo, Revolución y Guerra Fría, Abel Sierra Madero, “Playboy desempeñó un papel fundamental en los debates sobre la normalización de las relaciones entre Estados Unidos y Cuba”. Sierra además señala que tras las entrevistas empezó a surgir en la opinión pública el asunto de la normalización de las relaciones entre Estados Unidos y Cuba.   Para Playboy las entrevistas se convirtieron en publicaciones tan importantes como la cantidad de desnudos y las fotos seductoras que presentaban en sus portadas. La revista comenzó a buscar voces distintas que lograran destacar y dejar trascendencia. En 1971 nadie esperaba leer el nombre de Albert Speer, arquitecto y amigo de Hitler. Speer acababa de salir de la cárcel de Sapndau donde había cumplido dos décadas de condena por crímenes de Tercer Reich. El arquitecto fue entrevistado sobre el auge del nazismo, el odio antisemita y sus recuerdos personales de Hitler, siendo uno de los mayores documentos periodísticos dentro de la revista.

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PLAYBOY: Cuando llegas al poder en 1959, ¿te imaginabas que Cuba y los Estados Unidos iban a tener una relación mejor de la que tienen? FIDEL CASTRO: Sí, ésa era una de mis ilusiones. En esa época, creíamos que el programa revolucionario podría llevarse a cabo con una comprensión mayor por parte del pueblo estadounidense. Creíamos que era justa, que sería aceptada. Es cierto, no pensamos en el gobierno de Estados Unidos. Pensábamos en sus gentes, que de algún modo podrían influir en las decisiones de su gobierno. Lo que no pudimos ver con claridad es que los intereses norteamericanos afectados por la resolución poseían los medios para cambiar la opinión pública estadounidense y distorsionar todo lo que estaba sucediendo aquí para presentárselo al público de la peor manera posible.

PLAYBOY: ¿Cómo pudo un hombre de su inteligencia y sensibilidad permitirse seguir formando parte de un sistema tan malvado, sin importar lo gradualmente que le absorbiese? SPERR: No hay, por desgracia, una correlación entre la inteligencia y la decencia; el genio y el idiota son susceptibles por igual a la corrupción (…) El día después de la Noche de los Cristales Rotos en 1938 (…) paseé por las ruinas ardientes de la sinagoga de Berlín y mi única reacción fue sentirme estéticamente ofendido por los escombros que inundaban la calle. Eso era todo: sólo me ofendía la suciedad. El recuerdo de ese día es uno de los más dolorosos de toda mi vida.

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Darine Stern se convirtiรณ en la primera Playmate afroamericana en posar en la portada de la revista en octubre de 1971. Cuando Estados Unidos continuaba con una fuerte discriminaciรณn y segregaciรณn racial. o 10


o precursor mediático

PRECURSOR MEDIÁCTICO “Mi padre vivió una vida excepcional e impactante como un pionero de los medios y cultura y una voz líder en algunos de los movimientos sociales y culturales más significativos de nuestro tiempo, al ser un defensor de la libertad de expresión, los derechos civiles y la libertad sexual”, comentó Cooper Hefner, hijo de Hugh Hefner en una entrevista para la revista People.

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esde sus comienzos Playboy se mostraba como un ardiente defensor de lo que antes era impopular. Escribía editoriales a favor de las causas homosexuales, transexuales y raciales. Incluso se convirtió en uno de los primeros defensores públicos ante el acceso a los anticonceptivos y del derecho al aborto, casi una década antes de que fuera aprobado en Estados Unidos, además de hacer donaciones a centros contra la violación.   Algunas de sus entrevistas a activistas o personalidades, sirvieron como base para mostrar los problemas que tenían las minorías en esa época. En palabras de Jonathan Reyes: “Hefner siempre fue un libertario por esencia, siempre respondió a la censura, fue un defensor a los derechos civiles, no es casualidad que una de las entrevistas más recordadas de en toda su historia fue a Martin Luther King Jr. Ahí se deja ver cómo le daba el paso a la defensa de derechos civiles, lo hizo después con temas como el matrimonio igualitario, la adopción de parejas del mismo sexo, era super loco ver eso en una revista como Playboy”.

Dentro de las memorables entrevistas a favor de la libertad de expresión, fue la del líder radical: Malcom X, quién declaró en la revista: “Todos los blancos nacen siendo demonios, es su naturaleza” y “Jesucristo era negro”. A pesar de que Hefner no estaba de acuerdo con las primeras declaraciones del activista, lo dejó explayarse puesto que para él, “son las ideas impopulares las que hay que proteger, las ideas de las minorías, las ideas populares se protegen a sí mismas”.   Dentro de lo mismo, la participación de la escritora australiana Germaine Greer, también fue un golpe para Playboy. En un comienzo, la autora de The Female Eunuch se había descartado de hablar con la revista, la que anteriormente se había intentado comunicar con otras activistas y personalidades del feminismo como: Madalyn Murray, Ayn Rand, Joan Baez y Gloria Steinem, quien se había encubierto como Playboy Bunny en 1963 enfocada en destruir la premisa básica del imperio de Playboy. Greer comentaba para la revista:   “Simplemente estoy en contra de mostrar a las chicas como si fueran chuletas de cerdo. ¿Por qué los cuerpos de las mujeres deberían ser este tipo de fetiche físico? ¿Por qué sus cuerpos no pueden ser simplemente una extensión de sus personalidades, como lo supone un hombre? No, no estoy en contra de la desnudez, y pagaré las cuotas a Playboy cuando maneje a un hombre en la puerta. Incluso puedes quedarte con el Playmate.”

Germaine Greer. Playboy. Junio 1974

Portada afroamericana (Fuente: Playboy) 19 o


playboy: el buen periodismo detrás de los desnudos o

SEDUCTOR Y CONTROVERSIAL A

pesar de los grandes escritores, frases enmarcadas y celebridades que aparecieron en Playboy, no se puede negar la astucia de Playboy al usar la sexualidad como producto de consumo. El erotismo y sensualidad permitió a la revista avanzar y posicionarse en el mundo de los magazines, incluso hasta formar un imperio en la cultura pop. La seducción de la Playmate del mes que posaba en la página central invitaba a hojear las páginas.   La periodista y bloguera body positive, Camila Navarrete, comenta que el contenido fotográfico sexual que existía en la revista era lo que vendía. Apuntando que “su valor se lo entregan las mujeres que aparecen ahí posando desnudas y muy sensualmente”.   Mostrar piel generaba discusiones en los grupos feministas radicales, puesto que manifestaban que la revista explotaba y cosificaba a la mujer viéndola como objeto sexual. En los años 60s y principios de los 70s, activistas feministas como Gloria Steinem, protestaron contra el sexismo plasmado en la revista, argumentando que Hefner utilizaba a las mujeres jóvenes para beneficio sexual y financiero.   Según lo que comenta Milena Vodanovic, “sí había una cosificación de la mujer como objeto sexual, como objeto de deseo, pero poniendo las cosas simples en su contexto, también empoderaba mucho a esa mujer, ser la Playmate del año era un pie para la fama”.   Se apuntaron los desnudos como evidencia de que la revista potenciaba la masculinidad y el privilegio de los hombres blancos heterosexuales. A pesar de que Hugh Hefner en múltiples entrevistas en su programa de televisión Playboy’s Penthouse, comentaba que su intención era la promover el sexo, y apoyar el disfrute de este libre y sin prejuicios, pero siempre con respeto, y asumiendo la responsabilidad de los embarazos no planificados. Incluso en las cartas al director de la revista, se mantuvo un diálogo constante con los lectores sobre temas sexuales y políticos.   La escritora y guionista estadounidense Diablo Cody, menciona en el documental Cómo Playboy cambió al mundo, que la revista: “puso el sexo a la vista de todos y dijo «mira es saludable, es normal, es importante» porque toda o 20

una nación llena de gente a mitad del siglo XX le tenía terror al sexo y la Playboy dijo «miren esto es parte de tu vida, es parte de tu día»”.   Tocar temas prohibidos es controversial y Playboy no se guiaba por los roles que la sociedad imponía independiente del sexo. Para Jonathan Reyes, “lo que Hefner quería al principio, era poner a la mujer en la misma posición del hombre en sentido de liberación de la mujer, no solo sexual, sino también en el tema de poder decir las cosas, pero siempre mezclado con muy buen periodismo”.   El contexto social e histórico va de la mano con los contenidos que un medio de comunicación entrega y si bien Playboy nadaba contra la corriente es fundamental comprender que la representación de la mujer y su uso en las impresiones va relacionado tiempo que rodea la revista. Hoy se puede ver a Playboy sumando entre sus páginas modelos trans, plus-size y a la comunidad lgbtq+.   Milena Vodanovic se refiere a esta descontextualización: “Si tú miras las antiguas Playboy hoy te escandalizas del punto de vista del uso de la mujer como un objeto sexual, parece algo completamente antifeminista una cuestión casi ofensiva, no pasaría la prueba de la blancura de los estándares actuales. Pero hay que dejar en contexto que era una época muy machista”.   Según la autora del libro Who stole Feminism? Christina Hoff Sommers, en el documental Cómo Playboy cambió al mundo, menciona que durante la época “existía el concepto de que había mujeres buenas y malas y debía ser virgen hasta el matrimonio, la pérdida de la virginidad y la sexualidad se asociaban mucho con el pecado”.   “Las mujeres en la época de los 50s estuvieron sometidas a una avalancha de propaganda que les decía que lo único que las llenaría en la vida sería ser esposas y madres, y tomando en cuenta lo perturbadores que fue la depresión y los años de la guerra, pienso que muchas mujeres pensaban que eso podría ser cierto”.   Menciona en el mismo documental, Alice Echols, profesora de estudios de género de la Universidad del sur de California, respecto adoctrinadas que eran las mujeres por la publicidad, que las impulsaba a seguir un estilo


o seductor y controversial

(Fuente: Leroy Neiman)

de vida hogareño y pagano.   Cuando en 1956 en programa de televisión Night Beat, Mike Wallace le preguntó a Hugh Hefner si lo que vendía se trataba realmente de un libro obsceno refinado, el fundador de Playboy contestó: “No lo creo, aquí hay una diferencia importante. El sexo siempre va a ser parte importante de la revista, porque el sexo es posiblemente la cosa que más interesa al hombre (…) hago énfasis en esto, nos parece un acto muy sano”.   Hasta el comienzo de la década de los 80, Playboy fue un clave en la revolución sexual en Estados Unidos, se normalizaban las tentaciones y los placeres carnales, aunque siempre desde una mirada masculina y heterosexual. Hefner en una entrevista a The New York Times en 1992, habló sobre la consideración de la revista como el estandarte de la liberación sexual: “Cambié la actitud de la gente hacia el sexo y demostré el mito del no a las relaciones sexuales prematrimoniales”.   Según la periodista y fundadora de Shelf Help, Toni Jones, en su investigación The impact of Playboy on society, menciona que la revista ayudó a despojar la naturaleza mojigata de la sociedad en ese momento, fue pionero en la participación de movimientos de Derechos Civiles y defensor de la comunidad lgbtq+. “Playboy ha tenido un impacto masivo en la sociedad. Sin embargo, todavía es misógino, Playboy contribuyó a la objetivación de las mujeres durante décadas. A pesar de haber presentado una ruptura con la ideología que solo debe haber vírgenes castas o madres afectuosas”, para la autora Playboy cambió a las mujeres de amas de

casa reprimidas a objetos con deseos sexuales.   El producto fotográfico resulta imprescindible en las revistas, y las imágenes de las conejitas desnudas eran controversiales para grupos feministas radicales lo que hoy también es cuestionado.   Bajo esta concepción para Camila la sexualidad es predominante y los cimientos de la revista: “Playboy no es conocido por los artículos o por la gente que escribía, no puedes decir «yo leo Playboy porque aparecen artículos de Ray Bradbury», la gente lo compra por las cosas que son más recreativas”.   Por el contrario Milena Vodanovic, contempla una idea global de Playboy “claro había una objetivación de la mujer, pero también la sacó del rol de dueña de casa, madre y esposa, la puso en el lugar del deseo como una mujer que libremente puede ejercer su sexualidad. Entonces eso también tiene un mérito en ese tiempo. No la podemos mirar con los cánones de hoy (…) “Fue una revista que dijo mujer, eres guapa tienes un cuerpo precioso, ven destápate y provócame, tú vas a ser la reina”   ¿Y qué piensa la ex editora de Playboy México? Mónica Maristain entregó siete años a la revista donde tuvo el poder en las decisiones periodísticas e independiente de los “bandos” que se habían creado fue categórica al plantear su visión. “No pensamos demasiado en cómo se vería la revista, eso es una cosa que se piensa más hoy… Lo que pensaba era que, yo tenía doce oportunidades al año de hacer la mejor revista posible”.

(Fuente: Leroy Neiman) 21 o


La autora de Playboy and the making of the good life, Elizabeth Fraterrigo, afirma que: “la forma en que las Playmate eran mostradas fue sumamente innovadora. Playboy quería que el lector sintiera un vínculo con esta persona, y para eso escribía texto que contaba alguna historia acerca de la joven mujer y mostraba otras fotos de ella vestida haciendo actividades cotidianas. La idea que todas las mujeres que encontrabas cotidianamente podían disfrutar del sexo”.   Lo que dice Fraterrigo se demuestra por ejemplo en la edición de diciembre de 1956 con Lisa Winters, junto a las fotografías de la modelo se mostraba un texto que exponía sus cualidades y las cosas que más le gustaba: “Le encanta leer y pasa al menos un día a la semana en la biblioteca pública. Sus favoritos especiales son los poemas de amor de Elizabeth Barret Browning. Ella se llama a sí misma una «chica hogareña»”.   Las Playmates que posan en la revista eligen esta vía como impulsor para su carrera como modelo. Sin ir más lejos, chicas fuera del modelaje han sido portadas en la revista. La cantante Madonna posó para el conejito en 1985 y la actriz Drew Barrymore en 1995. Para Arturo Flores, actual editor de Playboy México, la mujer es libre de elegir si posar o no para la revista. Para Arturo Flores, actual editor de Playboy México, la mujer es libre de elegir si posar o no para la revista, “una es que te quites la ropa delante una cámara porque te obligan, y otra es que te la quites porque tú quieres, y las modelos trabajan de eso. Llegan muchos mensajes de mujeres -modelos o noque quieren salir en la revista, hay una cuestión aspiracional de acercarse a Playboy… Me gusta que exista esa fantasía que la marca sigue representando.”   Playboy como marca global, sin embargo, la revista es de nicho. Muchos conocen el icono, pero pocos han leído el contenido de sus páginas.   Un sinfín de grandes escritores y entrevistados nadan entre las páginas de Playboy y a este océano se suma el planteamiento de una política progresiva y entrevistas de vanguardia. Un candidato digno para ser considerado un gran referente periodístico del mundo magazine.   Acaso ¿Los desnudos y las poses eróticas desvalorizan el trabajo periodístico plasmado en la revista? o 22

“Es difícil concebir que un medio serio publique fotos de desnudos, que tampoco tiene que ser banal sino artístico. Si pones una fotografía de la Venus de Milo es arte, pero si pones a una fotografía de una modelo, es pornografía, no entiendo donde comienza lo uno y dónde acaba lo otro.” Arturo Flores refiriéndose al concepto de las personas frente a Playboy como medio serio. Fuente: The New York Times



playboy: el buen periodismo detrás de los desnudos o

PLAYBOY UNA MIRADA ACTU (Fuente: Librería de Irma )

(Fuente: Oasis FM)

(Fuente: Women Talk)

“Playboy es un recuerdo de lo que pasó. Para mí Playboy murió en cierto contexto (…) Pero Playboy tiene un montón de cosas que van a quedar más allá del prejuicio que haya contra ella”.

“Claramente no es la misma importancia de antes, ni para Playboy, ni para Rolling Stone, tampoco para otra revista”.

“Ya pasó su época, empezó a sufrir cuando surgió el internet. La mujer vista como un ser que se pone desnudo y bello sobre una cama de rosas rojas ya es como chistosa, no creo que sea una imagen que ninguna persona joven tenga en su cabeza de erotismo. Cambió el mundo y lo que Playboy ya no tiene el mismo lugar, es muy de su época”.

Mónica Maristain

Pablo Márquez

Milena Vodanovic

o 24


o playboy una mirada actual

UAL (Fuente: Revista Velvet)

(Fuente: Medium)

(Fuente: Playboy México)

“Hay dos percepciones, las de las generaciones más chicas que no la conocen mucho, y las mayores que la deben recordar con nostalgia”.

“Siento a Playboy aún le queda mucho por transar para llegar a ser una revista moderna, pero ha avanzado un montón, pasó desde cosificar muy solapadamente a la mujer a dar un espacio de voz (…) No creo que muera pero sí se va a seguir revelando y saque producto en 10 años más que nosotros no nos vamos a imaginar”.

“Quiero pensar que en el futuro la revista que va a seguir siendo una marca relevante, joven, con mucha historia pero siempre con convicción de la juventud”.

Jonathan Reyes

Arturo Flores

Camila Navarrete

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