La figura de Marx -en vez de olvidarse- toma fuerza conforme pasa el tiempo, los acontecimientos y la historia que los contiene y agrupa. También crece el número de interesados en acercarse a la comprensión de la obra de uno de los pensadores más fascinantes de las ciencias sociales. Y es que si no se trata de entender al mundo sino cambiarlo, como el mismo autor diría, nacen también nuevas herramientas para entender las ideas que logran ese cambio que el mundo necesita. Para eso está Marx para principiantes, para aquellos que nunca son indiferentes a lo que sucede y se sirven de la teoría como apoyo, como leña al fuego de las transformaciones.