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Artenara
Un paseo por el casco histórico de Artenara y sus miradores Nos encontramos en el casco municipal a mayor altitud de Gran Canaria y cumbre de la naturaleza y del senderismo. Aquí empezamos nuestro recorrido circular en El Mirador de La Atalaya, al inicio del pueblo, desde donde se observan diferentes barrios del municipio y las modernas cuevas en las que viven los vecinos actualmente. Desde aquí también podemos observar la mole del Parque Natural de Tamadaba, la silueta del Teide en la isla de Tenerife y La Montaña de la Cilla.
Bajando hacia el pueblo, pasando por el Mirador de la Solanita, llegamos hasta la Plaza de San Matías, centro neurálgico del casco histórico de Artenara y donde se encuentra la Iglesia con el mismo nombre. Subimos por detrás de la plaza a la ermita de la Virgen de La Cuevita, desde donde bajamos por un sendero que nos conduce, a través de un singular barrio troglodita, hasta el Museo Etnográfico Casas Cueva de Artenara, modelo de vivienda en cueva en el que habitaba la población prehispánica y posteriormente hispánica de este lugar.
Siguiendo por la misma calle hacia la Iglesia nos encontramos con El Balcón de Unamuno y el Mirador de la Esquina, desde donde contemplamos la impresionante Cuenca de Tejeda, la sierra del Bentayga, con su Roque, y el Roque Nublo, símbolo de Gran Canaria. Desde la plaza de La Iglesia nos dirigimos al Mirador de La Cilla, donde un sendero hasta la cima nos lleva a la escultura del Sagrado Corazón de Jesús, otro símbolo identificativo de Artenara.
Rutas circulares en el territorio municipal de Artenara
Montaña de Artenara (SL1)
Distancia: 4,08 km Duración: 2 horas Desnivel máximo: 246 m Dificultad: Media-Baja Inicio: Artenara centro
Subida a la Montaña de Artenara (1.476 m) atravesando antiguas pistas forestales y caminos rurales, a la sombra de los pinos canarios.
Montaña de Altavista (SL 2)
Distancia: 9,73 km Duración: 5 horas Desnivel máximo: 219 m Dificultad: Media-Alta Inicio: Degollada del Sargento
Espectacular ruta por el centro de la cresta montañosa de la cordillera de Altavista y una de las más visitadas en Artenara.
Tamadaba (SL 3)
Distancia: 4,24 km Duración: 2 horas Desnivel máximo: 197 m Dificultad: Media Inicio: Degollada de Las Lajas
El Macizo de Tamadaba – Altavista es una de las grandes unidades del relieve de la isla y está protegido con la figura de Parque Natural por su masa boscosa de pinos canarios. La ruta sube al Pico de La Bandera (1.443 m) y desciende por el Lomo del Zapatero. Se puede descansar en una zona recreativa donde, cerca, se haya la Fuente del Reventón.
Risco Caído (SL 4)
Distancia: 3,93 km Duración: 2 horas Desnivel máximo: 193 m Dificultad: Media Inicio: Lugarejos
Atractiva ruta de senderismo diseñada de forma circular y que toma como referencia el barrio locero de Lugarejos y el yacimiento arqueológico del Risco Caído (no se admiten mascotas y hay que reservar para entrar al interior).
Pista de Guardaya (SL 5)
Distancia: 8,6 km Duración: 4 horas Desnivel máximo: 328 m Dificultad: Media-Baja Inicio: Artenara centro
Ruta que pasa por la pista forestal de Guardaya para unir antiguos caminos. El itinerario está presidido por el Roque Bentayga y los Roques de Cuevas del Rey.
Las Hoyas (SL 6)
Distancia: 6,86 km Duración: 3 horas Desnivel máximo: 223 m Dificultad: Media-Alta Inicio: Cruce Cruz de Acusa
Ruta de fuertes desniveles y contrastes que recorre los agrestes y remotos lugares del municipio de Artenara que tiene como objetivo visitar la recóndita Presa de Las Hoyas. Con un perfil de alta montaña que combina paisajes de cumbres, valles y altiplanos.
Punta de Las Arenas (SL 7)
Distancia: 5,78 km Duración: 3,5 horas Desnivel máximo: 532 m Dificultad: Alta Inicio: Andén Verde
Ruta para conocer Punta de Las Arenas, un pedacito de costa desconocida, abrupta, salvaje y biodiversa que ofrece uno de los espectáculos naturales más interesantes e impactantes de Gran Canario.
Tirma (SL 8)
Distancia: 26,4 km Duración: 7 horas Desnivel máximo: 724 m Dificultad: Alta Inicio: La Casa de Arriba (Degollada Honda)
Ruta de larga distancia para conocer la Cuenca de Tirma, un espacio natural que guarda una parte muy importante de la historia de la isla y de nuestra propia especie.