Renovacion urbana by Paul Alfred Huaman Mendoza

Transformación Social del Hábitat Renovación Urbana: El Barrio entre la Acción Social y la Acción de Gobierno El Caso del Plan Parcial de San Lorenzo, en Medellín

Avelino Orlando Díaz Rendón

Universidad Nacional de Colombia Facultad de Artes Bogotá, Colombia 2011

Transformación Social del Hábitat Renovación Urbana: El Barrio entre la Acción Social y la Acción de Gobierno El Caso del Plan Parcial de San Lorenzo en Medellín Trabajo de Investigación presentado como requisito parcial para optar al título de: Magister en Hábitat

Avelino Orlando Díaz Rendón

Directora Mg., Socióloga, Cecilia Henríquez de Hernández

Línea de Investigación: Estudios en Vivienda

Universidad Nacional de Colombia Facultad de Artes Bogotá, Colombia 2011

A mi familia, a mis amigos y compañeros de la Universidad Nacional, a mis compañeros de trabajo, y a Cecilia. A todos gracias por su comprensión, y apoyo en los momentos difíciles

del

investigación.

duro

trasegar

esta

Resumen y Abstract

VII

Resumen A través de la Renovación Urbana del sector de Colon-Niquitao, dentro del Plan Parcial de San Lorenzo, el municipio de Medellín ha buscado la transformación de un Barrio deteriorado para recuperar su vocación residencial, dotar de centralidad barrial al área que cubre el Plan, y mejorar la calidad de vida de los residentes. Nos hemos propuesto indagar si dicha transformación por Renovación Urbana, es una necesidad de la comunidad o un objetivo de decisión pública consecuente con la planeación estratégica de la ciudad; y si el Gobierno en términos de la regulación de los conflictos e intereses de los actores del territorio, logra la transformación social del hábitat de un Barrio donde conviven familias en más de 90 inquilinatos, 22 mil habitantes separados de su centralidad histórica, que además cohabitan con usos del suelo deteriorantes y expulsores de vivienda.

El Municipio ha facilitado la construcción de 600 viviendas de un plan de 7 mil para el sector, y ha convertido el obsoleto cementerio de San Lorenzo –patrimonio de la ciudaden Parque, como centralidad barrial para los barrios Las Palmas, San Diego y ColonNiquitao, una centralidad que finalmente falló como nodo atractor para los residentes del sector.

Palabras Clave: Hábitat, Transformación, Renovación Urbana, Barrio, Necesidades, Decisiones Públicas.

VIII

Título de la tesis o trabajo de investigación

Abstract Through the Urban Renewal Colon-Niquitao sector within the Partial Plan of San Lorenzo, the municipality of Medellín has sought to transform a deteriorated neighborhood to regain its vocation residential neighborhood give centrality to the area covered by the Plan, and improve the quality of life of residents. We intend to investigate whether such a transformation by Urban Renewal, is a community need or purpose of public decision consistent with the strategic planning of the city, and if the government in terms of regulation of conflicts and interests of actors territory, manages the transformation of Hábitat of a neighborhood where families live in over 90 tenements, 22 000 people separated from their historical centrality, also land uses coexist with deteriorating housing and ejectors.

The City has facilitated the construction of 600 housing plan 7 000 for the sector, and has made obsolete San Lorenzo Cemetery heritage of the city-Park as a central neighborhood to neighborhood Las Palmas, San Diego and Colon -Niquitao, a central node that ultimately failed as an attractor for residents of the sector.

Keywords: Hábitat, Transformation, Urban Renewal, Neighborhood, Needs, Public Choice.

Contenido

Contenido Resumen ........................................................................................................................ VII Lista de Gráficos ............................................................................................................ XI Lista de Fotografías ...................................................................................................... XII Lista de Mapas............................................................................................................. XIV Lista de Planos Cartográficos ..................................................................................... XV Lista de Tablas ............................................................................................................ XVI Introducción .................................................................................................................... 1 1.

Hábitat y Transformación ....................................................................................... 5 1.1 Transformación .................................................................................................. 9

Transformación del Hábitat por Renovación Urbana y Desarrollo Urbano ........ 15 2.1 Renovación Urbana.......................................................................................... 22 2.2 Renovación de Áreas Urbanas Abandonadas o Infrautilizadas. ....................... 23 2.3 La Renovación Urbana Como Método de Regulación del Crecimiento Metropolitano. ............................................................................................................. 24 2.4 La Renovación para Recuperar Áreas Urbanas Deterioradas. ......................... 25 2.5 La Ciudad Compacta, tras los Tratamientos de Desarrollo, el Redesarrollo y la Densificación. ............................................................................................................. 27 2.6 El Tratamiento de Desarrollo Urbano. .............................................................. 28 2.7 Tratamiento de Redesarrollo. ........................................................................... 30 2.8 La Densificación. .............................................................................................. 31

El Barrio .................................................................................................................. 33 3.1 La Identidad Barrial. Punto Intermedio entre el Habitante y la Comunidad, y Punto de Encuentro entre los Habitantes y el Gobierno. ............................................. 39 3.2 La Comunidad, los Habitantes y la Transformación.......................................... 40

4. Las Decisiones Políticas y la Acción de Gobierno en la Transformación del Barrio ............................................................................................................................. 49 4.1 El Modelo Racional de Decisión Pública .......................................................... 52 4.2 El Modelo Incremental, Soluciones Alternativas a las Problemáticas. .............. 53 4.3 Los Modelos Intermedios de Decisión en el Hábitat. ........................................ 54 4.4 Definición del Problema Social, la Agenda Pública en la Transformación del Barrio. 54 4.5 Los Tratamientos Urbanísticos, La Transformación del Hábitat, como un Problema de Agenda, o una Necesidad Social de la Comunidad................................ 56 5.

El Área de Renovación del Sector de San Lorenzo. ............................................ 61

Transformación Social del Hábitat

5.1 Localización y Extensión ................................................................................... 62 5.2 Topografía ........................................................................................................ 62 5.3 Tipologías ......................................................................................................... 64 5.4 Características Socio - Urbanas del Area de Renovación Plan Parcial de San Lorenzo. ...................................................................................................................... 65 5.5 La Estructura Ecológica del Área ...................................................................... 69 5.6 Los Inquilinatos ................................................................................................. 71 5.7 Las Torres de San Sebastián, y los Modelos de Vivienda del Sector. ............... 73 5.7.1 Otros Proyectos, Programas y Políticas de Vivienda. .....................................75 5.7.2 Los proyectos urbanos y de renovación, entre San Lorenzo, y Guayaquil. ....77 5.8 La Transformación Social del Hábitat como Política Pública en el Caso del Plan Parcial de San Lorenzo. .............................................................................................. 86 6.

Conclusiones ........................................................................................................107

Anexo: Plano Cartográfico Barrio Guayaquil......................................................115

B. Anexo: Plano Cartográfico Comuna 10, La Candelaria ......................................117 C. Anexo: Plano Cartográfico, Plan Parcial Parque San Lorenzo. .........................119 D. Anexo: Plano Cartográfico Plan Parcial Parque de San Lorenzo, Poligono de Renovación. .................................................................................................................121 E.

Anexo: Plano Cartográfico Barrio Colón.............................................................123

Anexo: Plano Cartográfico Barrio las Palmas. ...................................................125

G. Anexo: Plano Cartográfico Barrio San Diego .....................................................127 H. Anexo: Mapa de Densidades por Polígonos de Tratamiento .............................129 Bibliografía ...................................................................................................................131

Contenido

Lista de Gráficos Gráfico 5-1 Usos del Suelo en el Barrio Colon Niquitao. Fuente, Elaboración Propia con datos del Documento Técnico de Soporte del Plan Parcial de San Lorenzo. ... 65 Gráfico 5-2 Resultados proceso de renovación de las decadas 70 y 80 del siglo XX. Traslado de la Plaza de Mercado a la zona de la estación Villa, y de la Terminal a un complejo en el Barrio Caribe en el norte de la ciudad de Medellín................... 89 Gráfico 5-3 Proceso de Transformación Actual, Nueva Centralidad de San Lorenzo. Y Nueva Centralidad Metropolitana Norte .................................................................. 91

Contenido

XII

Lista de Fotografías Fotografía 1-1 Norteamerica, vivienda suburbana para estrato alto, en las afueras del Municipio de Bello, en cercanías a la estación Niquía. Fuente: Elaboración Propia ............. 13 Fotografía 1-2 Centralidad Metropolitana Norte, Estación Niquia del Metro, Fuente. Elaboración propia ......................................................................................................................... 13 Fotografía 2-1 Estación Medellín, Vista al fondo Barrio Niquitao, Fuente: Autor M Lalinde . 17 Fotografía 2-2 Barrio Colon 1925, autor desconocido ............................................................... 19 Fotografía 2-3 Imagen frontal del Área de San Lorenzo. Fuente: Elaboración Propia ........... 23 Fotografía 2-4 Vacío Urbano, Centralidad Norte Valle de aburra. Fuente: Elaboración propia ......................................................................................................................................................... 29 Fotografía 2-5 Desarrollo en vacío urbano, centralidad norte metropolitana. Fuente: Elaboración propia ......................................................................................................................... 29 Fotografía 3-1 Barrio San Diego, Área del Plan Parcial de San Lorenzo ................................. 35 Fotografía 3-2 Centro Comercial San Diego, Zona estrato 5 Barrio San Diego. Fuente Elaboración propia ......................................................................................................................... 38 Fotografía 3-3 Frente del Colegio de San Lorenzo, parte de las obras de Renovación, dotación de equipamiento social. Fuente: Elaboración propia ................................................ 43 Fotografía 3-4 Mercado dominical en la plaza mayor, hoy parque de Berrío, autor desconocido ................................................................................................................................... 45 Fotografía 3-5 Plaza de Cisneros, lugar al que se trasladó el mercado que se realizaba en la Plaza Mayor, ubicación Barrio Guayaquil vecino de Colon-Niquitao ....................................... 46 Fotografía 3-6 Parque de Berrío actualmente, antes Plaza Mayor. Fuente Elaboración Propia ......................................................................................................................................................... 48 Fotografía 5-1 Torres de San Sebastián. Fuente Elaboración propia ...................................... 73 Fotografía 5-2 Ubicación del Programa de Vivienda Social Compartida. Fuente Elaboración propia. ............................................................................................................................................. 77 Fotografía 5-3 Panoramica de Niquitao en 1924, Autor desconocido. ..................................... 79 Fotografía 5-4 Barrio Colon 1925, autor desconocido. .............................................................. 80 Fotografía 5-5 Área de Plaza de Cisneros, futura Avenida Calle San Juan, al fondo Niquitao ......................................................................................................................................................... 81

Transformación del Hábitat por Renovación Urbana y Desarrollo Urbano

XIII

Fotografía 5-6 Barrio Colon 1925. Autor M Lalinde .................................................................... 83 Fotografía 5-7 Fotografía Satelital Área del Plan Parcial de San Lorenzo. Fuente, SITE Alcalía de Medellín ......................................................................................................................... 84 Fotografía 5-8 Avenida San Juan, y Centro de Medellín, desde Colegio San Lorenzo. Fuente Elaboración propia. ........................................................................................................................ 87 Fotografía 5-9 Entrada del Parque San Lorenzo vista desde el interior. Fuente. Elaboración propia .............................................................................................................................................. 92 Fotografía 5-10 Parque de San Lorenzo. Fuente. Elaboración propia .................................... 93 Fotografía 5-11 Interior del área de conservación patrimonial del Cementerio de San Lorenzo. Fuente. Elaboración propia ........................................................................................... 94 Fotografía 5-12 Parque de San Lorenzo. Fuente. Elaboración propia ...................................... 95 Fotografía 5-13 Cancha Placa Polideportiva abierta, Colegio de San Lorenzo. Fuente. Elaboración propia ......................................................................................................................... 98 Fotografía 5-14 Nuevo Nodo, Centralidad Practicada San Lorenzo. Fuente. Elaboración propia ............................................................................................................................................ 105

Contenido

XIV

Lista de Mapas Mapa 5-1 Deficit de Vivienda, Municipio de Medellín. Fuente. Alcaldía de Medellín. .............................................................................................................................. 104

Contenido

Lista de Planos Cartográficos Plano cartográfico 2-1 Barrio Guayaquil, nótese Barrio Colon al Oriente, en círculo Rojo Área de Renovación 1970, antigua estación Medellín del Ferrocarril, hoy Centro Administrativo Regional y Municipal .............................................................. 26 Plano cartográfico 3-1Comuna 10 "La Candelaria", comuna del centro. Fuente. DAPM de Medellín. Ver anexo B. Pág. 111. ................................................................ 47 Plano cartográfico 5-1 Área del Plan Parcial de San Lorenzo ................................... 63 Plano cartográfico 5-2 Resalto de la Nueva Centralidad Proyectada del Plan Parcial de San Lorenzo. Fuente. SITE Alcaldía de Medellín................................................... 64 Plano cartográfico 5-3 Barrio Colon .......................................................................... 66 Plano cartográfico 5-4 Barrio Las Palmas. Fuente. DAPM de Medellín .................... 68 Plano cartográfico 5-5 Barrio San Diego. Fuente. DAPM de Medellín ...................... 70 Plano cartográfico 5-6 Proyecto de Renovación Urbana del Centro en 1969, Construcción y ampliación Avenida Oriental sobre la Cra San Felix, y avenida Calle San Juan, los resaltados en cuadricula hacia el sur corresponden a los barrios San Antonio y Colon-Niquitao ............................................................................................ 78 Plano cartográfico 5-7 Estratificación Medellín 2005, resaltado Barrios del Plan Parcial de San Lorenzo. Fuente. Alcaldía de Medellín ..............................................100 Plano cartográfico 5-8 Estratificación 2007, resaltado barrios del Plan Parcial de San Lorenzo. Fuente. Alcaldía de Medellín ...............................................................101

Contenido

XVI

Lista de Tablas Tabla 5-1 Población, Hectáreas y Densidad en el Plan Parcial de San Lorenzo. Fuente Elaboración Propia, con datos del Documento Técnico de Soporte al Plan Parcial de San Lorenzo . ............................................................................................... 67 Tabla 5-2 Comparativo Encuesta de SISBEN y Vivienda 2010. Fuente. Alcaldía de Medellín ......................................................................................................................... 95 Tabla 5-3 Encuesta Calidad de Vida, Comuna 10, 2009. Fuente Alcaldía de Medellín ....................................................................................................................................... 96 Tabla 5-4 Encuesta Calidad de Vida, Número de viviendad comuna 10, 2009. Fuente Alacaldía de Medellín .................................................................................................... 96 Tabla 5-5 Encuesta Calidad de Vida 2005, comuna 10. Fuente Alcaldía de Medellín ....................................................................................................................................... 97 Tabla 5-6 Encuesta Calidad de Vida 2008, Comuna 10. Fuente. Alcaldía de Medellín .............................................................................................. ¡Error! Marcador no definido. Tabla 5-7 Encuesta Calidad de Vida 2008, Comuna 10. Fuente. Alcaldía de Medellín ....................................................................................................................................... 98 Tabla 5-9 Encuesta Calidad de Vida 2008, Comuna 10. Fuente. Alcaldía de Medellín ....................................................................................................................................... 99

Introducción El presente trabajo de investigación tiene por objeto indagar por la transformación social del hábitat, que acontece a partir de la Renovación Urbana que se hace en un Barrio residencial sometido a deterioro físico, inseguridad y estigmatización social, hemos tomado como ejemplo complementario de nuestro estudio o punto de comparación el tratamiento de desarrollo urbano, es decir estudiamos las transformaciones que ocurren en el hábitat en el componente social. Indagamos por la transformación del hábitat en la interrelación entre el sujeto, la sociedad y la naturaleza; en contraste con los fines del Estado en este caso los municipios-, frente a la población y el territorio, la gestión que hace este de la ciudad como ese hábitat urbano por excelencia.

Partimos de la hipótesis, de que cada cambio físico en el hábitat de la ciudad, por su carácter territorial al ser aplicado sobre un Barrio que tiene un gran componente residencial, transforma sus componentes socio-espaciales, como el territorio mismo, sus referentes, su identidad y su imaginario, convirtiéndose una acción de Gobierno en un reto de gobernabilidad, frente a las acciones sociales que pudieran desencadenarse, como resultado de la colectivización de una decisión pública, sobre las necesidades del Barrio, o los objetivos estratégicos de la ciudad en la gestión del territorio.

Se ha escogido para explicar esa transformación social del hábitat, la ciudad de Medellín y el valle conurbano del Rio Aburrá, por la relación natural, histórica, cultural y política de los municipios que se distribuyen esta área natural. Y ya que cada acción pública, social o económica sobre el territorio afecta a cada municipio circunvecino a Medellín, de allí que se observe en este trabajo la armonización de las políticas municipales sobre el territorio.

Transformación Social del Hábitat

En relación a cada caso específico sobre los tratamientos urbanísticos de Renovación y Desarrollo, se ha seleccionado el Barrio Niquitao, inserto en el Plan Parcial de San Lorenzo, una zona central, con trascendencia histórica para la ciudad, por ser uno de los primeros barrios de ésta, en tal sentido ser sometido históricamente a los proyectos urbanos más importantes en la primera mitad del siglo XX, como son la construcción del ferrocarril, la construcción de las instalaciones de la plaza de Mercado, la canalización del Rio Medellín primeras transformaciones urbanas, que modificarían el Hábitat de la ciudad y del Barrio en aquella época. Adicional también haber sido renovados tras la salida del Tren del centro de la Ciudad, así como la deslocalización relocalización de la plaza de mercado y de las terminales de transporte, así mismo construirse -con la demolición de viviendas históricas del sector- las avenidas San Juan y Oriental en la segunda mitad del siglo XX, es decir es un barrio central y centro de las transformaciones urbanas de la ciudad.

En lo concerniente al ejemplo del tratamiento de Desarrollo Urbano hemos tomado como referente, el caso de la generación de centralidad de carácter metropolitano en el zona norte del Valle de Aburrá, denominada “Unidad Estratégica de la Llanura Aluvial del Rio Aburrá- Norte” que comprende el área de Niquia en el municipio de Bello, un área en condiciones de vacío urbano sometida al tratamiento de Desarrollo Urbano, escogida por su relación geográfica, histórica, política y social con la ciudad central Medellín, y por la relación ambiental entre los municipios de este vale geográfico. Bello, es un municipio industrial en el norte de la ciudad, que ha cumplido con la función de prestar servicios territoriales a la ciudad central y la valle en general al ubicarse allí los proyectos de vivienda de interés social como “Ciudad Niquía”, el Relleno Sanitario de la Curva de Rodas, la Cárcel de Bellavista, infraestructuras y servicios deslocalizados de Medellín y relocalizados en Bello, además de ser el centro principal de los talleres del Ferrocarril, lo que permitió que la urbanización y la industrialización del municipio, de allí que citemos la transformación de esta zona, en referencia a la Renovación en San Lorenzo.

Para ello este trabajo, comienza por hacer una digresión sobre el hábitat, y su relación con el concepto de transformación, ¿Por qué el Hábitat, se transforma y es transformado? Tratamos de llegar a una definición de hábitat cercana a la de constructoconstructor, para entender la relación entre el sujeto, la sociedad y la naturaleza en su relación tríadica.

Introducción

Pasamos luego a la relación de la Renovación Urbana, como proceso transformador del hábitat en su esfera física y natural, para dilucidar si es posible un cambio que revierta las condiciones no solo del deterioro físico, sino, también de la estigmatización social a la que son sometidos los barrios deteriorados, o con infraestructura y edificaciones abandonadas, infrautilizadas y obsoletas, como las comunidades barriales y sus diferentes grupos sociales a partir de los hábitos construyen, de-construyen y reconstruyen su identidad barrial y sus imaginarios a través de las prácticas y vivencias cotidianas sobre el espacio, ¿cambian por la Renovación, se adaptan al cambio, o a pesar del cambio conservan su identidad y sus hábitos?

De esta manera pasamos a estudiar el concepto de barrio, a partir de sus componentes, atributos y definiciones, en relación a la transformación, y la Renovación. Es decir, entender el Barrio, para entender cómo opera la renovación urbana en el componente social.

En ese sentido indagamos por la decisión pública, y como un objetivo de ciudad, puede o no dialogar con las necesidades del barrio, entendiendo que la Renovación va en un camino de doble sentido, es decir, la Renovación como necesidad de la comunidad, o como problemática de la ciudad, en el proceso de formación de la política pública de gestión del territorio. Por ello analizamos los modelos de decisión política y su relación con las decisiones públicas relacionadas con la Renovación Urbana y/ o el Desarrollo Urbano.

Todo este aspecto conceptual del trabajo, empezamos a relacionarlo con San Lorenzo como Barrio y como área de Renovación Urbana localizada en el centro de Medellín estudiando los procesos históricos ya de Renovación y los procesos de transformación del hábitat. Analizando la problemática actual de la Renovación en el sector.

Para logarlo, hemos recurrido a la consulta bibliográfica, la consulta de documentos técnicos, el análisis de la cartografía disponible sobre los barrios del centro directamente relacionados principalmente con Colon-Niquitao, también se ha analizado los documentos técnicos disponibles acerca del Plan Parcial de San Lorenzo. Así como la normatividad sobre administración territorial en Medellín y el Valle de Aburrá. También

Transformación Social del Hábitat

se realizó una visita de campo con el grupo de docentes y estudiantes de la Maestría en Hábitat de la sede Bogotá de la Universidad Nacional, y se recurrió a la entrevista como técnica de recolección de la información, se entrevistaron lideres barriales,

técnicos

relacionados con la Empresa de Desarrollo Urbano (EDU), personas Iigadas al Instituto de Vivienda Social de Medellín, profesionales expertos en materia de Gobierno y gestión municipal, y habitantes del sector.

Esto con base en que Gobiernos y habitantes poseen estrategias y mecanismos de acción política, de implementación de su poder como actores del territorio, y la comunidad en última instancia posee la resiliencia como esa capacidad de adaptación al cambio conservando sus propios hábitos, a lo que finalmente queremos llegar, a demostrar que es la comunidad la que determina el cambio y no le Gobierno a través de sus mecanismos de poder, y de la implementación de sus políticas, y que tal situación puede llevar a retos de gobernabilidad en el territorio.

1. Hábitat y Transformación “Nuestras ideas de lo que es justo y de lo que no lo es pueden reaccionar a los argumentos que se someten a un debate público y unas veces tienden a reaccionar a las ideas de otros con una solución de compromiso o incluso con un acuerdo y otras con una implacable terquedad”. AmartyaSen, “Desarrollo y Libertad”

Para hablar de transformación social del Hábitat, por la acción social y la acción de Gobierno a través de tratamientos urbanísticos como los de Renovación en el caso del Plan Parcial de San Lorenzo, y de desarrollo urbano en el caso de la Llanura Aluvial del Rio Aburrá Norte sector Niquia, debemos partir de una concepción de hábitat, en este caso la desarrollada desde el punto de vista de Enrique Leff, para quien el Hábitat “es soporte físico y trama ecológica, que se define al ser habitado”, dice Leff, que el Hábitat es transformado por las prácticas culturales y productivas de la comunidad que lo habita y entre otras cosas dice, que al habitar se generan hábitos lo que es consustancial a la apropiación del territorio. Cuando observamos una intervención física “planeada” sobre el territorio urbano, en la ciudad, son intervenciones que se denominan tratamientos, y que como desarrollo de una política de ciudad, buscan entre muchos de sus objetivos, por ejemplo en el caso del Plan Parcial de San Lorenzo, “generar centralidad”, pero desarrollar una centralidad implica los hábitos espaciales de la población a la cual está destinada, tenemos entonces que ver aspectos importantes desde lo social, en este caso, la acción social como propuesta o respuesta organizada, ante la decisión política de realizar dichos tratamientos; así como, las prácticas sociales de consumo del espacio y las vivencias en este; en contraste con las acciones de gobierno sobre el territorio, es decir, el proyecto

Transformación Social del Hábitat

de gobierno como producto de una planeación estratégica concertada o no en los distintos niveles de Ciudad, el Barrio, y la Región. Para nuestro caso Medellín y el área cultural y geográfica del valle de Aburrá.

Como hablamos de transformación social, por la acción social, a partir de la intervención física del territorio como decisión de Gobierno, hemos tomado como caso de estudio el 1

Plan Parcial de San Lorenzo, ubicado en la Comuna 10 denominada “La Candelaria”, y que corresponde al centro de la ciudad de Medellín, pero como decisión de Gobierno y acción de éste sobre Barrios de tradición residencial, también tomamos como referencia a manera de ejemplo que nos permite contrastar con la transformación en el sector de San Lorenzo, la “Unidad Estratégica de la Llanura Aluvial del Rio Aburrá Norte”, en su sector Niquia, la hemos tomado por que allí se tiene como objetivo la realización de una centralidad de carácter metropolitano, en las inmediaciones de un Barrio de vivienda de interés social, construido en la década del 70 en el siglo XX, es además un territorio ligado geográfica e históricamente a Medellín, es un territorio que corresponde al municipio de Bello en el norte del Valle de Aburrá, perteneciente a la institución intermunicipal del “Área Metropolitana del Valle de Aburrá”, allí en éste municipio se concentró parte de la industria, y de la infraestructura de la región, allí se localizaron industrias tradicionales de textiles, los talleres principales del Ferrocarril, y otras infraestructuras de servicios de alcance metropolitano y Nacional como la cárcel de Bella Vista que, y el Relleno Sanitario de la Curva de Rodas que sirven principalmente a Medellín. Es decir son dos puntos de la ciudad metropolitana correlacionados por la historia y las decisiones políticas y la planeación -en el área de la comuna de la Candelaria estuvo la Cárcel municipal, también estuvo el ferrocarril y la industria en particular hacia la zona de San Lorenzo, o Camellón de la Asomadera o Niquitao, algunos de estos servicios fueron deslocalizados de Medellín, y relocalizados en el municipio de Bello-, sujetos a transformaciones físicas que impactan el conjunto de la ciudad,

Comuna: la ley 136 de 1994, permite a los municipios, para su gestión dividir su territorio en Comunas para su zona urbana, y Corregimientos para su zona rural, en el caso del municipio de Medellín este se divide en 16 Comunas y cinco (5) Corregimientos, teniendo como proyecto crear la comuna 17 en el sector denominado Nuevo Occidente, que corresponde a territorio segregado del corregimiento de San Cristobal, e incorporado como zona de expansión urbana de Medellín.

Hábitat y Transformación

Es decir el valle de Aburrá, y su ciudad central principal, Medellín, son un espacio común geográfico, e histórico, constituyen el hábitat del valle metropolizado, con más de dos millones de habitantes, con un centro histórico , tradicional y representativo ubicado en el “Parque de Berrío” y el sector de San Lorenzo, ambos en Medellín, población que es beneficiada o impactada por la innovación empresarial urbana, o la actuación regulada de la iniciativa privada, o las acciones de gobierno, es decir, el desarrollo urbano realizado a través de la construcción de vivienda, centros comerciales, y edificios de oficinas, sobre el territorio urbano, ya sea por Desarrollo (lleno de vacíos urbanos), o por la Renovación Urbana de Barrios deteriorados. Se trata entonces de la vida en la ciudad en lo político, en lo social, en lo económico, la practica vivencial del territorio, el habitar ciudad, trabajar, vivir en comunidad, y disfrutar la vida privada, en los recorridos que los habitantes hacen en su vida cotidiana. En este caso dice De Certau “En suma, el espacio es un lugar practicado. De esta forma, la calle geométricamente definida por el urbanismo se transforma en espacio por intervención de los caminantes”. (De Certau, 2007, Pág. 29). Un vacío urbano, una edificación abandonada, un espacio urbano deteriorado, son lugares vivenciados, practicados, reconocidos por los habitantes, se convierten en referentes de sus vida cotidiana, lugar de sus trayectorias, son lugares que hacen parte de su Hábitat, de la identidad de su Barrio de su Comunidad, y del imaginario de la Ciudad. Por tanto la Renovación, o el Desarrollo no se están realizando sobre el espacio vacío sin sentido, no practicado, ni vivenciado, se están realizando sobre el espacio habitado por la comunidad, por los habitantes de la ciudad, que comparten historias de vida sobre un suelo común.

De tal manera que si estos tratamientos buscan o tienen entre sus objetivos la generación de centro, desde las concepciones que analizamos partiendo de Leff, siguiendo por De Certau, no son operaciones de transformación del territorio simples de realizar, ya que como lo hemos visto el territorio implica hábito, prácticas sociales, transformación del espacio entre otros. Por ejemplo al respecto Chacón dice: “En principio, se presenta una perspectiva del hábitat individual; es decir, del de cada persona pero, para lograr una lectura holística coherente con su naturaleza misma, es necesario observar como el hábitat colectivo se constituye a partir de significantes comunes entre los hábitat individuales, elementos que adquieren significado común a un grupo de personas, es decir en sociedad; de manera, que

Transformación Social del Hábitat es posible hablar por ejemplo, de un hábitat de Barrio, o de un hábitat de la zona (el hábitat como un tejido de relaciones). (…) Así, estos lugares comunes adquieren en el tiempo distintas jerarquías en importancia para la ciudad, mientras convoquen un mayor número de ciudadanos; de hábitats individuales y colectivos. A partir de aquí, es posible retomar la idea de centralidades en sus distintas escalas, por ende, para el conjunto de la población de la ciudad es claramente identificable un nodo de la más alta jerarquía correspondiente al centro de la ciudad que aglutina actividades gubernamentales, administrativas, comerciales y otras. Mientras que al nivel de jerarquía opuesta aparecen pequeños nodos que surgen y se desarrollan como puntos de encuentro del intercambio de bienes y servicios y como lugares de confluencia de actividades urbanas. De manera que se instituyen como centralidades, en el tiempo y en la medida que cobren mayor importancia, al constituirse como referente importante en la cotidianidad de una parte del conjunto de la población y en parte constituyente del hábitat”. (Chacón, 2009; Pág. 84-85).

La centralidad, sin importar su jerarquía en la ciudad, es el resultado del hábito, de la práctica cotidiana, de ir a, de estar y hacer en el lugar, y que es producido por las características especiales del diseño en algunos casos, es decir ser un punto de confluencia vial, una plaza, un parque que aparte de ser un espacio público, y que por ejemplo, aglutine la prestación de servicios públicos, el comercio, y sea además propicio para el ocio, el entretenimiento, etc.

El habitar está asociado a las decisiones políticas, la economía de localización, decisión del habitante, innovación empresarial de la industria de habitación (Abramo,2006), surge la ciudad policéntrica, el comercio, la globalización y la innovación urbana profundiza el auge de centros comerciales en lo que antes era la periferia de la ciudad, caso de la Llanura Aluvial en el Aburrá Norte, y la Renovación de los centros Antiguos caso del Plan Parcial de San Lorenzo.

Pero desde el tratamiento urbanístico el objetivo social de transformación partiendo de lo físico, debería enmarcarse dentro de la teoría del “Lenguaje de Patrones” de Alexander,

Hábitat y Transformación

o la Humanización del Espacio Habitado de Gehl, para quienes desde la arquitectura se puede aprovechar el espacio para la práctica de todo tipo de actividades sociales, Gehl por ejemplo habla de las actividades necesarias, como las compras, las actividades opcionales el esparcimiento al aire libre, dice Gehl, que “la función principal de los espacios comunitarios es proporcionar el escenario para la vida entre los edificios, para las actividades cotidianas imprevistas: la circulación peatonal, las estancias cortas, los juegos y esas actividades sociales sencillas a partir de las cuales se puede desarrollar una vida comunitaria adicional, tal como deseaban los residentes”(Gehl, 2006; Pág. 27).

Así entonces la decisión política, que oriente un proyecto de tratamiento urbanístico no puede desprenderse del sentido de comunidad establecido en el territorio, la cotidianidad ha dado significado al hábitat del barrio, la política entonces puede contribuir a transformar las condiciones sociales del barrio a través de una apuesta física, sin embargo, la implementación de las políticas públicas urbanas, referente a la gestión del territorio podría ir contravía de un fin último que sería el equilibrio entre la necesidad de desarrollo del territorio por parte del Gobierno, y los sectores empresariales de la ciudad, y la mejora en la calidad de vida demandada por los habitantes de ese territorio y la ciudad.

1.1 Transformación La Renovación y el Desarrollo pretenden transformar el Hábitat desde lo físico y a partir de allí desencadenar una transformación social. En el caso de la renovación, se busca la rehabilitación y el mejoramiento físico del territorio que se encuentra en obsolescencia física, funcional, y en el caso del desarrollo, producir la incorporación de un vacío urbano a la trama urbana de la ciudad.

Es entonces el Hábitat transformado en su componente social - retomando la concepción de Leff ya vista, El componente natural

transformado en la relación triádica con la

sociedad y el sujeto del Hábitat, debe ser analizado en la necesidad que desde la Renovación y el Desarrollo se busca de equilibrar el crecimiento de la ciudad, en este caso debemos mirar a Hawley y su concepto de cambio en el ecosistema, para Hawley (1991; Pág.75) El cambio es una alteración irreversible y no repetitiva en un objeto, para nuestro caso el objeto es la comunidad barrial, como objeto de transformación social a

Transformación Social del Hábitat

través de los tratamientos urbanísticos contemplados en los planes de ordenamiento territorial, como política pública de gestión del territorio.

Lo que veremos en este trabajo es si las transformaciones sociales, son las planteadas como objetivo de los planes parciales, o son producto de la acción social de la comunidad, como efecto de sus prácticas sociales, productivas y materiales de para vivenciar su espacio. Leverato (2005), expone en el trabajo “Buenos Aires a la Deriva” (Guerra, 2005), que “Las áreas comunes de la ciudad cumplen un rol fundamental como escenario de intercambio social y cultural de la vida contemporánea. Son estos espacios intersticiales los que en definitiva dan carácter e identidad a un área urbana articulando sus distintos elementos y proponiendo lugares de encuentro, memoria, y desarrollo colectivo. las transformaciones morfológicas que se produzcan en el espacio de uso público de una ciudad impactaran no sólo en su calidad estética y visual sino también en los modos y las características de vida de sus habitantes, condicionando la promoción o expulsión de actividades y población y modificando también sus áreas de centralidad” (GuerraWelch, 2005; pág.283).

Por tanto la transformación implica pasar de un estado de cosas a otro completamente distinto, Mertins (2005) propone como ejemplo el cambio político, económico y social acontecido en los países de la antigua cortina de hierro, en nuestro caso de estudio la urbanización de un vacío urbano, o la incorporación sustantiva en metros cuadrados de espacio público en un área de renovación urbana también lo son, pero allí solo estaríamos contemplando los aspectos físicos. La transformación social, implica entre muchas cosas la Gentrificación por ejemplo, el desplazamiento de la población original, y la llegada de población nueva con niveles socioeconómicos distintos, esto pasa por la innovación empresarial urbana, y por las acciones de gobierno, el deterioro físico, que es el resultado del abandono de la administración de la ciudad hacia el barrio, conduce a que los sectores políticamente abandonados de la ciudad se conviertan en escenario de patologías sociales, y que por este motivo se desplace y atraiga otro tipo de poblaciones, que terminen desvalorizando social y económicamente al sector, o en el caso de la Renovación, como decisión política y acción de Gobierno, se revitaliza el sector lo

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revaloriza, lo reincorpora a la vida urbana de la ciudad, y eleva el nivel de vida del poblador, lo que se ve reflejado sobre todo, en los cambios de estrato socioeconómico.

Gráfico 1-1 Proceso de transformación del Hábitat en Medellín, principios del siglo XX

Gráfico del Proceso de Desarrollo urbano de los sectores de estudio con respecto a la ciudad y el Valle metropolitano

Centro tradicional

Bello

Plaza de mercado

Barrios Colon Niquitao, Las Palmas y Sandiego

Puerto Terrestre

Valle de Aburrá y Municipio de Medellín

Convenciones Municipio de Bello

Centro Puerto Tradicional Terrestre

Plaza de Mercado

Area Area de Central de Renovación Medellín

Bello La transformación del hábitat por la Renovación, debería redundar en un cambio social de los habitantes, sin embargo, según Mertinsla transformación está signada por: “1). Extensión de los CDB (central bussinessdistrict) ya existentes y conformación de nuevos CDB y subcentros (en parte al lado de centros comerciales exclusivos) en lugares de buen acceso (a lo largo de grandes avenidas y en la cercanía de los barrios de estratos altos. 2) Aumento del número de edificios inteligentes y de hoteles de lujo, en zonas centrales o también en los lugares antes mencionados.

Transformación Social del Hábitat 3) Aumento considerable del número de centros comerciales incluso en barrios de los estratos medios y en menor grado de los estratos bajos. 4) Gentrificación de barrios históricos para vivienda y negocios con la consecuente renovación y revitalización del espacio público (parques-plazas) 5) Aumento considerable de urbanizaciones privadas y barrios cerrados permanentemente vigilados para los estratos altos y medios, incluso también en parte para el estrato medio bajo. Todo esto se encuentra combinado con la apropiación de grandes terrenos, en su mayoría situados al margen de los respectivos distritos socioespaciales, pero también (en el caso de los estratos medio alto) bastante alejados de las áreas densamente construidas, es decir, en las áreas suburbanas. 6) Asimismo, un fuerte aumento del número de condominios verticales y cerrados para los estratos medio y alto, tanto en zonas céntricas como también hacia las afueras de la ciudad con una concentración a lo largo de las cercanías de las avenidas grandes. 7) Degradación arquitectónica e infraestructural de los barrios de los estratos medio bajo, y en gran parte demolición de éstos. Una densificación urbana en las zonas céntricas tras la demolición de edificios viejos y la consecutiva construcción en altura. 8) Aumento de la tugurización y conformación de guetos de urbanunderclass en las zonas céntricas. 9) Densificación fuerte en barrios informales: división de lotes y nuevas construcciones, ampliaciones verticales y horizontales. 10) Aumento considerable de la migración forzada, en la mayoría de los casos por razones económicas, desde los barrios de los estratos medio y bajo hacia los barrios de menor categoría.”(Mertins, en Guerra, 2005; 480-481) .

A estos diez puntos descritos por Mertins, podemos sumar en nuestro caso de estudio, un punto adicional, la aparición de los edificios de vivienda de renta en las áreas de Renovación Urbana, tema no contemplado por Mertins, esto podemos verificarlo en el caso de la nueva centralidad en la Llanura Aluvial del Rio Aburrá Norte, en el sector de Niquia, la aparición de vivienda de lujo, vivienda vertical para estrato medio-medio y medio alto, centros de negocios, comercio y de servicios personales y empresariales, y en el caso de San Lorenzo las Torres de San Sebastián.

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Fotografía 1-1 Norteamerica, vivienda suburbana para estrato alto, en las afueras del Municipio de Bello, en cercanías a la estación Niquía. Fuente: Elaboración Propia

Fotografía 1-2 Centralidad Metropolitana Norte, Estación Niquia del Metro, Fuente. Elaboración propia

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Uno de los objetivos locales y metropolitanos con la transformación por Renovación, y Desarrollo urbanos, desde el punto de vista del desarrollo es pretender el equilibrio con respecto a la ciudad nuclear, objetivo buscado por la autoridad metropolitana del Valle deAburra, conocida como “Área Metropolitana del Valle de Aburra”, institución que se ha empeñado en desarrollar dos proyectos urbanos de generación de centralidades sobre las llanuras aluviales norte y sur del valle de aburrá, para desconcentrar el centro de Medellín, y disminuir la presión sobre la ciudad principal, así como equilibrar el desarrollo entre los demás municipios del valle y la ciudad central de este.

Hemos visto que el hábitat es sensible, no solo al habitar de la sociedad y los sujetos que se transforman en una mutua relación “constructo-constructor”. Hay por lo tanto transformaciones de gran envergadura, que acontecen por la innovación empresarial y el Gobierno, que desarrollan el territorio incorporando suelo a la trama urbana, deslocalizando y relocalizando industria, comercio, servicios, e infraestructura pública, también los adelantos tecnológicos contribuyen a esta transformación, por ejemplo el Desarrollo Urbano localizó en su momento en el centro de la ciudad el transporte masivo ferroviario y vehicular de la Región; luego lo traslado hacia otro sitio de la ciudad, cambiando las costumbres no solo de un Barrio, sino de toda una ciudad y de una Región, hoy la Renovación es la transformación de lo abandonado, de lo deteriorado, de lo estigmatizado, física y socialmente.

2. Transformación del Hábitat por Renovación Urbana y Desarrollo Urbano “El bullerío del tren sábados y domingos, pescadores con el equipo echando cañas a lo que daba la lengua, muchachos con sus fiambres en morral, carpas de lona y guitarras cantando sus canciones, cazadores con rifles y escopetas de un cañón o dos, una dicha. La Estación de Plaza de Cisneros, también nos la van a tumbar pa poner otros cajones de cemento, ¿qué no tumbará este municipio desgraciado? Si fueron capaces de acabar con el tranvía” Manuel Mejía Vallejo, “Aires de Tango”.

Desde la ley de Reforma Urbana, implementada en Colombia, se habla legalmente de Renovación urbana, como la estrategia para revertir el deterioro físico y la subutilización de áreas urbanas en las ciudades colombianas, dicho precepto es recogido por la ley de ordenamiento territorial, sin embargo, la versión de Renovación implementada a finales de los años 70 y principios de los 80 del siglo XX, era un sinónimo de un tratamiento de erradicación de poblaciones y barrios “tugurizados” en las áreas de los centros de las principales ciudades.

A pesar de esto, para la ley novena de 1989, el morador era más importante, al punto de contemplar la realidad de los inquilinatos, como estrategia del habitante para dar solución a su problema de vivienda en las urbes colombianas. Aunque antes de 1991 en nuestro país imperaba el paradigma representativo en la forma de Gobernar, tal vez el modelo de Estado de Bienestar puede palparse en contemplar en la Renovación al morador y al inquilinato como realidades de las áreas urbanas deterioradas y subutilizadas. Con la reforma a la ley en cuestión introducida por la ley de ordenamiento territorial, se deja un poco de lado al morador, aunque con la consecuente contradicción de incorporar la

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participación de la comunidad en la discusión de los proyectos de plan de ordenamiento, y sus correspondientes planes parciales, aunque la intención no es incorporar al morador expropiado al proyecto de renovación, sino prioritariamente comprarle el bien.

Bajo este contexto normativo, para llegar a la Renovación, hay que pasar por un proceso de decisión pública, que incluya en la agenda pública el deterioro y la subutilización del área urbana como problema social, es de considerar que ante los desequilibrios en el ecosistema de la ciudad planteados por el crecimiento y expansión demográfica y urbana, así como la problemática de vivienda y de desarrollo económico asociados a éstos crecimientos,

los gobiernos y las administraciones públicas se plantean la

necesidad de la reincorporación de éstas áreas por medio de la renovación, el redesarrollo y la densificación hacia el interior de las ciudades para darle equilibrio al crecimiento y desarrollo urbano de la ciudad, para ello desde las leyes de ordenamiento territorial, orientadas por la descentralización local y la globalización y la competencia de lugares, los municipios deben poner en ejecución una serie de mecanismos previamente establecidos.

Uno de los primeros pasos en la operativización de la Renovación, es el de definir las intervenciones urbanísticas. El artículo 152 del plan de ordenamiento territorial de Medellín define tratamiento como las “decisiones de ordenamiento que permiten orientar diferencialmente la forma de intervenir el territorio, con miras a lograr los objetivos globales de desarrollo definidos para el suelo urbano y de expansión del Municipio y los particulares establecidos para cada zona homogénea específica. Mediante los tratamientos se establecen los objetivos y lineamientos generales de ordenamiento y desarrollo de todos los sectores de la ciudad.

Como tratamiento de Renovación, el Plan de ordenamiento territorial de la ciudad establece que: “(...) Con el tratamiento de renovación se pretende promover importantes transformaciones en zonas que cumplen un papel fundamental en la consolidación del modelo de ordenamiento propuesto por el Plan y en el cumplimiento de los objetivos del mismo y que por razones de deterioro ambiental, físico o social, conflicto funcional interno o con su entorno inmediato, requieren de esta transformación para aprovechar al máximo su potencial.

Transformación del Hábitat por Renovación Urbana y Desarrollo Urbano

De esta manera, se busca que aprovechando su localización estratégica en la ciudad y sus excelentes condiciones de infraestructura y accesibilidad, se promuevan procesos de intensificación y diversificación de la utilización del suelo y de las construcciones, a fin de lograr, entre otros fines, el mejoramiento integral de vida de los moradores, el aprovechamiento intensivo del suelo, la racional densificación y mezcla de usos, la descongestión del tráfico urbano o la conveniente rehabilitación de los bienes históricos y culturales.

Las zonas que reciben este tratamiento, se localizan generalmente en áreas del centro tradicional y representativo metropolitano o sus alrededores, razón por la cual su renovación se considera fundamental, pues permitirá a partir de la solución paulatina de sus conflictos funcionales y de su adecuada articulación al resto de la ciudad, la recuperación global de la zona más importante de ésta y por ende un beneficio de carácter metropolitano de gran incidencia para la productividad y competitividad de Medellín” (POT de Medellínarticulo 158).

Fotografía 2-1 Estación Medellín, Vista al fondo Barrio Niquitao, Fuente: Autor M Lalinde

En este sentido la Renovación urbana, y el Desarrollo son definidos por la ley, y se ciñen al modelo e imaginario de ciudad legalmente construido, histórica y teóricamente la renovación está asociada a la recuperación de obsolescencias físicas y revitalizaciones en los sectores centrales de las ciudades o en centralidades o lugares jerárquicos de la

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ciudad que pierden funcionalidad con respecto a esta conforme se dan los procesos de desarrollo urbano en los vacíos, y áreas periféricas de la ciudad.

El crecimiento demográfico, y el económico, así como los avances tecnológicos del transporte y los progresos técnicos, mas factores como la violencia en el campo, provocaron el crecimiento de nuestra ciudades y por lo tanto la perdida de “residencialidad” de los centros tradicionales, la generación de nuevas centralidades conforme el crecimiento urbano de la ciudad, cambios drásticos acaecidos en Medellín como la instalación de la estación Central del Ferrocarril cerca de la zona de San Lorenzo, así como la construcción de la plaza de mercado de la ciudad trasladando el tradicional mercado del parque de Berrío hacia la

vecina zona de Guayaquil van

remarcando el signo del barrio como zona central y de tránsito.

La canalización del Rio, le hizo perder su condición de paso obligado del tránsito de la ciudad hacia el sur y el oriente de la ciudad y de la región, más tarde la construcción y ampliación de las avenidas Oriental y San Juan, romperían el tejido barrial constituido con barrios cercanos como Guanteros, San Antonio, y el propio centro tradicional, y la centralidad original del barrio ubicada en la “Plazuela de San Ignacio”, las obras de las vías trajeron la valorización y la posterior presión sobre los habitantes -que anteriormente se habían desplazado hacia el norte de la ciudad en la zona del Barrio Prado particularmente- , a desplazarse hacia otros lados de la ciudad; todo esto en un escenario de crecimiento demográfico, y económico de la ciudad asociado al modelo de sustitución de importaciones y sin fijaciones de planes de ordenamiento territorial o de participación democrática de la población en las decisiones del territorio.

El sector de estudio combinó los usos residencial, comercial, industrial y de servicios, las decisiones políticas del Gobierno municipal y de la administración pública de la época, así como las decisiones económicas de los actores económicos de la ciudad, cambiarían paulatinamente pero no de manera absoluta esta condición del Barrio, lo que si se produjo fue el desplazamiento de una parte de la población original, hay que recordar que esta era una zona originalmente de casas quintas de la ciudad.

La política de vivienda de las ciudadelas, y de la vivienda en altura propiciaría en conjunto con la deslocalización de actividades empresariales del sector la infrautilización

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de edificaciones, el abandono de viviendas, y en consecuencia el deterioro físico y funcional de todas estas, mientras la ciudad crecía hacia el norte con multiplicidad de grupos sociales y hacia el sur con grupos sociales más homogéneos por sus condición socioeconómica.

Fotografía 2-2 Barrio Colon 1925, autor desconocido

Sin embargo la condición de ciudad central de Medellín con respecto a la ciudad metropolitana del Valle de Aburrá, redundó en desequilibrios territoriales, más aún, con el tipo de segregación social que se dió en el mismo valle, al norte de este multiplicidad de estratos sociales, con predominancia de los estratos bajos y medios, y hacia el sur oriente del valle un estratos socioeconómico medio-alto y alto. La concentración de actividades de la ciudad como los servicios y el comercio, fortalecieron el imaginario colectivo de la ciudad con respecto al centro tradicional y representativo del valle, Medellín.

La Ciudad principal se expandió en conjunto con el valle metropolitano, en una suerte de dicotomía, expansión longitudinal, y transversal a través del valle y sus laderas, con concentración de actividades, políticas, sociales, económicas y urbanas en la ciudad

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principal y su centro tradicional y representativo, con abandono y/o invisibilización de los barrios del centro.

Esta condición de abandono es propia de una ciudad metropolitana en crecimiento con vacios urbanos por desarrollar, bajo un sistema fordista, y de sustitución de importaciones que permite la migración campo-ciudad, y la correspondiente absorción de la oferta de mano de obra.

Ocupados los vacíos técnicamente urbanizables, y enfrentada a la emergencia de lo ambiental, así como al desplazamiento forzado, el déficit de vivienda, la problemática del empleo, la globalización y la competencia de lugares, las ciudades se ven abocadas a plantear estrategias de gestión del territorio, que les permitan entrar en la competencia de lugares, y satisfacer a su población en sus demandas y necesidades.

Eduardo Rojas (2004) plantea que la proliferación de centralidades, producto de la innovación empresarial urbana (Abramo, 2006), tiende a desocupar el centro de familias de medianos y altos ingresos, así como a desplazar las actividades económicas de punta, atrayendo al centro actividades artesanales, talleres, y población de escasos ingresos, que ven una oportunidad en relación al costo por arriendos de las propiedades infrautilizadas y en abandono, su capacidad y la incapacidad presupuestal de la adminitración pública, origina el deterioro de las edificaciones centrales. Es decir se presentan obsolescencias funcionales, físicas y económicas.

La Obsolescencia Funcional, ocurre cuando las edificaciones ya no pueden cumplir por sus condiciones físicas y técnicas con su misión funcional, en nuestro caso el Cementerio de San Lorenzo.

La Obsolescencia Física, ocurre cuando el nivel de deterioro de una edificación es tal que en dicho sitio ya no se pueden llevar a cabo actividad económica, social, y cultural.

La Obsolescencia económica, ocurre cuando se imposibilita económicamente mantener los usos originales de las edificaciones por la valorización de los terrenos, por su localización con respecto al crecimiento de la ciudad, las presiones inmobiliarias y los proyectos de la ciudad.

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Aunque estas causas del deterioro expresadas por Rojas (Ibídem, 2004) están asociadas en parte a la política de centralidades hay que reconocer los equilibrios que trae en cuanto a la disminución de presión sobre el centro tradicional y representativo de las ciudades “metropolizadas”, ahorro en desplazamientos, descongestión, etc.

El abandono administrativo por parte del Gobierno con relación a los barrios localizados en el centro tradicional, provoca una incidencia mayor de patologías sociales, como la violencia callejera, el tráfico de sustancias prohibidas, y mercados de productos y servicios ilegales y moralmente inaceptables y el desarrollo de actividades ilegales, gracias a que el abandono administrativo, y el deterioro físico de la zona permite la impunidad real o percibida por parte de los perpetradores; Esta situación expone a la estigmatización a los barrios ubicados en estas áreas ya que el imaginario de la ciudad con respecto a ellos es que son Barrios a los que no se puede ir, “es peligroso pasar por allí a ciertas horas”, lo que desembocará en que el inversionista privado se restrinja de invertir en dichas zonas, para la promoción de comercio, industria, vivienda, servicios; y que el Estado se vea tentado a no invertir en ellas ante la posibilidad de adelantar desarrollos urbanos en los vacios y en las periferias. (ver Rojas, 2004, OpCit; Pág. 14).

Desde este punto de vista aplica perfectamente lo establecido en el plan de ordenamiento territorial de la ciudad donde establece que, “(…)se pretende promover importantes transformaciones en zonas que cumplen un papel fundamental en la consolidación del modelo de ordenamiento propuesto por el Plan y en el cumplimiento de los objetivos del mismo y que por razones de deterioro ambiental, físico o social, conflicto funcional interno o con su entorno inmediato, requieren de esta transformación para aprovechar al máximo su potencial. (…)De esta manera, se busca que aprovechando su localización estratégica en la ciudad y sus excelentes condiciones de infraestructura y accesibilidad, se promuevan procesos de intensificación y diversificación de la utilización del suelo y de las construcciones, a fin de lograr, entre otros fines, el mejoramiento integral de vida de los moradores”(POT Medelíin, Art 158)”. Mejoramiento integral de vida de los moradores, como fin del plan de ordenamiento en lo atinente a la renovación, es decir superar las condiciones que llevan a la

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estigmatización, volverlo atractivo para la ciudad, bajo el supuesto de mejorar las condiciones de vida de sus moradores originales, no se trata de un simple mejoramiento barrial -el cual es un tratamiento diferente debidamente definido por el plan2-, pues la Renovación implica la rehabilitación, la recuperación, la regeneración y el mejoramiento de áreas centrales, que permita la implantación de nuevos pobladores revitalizando las condiciones físicas, sociales, económicas y culturales del entorno sometido a este tratamiento.

2.1 Renovación Urbana Aunque Eduardo Rojas habla de recuperación de áreas centrales en un intento holístico de ampliar el concepto de Renovación, sus planteamientos acerca de la recuperación de los centros son aplicables a lo que acontece con los tratamientos de renovación, desarrollo y redesarrollo dentro de los planes de ordenamiento. En estos casos aplicando lo planteado por este autor, la renovación apuntará a la recuperación de áreas abandonadas o infrautilizadas; la recuperación de áreas urbanas deterioradas; y a la recuperación de áreas urbanas para modificar la tendencia de crecimiento, analizaremos cada una de estas modalidades que adquiere la Renovación.

ARTÍCULO 156º. Del tratamiento de mejoramiento integral (MI). Busca mejorar la mala calidad y deficientes condiciones de vida en asentamientos humanos de desarrollo incompleto e inadecuado, localizados en la periferia, los alrededores del centro de ciudad, y en zonas de riesgo mitigable, susceptibles de un proceso de consolidación y recuperación. La intervención de mejoramiento estará dirigida específicamente a superar las carencias de dotación del entorno: espacio público, vías, transporte y equipamiento social y productivo, así como también a la legalización integral de predios y edificaciones y el mejoramiento de la vivienda. Ello implica estrategias de coordinación intersectorial.

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Fotografía 2-3 Imagen frontal del Área de San Lorenzo. Fuente: Elaboración Propia

2.2 Renovación de Áreas Urbanas Abandonadas o Infrautilizadas. Este método de renovación se aplica en aquellas áreas, e infraestructuras institucionales o privadas que por cambios tecnológicos, o técnicos son abandonadas o infrautilizadas, lo que se presta a otras condiciones de deterioro adicionales a la incapacidad fiscal de la administración local para sostenerlas y darles nuevos usos. Por otro lado el desarrollo en la periferia impide que éstas sean objeto de innovaciones empresariales urbanas, sin embargo, el tamaño de las áreas permite cubrir con ellas el déficit de vivienda, de espacio público, y potencializar el crecimiento económico con su recuperación a través de la renovación.

En nuestro caso de estudio, este fenómeno se presenta con relación a las casas abandonadas en el sector de Niquitao, las que por su condición de ruina, facilitaron el acomodamiento de personas en situación de calle. Además cambio en buena parte su uso residencial por otros usos como pequeñas fábricas, y talleres. Lo que provocó la estigmatización de un sector tradicionalmente residencial, de allí el objetivo de renovarlo, y darle condición de residencialidad implantando vivienda de interés social en el sector.

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Aunque propiamente la única infraestructura pública en condición de abandono, por condiciones técnicas es el cementerio de San Lorenzo, otras áreas del valle que nos sirven de referente al cual aludiremos en modo de contrastación de realidades y ejemplos comparativos con el marco teórico-conceptual aquí expuesto, en este caso el área de los antiguos talleres del ferrocarril, sometidos a un proceso de Renovación en el municipio de Bello, que son el ejemplo de una infraestructura abandonada por el cambio tecnológico, y de las técnicas del transporte en el valle de Aburrá, la región y el país, con el abandono del ferrocarril como medio de transporte; el municipio de Bello, por iniciativa de un grupo social, ha incorporado el espacio a la “Unidad Estratégica de la Llanura Aluvial del Rio Aburrá Norte” dentro de su plan de ordenamiento territorial, otorgándole nuevos usos.

2.3 La Renovación Urbana Como Método de Regulación del Crecimiento Metropolitano. Desde el punto de vista de la ecología humana, la ciudad tiende a ensanchar su territorio y a crecer demográficamente, eso implica mayor acceso y consumo de materiales y suelo (Hawley, 1991); desde la perspectiva urbana y del hábitat, la innovación empresarial urbana dirige el crecimiento urbano hacia los vacios urbanos, la periferia, en particular los de mejores “calidades ambientales” y paisajísticas, para las poblaciones de ingresos altos y medianos. Es el caso de la extensión de la ciudad metropolitana por el Valle, que hizo particularmente del norte su sector más marginal, y por lo tanto para vivienda de interés social de estratos bajos y medios; hoy la realidad frente al Plan de Ordenamiento Territorial, es lograr el equilibrio del crecimiento y de las oportunidades sociales, económicas, y hasta el poder político el Gobierno Metropolitano, de los demás municipios del Valle de Aburrá, con relación a la ciudad principal-central Medellín.

El municipio de Medellín plantea como objetivo para lograr el modelo de ciudad, crecer hacia adentro, es decir implementar el modelo de “ciudad Compacta”, y establece como políticas para lograr ese objetivo la Renovación, el Redesarrollo y la Densificación, así como frenar y controlar la expansión de la ciudad sobre los bordes (POT, acuerdo 62 de 1999), dice además en el acuerdo sobre la revisión y ajuste del POT de la ciudad que, “Un crecimiento orientado hacia adentro, con énfasis en las zonas centrales próximas al río dotadas de excelente infraestructura, que experimentan actualmente procesos de

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estancamiento, degradación o subutilización”(Acuerdo municipal No 46 de 2006; art 12). La dirección de crecimiento de la ciudad metropolitana, en búsqueda del equilibrio social, político y económico, se concentra sobre el norte del valle, en la llanura aluvial del Rio Aburrá Norte, Bello al contrario de Medellín que se encuentra en un proceso de control del desarrollo urbano que no lleve el ecosistema a un desequilibrio crítico, tiene (Bello) oferta de suelo, que trata de regular en su aprovechamiento con base en sus potencialidades, ya desde el punto de vista de la ciudad metropolitana, su plan de ordenamiento en el contexto metropolitano busca equilibrar el crecimiento del valle de manera racional, armonizándose con el objetivo de Medellín de crecer hacia dentro.

Los planes de ordenamiento territorial del Valle de Aburrá, que incluyen el plan de ordenamiento de Medellín, no son planes desarticulados, están vigilados por la autoridad ambiental metropolitana el Área Metropolitana del Valle de Aburrá, y en tal sentido se circunscriben los tratamientos de Renovación, Redesarrollo y Densificación de la ciudad de Medellín, con respecto a los planes de Desarrollo Urbano en el municipio de Bello, y esto a su vez con el control de los bordes urbanos y el urbanismos en las áreas rurales de Medellín, con miras a modificar en términos de Rojas (2004) la tendencia de crecimiento urbano.

2.4 La Renovación para Recuperar Áreas Urbanas Deterioradas. Este tipo de Renovación es el tratamiento urbanístico cuyo objetivo es la recuperación de un área urbana o barrio deteriorados e infrautilizados, recordemos que en muchos casos las viviendas son abandonadas por las condiciones de deterioro, son luego utilizadas para otros usos distintos de la residencia, y más aún si el entorno se encuentra en proceso de “deterioros sociales”, es decir se ha convertido por sus condiciones de abandono, deterioro e infrautilización en espacio de actividades delictivas, o hábitat para población en condición de calle.

Es también la Renovación con miras a recuperar áreas urbanas deterioradas, la estrategia de recuperación y mantenimiento del patrimonio histórico urbano de la ciudad, que por estar ubicados en estas áreas centrales, históricas que se encuentran

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deterioradas, infrautilizadas y abandonadas, son cobijadas las estructuras patrimoniales o las áreas históricas-patrimoniales por la misma condición del resto del sector. Plano cartográfico 2-1 Barrio Guayaquil, nótese Barrio Colon al Oriente, en círculo Rojo Área de Renovación 1970, antigua estación Medellín del Ferrocarril, hoy Centro Administrativo Regional y Municipal3

Son pues sectores de las ciudades que cuentan la historia de ellas marcada en hitos urbanos, de relevancia simbólica, se trata entonces de la recuperación por Renovación de áreas urbanas, en nuestro caso barrios por medio de la cual se procura cambiar según Rojas (ibídem, 2004; Pág.. 129) la tendencia de deterioro y abandono. Que pueden involucrar la intervención física de instalaciones abandonadas o deterioradas, así como a través de ella controlar el crecimiento urbano de la ciudad, pero no es este su objetivo primordial. Su objeto radica en el aprovechamiento del área, en su revitalización, ante el abandono que la relocalización de viviendas y actividades promueve a través de la innovación empresarial urbana, pero que no se constituye necesariamente en una intervención para revertir un momento de desequilibrio en el hábitat, sino en la promoción

Ver Anexo A. Pag 110

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del aprovechamiento de un sector de la ciudad abandonado o subutilizado, que puede redundar finalmente de manera indirecta en el control del crecimiento de la ciudad. Pero en particular en su revitalización económica y en oportunidad de suelo re-urbanizable. Es por estos tratamientos urbanísticos, que llegamos a Barrios como Colon-Niquitao, San Diego y Las Palmas en Medellín, y que contrastamos con referencia a la zona norte de la llanura aluvial del Rio Aburrá, no se puede deslindar el desarrollo urbano en la periferia de las ciudades metropolitanas, sin que se deteriore el centro de la ciudad principal, esto no es necesariamente lineal, más aún, en un escenario sin planificación del territorio. Pero en una escena de planificación territorial, la renovación del área central tiene que ir de la mano con el equilibrio en el desarrollo territorial, en todos los niveles de las ciudades metropolizadas.

2.5 La Ciudad Compacta, tras los Tratamientos de Desarrollo, el Redesarrollo y la Densificación. Las ciudades posmodernas, en medio de la informalidad de la economía, la globalización y la posterior competencia de lugares, hablan del crecimiento hacia adentro de la ciudad compacta, de la densificación y a través de los planes de Gobierno y de los Planes de Ordenamiento Territorial hablan de la densificación a través de los tratamientos urbanísticos de la Renovación y el Desarrollo, no sin dejar de lado como estrategia complementaria al Redesarrollo, la complementariedad de dichos proyectos se encuentra en lo que se ha denominado “Sana Mezcla de Usos”. El fin es promover el ahorro de materiales y energía en el consumo y las prácticas de la ciudad, que el habitar no se expanda más allá del territorio urbanizado, que la población no periferize su crecimiento obligando al Gobierno y a la Administración pública a buscar recursos hacia los nuevos territorios, para hacerlos habitables, y de ese modo descuidar la oportunidad de sostener los espacios centrales de la ciudad.

Para ello se recurre de manera insistente en producir la densificación de la edificabilidad del territorio para aprovechar al máximo su potencial recurriendo a los tratamientos enunciados.

Transformación Social del Hábitat

2.6 El Tratamiento de Desarrollo Urbano. Hablamos del tratamiento de desarrollo urbano, porque nos interesa su relación directa a través del modelo de ciudad descrito en los planes de ordenamiento territorial, con la Renovación de las áreas centrales, y la necesidad de densificación de la ciudad en el crecimiento hacia adentro en medio de la necesidad o la visión de ciudad como una Plataforma o dispositivo económico y como un espacio habitado socialmente construido, un espacio-vivenciado-concebido.

Las ciudades previamente densificadas y consolidadas, frente a la explosión demográfica enfrentan la necesidad de espacio público, vivienda y la generación de empleo para sus habitantes, como lo hemos dicho son ciudades porque en ellas se ha tejido a través del hábito el habitar, las costumbres un vacío urbano, abierto aunque hace parte de ese espacio vivenciado, es objeto frente a la necesidad de corregir el desequilibrio, de ser usado con diferentes fines, aun así las ciudades actuales, utilizan los vacíos urbanos al interior de la malla urbana, para sus necesidades, y en ciudades densificadas, con déficit de espacio público y habitacional esos espacios no son desaprovechados.

Por tal razón en el caso de la Ciudad de Medellín y el valle metropolizado del Rio Aburrá, entiende entre otros al tratamiento urbanístico de Desarrollo Urbano, como el tratamiento encaminado a incorporar a la malla urbana a aquellos espacios al interior de ésta que se encuentran sin urbanizar (POT de Medellín).

Transformación del Hábitat por Renovación Urbana y Desarrollo Urbano

Fotografía 2-4 Vacío Urbano, Centralidad Norte Valle de aburra. Fuente: Elaboración propia

Fotografía 2-5 Desarrollo en vacío urbano, centralidad norte metropolitana. Fuente: Elaboración propia

Transformación Social del Hábitat

De esa forma entendemos para el desarrollo de este trabajo la relación existente entre el proyecto de la centralidad norte del valle de Aburrá en el municipio de Bello donde se está incorporando un vacío urbano en el norte del valle, y la Renovación que se realiza en el centro de la ciudad central en Medellín, en ambas zonas se ha localizado vivienda en altura. Pero con la diferencia estriba en que en Bello se realizó el lleno de un vacío urbano, que se interrelaciona en la estrategia de modelo de ciudad compacta y de crecimiento hacia adentro planteado por la ciudad central y la autoridad ambiental e intergubernamental del Valle de Aburrá.

2.7 Tratamiento de Redesarrollo. Otro de los aspectos de alguna complementarios y tangenciales a éste trabajo sobre la transformación social del Hábitat, es el Redesarrollo, hablamos de él como uno de los aspectos que se tratan en la Renovación urbana, pues es de anotar que entre los múltiples aspectos que la teoría trae acerca de la Renovación Urbana, y que incluye disertaciones acerca del mejoramiento de Barrios, la consolidación en asocio singular a la centralidad, o al ser parte del centro tradicional y Representativo el Barrio como unidad de planificación se ve sometido dentro de las estrategias de Renovación a tratamientos alternativos y complementarios contemplados dentro (en el caso colombiano) de los planes de ordenamiento territorial. Uno de estos tratamientos es el de Redesarrollo, definido para nuestro caso por el plan de ordenamiento territorial de Medellín, como: “Este tratamiento pretende orientar procesos de transformación ya iniciados o generar nuevos en zonas que cuentan con buenas condiciones de infraestructura y localización estratégica en la ciudad de acuerdo con los objetivos de ordenamiento propuestos por el Plan, de manera que se privilegie su transformación hacia la optimización de su potencial, permitiendo mayores aprovechamientos y diversidad de usos” (POT de Medellín; art 157).

En nuestro caso de estudio el plan parcial de San Lorenzo, y en nuestro caso de referencia, la Unidad Estratégica del Rio Aburrá Norte, no se encuentran tratamientos de Redesarrollo, que en síntesis es darle un nuevo uso “más provechoso”, o repotenciar la capacidad de una zona.

Transformación del Hábitat por Renovación Urbana y Desarrollo Urbano

La finalidad última de la Renovación, la consolidación y el redesarrollo dentro de la denominada ciudad compacta no es otra que la de densificar. Tratando de detener el crecimiento hacia afuera de las ciudades y al mismo tiempo reequilibrar la ciudad como ecosistema, dentro de la

necesidad de administrarla como plataforma y dispositivo

económico.

2.8 La Densificación. Un último aspecto a ver en la transformación del hábitat es la densificación, según Rincón Avellaneda (2006), la densificación que es la modalidad intensiva de ocupación del suelo, recurre entre otras estrategias. Al llenado de vacios urbanos; al reciclaje de edificaciones, es decir de casas y edificios subutilizados, abandonados y deteriorados; la substitución por demolición de edificaciones obsoletas, abandonadas, subutilizadas y/o deterioradas; la subdivisión predial. Hablamos de la densificación y de sus estrategias por ser un objetivo dentro del modelo de ciudad compacta y de crecimiento hacia adentro, además de mecanismo de generación de vivienda nueva a través de la Renovación y de Redesarrollo de áreas que bien pueden destinarse por sus condiciones de dotación y de localización a nuevas centralidades en los barrios, o para el conjunto de la ciudad.

3. El Barrio “(..)Pero cualquier cosa que digamos sobre las características generales de una ciudad, sobre su alma o su esencia, acaba convirtiéndose de forma indirecta en una confesión sobre nuestra vida y, especialmente, sobre nuestro estado espiritual. La ciudad no tiene otro centro sino nosotros mismos”. OrhamPamuk, “Estambul Ciudad y Recuerdos”.

El concepto de Barrio, tiene diferentes matices según la ciencia que lo estudia, y el país en el que se origina. Por ejemplo, para la Administración Pública en Colombia, el barrio es un sector territorial para la planeación y aplicación de las políticas de Gobierno sobre el territorio. Sin embargo, el barrio es distinto para sus pobladores, sobre el barrio, hay imaginario urbano, e identidad, que desfasa los límites de la planeación y el Gobierno de la ciudad (Gravano, 2003).

Por lo tanto un barrio se compondrá de una población pequeña, que permita establecer vínculos de vecindad gracias a la proximidad. Por tanto esta cercanía, permitirá la construcción social del territorio, la afirmación de la territorialidad, el pulso con el Gobierno y demás actores en la determinación del paisaje. (ver: Gravano,2003; Alexander, 1980).

Apartir de Buraglia (1998), el Barrio, tiene cualidades como estructura socio-espacial, y componentes socioespaciales. En lo concerniente

a las cualidades, son de resaltar

aspectos tales como, el Arraigo, la Sociabilidad, y la Recursividad entre otros.

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Frente al arraigo, Buraglia destaca, la condición de sociedad migrante, en el contexto colombiano, empero también existe, “la necesidad de poseer un punto de referencia espacio-temporal”, es decir, el sentido de pertenencia al lugar, que se construye con el habitar, dando forma a la identidad de Barrio, a la relación cultural del habitante con el territorio y con la naturaleza.

La cualidad de sociabilidad, es la capacidad del Barrio, por su estructura urbana, morfológica, y de edilicia, de permitir el contacto, el interrelacionamiento entre los habitantes, sin sacrificar su privacidad, En palabras de Alexander, los Patrones de Acontecimiento.

Sobre la recursividad, dice Buraglia, que es la capacidad que tiene el Barrio, de brindarle al habitante lo que necesita, cuando lo necesita, esta satisfacción de necesidades implica otras escalas de ciudad, en la relación social, y económica con otros barrios de la ciudad, en una misma zona, o a nivel inter-zonal, en la cotidianidad y ante las eventualidades. Un último aspecto de las cualidades socio-espaciales del Barrio, es la Sostenibilidad, que trata de la capacidad del Barrio, para sostener la vida presente, y a las generaciones futuras de habitantes, dependiendo del equilibrio en los usos, y de la flexibilidad a los cambios, de la capacidad de permitir distintos modos de vida, y que también va ligado a la capacidad de generar identidad y sentido de pertenencia del habitante con el espacio. Siguiendo con la argumentación de Buraglia, el barrio posee componentes socioespaciales, como el territorio, la malla de circulación, la Centralidad, los equipamientos sociales, los referentes y la vivienda. Se trae a colación la temática de los componentes socio-espaciales, en relación a la construcción de la identidad barrial, a partir del habitar, hemos venido insistiendo en que el hábitat se transforma en la relación tríadica entre el sujeto, la sociedad y la naturaleza, para nuestro caso la transformación del Hábitat-barrio, por la acción social y la acción de Gobierno sobre el territorio.

Es así como, el Territorio, en términos de su calidad de componente socio-espacial del Barrio, se refiere a los límites físicos del espacio del Barrio, límites que dependen de la percepción de los habitantes, y que pueden corresponder a hitos naturales, sociales, o propios del tipo de desarrollo urbano, pero fundamentalmente aquellos reconocidos por los habitantes, para Niquitao, su relación con la Plazuela de San Ignacio, el Barrio Guayaquil, la Estación Ferrocarril, su cercanía con la Alpujarra, pero límites más precisos

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como la Avenida Oriental, y la Avenida San Juan, así como la Calle 33, delimitan el espacio físico, los límites de la zona.

En cuanto a la Malla de Circulación, se trata de la red vial, dice Buraglia, que dependiendo de su concepción, permite el desarrollo físico del barrio, la disposición del espacio público y ante todo de la vivienda, pero fundamentalmente es la que permitirá la integración hacia el interior del barrio, así como, con otros y con la ciudad misma. Facilitará según su diseño el contacto entre los vecinos y la realización de actividades propias de la vida cotidiana de los sujetos y de la sociedad. La malla de circulación permitió la integración de San Lorenzo con la plaza mayor, con su centralidad ubicada en la plazuela de san Ignacio, con la Plaza de Mercado en Guayaquil, con la estación del Ferrocarril, gracias a su condición natural, permitió su integración con la ciudad, con el valle, y con la región. Esa misma malla de circulación podría decirse cierra a San Lorenzo en sí mismo, a pesar de ser un barrio de centro, ya que como diría Alexander, las vías principales que atraviesan un barrio, suelen fragmentarlo, este es el resultado de la primera renovación que trajo consigo las Avenidas Oriental y San Juan, Fotografía 3-1 Barrio San Diego, Área del Plan Parcial de San Lorenzo

El componente más relevante para este trabajo, es el de la Centralidad, dice Buraglia, que, “todo barrio posee al menos un centro de actividad social y comunitaria identificable

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como tal”. (Buraglia,1998; Pág. 32), en su razonamiento este autor plantea, que ésta puede ser un cruce vial, un lugar que concentre varias tiendas, un lugar de encuentro de distintos grupos sociales, un lugar para eventos religiosos, políticos, además, “La centralidad es uno de los elementos que más impacto ejercen sobre los cambios en el barrio y respecto al crecimiento de la ciudad . Por su parte ésta se transforma drásticamente y en función de dichos cambios” (Buraglia, ibídem 1998; Pág. 32).De aquí se desprende parte del análisis que hacemos con respecto a la Renovación en San Lorenzo, nos permite trazar un punto de análisis acerca de las transformaciones del hábitat, las transformaciones de un barrio de centro, cuya centralidad histórica estuvo fijada en la Plazuela de San Ignacio, como ya lo hemos dicho, pero que también se ve como un barrio central, inmerso en las dinámicas del centro tradicional y representativo hasta los años 80 del Siglo XX, donde la primera renovación lo aleja del centro y lo desconecta de éste, de su centralidad y de los hábitos que permitieron su identidad como barrio de centro.

En lo que respecta a los Equipamientos Sociales, este componente se refiere a la dotación de infraestructuras de servicios sociales, como Escuelas, Centros de Salud, Jardines Infantiles, Bibliotecas, Espacio Público, los centros comunitarios, los Centros Religiosos, en nuestro caso de estudio tenemos el cementerio de San Lorenzo, que prestó sus servicios a la ciudad desde finales del siglo XIX, el barrio llegó a contener once (11) centros educativos hasta antes de la construcción y ampliación de la avenida oriental, y de la avenida Calle San Juan, disminuyendo a dos centros educativos en la actualidad, careciendo de espacio público, infraestructura educativa sustancial, e incluso centros de salud, o presencia de casas de gobierno, todos estos aspectos de la vida social eran satisfechos en las “afueras” del barrio, en otros barrios del centro, como el Barrio Boston, Buenos Aires, el Salvador, o el sector de la Candelaria.

El conjunto de componentes, como Territorio, Malla de Circulación, Centralidad, Equipamientos sociales, se refuerzan con los Referentes, aquellos elementos del espacio físico, como áreas, espacio público, edificios, equipamientos, monumentos que tienen significado histórico, cultural, y patrimonial, para los habitantes del barrio; se distinguen por su forma, localización y por su nombre. En este caso las Calles, como Niquitao, El Palo, los Huesos, el sector del Huevo, el Centro Comercial San Diego, la Glorieta de la Calle 33, con la Avenida Oriental, El Cementerio de San Lorenzo, El sector del Hulas

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Parroquias, el Monumento al Salvador. Entre otros son marcas del Barrio, llenas de significado social, histórico, cultural y político, en la vida de San Lorenzo, y los barrios que lo componen.

Por último la vivienda, el Barrio es fundamentalmente el espacio que resume la vida privada, y la vecindad de la sociedad que habita una ciudad, donde satisface sus necesidades más íntimas, en lo que el sector le ofrece, social y económicamente, por ello el sector adquiere una trascendencia para este trabajo, por ser una zona de Renovación en un barrio de centro, donde se busca implantar vivienda nueva, recuperar su vocación residencial y fomentar la “Sana Mezcla de Usos”, en un ambiente que ha estado sometido a actividades deteriorantes, y donde sobrevive población altamente vulnerable, que pervive en la oferta de inquilinatos en su hábitat de centro.

Estos aspectos acerca de los componentes y cualidades socio-espaciales, nos permiten analizar el Barrio, en la Transformación del Hábitat a partir de lo que los habitantes como sujetos, como integrantes de la ciudad hacen con su cotidianidad socio-espacial como, vivenciar el territorio construyendo los hábitos y el lenguaje de patrones que demarcaran la identidad, y la imagen del Barrio; la transformación social y material del Hábitat, a partir de la producción social del espacio; la elaboración de la cotidianidad colectiva, que jerarquizará lugares, generará sus propias centralidades, y construirá

su propia

comunidad dentro de la ciudad, su espacio más próximo a la vida privada. (Lindon, Aguilar, Hiernaux, 2006).

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Fotografía 3-2 Centro Comercial San Diego, Zona estrato 5 Barrio San Diego. Fuente Elaboración propia

Entonces, para entender aún mejor el concepto de Barrio, en el ámbito de la transformación del hábitat, es necesario relacionarlo con el de Comunidad, en este sentido Gomáy Blanco expresan: “La comunidad son los habitantes, pero también son todos aquellos agentes sociales y económicos, así como los recursos técnicos, que desarrollan su trabajo en el territorio. Concretamente, podríamos referirnos a los ciudadanos, a sus asociaciones, a los técnicos y profesionales que trabajan en los diversos servicios públicos (tales como educación, sanidad, o seguridad), a los comerciantes y a sus asociaciones, etc. Que se cuente con estos protagonistas no quita que se puedan sumar otros que trascienden en alguna medida el territorio concreto. Si estamos hablando de un barrio, por ejemplo, bien podrian ser agentes del proceso comunitario entidades o asociaciones de ámbito más amplio (distrito, ciudad, etc)”. (Blanco, Gomá, 2002; Pág. 163).

Entonces, se entiende a la comunidad como un grupo social, dinámico, histórico, que comparte intereses y problemas, no es un grupo homogéneo y presenta diversos

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intereses, incluso en pugnacidad, pero su condición de grupo social, histórico, culturalmente desarrollado, con identidad y sentido de pertenencia, permite la reflexión y el desarrollo de acciones colectivas tendientes a la superación de realidades sociales negativas en su territorio. (Ver: Musito, 2004).

Pero no se puede dejar de lado que en la interacción con los demás actores del “Espacio-Vivenciado-Concebido” (Lindon, Aguilar y Hiernaux), que constituye el hábitatBarrio, para que se dé una transformación social como acción social y/o acción de gobierno a raíz de la implementación de políticas urbanas y sus correspondientes tratamientos urbanísticos, se encuentra la comunidad de sentido, es el elemento de cohesión de la comunidad, que surge por las vivencias compartidas, que potencia la acción social, y que a su vez es potencializado por la acción común que procura la transformación de la realidad social y urbana del espacio.

Serán entonces la comunidad, los habitantes los actores de la transformación social del Hábitat del barrio, el cual es producto de la transformación del hábitat por parte de sus pobladores, en interacción intersubjetiva de la sociedad, y en la actuación del gobierno y los demás actores que influyen en la ciudad. La acción de la comunidad, alrededor de los tratamientos urbanísticos, situará al barrio en el espectro político, como fuente territorial de la política, al visibilizarse por la acción comunitaria, por sus necesidades, por la planeación de la ciudad, por la innovación empresarial urbana. El barrio será visto como espacio de la planeación de la administración pública y ejercicio del Gobierno Municipal.

3.1 La Identidad Barrial. Punto Intermedio entre el Habitante y la Comunidad, y Punto de Encuentro entre los Habitantes y el Gobierno. La Identidad Barrial es un referente simbólico, que se alimenta del espacio-vivenciadoconcebido, y es de esta manera, porque es un atributo que escapa a los habitantes del barrio y sus límites territoriales. La identidad es el cumulo de representaciones sociales, compartidos por la mayoría de los habitantes, y que fortalecen su sentido de pertenencia, es el punto de vista subjetivo de los habitantes y demás actores comunitarios, sobre el Barrio. (Torres Carrillo, 1998)

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Esta identidad se construye, no es estática tiene carácter relacional, e histórico, no es inherente a los pobladores, es decir, es producto de experiencias históricas, que se dan sobre el territorio y que involucran la cotidianidad de la mayoría de los habitantes, la Identidad barrial, se negocia permanentemente, se estructura, se restablece, empero, puede igualmente desestructurarse, diluirse y dejar de ser un ente aglutinador. (Torres carrillo, Ibiden 1998)

Es de anotar también, que en los Barrios pueden aparecer diversas identidades característica propia de los conflictos urbanos, identidades que coexisten con una identidad global producto de esa misma fragmentación y de la relación con el Gobierno de la ciudad, y el relacionamiento con la ciudad total.(Torres carrillo, Ibiden 1998)

En el caso de San Lorenzo, se presenta la constitución de esta diversidad de identidades partiendo del uso predominante del suelo, la condición de las actividades deteriorantes, la coexistencia entre los habitantes de inquilinato, frente a los vecinos de los barrios Las Palmas, San Diego; con una sectorización o referentes urbanos, que en buena parte de los casos señalan ante todo el arraigo de la polación a sus barrios y al sector, muy a pesar de que buena parte de esa identidad, es la prevista por el resto de la ciudad por la característica de sector deteriorado, comercial y de pequeña y mediana empresa, Niquitao, es reconocido por la ciudad como un sector violento, de habitantes de la calle, así lo asumen sus habitantes, pero la ciudad común desconoce su historia y su carácter de sector residencial.

3.2 La Comunidad, los Habitantes y la Transformación. Realizar una transformación del hábitat, como decisión política afecta la población habitante de manera directa o indirecta, el Gobierno de la Ciudad se ve abocado a implementar una política sobre un territorio socialmente construido. Es decir un territorio, imaginado y vivenciado, donde se da la cotidianidad del habitar, que tiene una institucionalidad, donde se dan y usan normas y donde se ejerce el poder.

La sociedad tiende a aceptar, acomodarse o resistirse ante las decisiones políticas. Acepta según Montero (2003) por “(…) la presión social, la amenaza, la represión política y económica, la fuerza de la costumbre ligada a elementos histórico-culturales, la

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censura y los mecanismos tales como la psicologización, la denegación y la sociologización, que sirven para oponerse al cambio”(Montero, 2003; Pág. 124). Estas estrategias y mecanismos conducen según la autora a la habituación, la naturalización, la familiarización, y el temor al ridículo o a ser maltratado, sin embargo dicha situación también provoca racionalizaciones y disidencias que terminan en resistencias, y en recurrir al recurso de la protesta; la Resistencia, desde el punto de vista de la Psicología se le denomina Resiliencia y es la capacidad que tienen los grupos sociales de mantener su forma de vida, sus creencias, sus hábitos, sus prácticas sociales, bajo un manto de sumisión.

Alrededor de las transformaciones físicas del hábitat, aplicadas por la Renovación Urbana sobre un territorio socialmente construido, inserto en una ciudad, la renovación es el resultado de decisiones políticas producto de presiones económicas, políticas, y sociales sobre el Gobierno que trata de darle solución a un problema.

Ya hemos visto que los habitantes pueden en efecto por diversas circunstancias aceptar decisiones que afectan su hábitat, pero también pueden manifestar abiertamente su oposición a la decisión por vía de la protesta, o simplemente resistirse a un cambio que puede considerar impuesto desde afuera. Empero esta apreciación puede ser distinta en lo que respecta a un proceso de desarrollo urbano de un área vacía, y producir un efecto consecuente con la idea expuesta por Montero (2003) en un área consolidada sometida a Renovación.

Las decisiones políticas en ambos casos pueden ser colectivas- colectivizadas, o impuestas desde afuera sin concertación y luego colectivizadas. La decisión colectivacolectivizada puede generar los cambios esperados, por ser generadas por la acción social por si misma, o en concertación con el Gobierno, en los casos de estudio, como resultado de las entrevistas realizadas, se ha podido constatar que fases de los proyectos de tratamiento han sido solicitadas por los grupos sociales habitantes, y algunas si han sido el proceder de la racionalidad de la burocracia gubernamental.

Las decisiones sobre la gestión del territorio, están un poco lejos por factores económicos de ser un ejercicio democrático real, siendo aún un ejercicio de formalismo burocrático, la concertación de los intereses en juego en los procesos de renovación

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urbana, y de desarrollo urbano, parece un punto lejano en el espectro político territorial, y esto es en razón de que el poder no está descentralizado en el orden local (Faletto, 2009; 218-219); en el caso del sector de San Lorenzo, que involucra Barrios históricos de la ciudad, como el deteriorado barrio de Colon-Niquitao o populares como Las Palmas, y San Diego, donde se ha generado desplazamiento y erradicación de viejos inquilinatos, aunque hay una necesidad sentida de la comunidad de infraestructura educativa, y de solucionar el problema del Cementerio de San Lorenzo, de darle atención a la problemática de vivienda en inquilinato, la Renovación aunque es una decisión colectivizada, que frente a las condiciones físicas del deterioro, no ofrece resistencia, la dotación de espacio público haciendo uso de infraestructura obsoleta como el espacio del Cementerio, es una decisión bienvenida, pero en lo referente a la ampliación de las vías, y el desarrollo de vivienda en altura con la consecuente llegada de nuevos habitantes en una urbanización cerrada a costa del desplazamiento de población con arraigo en el Barrio, no es una decisión colectivizada que sea del buen recibo de la comunidad.

En tal sentido la política social sobre el territorio por ejemplo debe estar determinada por lo descrito por Faletto “El Estado necesita fortalecer su capacidad de integración social, puesto que los problemas a que se ha aludido implican rupturas de consensos en la medida que los intereses sociales tienden a veces a verse no sólo como conflictivos, sino también muy a menudo como contradictorios”, siguiendo con el aporte de Faletto “En esta perspectiva, la política social se orienta a hacer posible la incorporación positiva de la mayoría, de modo que pueda actuar como factor de desarrollo económico y productivo. La satisfacción de necesidades requiere, por lo tanto, compatibilizarse con la consideración de los factores sociales como elementos del desarrollo económico y productivo” (Faletto, 2009; Pág. 208-211). Podemos estar hablando de Déficits en el Hábitat, determinados por un proyecto de Gobierno, por los grupos económicos, y por las propias demandas de los habitantes, surgidas de necesidades devenidas en el espacio territorial habitado.

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Fotografía 3-3 Frente del Colegio de San Lorenzo, parte de las obras de Renovación, dotación de equipamiento social. Fuente: Elaboración propia

Debemos entonces hablar de la sociedad en términos de la acción social, la transformación social en el Hábitat, ocurre tras la decisión Gubernamental de implementar tratamientos urbanísticos sobre el territorio, se da la transformación como producto del encuentro entre la acción de Gobierno y la acción social-comunitaria. La acción social, ha sido definida por la Psicología social, como “Aquellas reflexiones y actividades que buscan la transformación de situaciones que son vistas como problemáticas, dichas reflexiones y actividades son llevadas a cabo por un grupo social de carácter comunitario”. Parte entonces la acción social de las reflexiones sobre lo que en común de grupo se considera problemático, podríamos acudir al concepto de necesidad social como punto de arranque en lo que define un grupo social dentro de un barrio como socialmente problemático, sin que esto signifique necesariamente un problema social, ya que éste es un concepto más amplio que involucra la interacción entre lo político-institucional, y las demandas de las comunidades barriales, una necesidad social entonces es una “realidad social negativa que es preciso superar” (Musito; 2004) Musito categoriza las necesidades entre muchas otras en percibidas,

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expresadas y comparativas, extraemos de su análisis estos tres tipos de necesidades como herramientas para nuestro análisis.

La Necesidad percibida, es aquella que es sentida por la población o comunidad, pasa a ser una necesidad expresada cuando la comunidad pone en conocimiento del gobierno de manera formal, o de manera informal a través de manifestación pública, en ambos casos cabe la necesidad comparativa, que acontece cuando la comunidad, siente que una necesidad es satisfecha a otras comunidades, y menos a ella. (Musito, 2004), traer a colación las concepciones sobre necesidades, es por considerarlas el prólogo y el interregno en la implementación de los tratamientos urbanísticos sobre el barrio, sobre el hábitat, es de suponerse que estas implementaciones, aparte de querer resolver una problemática sobre el territorio concebida por el Gobierno, son también el producto de la superación de una realidad social negativa percibida, y expresada por la comunidad, como debería verse en los tratamientos urbanísticos de renovación y desarrollo urbanos en los casos del Plan Parcial de San Lorenzo y del Plan de la Llanura Aluvial del Rio Aburrá Norte en el sector Niquía.

Los grupos comunitarios, perciben la necesidad, la hacen pública, y procuran transformar la realidad social negativa, situación que se localiza territorialmente, por lo tanto una necesidad social satisfecha de la comunidad habitante supone la transformación social del hábitat, sin embargo nos vemos enfrentados a que las necesidades sociales sean efecto de la intervención del gobierno a través de los tratamientos urbanísticos sobre el hábitat, no necesariamente la ausencia de políticas públicas, provocando no solo la transformación física, sino una transformación social que genera nuevos problemas sobre la comunidad.

Desde la perspectiva anterior, estarían los planes que determinan la construcción de ciudad Niquía en el municipio de Bello, un plan de vivienda para satisfacer la demanda de vivienda de la ciudad de Medellín, o la construcción y ampliación de las avenidas Oriental, y San Juan que afectaron el sector de San Lorenzo, otros planes de mayor envergadura y que dan significado “social” e histórico al sector de San Lorenzo, fueron la construcción y localización de la estación Medellín del Ferrocarril, el traslado del mercado del Parque de Berrío hacia la recién construida plaza en el sector de Guayaquil, el sector global fue de puerto y de comercio a principios del siglo XX, fuera de ello fue la vía de

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comunicación al sur de la ciudad y del departamento así como con el oriente de la ciudad y del departamento, dicha condición de tránsito y de comercio se verían nuevamente modificados por dos decisiones políticas y técnicas importantes para la vida de la ciudad, el decaimiento del ferrocarril como sistema de transporte, la construcción de la terminal de transporte en el norte de la ciudad, y el traslado de la plaza de mercado. Así como el posterior cierre al público del cementerio de San Lorenzo. Finalmente el traslado de la industria presente en el sector hacia el sur y norte de la ciudad y del valle. Las condiciones que marcaron la historia de la conformación del Barrio desaparecerían definitivamente.

Fotografía 3-4 Mercado dominical en la plaza mayor, hoy parque de Berrío, autor desconocido

Las familias se deslocalizaron y relocalizaron en otros sectores del Valle de Aburrá, el antiguo barrio obrero, de industria, comercio, y transporte, fue expulsando las tradicionales familias del sector, conforme los proyectos de ciudad se fueron ejecutando en sus cercanías. De todas maneras su centralidad y la presión económica vía impuestos de valorización según los testimonios de los pobladores, dieron origen a los famosos inquilinatos

del

sector,

las

familias

fueron

abandonando

sus

casas,

pero

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transformándolas en inquilinatos, aprovechando su ubicación central y su situación de puerto, para no perder el bien, y sacar utilidad a la propiedad. Fotografía 3-5 Plaza de Cisneros, lugar al que se trasladó el mercado que se realizaba en la Plaza Mayor, ubicación Barrio Guayaquil vecino de Colon-Niquitao

Estas transformaciones sociales, fueron resultado de las transformaciones físicas del territorio, de las decisiones políticas de implementar grandes proyectos de desarrollo urbano, redesarrollo y renovación sobre el centro de la ciudad y el norte del valle de Aburrá, sin tener en cuenta aún el que puede considerarse segundo gran proyecto de la ciudad después de la canalización del Rio Medellín- Aburrá, El Metro.

A partir del año 1995 con la entrada en funcionamiento del Metro de Medellín, la ciudad sufre la segunda transformación urbana más importante del siglo XX, la fecha y la obra determinaran la imagen urbana de los territorios de los que hablamos La estación terminal del metro en la zona norte en el sector de Niquía y el decreto del Plan Parcial de San Lorenzo.

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Plano cartográfico 3-1Comuna 10 "La Candelaria", comuna del centro. Fuente. DAPM de Medellín. Ver anexo B. Pág. 111.

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Dos decisiones políticas que transforman el territorio, y las cuales trastocan el imaginario urbano sobre el mismo, un proyecto de vivienda en la entonces periferia del valle, que se ve centralizado por cuenta de la aparición de la última estación del metro en inmediaciones del sector,

y la revitalización de un barrio del centro tradicional y

representativo de la ciudad del central.

El cambio físico morfológico, de la trama urbana de ambas zonas es evidente, la zona de Niquía se ha convertido en el nodo norte del valle de Aburrá, mientras que la renovación en Niquitao, como parte del plan parcial de San Lorenzo, con la implementación de vivienda de interés social en altura, rompe con la morfología tradicional de la vivienda y con las actividades del sector, insertando nueva población en ambos territorios.

Fotografía 3-6 Parque de Berrío actualmente, antes Plaza Mayor. Fuente Elaboración Propia

4. Las Decisiones Políticas y la Acción de Gobierno en la Transformación del Barrio “La Mediocridad. La mediocridad de unos cuantos reyes, su fatua vanidad, la superficialidad con que atienden los asuntos, su incapacidad para rodearse de hombres capaces, su pereza, su presunción y su ineptitud para concebir grandes planes o, por lo menos, para ejecutar los que algunos proponen. En política es imposible acometer empresas grandes y duraderas sin hombres que merced a su genio, su carácter y su voluntad, inspiran, agrupan y encauzan las energías de un pueblo”. Maurice Druon, “Los Reyes Malditos VII” . Las decisiones políticas y las acciones de Gobierno por lo general obedecen a un plan, que responde

a la orientación ideológica, política, económica, social y cultural del

modelo de ciudad que se desarrolla, es decir este plan desarrollará el modelo de ciudad según éste se haya establecido, la ciudad, en este caso, ha optado por el desarrollo sustentable, o la atracción de inversión, el desarrollo endógeno, o la promoción absoluta de la economía; El modelo de ciudad, y el plan que la desarrolla son delineamientos legitimados por los procesos electorales locales y nacionales. (Gomá, Blanco, 2002; Pág.119; Centelles, 2006)

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y conurbación, es así como la Ciudad de Medellín será la ciudad central y principal en el Valle de Aburrá diferenciándose del municipio de Bello, donde se instaló buena parte de la industria histórica desarrollada durante el periodo de industrialización y el fordismo en la región, sin embargo política, económica, social y culturalmente Medellín fue la ciudad principal, el centro del Valle; la autoridad del valle, el Área Metropolitana del valle de Aburrá, procura en los últimos años el equilibrio en el crecimiento urbano, económico y social del Valle metropolitano, sin embargo cada municipio dentro de su autonomía tiene sus propias agendas, caso al que el municipio de Bello no es ajeno, proponiendo su plan de desarrollo, en un estilo de competencia de lugares.

El Gobierno local, se encargará de la formulación y ejecución de políticas urbanas influenciando e interviniendo en las redes de intereses de los distintos actores en conflicto o colaboración en los territorios barriales o de la ciudad en su conjunto, y a través de su administración pública proveerá los servicios públicos y regulará el territorio, en sus variables urbanas, sociales, ambientales y económicas (Centelles, 2006).

El Gobernar, está directamente vinculado al acto de decidir, pero decidir desde el Gobierno implica un proceso, el proceso de decisión tiene dos vertientes según Gomá y Blanco (2002) bajo el estilo de Gobierno tradicional, el proceso decisional estará soportado en los partidos políticos, las elecciones y los representantes políticos, sin embargo según estos mismos autores el proceso decisional hoy díaestá ligado a la participación abierta de los distintos actores a través de mecanismos institucionalizados para ello, sin dejar de lado la capacidad de presión y de negociación de intereses de los diversos actores presentes en el hábitat, los empresarios, los grupos políticos, actores externos al territorio. De allí se desprende la capacidad de gobernar, de concertar, teniendo en cuenta las debilidades y ventajas de los distintos grupos sociales presentes en el territorio. La autoridad legal es un punto de partida en este ejercicio, pero es tan solo una de las aristas, de la práctica de gobernar. La implementación de las políticas urbanas, las políticas públicas de tratamientos urbanísticos de Renovación y Desarrollo urbano, se ejecutan sobre territorios barriales específicos, espacios-vivenciadosconcebidos, transformados por las prácticas sociales y productivas de sus habitantes, los cuales no son los únicos actores del territorio, el Gobierno se puede enfrentar a la resistencia, el conformismo, la cooperación, o, la inactividad, o por la heterogeneidad de

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intereses de los de los habitantes a la combinación de las actitudes que de carácter político se muestran ante la implementación de estos tratamientos.

La hibridación de paradigmas de Gobierno en nuestro territorio, trae consigo diferentes actores, con diferente capacidad de influenciar las políticas de desarrollo del territorio, por lo tanto el proceso decisional se hará complejo o expedito según sea el caso sobre la comunidad y sus grupos sociales. Güell (2006) parte de la premisa de que las decisiones políticas urbanas son el producto de distintos grupos, con distintos niveles de influencia, se presume que en una democracia los diferentes intereses sean consensuados por canales institucionalizados, incluso a través de los Representantes políticos, y aquellos intereses que a la luz de la concertación sean invisibilizados, se tiene el compromiso de estudiarlos, evaluarlos y gestionarlos.

Las decisiones públicas son aquellas que se toman por autoridad delegada en el Gobierno para administrar lo público y se cumpla con los diferentes objetivos que la sociedad se haya trazado (Milkos, 2008; Pág. 162), para logar esos objetivos los gobiernos definen políticas que no son otra cosa que el curso de acción para conseguirlos. La definición de dichos objetivos, no son decisiones de Gobierno, sino el producto de decisiones colectivas.

Las decisiones colectivas, tienden teóricamente a ser más estables, pero de todas formas, estas nunca serán definitivas, ya que es un proceso que se toma en un ámbito socio-político de varias lógicas con múltiples intereses, dentro de las decisiones que conducen a la implementación de tratamientos urbanos sobre escenarios barriales definidos, aun cuando se trate de vacíos urbanos, siguen siendo procesos de decisiones, que en nuestro contexto deberían ser resultado de reflexiones colectivas, pues así lo establece la ley, sin embargo la complejidad del desarrollo implementado en el norte del valle metropolitano, que obedece claramente a un modelo de ciudad que propende por la competitividad y la atracción de inversiones, que al estar definido por un plan de ordenamiento territorial, debe haber sido socializado, con la comunidad, y por lo menos discutido en el espacio de representación local, o el concejo municipal, en este proyecto aparte del espacio dispuesto por la estación del Metro, y por el espacio servido por los centros comerciales y demás infraestructuras privadas construidas alrededor de la estación y que hacen parte de la centralidad que se constituye en esta estación, no

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aparecen instituciones públicas, oficinas de prestación de servicios públicos, o plaza, o parque público, exceptuando el parque deportivo “Tulio Ospina”.

En el caso del Plan Parcial de San Lorenzo, el objetivo central es a través de la recuperación y conservación de un espacio patrimonial, la generación de un espacio público que funcione como parque- centralidad para los barrios Colon-Niquitao, Las Palmas y San Diego, entre los objetivos de dicho plan por ejemplo está además, la provisión de vivienda de interés social. Así como la construcción de instalaciones públicas educativas, de salud, y culturales.

Estos tratamientos urbanísticos como proceso decisional, por virtud de la ley han sido por lo menos, debatidos por la comunidad, en procesos abiertos, dentro de un proceso de legitimación legal, a través de la institucionalización de Acuerdos, que lo que buscan es reducir el conflicto y la problemática legal en la implementación de la política urbanoterritorial. Convirtiéndose finalmente en decisiones colectivizadas.

Para cualquier momento de la decisión el Gobierno y su administración están sujetos al monitoreo de la ejecución de la decisión, para lo cual debemos tener en cuenta que en lo concerniente a cualquier política pública en cualquier nivel de gobierno, dicho proceso no será lineal, ni “paso a paso”, existen para ellos modelos de análisis de la decisión pública y su implementación. Como el modelo racional, el modelo incremental, y los modelos intermedios, que nos permiten allanar el camino hacia la comprensión del modelo de decisión adoptado que conduce a la transformación del hábitat en el plano social.

4.1 El Modelo Racional de Decisión Pública La satisfacción de una necesidad social de una comunidad expresada por un grupo social como el déficit vial o de calidad de la vivienda y del hábitat, que es una necesidad de proximidad, y una necesidad percibida directamente por la población, confrontada con una problemática de ciudad, como el déficit cualitativo y cuantitativo de vivienda, la generación de empleo o la competitividad “interciudades”, implicaría actuar con disposición abierta y completa de recursos humanos, económicos, tecnológicos, técnicos, y sobre todo de información sobre la necesidad social y la problemática de ciudad contemplada a resolver y satisfacer.

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El modelo Racional, implica entonces el conocimiento pleno de la problemática a resolver, acuerdo entre todos los actores sobre la problemática a resolver, y frente a las medidas que se pueden tomar para resolverlas, no ha y contradicción sobre la medida, y existe el consenso pleno. Una decisión de transformación de territorios, exige desde el punto de vista normativo que se cuente con documentos de soporte, que sustenten la conversión del estudio, y de la medida planteada en política, en norma para la ciudad. Para el caso del Plan Parcial de San Lorenzo, existen numerosos estudios, y medidas aplicadas, pero ante todo planteamientos previos acerca de la necesidad de la Renovación frente al deterioro, la Renovación de los años 70 en el sector implicó la realización de un estudio previo en ese entonces. Sin embargo, existen otras teorías que amplían el espectro sobre el análisis de la decisión de política urbanística adoptada para nuestro caso de estudio, esto en el entendido de que una política de gestión del territorio -que tiene entre sus objetivos la mejora en la calidad de vida de los habitantes del área en la que se pretende actuar-, integra otras políticas públicas que se territorializan según las necesidades puntuales de los barrios sujetos de Renovación.

4.2 El Modelo Incremental, Soluciones Alternativas a las Problemáticas. El modelo Incremental de toma de decisiones, comienza por críticar el modelo racional, afirmando que es imposible disponer de toda la información, y del consenso total de todos los actores de la problemática y de la política, a parte, de que es aún más improbable llegar a una solución óptima.

Propone el modelo incremental, como modelo de decisión restringir el campo problemático, a problemas con soluciones social y políticamente aceptables, no de elegir la mejor de las políticas posibles, si no aquellas que ofrezcan un incremento marginal sobre los resultados de las otras políticas aplicadas, para ello se realizará un análisis comparativo sobre las desventajas o no que las alternativas de política ofrece en cuanto a incremento del valor marginal.

Transformación Social del Hábitat

Para nuestro caso de estudio, tendríamos que hacer un comparativo de decisiones, una erradicación del deterioro, o de infraestructuras obsoletas, o abandonadas, puede tomarse como una medida profunda, bajo el supuesto de contar con toda la información y los recursos necesarios, pero en la lógica planteada se podría tratar de una política de mejoramientos de vivienda, mejorando condiciones de hábitat de las familias. En San Lorenzo, el programa de vivienda compartida, un modelo de vivienda que involucra la pedagogía, la convivencia, y que procura por mejoras en el habitar de familias en condición de inquilinato, por la forma como se lleva el programa, la cobertura, y sus objetivos frente al modelo de hábitat y de habitar en Inquilinato son la muestra de una Decisión de tipo incremental. Sin desdeñar de la decisión tomada en ese punto

4.3 Los Modelos Intermedios de Decisión en el Hábitat. Según Etzioni citado por Milkos, las decisiones no se ubican ni un extremo – la decisión racional- ni en otro- modelo incremental-, las decisiones públicas requieren tanto de información exhaustiva y de elección de las mejores de decisiones o de tomar decisiones de carácter incremental según sea el caso. Es decir el Gobierno en algunos casos será un actor racional con una gran variedad de alternativas

políticas de solución a los

diversos problemas, y escogerá la que mejor se ajuste según los objetivos a conseguir y los recursos disponibles. Sin lugar a dudas el deterioro en San Lorenzo, sumado a las patologías sociales, exigen la Renovación, las condiciones de crecimiento urbano de la ciudad central y del Valle de Aburrá, frente a la densidad de ocupación del suelo en ese sector del centro de la ciudad, hacen de este un lugar para la localización de vivienda de interés social, así mismo, la problemática de los inquilinatos, entendidos como el déficit de hábitat de calidad, hacen que en este lugar de la ciudad se pueda tomar decisiones públicas sobre el territorio, que combinen todas las alternativas posibles, pues se trata de un Gobierno y una administración de una ciudad, que debe regular los conflictos, la satisfacción de necesidades, y competir en el escenario global.

4.4 Definición del Problema Social, la Agenda Pública en la Transformación del Barrio.

El Barrio

Toda decisión política será en últimas el resultado del encuentro de intereses frente a una problemática o una necesidad social, que incluirá procesos de Gobernación, es decir interacción entre actores públicos y los grupos de interés, y adicional a ello la capacidad de Gobernar, es decir la capacidad de coordinar, influir y equilibrar la interacción entre los actores políticos y sociales (Prats, 2005), en tal sentido hemos hablado de las necesidades de la comunidad, pero no de la construcción de “problema social”, proceso el cual trasciende a lo comunitario, pero que implica la movilización de los intereses de la comunidad, y su capacidad de convertir un tema en problema, y de llevarlo a la agenda pública. La necesidad social, no es un proceso político como el problema, la necesidad es una percepción individual y comunitaria, que en algunos casos es resuelta con los mismos recursos de la comunidad, o con soluciones puntuales a través de la provisión de servicios públicos por parte de la Administración pública.

La problemática para nuestro trabajo se inscribe en la óptica de definir si la Renovación, o cualquier otro tratamiento urbanístico adoptado según el caso, es resultado de un proceso de definición de políticas públicas, teniendo en cuenta que el proceso de política no es lineal, y que el acto de Gobernar pretende conciliar intereses de ciudad, de los que hay múltiples y diversos con origen en los barrios que entretejen el tejido social que constituye la ciudad, en este escenario calcular la política y sus efectos sobre la población y el territorio, como aspecto de superación de realidades sociales negativas, o de cambio en situaciones social, política, económica y ambientalmente problemáticas que de sumo calcularlas implica que han surtido el proceso político de visibilización tal, que han ameritado su inserción en la agenda pública de la ciudad- , es un asunto complejo de resolver.

En el Hábitat, aspectos tales como la Comunidad y el espacio-vivenciado-concebido, donde el proceso de transformación social y productivo realizado por los habitantes, con la consecuente constitución de hábitos, y las necesidades sociales, percibidas en lo social, económico y ambiental surgidas en el habitar, más la capacidad de organización social, pueden constituirse

desde ésta (la comunidad)

en factor de generación de

ingobernabilidad para la ciudad, por las asimetrías, en las capacidades social, política y económica; y el acceso a mecanismos de presión, tales que le permitan a los actores comunitarios concertar sus intereses con el Gobierno y su Administración, pues finalmente se trata de la ciudad y de su modelo electo de gestión.

Transformación Social del Hábitat

En relación a lo anteriormente expuesto las particularidades del territorio socialmente construido,

su imaginario, su identidad como barrio, la acción de gobernar y la

gobernabilidad, dependen entonces, de los modelos de decisión (vistos en el anterior capitulo) y de la capacidad que tienen los diversos actores de la comunidad, de influir sobre las decisiones que afectan su Hábitat, pues la realización de las acciones de Gobierno sobre el Territorio, tiene un impacto directo sobre el hábitat, lo transforman físicamente, y en consecuencia, cambiarán los hábitos, el paisaje social será moldeado por la ejecución de la Renovación o el tratamiento urbanístico que se haya elegido aplicar, por lo menos, eso es lo esperado desde el Gobierno, que tiene un plan que obedece a un modelo de ciudad, y trata de imponer su visión, de allí las probables resistencias y/o resiliencias de la comunidad por defender su estilo de vida, tal es el caso de la generación de centralidad a partir de la Renovación urbana, en barrios, que han carecido de centralidades con jerarquía metropolitana o zonal, cuyos lugares de referencia son distintos; carencias en la dotación de equipamiento social como centros culturales, educativos, deportivos, o espacio público, más aún si esta no es una necesidad expresada por la comunidad desde sus organizaciones sociales, en este sentido se pensaría que el tratamiento urbanístico es producto de una decisión no concertada con los múltiples actores de la comunidad, ni de una necesidad expresada por la comunidad a través de sus grupos sociales. Allí aparecerán las resistencias, el inconformismo frente al Gobierno, quien transformando el hábitat del barrio en lo físico, generará condiciones de ingobernabilidad de la ciudad, al afectar la comunidad de sentido. El tejido social del barrio.

4.5 Los Tratamientos Urbanísticos, La Transformación del Hábitat, como un Problema de Agenda, o una Necesidad Social de la Comunidad. La implementación de la política de ordenamiento territorial obedece a la ley, un mandato legal de planeación ordenada del territorio para cumplir los fines sociales del Estado, como mejorar la calidad de vida, proveer los servicios públicos básicos, infraestructura vial para el transporte, agua y saneamiento, que llegue la electricidad, y las comunicaciones a las familias y al sector productivo; define entonces el Gobierno, a través del debate electoral, y la participación ciudadana el destino de la ciudad, a través

El Barrio

de la planificación del territorio, desarrollando tratamientos urbanísticos, coordinando, influyendo, equilibrando la interacción entre los distintos intereses en el plano territorial; la comunidad a través del hábito, construye la identidad de su territorio, y por medio de la acción social, y las prácticas sociales y productivas lo transforma permanentemente; la comunidad de sentido, la proximidad y la vecindad, le permiten conocer sus necesidades, y en la interacción política con los demás actores comunitarios y el Gobierno darle solución a éstas. Es decir, la comunidad está constantemente modificando por completo el paisaje social, y material de su territorio, sin dejar de lado que la planeación social, económica, ambiental, y física de la ciudad, así como, los espacios de decisión política y económica a nivel regional, nacional e internacional también afectan su entorno.

No toda la comunidad se organiza, no toda la comunidad participa, no toda la comunidad se moviliza social y políticamente, así mismo, son diversos los grupos y los intereses al interior de ésta, por lo tanto las necesidades no son del todo comunes, ante la aplicación de tratamientos urbanísticos, ni de políticas públicas en general, por esta razón no habrá consenso general, por ello la construcción física de una centralidad barrial, dependerá en primer lugar de las características físicas de su diseño, en segundo lugar de los servicios públicos y sociales ofertados, así como, de las actividades comerciales que se lleven a cabo allí. Pero ante todo de que la suma de necesidad social, o problemática, más diseño, ubicación frente a los referentes, más dialogo Gobierno-comunidad, coincidan en el plan a ejecutar en el territorio, para que la comunidad haga real apropiación social del espacio como centralidad.

Renovar, desarrollar, y generar una centralidad, en un barrio constituido consolidado, con una identidad, con un imaginario, supone sea producto de la interacción entre el Gobierno y los distintos actores del barrio y de la ciudad, con referencia a las necesidades del barrio y los problemas barrio-ciudad inscritos en la agenda pública del Gobierno.

Se trata de trabajar en el sentido del desarrollo comunitario, como lo dicen Blanco y Gomá (2002), que la comunidad con los diferentes actores comunitarios, incluso los de la ciudad en general que tienen injerencia en su espacio-vivenciado-concebido, participe de las transformaciones que en él se suceden, y no sea un sujeto pasivo o invisible del desarrollo de la ciudad.

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La generación de la centralidad Norte en el sector de la EstaciónNiquía del Metro, en la llanura aluvial del Rio Aburrá, ha atraído la inversión privada, y nueva vivienda en el sector, la centralidad comercial ha sido aprovechada por los sectores circunvecinos, por el espacio público ofertado, por el entretenimiento, entre otros, ésta centralidad sirve al valle de Aburrá en la generación de empleo a través del comercio de bienes y servicios, así como, a la integración regional de los municipios del norte del valle, y con los municipios del norte cercano a éste que pueden ahorrar en el desplazamiento hacia la ciudad de Medellín, equilibrando de esta manera la presión sobre la ciudad centralprincipal. En este sentido se modificó el paisaje físico y social del norte del valle, del municipio de Bello y del sector de Niquía dotándolos de una centralidad, pero a la vez segregando una zona del valle diferenciándose diametralmente el tipo de vivienda, y los estratos socioeconómicos allí concentrados, incluso al decir de los habitantes de los barrios “populares” del sector el costo de la vivienda viene encareciéndose paulatinamente.

En el caso del Plan Parcial de San Lorenzo, la generación de centralidad a través del parque que se construye conservando la parte patrimonial del antiguo cementerio de San Lorenzo, aún no se concluye, la centralidad del barrio sigue siendo ajena a él, tal es el caso de la “Plazuela de San Ignacio”, y del centro comercial “San Diego”, que han suplido la escasez de espacio público, y de centralidad del barrio, al fin y al cabo ambos nodos, hacían parte de territorio Barrial, aunque los primeros procesos de Renovación del centro de la ciudad y las dinámicas de Innovación empresarial urbana, cambiaron drásticamente esta condición, aunque se encuentran en la misma división administrativa dentro de la comuna diez de la ciudad de Medellín. El hábito y la práctica los han establecido como las centralidades de la zona. Aun a pesar de cómo diría Alexander “las grandes vías de tráfico destruyen la comunidad (Alexander, 1980). Esto aconteció para los habitantes del barrio Colon- Niquitao, con la construcción de la Avenida Oriental y San Juan, que dividieron el territorio común socialmente construido entre los habitantes de los barrios del centro, alejando sus referentes, destruyendo su tejido, erradicando sectores (caso barrio San Antonio y partes de Colon), y finalmente excluyéndolos del centro tradicional.

Adicional a lo anterior, dentro del actual proceso de Renovación se viene construyendo un centro educativo ya en funcionamiento, pero el cual aún no ha sido concluido, el sector que llegó a tener 11 centros educativos en el pasado, suplía sus necesidades de

El Barrio

educación básica con dos planteles educativos de pequeña infraestructura esparcidos en la zona, más otros fuera de la proximidad, de la comunidad inmediata, más hacia el centro lo que involucraba toda la localidad central (comuna) en las dinámicas socioespaciales de estos barrios centrales, en tal sentido la construcción de un colegio, en la proximidad, al interior de la comunidad era una necesidad, percibida y que fue expresada por la comunidad, tenemos entonces espacio público, con la construcción del parque, dotación de equipamiento público social-educativo, adecuando espacios abiertos para la práctica deportiva. Sin embargo, aun cuando desde la óptica de los habitantes es poco atractivo el parque como centralidad, estos se han apropiado de un espacio que han convertido en centralidad, El Conjunto Residencial Torres de San Sebastián.

Las torres de San Sebastián fueron un proyecto de vivienda de interés social en altura, con más de 400 apartamentos, son la cuota de contribución del sector a la problemática de vivienda de interés social de la ciudad, su construcción al lado de la avenida oriental, propició que sobre esta acera se construyeran un sector comercial para atender la demanda del mismo conjunto, pero dichas condiciones de localización propiciaron antes que se le utilizara por el resto de la comunidad como centro, ya que concentra actividades comerciales, aunque proyectado como vivienda de interés social, debido al espacio en metros cuadrados, la calidad de la construcción, su vecindad con el barrio Niquitao, y claro está su condición de centralidad, las viviendas construidas como de interés social, se convirtieron en segunda vivienda, o vivienda de renta para sus propietarios.

Para los residentes de Niquitao, la construcción de las Torres de San Sebastián, fueron una imposición del Gobierno municipal de turno, “quebraron el paisaje, y hasta cortaron las corrientes de aire del sector”, sin embargo, se benefician de su sector comercial, y las han venido convirtiendo en su nueva centralidad.

Esta centralidad, el desarrollo y la renovación no parten, ni tienen obligatoriamente que partir de un taller participativo de diseño, tampoco pueden presumir de absoluta racionalidad técnica y burocrática del Gobierno y de su administración pública, de allí la divergencia entre los objetivos propuestos en el plan parcial, y las necesidades percibidas por los habitantes del sector de San Lorenzo, es la comunidad en la práctica

Transformaci贸n Social del H谩bitat

del territorio la que le da significado a un proyecto de Gobierno, o sus propias realizaciones, construyendo su propia centralidad.

5. El Área de Renovación del Sector de San Lorenzo. “También allá donde fuera, pues tumbaron la plaza y empezaron las reformas, porque nos llevó el ensanche, así decimos desde que volvieron anchas las calles estrechas, nos llevó el ensanche. ¿Dónde está mi barrio, mi cuna maleva, /donde la guarida, refugio de ayer? / Borró el asfalto de una manotada / la vieja barriada que me vió nacer, dice “puente Alsina”. Lo único que conozco, tangos y perrerías. Y este barrio de Guayaquil, pregunte no más, le sé todas sus cosas. Las que no sepa se las invento”. Manuel Mejía Vallejo, “Aires de Tango”

Niquitao es la calle que da nombre a este barrio, y el nombre de esta calle es en honor y remembranza de la batalla de Niquitao en la campaña libertadora en los andes de Venezuela, en las que participaron héroes patriotas colombianos, el pueblo de Niquitao en Venezuela también rememora al cacique del mismo nombre. El área de Renovación de San Lorenzo, está inserta en un Plan Parcial que involucra tres barrios de la centrales de la ciudad de Medellín ubicados en la comuna 10 o de “la Candelaria”, que son los Barrios Colon-Niquitao, sobre el cual se hace el tratamiento de Renovación, y los Barrios San Diego y Las Palmas, el proyecto del Plan Parcial, tiene dentro de sus objetivos la generación de una centralidad barrial para estos tres barrios, a partir de la recuperación de infraestructura abandonada por obsolescencia funcional, que corresponde al “Cementerio de San Lorenzo”, el desarrollo de vivienda de interés social por Renovación para construir 7000 soluciones para facilitar el repoblamiento del sector con población nueva.

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5.1 Localización y Extensión4 El área de planeamiento cubre un territorio aproximado de 45 hectáreas conformado por 51 manzanas y tiene una población de 22.000 habitantes, de los cuales 7.500 pertenecen al barrio Colón, 4.500 al barrio San Diego y 10.000 al barrio Las Palmas.

Corresponde esta extensión al espacio comprendido por los cerros El Salvador y La Asomadera al oriente y sur-oriente respectivamente, la Cra. 46 Av. Oriental al occidente y las calles 47 y 44, San Juan al Norte. El área de intervención pertenece al límite surOriental de la comuna 10, La Candelaria.

5.2 Topografía El área del Plan Parcial, en su morfología, presenta una topografía diversa, desde áreas planas hasta laderas con pendientes altas y medias, que oscilan entre un 20% y 40%, lo que promovió el desarrollo de los barrios siguiendo la conformación de la ladera, sin que en esta se pudiera aplicar el plano ortogonal del damero español.

Ver anexos C y D. Pag 112 y 113

El Área de Renovación del Sector de San Lorenzo. Plano cartográfico 5-1 Área del Plan Parcial de San Lorenzo

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Plano cartográfico 5-2 Resalto de la Nueva Centralidad Proyectada del Plan Parcial de San Lorenzo. Fuente. SITE Alcaldía de Medellín

5.3 Tipologías En la parte de colon, se conservan aún casas antiguas unifamiliares de un piso, de construcción en tapia, conforme la cercanía con el sector misma situación se presenta en San Diego y Las Palmas, las casas vecinas de estos Barrios con el Barrio Colon tienen estas mismas características, también aparecen edificaciones de vivienda bifamiliar de dos pisos y construcciones de vivienda de desarrollo progresivo de hasta cinco pisos. Y edificios multifamiliares particularmente los de vivienda de interés social construida con el ánimo de mejorar las condiciones de vida de las familias que habitan en inquilinato, y las Torres de San Sebastián como vivienda de interés social en altura.

El Área de Renovación del Sector de San Lorenzo.

5.4 Características Socio - Urbanas del Area de Renovación Plan Parcial de San Lorenzo. Partiendo del Barrio Colon-Niquitao5 con 4,8 hectáreas. De un área que se genera entre la Cra. 44 Niquitao, conocida como el camellón de la asomadera en los tiempos coloniales, y el área circundante de la avenida oriental, también conocida como calle San Felix, y desde la calle 47 hasta la calle 33, bordeada de casas antiguas construidas bajo la técnica de tapia, casas unifamiliares que fueron subdivididas conforme el crecimiento de las familias inicialmente y el primer auge del barrio como zona central, y cercana a los centros de comercio y consumo de la ciudad, que permitió el asentamiento de artesanos e industrias en el sector, su posterior deterioro con la salida de la industria, los nuevos desarrollos urbanos de la ciudad y así como las primeras intervenciones de Renovación, condujeron a la aparición de los inquilinatos en las antiguas viviendas del sector.

Actualmente según datos colectados por la administración municipal se ubican allí 73 inquilinatos Gráfico 5-1 Usos del Suelo en el Barrio Colon Niquitao. Fuente, Elaboración Propia con datos del Documento Técnico de Soporte del Plan Parcial de San Lorenzo.

Ver Anexo E.

66 Plano cartogrรกfico 5-3 Barrio Colon

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El Área de Renovación del Sector de San Lorenzo.

En cuanto al Barrio Las Palmas , es el sector más residencial, mientras que en ColonNiquitao, se localizan talleres y pequeñas y medianas empresas, sumadas a los inquilinatos y la vivienda para población dependiente de la economía informal de la ciudad, El barrio Las Palmas, parte del cerro el salvador hacia la parte baja de la ladera, la arquitectura de las viviendas se realizó de manera espontánea en armonía con las curvas de nivel, y la elevación del terreno. El Barrio San Diego7, comparte similitudes en su desarrollo urbanístico y arquitectónico con el barrio Las Palmas, con una diferencia, su mayor cercanía con Colon-Niquitao, y el cruce de vías principales de la ciudad, lo que ha expulsado vivienda, a cambio de industria, comercio y servicios, y en consecuencia la aparición de inquilinatos en los límites con el barrio Colon-Niquitao, aunque es predominantemente residencial.

Tabla 5-1 Población, Hectáreas y Densidad en el Plan Parcial de San Lorenzo. Fuente Elaboración Propia, con datos del Documento Técnico de Soporte al Plan Parcial de San Lorenzo . 8

Ver anexo F. Pag 115 Ver anexo G. Pag 116 8 Ver anexo H. Pag 117 7

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Plano cartográfico 5-4 Barrio Las Palmas. Fuente. DAPM de Medellín

El Área de Renovación del Sector de San Lorenzo.

5.5 La Estructura Ecológica del Área Esta es un área carente de espacio público, la población suele suplir esta carencia con los lugares del centro, de allí que la “Plazuela San Ignacio”, colindante y antes parte integrante del barrio haya sido su centralidad original, hasta la construcción y ampliación de las avenidas Oriental y San Juan, dos zanjones, el de Guanteros, y el de Guayaquil, así como la quebrada Santa Helena, y el Rio Aburrá, constituyeron el núcleo hidrológico, que justifico grandes proyectos de infraestructura de ciudad que afectarían el “Soporte Natural”, el Camellon de la Asomadera, y el camellón del Medio, hoy Carrera Niquitao, y Carrera Palacé, como partes altas, permitieron el desarrollo del Barrio Guanteros, alrededor de la vía de comunicación hacia los pueblos de San Lorenzo de Aburrá, La Aguacatala, y Envigado, evadiendo los terrenos anegadizos de la llanura de inundación de los meandros del Rio Aburrá, es así entonces como los cerros del Salvador, y del parque de la Asomadera, se constituyen en parte moldeante del desarrollo urbano de la zona, así como en componente de espacio público de conservación, y en borde natural del área aunque en la periferia de los barrios.

Finalmente están las escorrentías como drenaje natural, que permite la estabilidad física del territorio; una de las demostraciones de la pugna entre el hábito, el habitar y e hábitat, que explica la triada de la relación entre naturaleza, sujeto y sociedad, y la acción de gobierno, no se establece solamente en la urbanización y conversión de un espacio natural, en espacio residencial para el hombre, sino en decisiones como las que se toma sobre este territorio de dar cobertura a la quebrada Santa Helena, la cobertura de los Zanjones de Guanteros y de Guayaquil, los cuales se encuentran bajo la calle y “entubados”, y finalmente la denominada “rectificación del Rio Aburrá”, que permite la construcción de obras como la plaza de mercado, y la estación del ferrocarril, así como la extensión de calles, como San Juan, la carretera al norte, o Carrera Carabobo, hoy día peatonalizada, y renovada esto dentro del polígono de renovación correspondiente a Guayaquil, pero más allá de ello es poder urbanizar la parte baja del camellón de la Asomadera, los antiguos terrenos anegadizos, que darían origen a proyectos tan importantes como el Barrio Obrero de Colon-Niquitao.

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Plano cartográfico 5-5 Barrio San Diego. Fuente. DAPM de Medellín

El Área de Renovación del Sector de San Lorenzo.

5.6 Los Inquilinatos Los inquilinatos en el sector de San Lorenzo, se distribuyen entre Colon-Niquitao y San Diego, según el Documento de Soporte, en Colon-Niquitao, donde las edificaciones se destinan en un 50% a vivienda, de un 100%, un 4 corresponde a edificios destinados a Inquilinatos, que para el solo Niquitao, sumaban 73, y para el área de renovación 101. Como se sostiene a lo largo de este documento, los Inquilinatos, no son un fenómeno nuevo en el sector, tienen presencia, en lo referente a su proliferación desde los años 50 del siglo XX, sin embargo, la condición de vía de comunicación, su cercanía a las estaciones del ferrocarril, y la Universidad de Antioquia, obligó a la construcción de hoteles de paso, y la conversión de viviendas en inquilinatos para los estudiantes que venían de otras regiones del departamento y del país.

Se extienden estos por la carrera Niquitao, según estudios de la Universidad Nacional, para 2006 hay 130 inquilinatos, esto corresponde con lo dicho por los entrevistados acerca de que se percibe la proliferación de este tipo de uso en las viviendas del sector.

Para los habitantes, las prácticas en los inquilinatos y la falta de reglamentación sobre ellos, son causa fundamental del deterioro del barrio, ya que la población que allí se aloja, se asocia con delincuencia, tráfico, y consumo de estupefacientes.

El inquilinato es un espacio de habitación sujeto a la temporalidad, a la economía informal , y de subsistencia, no existe el arraigo, está sujeto a la incertidumbre, a la migración, a la deambulación al trato con los administradores de los lugares, a la perdida de privacidad, a un habitar distinto, al conflicto por lo semipúblico, de lugares como el baño, la cocina y el corredor.

Siguiendo a Cuervo-Calle (2009), este dice: “La transformación de los hábitos, en torno a actividades básicas como: cocinar, dormir, asearse, entre otras; dentro del inquilinato, son situaciones que también hacen parte del habitar. Los hábitos, modificados y transformados en el inquilinato, en la mayoría de los casos degradan al ser, ya que los habitantes se ven obligados a construir su habitar bajo condiciones que, por lo general, no le

Transformación Social del Hábitat son propias como ser humano. El inquilinato deja de ser ese espacio en el cual el habitante proyecta una amplia posibilidad de planear su futuro, no es su templo, ni su refugio, ni su casa. Las expresiones del habitar implican acciones contrarias a las que, comúnmente, consideramos habituales en una casa tradicional”.(CuervoCalle, 2009; Pág. 49).

Es decir, se sostiene la afirmación de la población histórica, en que uno de los motivos fundamentales del deterioro es la situación del inquilinato, pero hay que excluir de esta situación de “patologías sociales”, a habitantes que han construido su habitar, sus hábitos y su arraigo, habitando en inquilinatos. El problema se acentúa con la mezcla de usos informales del suelo, o la práctica del espacio en el sector, donde se identifican plenamente, por sus condiciones de centro, y abandono, con relación a otras zonas de la ciudad y del valle, zonas donde se ubica la práctica de la prostitución, como es el caso de la Avenida Oriental, entre las calles los Huesos, y la 33; la localización de “Personas en 9

Situación de Calle” , que se ubican en buena parte en la esquina de la Avenida Calle San Juan, y desde allí deambulando entre las carreras Niquitao y la Avenida Oriental, y los bajos de los puentes de la Avenida Oriental. Así mismo, se ubican allí actividades como talleres de Mecánica automotriz, y de venta de autopartes, actividades que se caracterizan por ser altamente deteriorantes, ya que son de alto tráfico vehicular y de peatones en el día, y de alta disminución de su uso en las noches facilitando actividades delictivas por su soledad.

Esto va referido a la vocación principal del sector, a excepción de los inquilinatos, la localización de personas en situación de calle, y el cierre del Cementerio de San Lorenzo, el sector es Residencial, tan solo en el caso de Colon-Niquitao, donde un 50% de este es residencial, la ubicación de prácticas como la prostitución, y las actividades de mecánica, comercio e industria gráfica, que se ha localizado allí, que no son nuevas, en su mayoría no compaginan con la vocación residencial actual y proyectada para el sector, por ende son actividades que han deteriorado social y físicamente al área de San Lorenzo.

Este concepto, es desarrollado en respeto a la dignidad de los habitantes de la calle, despectivamente llamados indigentes durante un tiempo, y que comúnmente se conoce como “gaminismo”.

El Área de Renovación del Sector de San Lorenzo.

5.7 Las Torres de San Sebastián, y los Modelos de Vivienda del Sector. Concebidas como un proyecto de vivienda de interés social, consiste en once (11) torres de veintiún (21) pisos, para un total seiscientos sesenta apartamentos (660), hace parte del modelo de ciudad concebido en Medellín, de crecimiento hacia adentro, y para el cual se aprovecha el sector de San Lorenzo, el cual se destina en su proceso de Renovación, aprovechando su localización como barrio de centro, y recuperar así su vocación residencial.

Es hasta el momento el único proyecto de vivienda adelantado dentro del polígono de Renovación, y se ubica en el Barrio

Niquitao, en la Avenida Oriental y la calle los

Huesos. Su construcción sería motivo de crítica por el área de cada apartamento, por la gran cantidad de apartamentos, y por el manejo de la convivencia de la población en su interior. Fotografía 5-1 Torres de San Sebastián. Fuente Elaboración propia

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Su desarrollo impacta directamente sobre el Barrio y el área de intervención del plan parcial de San Lorenzo, desde el punto de vista ambiental, aumenta la población, pues sus residentes no son originarios del sector, que hayan hecho uso de este proyecto como forma de suplir sus carencia de vivienda, de otro lado fue construido sin plantear integración con los habitantes del sector, y sin que en este existiera espacio público que favoreciera la integración de la población nueva, con la población histórica. Según Arboleda (2007), “Al principio la propuesta se hizo como vivienda de interés social, pero termino siendo ocupada por personas de otros barrios y casi ninguna del sector, los vecinos hablan de seis familias procedentes de San Lorenzo”.(Arboleda 2007; Pág. 163). Esta concepción fue ratificada en las entrevistas realizadas a los líderes del sector y a profesionales técnico de la administración municipal, quienes dan cuenta, de que “a los pocos días se podían ver los letreros de “se arrienda”, para la población de Niquitao, las Torres acabaron con la vista paisajística que se podía observar desde Niquitao, y has con las corrientes de aire que refrescaban el sector.

La Veeduría Ciudadana al Plan de Desarrollo, constató en sus documentos lo acontecido con las torres. “Se hace evidente el manejo de la norma a conveniencia para la aprobación de proyectos que se realizaron en el trienio 2001-2003 (San Sebastián, Sevilla y San Nicolás), los cuales deberían ajustarse a lo definido por el Acuerdo 062 de 1999. La flexibilización normativa fue para la administración de 2001-2003 una de las estrategias para viabilizar los proyectos de vivienda de interés social, permitiendo mayor densificación y menos equipamiento colectivo y espacio público, contrario a lo que se esperaba con el POT y a los objetivos señalados en el capítulo de Espacio Público del Plan de Desarrollo.

Los nuevos edificios de VIS, aunque se localizan en áreas céntricas dotadas con buenos servicios, están desarticulados del entorno, rompiendo la trama de relaciones propias de la vida de la ciudad, y generando a su vez, una alta dependencia de los servicios e infraestructura de algunos sectores”.”(informe de la Veeduría Ciudadana al Plan de Desarrollo 2001-2003, en el componente de Vivienda y Hábitat, Pág. 208).

El Área de Renovación del Sector de San Lorenzo.

San Lorenzo es estratégico para Medellín y el Valle del Rio Aburrá, por las condiciones que ofrece para la realización de vivienda nueva a través de la Renovación del Sector, el problema ha radicado en la forma como la gente de Niquitao, siente que le impusieron el proyecto de las torres, aspectos que son recogidos por la prensa de la época, y por el informe al plan de desarrollo, realizado por la Veeduría Ciudadana, se flexibizaron las normas para permitir una máxima densificación, acosta de espacio público, para el mismo proyecto y en consecuencia para el Barrio. Sobre la vivienda de San Sebastián, es de resaltar lo dicho por la veeduría sobre este aspecto. “En el afán de responder a la meta de las 20.000 viviendas, el sistema constructivo utilizado, aunque es más eficiente en tiempo y costos de construcción para edificios de más de 15 pisos, pasa por alto condiciones de calidad habitacional, lo cual se evidencia con las características de las viviendas que se señalan a continuación: se están construyendo unidades de vivienda entre 48 y 50 m², área que resulta pequeña para el desarrollo de las actividades cotidianas de una familia de 4 personas, máxime cuando el espacio público que ofrece la urbanización es escaso, por las razones de flexibilización normativa antes expuestas, lo que imposibilita el encuentro y el esparcimiento. El espesor de los muros divisorios, de 7 cm. y de las losas12, es más permeable al ruido de las actividades cotidianas de las viviendas cercanas, alterando la tranquilidad y privacidad de los habitantes.

Otros aspectos que se pasan por alto, se refieren a la integralidad, el barrio como unidad socioespacial, el espacio público como estructurante, las condiciones de la casa como espacio privado de la familia y la posibilidad que tiene la vivienda de consolidarse mediante el desarrollo progresivo” (informe de la Veeduría Ciudadana al Plan de Desarrollo 2001-2003, en el componente de Vivienda y Hábitat, Pág. 209).

5.7.1 Otros Proyectos, Programas y Políticas de Vivienda. San Sebastián, como parte de los proyectos estratégicos de la ciudad, para la Renovación de Niquitao, no es el único modelo de vivienda implementado en el sector, es de recordar que el Barrio Colon, nació como Barrio obrero de principios del siglo XX. Aún hay otros modelos de vivienda, del sector más “parroquiales”, como apuesta del

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Gobierno municipal, para revertir las condiciones de deterioro, y darle oportunidad a la población, que satisface sus problemas de vivienda con los inquilinatos, es así como a través del convenio entre la organización francesa “PACT ARIM”, luego del diagnóstico realizado sobre el que hacer con San Lorenzo, se empezó a implementar le modelo de Vivienda Compartida, en teoría un modelo más acorde con las condiciones de hábitat y de habitar de la población que reside en los inquilinatos.

Bajo esta modalidad de vivienda, participan las organizaciones sociales sin ánimo de lucro, como la “Sociedad San Vicente de Paúl”, y el municipio de Medellín a través de la institucionalidad de vivienda de la administración municipal. Estos proyectos tienen como finalidad ser una vivienda de tránsito, temporal, con el objeto de permitirle a las familias ahorrar en el interregno y poder acceder a una solución definitiva a su problemática de vivienda. Para realizar este proyecto que involucraba la pedagogía del habitar, el ahorro, con el arriendo social, y la opción de comprar vivienda, se desarrollaron tres de cuatro modalidades: 

El Centro Social de Vivienda Compartida



El Inmueble Cajón



La Vivienda Compartida (la cual no se desarrolló)



Y el Edificio San Vicente.

El centro social de vivienda compartida, se estableció como un centro de pedagogía del habitar, donde a las familias que residían en inquilinatos, que llevaran cierto tiempo de morar en el sector, se les brindaba la oportunidad de mejorar sus condiciones de convivencia, y de capacidad de ahorrar, durante dicho entrenamiento se evaluaba sus condiciones y capacidades para la convivencia y el ahorro para acceder a una solución definitiva de vivienda.

El Inmueble Cajón, tenía la función de ser el punto intermedio, de descongestión y fluidez del programa de vivienda para población en inquilinato, se supone que de allí la familia debía pasar a inmuebles del tipo Edificio San Vicente, o hacia otras soluciones definitivas de vivienda.

El Área de Renovación del Sector de San Lorenzo.

Fotografía 5-2 Ubicación del Programa de Vivienda Social Compartida. Fuente Elaboración propia.

Por último el denominado multifamiliar San Vicente, que constituía la solución final dentro del programa de vivienda, para la recuperación de la residencialidad del sector de Niquitao, y así mismo la respuesta de la política del Municipio a la problemática de los inquilinatos, hasta allí ha llegado la respuesta del municipio a la problemática, sosteniendo aún el Centro Social de Vivienda Compartida, pero sin ejecutar en la zona nuevas soluciones de vivienda de interés social, que sobre todo, involucren a la población arraigada en Niquitao.

5.7.2 Los proyectos urbanos y de renovación, entre San Lorenzo, y Guayaquil. La Renovación en el sector no es un tema nuevo, tenemos que empezar por el hecho de que en el Medellín Colonial y el Republicano, el área es objeto mismo del desarrollo no solo habitacional, sino, de servicios para la ciudad, es un sector considerado de “Arrabal”, como se ha dicho en este trabajo, es una vía de comunicación local y regional, que al

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estar tan cercana a la plaza mayor, se convierte en sitio de paso obligado, a parte el ser una zona alta la hace propicia para el establecimiento de viviendas, ya que la parte llana es proclive a los desbordes del Rio Aburrá-Medellín, el ser vía de comunicación cercana, Plano cartográfico 5-6 Proyecto de Renovación Urbana del Centro en 1969, Construcción y ampliación Avenida Oriental sobre la Cra San Felix, y avenida Calle San Juan, los resaltados en cuadricula hacia el sur corresponden a los barrios San Antonio y Colon-Niquitao

Permite que se aproveche su localización para actividades de Hotelería, Cafés, Bares y Restaurantes. Eso si guardando las proporciones de tiempo, población y cultura, es decir, no estamos hablando de una gran cantidad de negocios de este tipo esparcidos por la geografía del área, pero de establecimientos significativos para la ciudad. La primera gran obra que afectaría a San Lorenzo, es la construcción del Cementerio parroquial en su territorio, dice Osorio, que este suscitó un primer enfrentamiento entre la población y la administración, discusión que fue zanjada con el intercambio de la

El Área de Renovación del Sector de San Lorenzo.

construcción del cementerio en el lugar, con el favorecimiento a la comunidad con el aprovechamiento de una pila de agua.

La segunda obra que afectaría al barrio y que sería de gran impacto sería la denominada “Rectificación del Rio Aburrá”, el rio se adentraba en la parte llana del sector con sus meandros por todo su recorrido, llegando a alturas de la carrera bolívar, de allí la importancia de los camellones como hábitat para la población pobre de la época. De allí que pudieran desarrollar actividades económicas y productivas aprovechando su localización en la ciudad. Serían

Fotografía 5-3 Panoramica de Niquitao en 1924, Autor desconocido.

Entonces en aquellos tiempos las Carreras Bolivar y la Calle San Juan, los limites naturales de la urbanización de la ciudad.

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Fotografía 5-4 Barrio Colon 1925, autor desconocido.

La Rectificación del Rio, haría innecesario el tránsito por el camellón de la asomadera para desplazarse hacia el sur del valle y de la región, empero las costumbres culturales del lugar permanecerían, al igual que su centralidad y su condición de Barrio.

Un tercer cambio que impactaría al sector y que lo discriminaría frente al resto de la ciudad es la construcción del barrio Prado, y del Cementerio San Pedro, el primero como Barrio para las clases pudientes de la época, y el segundo considerado en la época como el cementerio de los ricos, quedando el estigma para San Lorenzo, como el cementerio de los pobres.

En cuarto Lugar tenemos la construcción de la Plaza de Mercado, desplazando el mercado tradicional y dominical que se realizaba en la Plaza Mayor, hoy Parque de Berrío, hacia las afueras de la Villa en el sector de Guayaquil, y la Construcción de la Estación Medellín del Ferrocarril de Antioquia, estos hitos históricos del desarrollo de la ciudad y de la Región, propiciarían el establecimiento en la zona de nuevas práctica productivas, la instalación de industrias básicas, y por tanto la proliferación de artesanos

El Área de Renovación del Sector de San Lorenzo.

en el sector del Camellón, algunas historias de la zona, indican que el nombre de Camellón de Guanteros, tiene relación con los artesanos que se ubicaron allí y que se dedicaron entre

otras a la elaboración de Guantes; Estos desarrollos facilitaron la

migración hacia la ciudad, acentuada por la industria naciente, lo que daría pie igualmente al florecimiento de los servicios hoteleros en las inmediaciones, y a la necesidad de la construcción de Barrios Obreros, de allí la aparición del Barrio Colon, y la urbanización del sector desde la calle San Juan hacia el sur, así como la urbanización del cerro del Salvador y el sector del Barrio Gerona.

Fotografía 5-5 Área de Plaza de Cisneros, futura Avenida Calle San Juan, al fondo Niquitao

La penúltima obra sería la construcción entre otros proyectos viales, de la Avenida Oriental, sobre la calle San Félix, (otro de los nombres del Barrio) y la ampliación de la Calle San Juan, con lo cual se erradica el Barrio San Antonio, conservando la Iglesia del mismo nombre. Así como la demolición de viviendas históricas del sector y el

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rompimiento de la trama urbana que unía el Barrio Colon a lado y lado de la Calle San Félix, y de la Calle San Juan, pues de recordar cómo se ha resaltado anteriormente que la centralidad barrial de esta zona estaba constituida por la plazuela de San Ignacio, cuyo acceso se vería truncado por la amplísima Avenida Calle San Juan, a parte de la demolición de las viviendas que dieron paso a esta ampliación.

La posterior salida por relocalización de la estación del Ferrocarril, alrededor de la cual se había establecido el transporte intermunicipal, y de la Plaza de Mercado de la ciudad, que se relocalizaría en el sector conocido como Estación Villa, cambiarían por completo el sector, ya que allí ya se habían construido hábitos y maneras de practicar el territorio, producto de las actividades no complementarias al uso de la vivienda, a la relocalización de las actividades industriales en el sur de la ciudad y en el norte del valle. Lo que cambió la rutina y las localizaciones de los residentes, así como, la vocación de barrio obrero adquirida por la industrialización naciente y el desarrollo urbano. Se sostuvo por parte de planificadores como Wiener y Sert , que lo mejor no era intervenir dicho territorio nuevamente para evitar que las actividades que allí se habían desplazado, se desplazaran nuevamente hacia otros sectores de la ciudad, trasladando el deterioro.

En su historia como sector residencial y de tránsito en el centro de la ciudad, da cuenta que el sector fue hábitat de los artesanos de la ciudad, por ser lugar de paso y próximo a la estación del ferrocarril y a la plaza de Mercado de la época, fueron famosas sus “Fritanguerias”, conocido el sector en ese entonces como los camellones de guanteros y la asomadera, sitios altos de la ciudad de entonces que servían para esquivar los meandros del Rio Medellín, y sus continuas inundaciones.

El Área de Renovación del Sector de San Lorenzo.

Fotografía 5-6 Barrio Colon 1925. Autor M Lalinde

Fue tal la fama bohemia y cultural del barrio que fueron famosos los bailes y carnavales decembrinos de Guanteros, se dice que a partir de la canalización del Rio, acabó con su carácter de vía de comunicación, pues ya no era necesario esquivar los meandros, pronto con la proliferación de las actividades comerciales de la ciudad como consecuencia del funcionamiento del ferrocarril y de la plaza de mercado, el Barrio cambiaría nuevamente de identidad.

Pasó el Barrio hacia un deterioro causado por aquello que permitió su existencia, y su conversión en barrio obrero, el Ferrocarril, y la Plaza, la llegada de las migraciones campo-ciudad, y la naciente industrialización de la ciudad que se pudo dar en sus alrededores, para una ciudad pequeña el traumatismo es asimilable, aun cuando el impacto sea mayor.

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Fotografía 5-7 Fotografía Satelital Área del Plan Parcial de San Lorenzo. Fuente, SITE Alcalía de Medellín

Su ubicación lo convirtió en un puerto seco, más adelante con las obras de cobro por valorización, forzarían la expulsión de residentes hacia otras zonas de la ciudad, como el Barrio Prado, y el destino de las viviendas a hoteles de paso, sin embargo, la llegada de los rebuscadores, sumado a la ubicación de los inquilinatos en la zona, emprenderían el camino sin retorno conocido aún del deterioro, el barrio les permitía el cobijo, y podía oportunidades, lo que cambia con la ejecución de los proyectos de infraestructura que le cambiarían la cara, a esta zona, pues ya lo que permitiría sería la posibilidad de un resguardo, y su ubicación central, la posibilidad de con que acceder a tal.

El Área de Renovación del Sector de San Lorenzo.

Con el desarrollo urbano y el crecimiento hacia afuera, fue posible la urbanización en la periferia, la localización de los programas de vivienda estatal, en municipios como Bello destino de la vivienda social planificada de la ciudad, y el sur de la ciudad y del valle ubicación predilecta de la población con mayores ingresos de la ciudad y la región. De allí que recurramos a la unidad

estratégica de la llanura aluvial del Rio Aburrá Norte, en el sector de Niquía, y el tratamiento de desarrollo urbano que en el vacío urbano que allí se ubicaba se adelanta actualmente como fuente de referencia en comparación con la Renovación urbana en el plan parcial de San Lorenzo.

Retomando a San Lorenzo, las condiciones de abandono político, las patologías sociales del sector, el deterioro de residencias y edificaciones, así como la obsolescencia del cementerio, cerrado precisamente por factores técnicos de sanidad y salubridad hacen del territorio de los Barrios Colon-Niquitao, Sandiego y Las Palmas, por ser circunvecinos que sean objeto de la Renovación, la primera impresión social sería la necesaria mejora de las condiciones de vida de los habitantes del sector, pues de una forma u otra buena parte de los habitantes de las decenas de inquilinatos se pueden contar como habitantes tradicionales del lugar,

Esta es una zona, marginalizada desde el crecimiento primigenio de la villa, y el de la ciudad, por allí no se trazó ninguna línea del tranvía, sin embargo esto no fue obstáculo para el barrio como tal, y su integración con la zona de Guayaquil, y el centro Representativo de la época. “La Plaza Mayor”, la llegada del Tren hasta el sector de la Bayadera, y la presencia de la plaza de mercado, conectaban al sector con la región y con el país, allí por estas condiciones de infraestructura, se desarrollaría la industria tradicional de la ciudad como las fábricas de Noel, Coltabaco, y la Compañía de Chocolates, entre otras. El Barrio no solo fue aprovecha estas características del Barrio, provocaron el establecimiento de intelectuales de la Región que habitaron y socializaron en sus viviendas, y “Cafés”. Aparte de que este fuera centro de fiestas, y expresiones artísticas. También estuvo relacionado con la cultura política de la ciudad, pues en la Plaza de Cisneros, frente a la Estación Medellín del Ferrocarril, era que se realizaban los mítines políticos en la ciudad.

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Se dice que el deterioro del sector, va de la mano con la aparición de los Bares más hacia el interior del Barrio, pues estos promovieron la conversión de viviendas en inquilinatos. (Osorio, 2000), interrelacionado siempre con la vida urbana, y el hábitat del Barrio Guayaquil, sector comercial, los trabajadores de dicho sector, Vivian en Niquitao en su mayoría, o los de Niquitao, frecuentarían a Guayaquil, los muchos usos del sector contemplaron hoteles de paso de los comerciantes y campesinos venidos del sur de la ciudad y del valle, también lo fue gracias a su cercanía a la Universidad de Antioquia, para residencias de estudiantes, de este conjunto de condicionantes se infiere la proliferación y permanencia de los inquilinatos en la zona, que sería problemática, por la atención a la población más vulnerable de la ciudad.

La Plaza de Mercado, el Ferrocarril, y las terminales del transporte terrestre fueron parte del hábitat, la proximidad del mercado y de la región, hacían parte del vecindario de San Lorenzo, Guayaquil y Niquitao, Próximidad rota por la decisión pública de Renovar, y por la decisión privada de innovar.

5.8 La Transformación Social del Hábitat como Política Pública en el Caso del Plan Parcial de San Lorenzo. Aunque el urbanismo y sus tratamientos sobre el hábitat del Barrio, no son un tema nuevo de la era urbana, como tampoco sus consecuencias políticas, sociales y económicas, pues las ciudadesestán en constante transformación por dinámicas urbanas impulsadas por tres aspectos : 1) la Utopía, el impulso dado por una elite política, social y económica, sobre el ideal de ciudad que se debe desarrollar; 2) por las innovaciones tecnológicas, la revolución de las telecomunicaciones, los automóviles, nuevos tipos y técnicas en el desarrollo de infraestructura; y 3) finalmente la promovidas por las transformaciones socioeconómicas ya que estas estimulan innovaciones tecnológicas, modificando el tejido urbano. (Güell, 1997). Se reafirma entonces lo dicho por Leff, con relación al hábitat, sobre que este es transformado por la producción social y material de los habitantes sobre el territorio. La política pública de ordenamiento territorial, a través de la renovación y el desarrollo en los barrios de la ciudad, se asocia a la teoría de la planificación estratégica aunque de una manera ecléctica. La planificación estratégica se define como:

El Área de Renovación del Sector de San Lorenzo.

“(…) un proceso sistemático, creativo, y participativo que sienta las bases de una actuación integrada a largo plazo, que define el modelo futuro de desarrollo, que formula estrategias y cursos de acción para alcanzar dicho modelo, que establece un sistema continuo de toma de decisiones y que involucra a los agentes locales a lo largo de todo el proceso” (Güell, 1997; Pág. 55).

Dice Güell (1997) que la planeación estratégica está orientada a la demanda y a la acción porque busca satisfacer las necesidades de los actores sociales, y económicos, en equilibrio con las necesidades de gobernación del territorio, es decir no proveer una oferta genérica de bienes y servicios desarticulada de las necesidades imperantes en el entorno y requeridas por los actores y

por el gobierno. Y a la Acción porque

precisamente involucra a los distintos actores en los procesos de construcción de los problemas a resolver en el entorno urbano, en la toma de las decisiones y en la implementación de estas. Dice este autor, que la planeación urbana tradicional, plantea acciones y lugares, más no actores.

Fotografía 5-8 Avenida San Juan, y Centro de Medellín, desde Colegio San Lorenzo. Fuente Elaboración propia.

88 Medellín,

Transformación Social del Hábitat Bello

Área

Metropolitana,

como

instancia

coordinación

intergubernamental de los municipios del valle de Aburrá, se plantean su modelo de Ciudad, la ley como lo hemos reiterado establece la participación de los actores sociales en la construcción y debate de la agenda pública sobre las políticas del territorio. Sin embargo no toda la población se moviliza por los temas públicos, y la puja de intereses y capacidades de los actores sociales, reflejan finalmente la asimetría del poder en los documentos finales, y en las propias implementaciones de los tratamientos urbanísticos en este caso.

Del modelo de ciudad planteado por el municipio de Medellín se pueden resaltar tres aspectos:

Un crecimiento orientado hacia adentro, con énfasis en las zonas centrales próximas al río dotadas de excelente infraestructura, que experimentan actualmente procesos de estancamiento, degradación o subutilización. (Caso del Plan Parcial de San Lorenzo) Una ciudad con un sistema jerárquico de centralidades en equilibrio dinámico, a partir del centro tradicional y representativo, de unas centralidades de equilibrio norte y sur propuestas y de los centros zonales debidamente complementados con un amplio subsistema de centros barriales.(Convergencia entre el plan parcial de San Lorenzo en Medellín, y la Unidad Estratégica de la Llanura Aluvial del Rio Aburrá Norte, en el municipio de Bello)

Un centro tradicional y representativo con recuperada calidad y significación, mediante proyectos e intervenciones estratégicas a su interior y en su periferia. (entre otros el Plan Parcial de San Lorenzo)

El Área de Renovación del Sector de San Lorenzo.

Gráfico 5-2 Resultados proceso de renovación de las decadas 70 y 80 del siglo XX. Traslado de la Plaza de Mercado a la zona de la estación Villa, y de la Terminal a un complejo en el Barrio Caribe en el norte de la ciudad de Medellín. 10 Gràfico del Proceso de Desarrollo urbano de los sectores de estudio con respecto a la ciudad y el Valle metropolitano, Cambios fìsicos, por Renovaciòn y Desarrollo Urbano en la Medellìn de 1970 en adelante.

Centro tradicio nal

Bello

Puerto Terrestr e

Barrios Colon Niquitao, Las Palmas y Sandiego Centro

Administr La candelaria Zona Comer cial y Plaza de la Luz

ativo Municipal , metropolit ano y Regional

Valle de Aburrà y Municipio de Medellìn Plaza de merca do

Convenciones

Municipio de Bello

Centro Puerto Tradicional Terrestre

Plaza de Mercado

Area Area de Central de Renovación Medellín

Avenidas por Renovación 1970

Bello La construcción de los problemas sociales es resultado de la interacción política entre los grupos sociales, los actores económicos, y factores exógenos y externos con el Gobierno en sus diferentes niveles, esa interacción hasta la década de los 80 del siglo XX, era vertical, y representativa, poco o nada podían hacer los actores sociales, en participar, más allá de la influencia en los niveles de decisión que indirectamente pudieran tener, es

El Gráfico representa, las primeras obras de Renovación, traslado del transporte, incluyendo el ferrocarril a una terminal que los concentrara en el Barrio Caribe en el norte de la ciudad, así mismo el traslado de la plaza de mercado de Cisneros, hacia la zona de la Estación Villa en cercanías al barrio San Benito, y la construcción y ampliación de las Avenidas Oriental y Calle San Juan. La Gran Transformación.

Transformación Social del Hábitat

así como la ciudad se moldea por la sinergia de los cambios políticos, tecnológicos y socioeconómicos, pero sin participación de los actores. Hoy día aunque la ley trata de restar presión abriendo a la discusión directa entre los habitantes, los actores, y el Gobierno, las problemáticas y la agenda pública de la ciudad, la invisibilización de la participación se hace evidente en la implementación de las políticas en los resultados objetivos y mensurables de la aplicación de las decisiones públicas. Se debe reconocer sobre el paradigma tradicional y el modelo participativo“democrático”, que las decisiones sobre el territorio debe tener sustento técnico, desde el punto de vista legal, lo que lo acerca un poco al modelo racional en la toma de decisiones, por lo menos, así se le puede ver frente a decisiones como la canalización del Rio Medellín, la construcción de las avenidas Oriental y San Juan, la construcción del Metro, y hasta la misma decisión de llevar a cabo tratamientos urbanísticos con forme el modelo de ciudad que plantea el plan de ordenamiento territorial.

Bajo el modelo participativo la racionalidad es puesta sobre la mesa de discusión, para poner en ejercicio la capacidad de Gobernabilidad de la ciudad, y la capacidad de gobernar, por parte de la elite política dirigente electa, y la administración pública de la ciudad, es decir la capacidad de los actores sociales comunitarios, no gubernamentales, y los actores económicos de no generar ingobernabilidad en la ciudad, y la capacidad del Gobierno para conciliar los intereses, influir y equilibrar entre los distintos actores.

El Área de Renovación del Sector de San Lorenzo.

Gráfico 5-3 Proceso de Transformación Actual, Nueva Centralidad de San Lorenzo. Y Nueva Centralidad Metropolitana Norte Gràfico del Proceso de Desarrollo urbano de los sectores de estudio con respecto a la ciudad y el Valle metropolitano, Cambios fìsicos, por Renovaciòn y Desarrollo Urbano en la Medellìn de 1995 en adelante. Avenidas Metro

Nueva centrali dad Norte Metrop olitana

Centro tradicio nal

Bello

Puerto Terrestr e

Barrios Colon Niquitao, Las Palmas y Sandiego Centro

Administr La candelaria Zona Comer cial y Plaza de la Luz

ativo Municipal , metropolit ano y Regional

Valle de Aburrà y Municipio de Medellìn Plaza de merca do

Convenciones Nueva Centralidad Municipio Norte de Bello

Bello

Centro Puerto Tradicional Terrestre

Plaza de Mercado

Area Area de Central de Renovación Medellín

Líneas Metro

Avenidas por Renovación 1970

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Fotografía 5-9 Entrada del Parque San Lorenzo vista desde el interior. Fuente. Elaboración propia

La convocatoria pública, sumado a la heterogeneidad de los habitantes, son el talón de Aquiles en la transformación social del territorio en un proceso concertado con los actores sobre el desarrollo comunitario, de allí que la estrategia de comunicación del Gobierno, es decir su capacidad de interrelacionarse con los habitantes, y de influir sea fundamental, sin embargo, los Gobiernos, bajo la legitimidad de las elecciones y del cumplimiento del estado de derecho recurren en muchos de los casos según Montero en D`adamo (1995):

Bloquear o impedir las manifestaciones de los grupos sociales cualesquiera sea el método utilizado por estos.

Desacreditar a los actores sociales descalificándolos, o desvirtuando sus objetivos.

El Área de Renovación del Sector de San Lorenzo.

Silenciar la manifestación de los grupos sociales, acallando la protesta, prohibiendo, reprimiendo o manipulando la divulgación de su conocimiento, a fin de que no se difunda y extienda su efecto

Cooptación y penetración de los líderes y grupos sociales, o adopción de sus formas de acción para adecuarlos a los fines tradicionales. Fotografía 5-10 Parque de San Lorenzo. Fuente. Elaboración propia

El Plan Parcial de San Lorenzo inevitablemente produjo el desplazamiento técnico de personas y familias que debieron abandonar la zona, ya que sus lugares de habitación componían los terrenos para la construcción del colegio San Lorenzo, la ampliación de la carrera Girardot y la construcción

de las “Torres de San Sebastián. Líderes de la

comunidad manifestaron su inconformidad al ser entrevistados en particular por el desarrollo de las Torres, por el desplazamiento y compra a “menos precio” de los bienes de las familias que allí residían, y más aún que no se le diera oportunidad a estas familias de permanecer en el barrio. Este es el primer impacto acaecido en la zona, sin embargo la gentrificación aún es indeterminada, pues la calidad espacial de las viviendas en las

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torres de San Sebastián, no es la mejor, el proyecto se concibió como vivienda de interés social, pero buena parte de los compradores tomaron la vivienda como negocio, la trama barrial fue rota de esta forma, los habitantes de las torres no están insertos con la comunidad, y eso se expresa en el hecho de que ninguno de ellos participa en la junta de acción comunal del Barrio.

Fotografía 5-11 Interior del área de conservación patrimonial del Cementerio de San Lorenzo. Fuente. Elaboración propia

Desde el punto de vista de la estratificación socioeconómica, tomando el global de la comuna, y georreferenciando la estratificación, esta zona en donde se ubican buena parte de los inquilinatos, que está sometida a un proceso de renovación urbana, no ha sufrido mayor cambio aunque sí ha desaparecido el estrato uno, la pregunta aún es si hace parte de un proceso de movilidad social, que no

es visible físicamente, o

simplemente es resultado de la expulsión de los habitantes en condiciones de miseria y pobreza extrema, cuyas condiciones de habitación los ubicaban en estrato 1.

El Área de Renovación del Sector de San Lorenzo.

Fotografía 5-12 Parque de San Lorenzo. Fuente. Elaboración propia

Tabla 5-2 Comparativo Encuesta de SISBEN y Vivienda 2010. Fuente. Alcaldía de Medellín

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Tabla 5-3 Encuesta Calidad de Vida, Comuna 10, 2009. Fuente Alcaldía de Medellín

Tabla 5-4 Encuesta Calidad de Vida, Número de viviendas comuna 10, 2009. Fuente Alcaldía de Medellín

Sin embargo al comparar la encuesta del SISBEN , las personas en inquilinato, sin ser el sector de Colon- Niquitao, en el área del Plan Parcial de San Lorenzo, el único de la comuna con inquilinatos, para el SISBEN en la misma comuna existen 2.254 hogares en inquilinato, estratificado socioecómicamente como cero, mientras que para el informe de calidad de vida de 2010 que se hace en 2009, el estrato bajo-bajo no ubica familias allí, y en el bajo contabiliza para toda la comuna una población de más de 8 mil personas en éste.

El Área de Renovación del Sector de San Lorenzo.

Para el año 2005, 2 años después de la públicación del acuerdo municipal que decreta el Plan Parcial de San Lorenzo, la encuesta muestra 163 viviendas en estrato bajo-bajo para 489 personas, y 1.940 en el bajo para 7.808 personas, la encuesta del SISBEN de 2010 contempla 148 viviendas en el estrato 1, mientras que la encuesta de calidad de vida. Tabla 5-5 Encuesta Calidad de Vida 2005, comuna 10. Fuente Alcaldía de Medellín

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Fotografía 5-13 Cancha Placa Polideportiva abierta, Colegio de San Lorenzo. Fuente. Elaboración propia

El impacto socioeconómico es menor, lo que no puede entenderse aún, es que en toda la comuna dos encuestas de similares condiciones varíen tanto, puede entonces decirse que no se ha presentado cambio alguno con el plan parcial, a pesar de los desplazamientos que ocasionó el proyecto en la zona de Renovación y de vivienda de interés social. Tabla 5-6 Encuesta Calidad de Vida 2008, Comuna 10. Fuente. Alcaldía de Medellín

El Área de Renovación del Sector de San Lorenzo.

Tabla 5-7 Encuesta Calidad de Vida 2008, Comuna 10. Fuente. Alcaldía de Medellín

La estratificación predominante en el plano cartográfico de la ciudad para los barrios Colon, San Diego, y Las Palmas. Eran el estrato 2 y el 3 en el año 2005. Mientras que para 2007 cambió a estratos 3 y 5.

Socialmente desde el punto de vista de la estratificación, el cambio social se ha venido dando, la duda persiste frente a los datos de la encuesta de SISBEN y lo observado en los alrededores del colegio, lo dicho por la investigación de Elizabeth Arboleda, y lo referido por la población entrevistada, es de que los inquilinatos aún están allí, sigue siendo una población vulnerable y flotante anclada al lugar por la posibilidad de transacción temporal del techo, frente a las condiciones sociales de la población histórica, el efecto con el colegio es diciente aunque en entrevistas a los diarios locales, la comunidad ha expresado reservas frente a la ubicación del colegio vecino a expendios de sustancias alucinógenas, lo que es claramente un problema de policía y de prevención y acción de gobierno contra el delito y el microtráfico

100

Transformación Social del Hábitat

Plano cartográfico 5-7 Estratificación Medellín 2005, resaltado Barrios del Plan Parcial de San Lorenzo. Fuente. Alcaldía de Medellín

El Área de Renovación del Sector de San Lorenzo.

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Plano cartográfico 5-8 Estratificación 2007, resaltado barrios del Plan Parcial de San Lorenzo. Fuente. Alcaldía de Medellín

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Transformación Social del Hábitat

Al parecer estas condiciones sociales persistentes, de los inquilinatos, de la delincuencia y el tráfico de estupefacientes, que es el imaginario que la ciudad tiene sobre el barrio, sumado a las dificultades de transacción de los predios para vivienda nueva, han estancado el proyecto en la propuesta habitacional por lo tanto , la incorporación de nuevos habitantes. Las denominadas condiciones de deterioro social, población vulnerada, prostitución, consumo y tráfico de sustancias alucinógenas continúan, los inquilinatos siguen allí, solo algunos los más deteriorados desaparecieron con la implementación del plan.

El proyecto aún no termina, la centralidad, uno de los objetivos principales del Plan Parcial, en espacio físico aún no termina de construirse, la ciudad ha planteado desde mediados de la segunda mitad del siglo XX la renovación del sector, como se expone en el plano de 1969, y bajo el modelo de plan estratégico, y los planes de ordenamiento territorial busca nuevamente renovar el sector, generando vivienda de interés social para satisfacer el déficit habitacional de la ciudad, y revertir el deterioro de un barrio de centro, esta renovación con fines de vivienda en lo que refiere a los proyectos de vivienda como las Torres de San Sebastián no incluyó a la población del sector en dichos proyectos, ésta es la principal queja de los pobladores; de otro lado, la problemática de los inquilinatos que desde el convenio con la organización francesa PactArim, se buscaba brindar una solución habitacional distinta a la del inquilinato a través de la vivienda compartida, ha fracasado según la población por la incapacidad de la población en condición de inquilinato de poder pagar el arriendo establecido, mientras que desde la óptica de la investigación académica buena parte de la culpa, la tienen los vaivenes en la política de vivienda del arriendo social, la cual no avanza, pues se estanca con los cambios de administración.

La Vivienda para la ciudad a partir de la Renovación no progresa, y no incluye a la población original de los barrios renovados, esa premisa no es vinculante, ni de manera legal, es decir, se continua con el mecanismo de expulsión, Las Torres de San Sebastián provocaron expulsión de pobladores que no fueron integrados al proyecto, y la población en inquilinato quedaba claramente excluida del proyecto, adicional a ello, la flexibilización en las normas de construcción y el sistema constructivo hacen de la vivienda construida, un espacio criticable desde el punto de vista de opción definitiva de habitación, además su construcción sin integración al barrio, físicamente dándole la espalda alejó a los unos

El Área de Renovación del Sector de San Lorenzo.

103

de los otros, la población en reuniones con el Concejal Jesus Anibal Echeverry, líder político de la ciudad con intereses en la zona, ha manifestado la incomodidad con las condiciones de seguridad de la zona, evidenciándose la falta de prevención, proacción y reacción de los sistemas y servicios de seguridad pública.

La mirada acerca de construir vivienda de interés social, por vía de la Renovación Urbana de los Barrios de centro, es en el caso de Medellín, una política sin un fin social claro; si se tiene en cuenta el análisis que sobre el tema tiene Camacol. Según estudios de esta,en promedio el 35% de las unidades de viviendas que se construyen en Medellín son para vivienda de interés social. En la mesa de vivienda realizada en 2009, teniendo como premisa que en el valle de Aburrá, Medellín contribuye al déficit de vivienda con un 67%, dice Camacol que del 100% de familias que requieren vivienda solo el 32% está dispuesto a comprarla, y de esos el 91% requiere financiación, para esos días 258.442 hogares, mientras que solo el 2%, equivalente a 5.287 hogares podría comprarla realmente. Ilustración 5-1 Análisis de Camacol sobre el deficit de vivienda en el Valle de Aburrá, Mesa de Hábitat y Vivienda Medellín 2009. Fuente. Alcaldía de Medellín.

104 En la comuna de la Candelaria, donde

Transformación Social del Hábitat se ubica San Lorenzo, existe un déficit de más

de dos mil viviendas, después de haberse construido las Torres de San Sebastián, y haber proyectado por la Renovación y el Plan Parcial del sector, la construcción de más de 7 mil viviendas, con lo que se hubiese satisfecho el déficit comunal, y contribuido a disminuir el déficit de la ciudad y del área metropolitana.

Mapa 5-1 Deficit de Vivienda, Municipio de Medellín. Fuente. Alcaldía de Medellín.

Se concluye entonces que la transformación del sector, de las condiciones sociales de sus moradores, es financieramente imposible, pues hablamos de unos 2 mil hogares habitando en inquilinatos, sin tener en cuenta la población del sector que reside en condiciones de Arriendo. Fuera de lo acontecido con las Torres, convertidas en Edificio de Renta. Por otro lado en San Diego, su vecindad con el cerro de la Asomadera, y con la Comuna 14 o “El Poblado”, ha generado que en ese sector segregado social y

El Área de Renovación del Sector de San Lorenzo.

105

económicamente con respecto al más cercano a Las Palmas y Niquitao, proliferen viviendas de estratos altos, que por densificación, hacen que esta parte de la comuna aparezcan según los estudios catastrales como de estrato 5 predominantemente como se puede observar en los mapas, la coincidencia estriba en que el aumento de estrato va de la mano con la ejecución del Plan Parcial.

La Centralidad que no se culmina, que busca integrar a los tres barrios, se ve truncada, pues aunque se trata de la recuperación de un bien histórico-cultural del Municipio, no se encuentra en un cruce de caminos, no se complementa con servicios sociales, aunque el Colegio contiguo, también construido dentro de las obras del plan, y el cuál tampoco está concluido, tampoco complementa la centralidad, existe igualmente el proyecto de construir sobre una parte de la zona verde del Parque de San Lorenzo, un centro de salud, a lo que los residentes de la zona líderes de Niquitao, se oponen, diciendo. “El Barrio tiene edificaciones de propiedad del municipio, que se encuentran abandonadas o subutilizadas, que pueden con inversión servir más de Centro de Salud, que ubicar algo en un lugar, donde no queda cerca a nadie”. Fotografía 5-14 Nuevo Nodo, Centralidad Practicada San Lorenzo. Fuente. Elaboración propia

106

Transformación Social del Hábitat

Algunos otros se quejan de la ubicación del colegio, ya que personas en situación de calle, y la práctica del microtráfico se desarrollan en las cercanías de este, no hay cambio si el colegio se construye allí, y no se hace algo para que las condiciones de seguridad del sector cambien, son expresiones de líderes del barrio Las Palmas, recogidas por el diario el Mundo, sobre la transformación de Niquitao.

La centralidad que siguen practicando los habitantes del sector, es el centro tradicional de Medellín, y su centro barrial en la Plazuela de San Ignacio, pero han aprovechado el espacio que las Torres de San Sebastián, sobre la avenida oriental les ha ofrecido sin proponérselo.

6. Conclusiones La política pública de gestión del territorio, expresada a través de los planes de ordenamiento territorial y materializada en La Renovación Urbana y el tratamiento de Desarrollo Urbano,

transforman el Hábitat desde lo físico e intentan a partir de allí

desencadenar una transformación social. En el caso de la renovación, se busca la rehabilitación y el mejoramiento físico del territorio que se encuentra en obsolescencia física, funcional, y en el caso del desarrollo, producir la incorporación de un vacío urbano a la trama urbana de la ciudad, objeto cumplido en el caso de la centralidad norte del valle metropolitano, y en lo referente a la centralidad barrial de San Lorenzo,

este

objetivo no se cumplió.

En clara alusión a lo anterior, uno de los objetivos locales y metropolitanos con la transformación del hábitat por Renovación urbana , y el Desarrollo urbano, desde el punto de vista de los objetivos del desarrollo de la ciudad, se buscó el equilibrio con respecto a la ciudad nuclear, objetivo de la autoridad metropolitana del Valle deAburra, representada en el “Área Metropolitana del Valle de Aburra”, institución que se ha empeñado en desarrollar dos proyectos urbanos de generación de centralidades sobre las llanuras aluviales norte y sur del valle, para desconcentrar el centro de Medellín, y la presión sobre la ciudad principal, así como equilibrar el desarrollo entre los demás municipios del valle y la ciudad central de este. El problema hallado, es la categoría de centro tradicional y de centro Representativo, de valga la redundancia el centro de Medellín, ya que en ambas centralidades no aparece la desconcentración y descentralización institucional de las autoridades políticas locales, por lo tanto estas centralidades se reducen a un nodo -en el caso de la centralidad norte-, de relaciones comerciales, que obliga -por su condición de centro comercial, ubicado sobre una avenida principal y en los alrededores de la estación terminal del metro-, a que se den

108

Transformación Social del Hábitat

relaciones sociales. Es decir, se logra el objetivo de competir económicamente con la ciudad central, pero no logra el equilibrio político con respecto a ésta.

Son la comunidad, y los habitantes los actores de la transformación social del Hábitat del barrio, el cual es producto de la transformación del hábitat por parte de sus pobladores, en la interacción intersubjetiva de la sociedad, y en la actuación del gobierno y los demás actores que influyen en la ciudad. La acción de la comunidad, alrededor de los tratamientos urbanísticos,

sitúa

al barrio en el espectro político, por ser fuente

territorial de la política, al visibilizarse por la acción comunitaria, al exigir la satisfacción de sus necesidades, ser integrados en la planeación de la ciudad, y al ser objeto de la innovación empresarial urbana. El barrio es visto como espacio de la planeación de la administración pública y ejercicio del Gobierno Municipal.

Los habitantes por diversas circunstancias aceptan decisiones que afectan su hábitat, pero también manifiestan abiertamente su oposición a la decisión por vía de la protesta, o la simple resistencia al

cambio que

consideran impuesto por el Gobierno y la

Administración pública. Esta apreciación es distinta en lo que respecta a un proceso de desarrollo urbano de un área vacía, y producir un efecto consecuente con la idea expuesta por Montero (2003), es decir, los habitantes, se familiarizan, se habitúan y se naturalizan, con el desarrollo del vacío urbano, sin que ello implique que no haya disidencias; mientras que

en el caso de un área consolidada sometida a Renovación

como San Lorenzo, sus habitantes se opusieron, al proyecto de las Torres de San Sebastián, que provocó la expulsión de habitantes históricos que no fueron integrados al proyecto, este hecho generó la protesta y el rechazo de la comunidad al proyecto, que fue reseñado por la prensa y por la veeduría ciudadana al Plan de Desarrollo, lo cual fue visto por el Gobierno, como un rechazo normal a este tipo de proyectos, dice la administración que existe en las comunidades sometidas a procesos de Renovación Urbana, el temor a la expropiación y al desplazamiento, el Gobierno entonces optó por invisibilizar la protesta, al comunicar que cerca del 90% del barrio conocía y aceptaba el proyecto, es decir el Gobierno, desatendió la acción social.

por los

Conclusiones

109

habitantes vecinos al sector, por la oferta de espacio público, por la oferta de entretenimiento, entre otros servicios recreativos y culturales. Ésta centralidad sirve a la integralidad del valle de Aburrá, como espacio público, y por la generación de empleo a través del comercio de bienes y servicios, así como, también sirve a la integración regional de los municipios del norte del valle, y de los municipios del norte cercano a éste que pueden ahorrar en el desplazamiento hacia la ciudad de Medellín, equilibrando de esta manera la presión sobre la ciudad central-principal. En este sentido se modificó el paisaje físico y social del norte del valle, del municipio de Bello y del sector de Niquía dotándolos de una centro. Sin embargo, se ha prestado este desarrollo para segregación socio-espacial, ya que por ejemplo apareció en el sector un nuevo tipo de vivienda en conjuntos cerrados creando insularidades para estratos socioeconómicos altos.

En el caso del Plan Parcial de San Lorenzo, la generación de centralidad barrial para Colon-Niquitao, Las Palmas y San Diego a través del parque de San Lorenzo, sigue siendo ajena a él, los habitantes de estos Barrios siguen practicando sus viejas centralidades, es decir, la “Plazuela de San Ignacio”, y del centro comercial “San Diego”, que han suplido la escasez de espacio público, y de centralidad de estos barrios, al fin y al cabo ambos nodos, hacían parte de territorio Barrial, aunque por causa de los primeros procesos de Renovación del centro de la ciudad y las dinámicas de Innovación empresarial urbana, hayan perdido esta condición, aunque se encuentran en la misma división administrativa dentro de la comuna diez de la ciudad de Medellín. El hábito y la práctica de los habitantes del sector, los han establecido como las centralidades de la zona. Aun a pesar de lo dicho por Cristopher Alexander, de que “las grandes vías de tráfico destruyen la comunidad (Alexander, 1980). Esto aconteció para los habitantes del barrio Colon- Niquitao, con la construcción de la Avenida Oriental y San Juan, que dividieron el territorio común socialmente construido entre los habitantes de los barrios del centro, alejando sus referentes, destruyendo su tejido, erradicando sectores (como en el caso del barrio San Antonio y partes de Colon), y como resultado excluyéndolos del centro tradicional.

Las decisiones políticas en el Plan Parcial de San Lorenzo, y en la Unidad Estratégica de la Llanura Aluvial del Rio Aburrá Norte, fueron decisiones colectivas- colectivizadas, impuestas por el Gobierno sin concertación- La ley de ordenamiento territorial no implica que la

concertación

con la comunidad sea de carácter vinculante-

y luego

110

Transformación Social del Hábitat

colectivizadas(las decisiones). Una decisión colectiva-colectivizada habría generado los cambios esperados, por ser producto de la acción social, o de la concertación de los grupos sociales con el Gobierno. En el caso de San Lorenzo, como resultado de las entrevistas realizadas, se constató que fases del tratamiento de Renovación como la construcción de la Institución educativa, y la intervención en el cementerio, fueron solicitadas por la comunidad;

mientras que la construcción de vivienda caso de las

Torres de San Sebastián, fueron

el proceder de la racionalidad de la burocracia

gubernamental. La otra imposición gubernamental es la decisión de generar una centralidad a partir de la construcción del parque en el espacio del cementerio.

En vivienda uno de los objetivos principales de la Renovación de Niquitao, esta se convirtió en problemática de conflicto con la comunidad de los barrios del área del plan parcial de San Lorenzo. A través de los planes de desarrollo municipal de los últimos cuatro gobierno locales, se planteó el objetivo de construir siete mil viviendas, esto en el marco de recuperar la vocación residencial del sector, y revitalizar el sentido comunitario y vecinal del barrio con el tratamiento de Renovación. En este sentido

desarrollar

vivienda de interés social destinada a los sectores de menores ingresos. Esta es una comunidad donde se reportan según datos del Plan Parcial 73 inquilinatos solo en el sector de Niquitao, y 100 para todo el área de renovación, según la encuesta de SISBEN más de dos mil hogares de la comuna 10, habitan en inquilinato, el déficit cuantitativo de vivienda para 2009 se ubicaba en más dos mil (2000) viviendas. Para los hogares del barrio que habitan en inquilinato, se planteó además, un programa especial, selectivo y pedagógico con el ánimo de mejorar sus condiciones de vida, y prepararlos para la adquisición y habitación de una vivienda permanente. El problema surgido, ha sido la baja cobertura del programa de vivienda social compartida, la baja capacidad económica de las familias para adquirir las viviendas, y la nula oferta de vivienda para los hogares habitantes de inquilinato, estos no tuvieron cabida en el proyecto de las Torres de San Sebastián, como tampoco los demás habitantes históricos del sector directamente afectados por las obras de Renovación, como la construcción y ampliación de vías, y la misma construcción del proyecto de vivienda, que solo produjo 660 unidades de vivienda que aprovecharon habitantes de otros sectores de la ciudad, pues finalmente el edificio se convirtió en edificio de vivienda de renta. El equipamiento educativo, es el logro significativo de la comunidad en su relación con el Gobierno, en el proceso del Plan de Renovación, de una comunidad con dos

Conclusiones instituciones educativas esparcidas en el territorio,

111 de espacio deficitario a nível

cuantitativo y cualitativo, el área pasó a tener una mega estructura educativa, dotada con aulas para preescolar, primaria, secundaria y media, ludoteca con sala de lectura, rincón de construcciones, espacios para juegos y música , aulas abiertas, salas de audiovisuales y proyecciones, biblioteca, restaurante escolar, zonas recreativas y deportivas con canchas múltiples abiertas a la comunidad, el Colegio de San Lorenzo, es un componente socio-espacial nuevo que altera los referentes del espacio, y que tiene injerencia directa en la transformación social del hábitat, por ser un logro de la comunidad, que beneficia directamente a las familias que habitan en inquilinato.

Las decisiones sobre la gestión del territorio, están un poco lejos por factores económicos de ser un ejercicio democrático real, siendo aún un ejercicio de formalismo legal, la concertación de los intereses en juego en los procesos de renovación urbana, y de desarrollo urbano, parece un punto lejano en el espectro político territorial, y esto es en razón de que el poder no está descentralizado en el orden local (Faletto, 2009; 218219); en el caso del sector de San Lorenzo, que involucra Barrios históricos de la ciudad, como el deteriorado barrio de Colon-Niquitao o populares como Las Palmas, y San Diego, que han visto en la ejecución de la renovación el desplazamiento de vecinos, la erradicación de los inquilinatos más deteriorados. La participación de la comunidad en la elaboración del plan, y la aplicación de la Renovación fue marginal, aunque existe la necesidad sentida de la comunidad de tener infraestructura educativa, y de solucionar el problema del Cementerio de San Lorenzo, de darle atención a la problemática de vivienda en inquilinato, la Renovación aunque decisión colectivizada, no fue una decisión colectiva, ni mucho menos concertada.

Las ciudades en nuestro contexto se orientan por los designios de la globalización y de la competitividad, e incursionan entonces en la competencia de lugares. Desde el denominado paradigma tradicional del Gobierno, se pudo establecer en nuestro país, y en nuestras ciudades principales, de la época de la “cuadricefalia urbana”, un centralismo urbano perfectamente jerarquizado en las regiones vinculadas por proximidad geográfica y conurbación. Es así como la Ciudad de Medellín es la ciudad central y principal en el Valle de Aburrá diferenciándose de municipios como Bello, donde se instaló buena parte de la industria histórica desarrollada durante el periodo de industrialización y el fordismo en la región, sin embargo política, económica, social y culturalmente Medellín sigue

112

Transformación Social del Hábitat

siendo la ciudad principal, el centro del Valle;, el Área Metropolitana del valle de Aburrá, trabaja en el equilibrio del crecimiento urbano, económico y social del Valle metropolitano, tratando de articular y armonizar las políticas de gestión del territorio, sin embargo cada municipio dentro de su autonomía tiene sus propias agendas, caso al que el municipio de Bello no es ajeno, proponiendo su plan de desarrollo, en un estilo de competencia de lugares, que pone en riesgo la búsqueda del equilibrio, ambiental y urbano del valle, de allí que la centralidad norte, se reduzca a un nodo comercial de gran tamaño, sin lograr un verdadero equilibrio político y social.

Es decir, La Acción de Gobierno, en el marco de la política pública de gestión del territorio, transforma físicamente el hábitat. El objetivo de generar una centralidad es una transformación física evidente, que como nodo aglutinante y atrayente –transformación de los hábitos- se cumplió en el caso de la centralidad metropolitana del norte del Valle de Aburrá, pero que falló en el caso del Parque de San Lorenzo

La Resiliencia, la capacidad de la comunidad de resitirse y adaptarse a los cambios determinan el éxito de la transformación física en lo social. Los habitantes del sector de San Lorenzo, siguen practicando su centralidad tradicional en la plazuela de San Ignacio, y el centro histórico de la ciudad, pero han aprovechado el nodo ofertado por las torres de San Sebastián. Su centralidad espacio-vivenciado-concebido.

El Plan Parcial no cumplió con el objetivo global de 7mil viviendas, solo se construyeron más de 600 apartamentos con calidad espacial y de habitabilidad discutible, y en los cuales la comunidad del sector no se vio beneficiada , sino por el contrario vio lesionado su territorio, su paisaje, su ambiente, en el caso de las Torres de San Sebastián los habitantes de estas no se integran con los habitantes del sector. Los Inquilinatos. Los programas de vivienda social compartida, vivienda cajón, Edificio San Vicente, y Vivienda Compartida, se estancaron, no siguieron avanzando la cifra de inquilinatos en el sector se estima en 130, solo desaparecieron los ubicados en viviendas con alto grado de deterioro.

Equipamiento Social. La mayoría de los líderes y habitantes celebran la transformación del cementerio en parque, pues aceptan el sentido histórico y patrimonial de éste, asi

Conclusiones

113

mismo, se concebía su transformación como una necesidad, pues se veía el cementerio como un foco de delincuencia, y violencia, es decir un referente negativo para el sector. El Colegio, también es aceptado, incluso se habla por parte de la comunidad de que el Colegio es un logro, obtenido en la transacción con el Gobierno municipal, su único problema es la vecindad con sectores de microtráfico del sector.

El Gobierno municipal invisibilizó la protesta, y a los actores comunitarios, utilizando los medios de comunicación afirmó haber consultado a la comunidad y que esta estuvo de acuerdo con los objetivos del plan parcial.

Por ley los POT son socializados con la comunidad afectada, pero el criterio de la comunidad no es vinculante, lo que hace que las decisiones políticas en los planes parciales, sean decisiones políticas colectivizadas, mas no colectivas-colectivizadas.

El desarrollo de centralidades, el tratamiento de desarrollo urbano, y la renovación no parten, ni tienen obligatoriamente que partir de un taller participativo de diseño, tampoco pueden presumir de absoluta racionalidad técnica y burocrática del Gobierno y de su administración pública, de allí la divergencia entre los objetivos propuestos en el plan de ordenamiento territorial y el plan parcial, versus las necesidades percibidas por los habitantes del sector de San Lorenzo. La comunidad en la práctica del territorio, es la que le da significado a un proyecto de Gobierno, o a sus propias realizaciones, es la comunidad en el habitar la que construye su propia centralidad.Son los habitantes los que construyen sus propias centralidades.

A. Anexo: Plano Cartogrรกfico Barrio Guayaquil.

B. Anexo: Plano Cartogrรกfico Comuna 10, La Candelaria

C. Anexo: Plano Cartogrรกfico, Plan Parcial Parque San Lorenzo.

D. Anexo: Plano Cartogr谩fico Plan Parcial Parque de San Lorenzo, Poligono de Renovaci贸n.

E. Anexo: Plano Cartogr谩fico Barrio Col贸n.

F. Anexo: Plano Cartogrรกfico Barrio las Palmas.

G. Anexo: Plano Cartogrรกfico Barrio San Diego

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