HOMBRES DE TRONO

Los días comienzan a alargarse, las tardes iluminan la ciudad con cálidos colores y los naranjos se visten azahar. Todos los años la ciudad viene a recordarnos que se avecinan fechas que nos erizan la piel.

Por fin, tras un largo paréntesis, volveremos a sentir sobre nuestros hombros, Dios mediante, el peso de la Redención y del Llanto de su Bendita Madre. En estos dos años nuestras vidas han cambiado, hemos perdido a familiares, amigos…

Este año, más que nunca, estamos llamados para dar gracias a Dios y su bendita Madre por seguir aquí, por nuestros trabajos, … y por poder reunirnos a sus pies por fin. Pero también para pedirles por nuestros familiares, amigos, … por los que siguen a nuestro lado y por los que ya están disfrutando de la gloria de Dios. Imposible finalizar estas breves palabras sin recordar a nuestro amigo y Capataz, Enrique Roldán, Quique. Verdadero artífice de una forma de caminar del Señor de la Redención. Referente de cualquier hermano por su entrega a su Hermandad. No dudéis que él estará disfrutando desde el balcón del cielo y caminando con nosotros este Viernes Santo.

Me despido de vosotros con la ilusión de reencontrarnos y saber que este Viernes Santo volveremos a ser los pies del Señor de la Redención y su Bendita Madre.

¡¡Ahí queó!!

Ángel Rafael Herruzo López Vocalía Hombres de Trono