Número de febrero de 2021 de "Oceanum"

Page 83

Miguel Quintana

h, Mamá..., voy ahora a mojar la pluma en el tintero de mi corazón. Y la tinta, Mamá, es roja, bien lo sabes, pero está también aguada de mis lágrimas, y mi mano tiembla, y no sé si podré escribir. Si pudiera escribir de ti, escribiría. Pero ¿qué es? ¿Qué me pasa? ¿Rabia? ¿Angustia? No sé, no sé si podré. Sí…, me desnudabas, me acostabas, me levantabas, me vestías, me alimentabas de ti. ¿Qué me decías? ¿Qué me dices ahora? Oigo tu voz, oigo el timbre de tu voz, oigo miles de matices en tus palabras. Tus palabras son mis palabras. Tu mundo es el mundo que tú me diste. No hay otro. Un mundo lleno de matices. ¿Lloraba yo? ¿Reía? ¿Dejaba de llorar si tú me consolabas? ¿Me reía si tú jugabas conmigo? ¿Balbucí? ¿Balbucía con frecuencia? Seguramente lo hice. Y al mismo tiempo debí de oírte hablar con los oídos que tú me diste y debí de intentar repetir inconscientemente tus palabras difíciles de pronunciar por un niñito que aún no tenía desarrollados ni la lengua, ni las cuerdas vocales, ni los pulmones, ni los labios, ni la mente que tú me diste. Pero, a mi modo, debí de repetir con torpeza lo que torpemente de ti oía, entre besos y caricias que no recuerdo ahora, pero que debieron de ir a la piel que tú me diste. Y poco a poco acaso balbucí mejor y mejor sin yo aún saberlo, porque lo que tú me diste, fue desarrollándose y te oía mejor con 83


Turn static files into dynamic content formats.

Create a flipbook
Issuu converts static files into: digital portfolios, online yearbooks, online catalogs, digital photo albums and more. Sign up and create your flipbook.