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El coronel de Policía Iván Rojas amenazaba y sembraba miedo
En su contra tiene tres órdenes de aprehensión por legitimación de ganancias ilícitas, la desaparición de la libreta militar de Morales y manipulación de investigaciones. Huyó a Chile. C onsiderado como el lugarteniente del exministro de Gobierno Arturo Murillo, el coronel de la Policía Iván Rojas, exdirector nacional de la fuerza anticrimen, era el encargado de ejecutar las órdenes de persecución y amedrentamiento del exministro de Gobierno Arturo Murillo.
Durante el gobierno de facto de Jeanine Añez se había convertido en el brazo derecho de Murillo, así coordinó y ejecutó diversos operativos, principalmente para encarcelar a dirigentes del Movimiento Al Socialismo (MAS), exautoridades e incluso a allegados a Evo Morales.
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Los delitos de legitimación de ganancias ilícitas, manipulación de casos investigativos y el robo de la libreta militar del expresidente lo pusieron en el ojo de la tormenta.
Incluso advirtió a algunos fiscales que debían encarcelar a los sindicados o de lo contrario podrían tener problemas con el Ejecutivo.
A varias exautoridades les dijo que les estaba siguiendo los pasos y que anden con cuidado. ABI Rojas fue director nacional de la fuerza anticrimen.
No declaró porque dijo que tenía Covid
Está acusado de robar la
En enero de 2019, efectivos policiales detuvieron a la exjefa de gabinete de Evo Morales, Patricia Hermosa, y le sustrajeron varios documentos, entre ellos la libreta militar del expresidente. En noviembre, un video mostró que Rojas le dijo al ex viceministro Javier Issa que su situación era complicada por el paradero de ese documento, a lo que Issa respondió que había sido quemado por órdenes de Arturo Murillo. La Unidad de Investigaciones Financieras (UIF) presentó una denuncia contra Rojas y su esposa por lavado de dinero y legitimación de ganancias ilícitas. Ambos hicieron movimientos sospechosos de más de Bs 6 millones en sus cuentas de banco. Ninguno de los dos pudo demostrar que sus ingresos mensuales o que las ganancias de sus empresas generaron ese monto. En noviembre, el uniformado debía declarar en el Ministerio Público, sin embargo sus abogados pidieron una reprogramación asegurando que se había contagiado con Covid. Se trató de ir a constatar, pero sus defensores no quisieron decir si estaba hospitalizado o en su casa.
Un capitán de la Policía lo acusó de cometer dos delitos
A finales de septiembre, un capitán de la Policía acusó formalmente a Rojas de manipulación de procesos investigativos y corrupción, pues se habría enriquecido de manera ilícita, con la ayuda de Murillo, con al menos Bs 6 millones.
Junto con su esposa fue declarado rebelde
Ante la inasistencia de Rojas y su esposa, Carla Rocío Campuzano, a una audiencia de medidas cautelares por el caso de legitimación de ganancias ilícitas, la justicia declaró la rebeldía de ambos, congeló sus cuentas bancarias y anotó de manera preventiva sus bienes.
Renunció a su aspiración de ascender a general
Renunció a postular al ascenso a general de la Policía por su seguridad y sobre todo la de su familia. Aseguró que todo lo que pasaba, las investigaciones y una supuesta investigación, no justificaba su
libreta militar de Evo Morales La UIF desveló legitimación de ganancias ilícitas
manipulación de varios casos
aspiración personal.
Es investigado por
El uniformado también es investigado porque presuntamente manipuló investigaciones de varias demandas penales, entre ellas el caso del Tribunal Supremo Electoral (TSE), por el supuesto fraude electoral, los casos Neurona, Banco Central de Bolivia, notarías, la compra de PAT, la Unidad Ejecutora de Lucha Integral Contra el Narcotráfico (UELICN) y la minera San Cristóbal, entre otros.