El Mirador Disfruta Especial Bares y Cafés
Café Tortoni Emblema de Buenos Aires
La Dama de Bollini La historia detrás del bar
Confitería Las Violetas Las delicias del Vitraux
Café de los Angelitos Donde se vive el encanto del tango
Café Tortoni A pesar de la lluvia yo he salido a tomar un café. Estoy sentado bajo el toldo tirante y empapado de este viejo Tortoni conocido.
El Café Tortoni: un emblema dentro de la Ciudad de Buenos Aires. Por Belén Vera
Sus inicios se remontan al año 1858, cuando un inmigrante francés de apellido Touan decidió inaugurarlo con el nombre que fue tomado de otro establecimiento ubicado en el Boulevard des Italiens, en París, donde solían reunirse la elite cultural parisina del siglo XIX. El local fue punto de encuentro de la Agrupación de Gente de Artes y Letras, grupo de pintores, escritores, periodistas y músicos, liderado por el pintor Benito Quinquela Martín. Este grupo,
en mayo de 1926, forma La Peña, encuentro literario que fomentaba la protección de las artes y las letras, que funcionaba en la bodega del Café, hasta su disolución en 1943. La Peña fue una idea que Quinquela Martín adquirió en un viaje por Francia y decidió poner en práctica en su país, donde amigos y colegas que disfrutaban de la buena conversación no disponían de un espacio adecuado para reunirse. Esta peña había nacido en el café La Cosechera (calle Perú y Avenida de Mayo) y se trasladó luego a las mesas del Tortoni. Durante casi un siglo el Café Tortoni porteño-argentino es el más representativo del espíritu tradicional de la dicha avenida de Mayo, y es ya una leyenda de la ciudad de Buenos Aires. En la ac-
tualidad, sigue siendo un ligar de difusión cultural y turístico por excelencia. Al visitar al Tortoni pareciera como si el tiempo se hubiera detenido entre sus mesas de madera terciada, sus sillones de pana, la mesa de billar y los juegos de cartas. Este bar pertenece al selecto grupo de bares notables de la Ciudad de Buenos Aires, grupo que reúne a los bares y cafés más representativos de la ciudad y está oficialmente apoyado por programas del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires. El mítico café se encuentra ubicado en Avenida de Mayo 825, y abre sus puertas todos los días en el horario de 7.30 a 24.00.■
Café de los Angelitos Por Belén Bonomi.
Originalmente llamado Bar Rivadavia, este emblemático lugar situado en Av. Rivadavia 2100 (esq. Rincón), en el barrio de Balvanera, fue inaugurado en 1890. Por aquél entonces era un lugar concurrido por sectores populares de la sociedad mientras que hoy en día, al formar parte de uno de los bares más históricos de Buenos Aires, es muy común ver turistas dentro.
Para todo aquél que quiera conocer el tango argentino, Café de los Angelitos es una excelente opción. Todos los días tocan distintos grupos de tango acompañados por bailarines lo cuál hace que una simple salida por Buenos Aires se convierta en una velada única.
El ambiente esta decorado con muebles y objetos antiguos pero en excelente estado. Predomina la madera y los vitrauxy en las paredes se pueden observar muchísimas fotos antiguas del café en distintas épocas. El escenario tiene unas terminaciones dignas de admirar para que estén dentro de un bar.
Con respecto al servicio, los mozos, además de estar muy elegantes (acorde al lugar), atienden de maravilla. Son muy atentos, respetuosos y ágiles a la hora de tomas los pedidos. La carta ofrece un menú standard, un menú ejecutivo y uno VIP. En todos se puede pedir carne, pescado o pastas acompañados por vinos o gaseosas. Se recomienda ir al Ca-
Café de los Angelitos fé de los Angelitos para hacer un recorrido por la historia del tango a través de las distintas fotografías y, por supuesto, un show de tango.■
La historia detrás de este bar Por Belén Bonomi.
La Dama de Bollini
Acogedor y cultural son las palabras que elegiría para describir a La Dama de Bollini. Este histórico bar, situado en Pasaje Bollini 2281, abrió sus puertas en 1983. Se hizo conocido porque, además de la movida cultural que generó y fomentó cediendo el lugar para exposiciones de arte, poesía y música, fue un punto de encuentro de varios artistas y escritores. Entre ellos, Jorge Luis Borges.
Por dentro, el lugar está decorado con cuadros en todas las paredes, cada uno próximo al otro. Las pinturas tienen distintos estilos. Las mesas son muy sencillas, no llaman la atención. En el centro del bar, contra una pared, hay un pequeño escenario donde suelen tocar distintas bandas o solistas. Se puede apreciar un patio interno que tiene un aljibe en un costado, dando protagonismo al estilo colonial.
La Dama de Bollini está pensado para toda persona que aprecie el arte en todas sus formas. Durante la semana se organizan bastantes eventos. Los lunes, por ejemplo, se lleva a cabo el conocido “Folk youMonday” en el que tocan grupos musicales y todo aquel que quiera ir a verlos esta bienvenido.■
La esquina de los vitrales Por Belén Vera Las Violetas, Inaugirada el 21 de septiembre de 1884, es una de las confiterías más antiguas de Buenos Aires. Se encuentra ubicada en el barrio de Almagro, en Avenida Rivadavia esquina Medrano. Su historia incluyó el cierre y posterior rescate por un grupo de empresarios gastronómicos cuyo objetivo principal fue mantener el estilo original, desde el piso de mosaico granítico -que tuvo que ser fabricado especialmente - hasta las tulipas de las arañas talladas a mano, y la restauración de la boisserie y los famosos vitrales, deteriorados por los años y el abandono. En una Buenos Aires con calles y avenidas de adoquines, transitadas por carros y tranvías a caballo, dos inmigrantes inauguraron la confitería bajo el nombre Las Violetas. A la vuelta, estaba la estación del ferrocarril que le dio el nombre al barrio –en el actual pasaje Peluffo– por donde pasaba La Porteña, que unía el centro de la ciudad con la estación Floresta. Y por Rivadavia pasaba el tranvía a caballos, que terminaba su recorrido en San José de Flores. A Las Violetas concurría la gente de nivel social distinguido. El lugar se destacaba por los vitrales que la hicieron célebre, además de su exquisita pastelería. También fue el punto obligado de reunión para las señoras mayores de 40, amantes del ritual del té con masitas, o lugar de encuentro de promociones de egresadas de escuelas de señoritas. En la actualidad, Las Violetas se mantiene como símbolo y referencia histórica de Almagro y suele llenarse de turistas y curiosos que quieren conocer uno de los lugares emblemáticos de Buenos Aires.
Café Las Violetas