espacio singular WAPA’M COSALON

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WAPA’M COSALON

by Marta Cid Una experiencia sensorial que mira al futuro

por miguel lagoma Marta Cid ha creado un espacio que transmite sus valores desde el momento en que entras: olor, ambientación, impacto visual… Y sigue por el tacto del cuidado del cabello e incluso el gusto. El proyecto es rompedor y lleva la peluquería al siglo XXI

Wapa’m COsalon es un salón sensorial. Marta Cid explica que ella trabaja los cinco sentidos para transportarnos a un espacio de paz en plena Barcelona. El olor inspirado por los chakras relaja y conecta con la parte más espiritual; una infusión reconfortante activa el gusto; la música rompe con el ruido de la rutina; el cabello estimula el tacto y la vista.

Los ojos no solo disfrutan con el trabajo de Marta Cid. El salón está cuidado al detalle a nivel estético. “¡La decoración la he hecho yo!”, exclama con orgullo. “Cada dos o tres años intento hacer

espacio singular

algún cambio y fluye con las diferentes estaciones. Hasta hace poco era de otoño, con elementos vegetales que yo misma cojo del campo. Es algo que me enseñó una persona que tiene sus escaparates y es una parte que, aunque me ocupa tiempo, me ayuda a desarrollar la idea del salón”, desarrolla Marta.

Los detalles naturales no solo encajan a la perfección en la filosofía sostenible de Wapa’m COsalon, sino que dialogan con un mobiliario con acabados en madera que se ha renovado hace poco, lo que permite que luzcan con toda su esencia. La luz también resulta muy acogedora y se favorece el trabajo en silencio. “Me gusta la calidez, hacer sentir al cliente que está en su casa y que salga de él levantarse a buscar algo que le apetece. También tenemos, por ejemplo, mantitas en invierno. Quiero que la gente encuentre un pequeño oasis cuando entre en el salón”, explica Marta Cid.

Un nuevo concepto basado en la colaboración y los valores compartidos

Wapa’m COsalon by Marta Cid supone una nueva etapa para este espacio. Nos explica que no tenía ganas de seguir haciendo lo mismo y se planteó desde comenzar en un salón más reducido hasta trabajar como peluquera independiente en diferentes espacios.

De estas reflexiones surgió un chispazo: “¿por qué en lugar de buscar yo un espacio no ofrezco yo el mío? Es grande, bonito, con una carrera y una filosofía detrás”. Y remata Marta Cid: “Busqué una empresa de acompañamiento legal que me ayudara. La cabeza me hizo un clic y ahora me siento motivada como hacía tiempo que no estaba”.

Wapa’m COsalon podría definirse como un coworking especializado en peluquería. Pero va un paso más allá, ya que resulta muy importante para Marta que cada colaborador comparta sus valores. “Si cuando vienes, resuenas con el espacio, te quedarás, si no, no. Tengo un salón sostenible y tú tienes que trabajar siguiendo este objetivo; la música igual, a mí me hace ser más creativa… Con la persona que entra y se siente a gusto ya no hace falta hablar mucho más”, asegura.

La idea de colaborar y crecer juntos es uno de los motores de Wapa’m. “La unión hace la fuerza. Si tú eres muy bueno en corte, yo en color, otro en recogidos y otro en extensiones, sin darnos cuenta, todos mejoraremos en esas áreas”. Y esto no queda en el trabajo diario de salón, Marta también cree que puede funcionar para crear colecciones. “Tenemos el espacio, la marca, las ideas… Para mí sería una gozada. A lo mejor es una idea muy romántica, pero, ¿por qué no?”.

Wapa’m COsalon es un espacio sensorial, acogedor, de bienestar; un oasis donde desconectar. También un salón donde colaborar, aprender y cocrear. Su concepto revaloriza la peluquería: lleva al sector al siglo XXI. 