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sas de deforestación y la tasa bruta de deforestación se incrementa 15.7 por ciento y 144.8 por ciento en el caso de la deforestación neta.

Además, llama la atención en que 75.9 por ciento de la deforestación bruta podría considerarse como ilegal.

CAMPECHE vegetación se deberá a la transición de tierras forestales a agrícolas.

Destaca el caso de Campeche. Las proyecciones indican que se convertirán en sitios críticos la zona de Calakmul, concretamente en el paraje Conhuas-Xpujil, así como la zona de Hecelchakán, en las inmediaciones de la capital del estado. También se prevén puntos críticos entre Champotón y Seybaplaya.

Se estima que entre 1986 y 2050 la tasa de deforestación bruta se incrementará 15.7 por ciento y 144.8 por ciento, la tasa de deforestación neta. Además de que 75.9 por ciento de la deforestación bruta podría darse de manera ilegal.

TABASCO

Maya (4,897.5 más por año).

Los análisis refieren que la tasa de deforestación neta entre 1986 y 2018 fue de 4,070.8 hectáreas por año, sin tren. Para el periodo 20182030, se estima sería de 9,786.1 sin tren y de 12,189.2 hectáreas al año

De hecho, esa entidad será uno de los estados con mayor deforestación derivado del proyecto. La tasa de deforestación bruta se incrementará 64.3 por ciento y 319 por ciento la deforestación neta. 93.6 por ciento de la pérdida de vegetales se deberá a transformación de tierras forestales a agrícolas y se estima que 72.6 por ciento de la deforestación bruta será ilegal.

CHIAPAS

En Chiapas los puntos con alto

En el caso de Tabasco, si bien durante los últimos años la deforestación ha estado dispersa, las proyecciones de 1986 a 2050 muestran una zona de deforestación muy relevante en la zona de Tenosique-El Triunfo. La tasa de deforestación bruta se espera se incremente 27.3 por ciento y la deforestación neta 97.3 por ciento. En este caso 95.9 por ciento de deforestación se explicará por la transición de tierras forestales a agrícolas y se prevé que 99.7 por ciento de la deforestación bruta será ilegal.

Quintana Roo

En el caso de Quintana Roo, hay dos puntos críticos que son Caobas-Laguna de bacalar y Tulum-Cancún.

En este caso la tasa de defores- cará por una transición de tierras forestales a agrícolas y 28.2 por ciento a asentamientos humanos. En este caso, 72.6 por ciento de la deforestación bruta será ilegal.

Yucat N

En el caso de Yucatán se prevé que registre una reducción en la tasa de deforestación; sin embargo, se concentrará principalmente en Mérida y sus inmediaciones, hacia Umán y en la zona de Izamal.

Las proyecciones 1986-2050 estiman que la tasa de deforestación bruta se reducirá 66.9 por ciento. Ahí, 84.9 por ciento de la deforestación se deberá a la transición de tierras forestales asentamientos humanos y solo 5.9 por ciento a transformación en tierras que sumarle la ocasionada por otras causas.

Explica que uno de los problemas es la fragmentación de los ecosistemas que habrá, lo cual tendrá un impacto en los denominados servicios ambientales que proporciona la selva, como recarga de agua en mantos freáticos, captura de carbono, generación de aire, entre otros.

Lo que pasará es que al intervenir la selva iniciará un proceso de degradación de los ecosistemas, lo cual puede derivar deforestación, advierte.

Ante ese panorama, investigadores y activistas enfatizan que la pregunta que se debe hacer es ¿qué tipo de desarrollo es el que queremos para el sureste mexicano?, sobre todo cuando, con el argumento de llevar desarrollo al sur del país, hoy se implementa un proyecto prioritario del Gobierno federal que implica que a enormes franjas de la selva se las lleve el

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