TEMA 0: HAGAMOS HISTORIA. Introducción al estudio histórico. Objetivos: 1. 2. 3. 4.
Exponer el concepto de Historia como disciplina. Realizar un eje cronológico con las principales etapas y los hechos que las enmarca. Diferencias las distintas fuentes para el estudio del pasado. Conocer los aspectos básicos del método de las Ciencias Sociales para el estudio de la Historia. 5. Confeccionar un comentario crítico de fuentes históricas.
1. El concepto de Historia De manera resumida podemos exponer la Historia como la discicplia que estudio el pasado del ser Humano a partir de diversos elementos que le proporcionan información (fuentes), aplicando en su análisis una serie de pasos que permiten que sus conclusiones sean contrastadas por otros historiadores. Dadas las características de este objeto de estudio, en ocasiones se puedel alcanzar conclusiones que son erroneas debido a las ideas de partida o los condicionantes de la época. Pues si bien se trata de exponer los hechos de manera objetiva, cualquier actividad humana tiene una carga subjetiva inherente a la acción humana. Con ello podemos decir que, dependerá del punto de vista de cada espacialista, y la suma de estos puntos de vista acercará a la mayor objetividad.
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2. Las etapas de la Historia. Debido a la gran cantidad de hechos que se han ido anotando e investigando a lo largo de la existencia del ser humano, estos se han ido agrupando y relacionando, formando categorías o espacio de conocimiento de las diversas periodizaciones. Esta organización ha sido consensuada, es decir acordada, entro los distintos especialistas en cada época, en especial entre los siglos s. XVIII y XIX. Si bien como un acuerdo general que es, puede ser modificado si la comunidad científica así lo estima1. Para organizar los diferentes periodos históricos tenemos según su duración: Duración Bienio Trienio Lustro/quinquenio Década Quindenio Siglo Milenio Cron Eón
Denominación 2 años 3 años 5 años 10 años 15 años 100 años 1000 años 1 millón de años 1 mil millones de años
Eje cronológico. Con estas ideas previas, los historiadores (generalmente occidentales) propusieron la siguiente organización:
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Como puedes observar la duración relativa cada vez es menor y además toma como eje un punto, el nacimiento de Jesús de Nazaret. Esto es un hecho controbertido en la historiografía y es por ello que existen diversos calendarios2, así como varias propuestas respecto a la denominación3 de las épocas o periódos.
Además, probablemente te habrás fijado que… no existe el año, siglo o milenio 0.
3. Distintas fuentes para el estudio del pasado. Las fuentes históricas constituyen la materia prima de la Historia. Comprenden todos los documentos, testimonios u objetos que nos trasmiten una información significativa referente a los hechos que han tenido lugar, especialmente en el pasado. Dentro de ellas, y considerando el valor que también tienen las demás, las Fuentes escritas son el apoyo básico para construir la Historia. El historiador trabaja las fuentes históricas (“las interroga y contrasta”) para obtener de ellas la mayor información posible. Asimismo, debe atender a su variedad, realizando una adecuada selección de las mismas. En sentido general, las Fuentes históricas son de dos tipos: primarias y secundarias. Fuentes primarias: Son las que se han elaborado prácticamente al mismo tiempo que los acontecimientos que queremos conocer. Llegan a nosotros sin ser transformadas por ninguna persona; es decir, tal y como fueron hechas en su momento, sin ser sometidas a ninguna modificación posterior. Fuentes secundarias: Se denominan también historiográficas. Son las que se elaboran a partir de las Fuentes primarias: libros, artículos...
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4. Aspectos básicos del método para el estudio de la Historia. A la hora de afrontar la investigación de un hecho o etapa del pasado, los investigadores se arman de un marco metodológico que permite a otros investigadores contrastar sus conclusiones. De manera resumida se pueden dividir en varias fases: 1) Delimitación del tiem de investigación. a) Precisar la cuestión de partida b) Marcar los límites cronológicos, espaciales y temáticos. c) Plantear obejtivos y técnicas a usar. 2) Antecedentes y estado de la cuestión a) Recabar y consultar bibliografía ya escrita sobre el tema b) Tratamiento del tema hasta la fecha: problemas abordados, interpretaciones realizadas… 3) Construcción de un modelo explicativo. a) HIPÓTESIS de trabajo (interpretación provisional) b) Definición de conceptos principales y marco teórico. c) Delimitación de variables e indicadores. 4) Selección de fuentes de información. a) Identificación de fuentes impreasas y documentales. b) Localización de otras fuentes (iconográficas, testimoniales, etc…) c) Delimitación de la muestra de fuentes. 5) Análisis de las fuentes. a) Datación, localización, autoría, procedencia, integridad, credibilidad… b) Análisis del contenido, análisis de las propiedades físicas del documento 6) Enunciar y formular conclusiones. a) Organizar los datos y las ideas alcanzadas b) Realizar una propuesta final que relacione las posibles divergencias con la hipótesis de partida. 7) Comunicar y contrastar los resultados.
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5. Comentario crítico de fuentes históricas: el comentario de texto. Como herramienta básica, durante mucho tiempo, los historiadores emplearon el análisis de las fuentes escritas como sistema para obtener la mayor parte de la materia prima con la que confeccionar sus conclusiones. Se han dado muchos modelos de análsis, que profundizan en diversos aspectos. Pero a nivel general vemos los siguientes pasos:
Respecto a los tipos de textos, desde el punto de vista de la Historia anotamos aquí las más habituales: -
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Jurídico-políticos: Cuando se trata de textos de carácter legal o de él emanan normas o preceptos legales (constitucipones, tratados, acuerdos internacionales) Histórico -literario: cuando poseen un notable carácter subjetivo, siendo la observación de una persona (memorias, autobiografías, cartas, notas personales, ensayos, novelas, artículos de opinión). Narrativos: Cuando el texto se extrae a partir de un hecho concreto desde el que el autor construye su argumento. (discursos, proclamas, pronunciamientos) Textos historiográficos: Son obras de un historiador que analiza los hechos con posterioridad con una finalidad investigadora y científica.
Por último, conviene evitar caer en una serie de errores comunes como pueden ser: -
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Digresión o disertación: Implica utilizar el texto como simple pretexto para exponer nuestros conocimientos sobre algún tema, divagando o desviándose del asunto central. Paráfrasis: Es la exposición repetitiva de lo que dice el texto, sin aportar medios para su interpretación. Desorden: Suele reflejarse de varias maneras: centrándose sólo en la introducción, repitiendo ideas, explicando fuera de contexto o prescindiendo de un hilo conductor que relacione las ideas con el documento. Personalismo: No debemos expresar opiniones o nuestro punto de vista personal. No se deben pues, realizar consideraciones sobre lo bueno o detestable, bello o desagradable del asunto al que alude. pág. 5