La pérdida de patrimonio arqueológico es una consecuencia de la falta de cultura, pues quien conoce el pasado de cualquier civilización, desarrolla conciencia para valorar cada rasgo que la define.
Actualmente es incalculable todo lo que se ha perdido a causa de personas sin escrúpulos que comercializan las piezas arqueológicas cuyo valor histórico es inestimable. En el presente número analizamos lo que hay detrás del robo de piezas arqueológicas.