Nosotros y los Ángeles/ junio 2013

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Ilustraci贸n: Sandra Ch谩zaro


Dirección Responsable Alejandra Usabiaga Dirección de Arte Mónica Rosales Coordinadora Editorial Vanessa Aguilera Redes Sociales Ma. Fernanda Usabiaga Cyndy Ergen Ilustración Sandra Cházaro Fotografía Beatriz Dominguez Pilar Cortina Rafael Cervantes Colaboración Andrea de la Mora Ary Margón Dulce Uribe Lorena Carreño Rosario Herrera Lasso Alejandra Quiroga Claudia Sciarretta Alejandro Torres Erika Valledor Joselyn Becerra Laura Rangel Leticia Verónica Neri Guzmán NOSOTROS Y LOS ÁNGELES. Año 3 No. 8 Editor y Distribuidor Responsable: María Alejandra Usabiaga del Moral, Domicilo: Joaquin Clausel #18. Poetas, Naucalpan, Estado de México, C.P. 53100. Revista Digital Mensual. Correo electrónico: nosotrosylosangeles@gmail.com Reserva de Derecho al Uso Exclusivo No. 04-2010-090914214400-102. Licitud de Título y Contenido #15287 ante la Comisión Calificadora de Publicaciones y Revistas ilustradas de la Secretaría de Gobernación. Queda estrictamente prohibida la reproducción total o parcial de los contenidos e imágenes de la publicación sin previa autorización de los Editores e Ilustradores de la Revista Nosotros y los Ángeles. Esta revista solo expresa la opinión de los autores de los artículos. Nosotros y los Ángeles no es responsable ni asume las opiniones expuestas en los artículos.

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3 Editorial 4 Confiar 6 Comunicación efectiva con tus hijos 9 El Karma 11 El lugar en la mesa 14 El secreto de tu éxito económico

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se basa en la espiritualidad. ¿Cuál es mi misión en la vida? Arcángel Sandalfón La llama Violeta del Arcángel Zadquiel Me llamo Luz y tengo dones Médicos Tibetanos El Coctél Historias Verdaderas Mi testimonio Un alma caída en casa Alguien me cuida Gracias por cuidar a mi hijo Un ángel en el hospital Arte con Alitas

“Piensa mal y acertarás”, “No confíes ni en tu sombra”, “no le creas ni el Padre Nuestro”, son algunas de las miles de frases que inculcamos a nuestros hijos buscando que se sepan cuidar y se protejan en nuestro mundo. ¿En qué momento fue que perdimos la confianza? ¿en qué momento fue que olvidamos que nuestra palabra tienen peso y responsabilidad? ? ¿en qué momento empezamos a enseñar a nuestros hijos que no pueden confiar en nadie? Pareciera que la pérdida de la Fe y Esperanza en los demás, en la sociedad y en la humanidad, nos lleva necesariamente a perder la Fe en nosotros mismos. Poco a poco no sólo hemos dejado de confiar en nuestra capacidad, sino que también hemos dejado de creer en las capacidades del otro. Vivimos dudando de los otros y al mismo tiempo esperamos que ellos solos nos arreglen todos nuestros problemas. Un ejemplo claro de esto es cuando descalificamos al nuevo gobierno, afirmando de antemano que “todos son iguales”, “son una bola de rateros que no van a hacer nada”, pero al mismo tiempo dejamos toda la responsabilidad

en manos del que gobierna “porque es su obligación y para eso le pagamos”; olvidándonos que somos responsable de cada una de nuestras acciones y de todo lo que sucede en nuestro entorno. La pregunta es, si vivimos desde la desconfianza ¿con qué clase de Fe y Confianza nos acercamos al Padre y a los Seres de Luz cuando los necesitamos?. Mi respuesta es: Desde una Fe y Confianza limitadas por la Desconfianza, entonces lo que nos permitimos recibir es limitado también.

confiar en nosotros mismos, en nuestra intuición, en nuestra fuerza, en nuestro amor... identificar nuestra esencia como la misma de los seres de Luz...

Empecemos a darnos la oportunidad de confiar en nosotros mismos, en nuestra intuición, en nuestra fuerza, en nuestro amor y probablemente al identificar nuestra esencia como la misma de los seres de Luz, podremos confiar abierta y plenamente en ellos, sabiendo que lo que pidamos nos será concedido desde al Amor y la Protección y el cuidado que nos tienen que en la mayoría de los casos (como el mío) es mucho más de lo que me cuido, protejo y me doy a mi misma. Alejandra

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Con-fiar implica un trabajo en equipo, ya que es algo o alguien más de quién te tienes que fiar. Etimológicamente la palabra confiar viene del latín confidentia, a través del francés antiguo fiance del que también se evoca la palabra fe. Al confiar estás depositando tu fe en un confidente, alguien que comprende, que te hace sentir seguridad y tranquilidad.

Fotografía: Beatriz Domínguez

Por Andrea de la Mora Egea

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¿En qué, quién confiar? En ese Ser con quien te conectas. Puede ser tu divinidad, el Universo, Dios, tu esencia o yo superior... Confías en que esa energía dirige con exactitud el plan maestro que va ligando cada evento en tu vida, dándote la oportunidad de elevar tu conciencia. Confías en que la energía divina sabe más, y en su infinito amor y abundancia siempre te lleva de la mano, paso a paso; para que esas lecciones, esas situaciones y personas lleguen a ti en el momento en que estás preparado para recibirlas. Tu energía tiene una vibración la cual se modifica a través de lo que piensas, sientes, ingieres físicamente y de lo que haces. La ley de resonancia magnética muestra cómo entre dos sistemas (por ejemplo, una persona y una casa que desea) la resonancia -y por lo tanto, la atracción- se da cuando sus frecuencias vibratorias sean similares o idénticas. Es por esto que si la persona comienza a pensarse en la casa, hace visualizaciones sobre ella y decreta que es dueña de la casa, al poco tiempo obtiene como resultado los medios para comprar la casa. La resonancia entre ellas es similar y esa frecuencia permite que se atraigan. De la misma forma, cuando estás vibrando en miedo accedes a esa energía y lo que atraes son experiencias angustiosas. ¿Te das cuenta de lo importante que es observar tus emociones y pensamientos? De esta manera cuidas que lo que estés vibrando sea lo que deseas.

Tips para abrirte a confiar

1. Si te sorprendes sintiendo angustia por algo futuro, regresa al aquí y el ahora observando las sensaciones que experimentas en este momento. 2. Ejercita el expandir la conciencia de tu Ser concentrándote en tu respiración. El ego busca pensamientos que lo mantengan ocupado, céntrate en tu respiración y ábrele la puerta al Ser que sabe que no hay de qué preocuparse. 3. Permite que el Universo te sorprenda. Él tiene muchas formas de manifestar el amor que te tiene y a veces es de la manera en que menos lo esperas. Sat Nam

Andrea de la Mora

Namasté

Por eso, mi invitación en esta edición es que confíes. Confiar te da la oportunidad de acceder a una vibración de sabiduría. De dejar a un lado el control egótico y saber que hay un Ser que sabe más, que te guía y que te ama incondicionalmente y quiere absolutamente lo mejor para ti. Cuando haces conciencia de esta verdad, permites que la energía de amor, gratitud, prosperidad, bienestar y alegría llegue a ti sin obstáculos. ¿No es maravilloso? 5


Desde que tu hijo se está formando en tu vientre puede iniciar una comunicación efectiva, antes se desconocían muchas cosas acerca de la vida del Bebé intrauterino, hoy sabemos que el aparato auditivo se termina de desarrollar aproximadamente al tercer mes. Recién a partir de ese momento comienza a captar, en primer término los sonidos dentro del vientre (aproximadamente la semana 14/15 de gestación) y luego, a partir del cuarto mes, podríamos decir que listo para escuchar los sonidos del exterior que ya se filtran hasta su espacio. Por lo tanto tu Bebé puede comenzar a oír en cualquier momento entre el cuarto y el quinto mes, y para esa etapa ya puede ser estimulado o irritado por los diferentes sonidos. La voz de Mamá y Papá son los primeros sonidos del exterior que el Bebé aprende a identificar, si en esa etapa dedicas unos minutos exclusivamente a comunicarte con ese pequeño que habita en tu interior, estarás fomentado una comunicación efectiva con tu bebé no nacido, a veces este acto se da de forma natural, para hacerlo conscientemente debes darte el tiempo y sobre todo respetar ese hermoso momento, es decir, apagar móviles, TV, etc. Dedicarte verdaderamente a esta tierna sesión, si al principio te cuesta trabajo, con ‘pensarle’ será suficiente, la palabra y el pensamiento tienen vibración por lo tanto el mensaje será efectivo, además a los pocos días te darás cuenta que ya le estás hablando.

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Fotografía: Mónica Rosales

Por Ary Margón

Es importante dirigirte a él como si hablaras con alguien que está junto a ti realmente, ¡porque así es!, habla de cómo estas, como te sientes, pero siempre en positivo, encuentra una hora del día especial para que nadie les moleste en su ‘charla’, si es posible pon una música de fondo procurando que siempre sea la misma para crear una atmósfera de complicidad. Con el transcurrir de los meses este diálogo irá creando un lazo indestructible de comunicación, puedes entonces prepararlo y prepararte para el gran día, hacia el tercer trimestre ya puedes irlo despertando, así es, leíste bien, avísale que ya amaneció, usa tu ingenio, con palmaditas suaves: “Buenos días dormilón”, “Hola, hola, ya amaneció..” etc. De igual manera por la noche, ‘avísale’ que ya es hora de descansar, puedes practicar tus primeras canciones de cuna, la finalidad es ir creando rutinas, esto te permitirá establecer muy claro los horarios de vigilia y de descanso, coloca

tu vientre descubierto al Sol por unos minutos, esta sensación le encantará, comenta con tu Bebé que ya se acerca el gran día, que al fin conocerás su mirada, al fin podrás abrazarlo, etc. Después de nacido continúa el diálogo, coloca la misma música, despiértalo con las mismas palabras y al anochecer cántale las mismas canciones, te sorprenderás de lo bien que ese pequeñito te conoce y estarás alimentando una autoestima sana, proveyéndolo de una seguridad muy importante para su crecimiento, porque ya sabe los horarios de la familia, esto te facilitará la comunicación para el futuro. Si tu bebé tiene entre 0 y 3 años estas en excelente momento, si no tuviste oportunidad de fomentarlo durante el embarazo, aún estás a tiempo, comienza el diálogo, nunca es tarde para reforzar la comunicación con tu hijo, entre más temprano comiences es mejor, siempre míralo a los ojos el contacto visual además de ser hermoso es vital, a esta edad igual usa la música, el horario especial (al menos 15 minutos), apaga aparatos, despiértalo a la misma hora, canta y da las buenas noches a la misma hora, respeta sus horarios y siempre usa una plática positiva, avísale lo que sucede aunque lo veas pequeñito dile siempre como se llama cada cosa, comenta quien es cada quien, prepáralo para los cambios por ejemplo “iremos de viaje”, “vendrá ‘abue’ a visitarnos”, “Papá estará fuera unos días”, etc. Jamás mientas, nunca te escondas para irte por unas horas, como has fomentado la comunicación ahora no puedes fallar, simplemente explica con tus palabras que tienes que salir, que irás a trabajar, que ahorita vienes y despídete con amor, esto lo dejará tranquilo, se acostumbrará a la rutina de verte salir y verte llegar. De los 4 a los 6 años, usa los mimos recursos de los ejemplos anteriores, en esta etapa (como en todas) es fundamental siempre hablarle con la verdad, jamás amenaces con algo que no cumplirás por ejemplo: “si no te portas bien, te regalo con ese señor”, “ya no te quiero”, etc. Siempre que hables con él debes verlo a los ojos, es recomendable situarte a su altura, el intercambio de miradas es muy importante, evita compararlo con nadie, sé muy firme cuando llamas la atención, usa la disciplina positiva, es decir pérdida de privilegios en 7


De los 7 a los 11 años si apenas comienzas a preocuparte por la comunicación con tu hijo, es porque evidentemente algo no está funcionando del todo, para este caso te invito a priorizar, elije un tema a la vez, por ejemplo las calificaciones, o la disciplina en la escuela, etc., cuando tu hijo esté en sueño profundo acércate a su cama, acaricia su espalda o su pelo y como si se tratara de un bebé que vive en tu vientre sintonízate con esa etapa, cuando lo sentiste moverse, cuando lo viste por primera vez, etc., debes conectar con un momento hermoso para poder hacer este ejercicio, comienza el diálogo de Alma a Alma, siempre en positivo y con palabras simples, jamás en tono de regaño ni de reproche, por ejemplo: “cuando obtienes buenas calificaciones siento calorcito en mi corazón y me lleno de felicidad”, “cuando no me obedeces siento frío en mi corazón, pero adoro cuando armas rompecabezas” etc. Esto debes hacerlo durante un par de semanas de preferencia todas las noches y dejar descansar una semana, una vez logrado un tema el que sigue, pero siempre durante el día velo a los ojos, siempre recuérdale cuánto lo amas, hagan un trato: ‘Jamás irse a dormir enojados’ y cumplirlo, los regaños y llamadas de atención si son claras y efectivas no deben durar horas y menos llevarlas al día siguiente. A partir de los 12 años, si ya has intentado de todo y siguen los problemas, trata los temas difíciles durante el sueño profundo siguiendo los consejos anteriores, siempre en positivo, si no sabes que decir en un principio solo dile la verdad, que lo quieres, que lo amas, y potencializa lo que hace bien, para después tocar el tema delicado, sin regañar, solo explicando lo que sí deseas. Si logras desde temprana edad una buena comunicación con tu hijo, será un niño que sabrá decir lo que siente porque lo aprendió de ti, su mayor 8

fortaleza será la seguridad que le cimentaste al decirle siempre lo que sucede, el Bebé por muy pequeño entiende, no por decodificación del lenguaje, mas bien por la vibración de tus palabras, la confianza que le trasmites y por tu mirada. Un niño que se siente tomado en cuenta, que tiene claro lo que es correcto y lo que no lo es, que sabe los horarios y las disciplinas desde pequeño será más sano, tendrá una autoestima saludable pero sobre todo, exigirá sinceridad porque sabrá otorgarla, son niños con una facilidad para interactuar con sus semejantes de todas las edades, en pocos años verás a tu adolescente comunicándose contigo, con toda la confianza de expresar sus sentimientos, sus gustos y hablar abiertamente de lo que siente por los demás, lo que le preocupa, lo que desea.

Espero que estos consejos te lleguen a tiempo y que siempre recuerdes que todos deseamos ser escuchados, que todos tenemos algo que trasmitir, que a cualquier edad nos gusta que nos vean a los ojos, pero sobre todo necesitamos saber exactamente qué se espera de nosotros, nadie es adivino, la comunicación es una de las mayores bendiciones que posee el ser humano, quizá a nosotros no nos lo fomentaron, eso puede ser un excelente motivador para iniciarnos con nuestros hijos como adultos que saben trasmitir y recibir.

Fotografía: Mónica Rosales

lugar de instalar castigos, y siempre debes explicar lo que es correcto y lo que no, lo que esperas que haga, si comenzaste temprano (en vientre) la comunicación te será más sencilla, si apenas comienzas no te preocupes solo sé firme y poco a poco lograrás un diálogo sano con tu pequeño, es mejor decir “levantemos los juguetes” que “levanta esos juguetes”.

Por: Lolo Carreño

Gracias! Ary Margon Consultas, Talleres y Charlas arymargon@gmail.com Tel. 461 137 7252 Cel. 461 140 5788

Todo lo que piensas, dices o haces tiene un resultado, SIEMPRE. Lo que sale de mi regresa a mí. Me he dado cuenta que la teoría es infinitamente útil sólo hasta que lo pasas a la práctica. A lo largo de este tiempo han pasado cosas en mi vida que me han hecho entender un poco más cómo funciona el asunto de “lo que haces se refleja en otros” o “como es adentro es afuera...”. Me queda claro que en todo esto en ningún momento pensé que yo reaccionaria de esa manera. 9


Todo lo que piensas, dices o haces tiene un resultado, SIEMPRE. Lo que sale de mi regresa a mí. La suerte no existe. Entendido esto, ahora si les voy a contar lo que me pasó. Resulta que hace muchos años conocí a una persona que en un principio era muy amable y amorosa. Nos llevábamos muy bien. Con el paso del tiempo me di cuenta que vivía en un estado extraño. Era como si siempre tuviera una actitud y una cara de “perfección” al exterior pero por dentro viviera otra cosa. Mientras más convivíamos más me iba teniendo confianza y dejaba salir un poco esa otra cara. En realidad yo no ponía mucha atención a su onda, era solo en ciertos momentos que me sacaban de balance. Empezamos a trabajar juntas y eso complicó más las cosas. Para no hacerles el cuento largo me hizo la vida imposible y como era mi jefa, pues todo era más complicado. Todo terminó en caos absoluto y en lo personal me sentí muy lastimada con todo el asunto. Años después estoy en mi consultorio esperando a mi siguiente paciente (porque yo doy Terapias de Sanación con ángeles) y resulta que, ¡era esta persona! ¡Tuve una mezcla de sentimientos brutales! Lo primero que pensó mi ego fue: “Seguro te tuviste que tragar toda tu onda para poder venir conmigo. En esta vida hay que portarse bien porque nunca sabes cuándo vas a necesitar a alguien o te vas a tragar tus palabras”. Jajaja horrible pero cierto. No siempre vivo en estado zen. Después de ese lapsus brutus, le di terapia y para mí fue lo más impactante del mundo. Me di cuenta que de la forma en la que actuó, era la única forma en la que podía portarse. Todo lo que esta10

ba en su vida la mantenía en ese estado de infelicidad. No puedes portarte bien o estar bien si por dentro estás destrozada. Absolutamente nada de lo que estaba haciendo era personal. Simplemente era como olla exprés y estaba al borde de explotar. Siempre quieres ver como el “karma” se cobra con los que te lastiman pero ¡oh! sorpresa la que me llevé. En ese momento sentí una compasión gigante. Pude ver claramente que ella la pasaba mal, pero que yo también. Para poder toparme con ella yo tuve que haber estado en igualdad de circunstancias (de vibra o de energía). Sentí una profunda liberación y un estado de entendimiento tremendo. Ese fue el momento que me quedó claro cómo funciona y que las 2 partes compartíamos responsabilidad. Lo que te hagan los otros es SU karma, pero lo que hagas tu con eso, es TUYO! A partir de ese momento me prometí portarme lo mejor que pueda conmigo y con los demás. Empezar a vibrar más alto para poder recibir lo mismo y así los demás puedan aprender con el ejemplo. Pero lo mejor de todo es que me prometí siempre tenerme compasión. Dejar de ser tan dura conmigo. La vida tiene unas lecciones súper profundas si te permites verlas y entenderlas. Siento que cada vez voy agarrándole más la onda a cómo funcionan las cosas. Aún así sigo aprendiendo y ustedes lo leerán cada que salga la revista jajaja.

Fotografía: Pilar Cortina

Voy a empezar por explicarles un par de cosas. El universo tiene leyes (físicas, de vida, etc..) que evidentemente se cumplen para todos. Da igual que seas la Madre Teresa de Calcuta o el malo más malvado del mundo. Si te tiras de un edificio, vas a caer. Una de esas leyes es “La ley de Causa y Efecto” mejor conocida como Karma. Esta ley dice que -toda causa tiene un efecto que regresa a su causa potencializada.- ok sí que bonito pero, ¿eso que quiere decir?

Por Rosario Herrera Lasso R.

Me encantaría que me compartieran sus experiencias. Nos vemos en mis redes sociales! Lolo Carreño

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Puede darse incluso el caso en que nos conflictúe que alguien más quiera ocupar ese lugar, bajo esta perspectiva, lo que estaríamos haciendo es darle un significado a ese lugar, que en realidad y en estricto sentido, no es más que eso: un lugar para sentarse a la mesa. Entonces, si le otorgamos un significado distinto al real a ese lugar de la mesa, podría ser que estuviéramos ante una de las maneras en que nos posicionamos en la vida. Al igual que en la mesa, tal vez suceda que nos regalen la posición, la tomemos o peleemos por ella. Y ese posicionamiento se puede dar en cualquiera de los ámbitos en que nos desenvolvemos en la vida. Al nacer también ocupamos una posición determinada dentro de nuestra familia, es decir, existe el hermano mayor, el o los de en medio y el más pequeño, lo que quiere decir que de origen, sin haberlo pedido tenemos un lugar. Sin embargo, al pasar de los años esas posiciones pueden ir cambiando por diferentes motivos, que normalmente se dan de manera involuntaria. Estos cambios generalmente se dan en forma inconsciente, esto es, sin darnos cuenta, lo explico: si por ejemplo

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yo fuera la hija mayor, pero mi carácter es débil y dentro de mi familia todos los hermanos mayores han sido de caracter más bien recio y personalidad fuerte, entonces no soy apta para lo que esa posición requiere, en consecuencia, alguno de mis hermanos que cumpla con esa característica asumirá ese rol, y se posicionará como sí fuera el hermano mayor. Esos cambios pueden darse también forzosamente: si por desgracia, digamos que el hermano de en medio falleciera existe entonces la posibilidad de que alguno de los restantes tome ese lugar. ¿De qué sirve todo lo anterior? Esas posiciones son en parte la manera en que PERTENECEMOS a nuestro núcleo familiar; la pertenencia es un elemento fundamental en los seres humanos, tanto que hay quienes a lo largo de toda su vida se dedican a buscar sus orígenes, es decir, a donde originalmente pertenecieron. Pero esa no es la única forma de pertenecer en nuestra familia y al grupo social en el que nos desenvolvemos: existen conductas y rasgos de la personalidad que también determinan nuestra pertenencia. Por ejemplo: siendo catalogado como el deportista, la víctima, la enferma, la que ayuda, el que chantajea, la que organiza, la chillona, el pa-

rrandero, el simpático, etc. Así, siempre pertenecemos desde nuestra propia etiqueta. ¿Pero qué pasa con estas etiquetas? Si no nos hacemos conscientes de ellas, es decir, nos damos cuenta que las traemos puestas y nos las colgamos sin cuestionarlas y nos sentimos demasiado cómodos con la que nos “tocó”, el precio a pagar puede ser altísimo: actuar y conducir nuestra vida de acuerdo con ella, siendo que tal vez en el fondo esa etiqueta en verdad no forma parte de nuestra esencia real, de quien en verdad somos. A la par de las etiquetas, existen también las máscaras o fachadas. ¿Qué son? Son como las etiquetas, pero éstas las creamos nosotros mismos desde niños con el fin de defendernos de los eventos, las actitudes y conductas que de los demás nos puedan afectar. Por ejemplo, si tuve una madre débil y un padre ausente, tal vez yo cree para mí una máscara del más duro o el más fuerte, aunque muy probablemente en el fondo sea una persona vulnerable, pero esa máscara me ha ayudado a llidiar con la debilidad de mi madre, es decir, que esa conducta de mi madre no me lastime tanto, porque yo necesitaba más bien una madre fuerte. Y esto no quiere decir que las máscaras sean ma-

las, siempre que, como ya lo dije, esto lo hagamos consciente, osea nos demos cuenta. Si tenemos la capacidad de descubrir cuales son nuestras máscaras y encontramos nuestra verdadera esencia, podremos hacer uso de ellas siempre que queramos o las necesitemos. Lo interesante de darse cuenta es que vivamos y actuemos de acuerdo a nosotros mismos y no acorde a lo que los demás quieren o esperan de nosotros. Sí lo hacemos de este modo corremos el riesgo de vaciarnos, no querernos, descuidarnos y por supuesto no aceptarnos a nosotros mismos, de generar un gran resentimiento y frustración dentro de nosotros por no habernos atendido en realidad, además de que normalmente pueda suceder que no cumplamos con las expectativas de los demás. Esto no quiere decir que deje de ayudar a los demás o de quererlos y atenderlos, o que cumpla cabalmente con mi trabajo, al contrario, hacer todo esto desde el amor que me tengo a mí porque me quiero y me reconozco TAL CUAL SOY! Rosario Herrera Lasso sanacion.rosario@gmail.com Tel: (55) 1019-3654

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Por Leticia Verónica Neri Guzmán

Dentro del fotomontaje fragmento del arte digital del artista japonés Hiroyuki Sutou

Si tus ojos se han abierto a manera de sorpresa al leer el título de este artículo, te puedo asegurar que en algún momento se grabó en tu mente, que para llegar al Reino de los Cielos, tienes que ser pobre. A la fecha no he encontrado documento en la historia que asegure que todos los pobres entran al cielo, ni que todos los ricos se van al infierno. El Dinero no es el detonador de tu crecimiento o estancamiento espiritual, lo importante radica en que seas tú quien utilice el dinero y no sea el dinero el que te utilice a ti. Al nacer tú has sido bendecido con un don especial, con ese talento con el que viniste a hacer de este mundo un mejor mundo, es a través de los años que muchas veces ese talento se empieza a cubrir con “lo que

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debe ser” empezamos a tomar las señales del exterior como si fueran nuestras y nos convertimos en parte de la manada, la buena noticia es que tu puedes transformar tu vida, haciendo de ella un juego en el cual resultes ganador.

jas a quien te rodea, como las que te dirijas a ti mismo.

¿Qué necesitas? Antes que nada saber lo que quieres, no importa lo fácil o poco fácil que parezca, la claridad le da poder a tu meta. Cada problema tiene una solución aunque tú todavía no la veas.

Muchas veces sentirás miedo, sobre todo al comportarte de manera diferente al rebaño, allí está tu valor, no hay nadie en el mundo que haya logrado un gran cambio que no se haya enfrentado al que dirán y que con suma maestría haya dejado de lado los comentarios negativos y los haya transformado en fuerza para completar su sueño.

Evita las distracciones y cuando estés desarrollando tu talento “hazlo a mano”, que sea realmente una obra de arte precisa, hecha con pasión. Así sea un pastel, una canción o una cirugía de cerebro.

Da con tus palabras poder a lo que sólo vale la pena, ríete de tus errores y hazlo saber a tu cara, que tus ojos reflejen luz al mundo, cualquier cosa que hagas, hazla con la decisión de ganar, no de sobrevivir.

Una vez que te has enfocado en tu meta, bendice y agradece cada paso, recuerda que tus palabras tienen poder, sé respetuoso con tus palabras tanto las que diri-

Con tu alegría, generosidad, entusiasmo y entrega, estás construyendo la bóveda que recogerá el fruto de tu siembra.

Porque cuando buscas primero el Reino de Dios, agradeces tus talentos entregándote con pasión a tu misión, las bendiciones de abundancia cubren todo instante de tu vida.

Ama, goza, disfruta, agradece, perdona, da, comparte y vive en plenitud. El ángel del éxito tiene una corona de laurel para ti. Leticia Neri Terapeuta de Sanación con Arcángeles www.todoestabien.com.mx Twitter: @todoestabien1 Facebook: Todo Está Bien e-mail: vozdeangel@todoestabien.com.mx 15


Fotografía: Mónica Rosales

Por: Vanessa Aguilera

¿Alguna vez te has hecho esta pregunta? Quizás en una etapa de búsqueda, o simplemente queriendo encontrarle sentido a la vida. Si bien es cierto que nos han dicho que todos llegamos a esta experiencia terrenal con una misión, la gran mayoría de nosotros no encontramos fácilmente “Eso” a lo que vinimos, y podemos llegar a experimentar frustración o desesperación en el intento. Hace tiempo, cuando mi hija tenía siete años, la encontré llorando en su cuarto a solas, y me acerqué a ella para preguntarle qué le pasaba. - ¡Es que no me acuerdo cuál es mi misión! - me dijo desesperada. - ¡Yo sé que hay algo muy importante a lo que me mandaron, y por más que intento, no me puedo acordar! Por supuesto que al ser una niña tan pequeña, lo único que se me ocurrió decirle fue que nadie a los siete años sabía cuál era su misión, que fuera paciente y que poco a poco a lo largo de su vida lo iría descubriendo. Esa noche yo no podía dormir, me quedé pensando cuándo había sido la primera vez que tuve la inquietud de saber cuál era mi misión. Llegué a la conclusión de que la primera vez en mi vida que me lo había preguntado fue cuando tenía 21 años, y pasaron muchos años más para darme cuenta en realidad cuál era mi misión en esta vida.

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La realidad es que me he dado cuenta que nuestra misión no es algo que ya esté escrito en algún lado… Es cierto que existe un plan divino, ese plan perfecto que diseñó Dios para cada uno de nosotros, pero dentro de sus regalos, el más valioso es el libre albedrío. Dios nos da dones, pero depende absolutamente de nosotros mismos y de nuestras decisiones lo que hagamos con ellos, y esa elección que cada uno de nosotros tomamos, se convierte en nuestra misión, en nuestra manera de explotar los dones que nos ha dado Dios. De modo que si sigues preguntándote cuál es tu misión, pon atención en aquellas cosas que disfrutas hacer y que las haces bien. Recuerda que tu misión no necesariamente tiene que ser algo muy grande o importante, puede ser algo sencillo que cambie solamente tu vida y la forma en que la vives, y por ende, tenga un impacto grande en la vida de los demás.

¡Tu misión es lo que tú decidas que sea! Tómate el tiempo que necesites en experimentar y practicar muchas cosas, te quedará claro cuál es aquella que te hace sentir que haces la diferencia, aunque esto sea sólo en tu vida. Con el tiempo y la práctica, empezarás a notar como causas un impacto en la gente que te rodea y se expande como las ondas que se generan en el agua al arrojar una piedra. Vanessa Aguilera Terapeuta Holística y Sanadora 04455-5508-7469 aguileravane@gmail.com 17


Ilustración: Sandra Cházaro

Por: Vanessa Aguilera

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Sandalfón es el Arcángel de la comunicación, es quien se encarga de llevar las oraciones a Dios y de traer de regreso a la tierra su respuesta. Es el mensajero divino, el enlace entre la tierra y el cielo, entre los humanos y lo divino.

Finalmente entendí que era Sandalfón quien me ayudaba a equilibrar mis emociones y entender mejor mi entorno, mejorando mis relaciones y sobre todo, mi relación conmigo misma.

Si tienes algún problema de comunicación, Sandalfón se vale de muchos recursos para acércate con una oración al arcángel Sandalhacer llegar su mensaje, usa la tecnología, fón, él te ayudará a mejorar tanto los canales los medios de comunicación y la música, así de comunicación, como la calidad de ésta. que si alguna vez le pides a este hermoso También puedes recurrir a él cada vez que arcángel un mensaje, espera recibirlo a tra- tengas una petición para Dios o algún ser de vés de algún programa de tele, de la letra de Luz, pues él hará llegar tu mensaje rápida y alguna canción que suene en la radio o por claramente. medio de una llamada telefónica de alguien cercano que te traiga el mensaje. Su amor es infinito y es, como todos los Arcángeles, omnipresente y multidimensional. Recuerdo la primera vez que tuve contacto con el Arcángel Sandalfón: Una pequeña oración para el Arcángel Yo estaba en una sesión de canalización, y el Sandalfón: canal me estaba platicando sobre los ángeles que me acompañaban en ese momento, Amado Arcángel Sandalfón, agradezco tu de pronto se empezó a reír y solo decía: presencia y la recibo con amor y alegría. Te pido tu ayuda para entregar mi oración cla- Si, si, ahorita le platico de ti… dame un se- ra y eficazmente a nuestro Creador (inserta gundo y le cuento que también estás aquí. aquí tu oración). Pido que me devuelvas un mensaje claro en una forma que yo pueda Entonces me contó sobre Sandalfón, me en- entender fácilmente. Por favor, mantenercantó su manera de hacerse notar, quería ser me informado sobre el progreso de mi solireconocido por mí. A partir de ese momento citud y quisiera saber si debo tomar alguna comencé a recibir su mensaje, sobre todo a acción específica para ayudar a este procetravés de la música. Yo estaba convencida de so. ¡Gracias, gracias, gracias! que el radio de mi coche se había vuelto loco, porque muy frecuentemente se cambiaba de estación solo. Cuando empecé a analizar lo que estaba pasando, me di cuenta de que se cambiaba a la estación en donde sonaba Vanessa Aguilera la canción exacta que necesitaba escuchar Terapeuta Holística y Sanadora para entender mis emociones, escuchaba el 04455-5508-7469 mensaje perfecto para mí en ese momento. aguileravane@gmail.com 19


El uso de llama violeta ha existido desde el inicio de los tiempos y ha sido utilizado por los maestros espirituales más reconocidos como el maestro Jesús, la virgen María; y quien lo llevó, más fuertemente para enseñanza al resto del mundo fue el maestro Saint Germain quien escribió varios libros acerca de cómo utilizar esta maravillosa herramienta. Si nos decidimos a aplicar conscientemente la Llama Violeta estaremos liberándonos de todas aquellas energías, programas y emociones negativas que nos van afectando a lo largo de la vida (incluso vidas pasadas), es, a decir por muchos, el único medio para disolver el karma y sus consecuencias. Con esta técnica activamos la poderosa presencia del YO SOY y automáticamente elevamos nuestra vibración; mediante el empleo de la misma, los maestros espirituales más reconocidos disolvieron toda creación discordante de sus vidas pasadas y han devenido los seres ascendidos de perfección que son hoy. Todo ser humano ha de hacer lo mismo alguna vez en alguna parte antes de que se libere de su propia humana creación pasada y presente. Nosotros como estudiantes de las artes metafísicas y Angélicas hemos de comprender que nuestra poderosa presencia YO SOY es la que enfoca, proyecta y mantiene la Llama Violeta, porque ella es la llama de DIOS PURO AMOR DIVINO, pero la parte que nos corresponde es llamar a nuestra presencia a la acción dinámica, a fin de reproducir la Llama y mantenerla en nuestra vida y en 20

Por: Dulce María Uribe

Arcángel Zadquiel COLOR: Violeta DÍA: Sábado CUALIDADES: Abundancia, transmutación, perdón, salud, amor puro PIEDRA: Amatista, fluorita violeta, charoita nuestros corazones; de esta manera podemos purificarnos disolviendo todas las sustancias innecesarias así como también las energías calificadas como discordantes que hemos usado y generado a lo largo de nuestras vidas. Esta purificación hace que la energía Divina, la luz y la perfección puras de nuestra poderosa presencia YO SOY se derramen en plenitud a través de él sin entorpecimientos. Todo, sea lo que sea, por donde pasa La Llama Violeta, se vuelve Luz, Libertad, Perfección y Amor. La Llama Violeta va disolviendo toda energía que Hayamos usado sin Amor (malos pensamientos, rencores, palabras hirientes), todo eso, permaneciendo grabado en nuestro ser, esperando ser redimido algún día, y ¡ese Día de Oportunidad ha llegado!. Si eliges libremente, probar la eficacia de Este Fuego Violeta, que es el Amor de DIOS en acción, esperando cambiar tu vida y asuntos, ¿qué dices?; Inténtalo y luego, comprueba por ti mismo los resultados, si te decides a hacerlo, verás como regresa la Felicidad y la Paz a ti, a tu familia y a todo lo que te rodea. ¿Cómo funciona? La Llama Violeta cuando se invoca es capaz de limpiar el cuerpo físico y el aura de toxinas y químicos, virus físicos, drogas y polución. Problemas emocionales y experiencias angustiosas de temprana edad o de pasadas vidas, cicatrices de pasados perjuicios, miedo y ansiedad, karma, odio y otras emociones negativas pueden transmutarse usando correctamente esta técnica. Esta llama trabaja incrementando la frecuencia vibratoria a la cual los electrones se mueven en el átomo. Como se afirma en las enseñanzas Rosacruces todo es vibración o frecuencia y cada persona (o ser vi-

viente) puede definirse como un número que representa su frecuencia de vibración. Mediante el cambio de dicha frecuencia de vibración de los cuerpos emocional o físico los otros cuerpos por acción simpática siguen esta misma acción. Y así las vibraciones del individuo como un todo son “elevadas” o transmutadas a un estado más elevado. Todo es mediante la intención y la visualización, si quieres cambiar tu vida o ayudar a los demás a mejorarla pues entonces debes tener la intención de corazón, esto sin querer cambiar a las personas, recuerda que ninguna sanación debe llevarse a cabo mediante el juicio, no puedes cambiar a los demás, pero puedes ayudarles a elevar las vibraciones de las que hablamos anteriormente y así lograran sentirse mejor.

Ilustración: Sandra Cházaro

El Arcángel Zadkiel es el canalizador y medio principal para utilizar la llama Violeta, esta llama es la de más alta vibración, ya que contiene los dones de las otras Llamas, por lo tanto aplicando el poder o don de la Llama Violeta, podemos trabajar la Iluminación, Amor puro, espiritualidad, paz, bondad, salud, verdad, abundancia, éxito, prosperidad, transmutación, perdón, protección, comunicación y justicia.

MEDITACIÓN: Siéntate relajado sin cruzar piernas ni brazos, cierra los ojos y haz tres respiraciones profundas, soltando muy suavemente el aire en cada una de ellas. Por favor, sé de mente abierta, honesto y dispuesto a recibir los beneficios de esta llama divina. Haz una oración interna (la que sea de tu agrado), lo Más Alto para invitar y mostrar el poder de esta llama en tu vida para curarte y satisfacer tus propias necesidades o la de los tuyos. Imagina que tu aura es sellada con un tubo de tres metros en diámetro por tres metros de alto hecho de luz blanca azulada. Invoquemos la protección del Arcángel Miguel repitiendo en tu mente: ARCANGEL MIGUEL PROTÉGENOS, ARCANGEL MIGUEL PROTÉGENOS, ARCANGEL MIGUEL PROTÉGENOS. 21


Concéntrate en visualizar la llama violeta. Vete adentro de una hoguera. Observa este fuego de color violeta. Imagina llamas pulsantes ondulando en interminables tonos de violeta con variaciones de púrpura y rosa. Tu cuerpo ahora se ha vuelto transparente, las llamas en espiral suben por tu cuerpo desde los pies a la corona. Siente la vibración y vitalidad de la llama. Para armonizar tu cuerpo Ve ahora que esta llama se ha transformado en una esfera, como una esfera rotativa en un espectáculo y que empieza a girar cada vez más rápido. Nota también que su color se ha transformado en un púrpura profundo de limpieza y protección. Empieza a penetrar cada célula de tu cuerpo. Ve pequeñas esferas de llama violeta sobre cada uno de tus órganos, removiendo negatividad. Concéntrate ahora en la parte de tu cuerpo que necesita sanación. Siente como poco a poco se va elevando la vibración de ésa área que necesita amor y vibraciones positivas, trata de sentir la acción de la llama violeta en ti y visualiza como esta maravillosa energía se expande por todo tu cuerpo llenándolo de amor y trayendo nueva vitalidad y salud!. Esta es tu propia energía, este es tu origen de luz, en este momento estás llenando cada célula de tu cuerpo con sanación absoluta, con el amor de Dios en acción, repite en tu mente (o en voz alta,

como lo prefieras): “Providencia Divina, hágase tu voluntad.” Con el poder de tu imaginación transforma el color de tu Llama Violeta en un rosado orquídea de compasión y perdón mientras que la esfera en donde tú estás aún se mantiene girando cada vez más rápido. La llama rosa suavemente estrecha todo tu ser. Este es el momento para transmutar cualquier daño que haya sido hecho hacia a ti o por ti mismo, imagina que frente a ti esta aquella persona con la cual tienes algo pendiente y pídele perdón (puedes ser tú mismo). Reza para obtener compasión, con la mayor sinceridad, al Dios de tu corazón. Perdona a cualquiera que te ha hecho daño, sin ningunos sentimientos negativos de ira, odio o aún ligeras antipatías hacia ellos. Curación del Planeta Invoca a los cuatro elementos para que nos ayuden con esta limpieza, irradia la energía que tú has concentrado durante la visualización para curar la Tierra, tu segunda más preciada posesión en el plano físico después de tu propio cuerpo físico. Envía también esta energía a los seres que habitan este maravilloso planeta que requieran ayuda física, mental o emocional. Da al planeta y sus habitantes algunas de las bendiciones que tú haz recibido hoy y di: “En el nombre del Cristo dentro de mí, pido que esta Llama Violeta sea multiplicada y usada para asistir todas las almas en este planeta que están en necesidad. Yo te lo agradezco y lo acepto hecho en esta hora en pleno poder, de acuerdo con la voluntad de Dios.” QUE ASÍ SEA”.

Fotografía: Mónica Rosales

Ahora, haz esta afirmación sencilla o decreto nueve veces. A medida que se dice el mantra, siéntelo en tu corazón con devoción y amor: “YO SOY un ser del fuego violeta, YO SOY la pureza que Dios desea, YO SOY la llama violeta en poderosa fuerza cósmica”

Entrevistada: Luz del Carmen Miranda Entrevistadora: Mónica Rosales Mónica: Estamos aquí con Lucecita que nos vino a visitar, gracias por haber venido y por compartir tu experiencia de vida. Luz: No gracias a ustedes. Para mí es un placer. Mónica: Luz, sabemos que tú recibiste de Dios dones especiales y me imagino que el camino de descubrirlos y entenderlos no ha sido fácil. Me gustaría que nos compartieras ¿Cómo empieza esta historia? ¿A qué edad te empiezas a dar cuenta de que hay algo en ti que es diferente? Luz: Efectivamente ha sido difícil, porque la gente de pronto no lo entiende, no cree y eso obstaculiza el crecimiento porque se siente desanimo, soledad y en algunos casos impotencia. Tengo vagos recuerdos de lo que pasaba cuando era niña. Prácticamente era a través de los sueños como me enteraba de algunas cosas que iban a

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suceder. En realidad es poco lo que recuerdo, y cuando llegaba a comentarlo, quienes me escuchaban lo asociaban como algo heredado de mi papá; quien continuamente tenía este tipo de sueños. Lo que siempre supe es que he tenido gran conexión con Dios, con Jesucristo. Al respecto recuerdo un sueño recurrente a la edad de 7 años aproximadamente, en el cual Jesucristo aparecía en la sala de la casa, parado sobre nubes que cubrían todo el piso y con una expresión de ternura me daba la mano y la comunión. Era tan real que la emoción es increíble, la alegría inmensa y la paz indescriptible porque parece decirte: No te preocupes, estoy contigo. Mónica: ¿En qué momento te empezaron a pasar ya cosas más significativas, donde tú vieras que era algo más que un sueño, que detrás del sueño había un mensaje o una cuestión en la que tú tenías que actuar o que hacer algo? ¿Cuál fue la primera vez que viste esta relación entre tus sueños y tu necesidad de actuar? Luz: Entre los 13 y 14 años empecé a darme cuenta de que sabía de hechos recientes, que acababan de pasar y que aún no se comentaban. Recuerdo la muerte del abuelito de un amigo, que el día de su cumpleaños fueron a cantarle las mañanitas con mariachi y toda la alegría, tristemente encontraron al señor muerto. Eran aproximadamente las 6:00 de la mañana cuando llegó esa escena a mi mente. Me preguntaba por qué tenía ese tipo de pensamientos, y dos horas más tarde pasa mi amigo y me cuenta exactamente lo que yo había pensado. De pronto no le encontraba mayor explicación; y así pasaron muchas cosas más, pero espaciadas. Realmente cuando se despierta en mí mayor curiosidad sobre estos hechos es a la edad aproximada de 18 años, porque las manifestaciones solían ser más recurrentes; tres, cuatro, hasta ocho días máximo, después de soñar, yo vivía exactamente lo que había visto en el sueño. 24

A partir de los 33 ó 34 años, es cuando la metafísica entra en mi vida y, todo esto empieza a despertar mucho más, y claro de forma más consiente y responsable Mónica: ¿En este tiempo compartías con alguien estas cosas que te pasaban? Luz: Al principio con mi mamá, realmente era la única que me medio creía, o por lo menos así me lo hacía notar. Después mi esposo Carlos, mi hermana Rocío y mis amigos José y su esposa Gloria de quienes recibo un gran apoyo. Mónica: ¿Cómo te sentías? Luz: Al principio me sentía super especial… ya sabes el ego hace acto de presencia y creía que tenía super poderes. Pero al momento reaccionas, ¿no? Y ves que, bueno, de alguna manera todos tenemos esto, sólo que algunos podemos desarrollarlo un poquito más rápido. Y, bueno, te das cuenta que efectivamente eres especial, pero como lo es cualquier otra persona, porque cada quien tiene lo suyo, cada quien tiene su camino, su misión. Mónica: ¿Algún suceso ayudó a manejar esta parte del ego o fue tu simple intuición la que te llevó a superarlo? Luz: Fue mi intuición. Desde chica mi mamá y abuelita materna quienes estuvieron muy cerca de mi, siempre me enseñaron de palabra y con el ejemplo, que tenemos que pensar en los demás, que debemos ponernos en sus zapatos para entenderlos y ver sus cualidades, evitando juzgar. Con esto aprendí que todos somos amados por Dios, solo que cada quien tiene ritmos de evolución particulares….y con ello se va pinchando y desinflando el ego. Mi mamá fue una de las personas que dio todo por todos, era alguien muy querida y vivir con su ejemplo me abrió muchas puertas.

Mónica: Qué bonito, porque tienes esta sabiduría que viene de tu mami, la sumas ahora a los dones y a este auto-reconocer el ser de luz que eres y, entonces, puedes llegar más allá o iluminar más al sumar esta herencia divina que te deja tu mami, con el reconocer tus dones, ¿no? Luz: Sí, la verdad es algo muy satisfactorio, pero sí cuesta un poquito de trabajo ir encontrando el camino. Mónica: ¿En algún momento te ha sucedido algún evento que te haya provocado miedo? Luz: Sí, ha habido varias ocasiones, porque he sido de las personas que, por ejemplo, llego a un lugar y de pronto siento, sensaciones diferentes, de presencias y sí he visto algunas cosas desagradables. Mónica: ¿Percibes o ves? Luz: Percibo como si fuera una película en mi mete y en algunas ocasiones he llegado a ver, pero ha sido muy raro cuando veo. Sólo recuerdo una ocasión que iba caminando y vi a lo lejos que venía una señora, que traía una cicatriz en la mejilla derecha, y al pasar junto a ella me tuve que hacer a un lado, fue una reacción rápida, porque de la cara de ella vi salir la cara de un lobo que se volteaba hacía mí y abría su hocico en señal de ataque. Recuerdo que para mi fue tan real que de la impresión brinqué. La verdad es raro que vea tal cual, por lo regular percibo o empiezo a pensar en ello, como si estuviera yo soñando, pero despierta. Mónica: OK. Cuéntanos algún suceso de los más significativos para ti, estos eventos milagrosos o cuando has podido hacer algo respecto a lo que ves, porque sé que no siempre es así. Luz: Hace como diez años, al salir de la casa imaginé en un accidente, así lo percibí. Creí que era algo que podría pasarme a mí e invoqué al Arcángel Miguel para que se cortaran todos esos sucesos, al instante volteé y vi a mi hermano menor... Mónica: ¿El está vivo o muerto?

Luz: Está vivo. Mónica: Digo, para saber, porque uno nunca sabe qué está viendo Luz. Luz: Lo vi y comprendí que se trataba de algo contra él. Entonces pedí a todos los seres de luz que lo cuidaran y guiaran. A la mañana siguiente bajé a desayunar con mis papás y el tema de conversación giró sobre que mi hermano había sufrido un accidente en carretera y milagrosamente resultó ileso. Fue cuando dije: ¡GRACIAS SEÑOR!... y comprendí que tenía que tener más información, saber hacia quien iban las cosas para poder ayudar. También en una ocasión hicimos un viaje a Puebla, íbamos con unos amigos, todos teníamos en cierta forma esas posibilidades de ver algo, de percibir algo. De pronto el tráfico en la carretera no nos permitía circular y nos preguntábamos por qué los decretos no funcionaban. En ese instante llegó a mi mente la imagen de una señora que me decía: No me quiero ir. Y cuando mentalmente le preguntaba ¿por qué?,…¿dónde estas?... me respondía: mis hijos, ¿quién va a ver por ellos?...no me quiero ir. Entonces hablé, le dije que tenía que seguir el camino de luz, que no se preocupara, que sus hijos iban a estar bien, que íbamos a pedir por ellos; me dio las gracias y se fue. Mas adelante nos percatamos de que lo que detenía la circulación fue un accidente en donde falleció una señora, sus hijos no estaban ahí pero pedí por ellos. Ahora, también ha habido situaciones en las que me queda muy mal sabor de boca, porque no he sabido qué hacer, no he reconocido a tiempo. Mónica: ¿Cómo qué? Luz: De pronto empiezo a tener la ideas de: ¿que, y si me mato?. Decía yo, no, espérate, esos no son 25


mis pensamientos, o sea, si yo lo que más amo es la vida, ¿cómo? Y no supe qué pasaba y a la mejor tampoco me di el tiempo como para preguntar. El pensamiento llegó, unas dos, tres veces, ¿no? Ya al poco rato se me quitó y ya. Y al día siguiente me entero de que mi vecino se quitó la vida. Y, entonces, sí duele, sí duele que no hayas podido hacer nada. Cuesta mucho trabajo, son muchas cosas de pronto que uno no entiende. Pero en el fondo tienes la certeza de que Dios no se equivoca y sabe por qué hace las cosas, aunque es doloroso en ocasiones aceptarlas, porque no entiende uno el porqué. Pero hay que tener paciencia para descubrir ese porqué y confiar, siempre confiar en Dios, porque además también hay historias bonitas… Yo he tenido una conexión muy especial con la Virgen del Inmaculado Corazón de María, a quien también conoce la gente como la Virgen de las Rosas, ella se manifiesta con brillos como diamantina. En una ocasión que mi tía estaba muy enferma y paso yo cerca de un cuadro que tengo de ella y me llega la imagen de mi tía, me volteo y le digo: ¡ah! Quieres que vaya a ver a mi tía y de seguro quieres que le hable de ti. ¿no? y al momento me veo las manos y otra vez llena de brillos…

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Por fin, que me fui a ver a mi tía, le hablé y le llevé una estampita de la Virgen y ella se le quedó viendo, pero su esposo era muy dominador y, entonces, vio y estaba súper molesto de que yo había hecho eso. Y ella nada más la vio y se le rodaron sus lágrimas y nada más me dijo: gracias. Me devolvió la estampita y ya, a los pocos días se le tuvieron que llevar. Y, bueno, ya cuando regresó a la ciudad de Chilpancingo ya había fallecido. Pero son de las cosas que me quedan la satisfacción de que hice lo que tenía que hacer. Mónica: Qué lindo que tengas esa capacidad de dar luz y esperanza, ojalá que Dios te dé todas las herramientas para que tu misión se siga llevando a cabo. Yo te agradezco infinitamente que hayas estado aquí, que seas parte de nuestras vidas. Luz: No, Mónica, al contrario. El placer es totalmente para mí, es un gusto encontrarse gente como tú, como ustedes. Y, bueno, que Dios esté siempre en su camino. Mónica: Muchísimas gracias, Luz. Muchas gracias porque al compartir tu historia espero que otros se conecten con sus dones, los acepten y puedan vivir en plenitud y amor, hacia si mismos y hacia los demás.

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practicar yoga, con sus característicos ejercicios de respiración consciente, aumentamos nuestra longevidad y calidad de vida.

Actualmente, la influencia de la medicina tibetana, es enorme en todo el mundo. En cualquier parte del mundo encontramos centros de Yoga, de masajes terapéuticos, de sanación, etc. Y todo esto tiene un origen en la antigua India.

- El conocimiento tibetano es eterno y permanente y no le pertenece a nadie.

La principal diferencia entre la medicina alópata y la medicina tibetana o ayurveda radica en que esta se expresa en palabras muy simples, y la ciencia alópata, se expresa con términos muy complejos y analíticos, trabajando únicamente con el síntoma, a diferencia de la medicina tibetana que maneja el sintoma como cosecuencia. La medicina tibetana va a la raíz del problema, no solamente sirve como paliativo para aliviar síntomas. Llega un momento en la vida en que debemos elegir entre el detalle (medicina alópata) y la profundidad (medicina tibetana). Es por esto que la mayor sabiduría la encontramos en la gente más simple, pues ahí radica la profundidad.

Se recomienda la lectura del libro Mahabharata, sobre todo la sección del Bhagabad Gita, aquí se explica la naturaleza y filosofía de la vida, para tener mayor información acerca de este tema.

Los tibetanos no miden la vida por los años transcurridos, sino por la cantidad de respiraciones que tomamos. La persona promedio respira alrededor de 21600 veces al día. Por eso es que al

La medicina Ayurveda o medicina tibetana, que tiene un origen de más de cinco mil años en la India, y significa “El Conocimiento de la Vida”, es actualmente utilizada por todo oriente. Esta ideología surge junto con la yoga y la filosofía.

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Usando los principios simples de la medicina tibetana puedes tomar el control de tu salud y de tu vida. Esto no quiere decir que quedamos exentos de contraer enfermedades como el cáncer que vienen mayormente por la contaminación del ambiente. Lo triste es que estamos contaminando nuestro mundo y nuestros cuerpos. Contaminamos nuestra tierra, el agua, el aire; así que comemos alimentos contaminados y muy probablemente las hierbas curativas también lo estén. Entonces su efecto es disminuido. Esta situación ha sido predicha por todos los líderes espirituales de todos los tiempos. La raíz de todo desequilibrio, ya sea físico, mental, emocional o espiritual, es la ignorancia de nuestra naturaleza, de nuestra esencia humana. La salud física tiene que ver con tres elementos importantes: -El comportamiento del esperma del padre -El comportamiento del óvulo de la madre -Y cómo se cuidó el embarazo

Comprendiendo nuestra concepción se determina el humor y los desequilibrios que pudiéramos tener a nivel físico. Una vez conociendo éstos, podemos equilibrarnos con dieta y en cambio de actitud. En el tema de la dieta, tenemos que entender que no hay una dieta general para todo el mundo, debemos conocer la dieta específica para cada uno de nosotros con nuestras distintas características. El 80% de las enfermedades crónicas empiezan por una mala digestión, por lo tanto, en la medicina tibetana el enfoque principal para restaurar la salud es mejorar su sistema digestivo. Es importante para restaurar la salud tomar agua hervida, esto aligera las propiedades del agua y es primordial para mejorar el sistema digestivo. Hay que tomarla caliente, pues así estimula el calor de la digestión, si tomamos agua fría, es como echarle agua a un incendio. El proceso digestivo es un proceso de fuego, que necesita el calor para funcionar adecuadamente. Malcolm y Osa recomiendan por la mañana, en ayunas y antes de lavarse los dientes, tomar dos tazas de agua hervida y caliente, pues no sola29


mente funciona como correctivo, sino que también es preventivo. El resto del agua que hervimos en la mañana, hay que ponerla en un termo y seguirla tomando durante el día, cada 15 minutos, esto hará que nuestro sistema digestivo esté activo y mejore sustancialmente. Es recomendable tomar agua simple, no tés. Es importante que el agua se hierva en el fuego, no en el microondas, pues cambia las propiedades del agua.

La medicina natural no tiene límites.

La medicina Tibetana o Aryuveda recomienda comer alimentos no procesados, es decir, lo más fresco posible, de preferencia orgánico.

Mensaje para el público mexicano: El uso de las plantas naturales de México hace a la medicina muy económica y eficaz. Pero lo más importante es que las hierbas que crecen en nuestra propia región son las más adecuadas para nosotros. Es importante preservar las tradiciones sobre cómo usar y recolectar nuestra propia herbolaria. Porque la sabiduría de cada región no viene del conocimiento científico, sino que viene de la combinación de las experiencias de mucha gente. Hay muchas plantas tibetanas y mexicanas que son parecidas y que se pueden usar para curar el mismo tipo de padecimientos. La invitación es a participar, no en una revolución, sino en la evolución consciente de nuestro mundo. La revolución no funciona, porque se trata de condicionar a otros, la evolución siempre funciona porque se trata de hacer cambios en nosotros mismos. Hay que tener fe en la belleza del corazón humano, y creer que esto es posible. El cambio comienza con nosotros mismos, con lo que nosotros hacemos con nuestros pensamientos. Cuando los médicos dicen que no hay cura para una enfermedad, es porque ellos no la conocen. Siempre hay un remedio para toda clase de padecimiento.

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Por: Alejandra Quiroga

Acapulco setentero, caleta y caletilla, la quebrada en su esplendor, lancheros, el parachute y la paradisiaca bahía en una época donde sí se creía uno que eso pertenecía al edén. Poco tuvo de paraíso la historia que retrata la realidad de una familia por demás disfuncional y que mucho tiene que ver con nuestras realidades. Hace unos días fui a ver el documental “Vuelve a la Vida”, reseña sobre una anécdota peculiar de la vida del buzo Hilario Martinez “Perro Largo” y su familia. Narrada por los personajes más cercanos al buzo, sus hijos, amigos, un yerno, su viuda, entre otros… La cacería organizada de un tiburón que amenaza a los turistas, es el pretexto perfecto para ir en “bola” a la playa de revolcadero y hacer lo necesario para cazar al bicho. Sí, en bola… con todos los hijos, la familia, los cuates, compadres y uno que otro colado que acaba colgándose un diente de la presa como trofeo y recuerdo de la experiencia inolvidable. Véanla. Al cabo de varios días y de “digerir” el Coctel de ingredientes de esta historia, pongo mi granito de sal y me integro a la receta, como muchos lo haríamos. La historia de nuestras familias que en muchos casos resulta compleja, compuesta de personajes de toda índole. Abuelos audaces que destacaron y se abrieron camino, padres luchones que no sabemos bien a bien si pudieron completar sus metas o cubrir sus expectativas, divorcios, segundas y terceras vueltas, medios hermanos, tíos y primos lejanos, tíos y primos cercanos con los cuales se vale hablar de todo, menos de la familia. Hijos adoptivos y putativos, hermanos, madrastras o padrastros, consecuencias de las decisiones de 32

otros y que hoy nos preguntamos ¿porqué tomarían esa decisión?, ¿porqué se casaron?, ¿porqué se fueron juntos?, ¿porqué “lo dejo”?, ¿porqué no volvió? … ¿qué buscaban? ¿qué pasiones desatadas los movieron? Que faltó madurez, que sobro amor, que hubo mal entendido, que no se comprendieron… ¡uuuffff! Las respuestas son pocas, la mayoría conocemos la “versión oficial” de las historias familiares, aunque siempre quedan espacios en blanco que no son llenados por nada o por nadie. El tiempo pasa, los personajes de las historias se van y nuestros rompecabezas se queda inconcluso. La realidad es que no vale la pena ser juez de vidas ajenas, llegamos a esa familia por un propósito, sin duda. Y si podemos escuchar y asimilar esas historias, también podremos asumir nuestra posición y sentirnos pertenecer a ese clan que más o menos habrá labrado un camino para los que Ahora estamos tomando las decisiones. Sin duda caminos donde hay rastros de dolor, de perdida, celos o coraje, pero nada que no pueda resolver una cacería en “bola” de ese tiburón que es el ego y que nos devora, que no nos permite ver que somos una chispa divina del Creador, que somos más que solo nuestras circunstancias. Y que precisamente las circunstancias nos han traído hasta aquí para darlos la oportunidad de ser mejores. La cacería es diaria y el coctel continuará acumulando ingredientes. Nuestras decisiones determinan los ingredientes, pero no será relegándonos y quejándonos como se sazona, es con cariño de hermano, de padre o de tía, con ganas de compartir. Con actitud de sumar y no de restar y con visión más amplia de lo que son nuestras oportunidades. A comer coctel, en bola por favor. 33


Por: Cristina Herrera Rocha

...después vi el milagro de esta foto... Hace algunos años llegando de unas vacaciones en la playa con mi familia empecé a sentirme mal y con mucha molestia en mis genitales, yo pensé que era una infección simple, comencé a tratarme medicamente y por más que consultaba ginecólogos no me componía, me daban diferentes tratamientos pero ninguno me terminaba de aliviar; así duré más de cinco años, muchas noches no dormía, me pasaba la noche en vela esperando que amaneciera. Sentía unos ardores y malestares terribles, los tratamientos que me daban solo me calmaban los síntomas pero regresaban.

Fotografía: Mónica Rosales

Me hicieron un sin fin de estudios desde cultivos hasta Papanicolaou, en los resultados nunca se revelaba nada concreto, salían diferentes infecciones.

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Un día un médico me detecto el virus del papiloma humano y clamidia trachomatis y que por el tiempo que tenía enferma era necesario quitarme la matriz y que me compondría no pensé ni dos veces y le dije sin dudarlo ¡quítemela!, gracias a Dios ya me había bendecido con tres hijas, lo que yo deseaba era ya estar bien, así que me la quito pero lamentablemente yo seguí sientiendome igual, así dure como otros seis meses, yo aparte de enferma corporalmente, sentía tanto dolor, tristeza, incertidumbre y coraje que me sentía muerta en vida.

Un día mi mamá vio un lugar donde me ayudarían por medio de talleres vivenciales a acercarme a Dios y a limpiar mi corazón, trabajando en el taller el 3er día yo le pedía tanto a Dios desde el fondo de mi corazón que me sanara que yo ya no podía vivir así y milagrosamente sentí su presencia, algo inmensamente hermoso; ese día Dios Nuestro Señor sano mi cuerpo, poco a poco con el transcurso de los días fui sanando hasta sentirme completamente bien. Seguí asistiendo a los talleres, terminamos el 3er nivel en la playa, ahí un día meditando nos tomaron esta foto ahí le pedía tanto a Dios que sanara mi corazón porque yo seguía sintiendo mucho dolor y coraje hacia mi esposo por lo que había pasado, mientras yo le pedía sentía una hermosa sensación en mi ser como nunca había sentido, después vi el milagro de esta foto que Dios y estos hermosos seres de luz me permitieron verlos y tenerlos plasmados conmigo. Desde ese momento yo sé que por medio de ellos también sano mi corazón, porque desde ese día mi vida cambio y creo fielmente que por medio de mis hermosos Ángeles Dios me guía hacia él. Me siento muy feliz de compartirles mi testimonio de vida LOS AMO… Los Ángeles existen… cree en ellos… confía en ellos… cree en Dios. 35


Por Claudia Sciarretta

Y bueno, teníamos una semana viviendo en la casa nueva mis gemelitos de 5 años (mejor conocidos Hippies Montessori) y yo, toda la estancia estaba llena de cajas con lámparas, libros, juguetes, cuadros y los sueños de un matrimonio que no funcionó. Después del baño de la noche subí a acostar a cada chiquito a su recámara, cada uno con su cuento especial leído, sus oraciones, sus besos y sus abrazos apretujados y exclusivos para cada cual. Eran apenas las 7pm así que ni siquiera estaba obscuro en realidad, bajé a lo que un día sería la sala y entre cajas y polvo me serví un tinto para tratar de encontrar entre sorbo y sorbo el valor que necesitaba para ésta nueva etapa. Esa casa que me había parecido un sueño de revista me parecía ahora enorme, con paredes altísimas, hipoteca impagable, demasiado grande para mí… -¡Mamaaaa! ¡mamaaaaa ayúdame!- Gritó Sebastián con pánico ahogado en la garganta. Subí las escaleras de tres zancadas, y en cuanto me acerqué a la puerta de su recámara sentí un frío penetrante en la nuca que me erizó el cabello.

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¡Puffff! ¿Un señor negro atrás de mí? ¡Qué miedo! ¿Qué hago? ¡Quiero salir corriendo! Pero soy el adulto acá, ¿qué ejemplo le doy? Si le digo que es mentira va a dudar de lo que perciba, si le digo que es verdad ¡yo no sé qué hacer! Ay, ¡no manches! ¿Qué hago? Dios por fa, ¿qué hago? ¡Qué frío! ¡Tengo miedo! En eso, llegó Aldo a ver qué le pasaba a su hermano -¿Qué te pasa hermanito? -¡Mira Aldo, hay un señor muy enojado todo negro aquí, atrás de mamá! ¡Me da miedo me da miedo Aldo! ¡Que se vaya!Y yo… yo seguía en mi soliloquio mental pensando qué hacer, qué decir… -Sí lo veo hermanito, pero no tengas miedo… mira, ¿te acuerdas cuando éramos angelitos?-Sí hermano -Así cuando estábamos en el cielo y todo veíamos, te acuerdas que salimos de Dios que era como el Sol y con nuestras alitas volamos hasta la Tierra donde escogimos a mamá.

-¿Qué pasa Sebastián? ¿Qué tienes?-

-Sí Aldo

-Mamaaa hay un señor negro siempre afuera de mi cuarto pero ¡hoy entrooo! Está aquí, está atrás de ti maaaa. ¡Dile que se vaya!-

-Bueno, pues éste señor llegó igual que nosotros al mundo, y le pasó que vivió toda su vida con miedo, y de miedo se le cayeron las alas, luego se

murió pero ya sin alas no pudo volver con Dios, y está aquí, enojado por eso. -¿En serio mamá? Y yo, perpleja le digo que claro que sí, que justo eso es lo que yo le iba a contar, Aldo nos abraza a los dos y entonces se me ocurre decirles que como eso es lo que pasa pues le hagamos oración y le cantemos a ese señor que yo no podía ver para que se le quite lo enojado y le vuelvan a crecer sus alitas poquito a poquito.

Fotografía: Mónica Rosales

Esa casa que me había parecido un sueño de revista me parecía ahora enorme, con paredes altísimas, hipoteca impagable, demasiado grande para mí…

Cantamos y rezamos, la verdad es que nada pasó, yo seguía con el escalofrío tremendo de sentir una presencia ahí horrorosa, pero Sebastián y Aldo se abrazaban y sonreían contentos de recordar que habían sido ángeles y sin miedo de ese pobrecito sin alas que ahí estaba. Luego de un rato los invité a dormir conmigo. El tinto que me había servido se quedó completo en la copa, la estancia seguía llena de polvo y cajas y así siguió por muchos días más, pero la casa, esa casa nunca más me pareció enorme, ni la hipoteca impagable, supe que tenía a dos ángeles de Dios conmigo, y que no había reto, divorcio, soledad ni miedo a la obscuridad que pudiera vencernos después de eso… ...a partir de ese día supe que éramos los 3 Mosqueteros de la comarca, y que vamos con todo a usar ésta vida para lo que es: ¡¡¡A VIVIR!!!

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...y de pronto sentí como si alguien me empujara y cai… Por: Elizabeth Lozano

Hace poco me preguntaron si había vivido alguna experiencia milagrosa, y mi respuesta inmediata fué: ¡SI! A la fecha no me explico como puedo recordar algo que me sucedió a los tres años, pero el recuerdo permanece en mi mente claro, hermoso y me lleno de paz al recordarlo… Una noche estando dormida en casa de mi abuela me despertó el sonido de la televisión, me levante de mi cama buscando el origen del sonido, camine hasta el corredor y vi a mi tio viendo la tele en el piso de abajo, me asomé entre los barrotes del barandal, y de pronto sentí como si alguien me empujara y cai… justo antes de tocar el suelo algo me levantó y me puso en el suelo lentamente, vi una mano transparente como las de mi mamá pero no era ella, tenía un velo blanco. En ese momento voltee para todos lados y ¡no había nadie!. Extrañanada corrí al lado de mi tío; el se asustó mucho porque no me vio bajar; me preguntó que a que hora baje, aunque ni yo entendía lo que pasó, le conté como sucedió todo y no me creyó; en los siguientes días les conté a todos en mi familia y nadie me creyó. Aunque fue muy decepcionante que mi familia dudara de mi, yo sé que alguien me cuida y eso me ha permitidido vivir en paz porque más de una vez he estado en peligro, y así como esa noche Dios mandó alguien a protegerme, siempre me he sentido cuidada y acompañada... será un ángel... yo creo que si.

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Era un domingo cerca de las seis de la tarde, cuando le pedí a mi hijo, de 12 años, que fuera a la tienda, se tardó más de lo normal, cuando ya estaba alistándome para ir a buscarlo, él subió corriendo las escaleras, y cuando lo vi estaba llorando y muy asustado. Me dijo - me trataron de asaltar y pegar - no daba crédito a lo que estaba escuchando, se asusto tanto con el evento, que lo único que pudo hacer, fue soltar la bolsa de las compras y salir corriendo hacia casa. En ese mismo momento le dije que teníamos que salir a recoger lo que había dejado en el camino, y al mismo tiempo investigaríamos en el caso de alguien haya visto lo sucedido y ponerle remedio, ya que probablemente hubiera sido un vecino quien intentó asaltar a mi hijo. Me sentía impotente e indignada, quería encontrar a la persona responsable del miedo y dolor de mi hijo, y tomar el asunto en mis manos haciéndole pagar por lo que hizo. En el instante, desee que hubiera sido un vecino el responsable, ya que de esa manera lo encontraría e informaría a las autoridades. Caminando a recoger las compras, mi hijo me relató el evento como había sucedido: “Yo regresaba de la tienda, cuando de repente vi a dos hombres, uno de ellos se aproximaba hacia mí, yo sentí un poco de miedo, pero no pude hacer nada, cuando me di cuenta ya estaba frente a mi y me dijo -dame todo lo que traigas- y sin más vi como su puño iba directamente hacia mi cara, no alcancé siquiera a pensar, cuando me percaté que el golpe no había llegado a mi, en instantes me di cuenta que el otro hombre que había visto, lo había tomado por el cuello y la espalda, teniéndolo inmovilizado, mientras me gritaba ¡corre, vete corriendo!; ellos seguían forcejeando mientras yo corrí sin parar hasta llegar a la casa”. No daba crédito a lo que escuchaba, cada momento me sentía más im40

potente y desesperada, aunque no dejaba de reconocer que el señor que sostuvo al agresor, fue una bendición en nuestras vidas, ya que de otra manera no se qué hubiera sido de la integridad física de mi hijo. Mientras caminábamos, observamos a una pareja recoger la bolsa de las compras de la tienda que dejó mi hijo y la depositaban en una banca cercana, en espera de que el dueño la recogiera. Les pregunté si habían visto personas sospechosas y les platiqué brevemente el evento que había vivido mi hijo; la pareja nos informó que no había visto nada sospechoso antes de ver a mi hijo correr como el viento. Continuamos el camino y a lo lejos vimos un grupo de jóvenes que forcejeaban, viviendo un conato de pelea entre dos de ellos. Uno de los chicos se veía especialmente alterado y agresivo, le pregunté a mi hijo si él era la persona que lo había intentado agredirlo, y me dijo que sí. En ese momento, sentí como si me hubieran detenido y me dijeran que no me acercara, que esa persona probablemente estaba drogada; por lo poco que alcancé a ver, que no eran personas vecina de la unidad habitacional. Nos regresamos a casa y le agradecí mentalmente a la persona que había impedido que le pegaran a mi hijo, había sido, sin así proponérselo, el canal para que el ángel de la guarda de mi hijo lo protegiera, y no tenía la menor duda de que él lo acompañaba siempre en su camino. Además, yo como su mamá por la adrenalina que estaba generando en ese momento, por el enojo e impotencia de sentir que pudieron haber agredido a hijo, quien es aún un niño, no alcanzaba a ver las consecuencias que pudiera haberme traído el reclamarle al agresor, pero los amados ángeles me detuvieron, y eso se los agradezco infinitamente. 41


Había sido una semana muy difícil, me sentía muy cansada física y emocionalmente, ya que todo el tiempo me enfrentaba al dolor físico de los pequeños, y a la desesperación e impotencia de sus padres. En esas fechas ya llevaba algunos años trabajando en un hospital muy grande del gobierno en el área infantil de cancerología. Había terminado de bañar a uno de los pequeños, cuando me abordó una mujer joven, de tez blanca y cabello rubio quien me dijo “Fernandita necesita que le cambies una sonda; así que sin pensar salí corriendo a ver a la pequeña, cuál no sería mi sorpresa cuando me percaté que ¡Fernandita estaba sufriendo un paro cardiaco!. Me movilicé de inmediato, llamé a los doctores, quienes hicieron todo lo necesario para que la niña se repusiera, después de rato de lucha, la pequeña estaba nuevamente fuera de peligro. Habiendo pasado unos minutos llegó la madre de Fernandita y al percatarse del movimiento que había alrededor de su hija preguntó -¿qué está pasando?- ante lo cual respondí “su pequeña sufrió un problema en el corazón, gracias a Dios ya se encuentra fuera de peligro, porque la tía de la niña, me buscó cuando se dio cuenta que algo sucedía”, -¿cuál tía?- preguntó extrañada la señora, “la joven blanca y rubia que me avi-

só” -No, Fernanda estaba sola porque mi esposo tuvo un problema en la oficina y no ha llegado aún - dijo la señora, -debió haber sido un Ángelañadió dando por terminada la conversación entre nosotros. Aproximadamente una hora más tarde, llegó el papá de la pequeña, me di cuenta de ello porque escuché sus risas y el brazo efusivo con el que recibió al señor diciendo ¡Papá ya llegaste, te estaba esperando! Fernanda y su papá jugaron alrededor de hora y media, cuando la pequeña mencionó “ya está aquí otra vez la señorita”, -¿cuál señorita?- preguntó la madre a la pequeña, “la que vino para decirme que ya no me va a dolor, que vamos a un lugar lindo, pero yo le dije que mi papi venía para acá y quería verlo”. La madre intentó contenerse, mientras el padre de la pequeña la abrazaba y le decía que todo iba a estar bien, que la amaban con todo su corazón, que era su mejor regalo...Fernandita se quedó dormida en los brazos de su padre y no volvió a despertar. Para mi fue doloroso, como siempre, pero esta vez me quedé con la certeza, de eso que mi corazón siempre ha sabido, hay Ángeles que cuidan de nuestros niños.

-Debio haber sido un ángel... 42

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