La responsabilidad social, ambiental, ecológica y psicología

La responsabilidad social, ambiental, ecológica y psicología.

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La psicología ambiental es una disciplina orientada al estudio del ser humano en

relación con el medio sociofísico, por ello es importante el aprendizaje del entorno que les rodea,

en la actualidad tiene mayor relevancia la afectación que se está generando al ciclo normal del

medio ambiente, perjudicando a todo el ecosistema, por ende la raza humana resulta involucrada

y afronta las consecuencias, se puede evidenciar a simple vista en los cambios climáticos,

mientras que en unos lugares las personas escasean de agua, en otros sitios mueren por

inundaciones, donde en tierras fructíferas queda estéril a causa del calor, en otras tierras los

productos se hielan, las causantes de gran parte de las modificaciones en el ciclo normal del

medio ambiente son los seres humanos, con sus diferentes actos de despreocupación, como por

ejemplo: talar un árbol para beneficio e interés propio, sin antes sembrar otro, la afectación no es

tan notoria con un solo árbol, pero cuando son miles es muy evidente más si están en la falda de

una montaña, la devastación de estos ejemplares, puede ocasionar deslizamientos de tierras por

toneladas, tapando vías, casas e incluso opacando vidas, podemos seguir hablando de el simple

hecho de arrojar un elemento plástico “basura” en la cual por los materiales que lo componen,

generando contaminación en los ríos que son fuentes hídricas naturales, en donde muchos de los

animales sobreviven a esta e incluso los humanos quien son dependientes de este preciado

líquido, al momento de hacer ciclo normal del agua, estos compuestos químicos que se diluyen

fácilmente en esta, realizan el mismo proceso con ella, cuando llueve al caer en la tierra, llega a

la fuentes hídricas “ríos”, teniendo como destino final el mar y parte de la misma se evapora,

vuelve a caer en forma de una gota pero ya contaminada, lo que al repetirse este ciclo pero con

abundantes moléculas contaminantes o basuras, genera las llamadas lluvias ácidas, esto sin

contar los gases que se emiten por distintas circunstancias, es por ello que gran parte del medio

que rodea al ser humano, tiene una reacción directa e indirectamente que afecta paulatinamente

las malas decisiones que se tomen.

Por lo anterior, es importante percibir y dar la importancia que se merece el aprendizaje

constante sobre la ecología humana, ya que abarca la relación que existe entre los seres

humanos y su entorno natural, social y ambiente creado e inventado, lo cual, es muy importante,

ya que los grandes avances tecnológicos y la innovación generada, facilita los quehaceres

comunes y cotidianos, mejorando y satisfaciendo la vida de cada individuo que solo piensa en sí

mismo, como se puede evidenciar en las grandes metrópolis en diferentes territorios del planeta,

todo está al alcance de un solo clip, si se solicita comida en un instante llega, si se solicita ropa

en cuestión de minutos la traen, sin ser consciente que cada una de estas acciones genera un

desgaste para el medio ambiente, creyendo que eso es disfrutar la vida.

Los seres humanos se diferencian de los animales por ser racionales, como se identifica

desde la psicología, en sus diferentes procesos que conllevan a entender una idea, como lo hace

la parte cognitiva, que permite establecer el pensamiento en pro de una mejora continua, con el

fin de sobrevivir a diferentes circunstancias y situaciones que ponen en riesgo la tranquilidad o la

necesidad de satisfacer sus emociones, hoy en día, los niños, jóvenes, adolescentes, son criados

con el pensamiento de abarcar, tener, apropiarse de lo más que puedan, sin importar las

consecuencias incorregibles ante su entorno ambiental, natural, social o ecológico.

“Tal vez la apremiante situación del momento actual lleve a darle más prelación a una

ecología humana puesto que es necesario reorientar la desordenada sensibilidad por lo

creado, por la naturaleza, que actualmente sobrepasa la consideración que se tiene de la

naturaleza humana.” (Gamboa-Bernal G. A. 2011.p,8)

Todo lo anterior, pone de manifiesto la preocupación que desde la ecología humana se

pretende abordar, de igual manera desde los roles ejercidos por los seres humanos en su

interacción con la naturaleza y con los demás seres vivos no humanos, identificando las maneras

y las formas que se han dado las interacciones entre estos; las acciones de prevención han estado

ausentes, todo ello demuestra la necesidad de generar un replanteamiento de estos roles y de las

responsabilidades ejercidas. Como se evidenció anteriormente las personas han tenido una gran

influencia en los desastres naturales y su actuación ha propiciado y facilitado la ocurrencia de las

mismas, si bien, los seres humanos han hecho uso de la naturaleza y de sus recursos, esta

relación no debe plantearse en un sentido de dominio, ya que estas ideologías son las que han

mantenido y justificado el uso desmedido de los recursos, sin considerar los daños que se dan,

como la disminución de la calidad e incluso de la cantidad de recursos disponibles, por el

contrario estas relaciones deben ser de beneficio mutuo entre lo ambiental y los seres humanos,

teniendo en cuenta que se necesita de estos para suplir sus necesidades básicas, mantener un

bienestar apropiado y el normal desarrollo de los seres humanos desde una consideración de la

calidad de vida.

Las riquezas que se encuentran en el medio ambiente, no deberían considerarse como unas

de más o menos valor, se les debe tratar y administrar como elementos indispensables y claves

en el desarrollo de la vida y del entorno, esto es lo que ha generado una división dominante, que

está avalada por políticas y normatividad que de manera estructural da más peso a las economías,

ideologías y prácticas, ignorando la desmedida reducción de los recursos naturales, acciones que

están siendo desarrolladas para el beneficio de un grupo pequeño de individuos, ya que está

motivada por interés monetarios y de poder, que aun beneficiando a pocos, los impactos y daños

ambientales si afectan a toda la población. Se sugiere de manera prioritaria y urgente un

replanteamiento de estas relaciones hombre-medio ambiente-entorno desde la administración, el

cuidado y el beneficio mutuo, es decir un uso sostenible de los medios y recursos.

“El binomio ecología humana y ecología ambiental es necesario: hay que defender la

naturaleza física, pero antes y con mayor energía es imperativo el reconocimiento y la

protección de la naturaleza de la persona humana, pues la experiencia muestra que hay

una estrecha relación de doble vía —causa y efecto— entre las actitudes de irrespeto al

medioambiente y el deterioro de la convivencia humana.” (Gamboa-Bernal G. A.

2011.p,8)

De acuerdo a lo planteado por Gamboa (2011), se infiere que la ecología humana,

además de tener un enfoque desde estas relaciones del hombre con el medio ambiente, plantea un

enfoque desde las relaciones e interacciones de los hombres consigo mismos, como lo son: el

bien común, el bienestar general, la dignidad de las personas y las afectaciones sociales, teniendo

en cuenta las emociones de las personas, las dinámicas de convivencia y las problemáticas que

se ocasionan debido al mal manejo e inadecuada administración de los recursos naturales, es

decir que la misma relación del hombre con el ambiente deriva en afectaciones sociales que se