El Valle del Cauca tiene un gran potencial para ser competitivo, no solo a nivel nacional sino internacional. El acceso al Pacífico, un terreno fértir, una población educada, una infraestructura aceptable y alianzas comerciales generan un ambiente propicio para ser aprovechado. Cabe entonces la pregunta lógica: ¿por qué el Valle del Cauca permance con unos índices de competitividad tan bajos comparados con otras regiones del país?